Especial Febrero 13

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¡Nos Sumamos a la melaza! Compensando un poco el retraso que hemos tenido les traemos esta edición ligera especial de 14 de febrero. Seguro algunos declinaron pensando que seria algo meloso y lleno de romance. Bueno, no lo es todo. Dejamos un poco de acción con el estreno de Blue!, les traemos comedia y un poco del universo de Delta City y también les dejamos el prólogo de “Iris In Rainy Days” novela ligera en traducción por Chibi Chibi Fansub. Esperemos disfruten esta ligera edición dedicada al romance y sobre todo a la amistad. No olviden compartirla y si no han leído la edición principal de Febrero les invitamos a leerla.

Atte: Fabián A. Ramos (Dante Locke)



Vuelve esta historia que vimos en la primer Ligth Time Cup, algo falta de votos pero mantuvo siempre una buena posición en el panel de jueces. De hecho, de no ser por las votaciones es más que obvio que esta historia hubiese sido la ganadora absoluta. Sigue su progreso en nuestro blog y descarga los capítulos mensuales. ¡Ya pronto veremos también a Blue y a Tiferet!, ¡que seguirán publicándose en nuestro blog!

—¡Por favor…! ¡Por favor, te lo suplico, no me mates!

—Por fin se han ido –murmuró el chico –. será mejor que nos demos prisa. ¡Vamos!

El hombre lloraba como un niño, su rostro escupía flema, saliva y lágrimas (como solo un hombre miserable, que suplica por su vida, lo puede hacer. Las emanaciones de su rostro impactaban contra el suelo de un baño público que cada tanto vibraba con el paso del subterráneo. Ambos se encontraban solos.

<<Fue rápido, demasiado rápido>>, pensó el hombre. Momentos atrás yacía en el suelo suplicando por su vida y ahora el chico que intentaba matarlo estaba junto a él en la parada de subterráneo más cercana que encontraron.

—Sabes bien que al Jefe no le gustan los retrasos y aún así no has pagado. Te lo advertí una vez, amigo, dos veces, tres veces… pero ya no más. No lo tomes por nada personal, pero estás acabado. El hombre cerró los ojos y por un momento pensó en lo que era lo más preciado para él en su vida: su hija. El resto fue miedo. Pensó en si sería rápido o lento, si le dolería, o que sucedería luego de que pasara todo. Pero no pasó nada, siguió esperando y cada segundo era una tortura interminable. Pero no sucedió nada. Siguió esperando y esperó hasta donde su valor pudo aguantar, pero aún así, nada. Para él resultaba más de lo que un hombre podía soportar. Entonces se atrevió a separar los parpados del ojo izquierdo. Quería saber que tanto tramaba su ejecutor. El chico se encontraba agachado contra la puerta entreabierta, se podría decir que estaba espiando a alguien o escuchando una conversación que no le incumbía. El hombre se levantó del suelo lentamente y con cuidado, no entendía nada de lo que estaba sucediendo. —Será mejor que no hagas ningún ruido –dijo el chico. Aparentaba más edad de la que tenía.

—Ten –dijo entregándole el boleto y algo de dinero – asegúrate de ir lo más lejos posible, en esta ciudad ya no serás bienvenido y si en algún momento decides volver, mejor piénsalo dos veces porqué de aquí no saldrás con vida. El hombre levantó la cabeza para mirarle el rostro, este se mantenía inmutable, siempre con la misma expresión dura de quien no conoce más que la violencia. Comprendió que aquel chico era fuerte y él un pobre viejo débil. —¿Por qué me ayudas? —No te estoy ayudando, sólo me deshago del problema. Ahora sube de una vez, los perros del jefe andan rondando el lugar y si te ven no tendrás mucha suerte. —Pero si te descubren terminarás como yo. —Mejor suba de una vez y los dos seguiremos vivos. El viejo subió al subterráneo. Él no podía hacer nada más por nadie. La puerta comenzó a cerrarse frente a su rostro. Al mismo tiempo que la puerta pasó por la mitad de su rostro, interpuso sus manos para detenerla. Quería decir algo más, una duda que le dolía en el alma: —¿Y mi hija? quiero saber qué pasará con mi hija.

El hombre desconfió de todo y se limitó a observar lo que estaba sucediendo.

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—Ella estará bien con su madre, yo me aseguraré personalmente de que no le suceda nada malo. Las manos doloridas del hombre soltaron la puerta. El subterráneo comenzó a moverse, y antes de que este desapareciese en las entrañas de tierra, ambos, el chico y el hombre, se miraron a los ojos. Cuando un grupo de estudiantes de último año del instituto pasó junto al muro este, no llegaron a notar el cuerpo que colgaba a la vista de todos. Sujetándose fuertemente, Misha, intentaba saltar el muro para no tener que asistir a clases. Al ver el grupo de chicos que pasaba junto a él, se detuvo, por un momento contuvo el aire y cuando ya no estaban a la vista se soltó cayendo al suelo sin mayor dificultad. El cuerpo, en la pose perfecta de un felino, absorbió el golpe que dio contra el suelo. Cuando de repente los pelos de la nuca se le erizaron al escuchar una voz femenina que reconoció. —Otra vez piensas saltarte las clases –dijo. Su nombre era Naomi, algunos decían que era la chica más linda de todo el instituto, otros que era la más increíble y genial persona que jamás habían conocido. Muchos le habían dado regalos, otros escrito canciones y muchos otros se habían convertido en fieros acosadores. Pero para Misha era la única persona que se atrevía a hablarle. Se conocieron durante el verano, cuando Misha estaba haciendo una de sus ―limpiezas‖, como a él le gustaba llamarle, encontró a una chica muy linda, de cabellos negros como tinta china, huyendo en medio de la noche.Un hombre de rostro exageradamente deformado por la perversión la seguía muy lentamente. Entonces Misha Mori hizo lo único que sabe hacer bien y de ese hombre podemos decir que no volvió a hablar. Dudo que pueda caminar. Desde entonces Chika se ha convertido en un denominador común en su vida.

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—No es de tú incumbencia –respondió Misha con fastidio. —La escuela es algo importante en la vida de todo joven, no puedes escapar así de fácil – Naomi hablaba como repitiendo un libro de texto. Era muy inteligente y en ocasiones confundía su papel de amiga con el de un libro. —Aunque quisiera quedarme tengo que hacer un par de ―limpiezas‖ –se excusó rascándose la cabeza. No le gustaba referirse a su trabajo delante de Naomi. Aquellas palabras molestaron a Naomi, que giró la cabeza a un lado con rechazo. —No entiendo porqué sigues haciendo ese trabajo. ¿Cuántas veces lo has hecho? –Dijo con reproche –. ¿Es qué no tienes suficiente dinero ya? Pero Misha no se molestó en contestar, en cambio, continúo caminando con las manos en los bolsillos mientras entonaba un molesto silbido. —¡No me ignores! –explotó Naomi. Pero inmediatamente cambió de actitud, quería hablar algo más importante con Misha. —¡Espera! –ordenó. —¿Qué sucede? –preguntó sin darle mucha importancia. Misha se volvió a ver a Naomi, que con las manos sobre la cintura en posición exigente le reclamaba algo que entre palabra y palabra apenas llegaba a entender. —Has hecho lo que te dije ¿verdad? -es lo único que llegó a entender. —Lo que me dijiste… eh…–dijo confundido –. No lo recuerdo –suspiró finalmente pidiendo disculpas.



Perdidas

Del autor de “ Memorias Japón ” y “ Entre el Cielo y el Infierno ” una obra que te enganchará si te atreves a descubrirla desde adentro.


Yue y Oni Takeru espera tranquilamente a que el sol brote por el horizonte. Aunque luce algo serio, una ligera sonrisa puede apreciarse cuando la luz llega a su cara. -¿Haces esto todos los días?-le pregunta una voz femenina a sus espaldas. -Hola Hikari. Pues, lo he hecho cada mañana por muchos años. Realmente no es mucho problema. -Feliz San Valentín.

nior. Es decir, su padre estaba allí. -Sí, tienes razón. Y… ¿Dónde está Genki? -Mentana dice que en una misión. -Curioso, suele llamarnos para misiones de ese tipo. -Quizás quiso hacerlo solo. -¿Agua?-pregunta Hikari mientras extrae una nueva botella. -Gracias.-dice Takeru mientras la abre y toma un sorbo.

-Lo había olvidado.-comenta él con cierto disgusto.-No tengo nada qué hacer hoy.

Ambos se quedan allí un momento sentados mirando al resto de parejas pasar frente a ellos.

-Yo tampoco-dice ella sonriente antes de encogerse de hombros.-Salvo entregar los chocolates del día.

-¿Cuánto tiempo hace que nos conocemos?-pregunta Takeru.

-¿Me has hecho chocolate, verdad? -Sí, por eso estoy aquí.-dice ella mientras le extiende una pequeña bolsa.Disfrútalo. -Gracias.-dice Takeru mientras recibe la bolsa.- ¿Te importa si te acompaño en el resto de tus recorridos? -Desde luego.-dice Hikari sonriendo. Ambos empiezan entonces una caminata. -Por cierto.-pregunta Takeru mientras se alejan del lugar.- ¿Dónde estás guardando los chocolates? -Un universo de bolsillo creado con magia.-dice ella mientras extrae de la nada una botella de agua.- ¿Quieres un poco? -Aún no tengo sed. -Como digas.-dice ella mientras la abre y bebe un sorbo. Algunas horas después y con el sol ya en lo alto… Ambos descansan en una banca en un parque.

-Creo que serán 8 años.-dice ella mientras mira el cielo.-La verdad no lo he notado mucho. -Yo tampoco.-dice Takeru mirando al suelo.-Casi que siento que te conozco desde siempre. -Yo también.-dice Hikari sonriendo. Ambos se miran el uno al otro exactamente al mismo tiempo y sonríen. Entonces frente a ellos se produce un súbito destello de luz seguido por algunos gritos. -Problemas.-dice Hikari mientras se pone en pie y corre hacia el lugar.-Vamos. -Y así se matan los buenos momentos.dice Takeru algo quejoso. En medio del lugar se puede ver a Invicto poniéndose en pie mientras el lado izquierdo de su cara termina de regenerarse. -¿Qué sucede?-pregunta Hikari.

-Así que…-dice Takeru.- ¿Por qué le diste chocolate a Powermind?

-San Valentín, chicas hermosas, celos y muchos poderes destructivos.-responde este.- ¿Qué esperabas?

-Se vería mal que sólo se lo entregue Ju-

En medio de lugar se puede apreciar a

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dos chicos que se miran fieramente, uno carga en sus manos energía de color azul mientras que los ojos del otro brillan de un amenazante rojo. Takeru aterriza entre ambos. -Ok, detengan esta tontería.-dice tranquilamente.-No hay razón para que hagan esta lucha si… -¡Apártate imbécil!-ruge el chico de ojos rojos. -Sí, esto es asunto nuestro…-concuerda el otro mientras en sus manos la energía empieza a chirriar. -No me apartaré y si no se detienen… -Tú lo pediste entonces.-dice el de los ojos. -Ni que decirlo.-dice el otro. Rayos rojos brotan de los ojos del primero mientras que rayos de energía azul son disparados de las manos del segundo. -¡Takeru!-grita Hikari. Todo ocurre en un parpadeo. Ambos rayos en lugar de chocar son absorbidos por una esfera blanca que ha rodeado repentinamente a Takeru. Cuando el resplandor disminuye se aprecia que la esfera en realidad son alas blancas que se despliegan para mostrar a Hikari con sus ojos celeste claro y cabello blanco rodeada por un aura luminosa. -El amor no debería causar peleas sino más unión.-dice Hikari mientras mira a ambos chicos. Sígueme en Twitter:

@Drake Epsilon

-Wow.-dicen ambos mientras aprecian su angelical forma.-Es hermosa. Ambos se acercan a ella. Lucen realmente maravillados.

-¿Saldrías conmigo?-le preguntan ambos al mismo tiempo. -Por eso no me gusta usar esta forma mu-

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chas veces.-dice ella mientras avanza un poco.-Y no, agradezco su propuesta, pero yo…-entonces se percata del detalle y gira.- ¿Takeru? Al momento de escudarlo Takeru se encogió sobre sí. Ahora se ha animado a mirarla de reojo, pero lejos de mostrar alegría sus ojos destellan con un amarillo claro evidenciando un odio ancestral. -Oh, no… lo olvidé.-dice Hikari. Antes de que pueda reaccionar de algún modo Takeru literalmente estalla a su forma demoniaca. Lanzando un estruendoso rugido que intimida a todos los que están cerca se abalanza sobre Hikari y la somete contra el suelo. Levanta su mano derecha en cuyos dedos brotan afiladas garras. -Takeru, soy yo.-dice Hikari mientras regresa a su forma humana.- Hikari. El demonio baja su mano y luego, regresa a su forma humana casi de inmediato. Se aparta de Hikari y se sienta a unos pasos de ella. -Lo siento… realmente lo siento… A veces, no puedo luchar con ello… -Lo sé, Takeru y lo entiendo.-dice ella mientras se pone en pie y se le acerca.En verdad lo entiendo. Sin decir más le restaura la ropa destrozada por su transformación y luego le da un abrazo. Los dos combatientes de hace un momento miran la escena y luego se miran el uno al otro. -Creo que tienen razón. No es para tanto. ¿Vamos a beber algo? -Sí, creo que es lo mejor…. Al caer el sol sobre el horizonte, Takeru está sentado, esperando hasta que desaparezca el último rayo de sol. A su lado, está sentada Hikari, en silencio sin decir nada. Realmente, no hay mucho que de-




PRÓLOGO He aquí la chatarra en que se ha convertido un robot. Su brazo y su hombro izquierdo, han sido arrancados. El brazo que le queda se dobla en una dirección antinatural. La parte inferior del cuerpo, la cual ha sido sacada de raíz, ya no existe. Desde su estómago salen tubos y partes que semejan ser orgánicas, sin orden alguno. A primera vista este robot no parece ser más que una pieza de chatarra. Pero hubo una vez en la que tuvo una vida feliz, sirvió a una familia y fue amado por su amo. HRM021-α, su nombre registrado es Iris Rain Umbrella. Basándose en los datos de los circuitos mentales de HRM021-α, el siguiente expediente fue reconstruido por Ralph Ciel, el Primer Laboratorio Robótico de la Universidad Oval.

–Capítulo 01– Desmantelamiento “¡Tenga cuidado en la calle! ¡Vuelva a casa temprano!” – Iris Rain Umbrella

7 D ÍAS

ANTES ,

En el centro de la Plaza de la Fuente de Venus, estaba la estatua de una diosa magnífica. De extremidades delgadas, piel tan blanca como la seda y una grandiosa figura. Hoy, la diosa aún tiene una gentil sonrisa en su rostro, mientras observa en silencio a la multitud que la rodea. Hubo una ocasión en que la ciudad Oval ardió entre las llamas de la guerra. Aquella vez, la mayor parte de la ciudad fue reducida a cenizas, solamente la estatua de la diosa sobrevivió sin siquiera un rasguño, como un milagro. Desde ese día la estatua de la diosa se convirtió en un símbolo de la esperanza y del renacimiento, y ha sido protegida como la posesión cultural más importante de nuestro país. Además de la estatua de la diosa que mide unos ciento setenta centímetros, en la fuente brotan flores de agua,

que tienen los colores del arco iris. En los oscuros bancos color té que habían sido colocados alrededor de la fuente, se veían ancianos hablando, niños jugando, y enamorados proclamando su amor mutuo. Era una escena armoniosa que lucía como si fuera una pintura. … De hecho, era similar a una pintura. Un sonido chirriante comenzó a divulgarse, y ajusté la función de la pupila de mi sistema visual. Luego de enfocar mi pupila en la blanca estatua de la diosa, suspiré levemente. La estatua de la diosa lucía como La profesora. Ella era la investigadora más importante de robots, la profesora Wendy von Umbrella. Ella poseía una silueta alta, cabello negro que era hermoso y exquisito, usaba pulcros lentes, marcos plateados que le sentaban de maravilla, y era la profesora de la que me enorgullecía. Mientras pensaba en el hermoso perfil de la profesora, miraba la estatua de la diosa, cuando el agridulce aroma de los cigarros circulares llegó flotando hasta mí. Comencé a girar el ángulo de mi cuello, confirmando la procedencia de la fragancia. La persona sentada en el banco fumaba un cigarro circular, era un hombre de mediana edad que llevaba un traje azul oscuro. Estaba leyendo el Diario Oval pero me miraba a hurtadillas de vez en cuanto. Lo saludé con una amable sonrisa, y él miró hacia otro lugar tímidamente. Por cierto, los cigarros circulares son productos usados para dejar de fumar. Su forma es la que la palabra “circular” indica, y su tamaño es aproximadamente el de un círculo hecho con el pulgar y el dedo índice. Cuando las personas comienzan a fumar, la forma del cigarro se endereza inmediatamente, y entonces la punta del cigarro puede ser encendida. Aunque es un remplazo del tabaco, fue hecho para evitar que la boca de las personas que intentaban dejar de fumar estuviera demasiado libre, sin embargo en este últimos tiempo los fumadores que los compran porque les gusta su olor está incrementando gradualmente. Entre ese tipo de productos el que se vende mejor es el cual combina dos círculos en la forma de un número ocho. Este tipo de cigarro puede ser dividió en dos mitades, una mitad para fumar y la otra mitad para reponer las cenizas. La razón por la cual soy una erudita en el tema, es porque la profesora Umbrella amaba este tipo de cigarro circular. …Mnn. Posé mi mirada sobre la estatua de la diosa nuevamente, y repentinamente empecé a meditar. La estatua de la diosa se parece mucho a la alta profesora. Sin embargo,

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tengo esta sensación que le “falta algo”. Cada vez que la veo, tengo este extraño sentimiento. Cuando esta pregunta sin sentido dio vueltas en mi cabeza, ya había llegado la hora. “… Si pasaran cinco minutos más, serás incapaz de llegar a casa en el tiempo estipulado.” La inorgánica voz electrónica de mis circuitos mentales comenzó a instarme para que me dirigiera a casa. … Bien, entonces ya era casi hora de ir a casa. Dándole la espalda a la plaza, comencé a caminar a casa apresuradamente. La canastilla de compras en mi mano derecha estaba llena de ingredientes para la comida de ese día, y llevaba un pescado La Bier que brillaba en exquisitos destellos plateados, amarrado a mi espalda; haciendo que los peatones que pasaban a mi lado dieran vueltas sus cabezas para verlo. Al verme acarrear un gran pez de un metro de largo, cuando yo solamente miedo ciento cincuenta centímetros, sorprenderse sería bastante natural. Pero luego de que se daban cuenta que soy de hecho un robot, mostraban una expresión como si dijeran que es comprensible. Diferenciar entre humanos y robots es bastante sencillo. Los que tienen una antena redonda en sus oídos (se ve verdaderamente como unos audífonos) son robots, los que no los tienen, son humanos. – ¡Es la robot de la residencia Umbrella!… –una voz se proyectó con claridad en mi sistema auditivo. Así que, le sonreí en respuesta a aquella persona. Aunque los robots utilizados en familias no son poco habituales, pero como la profesora era famosa, tendía a llamar la atención cuando caminaba por la calle. Después de caminar unos diez minutos desde la Plaza de la Fuente, llegué a la residencia Umbrella. Al mirar a la puerta que estaba llena de hiedra, dije: –Número de certificación HRM021-α, Iris Rain Umbrella. Estoy de vuelta. – Luego de que la voz electrónica dijera, – Certificación completa, haga el favor de entrar –, la gran puerta se abrió silenciosamente. La residencia Umbrella era una mansión magnífica. Había un patio del tamaño de tres manzanas, y era una gran residencia que no habría sido inferior a las mansiones de los administradores. La pared exterior que fue construida a base de ladrillos rojos hacía que las personas comprendieran el esplendor de la historia y tradiciones de la familia Umbrella. Luego de entrar a la mansión, ingresabas de inmediato a una lujosa sala. Los rayos del sol que entraba a través del tragaluz atravesaban los candelabros, emitiendo un colorido resplan-

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dor. El estilo de la alfombra extendida en el suelo era similar al de las alfombras en los antiguos castillos. Grandes pinturas colgaban en las paredes, y el valor de cada obra podría proporcionar el costo de una vida lujosa. Luego de caminar a través del corredor por el suelo exquisitamente brillante, en primer lugar coloqué el pescado en la nevera. Me sentí mucho mejor después de hacer eso, y comencé a caminar hacia la sala que se encontraba más hacia el oeste en ese piso– el cuarto de investigación. El Cuarto de Investigación estaba repleto de materiales y herramientas – el cuarto era limpio pero frío, era como un campo nevado en un día de invierno. Sentada en la cama blanco cremoso que se ubicaba cerca de la pared, comencé a confirmar mi evaluación. Nivel de la Batería 82,50%, despilfarros en el cuerpo 1.73%. El nivel energético era más que suficiente para trabajar, pero la profesora me había ordenado cargar mi batería. Así que, inmediatamente empecé a cargarla.


Después de esterilizar el largo y delgado tubo con químicos dos veces, abrí la cerradura que hay en mi muñeca, dejando al descubierto el enchufe de conexión. Si hubiera cometido un error al realizar estos pasos, la negra máquina de aceite podría salpicar toda la habitación, por lo que debía ser cuidadosa. Inserté el tubo en mis manos derecha e izquierda, una después de la otra, entonces presioné el interruptor que hay en la máquina. La energía eléctrica y el aceite lubricante extra fluían dentro del enchufe en mi mano derecha. Al mismo tiempo, los desperdicios de color té que había en mi cuerpo eran succionados al exterior por mi muñeca izquierda. En los manuales para principiantes sobre el mantenimiento del robot, se diría que el sistema es similar a cuando los humanos se someten a terapia intravenosa. Cuando el sistema se somete a la excreción y limpieza de las partes internas del cuerpo en realidad es más parecido a una diálisis artificial que a una terapia intravenosa. Mientras miraba hacia arriba al cargar mi batería, me quedé mirando los tablones de metal en el techo. El techo que era como un espejo liso reflejaba mi cuerpo completo. Técnicamente, en los robots no hay mucha diferencia entre los géneros, pero se supone que soy una chica. Mi edad establecida son quince años. Tengo ojos azules, con delicadas cejas sobre ellos. Mi cabello rojo oscuro es ligeramente ondulado, y es tan largo que llega a mis hombros. El largo de mis extremidades es similar a los de la profesora, y mi cara es la que tendría una belleza, tal y como la profesora; esto es lo que sé sobre mí, y no es solamente mi opinión. Debe ser debido a que la profesora siempre me decía que soy linda, es la razón por la que me siento así. El diseño del uniforme de doncella que llevo puesto fue inspirado en el estilo de un cuento de hadas. Sobre mi cabeza hay un cintillo de doncella que se agita ligeramente, mientras que el corte del delantal enfatiza las curvas de mis pechos. El vestido color melocotón se angosta en las muñecas, mientras que en el resto del cuerpo, es bastante suelto, y haría que las personas se imaginaran un vestido de novia. Me pregunto dónde habrá comprado la profesora un vestido de doncella tan encantador. Hasta hoy en día, aún es un misterio. Después de que pasaran doce minutos y un segundo, el proceso de carga finalizó. El nivel de la batería era 99.93%, los desperdicios corporales iban al nivel de un 0.02% …Bueno, nivel requerido logrado. Salté de la cama, saliendo del cuarto de investigación, Mi destino era la cocina, porque tenía que preparar la comida.

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En la gran cocina que no habría tenido nada que envidiarle a los restaurantes de clase alta, comencé a prepara el estofado Bill La Bier. Había muchas ollas, fregaderos y cocinas a gas, pero siempre cocinaba al lado izquierdo de la cocina. La profesora era muy rica, ella incluso podría haber contratado a más de diez, o, es más, incluso a más de veinte chefs, pero no había contratado ninguno hasta ese momento. Ni un solo chef, ella tampoco contrató a otras doncellas y yo tenía que lidiar con toda gran residencia Umbrella. Yo solo podía dar lo mejor de mí, para terminar diligentemente el trabajo doméstico, como cocinar, lavar la ropa y barrer el piso. Corté el pescado La Bier rápidamente, y tomé con delicadeza los trozos color melocotón del pescado. … 200.0025 gramos. Mientras analizaba la receta que había sido buscada por mis circuitos mentales, terminé las preparaciones para hacer el estofado Bill Lavier. Por cierto, “La Bier” es un pescado similar al salmón, y “La Bier” es de hecho el nombre de una persona. Supe que hace tiempo un pescador llamado La Bier atrapó un pescado, entonces él preparó ese pescado en una noche entera. Lo cocinó, primero cortándolo en grandes pedazos, entonces guisó los pedazos… ese es el origen del estofado La Bier. Al oírlo parece un plato sencillo, pero si quieres prepararlo bien, tienes que saber unas cuantas técnicas. Por ejemplo, tienes que manejar el fuego adecuadamente, e ir sacando la espuma con paciencia. Desde el momento en que tomé el cuchillo habían pasado siete minutos y doce segundos, y mi trabajo ya estaba hecho. Guardé la comida restante en el refrigerador. La profesora no tiene muchas visitas, por lo que las porciones sobrantes probablemente se pudrirían en el congelador. Con la gran cantidad de ingredientes comprados y la gran cocina, la residencia Umbrella usualmente era así de derrochadora... Mientras me quejaba en voz baja, una voz electrónica resonó en mi mente. …La Profesora Wendy von Umbrella ha regresado. – ¡Está de vuelta! Salí rápido de la cocina, pasando a través de la sala, y tiré de la puerta violentamente para abrir la puerta. Mi vestido revoleteaba en el aire, corrí hacia el patio. …¡Profesora, Profesora, Profesora! La persona, que estaba atravesando la puerta, era una alta mujer de cabellos negros que llevaba puesta una chaqueta tan liviana como un cisne, y lucía incomparablemente bella aunque no parecía tener ningún rastro de maquillaje en su rostro… Mi profesora caminaba hacia mí con lentitud. Y entonces, me saludó con la mano repentinamente.

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—¿Es una promesa? —escucho una voz de una niña en el fondo, no puedo ver nada y sólo percibo el ligero viento soplando sobre mi cara. —Es una promesa… Me despierto justo después de eso, que sueño tan raro. «¿Un recuerdo quizá?», me pregunto, pero al final llego a la deducción que eso no puede ser posible, veo la hora en mi celular, las 5:30 de la mañana, desperté una hora antes de lo debido. Contemplo mi cuarto, las paredes de un color azul oscuro y el techo de un color blanco, algo muy normal, unas cortinas gruesas de color verde y algunos posters pegados en la pared con diversos motivos, principalmente diseños de algunos de mis artistas digitales favoritos. Finalmente llego a la deducción de que llegar de vez en cuando temprano a la universidad no le hace daño a nadie, así que en lugar de no hacer nada por media hora me levanto y me dirijo al baño para tomar mi ducha matutina. Me veo en el espejo, dándome cuenta que hoy toca rasurarme y con esa resolución saco el rastrillo del cajón. Creo que ya es hora de cambiarme la pieza que tengo en la perforación del labio, así que lo apunto en mi mente para comprar una nueva cuando tenga un poco de oportunidad. Tomo mi ducha tranquilamente y al salir me dirijo a mi cuarto para vestirme. Peino mi corta cabellera de color negro de una manera un tanto desarreglada, ya que de ninguna manera me peinaría con puntas o parecidos como se suele usar mucho por estos lares. Después de estar arreglado me dirijo a la cocina a hacerme algo de desayunar, me preparo un par de huevos revueltos con café, en momentos como éste extraño los desayunos que me hacía mi madre cuando vivía en la casa de mi familia. Pero bueno, para estudiar en la Universidad que quería tengo que hacer sacrificios y éste es uno de ellos. Después de mi rutina matutina estoy listo para salir a las 6:40 de la mañana y así parto de mi departamento —ubicado en un cuarto piso de un edificio de departamentos—

con rumbo a la escuela para empezar este nuevo año escolar. Para llegar a la escuela es una hora de viaje el cual la mayoría es en subterráneo, a estas horas hay bastante gente, pero después de tanto ya me acostumbré a soportar la serie de empujones, jalones y demás que uno recibe aquí, recuerdo que al principio casi moría asfixiado un par de veces, cada vez que pienso en eso no puedo evitar sonreír. Llego temprano a la Universidad y encuentro ya a algunos alumnos, principalmente de nuevo ingreso los cuales están un tanto desorientados esperando indicaciones de los superiores, algo común, aunque al final ellos tendrán que ir a buscar sus salones por sí solos. Me detengo en la explanada y me siento en una de las jardineras de ésta, viendo como poco a poco el movimiento en ella se intensifica. La gente pasa y pasa y yo sólo observo. En ese momento aparece… una hermosa joven pasa por la explanada acercándose a uno de los encargados de dar indicaciones. Desde el momento que la veo capta mi atención, no es que ella fuese particularmente bonita, pero algo… tiene algo. Es una joven que ha de medir menos de un metro con setenta, es delgada, de tez clara y tiene una hermosa y larga cabellera marrón claro. Viste con ropa cómoda compuesta de unos jeans, unos converse y una chamarra que por la hora es necesaria para resistir el frío. Al recibir las indicaciones se dirige hacía el edificio que corresponde a los alumnos de nuevo ingreso y así la pierdo de vista. Finalmente veo que es la hora y de igual manera me dirijo a mi salón. La universidad a la que asisto es bastante grande, tiene dos edificios de 4 pisos cada uno solamente sirve para albergar salones para tomar clases. Además tiene un edificio, central con dos pisos dedicados como biblioteca y otro de ellos como librería. Además de los edificios de laboratorios para las distintas áreas que los requieran. Todo eso sin contar las áreas designadas a actividades deportivas y a las culturales. En fin, es bastante grande, así que no espero volverme a encontrar con aquella joven que vi por la mañana, por lo tanto no le tomo mucha importancia a aquella situación.

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Pasan las horas y finalmente llegamos —Discúlpame —digo mientras volteo a la hora de receso, aquí durante cada clase a ver a la joven a la que originalmente fui a se dan 10 minutos de descanso o más bien saludar—. Solamente déjame quitarme a espara llegar a la siguiente clase, pero a las 10 ta de encima y… —le explico, pero no me dede la mañana se da un receso de media hora ja concluir antes de levantarse e irse viéndopara poder desayunar y todo eso, pero real- me con un rostro que combinaba la burla, el mente nunca ocupo ese tiempo para eso. miedo y la vergüenza—. ¿Por qué te me —En serio, esa chica realmente me aventaste encima? —le preguntó a la joven dejó impactado —le digo a uno de mis cono- que está sobre mí con un claro tono de mocidos de nombre Aarón, un tipo carismático, lestia en mi voz. de tez clara y más musculoso que el pro—¡Te encontré! —me grita sin que yo medio. Ambos estamos sentados en supiera realmente a que se refiere. Sígueme una de las jardineras de la explana—No sé de lo que hablas, pero… en Twitter: da—. No es que fuese muy bonita, ¡¿Podrías quitarte primero de enpero tenía algo. cima y después hablamos?! —le —¡Te gusto! ¿Por qué no pregunto prácticamente gritando fuiste tras ella en ese momento? — y acaparando la atención de las me preguntó con un tono de burla. pocas personas en la explanada que aún nos ignoraban. —No vi la necesidad de ello. Finalmente aquella chica se levanta, —Eres un cobarde. dejando ver por fin su rostro, el cual era bas—No lo soy. tante tierno y sobre el cual caía su cabellera —¿No?, veamos, te reto a que vayas y de color negro. Hasta ese momento me doy consigas el número de esa chica de haya — cuenta que esa chica usaba una falda a cuame dice señalando a una joven sentada en dros a la altura de la mitad del muslo, penuna banca ubicada en la misma explanada, sando que cuando estaba encima de mí mula cual era de muy buen ver, de tez morena chos pudieron verle más de lo debido, cosa clara y una cabellera negra. que pareciese no haberle importarle. Des—Vale. pués de levantarse ésta toma asiento en la Me levanto tranquilamente, la verdad banca que había desocupado la otra joven y yo no tengo problemas para hablarle a al- yo la imito sentándome a su lado. guien así que no me preocupo del todo. Me —Ahora sí, ¿quién eres y por qué te acerco de una forma muy galante hacía me aventaste de repente? —le pregunto. aquella chica y al estar cerca de ella alzo mi —Yo soy yo y te busco a ti —me dice mano en son de amistad. ella y yo pongo una cara de molestia, ¿qué —Hola, ¿cómo est… —mientras pre- son ese tipo de respuestas? guntaba ella estaba comenzando a respon—¿Cómo te llamas? —le pregunto sin der el saludo alzando la mano, cuando de perder mucho la cordura. repente algo se avienta sobre mí, o más bien —Tú sabes perfectamente cuál es mi alguien y caigo de lado fuertemente sobre el nombre —me dice con su voz infantil. suelo. Pierdo el sentido de lo que pasa por —¡No lo sé! unos segundos pero rápidamente reacciono y volteo a ver qué había sucedido, topándo—Sí lo sabes —me dice poniendo una me con que sobre mí se encuentra una pe- cara de seguridad y a la vez de burla. queña joven con una sudadera negra de go—No se puede hablar contigo, me rro la cual simulaba unas orejas de gato y voy… —le digoy me levanto rumbo a donde gracias a la cual, en conjunto con la posición está mi amigo, pero ella se levanta también y no permite verle la cara—. ¿Qué diablos comienza a caminar detrás de mí—. ¿Y ahora haces?, ¿quítate de encima? —le grito. por qué me sigues? —¡No! —me grita con una dulce pero —¿Por qué no he de seguirte? a la vez infantil voz. —¡Porque no!

@Ziz Rananim

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Así discutiendo con ella regreso a donde está mi compañero. —¿Qué sucedió ahí y quién es ella? — pregunta mi amigo con un marcado tono de burla y aquella joven se esconde detrás de mí sujetándose de mi ropa. —No lo sé, pero parece que no se irá, bueno tarde o temprano se tiene que ir a sus clases, así que solamente hay que ignorarla —le digo sin preocuparme mucho. Y realmente esperaba que fuera así, pero parece que al final no será así ya que lleva entrando todo el día a mis clases conmigo en estatus de oyente. Con su molesta presencia a mi lado, termina mi día escolar y así comienzo a caminar rumbo al salón donde está uno de los clubes culturales al que suelo ir. —¿En serio no dejarás de seguirme? —le pregunto, ya resignado de cierta manera a su presencia. —No, hasta que recuerdes quién soy. —¡Que no sé quién eres! —le grito ya un tanto desesperado y otros alumnos que van pasando a nuestro lado me miran con mala cara así que sólo suspiro—. Vez lo que provocas, arruinarás mi imagen — le digo aunque realmente no le de mucha importancia a lo que llaman «imagen». Así finalmente llegamos al salón del club cultural al que suelo ir, pero justamente antes de entrar siento un fuerte golpe en mi espalda que me hace perder el equilibrio y logra que ambos —tanto aquella joven como yo— caigamos al suelo. Alzo rápidamente mi cabeza para ver que había sucedido y me encuentro con la misma joven que había visto por la mañana, mostrándose claramente agitada de tanto correr. —¡No es justo! ¿Cómo lo encontraste primero? —dice dirigiéndose a la joven con sudadera de gato, la cual se levanta rápidamente. —¡Te he ganado! —grita aquélla de una forma un tanto infantil. —En serio, ¿quiénes son ustedes? —gritó mostrándome claramente molesto mientras me levanto.

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—Muy mal, muy mal. Pequeño Iker — dice aquella joven de cabello marrón—. ¿Cómo no te acuerdas de nosotras? Yo soy Rossana Herce y esta pequeña es HeddaLeniz, pero le gusta que le digan «Neko», ya sabes con eso de que es medio otaku y todo eso. ¿Seguro que no te acuerdas de nosotras? Guardo silencio y me tranquilizo, mi mente comienza a divagar, recuerdos difusos vuelven. «Es una promesa», suena en mi mente.



- Prólogo -

la alarma de mi celular. El paisaje color naranja que cubría una carretera y un sembradío bañado por la luz del atardecer se disuelve en mi mente. Me levanto agitada, tomo el celular de la mesa al lado de mi cama y presioEl frio viento del norte hace que vuele mi ca- no rápidamente el botón de apagado. bello mientras corro. Debo huir. Mis lágrimas se vuelven un rastro en el pavimento, caen al Mi respiración se ha vuelto irregular. ¡Maldición! ¡Es la octava vez que tengo ese suelo, llevadas por el viento. sueño! Todo desde que comencé a ver ese —¡Sofía! –grita aquel chico, oyéndose agita- estúpido canal de novelas clásicas con mi do. ¿Me ha seguido desde la escuela? madre. No tenía idea de la calidad de actuación existente en la televisión mexicana antes —Tú… –pronuncio mientras me detengo en de que yo naciera. seco, sorprendida. ¡Maldita seas madre! ¿Cómo se te ocurre darAprieto mis puños y mis labios intentando le una dosis de deseo amoroso a una hija contener las lágrimas. Levanto la cabeza al adolecente compuesta de 95% feromonas? cielo, mamá me ha dicho que es imposible Bueno, la temática principal de todo medio llorar con la mirada al cielo. de entretenimiento es el apasionante amor entre un hombre y una mujer. ¡Vamos, que —¡Es mentira! –digo mientras las lágrimas hasta los ogros consiguen princesas! brotan sin cesar.

Cómo si fuera el primer día

Mi cabeza sigue sobre la almohada. Con la mirada al techo sobre aquel fondo blanco Giro un poco la cabeza, cuidando no mirar a que no lograba darme ningún consejo. Quizás deba formular alguna pregunta en los ojos a ese idiota. ―Yahoo! Preguntas‖ o alguien como yo ya lo —¿Que si estoy bien? –pronuncio furiosa –. haya hecho y tenga respuestas, esperándo¿Es lo único que puedes decirme después de me. aparecer aquí? —Eres patética… –me susurro mordiéndome —No, me alegra. Yo… te he extrañado. los labios. —¿Eh?, Sofía… ¿estás bien?

—¿En serio? –digo apenada, mientras siento El teléfono vuelve a sonar. Estoy a nada de como la sangre sube a mis mejillas y me son- lanzarlo por la ventana cuando noto que se roja. trata de una llamada entrante. Mientras acomodo mi cabello hacia atrás de >>SHARON VALDÉZ<< mi oreja, el chico da un par de pasos hacia —Oh… es Sharon –susurro algo cansada. Esmí. tiro mi cuerpo sin levantarme de la cama y —Sofía. Yo… te amo. presiono ese botón verde en el móvil –. ¿Qué pasa? —Yo también… —¡Oye! ¿Qué forma de contestar el teléfono Siento como el nombre del chico está a nada es esa? de salir de mi boca y al mismo tiempo regresa a mi interior con el estrepitoso sonido de

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—¡Cállate... agradece que te he contestado! —Estaré bien. Adiós. –Termino por colgarle ¿Qué es lo que quieres, Sharon? para levantarme de la cama y posar frente al espejo. Sharon es mi amiga desde hace tiempo. Creo que apenas un semestre. Lo molesto es que a Mi cuerpo es pequeño. Debo agradecer por mi veces se comporta como mi madre. Algo que marcada y pequeña cadera, pero… toco mis me fastidia bastante, ya que ni mi madre se pequeños y apenas notables pechos. Quisiera preocupa tanto por mí. que fuesen más grandes. Mi cabello es justo del largo que yo lo quiero, cae hasta mi espal—Sólo quería asegurarme de que supieras da. Si me lo pusiera por delante quizás llegaría que hoy es el regreso a clases. ¿Estás al tan- hasta mi ombligo. Lo malo es su horrible color to? naranja, parecido al de las zanahorias. Algún —Sí, sí. Por algo me he puesto la alarma. Las defecto de la combinación del hermoso color vacaciones se han ido muy pronto. ¿No lo cre- rojo natural de mi madre y el castaño cenizo en mi padre dentro de mis genes. Entre mi es? tristeza encuentro mi ropa de la escuela ex—Seguro, para ti –dice Sharon con un tono di- tendida sobre mi escritorio. Planchada y lista para el primer día con un olor a cereza. vertido. —¿De qué hablas? –¡He notado tu sarcasmo —¡Cuando quieres te esmeras madre! –Digo Sharon! Mis mejillas infladas y mis cejas frun- antes de leer la pequeña nota sobre mi ropa. cidas muestran mi enojo. >>SÓLO POR HOY, NO TE ACOSTUMBRES<< —Pues… ya sabes. Típico. No esperaba más de alguien que apenas recuerda alimentarme. Sin más, me pongo —¡Explícate! el uniforme. Dos piezas; falda y playera tipo —Estuviste dos semanas extra… presentando polo con detalles en verde. Odio los uniforlos exámenes finales. mes. ¿Por qué no puede ser la vestimenta de libre elección como en las escuelas america—¡No es mi culpa que las clases sean tan difínas? Digo… de por si México ya imita muchos ciles! Además, ¡no me compares, que tu tamestándares Estadounidenses, no estaría mal bién has reprobado una clase! algunas reformas educativas. —¡Sólo Expresión y por culpa tuya! ¡Era un traEl naranja de mi cabello, el blanco de la playebajo en equipo! ra y los cuadros verdes de mi falda me hacen ¡Siempre hace eso! Me echa la culpa a mí, parecer la bandera en movimiento. ¡Dios, me fastidia tanto mi apariencia! siendo que yo no… espera… —Tienes razón… Discúlpame –digo algo ape- Debí preguntarle a Sharon como debía peinar hoy mi cabello. Lo sostengo hacia atrás simunada, cubriendo mi cabeza con las sabanas. lando una cola de caballo. El espejo me dice –Ahh. Olvidalo, Sofí. Nos veremos en la escue- que es mala idea. Quizás dos coletas con mis la –dice Sharon con el tono dulce de siempre – manos. Tampoco es buena opción. ¡Oh espejo! . No te distraigas y llega a la escuela sin daño, ¿Suelto? ¿entendido? –¿Qué opinas, chica? –Le pregunto a mi reflejo Me cree una boba. en el espejo. –¿Encontraremos a ese chico cuyo nombre nunca alcanzamos a pronunciar?

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¡Historia Ganadora!

Dante Locke: Es para mi un honor presentar la historia ganadora de nuestro primer encuentro con el grupo ―Jóvenes Escritores‖ en Facebook. Leticia Ahumada Yustos es la autora de esta bella historia que nos sorprendió por completo a todos los jueces. Por decisión unánime está historia fue la ganadora, pues completó muy bien nuestras expectativas, además de ofrecer una visión a lo que podría ser considerado un tipo tabú del amor; el romance que se da en las redes sociales con personas que están lejos. De una forma inteligente, interesante y ligera está historia es conmovedora. Esperemos la disfruten tanto como nosotros.


E

l día está siendo agotador. Llevo toda la mañana y parte de la tarde delante de la pantalla del ordenador, corrigiendo sucesiones interminables de palabras que se entrelazan contando la historia de unos enamorados. Me detengo al comienzo de la penúltima página y me froto los ojos con los dedos. Suspiro. Ojalá todo fuese tan simple como en estas historias. Pero cuando eres editor y llevas la mitad de tu vida leyendo historias sabes que no son más que eso, cuentos, sueños, esperanzas que los autores convierten en palabras. Bip En la barra de inicio se ilumina el icono de internet. Muevo el ratón hasta la ventana:

Julia: la has leído? Yo: me queda poco para terminar. Julia: d acuerdo, te dejo continuar Yo: hasta el momento la cosa va bien, sólo he encontrado un par de faltas de ortografía. Julia: =) esta vez e tenido cuidado Yo: buen trabajo zafi Julia: eso dímelo cuando termines

Después de tantos años ya no te sientes estúpido viendo el reflejo de tu sonrisa en la pantalla. Julia es una mujer con mucho carácter, decidida, trabajadora y un diamante en bruto escribiendo que voy puliendo poco a poco, aunque por el color de sus ojos la empecé a llamar zafiro y se quedó en ―zafi‖. No he tenido la oportunidad de conocerla en persona porque nos separan miles y miles de kilómetros de agua, pero por las fotos de su perfil añadiría a esa descripción su belleza, aunque ella se niegue a aceptarlo cuando hablamos del tema. Deslizo el ratón por la mesa para volver al documento. Giro y giro la rueda hasta llegar al final.

Agradecimientos: Para Mario, con amor Su firma con mi nombre borda todos sus escritos, pero solo mi corazón sabe cuanto ansío que esas palabras se hagan realidad. Si mis amigos lo supiesen dirían que me estoy ablandando, y mi ex-mujer se alegraría de saber que aún queda algo de romanticismo en mí. Pero será mi amor platónico jamás contado. Con el dedo corazón vuelvo a subir hasta el comienzo, repasando rápidamente cada párrafo. Un clic en guardar y cierro.

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Yo: Precioso. Julia: :D me alegra q te guste, crees q lo publicarán pronto? Yo: no lo se, no creo zafi. Ya están cerradas todas las publicaciones para este mes. Julia: vaya..... Yo: Pero intentaré hacerte un hueco Julia: eres un encanto =) Yo: Si me disculpas, tengo que seguir con otro relato Julia: Claro, claro, no te preocupes Alcanzo la pipa del cenicero y la relleno con el tabaco que descansa sobre la mesa. Mi ex-mujer odiaba que fumase en el estudio, decía que los muebles terminarían impregnándose de olor y que me hacía parecer viejo, pero simplemente me gusta y el olor no me molesta. Prendo una cerrilla y aspiro lentamente. Alzo la barbilla y dejo escapar el blanco humo de mis pulmones. Repaso mentalmente el plan que hice esta mañana, no me apetece hacer nada. Siempre me pasa lo mismo tras leer sus historias, un sentimiento de malestar inunda mi cuerpo. Pensar que todas esas palabras tienen parte de verdad, han sucedido más o menos igual, y la protagonista de todas ellas es Julia me nubla la cordura. Hay quien diría que son celos, celos por no poder formar parte de todas esas experiencias, pero no quiero reconocerlo, me niego en rotundo. Todos hemos pasado por esa época en la vida en la que buscamos quiénes somos en los demás, proyectamos nuestras felicidad en la suya. En palabras de mi ex-mujer, la gente así no tiene bien amueblada la cabeza, actúa por instintos sin pensar en las consecuencias. Y es posible que eso sea lo

que me atrae de Julia, el contraste con mi ex-mujer, una mujer adulta, independiente, que no dudó ni un segundo en abandonarme cuando diagnosticó mi obsesión por el trabajo, y se llevó a los niños a una ciudad vecina. En cierto modo se lo agradezco, no se me dan bien los críos. Pero en el momento en que desapareció de mi vida una doble sensación de vacío y libertad arropó todo mi ser, hundiéndolo en las tinieblas. Julia fue como una luz, una estrella que volvió a iluminarme el camino, y creo que puedo permitirme el lujo de pensar que yo también soy su estrella. Sonrío mientras lanzo anillos de humo hacia el techo y hago girar la silla. La detengo bruscamente sujetándome con las dos manos en la mesa. La pipa por poco se me escapa de los labios, pero he logrado mantenerla sujeta gracias a los dientes. Con cuidado de que no se caiga la ceniza, la apoyo sobre el cenicero y observo la claridad a través de la persiana. Quedan pocas horas para que el sol se oculte, mientras en la ciudad de Julia se encuentra en su punto más alto. Muevo el ratón sobre la alfombrilla para devolver la luz al cuarto. El icono de internet parpadea.


Julia: x cierto, tengo una noticia q darte Hace más de cinco minutos que me lo ha enviado y no me he dado cuenta. Chasqueo la lengua y suplico que no esté molesta mientras tecleo la respuesta. Aunque sé que no lo estará, posiblemente me haya enfadado yo más veces conmigo mismo por tardar en responder que ella conmigo. Julia: Claro, claro, no te preocupes x cierto, tengo una noticia que darte Yo: Dime Julia: no le pongas tanto entusiasmo, que me asustas :P Yo: ¿vas a contármelo o no? Julia: oy me an dado el título!!!!! ya e terminado la carrera :D Yo: Enhorabuena!! sabía que lo conseguirías zafi Julia: Ya, quién lo diría después de tener que recuperar dos asignaturas en un año XP Su ironía mezclada con el humor consigue que me olvide del malestar y mi cabeza deje de dar vueltas.

Yo: no te quites mérito ahora acabas de entrar en una nueva etapa de tu vida Julia: vale, vale, no me des la lata con eso q pareces mi padre Yo: podría serlo Julia: venga ya no eres tan viejo solo me sacas 12 años Yo: a veces parecen más Julia Si, en stos momentos q aces d padre Yo: Yo me refería más bien a cuando te enrabietas como una niña cuando te corrijo

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Julia: Eres más viejo q yo, deberias saber mejor q otros q a las mujeres no nos gusta q nos corrijan :P Yo: Quizá por eso me abandonó mi mujer Julia: Nah, esa es idiota Siempre se enfada cuando la nombro, y reconozco que a veces lo hago a posta, me gusta verla defenderme, bueno, leerlo. Julia: Eres un hombre increible, una persona genial. No es justo q x un par d defectos invisibles se large y tu la creas no todas las mujeres piensan como ella Yo: Y tú que piensas? Mis dedos han escrito lo que estaba pensado sin antes haberlo meditado, pero ya no puedo hacer nada, me remuevo nervioso en el asiento esperando su respuesta, o su silencio, para actuar. Julia: …yo…bueno creo q está clara mi opinión eres una persona excepcional :) ya te lo e dicho mil veces Yo: Nunca está de más escucharlo Julia: ya q hablamos d mujeres alguna en el horizonte? Yo: Como no quieras que te hable de la anciana que riega las flores de enfrente todas las mañanas.... Julia: Tienes q salir más Yo: Lo haré Julia: Siempre dices lo mismo y al final nada Yo: Jajajajajajaja cosas que pasan Julia: X allí ya debe d ser casi d noche venga ponte el traje d fiesta y sal a darlo todo Yo: Prefiero estar en casa hablando contigo


Odio mi manía de completar las frases, sin cabos sueltos, con todos los complementos. A ella le gusta, dice que es porque soy sincero y no me gusta que se me malinterprete. Pero en estas ocasiones delata demasiado mis sentimientos. Yo: Y aún tengo trabajo pendiente

Completo para intentar disimular

Julia: Si tuvieses trabajo no estaríamos ablando y si yo soy el problema tiene rapida solución me desconecto si prometes salir y acerte fotos q lo prueben claro Yo: Tu no eres el problema, tonta hoy no me apetece Julia: Ni ayer ni mñn Yo: Ya sabes que soy un hombre de costumbres y rutinas Julia: Podrías cambiarlas Yo: Después de tanto tiempo realizándolos no merece la pena Julia: Te das x vencido antes d intentarlo Yo: Hay cosas que se sabe cómo terminaran antes de comenzar Julia: Discrepo es una excusa para no enfrentarte a la realidad si d verdad quieres algo, cambiar o lo q sea, luchas x conseguirlo Yo: Hay cosas que no se pueden cambiar Julia: Claro, el mar siempre sera azul pero las personas son diferents stamos n constante cambio tenemos el poder d cambiar Yo: Pero eso no significa que queramos o debamos hacerlo cada uno es libre de elegir y llega un momento en el que esa elección no merece la pena ser planteada, porque aunque cambies, la realidad seguirá siendo la misma Julia Aaarg es imposible hablar contigo algun día ganare alguna d nuestras discusiones? Yo: Jajajajajajajja no Julia: Gracias x los animos ¬¬ pero seguire pensando lo contrario :P Yo: Jajajaja me parece bien eres tú la que se lo toma como una pelea

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Julia: Eres tú el q siempre m contradice Yo: No siempre Julia: ¬¬ lo acabas d hacer Yo: Jajajajajja y tu querías que me perdiese esta emocionante batalla por salir a la calle a perder el tiempo Julia: No es perder el tiempo siempre eres tu el q me escucha ls problemas y rayadas si salieses tendrias algo q contar y me sentiria util x una vez Yo: Ya lo eres Julia: Como? Yo: Déjame acabar y siempre te digo lo mismo no me importa escucharte Julia: Eres un encanto :3 y luego dices q eres mala persona... no te merezco Yo: Claro que sí soy yo el que no se merece ser el patrocinador de tan hermosa escritora Julia: Vale, vale, ahí te as pasado ya sabes q no lo soy Yo: Entonces yo tampoco soy un encanto Julia: ¬¬ ya lo stas aciendo otra vez Yo: El que? Julia: Ganar la discusión Yo: Jajajajajajajaja será que te estas dejando ganar Julia: X supuesto :D nah, en verdad los dos sabemos q tu orgullo t impide perder :P Yo: Jajajajaj en realidad no estamos discutiendo

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Julia: Claro, claro ahora no intentes q me sienta mejor Yo: Jajaja solo intercambiamos opiniones Julia: En las q termino dandote la razon Yo: Será porque la tengo Julia: no Esa negación tan rotunda, sin adornos ni continuación, despierta todas mis alarmas, algo he dicho que no la ha gustado. Yo: Lo siento Julia: x? Yo: No es mi intención llevarte la contraria Julia: No es por eso, no pasa nada es solo q… stoy cansada con la celebracion dl título y las llamadas no e parado n toda la mñn y estoy algo cansada con dolor d cabeza Yo: Has probado a dormir? Julia: No creo q vaya a servir d mucho XD Yo: Por intentarlo, que no quede una fiestera como tu debería poder soportar eso y mucho más Julia: Yo.... supongo que estoy cambiando Yo: No creo será la resaca Julia: No, q va, e entrado n esa nueva etapa d mi vida :P Parece que ya ha recuperado el ánimo, pero repasando mentalmente la conversación está claro que mi filosofía del cambio no la ha gustado por alguna razón que se me escapa ¿quizá tenga que ver con las mujeres de las que hablamos antes? ¿con tener una relación?... no lo sé

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Yo: Jajajajajaja es demasiado pronto como para que se noten los cambios Julia: Sto q va, como las pastillas dl medico? Se notan ls efectos poco a poco? Yo: Algo así pero empeora con los años Julia: Sin duda solo hay q verte a ti sin esperanzas ni ilusiones Yo: Vaya gracias Julia: Vamos, dime solo una cosa q te aga ilusion Yo: Hablar contigo Julia: Si, conmigo y con cualquiera esa no vale, otro Que equivocada está.... Yo: Mmmm estoy pensando Julia: Piensa, piensa Yo: Que tu libro se publique Julia: ¬¬ en serio? Podrias esforzat un poco mas piensa n algun sueño, no se, algo q t saq d la cama x las mñns Yo: El despertador Julia: ¬¬ idiota me referia a la razon para vivir puede ser verdad? x primera vez ganare una discusion contigo? :P Yo: Jajajaja lo dudo aún no me he puesto a pensar Aunque en verdad no me hace falta, tengo el mismo pensamiento en mente desde que la conozco

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Julia: Pues hazlo antes d q abra el champan para celebrar mi victoria Yo: Conocerte en persona Una mezcla de orgullo y romanticismo ha impulsado a actuar a mis dedos más rápido que mi mente. Julia: >///////< no me lo esperaba vaya… la verdad s q a mi tmb m gustaría conocerte tanto tiempo ablando y aún no emos brindado x nuestros exitos Yo: Son tuyos Julia: Sin tí no lo abria conseguido :) y aunq no te lo creas, esas historias no tendrían sentido sin ti Yo: Tampoco tienen tantas faltas Julia: No me refería a eso bueno, olvidalo da lo mismo ya as tenido q fastidiar mi victoria ¿A qué se referiría entonces? ¿acaso algunos d sus personajes es un reflejo de mi? ¿de lo que siente por mí? Si es que siente algo... Yo: Jajajajajaja tendrás que guardar el champán para otra ocasión Julia: Si, para cuando brindemos juntos Yo: Ese día tardará en llegar para entonces será un champán de calidad Julia: No tiene xq Yo: No tiene porque, qué? Julia: Tardar en llegar Yo: Es complicado Julia: Xq? Yo: La distancia Julia: Y? si ambos tenemos esa ilusión, xq no se va a cumplir?

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Yo: Bueno, hay bastantes razones para que así sea. La distancia la primera Julia: Tmb hay una razon para q no se cumpla pero claro el señor viejo y realista no lo ve así :P Yo: Ahora soy viejo? Su respuesta se demora más tiempo del necesario, y empiezo a pensar que la he hecho enfadar de verdad. Nervioso, vuelvo las cenizas de la pipa sin apartar los ojos de la pantalla, pronto necesitaré una calada si la cosa se complica. Julia: Nunca as dejado d serlo pero cada uno puede elegir la importancia q darle a esas razones para cumplir la ilusion Yo: Si, pero hay que ser realista con esas razones Julia: Buffffff eres un caso perdido vale miremos el mundo real Yo: Te gusta demasiado fantasear Julia: No tiene nada d malo Yo: No he dicho que lo tenga Julia: Creo q cada persona tiene un serie d propósitos en la vida y para llegar a cumplirlos hay q soñar y arriesgar Yo: Jugarte toda la vida a una carta puede acabar mal Julia: Y no hacerlo es aburrido y absurdo, es lo q da sentido a la vida Yo: No lo veo así pero bueno, ya está bien por hoy de filosofar No quiero tensar más la cuerda... Julia: Hablamos de sentimientos e ilusiones pero vale, ya me a qedado claro q sta nueva etapa es un rollo Yo: Jajajajja tampoco es para tanto es divertida a veces Julia: Repitemelo cuando cambie tu rutina y empieces a vivir la vida Yo: Las cosas no son tan sencillas

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Julia: No lo son xq tu no qieres q lo sean tengo q irme Yo: Huyes para no sufrir una nueva derrota? En un intento desesperado por relajar la tensión me doy cuenta de que es mi cuerpo el que está en una tensión absoluta, así que respiro profundamente y cierro un segundo los ojos. Julia: No, esta vez ganaré yo

El mensaje ha quedado grabado, pero la señal verde al lado de su nombre ha desaparecido, se ha desvanecido, se ha dado a la fuga dejándome con un montón de preguntas sin respuestas. Recojo con los dedos el resto del tabaco que queda sobre la mesa y lo meto con cuidado en la pipa, pero la mitad cae fuera, sobre mis pantalones. Maldigo en voz baja mi torpeza mientras mi cabeza juega a los acertijos con la conversación. En un acto ya automatizado por la repetición enciendo una cerilla y la acerco a la pipa, pero la llama está demasiado cerca de mi dedo. Un grito de dolor acompaña el golpe de la pipa contra el suelo. Suspiro para intentar serenarme. Dejo el mechero en la mesa, cierro el ordenador y me pongo de pie. Sacudo las cenizas del pantalón y voy a la cocina a por el recogedor. Es como si fuera un robot con el piloto automático encendido mientras el nombre de Julia se repite en mi mente. Me muerdo el labio inferior cuando termino de limpiar. No estoy en condiciones de hacer nada, mi cabeza está pensando por su cuenta, así que lo mejor será que al menos mi cuerpo descanse en la cama.

***

Después de pasar la noche en vela enredándome entre las sábanas, desconecto el despertador y, semidesnudo, entro descalzo al baño. El reflejo del es-

pejo me devuelve la imagen de un hombre al que ya le van pudiendo los años, las canas y arrugas ganan terreno sobre su piel. Detengo la caída del agua helada del grifo entre mis manos y refresco mi cara. No es suficiente para despejarme. Me desprendo de la única prenda que aún conservo y entro en la ducha, corriendo la cristalera, aislándome en una cápsula de vapor del resto del mundo. El agua caliente fluye por mi cuerpo hasta perderse por el desagüe mientras un mundo de vaho se atrinchera en el techo. Primero el champú, después el gel. Tras masajear mi cuerpo con toda una textura de olores, me seco con una toalla rápidamente. Hoy no tengo ningún compromiso, así que, como cada martes, saco los vaqueros del armario y los combino con una camiseta de colores y las deportivas. En la calle hace un precioso día de primavera, el sol brilla sobre las cabezas de miles de personas que ni siquiera se detienen a observarlo. Por suerte, yo no formo parte de ellos. Antes de salir compruebo el correo, no hay ningún mensaje. Todo el mundo que me conoce sabe que hoy es mi día libre, incluida Julia. Abro el cajón del escritorio y muevo la mano en busca de mi vieja libreta, no es más que un cuaderno con las ta-

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pas descoloridas y un boli enganchado entre las anillas con el que escribo una vieja historia que nunca terminaré. Bajo las escaleras saltando los escalones de dos en dos. Puede que esté empezando a estar mayor pero vivir en un primero y coger el ascensor me parece un pecado, a menos que estés de mudanza. Desdichado de mí, el día que me trasladé estaba fuera de servicio y me toco subir y bajar un millón de veces cargando con las cosas. No soy un tipo con suerte. Los vecinos se paraban a observarme y me dejaban pasar, pero el miedo a lo desconocido, a su nuevo vecino, provocó que nadie se ofreciese a ayudarme. Con todas estas reflexiones camino por la calle, sorteando niños y ancianos. Solo hay una cosa que me molesta más que las faltas de ortografía, y es que se me coloque delante una persona que anda despacio. No lo soporto, necesito sobrepasarla para poder ir a mi ritmo habitual. Tampoco es que vaya corriendo, pero hay que aprovechar el día, con energía y velocidad. Intento ocupar mi mente con cualquier pensamiento antes que volver al delirio de la noche. Después de detenerme en un par de semáforos tuerzo a la izquierda y los bloques de apartamentos van desapareciendo, convirtiéndose en árboles entre los que discurre un viejo camino de piedra. La circulación está prohibida, y poco a poco el sonido de la ciudad es tapado por el piar de los pájaros. El viento arrastra su canto entre las ramas de los árboles mientras asciendo por una escalera de piedra hacia la cima de un pequeño montículo, mirador lo llamarían algunos, para mi es mi pequeño paraíso. Siempre que necesito descansar, pensar, cada martes, vengo aquí.

Y es normal creer que un sitio así, tal y como lo describo, el paraíso de la paz y tranquilidad con unas vistas increíbles de la ciudad, cubierto por un manto de hierba verde, estará abarrotado de turistas y niños, pero no es así, y ahí reside la magia de este lugar. La pequeña colina quedó en el olvido cuando construyeron el centro comercial. Y los ciento veinticuatro escalones que lo separan del suelo ahuyentan a cualquiera que quiera echarle una hojeada. Es el último páramo de la naturaleza que queda en la ciudad, y es solo para mí. Me detengo al final de la escalera y cojo aire, el aire más puro que respiraré en toda la semana. Justo debajo, la hora del recreo ha llegado para unos niños que salen en estampida hacia el patio de un colegio de tercera, con las porterías roídas por el óxido y las ventanas ennegrecidas. Los pisos avanzan hasta transformarse en imponentes rascacielos y después, arriba, mucho más arriba, el sol. Me vuelvo de espaldas a la gran esfera amarilla buscando el viejo banco de madera al que no le faltará mucho para tener la huella de mi trasero. Pero la sonrisa se desdibuja de mi rostro cuando veo que está ocupado. Una joven de cabello marrón, largo y rizado, está sentada en mi sitio. En la explanada de tierra cuatro árboles se intercalan entre tres bancos más, cada uno mirando hacia un punto cardinal. Por eso sé que no será lo mismo sentarme en otro, la frescura del viento del norte junto al calor del sol es lo que he venido buscando. Camino hacia la chica desconocida. Una maleta descansa de pie a su lado y un sombrero de tela blanco tapa su rostro. Cuando llego a su altura descubro que las curvas del vestido son aún más bonitas por delante y que tiene un libro entre las manos. Lo reconozco al instante, es mi última publicación, bueno corrección,

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una historia de amor adolescente. No la quedan más de diez páginas para terminar, así que me siento a su lado en el otro lado del bando y la observo en silencio. Creo advertir un pequeño cambio de posición en su cara, pero no he conseguido ver su rostro. Quizá la esté incomodando, por lo que desvío la mirada hacia el horizonte un momento. Un soplo de aire ondea su vestido sobre sus piernas. Sonrío al fijarme en el detalle de su calzado. No lleva tacones ni sandalias que conjunten con el traje, en su lugar hay unas llamativas deportivas negras y moradas abrochadas sobre un par de calcetines a rallas blancas y negras. Una nueva ráfaga de aire aún más fuerte mueve las páginas del libro, que ella detiene con su mano, pero no la da tiempo a alcanzar su sombrero, que vuela hacia el cielo para reunirse con el sol y deja al descubierto los zafiros más bellos del mundo. Cierra el libro y retira un mechón rizado de su cara, enganchándoselo en la oreja. No soy capaz de reaccionar cuando me mira a los ojos y me quedo quieto al verla inclinarse sobre mí. Apoya su mano sobre la mía, posa un beso en mis labios y susurra en mi oreja. –Esta vez gano yo. Puedo sentir su corazón acelerado a través de la mano. Incapaz de pronunciar palabra alguna, la abrazo y dejo escapar su nombre en un susurro. -Julia…

Notas Finales Zona Fantasma:

A pesar de la que la ganadora del concurso de Jóvenes Escritores fue Leticia Ahumada Yustos con su asombrosa historia «Aires de Cambio», nosotros como staff de Zona Fantasma nos hemos tomado la libertad de hacer las menciones honorificas necesarias, siendo en este caso solamente una y esa es para la historia «Mi primer San Valentín» de Dane Darkkness. Ya que es una historia con calidad argumentativa y narrativa realmente buenas y que de igual manera merece aparecer en este número conmemorativo a San Valentín. Disfrútenla.


- Staff Dirección Editorial Dante Locke (Fabian Ramos) Editor Androide520 (André Espinoza) Director Creativo y de Arte Dante Locke (Fabian Ramos)

Escritores Blue! “Faraon90” Es una promesa Midnigthmoon (Dario Carazo) Delta City (Y derivados) “DrakeEpsilon” ¡Ponme Atención! Dante Locke Aires de Cambio Leticia Ahumada Yustos

Arte ¡Ponme Atención! Lunática (Marta Navarro) Blue! “Zesh2”

¡Tremendo Éxito! ¿Ya han leído nuestra edición principal? ¡Ha tenido bastante éxito en estos 10 días de su salida! ¿Qué esperas para leerla? Promedio del Año 2012

Febrero: 2621

1472 lecturas


Página Final En primer lugar quiero saludarlos, y agradecer a Dante Locke, por publicar a la ganadora del 3th concurso Especial de San Valentin, de nuestro grupo Jóvenes Escritores de Facebook ideado por Joa Armando Cepeda y Luis Maria Sedano.

vida, cada uno se apropia de las historias como si de ellos se tratase. Por mi parte creo que para escribir eso mismo hay que hacer, adueñarse y colocarse precisamente en el lugar de los personajes, para así lograr que los lectores logren entrar, hasta recrear esa historia mientras la están Es un gran placer escribir estas palabras para leyendo. esta revista ya que posee más de 3000 lecturas mensuales, espero que sea de su agrado la his- Pero de igual manera quiero felicitar a los partitoria de una de los tantos y talentosos miembros cipantes que enviaron sus relatos a este concurde nuestro grupo. so, pero que no resultaron ser ganadores. A todos les agradezco haberlo hecho, ya que sus Gracias a los 4 jurados que junto a mi debatimos historias fueron muy buenas, y admiro la faciliy escogimos a los tres ganadores: dad y el esfuerzo que implementaron para sentarse un día y escribir una historia para concurEn el 1º lugar del concurso de este año, es ocu- sar en este evento, quiero que sepan que sus pado por Leticia Ahumada Yustos con ―Aires de historias fueron geniales pero no alcanzaron a cambio‖. Una gran historia que se apropia del ser ganadoras porque creímos que era bueno siglo XXI utilizando a las redes sociales como destacar a estos tres concursantes ya que en argumento, una perfecta manera de explicar y sus historias encontramos varias características detallar las situaciones del protagonista. Una las cuales nos resultaron muy buenas y hasta gran historia. incluso únicas. Pero en otras palabras cada escritor es único ya que posee su propia manera y En el 2º lugar Dane Darkkness con ―Mi Primer estilo de escritura. San Valentin‖. Una historia muy buena, llena de situaciones cotidianas por las que pasan los Ya concluyendo con mis palabras, vuelvo a agraadolescentes, cuando se acerca San Valentin, decer la oportunidad de dar a conocer a los tres una historia bien narrada que al leerla logras ex- ganadores de nuestro concurso, espero que esperimentar varias emociones, debido a los suce- ta no sea la única vez en la que podamos comsos por los que transcurre la protagonista. Una partir el talento y este arte de escribir con ustehistoria que demuestra que a veces las personas des lectores y con esta revista. que se encuentran siempre a tú lado son las que estarán contigo siempre y hasta incluso serán En fin espero que les gusten estas historias y parte de tu vida. logren rescatar todo lo que los autores intentaron transmitir mediante sus historias. El 3º lugar es ocupado por Grethel Salcedo Garayar con ―Separados por la vida Unidos por el ¡Es un hasta luego! ¡Y un hasta siempre! Recuerdo‖. Una historia llena de sentimientos, amistad, amor, una historia que logra hacerte Lorena Cecy Meza administradora y creadora reflexionar que en San Valentin, no solo se cele- del Grupo Jóvenes Escritores de Facebook. bra el día de los enamorados, sino también el día de la amistad, que al fin y acabo es amor hacia otras personas. Cada historia se clasifica por el estilo propio de los escritores, ya que en cada una relacionan al Día de San Valentin en diferentes aspectos de la



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