En más de una oportunidad hemos comentado desde esta tribuna la importancia de construir más infraestructura para el desarrollo logístico y, por lo tanto, de la cadena de abastecimiento en nuestro país.
Con una mejor infraestructura, los costos de los participantes de la cadena se optimizan, lo que al final repercutirá en precios más competitivos para el consumidor final y en una mayor rentabilidad para los proveedores.
En el último trimestre se han concretado importantes obras en esa dirección, tanto de capital privado como público. En esta edición compartimos con ustedes información sobre diferentes iniciativas, como por ejemplo la inauguración del centro logístico vehicular de la sociedad entre Ransa y SK Bergé, así como la inauguración de la ampliación del almacén de BSF. Ambos proyectos están ubicados en Lurín, zona privilegiada y cada día más importante para la logística de nuestra capital.