2 Internacional Injerencia en las crisis humanitarias
5 Coyuntura
15 Investigación
¿Qué hacer con los migrantes?
Nueva forma de erradicar mastitis bovina
21 Cultura
Uso de la lengua árabe en Colombia
http//unperiodico.unal.edu.co • un_periodico@unal.edu.co Bogotá D.C. No. 112, domingo 8 de junio del 2008
Cartografía colombiana ¿es obsoleta?
Ciénaga La Pachita ubicada en el departamento del Cesar. En temporadas secas las áreas antes cubiertas por bosques inundables son remplazadas por zonas de producción
agropecuaria. Para conservar las zonas aún cubiertas por estos tipos de vegetación es necesaria una cartografía detallada.
Con evidencias en el terreno, investigadores del Instituto de Ciencias Naturales de la UN demostraron que la cartografía oficial de Colombia, sobre la cual se elaboran los Planes de Ordenamiento Territorial, está des-
actualizada y es obsoleta. Por su parte, el Instituto Geográfico Agustín Codazzi dice que en los últimos cinco años se han logrado algunos avances al respecto.
Pág. 12
CIENCIA O FICCIÓN
PRIMERAS CRÍAS
Construir un transbordador espacial made in Colombia, que tendría el tamaño de un bus de Transmilenio, es la idea de la Agencia Espacial Privada Colombiana. Sin embargo, un experto de la UN cuestiona la viabilidad del proyecto.
Investigadores de la Universidad Nacional de Colombia lograron la inseminación artificial de cuatro cerdas con semen congelado. El procedimiento permitirá una mayor producción porcina con una genética cuidadosamente seleccionada.
20
11
Cortesía Henry Arellano Peña
Publicación de la Universidad Nacional de Colombia • ISSN 1657-0987
Antonio José Rengifo L, PhD,
Profesor de Derecho Internacional Observatorio de Cortes y Tribunales Internacionales Universidad Nacional de Colombia
La obligación general para los Estados, consistente en respetar y hacer respetar las normas de derechos humanos y de Derecho Internacional Humanitario (DIH), se encuentra ampliamente consolidada en el derecho internacional. Aunque el progreso del derecho internacional en esa materia ha sido considerable, hay situaciones, conocidas como crisis humanitarias, en las cuales desde el mismo Estado se producen violaciones masivas y sistemáticas de derechos humanos, por parte de agentes o por grupos privados, a veces con la anuencia y complicidad de las fuerzas del orden. La necesidad de aportar alguna respuesta a las situaciones de crisis humanitaria reviste un alto grado de complejidad para el derecho internacional. Consideraciones de orden ético motivan la necesidad de aportar alguna ayuda o asistencia a las víctimas de esas crisis, por lo general civiles, en situaciones de asedio, persecución, hambruna y epidemias. Una primera evaluación general del problema humanitario permite constatar que de los esfuerzos por configurar, a principios de los años 90 del siglo pasado, un derecho o deber de injerencia, se ha pasado a la asunción de una responsabilidad colectiva internacional en la materia, a ser ejercida por el Consejo de Seguridad, aún en proceso de consolidación.
Violación o intervención
Domingo 8 de junio de 2008
Después de la fundación de la ONU, una de las primeras crisis humanitarias se produjo en Nigeria (1967–1970), como consecuencia de la tentativa secesionista, por parte de un grupo de militares, de constituir la República de Biafra. El ejército regular de Nigeria devastó la provincia rebelde, la bloqueó, impidiendo abastecimientos de alimentos y medicamentos a la población civil y prohibió a la Cruz Roja cualquier forma de asistencia humanitaria, dejando una cifra de un millón de victimas ante la indiferencia de muchos gobiernos que se escuda-
De la injerencia
a la responsabilidad
AFP
2 Internacional
El derecho internacional impone obligaciones de respetar la soberanía y dar protección a los derechos fundamentales de las personas. ¿Cómo responder
a esa disyuntiva en situaciones de crisis humanitarias? ¿Es posible operar un equilibrio entre esas dos obligaciones? El internacionalista Antonio José Rengifo responde y analiza estos cuestionamientos.
ron en la neutralidad y en el principio de no intervención en los asuntos internos de otros Estados. Esa crisis condujo a la creación de Médicos sin Fronteras, una ONG fundada por un grupo de galenos franceses, entre ellos Bernard Kouchner, hoy canciller de Francia. Esa organización, Nobel de Paz en 1999, promueve la idea de que ciertas situaciones de crisis, en las cuales está en juego la vida de miles de personas, principalmente civiles, justifican acciones extraordinarias que ponen en cuestión la soberanía de los Estados. A comienzos de los años 90, el internacionalista Mario Bettati, Profesor en la Universidad de
París, proponía la elaboración teórica del derecho o deber de injerencia para sustentar la intervención frente a las crisis humanitarias. El concepto de ayuda humanitaria propuesto por el Profesor Bettati junto con otros líderes, entre ellos Bernard Kouchner, se funda en que bajo ninguna circunstancia, ningún gobierno puede reivindicar como “legal” la masacre de su población civil, sobre la base de que todo lo que sucede en el interior del Estado es un “asunto interno”. Existen razones de orden ético o moral de toda persona, que la impelen a aportar asistencia a sus semejantes, de cualquier país, que se encuentran
en situación de desamparo frente al Estado que promueve las violaciones masivas de derechos humanos de poblaciones civiles en su territorio o permanece indiferente ante ellas. La aplicación del concepto de derecho/deber de injerencia para responder a las crisis humanitarias ha sido desigual. En la mayoría de los casos se ha apoyado en las ONG humanitarias y su eficacia ha sido bastante discutida. Frente a las crisis humanitarias, algunas intervenciones han dejado la situación peor de como se encontraba antes, tal como lo demuestran los casos de Somalia, Afganistán (1980–1992) y el occidente de África.
Razones políticas Limitar esas crisis a los efectos puramente humanitarios produce una desconexión de las causas políticas que les han dado origen. Un autor, John Tirman, ha señalado que colocar a las ONG humanitarias en el centro de ese problema equivale a responsabilizar al conductor de una ambulancia por el ataque al corazón del paciente que transporta al hospital. Las dificultades para la aplicación de un derecho o deber de injerencia frente a las crisis humanitarias han marcado la evolución de ese concepto hacia la asunción de una responsabilidad colectiva
Director: Luis Alberto Restrepo Editor general: Carlos Alberto Patiño Villa
Comité editorial: Jorge Echavarría Carvajal � Egberto Bermúdez � Paul Bromberg � Alexis de Greiff � Fabián Sanabria � Rafael Pardo Rueda Coordinación editorial: Luz Adriana Pico Maffiold � Coordinación periodística: Diamilia Aguirre A. Coordinación gráfica y diagramación: Ricardo González Angulo � Corrección de estilo: Alberto Salcedo Ramos Fotografía: Unimedios � Diseño e impresión: CEET, Casa Editorial El Tiempo Las opiniones expresadas por los autores y sus fuentes no comprometen los principios de la Universidad Nacional ni las políticas de UN Periódico
Página web: http://unperiodico.unal.edu.co Versión Internet: UNDigital Correo electrónico: unperiodico_bog@unal.edu.co Teléfonos: 316 5348 - 316 5000 extensión: 18384 / Fax: 3165232 Edificio Uriel Gutiérrez Carrera 45 Nº 26-85, piso 5º. ISNN1657-0987
3
AFP
Internacional
internacional para enfrentar las crisis humanitarias y las violaciones masivas de derechos humanos.
Responsabilidad compartida En el marco del estudio sobre reformas al sistema de las Naciones Unidas, la Secretaría General prevé, entre los desafíos que deberán ser enfrentados por esa organización en el Siglo XXI, la necesidad de diseñar nuevas estrategias para fortalecer la protección de las poblaciones vulnerables, señalando al Consejo de Seguridad como titular del deber de actuar en nombre de toda la comunidad internacional frente a las crisis humanitarias localizadas. Bajo esas premisas, en el 2004 el secretario general, Kofi Annan, promovió la conformación de un panel internacional sobre amenazas, desafíos y cambios en el proceso de seguimiento a los Objetivos del Milenio, un Informe acogido por la Asamblea General (Doc. A/59/565). De ese Informe merecen ser destacados tres aspectos relacionados con la seguridad colectiva y el uso de la fuerza. En primer lugar, el informe constata la falta de efectividad y de consistencia del Consejo de Seguridad en el tratamiento a los desastres humanitarios de Somalia, Bosnia-Herzegovina, Ruanda, Kosovo y Darfur (Sudán). En segundo lugar, el panel reconoce como norma emergente de derecho la existencia de una responsabilidad colectiva internacional, a ser ejercida por el Consejo de Seguridad, la cual autoriza la intervención militar como último recurso en casos de genocidio y masacres
a gran escala, limpieza étnica o violaciones graves al derecho internacional humanitario, ante las cuales los gobiernos son incapaces o carentes de la voluntad necesaria para evitarlas. Y el tercer aspecto, la enunciación, por parte del panel, de cinco reglas o criterios básicos que legitiman la intervención por razones humanitarias, que debe ser declarada mediante resoluciones del Consejo de Seguridad y la Asamblea General. Esas reglas básicas son las siguientes: la gravedad del daño o amenaza al Estado o a la seguridad humana; la claridad del propósito tendiente a hacer cesar o a evitar la amenaza; el agotamiento de opciones no militares, es decir, la consideración de la opción militar solo como último recurso; la duración, escala e intensidad de la intervención deben ser proporcionales a la amenaza; y por último, que las consecuencias de la acción de intervención no sean más graves que las consecuencias de la inacción.
Desarrollos regionales El enfoque basado en una responsabilidad internacional para hacer frente a las crisis humanitarias y a las violaciones masivas de derechos humanos no es nuevo y ha dado lugar a desarrollos jurídicos de alguna relevancia. Ya desde fines de los años 60 del siglo pasado, la Comisión Europea de Derechos Humanos admitió, frente a violaciones masivas por parte de los militares de la dictadura en Grecia, la posibilidad de que terceros países, para este caso Suecia, Noruega, Dinamarca y
Holanda, accionaran en nombre las víctimas. En la Convención Americana de Derechos Humanos, el mecanismo de la actio popularis (acción popular), como se la conoce en el derecho internacional, se deriva de la operación de las peticiones inter-estatales contenidas en el artículo 45, que permite a todo Estado reconocer la competencia de la Comisión para recibir y examinar las comunicaciones de un Estado parte cuando alegue que otro ha incurrido en violaciones de los derechos humanos establecidos en la Convención. De este mecanismo no se ha hecho aún utilización, lo cual no impide que en el futuro pueda hacerse uso de él. En Mayo de 2003, la Corte Interamericana de Derechos Humanos – CIDH – en el Caso del Pueblo Indígena de Sarayaku contra Ecuador, adoptó medidas cautelares de protección a todos los miembros de las comunidades integrantes de ese pueblo. Abriéndose a la perspectiva de consolidación del mecanismo de la actio popularis, la Corte admitió que las obligaciones de protección del Estado se imponen no solo en relación con el poder del Estado sino también con actuaciones de terceros particulares, inclusive grupos armados irregulares de cualquier naturaleza. Es claro que al declarar medidas tutelares más que cautelares, en ese caso la Corte tuvo en cuenta la coincidencia del interés individual de cada individuo del pueblo indígena Sarayaku con el interés colectivo de toda esa comunidad. El avance de la CIDH en materia de protección
de urgencia a situaciones de violaciones graves de derechos humanos por parte del Estado o de terceros particulares, fue claramente expuesto en el voto concurrente del Juez Antonio Cançado Trindade, al poner de presente la gradual formación, en el sistema interamericano, de un verdadero derecho a la asistencia humanitaria, dentro del marco del derecho, reafirmando la primacía de éste sobre el uso indiscriminado de la fuerza. Con esos desarrollos, la Corte continúa consolidando su capacidad institucional para dar respuesta jurídica, mediante la adopción de medidas cautelares, a situaciones de asistencia humanitaria que sean sometidas a su consideración. Como reflexión final, es pertinente constatar que el derecho internacional se ha abierto, poco a poco, a la institucionalización de cierta forma de intervención, compatible con los derechos humanos y con el DIH, para responder a las crisis humanitarias cuando el Estado está en incapacidad para ejercer su autoridad o carece de la voluntad necesaria para proteger a sus nacionales, aún contra la voluntad del gobierno y de quienes detentan el poder en ese territorio. De esa forma, la intervención no podrá ser ejercida por un grupo de Estados en desconocimiento de normas de derecho internacional. Tampoco podrá estar sujeta a los vaivenes de la geopolítica mundial ni a la mediática y coyuntural caridad humanitaria, pocas veces ajena a los juegos de la política interna de los países desde la cual es promovida. La intervención mili-
tar debe ser considerada como la última opción, lo cual deja espacios para algunas formas negociadas de intervención institucionalizada, esto es, apoyada en normas del derecho internacional y en las instituciones del país en el cual se ejerce la intervención, siempre bajo la égida del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Este nuevo enfoque incluye mecanismos de seguimiento y cumplimiento a los compromisos adquiridos por las partes, a ser ejercidos por ese mismo ente. En materia de protección a los individuos, habrá que decirlo una vez más, ningún país en el mundo de hoy puede considerarse aislado, ni escudarse en una pretendida soberanía absoluta para permanecer impasible frente a las crisis humanitarias o a violaciones graves y sistemáticas de derechos humanos en su propio territorio por parte de agentes o tropas del mismo Estado o por grupos armados irregulares de cualquier naturaleza. La asunción de la responsabilidad que le corresponde a la comunidad internacional, podría conducir a formas realmente eficaces de enfrentar las crisis humanitarias, como “un síntoma de un problema sistémico”, es decir, en el fondo, sobre la forma como las naciones poderosas han moldeado el frágil orden global. Una comunidad internacional, que empieza a asumir su responsabilidad frente a las crisis humanitarias, permanece vigilante. Estos desarrollos marcan una evolución mayor: no son los pueblos los que deben estar al servicio del Estado sino el Estado al servicio de sus pueblos.
Domingo 8 de junio de 2008
Escena de un museo en Halabja que recuerda la masacre de 5.000 civiles del Kurdistán de Irak bombardeados por tropas de Sadam Hussein en marzo de 1998.
4 Coyuntura Open Democracy
La inesperada renuncia, el 13 de Mayo de 2008, de la internacionalmente reconocida ministra de Medio Ambiente de Brasil, Marina Silva, es una dramática demostración del poder de la facción de los “desarrollistas” dentro del gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva. Es posible que el gobierno se mueva rápidamente a construir más autopistas y centrales hidroeléctricas dentro de la región amazónica, facilitando el acceso a negocios de la agroindustria y a compañías mineras. Para Marina Silva el momento de la dimisión no lo era para andarse con rodeos. Por ello, en su carta de renuncia, la cual fue distribuida a la prensa antes de que hubiese recibido respuesta del Presidente Lula, ella habló de la “creciente resistencia que enfrentó mi equipo de importantes sectores del gobierno y de la sociedad” y de las “dificultades” que ella había venido experimentando desde hacía algún tiempo en la implementación de las políticas ambientales del gobierno federal”. Este mensaje no pudo haber sido más claro: Marina Silva, por mucho tiempo una voz aislada dentro del prodesarrollista gabinete federal, sintió que, finalmente, perdió la batalla sobre las políticas ambientales. Para la ministra, la gota que rebosó la copa fue la decisión del Presidente Lula de no darle la responsabilidad sobre el más reciente plan para la región amazónica, el Plan Amazonia Sostenible, PAS. Lula optó por poner este proyecto en las manos de Roberto Mangabeira Unger, el ministro educado en Harvard que está a cargo de la planeación a largo plazo, una decisión tomada en el último minuto y, según se reporta, en respuesta a la presión del gobernador del Estado de Mato Grosso y uno de los más grandes cultivadores de soya del mundo. Mangabeira fue objeto de burlas por parte de ambientalistas cuando, a principios de 2008, propuso transferir agua de la cuenca del Amazonas a las tierras desérticas del noroeste de Brasil. Con esta propuesta afirmó que tenía sentido unir “una región donde hay una abundancia inútil de agua con otra donde hay una desastrosa falta de agua”, ignorando por completo la dependencia que tienen los peces, plantas y personas de la inundación anual del río.
Domingo 8 de junio de 2008
Una hija del Amazonas Marina Silva, en contraste, tiene un profundo conocimiento de la selva y de su gente. Ella creció en una familia de trabajadores del caucho, en un área remota de la cuenca del Amazonas, y fue incorporada a la política por Chico Mendes, un líder de los trabajadores del caucho asesinado en 1988. Ella tuvo una carrera meteórica: a los 36 años fue elegida senadora del Partido de los Trabajadores (al que pertenece Lula), convirtiéndose en la persona más joven en la historia de Brasil en ser elegida para este
de este plan está de nuevo en la agenda, incluyendo la construcción de Belo Monte, la cual sería la tercera presa más grande del mundo.
Sue Brandford, coeditora de Seeding y reportera frecuente de BBC y The Guardian,
sostiene que la renuncia de la ministra brasilera del Medio Ambiente revela el balance de poder del gobierno del presidente Lula sobre las políticas de la región amazónica.
La elección amazónica de Brasil Presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, y la ministra del Medio Ambiente, Marina Silva, quien renunció inesperadamente el pasado 13 de Mayo de 2008.
cargo. A pesar del tiempo que se vio obligada a permanecer en Brasilia, ella nunca perdió el contacto con el Amazonas. Cuando se enteró de su renuncia, Herculano Porto, un hombre de una pequeña comunidad de habitantes tradicionales de la selva, que recientemente ganó una larga y violenta batalla contra un terrateniente sobre la propiedad de su tierra, comentó entre lágrimas: “ella siempre llevó la región en su corazón. Ella sintió un gran afecto por todos los pescadores del Amazonas. Y yo le debo mi vida a ella, porque ella envió a la policía a protegernos en la parte más fuerte del conflicto”. Marina Silva, nombrada ministra de Medio Ambiente al principio del primer gobierno de Lula, después de su victoria electoral de octubre de 2002, luchó por cambiar la política gubernamental. Ella argumentaba que Brasil obtendría un desarrollo social y económico duradero sólo si trabajaba con y no contra el ambiente; como resultado, ella trató de implementar una política de “transversalidad”, mediante la cual buscaba construir consideraciones ambientales en todos los frentes de acción política. A pesar de que Lula sentía gran simpatía personal y respeto por la ministra, nunca tomó muy en serio sus puntos de vista. De hecho, Lula nunca ha demostrado mucho interés en el medio ambiente. Desde que asumió la Presidencia, su meta primordial ha sido el crecimiento económico acelerado, a casi cualquier costo ambiental. Se ha aliado de manera cercana con grandes terratenientes por su importancia en el fomento de la producción de los principales productos agrícolas de exportación del Brasil, particularmente carne, soya y azúcar. En más de una ocasión se ha referido a las preocupaciones ambientales de Marina como “un obstáculo burocrático”.
Un impulso contenido Marina Silva perdió muchas batallas. No logró evitar
que Lula levantara la prohibición sobre organismos genéticamente modificados. No pudo impedir que el gobierno autorizara la construcción de dos grandes centrales hidroeléctricas en el oeste de la cuenca del Amazonas. Pero también obtuvo algunos éxitos. Quizás el más importante vino después de que las imágenes satelitales mostraron que una gran área de selva amazónica había sido arrasada entre el 2003 y el 2004 –27.426 kilómetros cuadrados, la segunda mayor área deforestada en un solo año–. En febrero de 2005, poco tiempo después de que estas cifras se anunciaron, un terrateniente asesinó a Dorothy Stang, una monja estadounidense. El terrateniente estaba enfurecido por las repetidas denuncias de la monja ante las autoridades acerca de sus intentos violentos de desterrar a los habitantes de la selva. El asesinato fue ampliamente reportado en la prensa internacional. Lula, avergonzado, aceptó enviar la Policía Federal a detener las deforestaciones ilegales y crear la unidad de conservación por la cual Dorothy Stang venía haciendo campaña. Se instauraron entonces una serie de reservas forestales. En su carta de renuncia, Marina dice que estas unidades, muchas de las cuales pueden ser habitadas por pequeñas comunidades de pescadores y familias campesinas, fueron uno de sus logros más importantes. Unidas estas reservas cubren un impresionante área de casi 24 millones de hectáreas (240.000 kilómetros cuadrados). La tasa de deforestación cayó durante tres años consecutivos. Parecía que el implacable frente de leñadores, criadores de ganado y cultivadores de soya abriéndose camino hacia la cuenca del Amazonas estaba finalmente siendo detenido o por lo menos había disminuido su velocidad. Pero luego la fiebre del biocombustible infectó al mundo. Lula se excitó con la posibilidad de convertir a Brasil en uno de los exportadores líderes de etanol
hecho de caña de azúcar (ver “Brasil, Los Estados Unidos y el Etanol”, Rodrigo Almeida, 30 de marzo de 2007). Con la economía de Brasil emergiendo de años de estancamiento, él también comenzó a soñar con un largo período de expansión económica. De esta manera su gobierno se embarcó en un gran proyecto de inversión, llamado el Programa Acelerado de Crecimiento, PAC. El PAC forma parte de un mayor programa suramericano, llamado “Iniciativa Para la Integración Regional de la Infraestructura Suramericana”. Este consiste en 350 proyectos, algunos de los cuales requieren altas inversiones en las áreas del transporte, energía y comunicaciones. En 2007 los ambientalistas advirtieron que no menos de 322 áreas de gran importancia por su biodiversidad serían amenazadas por las carreteras, centrales hidroeléctricas, puertos y gasoductos que se construirá el PAC. Marina solicitó la creación de más unidades de conservación para proteger ecosistemas vulnerables, y redactó el Plan Amazonia Sostenible, PAS, teniendo esto en cuenta. Es significativo que, justo antes de entregar el PAS a Mangabeira, Lula retiró su apoyo a otra unidad de conservación – una reserva para habitantes de la selva a lo largo del Río Xingu– porque esta podría obstaculizar la creación posterior de centrales hidroeléctricas. Esta decisión sería el primer punto candente en el panorama político posterior a la renuncia de la ministra Marina. Las presas requeridas afectarán a diecinueve grupos indígenas. En 1989 una gran reunión de indígenas y pobladores ribereños, también en Altamira, rechazaron el plan gubernamental para construir un proyecto similar. El encuentro, al que asistieron seguidores como Swing y Anita Roddick, fue ampliamente reportado en la prensa internacional. Como resultado, el Banco Mundial canceló un préstamo y los planes fueron archivados. Ahora un esquema revisado
Una apuesta peligrosa
AFP
Sue Brandford,
Desde una perspectiva global, los peligros inherentes a este proyecto son mucho más evidentes de lo que eran hace diecinueve años. Hoy se sabe mucho más acerca del rol de la cuenca del Amazonas en el funcionamiento del clima mundial. Los científicos han demostrado que la selva actúa como un gigante consumidor de calor, absorbiendo la mitad de la energía solar que recibe a través de la evaporación de agua desde sus hojas. Cuando se daña con deforestación, fuego o sequía, la selva libera carbono, contribuyendo a la acumulación de gases invernadero, que son la causa del calentamiento global. Si las tendencias actuales de deforestación continúan, más de la mitad de la selva del Amazonas desaparecerá o estará severamente dañada en el 2030. Si esto sucede, alrededor de 20 billones de toneladas de carbono serán liberadas a la atmósfera, lo que equivale al monto de emisiones totales de carbono del mundo entero en un año. A pesar de que es verdad que las técnicas de la ingeniería moderna reducen el daño ambiental directo causado por las centrales hidroeléctricas, ha sido demostrado repetidas veces que traer energía y carreteras a una región despierta una explosión caótica de desarrollo que lleva a extender la destrucción ambiental. Con el crecimiento de la conciencia en todo el mundo acerca de la escala de la crisis ambiental que se avecina, no tiene ningún sentido asumir una apuesta tan arriesgada. Debe ser más fácil prevenir un gran incremento en las emisiones de carbono que secuestrar el carbono una vez liberado en la atmósfera. Tardíamente, la comunidad internacional está tomando acción. Carlos Minc, un cofundador del Partido Verde de Brasil, quien fue designado como nuevo ministro de Medio Ambiente horas después de que la renuncia de Marina Silva fue dada a conocer, dijo en su primera conferencia de prensa que él espera recibir, en un corto plazo, $234 millones de dólares de instituciones financieras y organizaciones no gubernamentales, para establecer más unidades de conservación en el Amazonas. Estos fondos, sin embargo, tendrían sentido solamente si el dinero se usara para proteger las vidas de los grupos de indígenas y pobladores ribereños que planean reunirse en Altamira. Si el dinero se destina para personas como Roberto Mangabeira Unger, hay un serio riesgo de que termine financiando otro proyecto sin fundamento y la cuenca del Amazonas ya está repleta de ellos, desde Fordlandia, la gigante plantación de caucho establecida por el magnate Henry Ford en los años 20, hasta la Autopista Transamazónica de 3000 kilómetros construida por los militares en 1970.
Cerca de 4 millones de colombianos se encuentran en el exterior desde donde envían a Colombia más de 4 mil millones de dólares anuales en remesas e inversiones. Aunque hay estudiantes, empresarios, científicos y funcionarios internacionales, la mayoría son mujeres y hombres inmigrantes empobrecidos, muchos regulares, muchísimos irregulares, quienes deben enfrentar una difícil situación en su vida cotidiana, sometidos a tratos discriminatorios, a largas jornadas de trabajo, a la soledad y al distanciamiento de los suyos e, incluso, a la persecución como presuntos delincuentes. Cabría preguntarse entonces ¿porqué persisten en continuar como inmigrantes? El debate sobre la magnitud de los problemas y sobre las posibilidades que ofrece la emigración y la inmigración de extranjeros para Colombia, debe extenderse a toda la sociedad. La aplicación del “derecho de libre circulación” más allá de las fronteras nacionales, se enfrenta con la noción de soberanía, lo cual crea más de una paradoja, pues se supone su existencia para la puesta en acción de otros dos derechos anexos: el derecho a inmigrar (a establecerse en otro territorio) y el derecho a no emigrar (a permanecer en mi lugar de residencia si así lo deseo). Los migrantes se dividen en dos categorías: los trabajadores necesarios y los inmigrantes no deseados. En esta última se encuentra la gran mayoría de inmigrantes, con o sin documentos regulares; allí se clasifican los miembros de la familia del inmigrante trabajador formal y todos los inmigrantes trabajadores informales. Ellos requieren que el Estado defienda y proteja sus derechos en donde se encuentren.
Política pública Desde mediados del Siglo XX el Estado colombiano ha adoptado medidas para atender a los connacionales en el exterior. Estas políticas se manifiestan como acciones aisladas e inconexas, basadas en el supuesto no explícito de que la emigración, en general, es saludable para la economía nacional y en el tratamiento de la inmigración de extranjeros al país desde la perspectiva de la seguridad. Las políticas han privilegiado las acciones que facilitan el ingreso de los empresarios al mercado de bienes de nostalgia y de servicios sociales reclamados por los migrantes en el exterior. Muchas agencias estatales se encargan de temas que tienen que ver de manera directa o indirecta con las migraciones y entre ellas, a pesar de la existencia de una Comisión Intersectorial de Migraciones, hay poca coordinación, diferencias de criterios, y diversidad de ritmos y de capacidad institucional
Hacia una Política Integral
de Migraciones
AFP
Gerardo Ardila,
Profesor Departamento de Antropología Centro de Estudios Sociales Universidad Nacional de Colombia
Los migrantes son sujetos especialmente vulnerables que requieren la protección del Estado. Por eso, el Instituto Centro de Estudios Sociales de la Universidad Nacional de Colombia y el Ministerio de Relaciones Exteriores trabajan en la construcción de los lineamientos de una Política Nacional Integral de Migraciones.
para atender a la complejidad de los temas que les corresponden. Se requiere una política integral concertada con la participación de todos los ciudadanos (en especial de los migrantes), que atienda las necesidades de los colombianos en el exterior, que facilite la vida de los inmigrantes extranjeros en Colombia otorgándoles los mismos derechos que reclamamos para los nuestros en el exterior, y que incluya los temas migratorios dentro de las políticas sociales y económicas del país para controlar las causas de las migraciones, ampliando los márgenes de libertad en las decisiones de movilidad. Los picos de migración y su crecimiento constante implican el fracaso de las políticas sociales y económicas del Estado, a la vez que las migraciones juegan un doble papel al aliviar cargas al Estado y contribuir con el mayor rubro de inversión extranjera directa en el país. Por eso, la migración debe ser parte integral de las políticas sociales y económicas del Estado. De otra parte, los destinos de las migraciones de colombianos no se concentran en Europa y el norte de América, sino que hay un aumento de interacciones con los países fronterizos y con Centro y Sur América, lo cual hace aún más apremiante la consideración de las migraciones como parte integral de la política exterior. Los fenómenos migratorios se caracterizan por la complejidad (hay infinidad de factores que operan a es-
calas que van desde las decisiones individuales hasta los determinantes globales) y por la inestabilidad (cuando tratamos de entender un fenómeno asociado este cambia), de suerte que una política integral debe ser un marco general de análisis para la toma de decisiones puntuales. Para coordinar los procesos internos relacionados con los temas migratorios y buscar su armonización y negociación con los determinantes internacionales, hay que crear nuevas condiciones institucionales con la jerarquía y la capacidad política, técnica y financiera necesarias.
Información, participación y coordinación La complejidad de los fenómenos migratorios, la inestabilidad de los procesos asociados y la urgencia de atención por parte del Estado y de la sociedad, nos han llevado a proponer que el objetivo de esta política es el tratamiento integral de los fenómenos sociales, políticos, económicos, culturales, jurídicos e institucionales asociados a las migraciones internacionales. Por tanto, se dirige a la ampliación y defensa de los márgenes de libertades individuales y de las capacidades, contribuyendo a la gobernabilidad mediante: (1) la consideración de los procesos migratorios como parte fundamental de las políticas sociales y económicas y de la estrategia de lucha contra la pobreza; (2) la consideración de los procesos asociados a
las migraciones como parte esencial de la política exterior, desde los parámetros establecidos por el bloque de constitucionalidad y por la defensa de los DDHH; y (3) la consideración de los procesos migratorios como un escenario para el reforzamiento de la cohesión social, con base en la construcción de confianza entre los ciudadanos y, de estos, en el Estado. Una visión política basada en la protección de los derechos humanos y un tratamiento explícito de las migraciones dentro de las políticas estructurales del Estado y la política exterior, implican la necesidad de información confiable y permanente sobre las tendencias y cambios de los procesos migratorios que nos afectan. En Colombia no existen mecanismos que permitan un seguimiento en tiempo real y con datos confiables de las variaciones en tamaños, tiempos y distribuciones espaciales de los flujos de migración desde y hacia el país, ni cuantificaciones basadas en métodos descritos y probados con claridad sobre el carácter y mutabilidad de los grupos de migrantes colombianos a través del tiempo. Los datos aportados por el Censo de 2005 o construidos a partir de fuentes paralelas de información son insuficientes y se hacen anacrónicos con rapidez, debido a los ritmos de cambio generados por las variables de muy diferente escala que intervienen en las decisiones individuales y colectivas de inserción en el mercado global del trabajo.
Es posible que el crecimiento de la emigración de colombianos esté alcanzando sus niveles de saturación y que responda tan solo a procesos inerciales, lo que sumado a las nuevas actitudes anti inmigracionistas en los Estados Unidos y Europa permite predecir un aumento del retorno y de la inmigración hacia Colombia y los países vecinos. Pero no tenemos datos para saber y entender lo que ocurre y para prepararnos para esta nueva fase de los ciclos migratorios. Hoy, en Colombia, tomamos decisiones sin información, con base en “opiniones” cuya autoridad deriva de la utilización de mecanismos de poder y del papel legitimador de los medios de comunicación. Creemos conocer lo que ocurre porque lo sabemos después de que ocurre, de manera que solo podemos actuar por reacción, pero no tenemos capacidad para ser proactivos en un terreno que no anuncia sus cambios con mucha anticipación. La generación de información es, entonces, uno de los requerimientos fundamentales de una política coherente, consistente y eficiente. No hay posibilidades de que una política sea exitosa sin la participación en su diseño, ejecución y evaluación de quienes son sus destinatarios inmediatos, quienes deben tener acceso oportuno y confiable a la información. La participación de los ciudadanos, es decir de los funcionarios de las diferentes agencias estatales e internacionales, de los empresarios, los gremios, los académicos, los partidos políticos, los gobernantes locales y regionales, y, desde luego, de los migrantes, en los procesos de toma de decisiones en cada uno de los campos que les competen, es la base para que la política pueda alcanzar sus objetivos. El Ministerio de Relaciones Exteriores tiene por función básica la de jugar el papel de vínculo entre la política exterior y la política interior de Estado, así como es el encargado de la atención y protección de los ciudadanos colombianos en el exterior. Esto implica que sea el ente llamado a coordinar la política migratoria. En primer lugar, es necesario transformar y reforzar los sistemas consular y diplomático y sus interrelaciones. Después de un análisis cuidadoso de las funciones que le corresponde asumir, de las necesidades de coordinación interna y negociación internacional, y a la complejidad de los temas de su competencia, hemos propuesto la creación de un Viceministerio de Migraciones que tenga la jerarquía y capacidad para llevar adelante el reto inmenso de convertir la migración en una oportunidad para Colombia, en donde sea posible encontrar caminos en los que todos ganemos y que los migrantes no sean los encargados de producir riqueza mientras se empobrecen y enfrentan todos los costos de la migración.
5
Domingo 8 de junio de 2008
Coyuntura
6 Coyuntura
Desplazados con tierras propias Dos poblaciones antioqueñas serán las primeras beneficiadas de un proyecto interinstitucional en el cual participa la Universidad Nacional de Colombia, que busca la titulación formal de terrenos que fueron
abandonados por campesinos víctimas del desplazamiento forzado. Se trata de un programa piloto que pretende que los desarraigados retornen a sus territorios. David Calle,
Domingo 8 de junio de 2008
Con sus pocas pertenencias a cuestas, José Albeiro López, su esposa y sus dos hijos abandonaron en abril de 2000 la casa en la que vivían en la vereda El Edén, por las amenazas de la guerrilla. El rumbo era incierto, pero finalmente buscaron el lugar que les era más familiar y llegaron al casco urbano del municipio de Granada, en el oriente antioqueño. Durante 13 días sobrevivieron gracias a los ahorros que tenían guardados. “Nos aburrimos y ya se había acabado la plata. Decidimos retornar a la finca porque, además, la cosecha se estaba perdiendo”, recuerda López. Todavía con la presencia del grupo armado y el miedo latente, por lo menos unas tres familias regresaron a El Edén y, según José Albeiro, “por tres meses en la vereda sólo vivimos unas 7 familias”. José recuerda con tristeza la que una vez fue una región de labriegos amantes de la tierra, de niños y jóvenes aprendices en la escuela, cuyo panorama se transformó en casas abandonadas, saqueadas, espectros y pálidos reflejos de lo que alguien nombró Vergel o El Edén. Hoy esa vereda se sacude de la ruina ocasionada por el miedo, para mostrar su mejor cara y hacer honor al significado de su nombre: un paraíso. Aunque todavía es posible observar los vestigios de la guerra. Desde la entrada a la vereda hasta el Centro Educativo Rural El Edén, sus calles destapadas pintan un poco la historia de gloria y violencia: algunas casas desmanteladas, corroídas por el moho y la mugre, con paredes convertidas en tableros donde grupos armados colocaron su impronta. En el mismo cuadro se aprecian también pequeños negocios familiares, huertas, cultivos de café y hasta algunos trapiches de panela. Freddy Castaño, personero municipal de Granada, cuenta que el desplazamiento masivo ocurrió a partir del año 2000. “Fueron entre 13.500 y 14.000 habitantes los que se desplazaron de nuestro municipio por la incursión de grupos paramilitares y guerrilleros de las FARC. De la vereda El Edén, entre 70 y 75 familias,
Unimedios
Unimedios
Desde cuando comenzó el proyecto, hace diez años, los pobladores han recibido capacitaciones y talleres.
En la foto, una funcionaria de Acción Social habla con los habitantes de El Edén. aproximadamente, tuvieron que dejar sus viviendas”. Ahora, José Albeiro cree en un futuro mejor para él y otros 282 habitantes más de El Edén, que son parte de un proceso formal de titulación de los baldíos que tradicionalmente los campesinos poseían con el único soporte documental de la palabra empeñada o una promesa de compraventa.
Escritura para ganar confianza En términos técnicos, los sociólogos hablan de tejer confianza, y en este caso esa seguridad la ofrece el proyecto “Protección patrimonial a la población desplazada en los municipios de Granada y Angelópolis”, coordinado por Acción Social, cuyo operador ha sido la Universidad Nacional de Colombia, con la participación del Incoder (Instituto Colombiano de Desarrollo Rural), la Secretaría Técnica del Comité Departamental de Atención Integral a la Población Desplazada y el Departamento Administrativo del Sistema de Prevención, Atención y Recuperación de Desastres, Dapard, de la Gobernación de Antioquia. Este proyecto publicará un documento que proyecta ser un modelo metodoló-
gico que explique cómo titular baldíos a la población desplazada en condiciones similares. “El proceso de titulación de baldíos no es muy complejo pero tiene muchos a los que hay que ponerles mucha atención”, asegura Isabel Cristina Correa, abogada del proyecto de titulación. El programa que adelantaron dichas entidades le da cumplimiento a uno de los componentes de la Ley 387 de 1997, el cual tiene como propósito principal proteger a los campesinos y sus bienes al momento del desplazamiento. Esta reglamentación, incluso, es aplicable si las familias han permanecido por fuera de sus hogares por cinco años. Con un equipo interdisciplinario, la Universidad Nacional de Colombia recolectó durante 10 meses las solicitudes de las familias que reclamaron derechos sobre uno o varios lotes baldíos y buscó a desarraigados en ciudades como Medellín y Cali. El trabajo estuvo acompañado de un programa pedagógico de sensibilización para construir tejido social y crear confianza de los campesinos hacia las instituciones. Según explicó Luis Carlos Agudelo, docente adscrito a la Escuela de Planea-
ción Urbana de la Facultad de Arquitectura y coordinador del equipo de la UN, en el proceso de recolección de datos, la Universidad encontró una condición generalizada de inobservancia de la norma. De cada 100 predios 95 tenían algún síntoma de informalidad, es decir, carecían de escrituras o poseían hasta dos dueños. “En el perfil socio económico se encontró desestructuración de las familias. Cuando se trata de campesinos esto tiene efectos en la unidad de producción, porque si una parte de la familia no está, significa perder una parte de la mano de obra. Así mismo, corroboramos el tamaño de los predios que eran de menos de una hectárea, cuando la propia ley establece para esa zona el tamaño mínimo de una unidad agrícola familiar entre 5 y 6 hectáreas”, dijo el profesor Agudelo. Un proyecto de titulación similar ocurrió en el sector La Mica, de la vereda Promisión, en el municipio de Angelópolis, ubicado a 47 kilómetros al suroeste de Medellín, una zona igualmente golpeada por la violencia y los desplazamientos forzados. El resultado del programa fue 141 predios o solicitudes tramitados por
la UN: 122 en El Edén y 19 en La Promisión. El procedimiento se encuentra en el Incoder, entidad con la competencia para la adjudicación de los baldíos. “Lo que sigue está en manos de esa institución que avalúa y muy probablemente identificará quién tiene derecho a solicitar baldíos”, explicó Luis Carlos Agudelo. Leonor Marina Restrepo, funcionaria de Acción Social, resaltó que se trata de una experiencia piloto cuya idea es construir una ruta modelo a partir de la cual en todo el país se pueda definir cómo será la titulación. “Para que este proyecto sea exitoso en otras zonas, el país tiene que cumplir con una serie de condiciones. Una de ellas es el retorno de la población, porque la titulación exige toma de datos y procesos técnicos que incluyen a la comunidad”, indicó Restrepo. Los funcionarios y académicos hicieron énfasis en que el trámite de las solicitudes se encuentra en el Incoder y se espera que en las próximas semanas, con la titulación de sus casas, los campesinos encuentren su edén con el establecimiento de proyectos productivos y la recuperación de su tranquilidad.
Medio ambiente
7
Magda Páez Torres,
Tecnología de punta Este es un proyecto pionero en Colombia. El diseño del sistema automatizado de recirculación
Flores más limpias A través de un sistema automatizado que reutiliza el agua en los cultivos de flores, un equipo de investiga-
dores colombianos pretende mitigar el impacto ambiental de los fertilizantes en este tipo de procesos y disminuir el consumo de agua. El proyecto, pionero en el país, busca una producción más limpia del clavel y la rosa.
de lixiviados lo realizaron en el país ingenieros electrónicos de la Universidad Nacional. Gracias a este trabajo se puede, por ejemplo, medir el nivel del agua de la solución drenada y visualizar, a través del computador, toda la información que se va recibiendo. “Lo más importante de este sistema automatizado es que no necesita muchos operarios para su funcionamiento y existen menos riesgos de que se olvide llevar a cabo los procesos correspondientes”, dijo el ingeniero Juan Sebastián Betancourt.
El proceso Para recoger los lixiviados y reutilizarlos se requiere de todo un proceso. Los esquejes de clavel por razones fitosanitarias son sembrados sobre camas de sustratos, como cascarilla de arroz y fibra de coco. Esto aísla las plantas evitando su contacto con el suelo y, al mismo tiempo, evita el movimiento de fertilizantes en el suelo. El primer paso es aplicarles agua fertilizada. En una batea de plástico se recoge el agua drenada, que luego se transporta a través de tres tubos que terminan uniendo la solución en uno solo y enviándola hasta los tanques. Posteriormente, la solución pasa por un proceso de filtrado, con el fin de impedir la entrada al sis-
tema de materia orgánica o materiales extraños que puedan obstruir el sistema. También está previsto el uso de desinfección con UV, para evitar que bacterias u hongos recirculen en el sistema. Ya en esta etapa, se hacen algunas pruebas con diversos porcentajes para medir qué sucede si se usa menor o mayor cantidad de la solución drenada, en la productividad y calidad del cultivo. Allí entran a cumplir un papel fundamental los sensores de ultrasonido, que miden los volúmenes, y los sensores de conductividad, pH y nutrientes, que miden la calidad del drenaje con que se cuenta. Estos resultados los transmite la tarjeta de adquisición de datos a un programa que almacena la información en el computador. Si es necesario, la solución se recompone para reutilizarla. Cuando se determina qué cantidad de solución reutilizar, la idea es que se deseche la mínima cantidad de solución salina, mitigando su impacto en el suelo o en las aguas subterráneas. Según el ingeniero agrónomo Diego Nieto, director operativo del proyecto, se requiere hacer un control semanal en aspectos como fertirriego y fitosanidad, monitoreo de enfermedades y control de plagas. Diariamente, es necesario cortar las
flores que lo requieran y de manera periódica efectuar el desbotone, arreglar los tallos y fumigar, cuando sea necesario.
Trabajo conjunto Son varias las instituciones y las personas que se encuentran comprometidas con este proyecto. Estudiantes del Sena y de la Universidad Nacional de Colombia se han vinculado al trabajo, a través de sus trabajos de grado o sus pasantías. Erick Intillan, estudiante de Maestría en Ciencias Agrarias de la UN, es el encargado de hacer la caracterización química de los sustratos donde se siembran las flores y de los lixiviados. En cuanto al proyecto, afirmó que es una forma de mitigar el consumo de agua y de fertilizantes y de alguna manera dejar descansar el suelo. El Sena, que aparece como coejecutor en esta segunda fase del trabajo, le apuesta a este proyecto, de acuerdo con el profesor Rafael Flórez, como una política nacional de innovación tecnológica y una oportunidad real del sector productivo, para ser más competitivo en el mercado internacional, que exige tecnologías limpias. “Es un buen comienzo en el proyecto de recirculación de lixiviados.
Además, nos da un linaje superior y nos entrega bases para pensar en la creación de nuestras propias empresas”, señaló Yosmary Corredor, pasante de administración de empresas agropecuarias del Sena. Como Yosmary, cerca de 300 estudiantes del Sena pueden hacer sus prácticas en esta área. Dentro de sus funciones están la siembra, el riego del cultivo y el monitoreo de los diferentes procesos. Karen Milena Chinchilla, estudiante de ingeniería agrícola de la UN, sostuvo que la rosa es muy importante para la economía colombiana y que este proyecto abre el campo en la investigación en flores, lo que permitirá ir avanzando en la producción. Entre otras empresas del sector privado, Brenntag Colombia S. A., Productos Químicos Andinos S. A., Suata Plants S. A., MG Consultores C. I. Ltda., Proficol S. A. y Bayer CropScience, se han vinculado al proyecto con donaciones. El objetivo, después de ejecutar los procedimientos respectivos, es crear una conciencia en los floricultores de la región para que propendan por el cuidado del ambiente, a través de este sistema de producción, que también los beneficiará a ellos como productores.
Domingo 8 de junio de 2008
Para una economía como la colombiana, basada en la agricultura, son muchas las implicaciones ambientales que se generan por el uso de fertilizantes y métodos de cultivo que pueden terminar causando graves daños. Preocupados por este tema, la Universidad Nacional de Colombia, el Sena, Ceniflores y Colciencias, desarrollan un proyecto de producción limpia de flores, con miras a liberar el suelo y las aguas superficiales y subterráneas del uso excesivo de fertilizantes. Para ello, se diseñó un sistema automatizado, con el fin de recoger los lixiviados (solución drenada de agua y fertilizantes) y reutilizarlos en el mismo cultivo o en el de otras flores. Con esto, además de economizar agua y fertilizantes se impide que el suelo se vea contaminado con la solución. Ésta constituye la segunda fase del proyecto, en la que con tecnología de punta se busca crear un proceso de recirculación de aguas drenadas. En esta etapa entró a participar Colciencias. El objetivo principal consiste en el empleo de la solución drenada, en dos o más cultivos sucesivos y diferentes. Aunque la reutilización directa es posible, lo más probable es que los drenajes requieran un tratamiento o regeneración para su uso posterior. La idea es que una vez se hagan todas las pruebas necesarias, este método de cultivo se extienda a los productores del altiplano Cundiboyacense, teniendo en cuenta que son aproximadamente seis mil hectáreas de la Sabana de Bogotá las que se destinan al cultivo de flores. “Se disminuiría el impacto ambiental de los fertilizantes y responderíamos a una exigencia del mercado internacional, que cada vez condiciona más la compra de flores a una producción limpia”, dijo el profesor de la UN, Víctor Flórez, director del proyecto. De acuerdo con el profesor de ingeniería agrícola de la Universidad Nacional, Carlos Alberto González, entre dos mil y tres mil toneladas de fertilizantes se encuentran distribuidas en la Sabana de Bogotá. Por esta razón, se han dispuesto tubos, tanques, sensores, tarjeta de adquisición de datos y otras herramientas tecnológicas que faciliten la puesta a punto de la solución salina drenada.
Fotos Unimedios
Unimedios
César Enrique Herrera De la Hoz,
Domingo 8 de junio de 2008
Unimedios
Durante la segunda mitad del Siglo XX, dos de las principales preocupaciones en la agricultura se centraron en la fertilidad del suelo y la contaminación del mismo por el uso de agroquímicos. Estudios realizados en los años setenta demuestran efectos adversos de una gran variedad de productos de síntesis química a nivel toxicológico, de salud pública, fenómenos de resistencia (por la utilización sistemática de un mismo producto, dando como resultado la firmeza del organismo frente al plaguicida) y efectos ambientales nocivos (contaminación de fuentes hídricas, pérdida de suelos con vocación de cultivo y muerte de fauna asociada a cultivos, entre otros). En Colombia se abordan tecnologías limpias como alternativas para la producción de energías, limpieza de aguas, recuperación de ecosistemas y agricultura ecológica. El control biológico es una de las estrategias utilizadas dentro del programa de Manejo Integrado de Plagas y Enfermedades (MIPE) para el mejoramiento de la producción agrícola y la búsqueda de producción natural de alimentos inocuos y sanos. De hecho, “los mercados son cada vez más exigentes en la generación de etiquetas de calidad, que certifiquen la implementación de sistemas productivos ambiental y socialmente sostenibles”, asegura Daniel Uribe, investigador del Instituto de Biotecnología de la Universidad Nacional de Colombia en Bogotá. Los sellos de calidad han llevado a la exclusión del mercado de una gran cantidad de productos comerciales de síntesis química, abriendo el espacio para el uso y desarrollo de nuevas estrategias de MIPE e incrementando el registro de nuevos productos comerciales de control biológico en el mercado mundial. El MIPE es soportado en su mayoría por productos de control biológico (formulados a base de hongos, bacterias, virus y nematodos), diseñados para complementar la utilización de agentes de origen químico regulados en el mercado. A pesar de los conocimientos para el desarrollo de mejores productos destinados al control biológico de plagas, de las necesidades agronómicas mundiales y de las presiones internacionales por el desarrollo de estrategias ambientales y sociales más amigables, la comercialización actual de estos plaguicidas no supera el 2% del total en el mercado mundial.
Avances en el control biológico de plagas Las necesidades agrícolas y las presiones políticas internacionales promueven estrategias ambientales y sociales para el control biológico de plagas que no causen daño a la salud humana y al medio ambiente.
Sin embargo, la comercialización actual de estos productos no supera el 2% del total del mercado mundial de pesticidas. ¿Cuáles son las razones de este bajo indicador? ¿Cuál es el panorama en Colombia?
Unimedios
8 Medio ambiente
Colombia es uno de los principales líderes de América Latina en investigaciones sobre el potencial biotecnológico de microorganismos en ecosistemas naturales y agroecosistemas. Incluso, algunas empresas productoras están comer-
cializando sus productos en el exterior. Explicación de los expertos El investigador Uribe explica este fenómeno debido a que “la mayoría de Agentes de Control Biológico (ACB) producen resultados inconsistentes en el campo, además de desarrollar procesos infecciosos lentos en comparación con los agentes de síntesis química”. Desde su punto de vista, “el implemento de estrategias para el desarrollo del uso de ACB en el sector agrícola, debe contemplar la aplicación de esfuerzos técnicos, agronómicos, socio-económicos y políticos”. Por eso, Uribe propone que en lo técnico y agronómico se deben fortalecer cinco áreas de investigación: la comprensión del pato-sistema aso-
ciado al control biológico de insectos, la producción y formulación de agentes de control biológico, la fisiología como estrategia de mejoramiento de las formulaciones, la genética de los agentes de control biológico y el desarrollo de plantas transgénicas resistentes a insectos. A lo anterior, Marina Sánchez De Praguer, investigadora de la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la Universidad Nacional de Colombia en Palmira, añade que “la presión que ejerce la industria de agroquímicos para que sus productos sean utilizados es grande. De esta forma, el control biológico ha surgido a nivel artesanal. Cuba, por ejemplo, al estar fuera del contexto de los agroquímicos, debió buscar este tipo de alternativas”. En Colombia, el con-
trol biológico de plagas surgió a nivel de pequeñas empresas artesanales. En la actualidad, grandes empresas, como la industria cañicultora del Valle del Cauca, ven en el control biológico de plagas un potencial muy grande. En este departamento han implementado programas de MIPE en varios cultivos, como algodón, tomate, soya, frijol, yuca, plátano, sorgo, maíz y frutales. Rafael Mejía, presidente de la Sociedad de Agricultores de Colombia, SAC, también aporta en la explicación de la poca popularización del control biológico de plagas en el país. En su concepto “los distribuidores y el mercadeo en sí no han sido ágiles”. Sin duda, la creciente sensibilidad de los consumidores en los temas relacionados con la seguridad
alimentaria, la inocuidad y los impactos ambientales y sociales de la agroindustria, permitirán que el control biológico de plagas, como elemento de la agricultura ecológica, siga desarrollándose y buscando mejores alternativas para la construcción de sistemas productivos sostenibles. En esa vía el texto de la Facultad de Ciencias de la UN “Potencial biotecnológico de microorganismos en ecosistemas naturales y agroecosistemas” presenta algunos de los principales avances sobre la investigación biotecnológica con microorganismos en Colombia. La investigación fue coordinada por la docente Jimena Sánchez Nieves, con el apoyo de Colciencias, la División de Investigación de la UN y Conacyt, México.
Medio ambiente
Los amantes del pescado ya no tendrán que negarse al placer de saborear una tilapia por miedo a contraer infecciones como la estreptococosis, una de las enfermedades que más afecta a estos animales. A través de una investigación se encontró que el riesgo de transmisión a humanos es muy bajo. No obstante, es preferible que las personas consuman animales sanos. El estudio fue adelantado por el Grupo de Investigación en Patología Veterinaria, de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Nacional de Colombia, pionero en detectar el origen de la enfermedad en el país. Los investigadores identificaron la especie de la bacteria que causa el mal, conocida como Streptococcus agalactiae, e hicieron la caracterización morfológica de la enfermedad. La preocupación por esta infección en tilapias nació en el año 1999, cuando se presentó una alta mortalidad de peces, especialmente en la represa de Prado, en el Tolima, no sólo por sus efectos en el comercio internacional y su significado en términos económicos, sino también porque podría constituir un problema de salud pública. Desde entonces, los investigadores de la UN empezaron a indagar acerca de las causas de la enfermedad, que generalmente se manifiesta, de forma externa, con curvación del cuerpo del animal y ojos saltones. Y, en la parte interna, con inflamación del epicardio. Y es que la preocupación principal que auspició el estudio fue la posibilidad de que el estreptococo pudiera pasar de los peces a los humanos. Especialmente, mediante el consumo de pescado, más aún, teniendo en cuenta que cada día las personas comen más pescado crudo, como el caso del sushi. El problema tiene una incidencia notable en la acuicultura mundial, y genera, además, grandes pérdidas económicas. Con la investigación se diagnosticó que la mortalidad en las tilapias se debía a una especie de Streptococcus, una bacteria que ataca a órganos como el corazón, el hígado y los riñones. Existen varias especies diferentes del Streptococcus agalactiae que afecta a peces, bovinos y humanos. Según el director de la investigación, Carlos Arturo Iregui, se llaman de la misma manera, son casi idénticos pero pequeñas diferencias genéticas evitarían que pasen de una especie a otra. No obstante, insistió en que así el riesgo de contagio a humanos sea muy bajo, su mayor responsa-
Infección en tilapias no afecta a humanos
Una investigación de la Universidad Nacional de Colombia encontró que una de las especies de la bacteria Streptococcus está causando infección en las tila-
pias. No obstante, algunas diferencias genéticas impiden que estos peces infecten a los humanos a través del consumo.
que se evidencien sus efectos, mientras que la enfermedad es cuando la infección se manifiesta con signos clínicos. Para el estudio se contó con la participación de la Cadena Piscícola del Huila. De acuerdo con lo expresado por María Cristina Arbeláez, representante de este gremio, el trabajo les dio ciertas bases y luces para emprender un programa de monitoreo sanitario que les permita definir si es solo el estreptococos el que está generando enfermedades en las tilapias.
Una sola especie
La estreptococosis, una de las enfermedades que más afecta a las tilapias, se manifiesta
de manera externa, con curvación del cuerpo del animal y ojos saltones. bilidad como académicos y como científicos es hacerles ver a los productores que la industria se puede acabar, no porque se mueran miles de peces porque eso mal o bien se recupera, sino porque un día alguna persona contraiga la bacteria. Fue uno de los motivos por los que se realizó el estudio.
Tilapias y enfermedad El consumo de tilapia en el país llega aproximadamente a las 30 mil
toneladas. Huila es el departamento donde se da una mayor producción de estos peces. También se encuentran en regiones como Meta, Tolima, Casanare, Antioquia y Valle del Cauca. Durante la investigación se realizaron 4 visitas durante dos años a cada una de las 6 granjas de cultivo. Se estudiaron 30 peces en cada visita, es decir, 720 en total, detectando una prevalencia del 10% de estreptococosis, para lotes de más de
100 mil animales. También se realizaron 10 muestreos, durante 2 años, en 5 sitios de expendio en Bogotá (supermercados y plazas de mercado), escogidos al azar. Se trabajó con 144 animales, de 350 gramos. Con este muestreo se encontró un 5,9% de prevalencia en los tejidos de las tilapias listas para consumo. Esto quiere decir que tenían la infección, mas no la enfermedad. La infección es la presencia de la bacteria, sin
Con el estudio se llegó a la conclusión de que hasta el momento solo existe una especie de Streptococcus responsable de la enfermedad e infección en tilapias de cultivo en el país: Stretococcus agalactiae. Lo más importante es que se comprobó que la posibilidad de que ésta se trasmita a humanos es realmente baja, pues, como lo afirmó el profesor Iregui, en el ámbito científico es muy difícil decir que es imposible. Además del aspecto genético, un factor que puede influir en que la bacteria no se transmita al humano, según el investigador de la UN, es que los colombianos comen los alimentos muy bien cocidos. Como lo afirmó la doctora Arbeláez, aunque esta enfermedad no se transmite a humanos, desde el gremio se busca implementar un plan sanitario para los productores de la Represa de Betania. “La gente tiene claro que hay que trabajar alrededor de la parte sanitaria, porque esta puede desbordar los límites, pues si bien hoy es un problema, todavía sigue siendo manejable en términos comerciales”, sostuvo la representante de la Cadena Piscícola del Huila. Como en el caso del Departamento del Huila, el estudio constituye un gran avance para empezar a desarrollar políticas en el país con respecto a la enfermedad, que redunden en un control sanitario sobre el expendio de tilapias que padecen la infección.
Domingo 8 de junio de 2008
Unimedios
Fotos cortesía Carlos Arturo Iregui
Magda Páez Torres,
9
10 Medio ambiente Patricia Barrera Silva,
Unimedios
La zoonosis puede ser producida por diferentes virus, bacterias, hongos, parásitos o priones, que son proteínas infecciosas causantes de un grupo de patologías neurodegenerativas letales, de las cuales la más temida es la llamada enfermedad de las vacas locas. Se habla de zoonosis emergentes cuando una enfermedad transmisible, de reciente aparición –20 años o menos– afecta o amenaza regiones geográficas donde nunca antes se había diagnosticado. Como ejemplos podemos destacar: VIH/SIDA, gripe aviar, hantavirus, virus de la hepatitis C, encefalitis virales, ébola, etc. Las zoonosis reemergentes son aquellas enfermedades transmisibles, previamente conocidas, que aparecen como un problema de salud pública, tras una etapa en las que se creían controladas. Tal es el caso del dengue, la fiebre amarilla, la tuberculosis, el cólera, la malaria, la toxoplasmosis o los histoplasmosis. A la fecha hay casi 300 zoonosis identificadas. La aparición de zoonosis emergentes y reemergentes no puede atribuirse a una única causa, pues en general son múltiples los factores que intervienen: la globalización, el libre comercio, el turismo, problemas sociales como el empobrecimiento, el aumento vertiginoso de la población, y hasta los conflictos armados. Pero, especialmente, el calentamiento global.
Reaparición
de enfermedades
extintas
Las enfermedades compartidas entre los animales y el hombre, conocidas como zoonosis, son tan antiguas como el origen de la humanidad misma. Sin embargo,
esta problemática continúa vigente. Recientemente, los medios de comunicación han registrado la aparición de brotes de rabia, fiebre amarilla y dengue, entre otros males, en diferentes partes del mundo. Urge entonces la creación de un frente común entre autoridades de la salud y la población.
Domingo 8 de junio de 2008
La Organización Panamericana de la Salud, OPS, desde el año 2005, en una reunión de expertos, recomendó 4 posibles estrategias para prepararse ante la emergencia y reemergencia de zoonosis, dentro de las cuales planteaba el fortalecimiento de las redes nacionales de vigilancia, la alerta temprana y la respuesta rápida a las enfermedades infecciosas, así como el impulso a la investigación. Sin embargo, estas recomendaciones chocan de inmediato con una realidad colombiana que expone el doctor Luis Carlos Villamil, investigador y docente de epidemiología y salud pública veterinaria de la Universidad Nacional hasta el año pasado y actual director de programas de posgrado en Ciencias Veterinarias en la Universidad de la Salle. “Durante las últimas décadas los servicios de sanidad animal y los de salud pública veterinaria de Colombia y de los países de América Latina, han enfrentado una pérdida de capacidad operativa por la reducción de recursos. Por eso, en Colombia, los servicios oficiales de salud animal han bajado la guardia”, dice Villamil.
Capacitándonos
Panorama en Colombia José Daniel Pabón, geólogo de la Universidad Nacional de Colombia sostiene que “la sociedad empezó a actuar desde hace unos 3.000 o 4.000 años, que es lo que tiene la civilización, pero es en los últimos 250 ó 300 años cuando esa intervención se ha hecho más fuerte, porque a partir de la revolución industrial se empezaron a consumir combustibles fósiles y a emitir gases de efecto invernadero en la atmósfera. Entonces, ahí se disparó el calentamiento, que no es igual en todas partes.” Nuestro país no es ajeno al tema del calentamiento. El profesor Óscar Rivera García, médico veterinario y zootecnista, fundador de la Asociación Colombiana de Médicos Veterinarios y Zootecnistas Especialistas en Avicultura (AMEVEA), lo advierte: “cierto tipo de mosquitos que, por ejemplo, antes no se veían en Bogotá a una altura de 2.640 metros sobre el nivel del mar, hoy son comunes en muchas residencias, especialmente en las situadas al pie de
Abandono al tema de la Salud Pública
Vista microscópica de larvas del mosquito que produce la malaria. Tomado de la Revis-
ta Progress del Banco Mundial 1999 – 2000. humedales. Hoy sobreviven y se han adaptado no solo a la altura sino también a una temperatura de 18 grados centígrados.” El geólogo Pabón ratifica esta situación. “En los últimos 50 años la temperatura en el país ha variado entre medio y un grado celsius y se están haciendo nuevas estimaciones para saber si esta variación está aumentando. En cuanto al nivel del mar, está ascendiendo a una tasa de 3 a 5 milímetros por año. Entonces, efectivamente hay una expresión del cambio climático y del calentamiento global en Colombia, y eso afectará a la agricultura, a los ecosistemas y a los recursos hídricos.” Pabón, en asocio con Rubén Santiago Nicholls, del Instituto Nacional de Salud, analizaron los efectos del Fenómeno de El Niño en la incidencia del paludismo y del dengue
en Colombia, y expusieron que en 1998, cuando se presentó este problema, el más intenso del que se tenga noticia hasta ahora, hubo un incremento inusitado de casos de paludismo en Colombia, pasando de 180.910 en 1997 a 256.697 en 1998, un aumento del 42%. “El calentamiento lo que está haciendo es que lo que conocemos como pisos bioclimáticos vayan ascendiendo; en nuestro país, donde hay una gran variedad de territorio y montañas, hay un clima promedio establecido y a ese clima promedio se han adaptado diferentes especies vegetales y animales. Tanto las plantas como los animales son propensos a tener plagas, ácaros, garrapatas… y las plagas también están adaptadas a un clima, pero en la medida en que los pisos bioclimáticos empiecen a desplazarse hacia arriba, se empiezan a des-
plazar también las especies animales y vegetales, y por supuesto también aquellas especies que se consideran plagas”, sostiene Pabón. Un ejemplo puede ser la malaria. A medida que aumente la temperatura, van a existir más vectores y también va a haber una zona más amplia donde podrán sobrevivir los zancudos. “Entonces, población que antes no estaba expuesta, va a estar expuesta. Cada vez habrá más población y más sitios donde haya incidencia en malaria y lo mismo sucede con el dengue”, asegura Pabón. Según el geólogo de la Universidad Nacional, la temperatura de regiones como el bajo y medio Magdalena tuvieron incrementos de 2,4 a 2.8°c. También los centros urbanos están en mayor riesgo, pues crean sus propios microclimas con los gases que emiten.
Dentro de las iniciativas que actualmente se vienen desarrollando en el país para conocer y entender más el tema de las enfermedades zoonóticas emergentes y reemergentes, están las realizadas por AMEVEA, asociación que anualmente realiza dos seminarios en el país, uno nacional y otro internacional, y dentro de su agenda trata temas relacionados con la salud de las aves, en especial la influenza aviar. Así mismo, la Red de Salud Pública Veterinaria, que tiene como objeto social desarrollar actividades de investigación, educación e intervención en ese tema, llevará a cabo una Jornada Nacional de Zoonosis Emergentes y Reemergentes, que se realizará entre el 21 y 22 de agosto en Bogotá. El doctor Ciro Peluffo, miembro de la Academia Nacional de Medicina de Uruguay, describe cómo hasta hace unos 30 años el impacto de las enfermedades trasmisibles parecía controlado y, “como consecuencia, se redujo el interés así como las inversiones en investigación”. Ese desinterés en el tema de las zoonosis comienza a pasar su factura de cobro. “Será necesario ahora instrumentar una estrecha colaboración entre médicos humanos y veterinarios, biólogos, epidemiólogos, ecólogos y climatólogos a nivel mundial, para enfrentar los riesgos presentes de las infecciones emergentes y reemergentes”, sostiene Peluffo.
Investigación
Parado en sus patas posteriores, en las cuales sostiene más de 300 kilos de su propio peso, el cerdo eyacula entre doscientos y cuatrocientos mililitros de esperma. Si por cada espermatozoide concibiera una cría, sería el progenitor de sesenta mil millones de lechones. Es un buen macho, sin duda. Lo ideal sería que a pesar de su inevitable y pronta muerte, él fuera el padre de cientos y cientos de cerdos de alta calidad genética: un reto que si en el pasado fue un imposible, ahora se vislumbra como una posibilidad real, tangible y productiva. A diferencia de otras especies, la inseminación en porcinos con semen congelado es una labor difícil y frustrante. Mientras que con la esperma refrigerada una cerda puede concebir una camada superior a los diez lechones, con su congelación la cría es inferior a los seis porcinos. Desde hace dos décadas, países como Canadá, Estados Unidos, Francia, Suiza y Austria han tenido una preocupación constante por este tipo de desarrollo porcino. Según el profesor Guillermo Henao, director del Departamento de Producción Animal de la UN en Medellín y miembro del Grupo de Investigación en Biotecnología Animal, “en Colombia, los primeros intentos de inseminar con semen congelado se dieron en 1986 y posteriormente en 1989, con la réplica de una fórmula norteamericana, la cual estaba destinada a tener unos resultados deficientes”. Hoy, después de 22 años de trabajo investigativo, los científicos de la Universidad Nacional en Medellín lograron que cuatro cerdas tuvieran unas camadas prometedoras por medio de la inseminación artificial con semen congelado producido en la región: dos cerdas tuvieron once lechones y las otras dos, siete crías.
Un proceso bien concebido Normalmente, la inseminación artificial en porcinos se hace con semen refrigerado. Con este proceso, se obtiene el esperma por método manual, se estudia, se diluye y se guarda a un temperatura promedio de 17 grados centígrados. Según Andrés Pareja López, zootecnista y egresado de la Maestría en Biotecnología de la Universidad Nacional, “éste se mantiene bajo unas condiciones climáticas estables para conservar las células viables y con capacidad de fertilización durante alrededor de cinco a nueve días con los diluyentes más desarrollados”. El sistema es frecuentemente utilizado en los sistemas de producción porcícola. En cambio, el semen congelado se ha utilizado únicamente en países co-
Primeras crías porcinas de semen congelado
Luego de múltiples intentos, investigadores de la Universidad Nacional de Colombia lograron la inseminación artificial de cuatro cerdas, con semen congelado
procedente de la región antioqueña. Ello supone a largo plazo una mayor producción porcina con una genética cuidadosamente seleccionada. mo Estados Unidos y Bélgica para conservar material genético de un macho con características deseables de trasmitir y no con fines comerciales, dadas sus bajas tasas de concepción. Por ello, el Grupo de Investigación en Biotecnología Animal de las Facultades de Ciencias y Ciencias Agropecuarias de la UN, reconocido en categoría A de Colciencias, ha venido trabajando en la línea de gametos y embriones para el procesamiento y conservación del semen porcino. Según el profesor Guillermo Henao, “el semen de porcino ha tenido muchas dificultades para su congelación, debido a que la membrana de los espermatozoides tiene unas particularidades que lo hacen diferente al de otras especies”. En un inicio, este grupo de investigadores trabajó con la Organización de Programas de Inseminación Artificial a nivel de granjas porcinas y con ellos se hicieron varios proyectos que contaron, además, con la colaboración de estudiantes de pregrado y posgrado. El profesor Guillermo explica que “nuestro grupo de investigación ha revisado la bibliografía de congelación de semen a nivel mundial y ha encontrado que los españoles, sobre todo en la Universidad de Murcia, van muy adelante en este tema. Por eso, nos basamos en sus investigaciones para hacer nuestros ensayos, los cuales
también han sido asesorados por ellos”. Aplicando la técnica española con métodos colombianos y con una financiación de la porcícola La Linda, ubicada en el municipio de Santa Rosa de Osos, en el norte de Antioquia –que además proporcionó la granja, los ejemplares porcinos, los diluyentes y el equipo técnico– tres investigadores principales y tres estudiantes adelantaron el proceso de inseminación. “Congelamos el semen de diez reproductores de reconocida fertilidad, entre uno y tres años de edad, utilizando el mejor antioxidante, en la mejor concentración. Con cuatro dosis que se aplicaron se logró inseminar a cuatro cerdas. A los 33 días se les hizo la ecografía y todas estaban gestando. Al tiempo, después de 312 días, nacieron cuatro camadas, dos de once y dos de siete, tras una gestación que transcurrió normalmente”, señaló el investigador Henao. El zootecnista Andrés Pareja López explica que “recientemente se han desarrollado herramientas para evaluar el tipo de perjuicio que ocurre en el espermatozoide con este sistema, el cual consiste en el daño a la membrana plasmática y en el ADN”. El interés apunta a dejar estandarizadas las técnicas para seguir haciendo el procedimiento. De acuerdo con Francisco Roldán, gerente de la porcícola La Linda, “en el
país están establecidos todos los mecanismos y leyes para manejar y controlar esta nueva técnica. Existe la reglamentación pero no se había dado en la práctica, porque todavía no se habían aplicado en el terreno”.
Un futuro prometedor El semen congelado supone altas ventajas biológicas y productivas, tales como su transporte y distribución en el espacio, y su perdurabilidad en el tiempo. Según la bibliografía sobre el tema, se calcula que tienen que pasar entre 3 mil y 10 mil años para que se mueran la mitad de células que están almacenadas bajo el sistema de congelación. Otros de sus beneficios son la posibilidad de guardar información genética y reproducir porcinos de calidad, es decir, con menor grasa dorsal, más número de lechones por camada y mayor ganancia de peso con menos alimentación.
El alto costo de la carne Mientras el consumo de carne de cerdo en el mundo fue en promedio de 15.6 kilos al año por persona en 2005, en Colombia fue de 3.26. Para 2007, esta cifra se ubicó en los 4.28 kilos, según la Asociación Nacional de Porcicultores. Para explicar su bajo consumo, es necesario tantear variables tales como el
costo, la calidad, la oferta y el sistema cultural de las regiones. “El cerdo es aún desconocido en muchas zonas. Además, se tiene la idea vieja de que su carne contiene mucha grasa y colesterol. En la actualidad, este alimento es mucho más magro y de alto contenido nutricional”. Al desarrollar y aplicar nuevas técnicas científicas se podría favorecer a largo plazo la productividad porcícola. En el presente, Asoporcicultores plantea que los principales exportadores son Dinamarca, Canadá, Países Bajos, España y Bélgica. En cambio, nuestro país produjo 148.239 toneladas de carne de cerdo en el 2006, representando tan solo el 0.14 en la participación mundial. Así mismo, se considera que uno de los costos superiores en la etapa de producción porcina son los alimentos y, en mayor proporción, la mano de obra. Por ello, se espera que con la relación científica–productiva la etapa de levante porcina contribuya también a la disminución de gastos, puesto que con el mejoramiento genético es posible que los animales ganen mayor peso con menor alimento. El profesor Henao sostiene que “el paso siguiente es inseminar a 200 cerdas, y no a cuatro, como la primera vez, no de un solo reproductor sino de diferentes, para comprobar el éxito y la aplicabilidad de la fórmula”.
Domingo 8 de junio de 2008
Unimedios
Archivo particular
Aldemar Echavarría,
11
Nelly Mendivelso,
Domingo 8 de junio de 2008
Unimedios
Samanea saman, el campano árbol grueso y de tallo corto con apariencia de sombrilla, que acicala los bordes del río Sinú, se está ahogando en sus aguas. La libertad natural con la que fluía esta arteria fluvial que baña a 17 municipios de Córdoba, fue alterada por Urrá. En una de las inundaciones imprevistas se anegó la zona, y no solo la pesca, de la que dependen miles de familias campesinas, pescadores, areneros y productores está decayendo; también los campanos de Samanea saman. Que el Sinú se esté quedando sin la sombra de esta especie vegetal no es quizá el problema más grave que tienen ciénagas y humedales de la Costa Caribe, como la Ciénaga de Zapatosa, la de Charco Pescado, Pantano Bonito, Bañó, entre otras, representativas de la riqueza de estos ambientes por la diversidad de su flora, fauna y ecosistemas. La dificultad más grave, es que los mapas oficiales no reflejan lo que ha venido ocurriendo en estas zonas del país. Por lo menos así lo señalan investigadores del Grupo en Biodiversidad y Conservación del Instituto de Ciencias Naturales (ICN) de la Facultad de Ciencias de la Universidad Nacional, quienes se han enfrentado a una “cartografía obsoleta”, a la hora de adelantar sus investigaciones sobre la parte física y biótica de las ciénagas y sus áreas de influencia. En travesías a pie, a lomo de mula y en chalupa, han recorrido los bordes de cuerpos de agua como la Laguna de Zapatosa, en la parte que corresponde al departamento del Cesar. “Se creía que esta ciénaga estaba invadida por la sedimentación de los ríos, por eso la mayoría de pobladores de los municipios ribereños, como Chimichagua, manifestaban su preocupación, pues además se decía que la contaminación minera afectaba la navegación y el comercio”, señala Henry Arellano, biólogo del ICN. Los estudios sobre estas ciénagas que contaron con el apoyo de Corpocesar y la Corporación Autónoma Regional de los Valles del Sinú y San Jorge (CVS), permitieron clarificar los procesos ecológicos y establecer que la gran pérdida de agua en temporada seca es el resultado del trabajo natural hecho por el río Magdalena en los bancos de arena del sector sur –muy dinámico a lo largo del año– y la devolución natural a la atmósfera que permite que el norte de Colombia sea tierra fértil para la agricultura. “Nuestro objetivo era caracterizar la zona físicamente, determinar su batimetría (medidas de las profundidades para calcular la superficie del fondo y volumen) y su parte biótica”, dice Arellano.
Mapas de Colombia
están desactualizados A pesar de los avances tecnológicos y las nuevas herramientas digitales para elaborar en detalle los mapas del país, la cartografía que se vende y distribuye como oficial está desactualizada y es obsoleta,
dicen investigadores del Instituto de Ciencias Naturales de la Universidad Nacional de Colombia. El Instituto Geográfico Agustín Codazzi habla de los avances cartográficos que se han logrado en los últimos cinco años e invita a revisar mejor los mapas del país.
Cortesía Henry Arellano Peña
12 Investigación
Mapa batimétrico detallado para la Ciénaga de Zapatosa en abril de 2007 (atípico). Los resultados y beneficios a la población serían mayores si se contara con el modelo SRTM de 30 metros restringido para su uso por entidades gubernamentales. La cartografía base es construcción propia e información parcial del IGAC 1:100.000.
Para este análisis tomaron como guía el mapa oficial que elabora el Instituto Geográfico Agustín Codazzi (IGAC). La sorpresa fue mayor cuando evidenciaron que la delimitación de la ciénaga tenía grandes incongruencias en cuanto al área. “A escala 1:100.000 mostraba inexactas las variaciones altitudinales de la ciénaga, los bordes no correspondían con lo observado en el campo y se notaba un precario trabajo digital en los documentos del IGAC, copia de los mapas del Departamento de Defensa de los Estados Unidos al igual que la mayoría de mapas 1:100.000 de zonas productivas del país”, asegura Arellano. Del mismo modo en la cartografía aparecía como pavimentada una carretera que nunca lo ha estado: la que de El Banco (Magdalena) conduce a Chimichagua (Cesar), municipio ubicado al norte de Zapatosa. Total, los investigadores tuvieron que “complementar la tenue información que reflejan los mapas oficiales”,
explican. Reinterpretaron imágenes de satélite de los años 2005, 2006 y 2007, y a la misma escala (1:100.000), rehicieron las curvas de nivel y los bordes de la ciénaga con los cambios que alteraban el patrón de drenaje a lo largo del año. Así elaboraron sus propios mapas, a los que les incluyeron la geomorfología, los suelos y la vegetación de la zona. Según el estudio, esta ciénaga, quizá una de las más importantes del país (ecológica y económicamente), tiene un mínimo de llenado (en abril de 2007 promedió 241 millones de metros cúbicos de agua) y un máximo de llenado (que alcanzó los 2.595 millones de metros cúbicos). “Esta diferencia del nivel de las aguas, casi del 90%, genera que la población emigre hacia las zonas menos inundadas, y en su afán por ganarle terreno a la ciénaga, construya diques para evitar que el agua arrase sus nuevos asentamientos”. Y como cualquier cambio afecta el entorno, ha si-
do evidente el taponamiento artificial de las ciénagas que no permite, en ciertas épocas del año, el libre movimiento de los tipos de vegetación acuática, acción que genera un impacto sobre la pesca. Los más afectados: los pobladores de Chimichagua, Tamalameque, Belén, Candelaria y Saloa que dependen de la ciénaga y por lo tanto urgen de planes de acción reales y concretos. Aunque los objetivos planteados en el grupo de estudio de la UN no son de carácter catastral o de obras civiles, su director, profesor Orlando Rangel, argumenta: “Nos hemos enfrentado a esta problemática no solo en Zapatosa, que se torna dramática cuando los objetivos que se deben cumplir deben satisfacer escalas aun inferiores sobre la cartografía existente, por ejemplo cuando debemos llegar a la escala 1:25.000, necesaria para elaborar los planes de manejo de los humedales y ciénagas de la Costa Caribe que tienen importancia trascendental en la economía
local regional y nacional”. Las falencias observadas se refieren a cursos alterados de los ríos y quebradas, creación de diques y obras civiles, vías inexistentes o nuevas, crecimiento poblacional, alteración de límites de cuerpos de agua durante el año, de límites prediales y detalles importantes de la toponimia, entre otras.
Cartografía y desarrollo del país La cartografía es fundamental para especializar la información que se produce en diferentes disciplinas como la economía, las ciencias naturales, la ecología, la sociología y constituye un pilar sobre el cual gravitan los planes de desarrollo local, regional, nacional y global. En Colombia, desde el siglo 19, contribuciones clásicas como las del naturalista Vergara y Velasco así lo visualizaron, y luego se consolidó el proceso con la comisión corográfica a cargo de Agustín Codazzi.
13
Cortesía Henry Arellano Peña
Investigación
Cortesía J. Orlando Rangel-Ch.
A la izquierda detalle de la cartografía 1:100.000 para la Ciénaga de Zapatosa (Cesar y Magdalena) generada por el Departamento de Defensa de los Estados Unidos en la década del setenta (DMA). A la derecha cartografía digital, copia de la anterior distribuida por el IGAC como oficial (plancha 55). Nótese las similitudes y la deficiente calidad de la copia.
Desde la segunda mitad del siglo pasado, la tarea titánica de organizar, ordenar y distribuir todo lo relacionado con la información espacial cartográfica, ha estado en cabeza del Instituto Geográfico Agustín Codazzi que contó con la colaboración de entes de investigación muy valiosos como el Centro de Investigación y Desarrollo en Información Geográfica (CIAF). “Sin embargo, desde hace unos 15 años, no obstante el avance en tecnologías en el mundo, en la cartografía del IGAC no se reflejan estos giros y prácticamente el recurso cartográfico ha permanecido igual. No se enriqueció”, asegura el investigador de la UN, Orlando Rangel. En sus trabajos de campo han detectado inconvenientes en las planchas cartográficas de diferentes regiones del país, lo cual se ha traducido en mayor inversión de tiempo y generación de líneas base que “debían ser suministradas por la entidad a la cual se le ha
campanales de Samanea saman se están ahogando debido a las inundaciones esporádicas causadas por Urrá.
asignado esta misión”. Un ejemplo lo da el ictiólogo Germán Galvis, del Departamento de Biología y el ICN, con el mapa ecológico que se hizo del departamento de Arauca. En esta cartografía se clasifica a los Llanos Orientales como bosque seco tropical, cuando en realidad buena parte de la región son sabanas naturales. “Este mapa está basado en conceptos de los años 60 que aseguraban que los indígenas Guahibos habían tumbado y quemado áreas de bosque para sembrar yucas, plátanos y otros alimentos, hasta que terminaron convirtiendo el terreno en sabanas (pastizales)”, dice el ictiólogo. Este concepto hoy revaluado, según el investigador, incide en los planes de ordenamiento territorial, al punto que “para contrarrestar lo que fueron claros de una colonización, se están montando planes de reforestación en zonas en las que nunca hubo bosques. Un ejemplo de ello son partes de los terrenos de Carima-
gua que se querían adjudicar a unos empresarios para su reforestación, o el proyecto Gaviotas, que desde hace años pretende reforestar los Llanos con pino caribe. Hasta el momento se han malgastado miles de millones de pesos, pues los pinos no han prosperado, ni lo harán en medio de una sabana o pastizal”, señala Germán Galvis. Este mapa ecológico data de 1962. Según Galvis no ha sido corregido pese a los avances tecnológicos (sensores remotos de alta resolución). Algo similar observa en otras zonas del país. “En el Magdalena Medio, cerca a la Dorada y en proximidades de Aguachica, entre los años 50 y 70 se deforestaron más de cuatro millones de hectáreas, y en vez de los bosques que registran los mapas, lo que hay es potreros llenos de ganado. En Caquetá y Putumayo también se han tumbado entre tres y cuatro millones de hectáreas en los últimos diez años. Cuando uno ve un mapa imagina que hay una selva llena de
micos, pero resulta que lo único que uno encuentra son vacas y coca”, sostiene Galvis. En la lista de cambios que aún no han sido registrados aparece una carretera que de La Uribe (Meta) conduce a Colombia (Huila). “La hizo la guerrilla y no figura en ningún mapa”, concluye Galvis, para quien la cartografía existente “es un pálido reflejo de la cartografía, por demás excelente, elaborada por la Agencia de Defensa de los Estados Unidos en Panamá durante la época de la guerra fría. El problema es que no se renueva y se vuelve a imprimir en otro papel, con otros colores, y se vende como cartografía oficial de Colombia”.
Cartografía ¿a la inversa? Los procesos de generalización cartográfica parten de modelos muy detallados del entorno geográfico (escalas inferiores como 1:25.000) a modelos simplificados (ge-
neralizados como 1:100.000) que explican en síntesis los rasgos más importantes de determinada región o zona. Según Jaime Alberto Duarte, jefe de la División de Fotometría del IGAC, esta entidad le ofrece hoy al país un cubrimiento nacional de la cartografía a escala 1:500.000 y 1:100.000, mientras cinco millones de hectáreas cuentan con escala 1:25.000 y 300 municipios con escala 1:200.000. Esto en razón a un proyecto del IGAC realizado a partir de 2003, con colaboración de entidades nacionales e internacionales como la Unión Europea y la Agencia Espacial de los Estados Unidos, que le ha permitido al IGAC mejorar su agilidad en el desarrollo de la cartografía y adquirir tecnología de punta como sistemas satelitales y cámaras digitales. Según las proyecciones del estudio publicadas en la página Web, “en la fase inicial se estimó un cubrimiento del 45% en la cartografía en formato análogo (papel) y 18% en formato digital a es-
Domingo 8 de junio de 2008
Ciénaga de Bañó (Córdoba). Los
cala 1:100.000, y se espera un 26% de cubrimiento cartográfico a escala 1:25.000 para el año 2010, logrando así contribuir con metodologías y herramientas para elaborar cartografía temática especializada en gestión de los recursos naturales, prevención de catástrofes, medio ambiente, monitoreo de cultivos ilícitos y planificación territorial, entre otros”. Para los investigadores de la UN, aunque los beneficios que se derivan de la información obtenida por el IGAC son valiosos, ya que se logró el 100% de cobertura a escala 1:100.000, la realidad aplicada –es decir los alcances de la acción– en la actualidad (mayo del 2008) parecen mostrar una realidad diferente: “La desactualización de la cartografía básica de gran parte del país, se hace evidente con las cifras mencionadas por el IGAC, que ilustran la existencia de un 45% (1:100.00) y un 12% (1:25.000) de cartografía desactualizada y en gran parte obsoleta que sirvió como plataforma para fundamentar las propuestas de los planes de desarrollo y permitió igualmente acometer las obras civiles y públicas más importantes del país”, asegura Arellano. Entre tanto, indican que el proceso mencionado por el IGAC se realizó a la inversa, es decir de lo general al detalle, que conlleva acciones de restitución, la mayoría de veces incompatibles y con demanda de grandes esfuerzos debido a que los productos provienen de diferentes niveles de detalle. En las cuentas del IGAC, un mayor detalle implica más complejidad para la elaboración de cartografía, inversiones superiores y por ende, mayores costos: “Cuando se piensa en el país como una gran región, se necesita primero conocer el territorio en su conjunto para luego elaborar los proyectos de planeación”, aclaró Duarte. Por el contrario, para los investigadores del ICN, “casi nunca un proyecto de desarrollo se hace a escala 1:100.000, además es evidente que se gasta menos con el proceso detallado que no implica elaborar dos series cartográficas; solo basta con una para generar la otra”. En cuanto a las metas del IGAC, Duarte señala que “con el dinero que nos da el Estado como aporte, se puede hacer el 26% de cartografía en escala 1:25.000 de aquí al año 2010”, y recalca que “tampoco se puede hacer en cinco años lo que no se había hecho en setenta”.
Domingo 8 de junio de 2008
Los POT y los EOT en los mapas La pregunta que surge es ¿Entonces, sobre qué base cartográfica se elaboraron los Planes de Ordenamiento Territorial (POT), para municipios mayores de 100 mil habitantes, y los Esquemas de Ordenamiento Territorial (EOT) para municipios menores de 30 mil habitantes, si
Fuente Henry Arellano Peña
14 Investigación
En el año 2007 las variaciones del volumen entre la temporada seca y la de lluvias en la Ciénaga de Zapatosa están alrededor del 90 %.
La naturaleza y la humanidad cambian constantemente el entorno físico.
la actualización de la cartografía empezó hace cerca de cinco años? ¿Acaso sobre una cartografía desactualizada? Esta es la respuesta del IGAC: “Es conveniente señalar que a partir del año pasado se cumplieron los diez primeros años de nacimiento de la primera ley de ordenamiento territorial que obliga a cada uno de los municipios a que actualice sus POT. Ya existe información cartográfica básica para que los POT se puedan desarrollar. Hay 300 municipios, de los 1.100 que tiene el país con cartografía a escala 1:200.000. Los más de 700 que faltan cuentan con fotografía aérea actualizada que les permite desarrollar sus diferentes POT”, argumenta Jaime Duarte. Al contrario, los investigadores de la UN advierten “revisamos numerosos POT y EOT para nuestros proyectos y ninguno nos sirvió. Son deficientes y con precaria información, como el de Chimichagua, San Diego, Codazzi y La Paz”. Según el IGAC, éste viene generando cartografía durante los 73 años de existencia conforme a las metodologías de la época, hay de los años 60, 70, 90 y se va modificando de acuerdo con los cambios que hay en el territorio. “Además, durante los últimos cinco años se están haciendo actualizacio-
nes en tiempo récord”, sostiene Jaime Duarte. El problema es que, “mientras se llega al detalle, siguen la pérdida de biodiversidad, la deforestación, los pleitos de límites entre los departamentos por trazos confusos en las líneas divisorias, como en el caso de Antioquia y Chocó en la región del Atrato”, aseguran los grupos de investigación de la UN, que han construido sus propios mapas (no oficiales), detallados, y con “las uñas”, pues parten de sistemas de información geográfica de código abierto como el GNU, software libre. “Lo paradójico es que el IGAC como entidad oficial encargada de elaborar la cartografía, cuenta desde principios de esta década con el modelo de elevación digital SRTM 30 metros, suministrado por la NASA, que otorgaría a los proyectos en desarrollo un mayor nivel de detalle, por ejemplo, para elaborar los mapas de amenaza de una región, la hidrografía o la modelación de cuencas. El problema es que restringe su uso cuando podría utilizarse para el beneficio del país en proyectos como los modelos batimétricos desarrollados en nuestros estudios. Países como Estados Unidos, Brasil y muchos en Latinoamérica lo liberaron debido a su importancia en la investigación; en Colombia se desconocen
los motivos y todo apunta a un control excesivo y sin fundamento lógico de las entidades estatales”, dice Henry Arellano. Miguel Ángel Cárdenas, subdirector del IGAC, puntualiza que el uso de esta herramienta tecnológica se ha diversificado a entidades de orden nacional como Ingeominas, el Instituto Alexander Von Humboldt e institutos de investigación oficial, como se estableció en el convenio con la Nasa. “Cuando los investigadores solicitan el modelo, previamente delimitada la zona de estudio, se les entrega indicándoles cuáles son las medidas de derechos de autor y reserva que se deben cumplir”. Mientras el subdirector del IGAC reconoce que la necesidad de actualizar la cartografía es evidente y al paso que va la tecnología hay que ser creativos, pues, “la tendencia es olvidarse de los mapas vectoriales y manejar todo a partir de imágenes de satélite o de cámaras aerotransportadoras, entre otros”, las observaciones del ICN señalan que los productos digitales distribuidos por donación o venta por el IGAC tienen también problemas de datos, vectores y polígonos. Para Arellano, “en el caso de los mapas de suelo es frecuente encontrar que
no son precisos en cuanto a la delimitación de las unidades. Ello se corrobora al superponer un producto de este tipo con uno elaborado a partir del modelo de elevación digital SRTM V–3”. “La cartografía puede tener inconvenientes, pues levantarla es un proceso complejo, recorrer el país es muy costoso, y las planchas que se hacen en el IGAC advierten a los usuarios que si encuentran un error u omisión, por favor se la comuniquen al Instituto para su corrección. La información cartográfica básica es fuente para que los expertos en determinadas temáticas realicen sus propias evaluaciones y análisis, pues nosotros no hacemos mapas temáticos”, explica el subdirector del IGAC. Por su parte para los investigadores del ICN, en la actualidad no hay necesidad de recorrer el país para actualizar la cartografía, ya que para eso están los sensores remotos y las bases informáticas, se requiere es implementar rutas adecuadas para realizar estas actualizaciones y establecer las alianzas estratégicas que permitan elevar la calidad de los productos que se ofrecen, en los cuales debe figurar el conocimiento que generan los grupos de investigación en Colombia.
Necesidades del país o el futuro Ciento cincuenta años después de que la Comisión Corográfica empezara a construir los mapas y dibujos de los paisajes de Colombia, el país sigue reclamando información cartográfica detallada como la que promete ofrecer a escala 1:25.000 el IGAC, “y bueno hubiese sido que su cobertura fuera mayor, puesto que la que tenemos muestra una visión restringida de la realidad territorial del país”, señala el biólogo Orlando Rangel. Con las nuevas tecnologías es posible generar cartografía superdetallada en menos tiempo y junto con la información de entidades como las empresas de energía, de teléfonos y de otros servicios, consolidar una información útil y precisa para el desarrollo de un país tan variado y rico en paisajes, ambientes como en conflictos de intereses en cuanto al uso de la tierra. “Acá conviene recordar que la escasa utilización práctica de los POT y EOT y el real significado de sus alcances, por ejemplo controlar el aumento o avance de la frontera agrícola y la realización de obras civiles en zonas que debieron ser declaradas de reserva, nos muestra que además de decisiones políticas equivocadas, una de las posibles causas podría residir en la cartografía empleada, que quizá fue de calidad muy inferior a la requerida para una correcta zonificación ambiental”, concluye el grupo de investigación de la UN.
Investigación
Al revisar las cifras de producción lechera a nivel mundial, la mastitis bovina es considerada la principal causa de pérdidas económicas, con costos anuales estimados para el 2002 en 35 billones de dólares, según el investigador G.J. Wellenberg. Además, en el continente americano es la patología responsable del 26.5% de los sacrificios de vacas lecheras. Tradicionalmente el control de la mastitis bovina ocasionada por factores ambientales, genéticos, de manejo y por patógenos directos, se realizaba a través de diferentes metodologías, entre las que se encuentran los tratamientos con antibióticos y el uso de bacteriocinas como la nisina y lacticina, que son producidas por bacterias ácido–lácticas. Desafortunadamente, estas metodologías han reportado diversos inconvenientes. “El uso de bacteriocinas produce resistencia microbiana en los bovinos, y los antibióticos, además de altos costos, generan contaminación y notable disminución de la calidad industrial de la leche”, afirmó Liliana Serna Cock, Ph.D en Ingeniería de Alimentos y líder de la investigación adelantada en la Universidad Nacional de Colombia en Palmira. Debido a las consecuencias ocasionadas por estas y otras metodologías implementadas para combatir la enfermedad en bovinos, el uso de una bacteria ácido-láctica capaz de inhibir biológicamente estos microorganismos productores de la mastitis, gracias a sus mecanismos de defensa. Nace como una alternativa innovadora, más aún en Colombia, donde no se cuenta con cifras concretas de la enfermedad, ni están cuantificadas con precisión las pérdidas económicas que la mastitis genera.
Aislamiento de bacterias Según la profesora Serna Cock, el estudio en la primera fase consistió en la evaluación in vitro del efecto antimicrobiano de cepas ácidoláctica aisladas de bovinos de raza Hartón del Valle. Estos animales fueron inducidos a una acidosis ruminal aguda (un trastorno digestivo), mediante el empleo de alimentos concentrados (NDT 80%) en cantidades crecientes de 1200 gramos, hasta alcanzar el comportamiento metabólico requerido. “Bajo estas circunstancias se tomaron muestras de líquido ruminal y posteriormente se hicieron los aislamientos de bacterias ácidolácticas”, indicó Serna Cock. Una vez aisladas las bacterias productoras de ácido láctico, los investigadores las sometieron a un medio de cultivo específico, donde crecieron y fueron seleccionadas las bacterias ácido–lácticas homofermentativas, es decir, según afirmó la investigado-
Nueva forma de erradicar
mastitis bovina
Investigadores de la Universidad Nacional de Colombia en Palmira hallaron en una bacteria la fórmula para controlar biológicamente la mastitis bovina o inflamación de la glándula mamaria. La especie, denominada Weisella confusa, es dos veces más efectiva que los tratamientos con bacteriocinas tradicionales.
Ganado Hartón del Valle del Centro Experimental de la Universidad Nacional en Palmira, CEUNP.
detectan bacteria útil para el control de la mastitis bovina. ra, se escogieron las cepas que producen acido láctico como principal resultado de su metabolismo. Para examinar el poder antimicrobiano, se pusieron en contacto las bacterias productoras de acido láctico homofermentativas con los microorganismos que están principalmente asociados a mastitis bovina, Staphylococcus aureus y Streptocooccus agalactiae. “Al final de esta prueba encontramos 11 bacterias ácido–lácticas; cuatro de ellas fueron activas contra los dos microorganismos probados. Pero de esas cuatro, una resultó ser la más promisoria, por su alto poder de inhibición generado en los ensayos”, aseguró la profesora Serna. Los investigadores identificaron bioquímicamente a la bacteria como de género Weisella, especie confusa. “Consiste en una bacteria ácido-láctica homofermentativa, con actividad antimicrobiana contra los patógenos productores de mastitis, que reporta el doble de la inhibición de lo registrado por nisina y lacticina para los dos microorganismos probados”, dijo la profesora Serna Cock. El proyecto de investi-
gación fue apoyado por la Dirección de Investigación de la UN Palmira –DIPAL– y el Grupo de Investigación en Conservación, Mejoramiento y Utilización del Ganado Criollo Hartón del Valle. Según el profesor Rómulo Campos, Ph.D en Ciencias Veterinarias y miembro de este grupo de investigación, “la mastitis es la patología más agresiva que presentan los bovinos lecheros, pero el ganado criollo Hartón del Valle ha demostrado ser menos propenso a esta enfermedad que animales de otras razas, tal vez por la conformación de la ubre o algún factor genético no identificado que contribuye a este comportamiento”. Por esta razón, añadió Campos, “el objetivo del Grupo de Investigación con este trabajo fue identificar si en el ganado Hartón del Valle existen factores con propiedades protectoras que lo convierten en una raza más resistente a la enfermedad”.
Sobre el futuro de la bacteria Después de esta fase en el trabajo de investigación adelantado en los laboratorios de
Microbiología, Control de Calidad y Biología Molecular de la UN Palmira, el paso a seguir es la experimentación in vivo. En esta parte, el objetivo de los investigadores es provocar mastitis en algunos bovinos, poniéndolos en contacto con los microorganismos patógenos seleccionados, Staphylococcus aureus y Streptocooccus agalactiae, con el propósito de confirmar el potencial antibacterial del microorganismo Weisella confusa. La bacteria se conservará liofilizada (proceso utilizado para la eliminación del agua mediante desecación al vacío y a muy bajas temperaturas) para garantizar que permanezcan todas sus propiedades por lo menos durante ocho meses. “La aplicación será en forma de suspensión, directamente en el canal del pezón en vacas con mastitis inducida (se evalúa la capacidad de control de la bacteria) y en vacas sanas (se evalúa la capacidad de prevención a patógenos medioambientales)”, expuso el profesor Campos. Este hallazgo, además, permite ampliar la investigación en otros rumbos. “Tendremos que definir en qué otros sustratos podemos ha-
Investigadores
cer crecer el microorganismo Weisella confusa, para que su producción sea muy económica, qué protectores de membrana conservan más el microorganismo y, lo más importante, analizar cómo es el comportamiento del microorganismo in vivo,” afirmó Serna Cock. El profesor Campos expresó que “hasta el momento, los resultados obtenidos abren una importante área de trabajo en el campo de la investigación de tratamientos preventivos y curativos para la glándula mamaria”. Ahora, los investigadores de este proyecto ven en Weisella confusa y sus metabolitos una alternativa promisoria para el tratamiento de mastitis, que eliminaría los problemas de resistencia microbiana. Además, reduciría los riesgos para el consumidor, ocasionados por la presencia de antibióticos en la leche proveniente de bovinos con terapias antibióticas. “De esta manera avanzamos durante año y tres meses en un proyecto dirigido a entregar a la comunidad leche saludable mediante control biológico de mastitis”, concluyó Liliana Serna Cock.
Domingo 8 de junio de 2008
Unimedios
Unimedios
Laura M. Fuertes,
15
16 Debate Una nueva baja en el conflicto colombiano:
la elegancia académica
Los profesores de la Universidad Nacional de Colombia, Hernán Estrada e Ignacio Mantilla, expusieron en la edición anterior de UN Periódico una serie de críticas al planteamiento matemático del conflicto co-
AFP
lombiano hecho por Isaza y Campos, como la de invertir los papeles que desempeñan el Ejército y la guerrilla. Los autores del análisis, José Fernando Isaza y Diógenes Campos, respondieron a los cuestionamientos.
Soldados colombianos cargan el cuerpo de Gustavo Rojas Díaz, alias Martín Caballero, líder
en El Carmen de Bolívar, departamento de Bolívar. José Fernando Isaza Delgado, Diógenes Campos Romero,
Domingo 8 de junio de 2008
Universidad Jorge Tadeo Lozano, Bogotá
Los profesores Hernán Estrada B. e Ignacio Mantilla P. descalifican el trabajo denominado “Modelos dinámicos de Guerra” publicado en la Revista de la Academia Colombiana de Ciencias en el 2005, disponible en www.accefyn.org. co/PubliAcad/Periodicas/ Volumen29/110/10_133_ 148.pdf. Utilizan dos argumentos: el primero, que no empleamos el modelo de Lanchester en la variación de Deitchman. El segundo, que citamos al profesor Richani Nazih como fuente de las ecuaciones empleadas en el trabajo. Iniciamos refutando el segundo argumento, para evidenciar la ligereza o intención de Estrada y Mantilla. Dicen: “aún cuando los autores Isaza y Campos hacen referencia
al libro Sistemas de Guerra de Richani Nazih, profesor del Departamento de Ciencia Política de la Universidad de Kean, para el fundamento de las ecuaciones del modelo [17], no aparece en ningún aparte del mencionado libro un análisis matemático sobre conflictos armados.” La referencia de nuestro trabajo sobre modelos matemáticos en la introducción se refiere a la bibliografía [17] que corresponde, como se comprueba en el artículo de la Academia, a Murray J. D. Mathematical Biology, Springer, 1993. La “modelización de la guerra” tiene similitudes con sistemas biológicos, difusión de epidemias y competencia de especies. La referencia citada de Richani Nazih es la [18] y se encuentra en la sección 4.1, que dice: “parámetros para el modelo. Guerrilleros abatidos. El número de guerrilleros abatidos en el
período 1986–1999 son en promedio 760 [18]”. En la página 86 del libro de Richani aparecen las estadísticas de guerrilleros abatidos año por año y, simplemente, tomamos la media aritmética. No conocíamos que para descalificar un trabajo los académicos permutaran referencias. El modelo matemático adaptado. Estrada y Mantilla escriben: “en el modelo considerado se ‘idealiza’ el conflicto, despreciando factores que pueden tener grandes repercusiones en el desarrollo del enfrentamiento”. ¿Cuál es la intención de confundir al lector cuando ellos, como científicos, saben que modelo, al menos en el espíritu de von Newmann, es una construcción matemática que describe de manera simplificada el sistema real objeto de estudio? Modelos comunes que analizan la evolución de dos tropas en un conflicto son:
de las Farc muerto en combate el 25 de octubre de 2007
donde r1 y r2 son funciones de reemplazo de combatientes. Las ecuaciones (1) y (2) se utilizan, en general, para guerras simétricas, regulares e irregulares, las (3) y (4) para conflictos en que se enfrentan un ejército regular y uno irregular. Para el conflicto colombiano son más apropiadas las ecuaciones (3) y (4). Si x representa los combatientes regulares (ejército), y los irregulares (guerrilla), el modelo que empleamos es el (3). No consideramos apropiado utilizar el modelo de Deitchman (Operations Research 10, 818, 1962) pues no tiene
en cuenta el factor más determinante de capacidad de recuperación de la guerrilla. No es cuestión de gusto personal utilizar uno u otro pero los resultados deben ser explicativos y predictivos, y eso fue lo que obtuvimos. Hasta bien entrada la época Uribe, el conflicto se desarrolló con un ejército preservando sus posiciones en los cuarteles y una guerrilla con movilidad que actúa bajo la modalidad de emboscada: si ésta ataca al ejército el número de bajas de éste puede estar representado por mostrando la proporcionalidad entre el número
Debate creer que nuestro artículo haya tenido tanto impacto en los investigadores sociales, aunque el trabajo ha sido presentado en foros de matemáticos e ingenieros. El artículo que sí ha tenido, para nuestra satisfacción, mayor impacto es la actualización “Consideraciones cuantitativas sobre la evolución reciente del conflicto”, resumen publicado en El Espectador que llevó a nuestros dos ilustres detractores a renunciar a la elegancia académica. Lamentamos que Estrada y Mantilla no hubieran leído el documento completo –que de todas formas no es
lombia para la Educación y la Oportunidad, realizado inversiones en zonas propicias al reclutamiento de menores por la guerrilla. Nuestro modelo de dos combatientes aplicado en Colombia muestra resultados preocupantes: un punto de equilibrio estable que corresponde a un ejército de 144.750 hombres y una guerrilla de 19.250, y uno inestable, la extinción de la guerrilla. La casi desaparición del ELN en la década del 80 y su posterior resurgimiento, avalan la inestabilidad de este punto de equilibrio. La persistencia del conflicto colombiano y las
al retirarse un “enemigo armado”, aumenta su número. Lo último está implícito en los modelos de tres fuerzas en conflicto y lastimosamente se cumplió, como lo comprueba el aumento del pie de fuerza de 160.000 a 209.000 soldados en el período de desmovilización de los paramilitares. Este aumento de 49.000 corresponde en el modelo a un = 1,925; antes del 2003 se asume = 2, deducido de las declaraciones del alto mando, en el sentido de que cada paramilitar desmovilizado requería 2 soldados regulares para combatir la guerrilla. Es bueno aclarar
nota no es alimentar la discusión sobre las conclusiones que los autores Isaza y Campos [14] derivan de sus resultados”, nosotros, por el contrario, sí creemos que lo interesante de nuestros modelos y análisis estadísticos es alimentar la discusión sobre las conclusiones y contribuir a que la sociedad reflexione. Creemos que se pueden encontrar métodos más eficientes y menos dolorosos para tener un país sin guerrilla, con un ejército de tamaño y costo adecuado que defienda las fronteras y una policía civil que controle la
AFP
de guerrilleros y el número de soldados. Los ataques a Patascoy, las Delicias, etc., confirman esta hipótesis. Al correr el modelo con los datos publicados para Colombia por Richani, el Ministerio de Defensa y la Contraloría General de la República, nuestra hipótesis da resultados explicativos. Por supuesto, Estrada y Mantilla pueden correr otro modelo con una hipótesis de reemplazo; la nuestra emplea una versión logística y sobra decir que pueden, si lo desean, emplearla o descartarla. Avanzamos la hipótesis de que los resultados, si se
17
El ataque dejó 15 soldados muertos y 25 heridos.
ajustan bien los parámetros de reemplazo, no serán sensiblemente diferentes, pues en el caso colombiano la recuperación de la guerrilla supera el 80%, de acuerdo con las cifras oficiales. Preocupa a Estrada y Mantilla la difusión del trabajo entre los científicos sociales. En sus palabras: “dado que el trabajo ha tenido un eco en algunos medios de comunicación [16] y que estudiosos sociólogos, periodistas y analistas políticos del conflicto colombiano podrían considerarlo como trabajo científico fundamental para el entendimiento del desarrollo del fenómeno y eventual predicción de resultados, vale la pena presentar algunas aclaraciones, a la luz de serias investigaciones previamente presentadas, publicadas y validadas por comités científicos especializados y que no aparecen referenciadas en la publicación de Isaza y Campos [14]”. No somos tan optimistas de
muy extenso–, el cual solo requiere usar estadísticas oficiales, sumar, restar y analizar. Las conclusiones, que ponen en duda la certeza de las cifras de Ministerio de Defensa, han determinado que por ejemplo el coordinador del grupo de información y estadística del Ministerio identificara los inconvenientes que causan estos números y afirmara: “muestran una gestión gubernamental, pero no se conoce el impacto real”. (“El informe de la discordia”, ElEspectador.com, Judicial, 25 Abril 2008). Una de las fallas identificadas en las estadísticas de Mindefensa es no diferenciar entre detenciones y detenidos e involucrar falsos positivos. Sin embargo, es bueno mencionar que las conclusiones del modelo, en particular aquella según la cual se logra mayor efectividad disminuyendo la capacidad de recuperación de la guerrilla que abatiendo guerrilleros, fue acogida por la Fundación Co-
cifras del punto de equilibrio –antes de la entrada del tercer actor, los paramilitares– refuerzan lo adecuado de nuestra hipótesis. Lo novedoso de nuestro trabajo es la modelación del conflicto con tres actores: ejército, guerrilla y paramilitares, pues no encontramos literatura sobre el tema, en parte porque es bien particular el caso colombiano. Estrada y Mantilla consideran poco clara la inclusión de los paramilitares, pero no somos responsables que perjuicios nublen la mente. Sin embargo, las hipótesis son claras. Por ejemplo, se muestra que los resultados concuerdan con las políticas implícitas y explícitas del combate: (1) El ejército ataca con poca intensidad a los paramilitares. El documento muestra las cifras oficiales que corroboran esta afirmación. (2) Los paramilitares no atacan al ejército. (3) Al desmovilizarse los paramilitares, el ejército, lejos de disminuir
el 2 de febrero de 2005 en Iscuandé, Nariño.
que el modelo publicado no consideraba la desmovilización de los paramilitares. Estrada y Mantilla tienen razón en que nuestro modesto modelo “idealiza” el conflicto colombiano, pero para los procesos sociales e históricos no existe la “certeza” de las leyes de Newton. Nuestro modelo asume que asintóticamente la razón ejército/guerrilla se acercaría a 10. En el período 2002-2007 la cifra fue 160.000/20.600 = 7.7. Sin embargo, al disminuir la guerrilla la cifra de 10 se superó y así en el 2007, un pie de fuerza de 209.741 y 12.499 guerrilleros lleva la relación a 16.8. Los puntos de equilibrio del conflicto corresponden a la teoría Richani. El capítulo 3 lo llama “Los militares y el cómodo impase”, que presenta “a los militares como una de las organizaciones que ayudaron a crear y perpetuar el sistema de guerra”. Aunque Estrada y Mantilla afirman: “el interés de esta
seguridad interna y no, como se está dando, un gasto militar creciente y un número de efectivos militares que crece a medida que la guerrilla decrece, llegando a ser el segundo ejército en América, solo superado por el Norteamericano (Simposio Gasto Militar, Contraloría General de la República, Universidad Externado, 2 de abril de 2008). P.D. Isaza y Campos realizaron los estudios de modelos de guerra y consideraciones sobre la evolución reciente del conflicto, sin financiación ni patrocinio de ninguna entidad pública, privada, ONG o similares. Esperamos que quienes con todo derecho los descalifiquen o acogen, aclaren si tienen vinculación directa o indirecta con alguna organización diferente a la académica.
Domingo 8 de junio de 2008
Un soldado colombiano observa la destrucción de una base militar tras un atentado de las Farc
18 Ciencia
UN representará a Colombia
en concurso andino
Un proyecto sobre experiencias y políticas de atención y prevención de desastres realizado entre el Instituto de Estudios Ambientales de la UN en Manizales y la Oficina Municipal de Prevención y Atención de Desastres de la capital caldense, representará a Colombia en un concurso andino. La iniciativa ha servido como modelo representativo para otras regiones del mundo. Equipo periodístico, El proyecto Gestión Local del Riesgo en una Ciudad Andina: Manizales, un caso integral, ilustrativo y evaluado, desarrollado por el Instituto de Estudios Ambientales –IDEA– de la UN Manizales y la Oficina Municipal de Prevención y Atención de Desastres –OMPAD– recibió un reconocimiento durante el Encuentro Nacional de Socialización de Experiencias Significativas. Este trabajo fue elegido como uno de los cuatro mejores entre 12 experiencias seleccionadas. Los casos de Manizales, Bogotá, Huila y Risaralda participarán por Colombia en el Concurso Andino Prácticas y Políticas del Desarrollo Local Frente a los Riesgos de Desastres: Identificación de Experiencias Significativas en los Países de la Subregión Andina, que se llevará a cabo en el segundo semestre de 2008. Antes del concurso se realizará una sistematización, para lo cual se desarrollarán actividades de campo (reuniones con actores locales, entrevistas, testimonios, entre otros). Este concurso hace parte del proyecto Apoyo a la Prevención de Desastres en la Comunidad Andina (Predecan), con el financiamiento de la Comisión Europea.
Domingo 8 de junio de 2008
Trabajo interinstitucional La Universidad Nacional de Colombia en Manizales, la Alcaldía Municipal, entidades del Comité Local de Prevención y Atención de Desastres, y otros actores de la ciudad, han desarrollado herramientas y proyectos que comprenden experiencias de identificación, reducción y transferencia del riesgo, así como estrategias de preparación y oportuna respuesta en caso de desastre, dentro de los que se destacan proyectos de investigación y monitoreo de amenazas, la planificación urbana y
Archivo particular
Unimedios
La gestión integral de riesgos en Manizales no es el resultado de una experiencia aislada ni la suma de una serie de experiencias individuales. En la foto, mujeres pertene-
cientes al programa Guardianas de la Ladera, que incluye vigilancia de laderas, limpieza y mantenimiento de obras. seguimiento de normas y códigos de construcción, la inversión en obras de estabilidad, la promoción del aseguramiento frente al peligro y participación de la sociedad civil y la comunidad, como agentes indispensables para el manejo de situaciones de riesgo. Ejemplo de ello han sido los esfuerzos en cuanto al desarrollo urbano de la ciudad, puesto que las constantes amenazas naturales propias de la posición socio–geográfica de Manizales, han conllevado a realizar adaptaciones en el tipo de construcción, especialmente por la fuerte presencia de temblores de media y alta magnitud, así como por los deslizamientos resultado de fuertes lluvias en periodos prolongados. De otro lado se ha fomentado por parte de las instituciones involucradas en los procesos de gestión de riesgos, la óptima administración y uso de áreas de protección ambiental, del patrimonio histórico y arquitectónico, del espacio público y equipamientos recreativos, culturales y deportivos. Igualmente han identificado zonas de riesgo y barrios con evidente necesidad de reubicación. “Estas acciones se han tenido en cuenta en los planes de desarro-
llo de los alcaldes de la ciudad elegidos popularmente y en su Plan de Ordenamiento Territorial con resultados interesantes y articulados por una imagen objetivo que ha sido la sostenibilidad ambiental y la seguridad humana”. Así se expone en el Informe Ejecutivo de la experiencia con la cual el IDEA resultó elegido para representar al país en el Concurso Andino. Partiendo de esto y con el fin de hacer seguimiento y encaminar los esfuerzos del desarrollo de las prácticas implementadas en la ciudad, este plan de gestión ha sido evaluado a través de la aplicación del Índice de Gestión de Riesgos (IGR), cuya metodología ha sido desarrollada por el IDEA y cuenta con el reconocimiento internacional por su ejecución en el Programa de Indicadores de Riesgo y Gestión de Riesgos para América Latina y el Caribe, del Banco Interamericano de Desarrollo, BID, a partir de cuatro componentes o políticas públicas que son la identificación y reducción del peligro, así como el manejo de desastres y la gobernabilidad y protección financiera. Los resultados obtenidos por el IGR han permitido dejar evidencia de
cómo la ciudad ha ido evolucionando frente a la gestión de riesgos, resultado de avances significativos del trabajo mancomunado de instituciones gubernamentales, no gubernamentales y de la comunidad en general.
Casos ilustrativos La Catedral Basílica de Manizales, la Gobernación de Caldas, el Teatro los Fundadores, el Hospital de Caldas y algunos edificios antiguos de universidades, entre ellos varios de la UN en Manizales, han recibido reforzamiento estructural. El proyecto ha permitido reubicar viviendas, desarrollar obras de protección como estabilización de laderas, de contención, de manejo de aguas lluvia, de control de aguas subterráneas. En ese mismo marco se ha desarrollado el programa “Guardianas de la Ladera”, el cual está dirigido a formar un grupo de personas de la comunidad que asuma la responsabilidad de vigilar y hacer el mantenimiento preventivo a las laderas y a sus obras de defensa, y se ha formulado el Plan de Ordenamiento Territorial, todas estas estrategias ligadas a la Reducción del Riesgo. En cuanto a los as-
pectos de Identificación del Riesgo se han dimensionado las amenazas en Manizales, entre las que se encuentran las actividades volcánicas, sísmicas y erosivas, se ha realizado una microzonificación sísmica, que busca evaluar los efectos locales en el suelo de acuerdo con las características geotécnicas y geológicas de cada sitio. Además, se ha llevado a cabo la evaluación del riesgo sísmico, obteniendo un Sistema de Información Sísmica de Manizales –SISMAN– para el diseño de construcción sismorresistente y para la evaluación de daños y pérdidas por escenarios sísmicos, y se ha implementado una red de estaciones meteorológicas de monitoreo de lluvias en tiempo real para la alerta temprana en caso de deslizamiento. El Plan de Emergencias de Manizales, el manual de campo y la capacitación para inspección de edificaciones después de un sismo, integran el Manejo de Desastres. Y en lo que tiene que ver con la Transferencia del Riesgo se contemplan estrategias para la protección financiera de los inmuebles públicos de Manizales, y el aseguramiento colectivo de los inmuebles privados de la ciudad. Durante el proceso de socialización local, nacional e internacional del caso integral de Gestión de Riesgos en Manizales, la Universidad Nacional ha venido liderando un curso internacional sobre gestión de riesgos, en el cual se estudian de manera presencial los logros que ha tenido la capital caldense en el tema, difundiendo el conocimiento derivado de dicha experiencia y promoviendo un espacio de integración y de intercambio entre los agentes involucrados. De la misma forma se encuentra disponible la página web: www.manizales.unal.edu.co/gestion_ riesgos, realizada por la UN en Manizales para la Alcaldía Municipal, donde se ilustran estos casos.
Ciencia
Si su nevera tiene más de 10 años y aún no la ha cambiado o necesita hacerle mantenimiento, es recomendable que tenga en cuenta la siguiente información, porque su mal manejo le causa un daño irreparable a la capa de ozono. El Departamento de Ingeniería Química de la Universidad Nacional de Colombia identificó cuáles son las Sustancias Agotadoras de Ozono, SAO, presentes en el país y formuló una serie de recomendaciones para el desarrollo de estrategias que eviten la liberación de tales sustancias en la atmósfera. Para que una nevera enfríe y conserve los alimentos, usa sustancias refrigerantes que dañan la capa de ozono. Aunque a finales de la década de los 80 el mundo se dio cuenta de que gases como los Clorofluorocarbonados, CFC; Hidroclorofluorocarbonos, HCFC; los Halones, el Tetracloruro de Carbono y el Metilcloroformo, entraban a la lista de las SAO, hoy en día los países firmantes del Protocolo de Montreal, PM, todavía tienen pendiente cumplir metas de disminución y eliminación de tales gases. Colombia se acogió a ese compromiso y de manera inmediata puso en marcha una serie de actividades para cumplir el objetivo. Diferentes instancias han hecho parte de la iniciativa, en forma directa o indirecta. Desde entonces, la UN ha participado en la búsqueda de alternativas para lograrlo, a través del Departamento de Ingeniería Química y el Programa de Investigación de Residuos Sólidos, PIRS. En Colombia, en el año 2003, había 5’590.273 neveras instaladas con SAO, las cuales debían ser “chatarrizadas”.
Alerta nacional La cantidad de neveras fabricadas en Colombia con SAO, entre 1972 y 1997, de acuerdo con los datos de las empresas productoras, superaba los 6 millones, pero el estudio pudo identificar 5’590.273 neveras instaladas. Se tomó en cuenta este periodo porque hasta el 97 se hizo efectiva la eliminación de sustancias como los CFC y los HCFC. Las metas planteadas por el Protocolo de Montreal, asumidas por más de 160 países, incluían desistir de la producción de cinco clases de CFC y tres halones, de manera paulatina. En Colombia esto fue posible gracias al Fondo Multilateral Para la Aplicación del Protocolo, que permitió que las empresas productoras de neveras y equipos refrigerantes reconvirtieran sus equipos, para evitar usar sustancias como los gases CFC-12 (pasando transitoriamente a HFC134ª), y el agente espumante CFC-11 (sustituidos transitoriamente por HCFC-141b). Óscar Suárez Medina, profesor de la UN y director del PIRS, explicó que “se es-
A un año y medio de la nueva rendición de cuentas sobre las medidas que se han tomado para evitar seguir dañando la capa de ozono, Colombia está solo a un 15% de
cumplir la meta. El aporte científico e investigativo de la UN ha facilitado el desarrollo de estrategias preventivas de capacitación y divulgación.
Colombia, líder en protección
a la capa de ozono
Investigadores de la UN identificaron las Sustancias Agotadoras de Ozono, SAO, presentes en el país y formularon una serie de recomendaciones para el desarrollo de estrategias que eviten la liberación de tales sustancias en la atmósfera.
tableció que en el mantenimiento que se hacía a estos electrodomésticos se rompía el tubo que conducía el gas refrigerante. Luego lo soldaban y le volvían a meter un nuevo gas. Después de muchos años se comprobó que estas prácticas contribuían al deterioro de la capa de ozono”. Por eso, para el grupo de investigación fue prioritario establecer cómo y en dónde se debía hacer la debida “chatarrización”, porque a partir de la conciencia colectiva de que estas neveras viejas debían cambiarse, muchas personas las tiraban a los botaderos de basuras o las dejaban en poder de los “zorreros”, quienes utilizaban materiales reciclables como los alambres de cobre y los plásticos, desconociendo el protocolo de manejo de estas sustancias. La Unidad Técnica de Ozono, UTO, del Ministerio del Medio Ambiente, responsable de coordinar los procesos referentes al Protocolo de Montreal, ha contado con los servicios de la UN para desarrollar diferentes iniciativas. Ejemplo de ello es el convenio con el que se llevó a cabo el inventario y cuyos resultados brindaron elementos para diseñar estrategias que conducen a disminuir la liberación
de estos gases a la atmósfera. Jorge Sánchez Segura, egresado de la UN y coordinador nacional de la UTO, explicó que “estos resultados permitieron construir una estrategia nacional de divulgación y capacitación para las personas que realizan el mantenimiento, así como la presentación de nuevos proyectos al Protocolo”. La estrategia estuvo orientada a capacitar a los usuarios del tetracloruro de carbono, que en su gran mayoría ofrecen servicios de laboratorios analíticos de empresas pequeñas. “La idea es que en el futuro inmediato se dejen de usar estas sustancias”, agregó.
Metas cumplidas Como país en desarrollo, Colombia tenía que haber eliminado la producción de halones, clorofluorocarbonos (CFC) y tetracloruro de carbono para el 2010. Gracias al impulso y a la decisión de industriales y gobierno, a mediados de la década del 90 se logró que las empresas cambiaran sus equipos y la producción de estos gases. Según Carlos Herrera Santos, gerente de asuntos ambientales de la Asociación
Nacional de Industriales, ANDI, el proceso que han llevado las industrias colombianas ha sido excepcional, porque “logramos aprovechar lo que se tenía en un programa internacional, con unas oportunidades para todos los países, y ponerlo en práctica”. Por su parte el profesor del Departamento de Ingeniería Química de la UN, Marcelo Riveros Rojas, quien ha acompañado el proceso desde los años 90, explicó que la formulación del Programa País, PP, entre 1992 y 1993, “permitió establecer la situación nacional respecto al consumo de sustancias agotadoras, tanto por tipo de sustancia como por sector, los campos prioritarios de inversión, las actividades a realizar para alcanzar la eliminación de las SAO y, así, dar cumplimiento a los compromisos con el Protocolo y el cronograma de eliminación, de acuerdo con las capacidades y metas del país”. En este documento la ANDI y el Programa de las Nacional Unidas para el desarrollo, Pnud, le dieron a Colombia las herramientas para trabajar coordinadamente y aprovechar su ventaja de país en desarrollo, y orientar las buenas prácticas en el con-
trol de las SAO y en el cuidado del medio ambiente. Las disposiciones establecidas y las actividades que, a través de la UTO, ha realizado el país, le permiten estar muy cerca de la meta. Por ese compromiso recibió en el 2007, durante la celebración mundial de los 20 años del PM, “un reconocimiento al esfuerzo colectivo que se ha hecho. No solo es para la UTO, sino para los empresarios, los técnicos, la universidad y políticos. Esto es una muestra de que si el país se une puede lograr resultados nacionales y de reconocimiento internacional”. El reto ahora es trabajar conjuntamente en la protección de los diversos ecosistemas que tiene Colombia, pues la biodiversidad le ofrece múltiples oportunidades al país. “Las universidades pueden orientar sus investigaciones a la búsqueda de tecnologías y sustancias que no afecten ni la capa de ozono ni generen calentamiento global. Es importante trabajar en investigación y desarrollo de materias primas de punta, sustitutas del petróleo, porque hoy la escasez y los costos son muy altos”, resaltó Sánchez Segura.
Domingo 8 de junio de 2008
Unimedios
AFP
Gabriela Rodríguez Salgado,
19
20 Ciencia
Transbordador espacial made in Colombia: ¿ciencia o ficción?
La Agencia Espacial Privada Colombiana presentó el proyecto de construcción de un transbordador que ayudaría al país a colocar, por cuenta propia, satélites de comunicación en la órbita geoestacionaria nacio-
nal. Sin embargo, para el profesor José Gregorio Portilla, del Observatorio Astronómico de la Universidad Nacional de Colombia, el país “se encuentra a años luz” de hacer realidad este tipo de planes.
Unimedios
José Luis Barragán Duarte,
Domingo 8 de junio de 2008
Unimedios
¿Qué se consigue por 8 millones de dólares en la actualidad? Algunas respuestas aparecen desde varios lugares del mundo. Días atrás, en Francia, el famoso catador profesional de vinos A Ilja Gort salvaguardó su nariz por este valor ante una aseguradora internacional. (La Nación.com) En el 2006, la Fundación Jolie Pitt, de los actores estadounidenses Angelina Jolie y Brad Pitt, donó este valor para causas benéficas. De acuerdo con los documentos de impuestos, Pitt dio U$s 4,402,317 y Jolie, U$s 4,123,613. (Mdzol.com). Por este valor, equivalente, según el cambio actual, a 14.134.800.000 pesos, la Agencia Espacial Privada Colombiana, Agescol, construiría un transbordador que ubicaría al país en el camino hacia la carrera espacial. Los detalles del proyecto fueron revelados días atrás en Bogotá. El diseñador arquitectónico Mauricio Fonseca Leal, egresado de la Universidad Nacional de Colombia, es el presidente de Agescol, empresa que busca financiamiento para este plan que podría catalogarse como una utopía o un sueño, pero que en consideración de su gestor es algo “real, original y hecho con talento colombiano”. Según Fonseca Leal, el proyecto entró en la tercera
fase, que apunta a la construcción del prototipo real. La primera etapa fue la investigación en aeronáutica y la segunda, la realización de un video que simula la colocación del aparato en órbita terrestre. “Esto va a generar industria y adelanto científico y tecnológico para Colombia. Este proyecto del transbordador es pequeño y simplemente lo que va a hacer es desarrollar la industria a nivel de telecomunicaciones, porque dejaría un dispositivo satelital en órbita colombiana”, dijo. Agescol se asoció con el Sena con el fin de promover la creación y desarrollo de pequeñas y medianas empresas del sector industrial, que se dedicarían a producir insumos para el proyecto. “La manufactura se consigue en Colombia y algunas cosas deben ser importadas. Precisamente, esto nos da pie para comenzar a generar empleo a ingenieros, diseñadores e industriales que se están yendo del país porque no están trabajando en lo que estudiaron sino en lo que no les gusta: manejando taxi o vendiendo perros calientes”, comentó Fonseca. En esta tercera fase del proyecto, que tendría una duración de dos años, se construirían las estructuras terrestres en las que se soportaría el transbordador. Aquí las pequeñas y medianas empresas, Pymes, jugarían un papel fundamental.
El gerente de la Línea de Electrónica y Materiales del Sena, Joan Andrés Arango, sostiene que el propósito es que “todos los emprendedores se vinculen, a través de Agescol, desarrollando pequeños o grandes productos, que en últimas terminen siendo como microempresas alrededor de la carrera espacial”. Fonseca Leal dijo que se requerirá la importación de la tecnología de monitoreo y algo del ensamblaje del transbordador, que tendría el tamaño de un bus del sistema Transmilenio. Estaría provisto de una zona electromagnética que está siendo desarrollada con ayuda de ingenieros colombianos. No quiso ahondar en detalles, por considerarlos “un secreto de nuestra industria científica que no podemos divulgar”. Para el gestor de esta idea, el transbordador tendría un recubrimiento con placas de fibra de arcilla que ayudaría al aparato a protegerse de la fricción “porque este baja a unas velocidades hipersónicas”. Agregó que las placas fueron sometidas a pruebas, a más de 2.000 grados centígrados de temperatura. “Tendría una microturbina con una fuerza impresionante de unos 600 caballos de fuerza”, dijo Fonseca Leal, quien agregó que solo se importarían “unos microchips que deben ser traídos de China, Suiza o Japón”.
“Esto es ciencia ficción” Sin embargo para el profesor José Gregorio Portilla Barbosa, del Observatorio Astronómico de la Universidad Nacional de Colombia, la construcción de un transbordador espacial en el país “es, en este momento, prácticamente imposible”, y sostuvo que “para todos los efectos prácticos esto es ciencia ficción. Estamos sumamente atrasados”. Portilla Barbosa señala varias razones de orden económico, tecnológico y científico, que hacen imposible pensar en este tipo de proyectos. Indicó que hace dos años se creó la Comisión Colombiana del Espacio, donde participan el Estado, la academia y otras instituciones, y cuya misión es buscar iniciativas que puedan llegar a ser patrocinadas algún día. “Hemos descubierto que nosotros hacemos muy poca astronomía y poca astronáutica. Son áreas supremamente atrasadas. Pero ya es importante que haya una comisión que se preocupe por los proyectos. Pero veo aún muy lejos la posibilidad de que nosotros mismos hagamos un satélite”, comentó el profesor de la UN. El material humano es otro factor que considera Portilla Barbosa como un obstáculo infranqueable a la hora de evaluar la posibilidad de iniciar un proyecto de esta envergadura y sostuvo que “aquí no tenemos
ingenieros aeroespaciales. Ha habido gente que ha salido al exterior y se ha formado en eso, pero, ¿a qué vienen a trabajar acá?” Construir el transbordador, según el académico, “cuesta toda la plata del mundo. El desarrollo de eso, comenzando desde cero, es quizás unos 50 mil millones de dólares”. Explicó que la Unión Europea, pese a que tiene la capacidad económica y tecnológica, y científicos en todas las áreas, abortó, en su momento, esta idea. Citó otro ejemplo, más cercano, de otro país con la disponibilidad económica, científica y tecnológica, que tampoco lo ha logrado. “Brasil, con más de 200 millones de personas, la novena economía del mundo, que tiene 800 astrónomos reconocidos, físicos, técnicos y la tercera planta de construcción de aviones del planeta y no ha podido colocar un satélite artificial por sus propios medios, pese a que tienen instalaciones gigantescas. Y por supuesto, que no se van a poner a construir un transbordador espacial, pues está mucho más allá de sus capacidades realistas”. Portilla también asegura que los únicos países que han logrado construir y lanzar transbordadores al espacio exterior han sido Estados Unidos y la Unión Soviética, en su momento y concluyó con que “no es que esté en contra de los sueños. Los aliento, pero en este momento hay que ser realistas”.
Cultura
En la década de 1940 algunos de los inmigrantes, especialmente libaneses, comenzaron a trasladarse e instalarse en el municipio de Maicao, en La Guajira, fundado en 1927, pues constituía un corredor de distribución de mercancías hacia el interior de Colombia y Venezuela. A partir de esa década el idioma árabe comienza a ser de uso cotidiano en Maicao entre los denominados ‘turcos’ y a ser transmitido como segunda lengua a las generaciones que nacían en Maicao o en ciudades cercanas como Santa Marta y Barranquilla. La variedad dialectal del árabe usada en Maicao se circunscribe a la zona del Levante o sirio–palestina, específicamente del Valle de la Beeqa y del sur del Líbano, pues la mayor parte de los dos mil inmigrantes o ascendientes de árabes asentados permanentemente en Maicao son de origen libanés. En la actualidad, la situación lingüística de esta comunidad de habla es de diglosia y bilingüismo. La primera se da por el contacto entre el árabe clásico, base del árabe moderno estándar, y el árabe dialectal, en este caso el libanés. Esta situación de diglosia emerge en la década de 1970 con la llegada de inmigrantes que huían del conflicto con Israel y cuya religión es el Islam. Hoy el árabe clásico es de uso cotidiano en las diferentes reuniones que se hacen en la Mezquita Omar ibn Al Kathab, que construyó e inauguró la comunidad en 1997 y en reuniones formales en el colegio colombo-árabe Dar el Arkam, en el cual se imparten clases de esta variedad, garantizando el continum diglósico en la comunidad. El árabe clásico se adquiere por educación formal, es la variedad con que fueron escritos El Corán y otras obras clásicas de la literatura árabe antigua, que configuran la variedad escrita del árabe a diferencia de las dialectales de este idioma, que son adquiridas como lengua materna en el hogar y usadas en contextos informales y que no son tan complejas gramaticalmente.
Bilingüismo La situación de bilingüismo se da por el contacto entre la variedad dialectal del español guajiro y el vernáculo libanés y configura por antonomasia una situación de contacto de lenguas que hasta la fecha no había sido documentada. El cambio lingüístico como resultado del contacto entre el árabe y el español hablados en Maicao se evidencia en los verbos ragel y cauber, contrapartes verbales de los verbos ‘regalar’ y ‘cobrar’ del español y que surgieron hace aproximadamente 60 años. Por eso es frecuente oír a los comerciantes e hijos de inmigrantes decir frases como: cauber il zalami
En la década de 1880 se inició la inmigración Otomana a Colombia y a otros países de América como Argentina, Brasil, Estados Unidos, Cuba y México. En
principio, los inmigrantes sirios, palestinos y libaneses se asentaron en ciudades del Caribe colombiano como Barranquilla, Santa Marta y el pueblo de Lorica, en el departamento de Córdoba.
El uso de la lengua árabe en Colombia
Hace casi ocho décadas se instalaron los primeros inmigrantes libaneses en la Guajira. Desde entonces, la lengua árabe comenzó a ser de uso cotidiano en Maicao y hoy perdura pero con ciertos cambios y trasformaciones.
‘cobra al señor’ o rageli mai ‘regálame agua’. Además del préstamo lingüístico también son frecuentes la alternancia y la mezcla de código por parte de los hablantes bilingües, quienes asimilan las unidades léxicas a la estructura fonética del vernáculo libanés y, por eso, en el verbo ragel la oclusión se realiza espirantizada, es decir, con una leve fricativización, lo cual es característico de las lenguas semíticas. El verbo cauber evidencia y confirma una ley diacrónica de cambio fonético por cuanto hay diptongación de /o/ en /au/ cuando el núcleo precede una consonante oclusiva. Este caso también se dio en el haz dialectal hispano árabe hablado en España entre el Siglo VII y el Siglo XIII en palabras como ‘posada’, que se convertía por el contacto en paujata. La razón de esta diptongación es que en el árabe /u/ tiene un carácter fonémico mientras que la /o/ no. En la comunidad también se dan cambios a nivel morfosintáctico como es el uso de los sufijos /at/ o /in/ del árabe con nombres del español para referir el plural en unidades contrastivas como caxad ‘cajas’ (variante ensordecida), bodegat ‘bodegas’ o caratin ‘cartones’. Por lo anotado es evidente que hay una variedad de habla árabe emergente en el país, de la que a la fecha no se había dado cuenta en el ámbito académico. No sería prudente afirmar que hay
una lengua criolla árabe de sustrato español colombiano, pues no ha transcurrido el tiempo necesario, pero sin duda está en proceso de formación una variedad de habla con un alto grado de sinteticidad como lo confirma el uso frecuente de la oración vamun argil ‘vamos a fumar en narguile’ por parte de los jóvenes de la comunidad libanesa de Maicao. De otra parte, los hablantes bilingües miembros de la comunidad árabe de Maicao presentan características articulatorias sociofonéticas a nivel segmental, tanto en el español como en el vernáculo árabe. En español es frecuente la elisión, retención aspiración y debilitamiento de la /s/ implosiva, ya que es una variación característica del español hablado en la Costa Caribe colombiana. En árabe la variable más importante la constituye la variación de la consonante oclusiva uvular sorda /q/, la cual pasa a ser q, ’ , g o k. En Maicao la variante más frecuente es la oclusión glotal: ’, en palabras como ra’be ‘cuello’ o alha’i’a ‘verdad’. Lo importante de esta variación es que los individuos que nacen en Colombia la heredan y usan cotidianamente, configurando una comunidad bicultural única en el país y en América. Otro aspecto a mencionar en lo referente a la variación sistemática de los fonemas en el vernáculo árabe hablado en Maicao es el
alto grado de dispersión alofónica que presenta su inventario de fonemas vocálicos, pues no se hace distinción en este entre la /i/ y /e/ y entre la /o/ y /u/. Una de las características fonéticas dominantes y que producen una frecuente variación en los dialectos árabes es la faringalización, pues afecta a los fonemas vocálicos, los diptongos y los fonemas consonánticos /t/, /d/, /r/, /l/ y /s/ que pasan a ser contrapartes enfáticas bien por su realización directa o porque son asimilados a tales por la faringalización de algún otro fono dentro de la unidad léxica. Teniendo presente que el proceso de adquisición de las dos lenguas en este caso particular revela que el español es la L1 y el árabe la L2, los hablantes de árabe oriundos de Maicao tienden a no faringalizar algunos fonemas con frecuencia pues este no es un rasgo ni propio ni dominante de la lengua española, la cual genera como lengua de sustrato los cambios estructurales que se han dado en el vernáculo árabe libanés como resultado del contacto lingüístico histórico. La lengua árabe en esta comunidad presenta un alto grado de vitalidad, pues es transmitida a las generaciones que nacen en Colombia. En general hay una actitud positiva frente a el idioma árabe, el cual es la lengua de prestigio. Por estas razones
estamos frente a una variedad vernácula árabe de origen colombiano, pues cuando algunos de los miembros de la comunidad viajan al Líbano la gente no les entiende qué es eso de ragel. La variación sociofonética suprasegmental también ha cambiado y configura un rasgo distintivo en estos hablantes de árabe colombiano, que permite diferenciarlos de los demás hablantes de cualquier variedad dialectal del árabe en el mundo, de la misma manera que podemos distinguir el acento español de un paisa del de un caleño. Finalmente, la comunidad árabe libanesa de Maicao, Guajira, presenta unas relaciones sociales de producción material y significación social que han configurado su propia episteme histórica, la cual está estrechamente ligada al vínculo transnacional que estableció con los pueblos de Baalul y Kemet, en el Líbano, lugares de origen de la mayoría de inmigrantes y con los que se establecieron sólidas redes migratorias. Por lo mencionado, la situación social y lingüística de esta comunidad de habla árabe se suma a la situación de las más de sesenta lenguas aborígenes que se hablan hoy en el país y a las dos lenguas criollas: el sanandresano y el palenquero, las cuales, en conjunto, configuran el panorama lingüístico colombiano de cara al Siglo XXI.
Domingo 8 de junio de 2008
Egresado en Lingüística Universidad Nacional de Colombia
AFP
Carlos Jair Martínez Albarracín,
21
Ciro Alfonso Quiroz Otero,
Facultad de Derecho Universidad Nacional de Colombia
Huérfano de padre y madre a temprana edad, Nereo López fue internado en el seminario. Hastiado allí de tanto rezar se fugó con un compañero y fue a esconderse en Barranquilla. Corría el año de 1938. Se ocupó como portero de un cine-teatro y se aficionó a todo lo relacionado con el celuloide, hasta el punto de que llegó a ocupar el cargo de director seccional de Cine Colombia en Barrancabermeja, donde un pariente le enseñó la magia del revelado y las audacias de la imagen, valiéndose de platos de peltre ante la carencia de bandejas especiales, debido a la crisis de la Segunda Guerra Mundial. Estudió fotografía por correspondencia en el New Royal y viajó a Nueva York, donde presentó su examen. En 1952 fue jefe de fotógrafos de Cromos. En esa época vivió en un apartamento ubicado en la calle 20 con carrera 13, en Bogotá, un sector de bares y prostíbulos. Esa circunstancia le dio el privilegio de conocer los inicios matutinos y bulliciosos que dieron volteretas a la dictadura del General Rojas Pinilla. Para cumplir con su oficio era asistido por Gabriel Sevilla, apodado Sevillita debido a su descarnada figura, y con él detrás, tomó las primeras placas a los estudiantes revoltosos, antes de la llegada de las autoridades policiales, hecho que se convirtió en una primicia de Cromos; las fotografías se salvaron de carambola porque los rollos los guardaba su acompañante, con lo que se evitó su decomiso por los sabuesos al servicio de la dictadura Rojista.
Domingo 8 de junio de 2008
Pura casualidad Nereo, que había sido amigo de infancia de Manuel Zapata Olivella en Cartagena, recibió un día una carta del médico originada en la Paz, Cesar. Lo invitaba a participar en un reportaje gráfico sobre unos músicos de acordeón que ejecutaban sus melodías usando guacharaca y tambor, cuyas letras narraban con humor los sucesos de la comarca. Todo el conjunto con su embrujo tocaba “como por arte de magia”, según decía la nota de Zapata. Manuel, el andariego, llevaba poco tiempo residiendo en ese pueblo próximo a las estribaciones de la Sierra Nevada de Santa Marta. Iba de paso para Venezuela en busca de trabajo pero se detuvo allí, en averiguación de su parentela Olivella, que él desconocía. Se tropezó en la búsqueda con Pedro Olivella, quien lo alojó en su casa. Le montó un consultorio improvisado y rudimentario, lo presentó a familiares y amigos y, como el pueblo carecía de médi-
Nereo,
imagen en el tiempo Nereo es uno de los grandes hombres de Colombia, que ha vivido la obstinada experiencia de ocultarse siempre detrás de una lente. Su padre buscó para sus
hijos nombres de origen griego: Aracelit y Bertita, son las mujeres, y Nereo, el varón. co, se quedó allí. Inquieto desde su época de estudiante llegó al sitio no imaginado para desplazarse como pez en el agua, en esta población de gente étnicamente homogénea, atávica e integrada a sus valores culturales por obra de parentescos y aislamientos territoriales. Allí, Manuel conoció a Rafael Escalona en casa de María Calderón, único sitio donde vendían cerveza fría con el inconveniente del viejo y destartalado enfriador, que unas veces enfriaba y otras no. Los sedientos clientes debían conformase
Derecho de la Universidad Nacional de Colombia. Así se completó el trío de amigos a quienes no les faltaría el esquema gastro– intelectual del sancocho, convocatoria colectiva que se prestaba para la risa, el humor y hasta para el debate de los temas políticos de nuestro país. Estaban juntos y el fotógrafo Nereo no perdió la oportunidad de plasmar en esas primeras tomas aquellas parrandas remotas prolongadas hasta altas horas de la noche, para lo cual retaba la luz del sol con musical desafío, patrocinadas por los cantos de Escalona,
Archivo particular
22 Cultura
hostigar a Escalona por llevar tan extraña indumentaria, mofándose de él. Lo molestaron tanto que Escalona optó por abandonar esa costumbre. No tardó García Márquez en empezar a escribir sus crónicas, como si se tratara de textos de paseos y merengues. A veces se trenzaba en prolongados debates, inclusive por el solo cambio del nombre de un canto cualquiera de Escalona. Nereo, con su lente, fue captando a fuerza de emociones y casualidades los registros de esa época,
Cuando de pantalones cortos recorría las calles de su Cartagena natal, con el mamagallismo a la usanza de sus compañeros a cuestas y aquella frase que aún penetra sus oídos: ¡Nereo!…¡Nereo!... ¿dónde estás que no te veo? con la mala noticia de la propietaria, que les decía con cara de desazón: “el aparato no quiso colaborar”. Rafael frecuentaba esta población cabecera de la municipalidad de Robles, ubicada en la prolongación mediterránea del Caribe Colombiano, cuando andaba en busca de los amores de “La Maye”, Marina Arzuaga, su novia de estudiante y su esposa después, sobrina de Miguel Canales, uno de sus amigos favoritos de parranda y alcahueterías. En esos años deambulaba Gabriel García Márquez por la provincia de Valledupar, como vendedor de enciclopedias, trajinando por una región paradójicamente analfabeta. Acosado por la abulia y los apremios económicos propios de las malas ventas, García Márquez tuvo noticias de Manuel Zapata, a quien lo ligaba la juvenil amistad de su época de estudiante inconcluso en la escuela de
repletos de personajes y sucesos reales que nacían unos detrás de otros.
Un trío de cuatro Al lado de Rafael, los imborrables recitales eran cantados con guitarras y acordeones, con la fragancia de una juventud galante porque vivía su mejor época de repentista u oralista, narrando cuanto acontecimiento llegara a su memoria, episodios a los cuales ponía letra y melodía, difundiéndolos todos a manera de noticia. En esa estancia, al compositor se le había metido en la cabeza imitar a los cow boys norteamericanos, sombrero de fieltro, cinturón ancho y atezado por vistosa hebilla, a la que no podía faltar el símbolo de la herradura y unas botas altas con sonoras e incisivas espuelas. Además, llevaba una pistola en el cinto. Zapata y Nereo no perdían oportunidad de
sin imaginar que con ellos estaba haciendo uno de los más vistosos legados para la historia. Esas fotografías nos devuelven ahora a las escenas y a la manera como se fue consolidando esta música, llamada vallenato, con su diversidad de melodías y ritmos: son, paseo, merengue, y puya, con protagonistas memorables de carne y hueso, que narraban todas sus ocurrencias, con la trayectoria de personajes regados y recogidos en todo lo largo y ancho de la comarca, que fue hasta hace poco el extenso territorio del departamento del Magdalena, del cual nacieron Cesar y La Guajira. Una vida agitada encontró Nereo en la provincia de Valledupar y en La Guajira, por obra de cantos, acordeones y trago que no le dieron tiempo siquiera para estampar su propia imagen dentro del recorrido suyo de rotundo vagabundo, en esas tierras, cuando por obstinación
propia logró retratar ese mundo de aventuras imaginables que no será posible volver a vivir. Después de estas correrías por tierras de los instrumentos de fuelles y lengüetas libres, al lado del pintor Enrique Grau y del escritor Álvaro Cepeda Samudio, Nereo hizo parte del equipo de filmación del cortometraje “La langosta azul”, experimento de voluntad artística e intelectual, animado sólo por la vocación de materializar la sensación de ver en movimiento las imágenes de una creación propia, que Tita, la viuda de Cepeda, guarda con celoso afecto. Y el hombre que ha hecho magia con su lente para recoger bellas estampas de personajes de nuestra historia y nuestro folclor, evoca gráficamente las travesuras de la niñez, cuando de pantalones cortos recorría las calles de su Cartagena natal, con el mamagallismo a la usanza de sus compañeros a cuestas y aquella frase que aún penetra sus oídos: ¡Nereo!…¡Nereo!... ¿dónde estás que no te veo? Aquí esta la obra del hombre que ha extraído de sus archivos el pasado hechos imágenes, sobre una época de acordeones, de parrandas y parranderos y de cantores que no van a olvidarse en caminos, galleras y cumbiambas. Momentos de cuando nuestra música empezaba a posicionarse como expresión social y cultural de una región apegada a sus valores y si ahora podemos ver e imaginar mejor su gesta musical, se debe a la acuciosidad de la cámara fotográfica de Nereo, que por inquieta, revela hoy los secretos que escondió por muchos años como autor y como partícipe de estas trasnochadoras andanzas.
Reseñas
El estudio Canasta educativa, metodología y estimación de costos en Bogota D.C. realizó un trabajo de campo y consiguió la información requerida para definir los insumos de la canasta educativa, según los servicios y necesidades ofrecidas por los colegios en el momento de la recolección de información. Después determinó los costos de los insumos, bienes y servicios que el colegio tiene para ofrecer a la comunidad y permiten determinar los elementos esenciales que hacen posible un servicio educativo de calidad. La canasta estándar se define como el conjunto y el valor de los insumos, bienes y servicios requeridos para prestar un servicio educativo de calidad y se construye con estándares básicos establecidos en estudios nacionales de comportamiento de variables e indicadores del sector. Tanto para la construcción de las Canastas Reales como las de Referencia se determinaron cuatro componentes: recurso humano, planta y recursos físicos, alumno y administración y gestión del servicio.
Raza, etnicidad y sexualidades
Publicado por el Centro de Investigaciones y Documentación Socioeconómica de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad del Valle, el Centro Latinoamericano de Sexualidad y Derechos Humanos del Instituto de Medicina Social de la Universidad del Estado de Río de Janeiro y el Instituto CES y la Escuela de Género de la facultad de Ciencias Humanas de la Universidad Nacional de Colombia, acaba de salir al mercado el libro Raza, etnicidad y sexualidades. El libro es el resultado de una serie de seminarios, organizados por los profesores Peter Wade, Fernando Urrea Giraldo y Mara Viveros Vigoya, editores del presente volumen, y que tuvieron
Este libro presenta la metodología usada en el estudio, la conceptualización y las redefiniciones de las tipologías, según la legislación, los resultados del trabajo de campo, los elementos esenciales de cada componente y el sistema de costeo para definir y construir la canasta de referencia que el estudio considera Canasta Básica o Ideal para ofrecer una educación de calidad. Aunque el estudio define la Canasta Educativa con alcances y resultados significativos, la metodología y aplicación tiene limitaciones que deben tenerse en cuenta para las actualizaciones de los costos y futuros ajustes en los insumos por componente. Este libro se estructura en cuatro partes: Definición y estimación de costos de la Canasta Educativa Real en Bogotá, que define las premisas teóricas y metodológicas para la estimación de la Canasta Educativa Real. El segundo, Hacia una educación de calidad: estimación de la Canasta de Referencia, establece los criterios para la construcción de la Canasta de Referencia y define y estima sus componentes esenciales. El tercero, Análisis comparativo de costos: Canastas Reales, Canastas de Referencia, presenta un análisis comparativo de las Canastas Reales y las Canastas de Referencia. Y el cuarto, La función de producción en el sector educativo, presenta algunos planteamientos sobre la metodología de la función de producción; hace una reseña de trabajos asociados a la función de producción, enfatizando en estudios de caso existentes y resultados obtenidos; propone un referente en torno a un modelo genérico a través de la función de producción del sector educativo y especifica una metodología para la estimación de una función de producción educativa asociada a una muestra de colegios de Bogotá. El Centro de Investigaciones para el Desarrollo, CID, de la Universidad Nacional de Colombia, pone este informe a disposición del público para difundir, mejorar y complementar la metodología para el estudio y la estimación de la canasta educativa y para promover el debate y la reflexión sobre los criterios de asignación de los recursos del sector educativo.
lugar en el Reino Unido y Colombia en el 2006 y el 2007. “Desde hace muchos años hemos compartido intereses comunes en temas de raza, género, sexualidad y nación, aseguran los profesores, sobre todo en relación con la población afrocolombiana. Esta motivación fue el impulso para buscar apoyo de la British Academy y el programa UK–Latin America and the Caribbean Link Programme, cuyo propósito es fomentar el intercambio académico e intelectual entre países de América Latina, el Caribe y el Reino Unido”. Los seminarios tuvieron lugar en la Universidad de Manchesrer, diciembre del 2006, y en la Universidad del Valle, Cali, marzo del 2007. En las disímiles expresiones raciales y sexuales que tiene hoy las relaciones entre Europa, África y América hay continuidades y cambios, como lo mostrarán los trabajos presentados y las realidades contemporáneas descritas. Estas incluyen situaciones y procesos tan diversos como los que serán evocados en este libro: adopciones transnacionales, modelamiento del sentido y sentimiento nacional en la escuela, reinados de belleza y sexualización de lo indígena, estrategias políticas de mujeres afrodescendientes, relaciones interraciales afectivo– sexuales, identidades y sexualidades de mujeres migrantes, construcciones identitarias de jóvenes negros homosexuales, tensiones entre homofobia y racismo, aprendizaje de la sexualidad en la adolescencia. Los editores esperan que la presentación de estos temas en diferentes contextos locales y nacionales permita adelantar líneas de convergencia y dinámicas que vayan más allá de los marcos sociales nacionales o locales e históricos que describe y analiza el libro.
Venezuela hoy: miradas binacionales
Con la coordinación y edición de Socorro Ramírez, profesora titular e investigadora del IEPRI y coordinadora del Grupo Académico Colombia–Venezuela y de la Cátedra Venezuela, el Instituto de Estudios Políticos y Relaciones Internacionales, de la Universidad Nacional de Colombia, acaba de publicar el libro Venezuela hoy: miradas binacionales. El libro hace parte de la Cátedra Venezuela que, en su versión 2007, se desarrolló antes de que la relación entre Colombia y Venezuela entrara en una etapa de tensiones. La Cátedra se inició, dice Ramírez en la presentación, en razón del aumento de interacciones positivas entre ambos países, lo que llevó a sectores académicos, estatales y sociales en Colombia a pedirle al IEPRI que estimulara un mejor conocimiento de las dinámicas de la Venezuela bolivariana y ayudara a pensar formas proactivas de mutua aproximación, a partir del conocimiento de las nuevas
Veena Das: Sujetos del dolor, agentes de dignidad
Este libro, en el que por primera vez se ofrece en nuestro medio una visión panorámica del pensamiento de Veena Das, lo conforma una cuidadosa selección de sus artículos, precedidos por un estudio introductorio del profesor Francisco Ortega, director del CES, que se complementan con los artículos de Myriam Jimeno, César Abadía, María Victoria Uribe, Raúl Meléndez y Stanley Cavell, que contribuyen a la comprensión de la obra de Das. El libro fue editado por el Instituto Pensar, de la Universidad Javeriana; la Facultad de Ciencias Humanas y Económicas de la Universidad Nacional de Colombia en Medellín y el Centro de Estudios Sociales, CES, de la Facultad de Ciencias Humanas de la UN en Bogotá. Su presentación estuvo a cargo de Óscar Almario G., Vicerrector de la Universidad Nacional en Medellín.
realidades binacionales. Este libro, sigue Ramírez, conserva entonces toda su actualidad, pues ilustra sobre las dinámicas en marcha en Venezuela. Las referencias a la relación entre los dos países quedan allí como un testimonio que sirve para recordarnos los vínculos que se habían construido y que constituyen un hito del que habrá que partir una vez se superen las lamentables circunstancias actuales, que constituyen un ineludible reto para ambas naciones, que comparten inexorablemente una extensa frontera, una historia en buena medida común, densos lazos de sangre, culturas hermanas y unos desafíos de futuro que no podrán ser adecuadamente superados sin una mutua vinculación cada día más estrecha. Venezuela hoy: miradas binacionales es fruto de once años de trabajo académico colombo–venezolano. En efecto, asegura Ramírez, desde ángulos muy diversos recibimos solicitudes de poner en la agenda académica la discusión sobre las diversas interpretaciones de la revolución bolivariana y la construcción del socialismo del Siglo XXI, dado que el IEPRI, en la línea de investigación, docencia y extensión “Fronteras, vecindad e integración”, ha venido desarrollando un amplio y sistemático trabajo académico con los países vecinos, en primer lugar con Venezuela. Cada parte del libro presenta la misma estructura del trabajo de la Cátedra. Una introducción del tema de cada sesión, de Ramírez, como coordinadora de la Cátedra; luego, las diferentes interpretaciones de los venezolanos implicados en el proceso bolivariano y los comentarios de especialistas colombianos en el respectivo asunto; después, el debate con los participantes en la jornada y, en la última sesión, la evaluación del curso, realizada por estudiantes y asistentes. Finalmente se reproduce la clausura de la Cátedra, en la que intervinieron los representantes de aquellas entidades que fueron decisivas en su desarrollo: el Ministerio de Educación Superior de Venezuela y la Cancillería de Colombia.
Veena Das, nacida en India en 1945, es reconocida en el mundo académico occidental y oriental como una de las figuras más representativas de la antropología contemporánea. Su influyente actividad académica se desenvuelve tanto en la cátedra e investigación universitaria como en el plano de la crítica social. Es profesora de la Johns Hopkins University y una voz autorizada en conferencias y foros, como también una influyente personalidad intelectual y política, en la medida que sus escritos, opiniones y posiciones son valorados por centros, institutos y programas especiales que se ocupan de seguir las grandes tendencias y retos del desarrollo socioeconómico y la consolidación de la democracia en diversos contextos geográficos y culturales. La Universidad Nacional de Colombia contribuye así a romper los bloqueos intelectuales prevalecientes, al establecer una lectura crítica de los modelos analíticos dominantes y aproximar voces y sentidos prácticamente incomunicados o reducidos a contactos privilegiados. La presencia de Veena Das en la conmemoración de los 20 años del CES en el 2005 y la publicación de este libro son ejemplos de un camino que se está trasegando y en el que se debe persistir, como parte de la renovación del pensamiento social colombiano. La obra ha sido posible gracias a la inteligencia y tenacidad de muchas personas e instituciones, empezando por Das, que avaló la publicación de su artículos, y por la autorización de las entidades que los habían publicado, el esfuerzo de los traductores, las gestiones de las facultades de Ciencias Humanas en Bogotá y Ciencias Humanas y Económicas en Medellín, la Dirección del CES y el estímulo de profesores de varios departamentos y unidades académicas.
Domingo 8 de junio de 2008
Canasta educativa, metodología y estimación de costos en Bogota D.C.
23
24 Cultura
El asqueroso cuerpo del arte Haciendo uso de una gran variedad de expresiones formales, el maestro David Lozano presenta Ulises, una
exposición que recoge parte importante de su producción artística y resume su búsqueda permanente por la belleza atrapada en el lenguaje primario del cuerpo. El asco.
“Pero todo es imperfecto / en esta confidencia / loca, en la cual me exalto / y me humillo a mi mismo.” Pier Paolo Pasolini, El Ruiseñor de la Iglesia Católica.
Sandra Gómez Galindo, Unimedios
Sangre, saliva, semen, sudor. Fluidos. Tan propios del cuerpo como los pies, los ojos, el pelo o la piel pero asociados culturalmente a lo abyecto, repulsivo, a lo asqueroso. En esta fragmentación y jerarquización del cuerpo que lo define como limpio o sucio, cuidado o descuidado, humano o no humano, es donde el maestro David Lozano se instala para volver la mirada sobre el cuerpo pero solo a través de las sensaciones, en una relación inmediata y directa con el mundo.
Manjar de pequeños dioses En el centro de Ulises se encuentra manjar de pequeños dioses, una obra que
acerca a los espectadores al mundo infantil del autor; el lugarcito que se hacía debajo de la mesa, el molino que muele el maíz de las arepas adosado en una esquina, el refugio, la imagen de mamá. Sensación de pequeño mundo. Esta suerte de reconstrucción escenográfica de su experiencia infantil, inaugura un recorrido por otras sensaciones que a lo largo de los años se van transformando con la ferocidad del mundo. Así van apareciendo otras formas, venidas, por ejemplo, de las exploraciones a la Bogotá subterránea, miedosa y prohibida de finales de los años 90, residuos de la casa de “Ulises”, una especie de sauna-discoteca y uno de los primeros focos de propagación de la nueva peste. El sida y su relación con los fluidos corporales, otra vez.
Y más residuos del culto al cuerpo, de la desnudez icónica, simbólica, desprovista siempre de toda valoración cultural. “Sensaciones de un cuerpo sin vestiduras que se asume individual, que se interroga a sí mismo”, como anota el artista.
Pasolini y la abjuración La propuesta curatorial estuvo a cargo del maestro Alejandro Burgos Bernal, quien traza un paralelo entre la obra del maestro Lozano con la obra de Pier Paolo Pasolini. “Pasolini, en un momento de su carrera artística, asumió radicalmente la sentencia de Adorno de que la cultura no sirve para nada. Finalizada la Segunda Guerra Mundial se terminó el concepto de
cultura y la única manera de asumir cuando no hay valores, tradiciones, es buscar en la propia individualidad, en el propio ser humano algún valor ético a través de la sensación pura de los sentidos desprovista de toda racionalidad”, explica el curador. Por eso la exposición está guiada por los conceptos de asco, escándalo y abjuración definidas por Pasolini en El Ruiseñor de la iglesia católica. Como en Pasolini, el maestro Lozano asume que su expresión es el lenguaje del cuerpo, el lenguaje es el cuerpo, el individuo se expresa a sí mismo. Por eso no encontrará el espectador fichas técnicas. Ulises es el resultado de la búsqueda de la idea más amplia de una desesperada vitalidad, descrita, cómo no, con la enorme
versatilidad del maestro Lozano que pasa por todos los lenguajes de la contemporaneidad; fotografía, pintura, video, performance e instalación, construidos y recompuestos a lo largo de una década. Cuando se intenta elaborar una relación con el mundo a partir solo del cuerpo, de la individualidad, probablemente la sensación del mundo no siempre sea bella; el asco es la instancia de la diferencia. “Es el lenguaje primario del cuerpo, el que lo diferencia de otras cosas que no son como él”, concluye el curador. Dos líneas más para invitar al público a visitar las salas 1 y 3 del Museo de Arte de la Universidad Nacional de Colombia en Bogotá hasta el próximo 1 de julio, con decisión y sin escrúpulos. Sin asco.
Domingo 8 de junio de 2008
La Unidad De Medios de Comunicación, Unimedios, y el Sistema de Patrimonio Cultural y Museos de la Universidad Nacional de Colombia tienen el gusto de invitarlos a la inauguración de:
Dos décadas de cultura en la Universidad Nacional de Colombia
9 de junio de 2008, 6:00 p.m. Claustro de San Agustín Portal de Museos Carrera 8a. No. 7-21 Hasta el 31 de julio de 2008
Archivo particular
Asco.