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CARTA

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RENACER

RENACER

El verano fue siempre para mí sinónimo de huida. No escapada, sino exactamente eso: una fuga de una realidad, la mía, que me espantaba por múltiples razones; la principal era mi permanente conflicto con la vida, una guerra que, todavía hoy, continúa en activo. No soy normal, lo que significa que no me ajusto a la norma —ni a las normas— y ser un outsider, aunque milites en una minoría aparentemente alegre, suele llevar aparejado un precio muy alto que no todo el mundo está dispuesto a pagar. La fama, sobre todo hoy, en una sociedad que venera a las celebrities en lugar de cuestionarlas, es el perfecto ejemplo de este peaje. Es algo que Diego Boneta, protagonista de nuestra edición de L’Officiel Hommes, tiene muy presente: interpretar a Luis Miguel le ha servido para verse reflejado en un espejo inesperado y reflexionar acerca de aquello por lo que merece la pena levantarse cada día: escapar de la realidad, pero sin huir de ti mismo. Los sueños, a veces, se cumplen sin convertirse en pesadillas.

Javier Quesada

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