gación a vela es un arte que combina el estado del tiempo, las condiciones del mar y la experiencia del navegante, que se logra con sentido de responsabilidad, seguridad y prudencia, pues no hay dos situaciones iguales en altamar. Mi maestro… el mar reúne las memorias de dos travesías a vela por el mar Caribe y el océano Atlántico, realizados en 1996 y 2006, entre Estados Unidos y Colombia. A través de enseñanzas y anécdotas, el libro describe los principios y las formas de navegación, así como múltiples experiencias adquiridas durante estas travesías. ISBN: 978-958-781-073-8
Jose N. Gómez Sáenz
Experiencias de una travesía a vela
obedece a ciertas reglas y teorías, la nave-
Mi maestro... el mar Experiencias de una travesía a vela Jose N. Gómez Sáenz Segunda edición
Jose N. Gómez Sáenz Ingeniero civil de la Pontificia Universidad Javeriana de Bogotá, realizó una maestría en geotecnia en el Georgia Institute of Technology de Atlanta, Estados Unidos. Ha dirigido diferentes proyectos importantes en el país y ha sido profesor de la Pontificia Universidad Javeriana durante 20 años. Ha publicado artículos técnicos y participado como conferencista en seminarios y congresos de ingeniería, actividades que ha combinado con la navegación a vela, que practica desde su juventud en Cartagena de Indias.
Mi maestro... el mar
Más que un procedimiento preciso que
Fotografía de cubierta: Carlos Pardo
Mi maestro... el mar
Mi maestro... el mar Experiencias de una travesía a vela
Jose N. Gómez Sáenz
Facultad de Ingeniería
Reservados todos los derechos © Pontificia Universidad Javeriana © Jose N. Gómez Sáenz Segunda edición: abril de 2017 Primera edición: diciembre de 2004 ISBN: 978-958-781-073-8 Número de ejemplares: 300 Impreso y hecho en Colombia Editorial Pontificia Universidad Javeriana Carrera 7.a n.° 37-25, oficina 1301. Teléfono: 3208320 ext. 4752 www.javeriana.edu.co/editorial Diseño y diagramación: Emilio Simmonds Diseño de cubierta: Emilio Simmonds Corrección de estilo: Diego Pérez Medina Impresión: Javegraf
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ASOCIACIÓN DE UNIVERSIDADES CONFIADAS A LA COMPAÑIA DE JESÚS EN AMÉRICA LATINA
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Pontificia Universidad Javeriana | Vigilada Mineducación. Reconocimiento como Universidad: Decreto 1297 del 30 de mayo de 1964. Reconocimiento de personería jurídica: Resolución 73 del 12 de diciembre de 1933 del Ministerio de Gobierno. Gómez Sáenz, José N., autor Mi maestro... el mar : experiencias de una travesía a vela / José N. Gómez Sáenz. -- Segunda edición. -- Bogotá : Editorial Pontificia Universidad Javeriana, 2017. 176 páginas : ilustraciones, fotos y mapas ; 21 cm Incluye referencias bibliográficas (páginas 169-170) e índice. ISBN : 978-958-781-073-8 1. MAR CARIBE - DESCRIPCIONES Y VIAJES. 2. ISLA CAIMÁN (REINO UNIDO) - DESCRIPCIONES Y VIAJES. 3. ISLA DE SAN ANDRÉS (COLOMBIA) - DESCRIPCIONES Y VIAJES. 4. DEPORTE DE VELAS. 5. VIAJES POR MAR. I. Pontificia Universidad Javeriana. Facultad de Ingeniería. CDD 910.916365 edición 21 Catalogación en la publicación - Pontificia Universidad Javeriana. Biblioteca Alfonso Borrero Cabal, S.J. ________________________________________________________ inp
04 / 04 / 2017
Prohibida la reproducción total o parcial de este material sin la autorización por escrito de la Pontificia Universidad Javeriana.
A mi querida esposa, Elvira, y mi hijo, Jose Miguel, por su estĂmulo, apoyo incondicional y el tiempo familiar brindado...
CONTENIDO
Agradecimientos Prólogo Introducción
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TRAVESÍA EN EL BOOGIE (1996) Primer trayecto: Fort Lauderdale (Florida, Estados Unidos)-Islas Caimán (Reino Unido) Segundo trayecto: Islas Caimán (Reino Unido)-Isla de San Andrés (Colombia) Tercer y último trayecto: Isla de San Andrés (Colombia)-Cartagena de Indias (Colombia)
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TRAVESÍA EN EL KAYAHELE (2006) Emergencia en altamar
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Epílogo de la primera edición Glosario y recomendaciones Bibliografía Índice temático
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INTRODUCCIÓN*
Débil es aquel que permite que sus pensamientos controlen sus acciones, fuerte es aquel que compele a sus acciones que controlen sus pensamientos. Og Mandino Desde agosto hasta septiembre de 1996 realicé mi primera singladura internacional, entre las ciudades costeras de Fort Laudardale (Florida, Estados Unidos) y Cartagena de Indias (Colombia), bordeando el litoral noroeste de Cuba y recalando en las Islas Caimán y San Andrés, para completar un recorrido de 1580 millas náuticas. Realizamos esta travesía tres personas que nunca antes habíamos navegado juntos, en un velero francés de carreras, de 40 pies de eslora, al cual finalmente llamamos Boogie. La travesía, considerada inicialmente como una aventura vacacional, resultó más que eso, puesto que hubo que superar varios obstáculos que solo el mar y las inclemencias del tiempo del mar Caribe pueden imponer, y superarlos resultó, por lo tanto, un desafío.
* Han pasado cerca de doce años desde que apareció la primera edición del libro, en diciembre de 2004. La presente edición fue revisada y aumentada. Las modificaciones obedecieron a correcciones menores en el texto y en algunas figuras, y a la complementación del glosario. Al final del libro, por sugerencias de algunos amigos y amigas, se agregó una sección denominada “Emergencia en Altamar”, en la que se relatan aspectos de un rescate ocurrido en el océano Atlántico cuando nos dirigíamos con mi amigo Francisco (Pacho) Rengifo Sánchez al Cape Hatteras, NC, EE. UU., en junio de 2006.
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A través del libro he querido narrar nuestra travesía, comenzando por las actividades antecedentes y asociadas al zarpe o salida de puerto, las cuales, por más que son planeadas con anticipación, tienden a no coincidir con los tiempos estimados ni con los recursos previstos; dentro de estas tareas iniciales se incluyen también el alistamiento general del bote, la organización de la tripulación, la elaboración de la derrota o el recorrido considerado en tierra. En fin, todas esas actividades que se deben desarrollar con el propósito de que nuestro crucero fuese seguro y a la vez placentero. Lo anterior, teniendo en cuenta que el velero llevaba como dos años desarbolado o desarmado, en un patio de ventas de botes usados localizado en Long Island, cerca de Nueva York (Estados Unidos) y que, además, ninguno de nosotros había navegado antes un velero de esas características técnicas, algo sofisticadas en tecnología avanzada de navegación a vela. Posteriormente se describe el viaje, agrupándolo en tres trayectos, a lo largo de los cuales se desarrollaron eventos específicos y relacionados con las condiciones de navegación y los estados de ánimo. Estos últimos siempre fueron en promedio altos, pero con altibajos que se lograban controlar a tiempo, mediante la adopción de decisiones oportunas y prudentes, siempre analizadas en nuestro pequeño grupo. Una de las grandes lecciones y experiencias ganadas de este recorrido fue la capacidad de poder convivir en un espacio reducido por un poco más de dos semanas, sin enfrentamientos o malas interpretaciones. Los trayectos fueron los siguientes: Fort Laudardale (Estados Unidos)-Islas Caimán (Reino Unido), Islas Caimán (Reino Unido)-Isla de San Andrés (Colombia) y, finalmente, Isla de San Andrés (Colombia)-Cartagena (Colombia). A lo largo de la lectura del libro, no solo se presenta la narración de una gran mayoría de los eventos ocurridos como yo los sentí, recordados después de un poco más de siete años de realizada la travesía para traer el Boogie a Colombia, también se darán algunas explicaciones técnicas de modalidades de navegación a vela, recomendaciones originadas durante el viaje y, además, lecciones que he
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aprendido durante el tiempo que llevo intermitentemente navegando desde el año 1969, con base en mis cálculos y mi memoria. Toda esta descripción la realicé en un lenguaje que traté, y espero haberlo logrado, que fuera sencillo, simple y cotidiano. Hice comparaciones con situaciones comunes, de manera que cualquier lector que tenga cierta actitud hacia la aventura pueda entenderlo y verse beneficiado, y dentro del estilo de narración, acudo a experiencias anteriores. Guardando las distancias lógicas, comparto la opinión del físico Stephen W. Hawking al principio de su libro Historia del tiempo, cuando manifiesta que decidió dejar solo una ecuación en un libro de física pura, luego de que alguien le dijera que por cada ecuación que incluyera en el libro, las ventas se reducirían a la mitad. En temas de navegación podría ocurrir lo mismo si, por ejemplo, tratamos de demostrar vectorialmente por qué navega un velero, basándonos en un principio de motriz física. Estas enseñanzas y lecciones, usualmente, las van a encontrar a manera de pie de página, con el propósito de que no pierdan el hilo de la narración, y con el objetivo posterior de que las puedan consultar y repasar en cualquier momento. Algunos se preguntarán cuáles fueron las razones que me motivaron a escribir este libro, después de siete años de haber realizado la travesía. Primero, la experiencia de la travesía siempre se ha mantenido en mi mente, en la memoria permanente como la clasifican los sicólogos, permitiendo que no solo aplique esas experiencias cuando navego en competencia o por placer, sino que también, muchas veces, las asocie a mi comportamiento ante situaciones normales y comunes de mi vida cotidiana y del trabajo. Esto ha permitido que muchos de los hechos registrados en el viaje los haya tenido siempre bien conservados, a pesar del tiempo transcurrido: por ejemplo, muchas veces manifiesto que en el mar los errores pueden ser fatales, situación que a veces no se valora en tierra. Segundo, independientemente del dominio que uno pueda tener de un tema, si uno puede enseñar algo que le pueda servir a alguien o que le pueda aprovechar en cualquier forma a esa persona, por qué no hacerlo. Tercero, el
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apoyo y la motivación constante de mi mujer y mi hijo, mi familia y mis amigos para hacerlo, a quienes muchas veces les conté a pedazos la travesía, con algunas enseñanzas, de acuerdo con las circunstancias y los estados de ánimo. Para terminar, al final del libro se presenta un glosario con algunas recomendaciones de los términos marinos y términos meteorológicos, estos últimos asociados con el Caribe, que se emplearon a lo largo del texto. Las definiciones y descripciones también se hacen en un lenguaje sencillo, con ejemplos y comparaciones, algunas veces apartándose de definiciones netamente técnicas y profundas. Espero que disfruten el libro.
Jose N. Gómez Sáenz Bogotá, D. C. Agosto de 2004
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