LEAN 1.10

Page 1

LEAN 1.10 diciembre 2010


Índice Editorial

3

Razones de la navidad a la luz de los cantos evangélicos Licda. Karla Morales

4

La natividad en los otros evangelios Shel Durán

8

¿Qué es la navidad?

13

Una historia de amor en navidad desde prisión

Lic. David Campos

LEAN 1.10 diciembre 2010

2


Editorial Diciembre es un mes muy esperado por todos, llega la Navidad. Aunque para muchos significa ir de compras, recibir regalos, reuniones familiares, etc. Para los cristianos posee un significado excepcional: la Encarnación de Dios. Muchos han debatido que el nacimiento de Jesús no fue en diciembre, que la Navidad es parte del sincretismo religioso, o que la Navidad es parte del “imperialismo yanqui” al cual los países latinoamericanos han sucumbido. Pues, aunque todas estas afirmaciones son razonables, los cristianos deben considerar que el motivo único de la celebración es la memoria del nacimiento de nuestro Señor Jesucristo. De modo que presentamos algunos pensamientos en torno a la Navidad gozándonos en la venida de Dios al mundo. Alabemos al Señor como lo indica el villancico:

“Y los que son de Cristo debieran proclamar que Cristo al mundo vino los hombres a salvar...” Todos los miembros del equipo LEAN agradecemos a cada uno de ustedes por hacer posible esta revista. Con esta publicación cerramos un año excelente, colmado de grandes bendiciones, y miramos con expectación el nuevo año para el cual tenemos varias sorpresas y mejoras para ustedes. ¡Feliz Navidad!

-Shealtiel Durán Badillo.

LEAN 1.10 diciembre 2010

3


Razones de la Navidad a la luz de los cantos evangélicos

por Karla Morales

L

as razones de la navidad pueden ser diversas, versátiles y momentáneas. Sin embargo en el presente artículo deben comprenderse como una guía de las motivaciones o razones que surgen de un verdadero significado del nacimiento de Jesús. Lo trascendental de los cánticos evangélicos que se presentan en este breve estudio examina el enfoque que surge de los corazones de dos personajes importantes para este acontecimiento sobrenatural. Por un lado se presentan las razones desde la perspectiva de una mujer, joven, virgen, sencilla, inmerecedora de tan divino oficio, más merecedora de admiración por su humildad y disposición de servicio. Por el otro, un hombre, ya avanzado en edad, sacerdote, incrédulo, de igual forma inmerecedor de tan alto privilegio pero merecedor de reconocimiento. Pues da su alabanza al omnipotente que hace temblar con sus hechos portentosos y que a la vez desciende de lo más alto para encarnarse y manifestar el puro y verdadero amor. De manera que las razones que serán expuestas en este artículo derivan de dos de los tres llamados cantos evangélicos que se encuentran en el primer capítulo del evangelio de Lucas. Conocidos por las primeras palabras del canto en latín las alabanzas son comúnmente conocidas como el Magnificat de María y el Benedictus de Zacarías.1 Ambos personajes son

1 Su título popular, El Magnificat, se deriva de la primera palabra del himno en la versión latina: Magnificat anima mea Dominum, que significa: “Magnifica mi alma al Señor”. Guillermo Hendriksen, El Evangelio según San Lucas (Grand Rapids, Michigan: Subcomisión de

presentados en la fase inicial de la vida de Jesús pues el primer acontecimiento se basa en la expresión que surge de la visita de María con su prima Elizabeth. Y el segundo, es una referencia de la profecía de Zacarías luego que su hijo, Juan el Bautista, anunciador del Mesías ha nacido. Razones desde el canto de María:

El Magnificat

Razón 1. El Eterno ha demostrado su salvación. El canto de María tiene como principal verbo la alabanza, es una admiración sentida y expresada, es una oración en estado puro. Liberada de mirarse a sí misma, María admira a Dios, adora, contempla. La joven virgen es una experta en alabar a Dios porque conoce a su Dios, conoce al Dios del Antiguo Testamento y aún más tiene una relación estrecha y segura con su Creador. Es el Creador que no sólo formó parte esencial en su nacimiento sino que más allá proporciona al ser humano salvación. Como bien lo afirma el autor D. Bock “La salvación a la que hace referencia la joven es espiritual pero a la vez tiene una connotación escatológica para el pueblo judío”.2 Así que, si en Antiguo Testamento el Salvador tiene ese propio carácter de liberador en un sentido más físico, puede decirse entonces que la salvación de Jesús tiene un sentido doble por lo que es una razón importante en la que María se regocija de gran manera. Un sentido doble de salvación en el que la misericordia se ha

Literatura Cristiana, 1990): 110 Otro nombre que se da a la profecía de Zacarías es El Benedictus, en conformidad con la primera palabra del himno en la versión latina: Benedictus esto dominus Deus Israelis, que significa: “Bendito sea el Señor, el Dios de Israel” Hendriksen, San Lucas: 128. 2 Darrell Bock, LUKE tomo I (Grand Rapids, Michigan: Baker Books, 2003): 149. LEAN 1.10 diciembre 2010

4


hecho palpable e inmediata lo cual lleva a una segunda razón.

Razón 2. El Señor en sus promesas demuestra su misericordia Es una misericordia según María también por lo que ha hecho a otros. Se percata de las diversas maneras del obrar de Dios con los hombres (v.50). Es una verdad ciertísima que Dios tiene grandes reservas de misericordia pero nunca se vio esto tan claramente como cuando envió a su Hijo al mundo para salvar a los hombres. Mientras el mundo subsista, las misericordias de Dios estarán sobre los que le temen: la misericordia que perdona, que sana, que acepta y que glorifica, de generación en generación. Al afirmar que alcanza de generación en generación a los que le temen es un amor que, conmovido ante el mal de otro, se apresta a remediarlo. La raíz del hesed divino está en el vínculo de solidaridad con que Yahveh se compromete a permanecer unido al pueblo y esto sucede a través de la alianza. Por eterno, la alianza inspira una confianza sin límite (v.55) que a la vez demanda una respuesta: Quien entra en la alianza se obliga a ser “hombre de misericordia” “piadoso” para con Dios, fiel en el respeto, alegremente un amigo. Así que aunque implica una razón también conlleva una gran responsabilidad como transmisor de la misericordia que por ende ya es recibida. Como principal implicación en la razón de la misericordia debe de recordarse que la venida del Mesías era la misericordia más grande que Dios hacía a su pueblo. Esta ayuda le vino a Israel: A. Para recuerdo de misericordia (v.54). Mientras se demoraba esta gran bendición, el pueblo estaría inclinado a preguntar: ¿Se ha olvidado Dios de sus misericordias? Pero ahora se hacía manifiesto que Dios no se había olvidado, sino que mantenía vivo el recuerdo de su misericordia y fidelidad

B. Para cumplimiento de su promesa (v.55). Era una misericordia, no sólo destinada, sino también profetizada, pues así Dios lo había dispuesto y comunicado a Abraham. Como puente de enlace entre la 1ra y la 2da parte del Magnificat, la palabra misericordia-amor-gracia recapitula por una parte, el favor principal que Dios ha hecho a la madre del Mesías e introduce por otra el que con ella va a hacer a todos los humildes, por ultimo en la tercera parte se contempla bajo la luz del mismo tiempo, la realización de las promesas que hizo Dios a Israel (v.50). Es decir, el acontecimiento trascendental deriva de la muestra magnífica de misericordia de Dios hacia el ser humano pero también es una respuesta a la ontología divina. Él no puede contradecir su palabra, lo que él ha dicho se ha de cumplir. Por lo tanto la venida del Hijo del Hombre es una razón de glorificar a Dios pues no falla ante la infidelidad humana. Confirma su palabra y lo que promete, lo cumple3. Lo que Dios ha hablado, lo llevará a cabo, pues su palabra es eficaz y todas sus promesas son en Cristo, seguras con garantía divina.

Razón 3. El eterno es poderoso, es el Todopoderoso. La joven María conocía a su Dios por eso subraya los verbos en los que afirma que… ha esparcido…ha colmado (v.51). Además que reconoce que Él con su brazo ha realizado obras portentosas. Este es el lenguaje de la vindicación mediante el juicio; con frecuencia en el A.T. el “brazo” de Dios salvaba a su pueblo y “esparcía” a sus enemigos.4 También puede hacer De la misma forma Zacarías en su cántico expresa que Dios había cumplido también todas las promesas hechas a Israel. Dios estaba llevando a cabo lo que había prometido hacía mucho tiempo. Estas eran sagradas porque eran las profecías de esta salvación por profetas santos, y fue un Dios Santo quien habló por boca de ellos. (v.70) 4 Craig S. Keener, Comentario del Contexto Cultural de la Biblia Nuevo Testamento El Paso, Texas: Editorial 3

referencia antropomórficamente del Altísimo como para sostener y apoyar al ser humano.5 Y nadie puede hacer mayores cosas como estas que alguien con poder y absoluto poder. Por eso Él merece la adoración y la alabanza porque es el Todopoderoso. Que a los arrogantes y orgullosos da su merecida y levanta al humilde, al pobre al sediento. El Juez poderoso se ha acercado y ahora lo realiza encarnándose, como ejemplo de servicio y humildad. Así que aunque los libros, los periódicos, la radio y la televisión enfaticen cosas secundarias en esta época de la natividad como dice el escritor Hendricksen: “El Magnificat señala la causa primaria, al Dios cuyo plan se ejecuta en la tierra para beneficio de su pueblo y para Su propia gloria”.6 Sin embargo si aún con estas razones no se cree en lo que Dios ha prometido, porque quizá las circunstancias por las que se oran no mejoran, y se piensa que cada vez se está perdiendo la fe y surge una duda ante sus promesas, hay alguien que también por esta época había recibido una promesa, aunque dudó al principio reconoció que quien ha prometido no falla, porque no puede contradecirse así mismo. Así es que Dios escuchó la petición de un pueblo pero estaba también interesado en las peticiones personales… le promete un hijo a Zacarías y por ello él al recibir el nacimiento de su hijo también alaba al Señor. Razones desde el canto de Zacarías:

El Benedictus Luc. 1:67-79

Razón 4. Porque Dios “había visitado benignamente a su pueblo” Les había visitado como amigo que viene a enterarse cómo van las cosas y traer el remedio oportuno para una Mundo Hispano:187 5 Debe observarse que en el vr. 51 Yavé hace ambas cosas. 6 Hendriksen, Lucas: 128.

LEAN 1.10 diciembre 2010

5


situación delicada (v.68). Con esta visita, Dios habia traído redención para su pueblo. Con este objetivo vino Jesús al mundo: a quienes estaban vendidos por el pecado y bajo el pecado, pues esa es la peor esclavitud. Se ha sido rescatado al precio de la sangre de Jesús, con el que se ha comprado la propia justicia al pecador. Con el poder de Dios, que ha conseguido la libertad de la tiranía de Satanás y de la maldición de la Ley. Así que esa visitación hace una redención espiritual, pues los ha librado del mismo Satanás, del pecado y de todas sus consecuencias. Zacarías alaba porque el Dios de Israel ha tenido una preocupación por su pueblo y ha intervenido a su favor de manera salvadora. Con esto, Dios habia cumplido con el pacto hecho con David, levantando de su casa un Salvador. Sólo en Cristo hay salvación, abundancia de salvación, como da a entender el símbolo mismo del cuerno: verdadera abundancia… no sólo la abundancia de la salvación, sino también el poder de la salvación por medio del Evangelio, capaz de echar abajo a todos los enemigos espirituales y de tenerlos a raya para que no hagan daño después7. Aún queda una última razón como consecuencia de esa redención a su pueblo.

Razón 5. Una restauración del favor de Dios. La restauración de Dios es que el Redentor mostrará la misericordia de Dios, restableciendo su pacto, hecho con juramento, con Abraham (v. 73). Lo que fue pactado viene ahora para cumplirse por misericordia, pura gracia; nada se debe al esfuerzo propio ni a mérito alguno, pues nada puede hacer el ser humano que es polvo, miserable pecador, para atraer sobre él la atención de Dios. Así

que es puro amor demostrado al extremo. Esta restauración también permite una capacitación y estímulo para servir a Dios (v.74-75) “concédenos que, liberados de las manos de nuestros enemigos, le sirvamos sin temor en santidad de vida y rectitud de conducta ante sus ojos, todos nuestros días” Esto muestra que se es liberado del yugo de hierro del pecado para ser unido al yugo suave y fácil de Cristo. Por lo tanto cuanto más fuerte sean las ataduras del pecado de las que él ha soltado o liberado, más fuertes han de ser las ataduras que deben unirse a él. La capacitación incluye propósitos:

• Para servir a Dios sin temor. Hemos de servir a Dios con reverencia filial, no con temor servil, propio de esclavos • Para servir a Dios en Santidad y rectitud, lo cual incluye todos nuestros deberes para con Dios y nuestros prójimos. • Para servir a Dios ante sus ojos, con el recuerdo constante de su presencia, con los ojos fijos en El y a sabiendas de que El tiene sus ojos fijos en nosotros, penetrando hasta lo íntimo de nuestro ser • Para servirle todos nuestros días. Por lo tanto a la luz de estos dos cantos evangélicos indudablemente hay razones para celebrar el nacimiento del Rey, que ya Reina y vino hacia el ser humano. Se acercó por su propia voluntad en su misericordia, se acordó de sus promesas hechas a su pueblo con propósitos definidos de salvación y liberación. Juntos con María y Zacarías alabémosle porque su misericordia se extiende de generación a generación… felices fiestas.

7 Se trata entonces de un rescate de la maldad de los enemigos (v.71): Si la verdadera esclavitud es la del pecado, la verdadera salvación es la que libra del pecado. El salva para que el pecado no los domine.

LEAN 1.10 diciembre 2010

6


¡Ve, dilo en las montañas! Ve, dilo en las montañas, en todas partes y alrededor; ve, dilo en las montañas, que Cristo el Rey Nació El Mundo ha esperado que Cristo el rey de Paz viniera a esta Tierra trayéndole solaz. Ve, dilo en las montañas, en todas partes y alrededor; ve, dilo en las montañas, que Cristo el Rey Nació Llegó como un niño, de noche en Belén; del cielo las estrellas, le alumbraron también. Ve, dilo en las montañas, en todas partes y alrededor; ve, dilo en las montañas, que Cristo el Rey Nació Y los que son de Cristo debieran proclamar que Cristo al mundo vino los hombres a salvar.... Ve, dilo en las montañas, en todas partes y alrededor; ve, dilo en las montañas, que Cristo el Rey Nació

LEAN 1.10 diciembre 2010

7


La Natividad

en los otros evangelios por Shel Durán

N

arrativas bellas, extraordinarias, con lujo de detalle, y con gran valor para los cristianos de los siglos I al V sobre el nacimiento de Jesús, el Hijo de Dios, son las que nos hemos perdido nosotros, evangélicos. Nos referimos aquí a aquellos otros Evangelios, aquellos que por muchos años fueron eco de la espiritualidad y piedad cristiana sin ser catalogados como inspirados. A estos textos se les ha dado el nombre de Apócrifos. Apócrifo significa ‘escondido’, ‘oculto’. Antiguamente, grupos religiosos denominaban a sus escritos sagrados de esta manera, pues contenían secretos únicamente revelados a los iniciados. Después llegó a significar origen dudoso. Así se designó a los Evangelios que no cumplían con la norma (canon) de no ser inspirados, consecuentemente fueron proscritos. Hoy nos acercaremos a algunos breves extractos de tradiciones que nos provocarán a reflexionar sobre el maravilloso episodio histórico de la Encarnación. Se trata de tradiciones alternas que aunque rayan en lo fantástico evocan la realidad. Habiendo explicado la retórica de este escrito, conozcamos entonces la enseñanza de la Natividad en los otros Evangelios.

1. La Natividad de Jesús Jesús, luz que resplandece en la oscuridad. Ya el Evangelio

según San Juan, escrito entre el 90 y 95 d. C., comenzaba presentando a Jesús como la luz de los hombres que resplandece en las tinieblas y que no

puede ser dominada (Juan 1:4-5). La luz es fundamental en el desarrollo de la teología joánica (cf. 1:7-9; 3:19-21; 8:12; 9:5; 12:35-36, 46). Su significación no es física meramente sino que está íntimamente relacionada con la verdad. Por ello, quien se encuentra con la luz se encuentra con la verdad. Jesús es la luz. Partiendo de esta base, cristianos piadosos, aunque con poco adoctrinamiento, elaboraron narrativas que manifestaban aquella premisa. Tal es el caso del extracto siguiente tomado del Apócrifo o Protoevangelio de Santiago.1 El Protoevangelio suele

datarse hacia el 150 d.C. En él la figura principal es María, y el tema preponderante es su pureza, aspecto que ya para aquellos siglos comenzaba a difundirse y que más tarde llegaría a convertirse en dogma. Pero nos interesa aquí la descripción del nacimiento de 1 Los Padres de la Iglesia en ocasiones lo citan: Justino hace alusión a la gruta, Clemente de Alejandría habla de la constatación de la virginidad de María por una comadrona, y Orígenes refiere al primer matrimonio de José descrito en este Evangelio. En Edmundo González Blanco, trad. Evangelios apócrifos (México, D.F.: Dirección de Publicaciones del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, 2010), 16.

Jesucristo: viajando hacia Belén por el censo, un ángel hace parar al animal en el cual estaba sentada María porque “se acercaba el instante del alumbramiento”. Cabe señalar que María no tiene ningún malestar. La narrativa continúa: Y llegaron al lugar en que estaba la gruta, y he aquí que una nube luminosa la cubría. Y la partera exclamó: Mi alma ha sido exaltada en este día, porque mis ojos han visto prodigios anunciadores de que un Salvador le ha nacido a Israel. Y la nube se retiró en seguida de la

gruta, y apareció en ella una luz tan grande, que nuestros ojos no podían soportarla. Y esta luz disminuyó poco a poco, hasta que el niño apareció, y tomó el pecho de su madre María. Y la partera exclamó: Gran día es hoy para mí, porque he visto un espectáculo nuevo. (Protoevangélio de Santiago XIX, 2) 155 d. C. La partera, que en otros textos es nombrada Salomé, declara asombrada el nacimiento de Jesús, a quien llama el Salvador de Israel. Los fenómenos de nube y luz forman un contraste magnífico. En este relato la luz es física, enceguecedora, y no podría ser menos pues es la luz del LEAN 1.10 diciembre 2010

8


mundo. Tras difuminarse, el niño Jesús es visto ya tomando leche. En otros textos similares se expresa esta falta de naturalidad al describir que no tenía sangre. Aquellos cristianos relacionaron los dichos de Jesús presentándose a sí mismo como la luz con los eventos de su nacimiento. El texto refleja el esfuerzo de la comunidad en presentar a Jesús como Dios, muy probablemente como una apología frente a doctrinas gnósticas o docetas; sin embargo, pasan por alto su humanidad.

en busca de estadios abarrotados de gente esperando ser sanados. Aun más, se le predica a los pobres, o ricos ambiciosos, como un genio al cual pueden invocar frotando (torciendo) un lámpara (las Escrituras) y que está obligado a responder favorablemente a sus deseos con riquezas (bendiciones) materiales haciéndolos prósperos. Lamentablemente, al igual que para aquellos textos, la razón es la falta de catequesis.

2. La Natividad de Jesús y los paganos El Evangelio según San Mateo (75-80 d. C.), capítulo 2, describe la adoración al bebé Jesús por unos magos de oriente. No se nos dice exactamente cómo, cuándo, ni de dónde vienen. Pero los otros Evangelios amplían el relato. El Evangelio Árabe de la Infancia, del cual se tiene conoce una versión siriaca del siglo V, relata:

Jesús, ¿conciente de su divinidad desde la cuna? Del mismo modo el Evangelio Árabe de la Infancia indica: El cual [Caifás] afirmaba que Jesús habló, estando en la cuna, y que dijo a su madre: Yo soy el Verbo, hijo de Dios, que tú has parido, como te lo había anunciado el ángel Gabriel, y mi Padre me ha enviado para salvar al mundo. (I, 2) De modo que Jesús siendo un bebé habla. A algunos les parece totalmente creíble pues se preguntarán: “¿no es Dios acaso?” Ciertamente lo es. Pero no podemos por ello eliminar su naturaleza humana, pues aseverar que Jesús habló estando en la cuna rebaja su condición de ser humano. Debemos recordar que Jesús tenía limitantes. La presente narrativa entonces entra en conflicto con el resto de los Evangelios, no porque busque saber lo ocurrido en los primeros días de Jesús sino porque en su afán por autentificar una premisa clave: la deidad de Jesús, tienden a lo extremo.

Hoy muchos continúan haciendo lo mismo, como bien lo nombra Craig A. Evans, crean un Jesús deformado. Las concepciones de Jesús que flotan por los aires de las iglesias son bizarras. Algunos ven a Jesús más como un super héroe que como el Dios encarnado. Otros lo presentan como un taumaturgo con poderes que emanan de su ser (o que están en mantos –o en el saco del apóstol que lo representa)

Hasta aquí entonces tenemos que: 1) Jesús es la luz del mundo; no se puede adorar a Jesús si no se le considera la verdad (aspecto en sintonía con el resto de los Evangelios). 2) Al defender un credo o tradición particular de manera apasionada puede caerse en la contradicción con todo el resto de doctrina. 3) Recordemos que Jesús, siendo Dios, vivió una vida común como cualquier ser humano (He. 4:14-16).

Y la noche misma que el Señor Jesús nació en Bethlehem de Judea, en la época del rey Herodes, un ángel guardián fue enviado a Persia. Y apareció a las gentes del país bajo la forma de una estrella muy brillante, que iluminaba toda la tierra de los persas. Y, como el 25 del primer kanun (la fiesta de la Natividad del Cristo) había gran fiesta entre todos los persas, adoradores del fuego y de las estrellas, todos los magos, en pomposo aparato, celebraban magníficamente su solemnidad, cuando de súbito una luz vivísima brilló sobre sus

LEAN 1.10 diciembre 2010

9


cabezas. Y, dejando sus reyes, sus festines, todas sus diversiones, y abandonando sus moradas, salieron a gozar del espectáculo insólito. Y vieron que una estrella ardiente se había levantado sobre Persia, y que, por su claridad, se parecía a un gran sol. Y los reyes dijeron a los sacerdotes en su lengua: ¿Qué es este signo que observamos? Y, como por adivinación, contestaron, sin quererlo: Ha nacido el rey de los reyes, el dios de los dioses, la luz emanada de la luz. (Evangelio Árabe de la Infancia VII, 1ª) No puede ser considerado como una fuente histórica fidedigna, sin embargo nos muestra la interpretación de la narrativa de Mateo hecha por los cristianos del siglo IV y V. Así, la estrella es un ángel, los magos proceden de Persia, el episodio sucede el 25 de diciembre (Kanun, calendario sirio). Algunos han explicado que los magos de oriente a los que refiere Mateo eran sabios astrónomos, evitando así cualquier relación con la magia. Mateo no intenta explicar la palabra ma,goi. Permite que la narración fluya y el cuadro que pinta es de contrastes: Los principales sacerdotes y los escribas (pueblo de Dios) conocían las profecías sobre el Rey-Mesías sabiendo específicamente dónde nacería, no les importa un comino lo que dicen estos magos, ni si quiera por curiosidad o para ratificar si es cierto. Mientras tanto, estos magos (pueblo pagano) con una fe robusta viajan un largo trayecto siguiendo una estrella para adorar al rey de los judíos. Expresamente el Evangelio Árabe de la Infancia indica que los magos adoraban al fuego y las estrellas, y es precisamente en una de sus celebraciones cultuales cuando aparece la estrella. El contraste se maximiza. Al parecer, el autor describe a los magos en una especie de éxtasis (aspecto nada fuera de lo común en las religiones orientales), pues “como por

adivinación, contestaron, sin quererlo: Ha nacido el rey de los reyes, el dios de los dioses, la luz emanada de la luz”. Sería algo así como escuchar que en la Basílica de Guadalupe, en plena misa, alguna imagen de la Virgen llamara al mexicano a adorar exclusivamente al Señor Jesucristo, único Mesías, y este aceptara y creyera el mensaje. ¡Qué relato tan emocionante! En medio de una adoración al fuego y las estrellas, ídolos inanimados, el Dios vivo y verdadero los llama a adorarle. Pero esta revelación es de una manera que ellos pueden comprender fácilmente: por medio de una estrella. Las Buenas nuevas de Dios que viene al hombre y su impacto cósmico son para todos sin excepción. Dios habla en el idioma del hombre, en y desde su entorno. Así se habla de “encarnar el Evangelio”, es decir, proclamar el Evangelio de una manera que sea comprendida por la cultura. ¿Lo estamos haciendo?

3. La Natividad de Jesús y su impacto cósmico El impacto en el orbe terreno. Otros Evangelios apócrifos, junto con los del NT, también nos muestran lo cósmico de la Natividad. Al decir cósmico se anuncia lo completo o perfecto de la Encarnación. Se elimina entonces el dualismo al cual se tiende: se enfatiza por un lado la salvación espiritual para el ser humano y se olvida de su condición social (propensión comúnmente evangelicalista), o por otro lado, el bienestar material (característica de la teología de la prosperidad).

La venida de Dios impacta la naturaleza. El Evangelio del Pseudo Mateo (siglo VI) relata una escena sin duda fantástica. La huida a Egipto es el marco histórico: Habiendo llegado a una gruta, y queriendo regresar allí, María descendió de su montura, y se sentó, teniendo a Jesús en sus

rodillas. Tres muchachos hacían ruta con José, y una joven con María. Y he aquí que de pronto salió de la gruta una multitud de dragones, y, a si vista, los niños lanzaron gritos de espanto. Entonces Jesús, descendió de las rodillas de su madre, se puso en pie delante de los dragones, y éstos lo adoraron, y se fueron. Y así se cumplió la profecía de David: Alabad al Señor sobre la tierra,

vosotros, los dragones y todos los abismos. (XVIII, 1) La cita veterotestamentaria del Pseudo Mateo es el Salmo 148:7. Con ello busca respaldar el relato. Es un recurso plausible aunque no por ello históricamente cierto. Partiendo del Salmo el autor indica que Jesús es Dios, pues la alabanza a Dios es aplicada a Jesús. Además, demuestra la sujeción de bestias a Jesucristo y con ello vislumbra la restauración de la creación entera como en el principio. El relato continúa con el episodio de los leones: Igualmente los leones y los leopardos lo adoraban, y los acompañaban en el desierto. Por doquiera que iban José y María, ellos los precedían, señalaban la ruta, e, inclinando sus cabezas, reverenciaban a Jesús. El primer día que María vio venir leones y toda clase de fieras hacia ella, tuvo gran temor. Pero el niño Jesús, mirándola alegremente, le dijo: No temas nada, madre mía, que no es por hacerte mal, sino para obedecerte, por lo que vienen a tu alrededor. Y, con estas palabras, LEAN 1.10 diciembre 2010

10


disipó todo temor del corazón de María. Los leones hacían camino con ellos y con los bueyes y los asnos y las bestias de carga que llevaban los equipajes, y no les causaban ningún mal, sino que marchaban con toda dulzura entre los corderos y las ovejas que José y María habían llevado de Judea, y que conservaban con ellos. Y andaban también por entre los lobos, y nadie sufría ningún mal. Entonces se cumplió lo que había dicho el profeta: Los lobos pacerán con los corderos, y el león y el buey comerán la misma paja. Porque había dos bueyes y una carreta en la que iban los objetos necesarios, y los leones los dirigían en su marcha. (XIX, 1-2) También busca corroborar su relato aludiendo al Antiguo Testamento, la promesa mesiánica en Isaías (11:6,7). Entonces su objetivo es presentar a Jesús como el Mesías de Israel. La imagen de lobos paciendo con corderos, y leones y bueyes comiendo la misma paja nos muestran la dimensión cósmica de la Encarnación. Aunque se juzgue a estos escritos como apócrifos no podemos dejar de reconocer que tenían una sensibilidad hacia el mundo que hoy nosotros carecemos. Debemos entonces valorar la creación de Dios considerando que en su venida vino a reconciliar consigo todas las cosas. El gemido de la creación también fue escuchado por el Señor, pero ¿lo hemos escuchado nosotros? El cristiano que lo tome en cuenta sabrá que su compromiso con Dios ha de comprobarse en su trato con su prójimo y su medio ambiente, representará al Señor Jesucristo en la tierra.

El impacto en el orbe celeste. Quedaría incompleto el cuadro si no se habla de la confrontación de Jesús con las huestes de maldad. Existe una

realidad paralela invisible al ojo humano. Jesús en su Encarnación la enfrentó: pudiera decirse que Herodes, por la intriga y la envidia que lo corroía al escuchar de un rey de los judíos, mandó a asesinar a los niños varones menores de dos años esperando eliminar al bebé Jesús, lo cual es correcto; pero también es igual de cierto que detrás de él estaba Satanás inspirando cada maquinación para impedir que Jesucristo fuera obediente al Padre. El Pseudo Mateo reseña la tradición que cuenta la llegada de José, María y Jesús a Egipto. He aquí lo sucedido: Pero ocurrió que, cuando la bienaventurada María, con el niño, entró en el templo, todos los ídolos cayeron por tierra, cara al suelo y hecho pedazos, y así revelaron que no eran nada.Entonces se cumplió lo que había dicho el profeta Isaías: He aquí que el Señor vendrá sobre una nube ligera, y entrará en Egipto, y todas las obras de la mano de los egipcios temblarán ante su faz. (XXIII, 1-2)

El Pseudo Mateo continúa demostrando su conocimiento del AT citando Isaías 19:1. La venida de Dios irrumpe el cosmos, las fuerzas invisibles se ven sacudidas haciéndose evidente en el despedazamiento de obras hechas por mano, cerámicas haciéndose añicos. Expresa: “revelaron que no eran nada” delante de Dios, Jesús.

Huida a Egipto (1450). Fray Angélico

y alabar al Señor por que todo enemigo ha sido ya derrotado con su venida. En suma las narrativas de la Natividad en los Evangelios Apócrifos pueden ayudarnos a tener un panorama alterno a la tradición conocida. No han de considerarse inspiradas pero sí como eco de la espiritualidad de cristianos en los primeros años de la Iglesia que, con sus diferencias y afinidades a los Evangelios del NT, nos llevan a reflexionar sobre la bienaventurada Encarnación de nuestro Dios. Al mismo tiempo es un aliciente para olfatear doctrinas raras, tergiversaciones o herejías que tenemos o se encuentran en nuestras iglesias y corregirlas a la luz del Antiguo y Nuevo Testamento.

Los cristianos pertenecientes a las denominaciones conservadoras han omitido fuera de su panorama el hecho de que al igual que Jesús nos enfrentamos a todo un reino diabólico. Los cristianos pentecostales o carismáticos han omitido la responsabilidad del ser humano y le han achacado todo mal al diablo y sus huestes. Una dicotomía muy cercana a la concepción persa que se aleja y deslinda de la cristiana. Debemos imitar al Pseudo Mateo al considerar el cuadro completo, LEAN 1.10 diciembre 2010

11


Noche de paz ¡Noche de paz, noche de amor! Todo duerme en derredor, Entre los astros que esparcen su luz, Bella anunciando al niñito Jesús, Brilla la estrella de paz, Brilla la estrella de paz. ¡Noche de paz, noche de amor! Oye humilde el fiel pastor, Coros celestes que anuncian salud, Glorias y glorias en gran plenitud, Por nuestro buen Redentor, Por nuestro buen Redentor. ¡Noche de paz, noche de amor! Ved qué bello resplandor Luce en el rostro del niño Jesús, En el pesebre, del mundo la luz Astro de eterno fulgor, Astro de eterno fulgor.

Joseph Mohr (1792–1848) Tranducido por John Freeman Young (1820–1885)

LEAN 1.10 diciembre 2010

12


¿Qué es la navidad?

Una historia de amor en navidad desde la prisión. Dietrich Bonohoeffer y María von Wademeyer Lic. David Campos

“M

i querido Dietrich, mi único amor:” De esta forma inicia una de las tantas cartas que María envió a su amado en esa navidad. Dietrich se encontraba preso en las cárceles nazis bajo el cargo de conspiración en contra de Adolfo Hitler. María por otro lado, fue una joven enamorada que sin importar la distancia y la situación no solo mantuvo viva esperanza en Dietrich sino también dio paz al corazón de este brillante teólogo. Casi todos tememos estar solos en las celebraciones importantes, máximo cuando son celebraciones religiosas, culturales y tradicionales. Dietrich y María se comprometieron un 13 de enero de 1944, sin embargo a esas fechas no habían tenido el tiempo de disfrutarse mutuamente ni por un momento. Dietrich en prisión pensaba asuntos teológicos los cuales le escribía en alguna de sus cartas, por otro lado María le contaba lo mucho que lo admiraba y con todo el romanticismo del caso demostró tener absoluta confianza en la buena voluntad de Dios. Ellos apenas tenían una que otra visita y las veces que se podían ver en persona fueron acompañados de guardias. Por lo tanto el mejor medio para mantener vivo ese amor fue escribir. En navidad muchas cartas adornaron la felicidad de ambos. ¿Te gustaría saber que me han regalado estas navidades? Escribió María: Pues, mira, algo que no se puede poner fácilmente sobre la mesa de los regalos y que vale mucho más que las baratijas que todavía están allí. Algo que no se puede agradecer, sencillamente porque la alegría que produce

supera con mucho todo lo que se pueda pensar o fabricar. Algo que llena totalmente el corazón. Algo que no solo colma mi felicidad, mi esperanza, mi mente y mis sentimientos, sino que es mi vida y mi todo. ¿Alguna idea? Pero ¿No sabes que has sido tú mismo el que hoy me ha hecho ese regalo? No importa que me sienta tan sola entre tanta gente y a punto de llorar. ¡Ay Dietrich, Perdóname!1

Un asunto muy interesante que se debe resaltar en esta historia es el hecho de que la navidad de alguna forma no tiene mucho que ver con el nacimiento de Cristo. Por años la gente ha discutido sobre este asunto. Algunos defienden a capa y espada que lo más importante en la fiesta es celebrar el nacimiento de Jesús. Sin embargo la celebración está realmente lejos de ser solamente una celebración religiosa. La navidad tiene que ver con la cultura, con la gente, la parranda, la alegría. Es una oportunidad para celebrar en familia y a la vez dar gracias a Dios por el regalo de la vida. Dietrich estaba pensando en la fiesta, siendo uno de los teólogos más importantes del siglo XX no se sentó a escribir un tratado teológico sobre la parusía o el magnificad de María. Lo que él hizo fue escribir cartas en donde saludaba a sus seres queridos y les deseaba que disfrutaran de la fiesta. Además invirtió gran parte de la fiesta en dar ánimos a su amada María. Enviándole cartas en donde reflejaba sus mejores deseos y en donde las palabras eran pocas ya que la distancia de alguna manera entristecía su corazón.

Las emociones de María se debían a que Dietrich en cartas anteriores le suplico que disfrutara de las fiestas de Navidad. Por otro lado el mejor regalo que recibió fue leer la carta de su amado en esas fechas. Dietrich por otro lado, estuvo celebrando esa navidad. Entre cantos clásicos, libros, láminas navideñas, se puso sus nuevos guantes que María le envió y se dispuso a celebrar en prisión de esta fiesta pero en su mente estaba la encantadora jovencita que habitaba sus pensamientos y corazón.

LEAN 1.10 diciembre 2010

13


Mi queridísima María: Escribe Dietrich: Sin perder aún la esperanza de que mi situación pueda mejorar a tiempo, quiero escribirte ahora mi carta de Navidad. Hazme el inestimable favor de ser valiente por mí, mi adorada María, aunque en las navidades no tengas más señales de mi amor que estas cartas. Sé que a ambos nos va a costar algunas horas de sufrimiento, ¿por qué vamos a ocultarnos mutuamente? Y sé que nos va a costar entender lo incomprensible de nuestro destino, mientras nos oprime la acuciante pregunta de por qué, además de la tremenda oscuridad que se abate sobre los seres humanos, nos ha caído encima el tormento de esta angustiosa separación que no podemos comprender. ¡Qué difícil es aceptar internamente lo que escapa a toda capacidad de comprensión! ...................... (discurso teológico) María, vamos a celebrar así estas navidades. Participa con los demás en esa alegría que sólo puede experimentarse en una fiesta como la Navidad. No te imagines cosas terribles sobre mi situación en la celda. Piensa, más bien, que Cristo también pasa por las cárceles y que cuando llegue hasta mí no va a pasar de largo.2 Para esta pareja la navidad es una época especial del año en donde la familia comparte, se divierte, juega y recuerda. María le cuenta a Dietrich como con su familia salen a cantar y a ayudar a los necesitados. Por otro lado Dietrich se dispone a celebrar humildemente, con la única esperanza que el corazón de su amada encuentre paz. Para muchos celebrar la navidad es participar en una tradición pagana, sin embargo desde una lógica común y pensando como pensó el apóstol Pablo que podría tener

de pagano comer de la comida de una fiesta si los “dioses” que supuestamente residen la ofrenda están muertos.

La niña contenta quedó y el muy cruel a otra casa partió. De esa también se robó lo que en ella bonito encontró: en toda la villa de “quienes” hurtó los regalos y bienes que a todos harían felices y al faltarles, infelices. Luego corrió a su casa sombría a esperar que llegara el día. “Navidad hoy por fin no tendrán y reiré de cómo llorarán”. Pero en eso un sonido oyó que de veras su mente turbó. Eran risas y cantos de gozo... ¡celebraban con gran alborozo!

En el siglo XXI es evidente que la fiesta se ha convertido en una celebración al consumismo vestido de rojo y que canta con alegría JO JO JO. Sin embargo el verdadera sentido para celebrar es la comunión, me atreveré a decir que ni siquiera el nacimiento de Cristo. Al ver una pequeña encuesta realizada a través de la red social Facebook3 se identifica que lo primero que la gente tiene en mente al pensar en navidad es en el regocijo de esta fiesta y muchos dan gracias a Dios por esta fiesta ya que permite que la familia se junte entre cantos, algarabía y regalos. Pensar en esta perspectiva pone en mente un fragmento del famoso cuento en donde una criatura verde trata de robar la navidad. En realidad este cuento permite pensar con mayor claridad que la celebración es realmente una excusa para compartir y disfrutar con los seres queridos.

El Grinch entendía muy poco o todos estaban muy locos o sin comer y sin regalar podían igual festejar. Así, Navidad no estaba en las tiendas ni en las manos de Santa las riendas de hacer que la gente del mundo se diera cariño profundo. El Grinch así lo entendió y ser bueno por fin decidió; regresó los juguetes con prisa y en mil caras brotó una sonrisa. Lo mejor es que con esa lección al Grinch se le curó el corazón y se puso a reír y a bailar y aprendió desde entonces a amar. 1 Dietrich Bonohoeffer, María von Wademeyer: Cartas de amor desde la prisión. (España: Editorial Trota,1998), 118. 2 ibid.,108-10. En la página 114 de ese mismo libro hay una carta en donde Bonohoeffer escribe a su amigo Eberhard Bethge el día 22 de diciembre de 1943. Entonces él le comenta a su amigo que no podrá pasar la navidad con ellos. Pero indica que todos mantienen silencio ante este acontecimiento. Ósea nadie quiere aceptar la situación que Bonohoeffer no saldrá de prisión. Además en esa carta el pide a su amigo que hable con María y le sea franco con respecto a la situación difícil que enfrenta el mismo en prisión 3 ¿Qué significa para ti la navidad? Encuesta realizada en FACEBOOK… además se pregunto a algunos jóvenes de diferentes iglesias de Guatemala y El Salvador.

LEAN 1.10 diciembre 2010

14


Director Editora Diseñadora gráfica Escritores

Escríbenos a

Shealtiel Durán Badillo Psic. Marlen Espinoza Rangel Licda. Dámaris Ruyán Licda. Karla Morales Lic. David Campos

leanradio.shel@gmail.com

©Gravedad Zero es una organización cristiana dedicada al ministerio juvenil en universidades sirviéndoles y proclamando las buenas nuevas.

Proximamente LEAN en línea.

LEAN 1.10 diciembre 2010

15


¡Al mundo paz, nació Jesús! ¡Al mundo paz, nació Jesús! Nació ya nuestro Rey; El corazón ya tiene luz, Y paz su santa grey, Y paz su santa grey, Y paz, y paz su santa grey. ¡Al mundo paz, el Salvador En tierra reinará! Ya es feliz el pecador, Jesús perdón le da, Jesús perdón le da, Jesús, Jesús perdón le da, Al mundo Él gobernará Con gracia y con poder; A las naciones probará Su amor y su poder, Su amor y su poder, Su amor, su amor y su poder. Isaac Watts (1674–1748)

LEAN 1.10 diciembre 2010


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.