Desde abajo y a la izquierda
Balance del conflicto social durante mayo-agosto del 2008 Luís Salazar∗ Introducción Aspectos de la situación nacional e internacional Tres situaciones marcan el rumbo de la dinámica mundial durante este período: la continuación de la crisis financiera internacional, el conflicto ruso-georgiano en el Cáucaso, y el referendo revocatorio del 10 de agosto en Bolivia. Los planes estadounidenses de tender un cerco cada vez más estrecho a Rusia y a China, buscando controlar las estratégicas zonas de producción y distribución de combustibles, a través de acuerdos con varias ex repúblicas soviéticas, motivó la reacción de Rusia que realizó una rápida y victoriosa ofensiva sobre Georgia. El conflicto en torno a Osetia del Sur y Abjasia es sólo el detonante de un conflicto que envuelve problemas más profundos. Lo cierto es que la zona donde se produjeron los enfrentamientos posee una importancia geoestratégica económica y militar para los planes de expansionismo y dominación mundial de los EEUU. Incluso, en medio del conflicto ruso-georgiano, se anunció la firma de un acuerdo entre los EEUU y Polonia para establecer en territorio polaco un escudo antimisiles que ha suscitado la férrea oposición de Rusia. Nos parece que la reacción rusa al avance norteamericano en esa región coloca en una situación difícil los planes norteamericanos. Con razón ya se está hablando de una segunda Guerra Fría. Bolivia constituye hoy día el escenario en disputa de dos estrategias: la de los EEUU y de las clases dominantes bolivianas, y las del movimiento social y los sectores progresistas bolivianos y latinoamericanos. La última batalla acaba de producirse el pasado 10 de agosto durante el referendo revocatorio. Los resultados del mismo apuntan al crecimiento de la hegemonía del proyecto popular, encabezado por Evo Morales, pero, también, a la consolidación de un núcleo duro de apoyo a la derecha autonomista, encabezada por los prefectos de los departamentos de la media luna. Si bien el sector popular ha legitimado nueva vez su proyecto a través del referendo, no es menos cierto que quienes han asumido la ofensiva en las calles, en las últimas semanas, han sido la derecha y sus grupos de choque. Las organizaciones indígenas y campesinas, obreras, y de pobladores se han replegado de las plazas y calles y le han dejado el camino abierto a la ofensiva derechista.
el autor es militante revolucionario
1
En el plano nacional, durante el segundo cuatrimestre del año, el nudo fundamental de los acontecimientos ha estado centrado en la política económica gubernamental, las diferencias del empresariado con esta y las consecuencias sociales que dicha política genera en los sectores populares. DINAMICA DE LAS LUCHAS SOCIALES DURANTE EL PERIODO Conflictos regionales y nacionales Las acciones registradas durante el segundo cuatrimestre del año 2008 suman 79 en total, frente a 70 del cuatrimestre anterior; sin embargo, se mantiene por debajo de las 83 acciones registradas en igual período de año 2007. El promedio de acciones por mes fue de 19,75 acciones. Lo más relevante a destacar es que durante los meses de mayo a agosto se fue produciendo un incremento sostenido de las movilizaciones populares; lo cual podría indicar el inicio de un ciclo de ascenso de la conflictividad social. Según los registros por regiones, la Región Norte alcanzó 46 acciones (58%); en el Gran Santo Domingo (el Distrito Nacional más la Provincia Santo Domingo) se registraron 20 acciones (25%); Región Suroeste: 7(9%); Región Sueste: 3 (4%). Se mantiene igual proporción en relación al período anterior. A nivel nacional, se registraron solamente 3 acontecimientos (4%), muy por debajo de las 8 acciones de lucha que se registraron durante los meses de enero a abril. Período: mayo-agosto 2008 REGIONES Mayo Junio Julio Agosto Total % Región Norte 1 91 14 22 46 58 Región Sureste 22 1 3 4 Gran Santo Domingo 3 3 6 8 20 25 Región Suroeste 43 2 1 7 9 4 Nacionales 3 3 4 Total 6 16 22 36 79 100 Período: Enero-Abril 2008 REGIONES Enero Febrero Marzo Abril Total % Región Norte 8 10 4 9 31 44 Región Sureste 1 1 1 1 4 6 Gran Santo Domingo 6 5 4 5 20 29 Región Suroeste 3 1 2 1 7 10 Nacionales∗
15
26
57
8
11
1
Incluye una huelga del CMD que abarcó todas las provincias de la región Norte. Uno de estos 5 registros es un paro regional del CMD que abarcó a todas las provincias del Este del país. 3 Incluye huelga regional del CMD 4 Incluye una huelga nacional de enfermeras y una huelga nacional de médicos. 2
5
Paralización de los hospitales públicos por parte del Colegio Médico Dominicano (CMD) Dos paralizaciones del CMD 7 Corresponde a dos actividades nacionales de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP, dos nuevas paralizaciones del CMD y el paro nacional convocado por el Foro Social Alternativo. 6
2
La movilización por sectores sociales Los sectores sociales que, según nuestros registros, protagonizaron la mayoría de los procesos de movilización popular fueron: los pobladores (38 acciones; 48%); los esfuerzos de coordinación multisectorial (25; 32%); los médicos (8; 10%). De estos tres sectores, solo los médicos han bajado absoluta y porcentualmente en relación al período anterior; sin embargo, es este sector el que figura a la vanguardia de las acciones a nivel nacional y regional en lo que va de año. El sector magisterial y los jóvenes y estudiantes han disminuido significativamente su participación individual en los conflictos aunque estos sectores, tradicionalmente, participan en los esfuerzos de carácter multisectorial. Período: mayo-agosto 2008 SECTORES SOCIALES Mayo Junio Julio Agosto Total Pobladores 6 13 19 38 Estudiantes/Jóvenes 1 1 1 3 Maestros 1 1 Médicos 1 3 4 8 Multisectoriales 1 6 8 10 25 Desalojados 2 2 Enfermeras 2 2 Total 6 16 22 36 79 Enero-Abril 2008 SECTORES SOCIALES Enero Febrero Marzo Abril
Transportistas Obreros Campesinos Pobladores Estudiantes/Jóvenes Maestros Médicos Mujeres Multisectoriales Desalojados Empleados aeroportuarios Damnificados Motoconchistas
1 1
1 3 1 4 2 2 1
6 2 3
5 1 2 2 1
Total
1 4
9
2 3 1 2
3 5 3
Total 3 4 1 23 4 10 9 1 10 1 2 2 1 70
Los métodos de lucha más usados La distribución de los métodos de lucha más usados conserva en el mismo orden que se produjo en el primer cuatrimestre del 2008, aunque las cifras para cada uno puedan cambiar: marchas y movilizaciones, 42 registros; vigilias y piquetes, 15; bloqueos de calles y carreteras, 10; y las huelgas en los centros de trabajos y los paros barriales, 9 registros para cada una de estas modalidades de lucha. 3
Período: mayo-agosto 2008 MÉTODOS DE LUCHA Mayo Junio Julio Agosto Total Huelgas8 3 2 4 9 Paros barriales9 4 3 2 9 Marchas 2 2 14 24 42 Vigilias/piquetes 1 8 3 3 15 Bloqueos 1 6 3 10 Periodo Enero-Abril 2008 MÉTODOS DE LUCHA Enero Febrero Marzo Abril Total Huelgas10 3 1 4 2 10 11 Paros barriales 2 3 2 5 12 Marchas 4 8 3 11 26 Vigilias/piquetes 7 5 3 4 19 Bloqueos 4 3 3 2 12 Las demandas más enarboladas El registro de las demandas es el que presenta mayores cambios en relación a informes anteriores. Lo primero es que la demanda de obras comunitarias (calles, escuelas, acueductos, viviendas, etc.), si bien continua siendo una de las más enarboladas, no ha ocupado el primer lugar en los proceso de lucha. La novedad del período ha sido el hecho de que las demandas de regularización de servicios han pasado a ocupar el primer lugar en las luchas populares del período. Se trata, específicamente, de las demandas de cese de los apagones y de normalización del servicio del agua. La lucha por el aumento de los salarios ocupa el segundo lugar en el número de registros. Período: mayo-agosto 2008 DEMANDAS Mayo Junio Julio Agosto Total Obras 6 8 3 17 Salarios/condiciones de trabajo 4 3 6 7 20 Salud 1 1 Educación 1 1 2 Empleo 1 1 Seg. Ciudadana 1 2 2 5 Costo de la vida 1 1 Apagones/tarifa eléctrica 2 12 21 35 Combustibles 1 1 2 Agua 2 7 5 14 Medio ambiente 1 1 2 Desalojos 1 1 Tierra/reforma agraria 1 1 Reubicación 2 1 3 Modificación ley hidrocarburos 1 1 8
Huelga: paralización de labores en el centro de trabajo. Paro: paralización de actividades en los barrios y comunidades. 10 Huelga: paralización de labores en el centro de trabajo. 11 Paro: paralización de actividades en los barrios y comunidades. 9
4
Enero-Abril 2008-05-28 DEMANDAS Obras Salarios/condiciones de trabajo Salud Educación DDHH Seg. Ciudadana Cancelaciones Costo de la vida Apagones/tarifa eléc. Combustibles Agua Medio ambiente Desalojos Subsidio al transporte Tierra Reclamos relacionados con los efectos sociales de la tormenta Noel y Olga Violencia intrafamiliar Reubicación Sun Land Apoyo a despedidos Agilización de inscripciones Otros
Enero 3 4
Febrero 6 3
Marzo 5 4
Abril 6 7
1
1 1 1 2
1 2 1 5 1 1 5 1 7 1 1 2 1 3
2 1 1
1
1 5 2 3 1
1
1
2
1 1 1
2
2
2
3 1 1
2
1
1 1 1
2 1 2
1
1 3 2 1
Total 20 18
Algunas conclusiones Los datos aportados por nuestros registros nos permiten suponer que podríamos estar en los inicios de un ciclo ascendente de las luchas sociales en el país. Este posible ascenso se sustenta en un nivel local y otro nacional. En el plano local, se han incrementado sustancialmente los procesos de lucha centrados en las demandas del cese de los apagones y la regularización del servicio de agua. Estos procesos han estado sustentados por organizaciones de pobladores y esfuerzos conjuntos donde confluyen distintos sectores (multisectoriales). Lo cual significa que a nivel local, estas demandas se han constituido en factores aglutinantes para sectores de diversa naturaleza. En el plano nacional, la demanda de aumento salarial se ha constituido en el pivote esencial de los procesos que se realizan a este nivel. Sin embargo, las dificultades para potenciar procesos unitarios entre sectores son mucho más grandes. Los asalariados estatales del sector salud (médicos y enfermeras) han sido 5
los protagonistas de esta demanda; sin embargo, no han sido capaces de presentar un frente unido que se convierta en polo de atracción para otros sectores que podrían sumarse a esta lucha. La capacidad para tender puentes con otros sectores es la principal debilidad de estos procesos. Empoderamiento y lucha social. El informe de Desarrollo Humano del PNUD. Recientemente, se puso a circular el Informe Sobre Desarrollo Humano Republica Dominicana 2008 “Desarrollo humano, una cuestión de poder”(de ahora en adelante IDH). Dada la composición del equipo multidisciplinarios que participó en su elaboración, así como a su rico contenido, este documento es un punto de apoyo inestimable para los que deseen conocer la situación social actual de nuestro país. En nuestro caso, nos interesa comentar algunos aspectos del mencionado informe que tocan directamente el trabajo de registro de las acciones del movimiento social, que realizamos desde hace dos años. La parte que nos interesa comentar es la que trata del llamado Índice Empoderamiento Colectivo y sus componentes. Es en esta parte del informe es donde encontramos algunos datos relacionados con la dinámica regional del movimiento social, que tiene relevancia para el trabajo que realizamos. Para los autores del IDH, el IEC “mide las capacidades de las personas de incidir en las decisiones que le afectan y de creación de capital social. Este índice recoge dos ámbitos de desempeño: primero, las libertades políticas, es decir, el alcance de los derechos. Segundo, el capital social, es decir, la capacidad de acción conjunta de la sociedad, los niveles de confianza, organización, movilización, pertenencia e inclusión social.” El IEC a su vez se divide en Índice de Empoderamiento Político (IEP) y en Índice de Empoderamiento Social (IES); siendo este último el que nos interesa enfocar. Según el IDH, “El empoderamiento social implica que el poder se acumule y construya desde la base de la pirámide social. Es utilizar los atributos individuales acumulados con fines colectivos. No es la simple suma de las capacidades individuales, sino la sinergia entre ellas lo que genera nuevas dinámicas y potencia las capacidades de la persona.” Y más adelante agrega: “Para este informe, capital social y empoderamiento social tienen un mismo significado. Son un intangible que estimula las relaciones de cooperación entre grupos humanos y fortalece un tipo de comportamiento propicio a la acción colectiva, a través de la reciprocidad, la confianza mutua entre personas, grupos y organizaciones.” El IES se subdivide, a su vez, en seis variables: equidad de género, confianza interpersonal, pertenencia, participación, movilización y confianza en las instituciones. Como podemos notar, la mayoría de estas variables están relacionadas con el grado de identidad y de integración de las personas que viven en una misma comunidad y el nivel de participación 6
activa y directa en los problemas y procesos de lucha comunes; factores que inciden de manera directa en el origen y desarrollo de los conflictos sociales. Los resultados que arroja el IDH en relación a estas variables son las siguientes: “El Sur registra los niveles más elevados de sentido de pertenencia y de confianza en las instituciones, pero los más bajos niveles de movilización y equidad de género. El Norte tiene los mayores niveles de equidad de género, participación, movilización y confianza interpersonal, pero es el de más bajo nivel en la confianza en las instituciones. La región Metropolitana registra el grado más bajo de pertenencia y confianza interpersonal, es el segundo más alto en equidad de género, participación y movilización, pero registra un nivel intermedio de confianza en las instituciones Finalmente, la región Este registra en general niveles bajos para cinco de los seis índices. Registra el grado más bajo de participación, aunque es la segunda región con mayor confianza en las instituciones. Los índices de movilización, pertenencia, equidad de género y confianza interpersonal son similares, pero bajos. Estos índices, aunque incompletos e insuficientes, presentan un panorama de los niveles de empoderamiento social en el territorio, siendo el Norte y el Sur las regiones del país con mayor tejido social, seguidas a gran distancia por la zona Metropolitana y el Este.” (Ver cuadro)
La aparición reiterada en todos nuestros informes, de la Región Norte como el área donde ocurren la mayoría de los conflictos sociales coincide plenamente con los hallazgos del IDH, donde se coloca a esta región como la de mayor empoderamiento social, colocado por encima, incluso de la media nacional. La nota discrepante, entre el IDH y nuestros registros, es lo relativo a la Región Sur. Según el IDH, esta región ocupa el segundo lugar en empoderamiento social; sin embargo, en nuestros informes la conflictividad en 7
esta región es una de las más bajas del país. Es posible que el alejamiento en relación a los grandes medios de comunicación incida en la escasa visibilización de los conflictos en esta zona. Hay que hacer notar que, pese a que se coloca a esta región en un segundo lugar en el IES, sus niveles de participación y de movilización son bajos. En relación a la participación, la Región Sur está por debajo de la Región Norte, de la Región Metropolitana y de la media nacional. En el caso de la movilización, la Región Sur está por debajo de todas las demás regiones y de la media nacional. Lo cual podría explicar, en alguna medida, la baja cantidad de registros de luchas sociales, realizados en esta zona. Resumiendo los hallazgos en relación a la Región Sur, según los resultados del IDH, en esta zona, pese a existir altos niveles de pertenencia, de confianza interpersonal y en las instituciones, se participa y se moviliza menos que las Regiones Norte y Metropolitana. El caso de la Región Metropolitana es el contrario. En el IDH, el IES está colocado en penúltimo lugar, sólo por encima de la Región Este. Por el contrario, en nuestros registros esta región ocupa el segundo lugar. Aquí la presencia de los principales medios de comunicación, sin lugar a dudas, juega un papel fundamental en la difusión de todos los procesos de movilización social que ocurren en esta área. Por el otro lado, por el nivel de participación ocupa el segundo lugar por regiones, sólo superado por la Región Norte y por la media nacional. En el caso del nivel de movilización sólo es rebasado por la Región Norte. Resumiendo, la región Metropolitana posee bajos índices de confianza interpersonal y en las instituciones, cero niveles de pertenencia, pero es uno de los lugares donde más se moviliza y se participa en las organizaciones comunitarias. Por otro lado, y de acuerdo a la tendencia de predominio de lo local/territorial que hemos reiterado en todos nuestros informes, el IDH señala: “El tipo de organizaciones cívicas en donde hay mayor participación es en los comités de mejoras para la comunidad, en los que el 6.9% de las personas encuestadas participa semanalmente. La encuesta DEMOS de 2004 confirma esta tendencia, ya que indica que la junta de vecinos es la modalidad organizativa que alcanzó el nivel de pertenencia más alto de todas las consideradas: el 19% de las personas entrevistadas dijo ser miembro activo o no tan activo de esta organización territorial. Al reagrupar las organizaciones por tipo, la mayoría de las personas es miembro de entidades de carácter territorial (25%) seguida por la membresía en organizaciones partidarias, deportivas, laborales, de padres y madres o de género. Esta cifra evidencia la importancia de lo local en la vida de las personas.” Nos satisface sobremanera que, al igual que los informes periódicos que elaboramos, también el IDH confirme plenamente esta característica del movimiento social dominicano. Lo cual significa que no andamos tan perdidos en el modesto esfuerzo que realizamos.
8