Sueño

B E B É Dormir como un

Aunque usemos la expresión “dormir como un bebé” para referirnos a dormir un buen puñado de horas, plácidamente y del tirón, la realidad es que la gran mayoría de los bebés no duermen así.

Los bebés son muy dormilones (duermen de media unas 16 - 18 horas al día) pero sus ciclos de sueño son muy distintos a los de los adultos. Aunque se despierten frecuentemente durante la noche, tengan desvelos a las 3am o abran los ojitos en cuanto los acerquemos a su cuna o cochecito (el famoso síndrome de la cuna con pinchos), la realidad es que dormir así también es dormir como un bebé.

EN COLABORACIÓN CON

CARACTERÍSTICAS DEL SUEÑO INFANTIL

POR VERENA SENN, NEUROCIENTIFICA Y EXPERTA EN DESCANSO INFANTIL DE EMMA COLCHÓN

El sueño es muy distinto en bebés y adultos, el descanso en la etapa que va desde el nacimiento hasta los seis años está directamente ligado con el desarrollo cognitivo, intelectual y de la memoria de los niños y niñas.

Los bebés dormidos pasan mucho más tiempo en fase REM que es la fase del sueño que registra una mayor actividad cerebral y en la que se consolidan los aprendizajes, es por esto que su sueño presenta características distintas a la del adulto:

Los primeros meses no distinguen entre noche y día y suelen dormir indistintamente y de forma irregular a lo largo de ambos.

Poco a poco van regulando los periodos de vigilia durante el día y sueño durante la noche, estableciendo su período de sueño más largo (que puede ser de unas 4 o 5h) durante la noche.

Los despertares nocturnos son muy normales en los niños menores de 3 años.

Durante los primeros meses necesitarán dormir más de una siesta durante el día.

ALGUNOS TRUCOS PARA FAVORECER EL SUEÑO DEL BEBÉ:

1. Los bebés adoran las rutinas, intentar seguir un horario más o menos fijo y hacer las mismas cosas en el mismo orden antes de dormir.

2. La luz del día nos activa y la oscuridad nos adormece, es aconsejable mantener la luz tenue en casa y en la habitación cuando se acerque la hora de dormir.

3. Poner música suave y de ritmo pausado o tararear canciones de cuna ayudará a que se relaje y acompasará su sueño.

4. Contacto físico, nada como el calor de su madre o padre para relajarlos y acompañarlos hasta que se queden dormidos. No escatimes en abrazos, mimos y susurros para dormir a tu bebé si crees que eso le ayuda. El sueño, como muchas otras cosas, es un proceso madurativo y los niños estarán más preparados para dormir solitos a medida que crezcan y consoliden su autonomía. Respeta sus ritmos y no tengas prisa.

Consejos de seguridad para evitar la muerte súbita del lactante

Es recomendable que duerman boca arriba. Deben dormir con la espalda plana (o encima tuyo). Hay que evitar sábanas, mantas, cojines o cualquier cosa que pueda llegar a taparle la cara. Los primeros meses es mejor que duerma en tu misma habitación para que puedas oírle.

Es importante escoger un buen colchón para el bebé, que sea resistente, lavable y preferiblemente sin tóxicos. Os recomendamos que echéis un vistazo al colchón Emma Kids, se trata de un colchón diseñado y fabricado en Alemania, que cumple con todos estos requisitos.

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