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TERCERA EDAD | DISFRUTAR LA TERCERA EDAD | LOS ABUELOS PARA LOS NIÑOS | LA TERCERA EDAD Y LA FAMILIA | TRABAJO EN LA TERCERA EDAD: CÓMO AFRONTAR LA JUBILACIÓN | ARTHUR RUBINSTEIN (1886-1982)
Rif.: V-11439235-5
Octubre 2015 A3 - N° 31
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Octubre
Sumario 2015
05
CARTA DEL EDITOR: SIN TEMOR A ENVEJECER
06
CONCEPTO: TERCERA EDAD
08
CÓMO HACERLO: DISFRUTAR LA TERCERA EDAD
10
LOS NIÑOS: LOS ABUELOS PARA LOS NIÑOS
14
LA FAMILIA: LA TERCERA EDAD Y LA FAMILIA
16
EL TRABAJO: TRABAJO EN LA TERCERA EDAD—CÓMO AFRONTAR LA JUBILACIÓN
20
PERSONAJES: ARTHUR RUBINSTEIN (1886-1982)
22
JANNIN CASTELLANO: ¡Y PUNTO!
24
FRANCISCO RAMÍREZ: SURCANDO EN LOS MARES DE LA SABIDURÍA
28
ZULEIMA MARTÍNEZ: ¿A QUÉ EDAD SE INGRESA A LA TERCERA EDAD?
30
CINETERAPIA: EL EXÓTICO HOTEL MARIGOLD
32
LIBROS: EL VIEJO Y EL MAR
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Carta del Editor:
CRÉDITOS:
SIN TEMOR A ENVEJECER
Editorial: Carlos González
En esta edición de nuestra revista tenemos el placer de abordad un tema por demás sensible por la emocionalidad que despierta en mi la Tercera Edad, no tuve la dicha de disfrutar todo lo que hubiese preferido a mis abuelos (hombres) no los conocí a ninguno de los dos, partieron cuando yo aun era pequeño y no tenia la conciencia de valorar su presencia en mi vida. De mis abuelas tuve la bendición de disfrutar de mi abuela paterna, un encuentro que gracias a la curiosidad de descubrirme pude vivir, reír de sus ocurrencias y aprender de sus experiencias, hoy ya no se encuentra en este plano, pero se que su presencia espiritual me acompaña siempre. Gracias a esa experiencia, por demás necesaria para nuestro desarrollo integral como seres humanos, yo puedo sentir hoy, que la Tercera Edad debemos vivirla, sentirla y disfrutarla, así como tenemos el deber de vida de ayudar y acompañar a nuestros abuelos (todos los abuelos del mundo) a que esta etapa de su existencia sea vista sin ningún temor. Nuestros abuelos merecen el amor, la comprensión, el cariño y hasta el perdón por las cosas que hicieron o dejaron de hacer, no sabían, ni tenían una forma distinta de hacerlo, sentirlo o amarnos. Amar a nuestros abuelos es amarnos a nosotros mismos, pues somos parte de lo que ellos fueron y son ahora. Seamos participes de que cada uno de nuestros mayores vivan SIN TEMOR A ENVEJECER.
Diseño Gráfico: Henry Zambrano Carlos González
Artículos: Jannin Castellano Francisco Ramírez Zuleima Martínez Arnaldo Robles Ifigenia Pedretti Carlos González
Corrección: Jannin Castellano Amaiba Rincones
Aliado Estratégico: GPS-Soluciones Persiwindow Ciudad Plus
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Portada:
Esta edición esta dedicada a todos nuestros abuelos y abuelas, a los que lo seremos en el futuro y a aquellos que cumplen la honorable labor en dedicarse al cuidado de los ancianos en todos los ambientes, sea en sus hogares, casas de retiros u hospitales. Un aplauso a todos ellos, por dedicarse a este servicio de amor, con entrega y dedicación.
Carlos González Editor de la revista editor@meritocompartido.com.ve
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CONCEPTO:
TERCERA EDAD La longevidad es una aspiración de muchos seres humanos, pero a medida que pasan los años y la vejez se acerca, se vuelve en algo poco deseado. La mayoría de las definiciones del envejecimiento destacan sólo sus aspectos negativos, ya que resaltan la vulnerabilidad, la propensión a las enfermedades, la progresiva marginación y el inevitable acercamiento de la muerte. Tomado de: www.clinicasantamaria.cl/ edu_paciente/ quees_tercera_edad.htm
Envejecer es un hecho ineludible, pero la manera de enfrentar este proceso es una decisión individual, ya que depende de cada uno hacer realidad el dicho que la juventud va por dentro. ¿Qué es la Tercera Edad? El término tercera edad surge para no usar en forma despectiva las palabras vejez o ancianidad. Este término se refiere al adulto mayor, es decir mujeres que superan los 60 años y varones mayores de 65. Incluso se está estudiando el uso del término cuarta edad para aquellos mayores de 85 años que son un grupo cada vez más considerable. La tercera edad es una etapa evolutiva del ser humano que tiene varias dimensiones. Es un fenómeno biológico porque afecta la salud física y mental, tiene una parte sociológica y económica porque se ha alargado las posibilidades de vida y se debe mantener a esas personas. Y es también un fenómeno psicológico, ya que se producen cambios en el funcionamiento cognitivo y emocional. Como sociedad tendemos a un culto a la belleza y a mantenernos jóvenes, nos asusta la vejez, no la valoramos ni la asociamos con experiencia o sabiduría como ocurre en otras sociedades y por ello hay personas que desprecian esta etapa. En nuestra cultura, si bien hay miembros activos de la tercera edad en el poder judicial, legislativo, educacional o eclesiástico, se tiende a pensar que la opinión de un adulto mayor no vale tanto porque sus facultades mentales pueden estar alteradas. Por eso aquellas personas que se están acercando a esta etapa, más aun para quienes la viven, se sienten excluidos, abandonados y discriminados laboralmente. En algunas ocasiones, los adultos mayores creen que los más jóvenes no los comprenden e incluso les faltan al respeto, por eso es importante que las nuevas generaciones tengan una actitud cariñosa, respetuosa y protectora hacia ellos, porque así les daremos un trato familiar más digno.
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CÓMO HACERLO:
DISFRUTAR LA TERCERA EDAD
Tomado de: antonioperezesclarin.com/2013/05/28/disfrutar-la -tercera-edad/
El 29 de mayo celebramos en Venezuela el Día del Adulto Mayor. No todos tienen la dicha y el privilegio de llegar a adultos mayores. Por ello, no podemos considerar la tercera edad como una carga, sino como un extraordinario regalo y como una oportunidad de ahondar en las cosas más importantes y de disfrutar calmadamente de los mil regalos que nos brinda la vida en cada momento. Cada etapa de la vida guarda sorpresas para quien quiere gozar en plenitud de este don maravilloso, para quien tiene capacidad de asombro y de agradecimiento al despertar cada mañana. Si es bien cierto que no podemos evitar el decaimiento y fatiga del cuerpo, y que con el paso de los años, perdemos facultades y también familiares y amigos, es posible mantener un espíritu vigoroso y vivir la tercera edad de una forma enriquecedora en la que podemos continuar creciendo, sentirnos bien y hacer sentir bien a los demás. La vida es ahora y lo importante es vivir cada momento de un modo significativo y pleno. Hay jóvenes que se la pasan quejando, viven amargados, sin ilusión, pareciera que hubieran perdido las ganas de vivir. Y hay adultos mayores que deslumbran e impresionan por su juventud y por su amor a la vida. Cada edad tiene su propia juventud y es posible vivir intensamente cada etapa, cada momento, cada suceso. Si uno al llegar a la tercera edad, cree que ya no sirve para nada, envejece de verdad, y entra en un acelerado proceso de decrepitud. Está muy bien jubilarse del trabajo, pero no hay que jubilarse nunca de la vida. La jubilación del trabajo brinda excelentes oportunidades para asumir proyectos postergados, para enfrentar nuevos retos, para disfrutar de las cosas sencillas y del milagro de la vida que se recrea en cada momento y especialmente en los nietos. Recuerda el proverbio japonés: “No diga: Es imposible. Diga: No lo he hecho todavía”. Con el paso del tiempo uno puede seguir creciendo hacia adentro, en espiritualidad e incluso en creatividad. Ser un adulto mayor no es ser un inútil, y la historia nos recuerda a algunos ancianos increíbles: Bertrand Russell recibió el Premio Nóbel a los 78 años y a los 90 seguía combatiendo incansablemente por las causas humanitarias. A los 80 años de edad, Leopoldo Von Ramke comenzó a escribir la Historia del Mundo, obra que concluyó a los 92. Rubinstein interpretaba como nadie a Chopin a los 90 años y el japonés Teichi Igarachi subió el monte Fuji a los 99. Otro japonés acaba de conquistar el Everest, el pico más alto del planeta, a los ochenta años. Podríamos alargar
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Si es bien cierto que no podemos evitar el decaimiento y la fatiga, es posible mantener un espíritu vigoroso y vivir la tercera edad de una forma enriquecedora”
enormemente la lista de adultos mayores memorables que desplegaron en su edad más avanzada una increíble juventud creadora: Miguel Ángel, Moisés, Bernard Shaw, Arthur Miller, Picasso, Casals, Chaplin, John Dewey, Jacinto Convit…
vida, siguen amando mucho en la última etapa: Dan gracias por todo y gozan cada momento de su existencia. Siguen activos y cultivan su mente y su espíritu.
Por ello, un auténtico proyecto de vida debe ayudarnos a vivir la “edad dorada” del modo más humano posible, como una excelente oportunidad de seguir regalando lo mejor de nosotros, evitando la amargura, el desánimo, el aislamiento, la sensación de inutilidad. Esta edad puede ser una oportunidad maravillosa para acrecentar el espíritu e irse convirtiendo en un verdadero experto en humanidad. Los que han vivido enamorados de la
"¡Que importantes son los abuelos en la vida de la familia para comunicar ese patrimonio de humanidad y de fe que es esencial para toda sociedad!" (Reflexión del papa Francisco antes del rezo del Ángelus, JMJ Río 2013, 26/07/2013)
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LOS NIÑOS:
LOS ABUELOS PARA LOS NIÑOS
Tomado de: www.guiainfantil.com/ blog/724/quienes-son-losabuelos-para-los-ninos.html
¿Quienes son los abuelos para los niños? ¿Qué representan? Pues si queremos saberlo, preguntémosles... Aunque los papás estamos acostumbrados a que nuestros pequeños sean los que nos pregunten en todo momento y por todo: qué, cómo , cuándo, por qué,... y sabemos de sus sorprendentes ganas de aprender, de su ingeniosa manera de ver las cosas, asomémonos a sus maravillosas mentes a través de nuestras preguntas. La experiencia de los abuelos. ¿Qué piensan nuestros hijos de sus abuelos? Comparto con ustedes, unas breves respuestas de niños de 6 a 8 años sobre la pregunta: ¿Qué es un abuelo? Entre las respuestas no encontraremos una definición formal de diccionario, pero sí un paso, una vivencia, un sentimiento que nos dirá mucho de nuestros hijos. Respuestas que responden a la sabiduría de su inocencia, a la alegría de sus vivencias, a la inventiva de sus ocurrencias y la improvisación de su espontaneidad. Leamos y riamos.
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1.
Los abuelos son una señora y un señor que como no tienen niños propios les gustan mucho los de los demás.
2.
Un abuelo es una abuela, pero hombre.
3.
Los abuelos son gente que no tienen nada que hacer, solo están ocupados cuando nosotros los vamos a visitar.
4.
Los abuelos son tan viejitos que no deben correr.
5.
Los abuelos son personas con las que es bien divertido salir de compras.
6.
Cuando salimos a pasear con ellos, se detienen para enseñarnos cosas bonitas como hojas de diferentes formas, un ciempiés de muchos colores o la casa del lobo.
7.
Ellos no nos dicen: ¡Apúrate!
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Los abuelos son una señora y un señor que como no tienen niños propios les gustan mucho los de los demás”
son las únicas personas grandes, que siempre están contentas de estar con nosotros. 8.
Por lo general, las abuelas son unas señoras gordas, pero así y todo se agachan para atarnos los zapatos.
9.
Son unos señores que para leer usan gafas, siempre los pierden y cuando me he quedado a dormir con ellos usan unas ropas bien cómicas.
10.
Algunos abuelos tienen papás, esos si son bien viejitos, la mamá de mi abuelita, se puede quitar las encías y los dientes... a la misma vez.
11.
Nos responden preguntas como: 'Por qué Dios no está casado?' o ¿Por qué es que los perros persiguen a los gatos?
12.
No les importa contarnos el mismo cuento varias veces y les encanta leernos historias.
13.
Todo el mundo debe buscarse unos abuelos,
14.
Ellos saben que antes de dormir podemos comer algunas chucherías, antes de acostarnos, les encanta rezar con nosotros y nos besan y consienten aunque nos hayamos portado un poco mal.
15.
A un niño de 6 años le preguntaron donde vivía su abuelita y él contestó: Ella vive en el aeropuerto, cuando la necesitamos vamos allá y la buscamos y cuando queremos que regrese a su casa la volvemos a llevar a su aeropuerto.
"Los ancianos son una riqueza, no se pueden ignorar, porque esta civilización seguirá adelante sólo si sabe respetar su sensatez y su sabiduría" (Papa Francisco—Catequesis audiencia general, Ciudad del Vaticano, 04/03/2015)
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LA FAMILIA:
LA TERCERA EDAD Y LA FAMILIA Relaciones afectivas. La vida de la mayoría de los individuos de edad avanzada se enriquece por la presencia de personas que cuidan de ellos y a quienes éstos sienten cercanos.
Tomado de: www.vejezyvida.com/latercera-edad-y-la-familia/
La familia es todavía la fuente primaria de apoyo emocional, y en la edad avanzada tiene sus propias características especiales. Ante todo es probable que sea multigeneracional. La mayoría de las familias de las personas de edad avanzada incluyen por lo menos tres generaciones; muchas alcanzan cuatro o cinco. La presencia de tantas personas es enriquecedora pero también crea presiones especiales. Además, la familia en la edad avanzada tiene una historia larga, que también presentan sus más y sus menos. La larga experiencia de afrontar tensiones puede dar confianza a estas personas en el manejo de cualquier situación que la vida ponga en su camino. Muchos eventos de la vida son especialmente típicos de la familia de edad avanzada (aunque no se limitan a ellas): volverse abuelo o bisabuelo, retirarse del trabajo o perder al cónyuge. Matrimonio: El matrimonio que dura largo tiempo, es un fenómeno relativamente novedoso; la mayoría de los matrimonios, como la mayoría de las personas, solían tener una vida más corta. Muchos hombres perdían a una ó más esposas en el parto; y, en general, ambos sucumbían a la enfermedad siendo jóvenes. En la actualidad los aniversarios quincuagésimos son más comunes, aunque son más comunes, aunque aún muchos matrimonios se terminan más temprano por muerte o divorcio. Dado que las mujeres comúnmente se casan con hombres mayores y por lo general viven más largo tiempo que éstos, muchos más hombres que mujeres viven con sus cónyuges. La felicidad conyugal: Las parejas casadas que están todavía juntas en sus 60 años tienen mayor probabilidad que las parejas de edad intermedia de considerar su matrimonio como satisfactorio. Muchos dicen que su matrimonio ha mejorado a través de los años. Puesto que desde hace algunos años el divorcio ha sido más fácil de obtener, los esposos que todavía están juntos en una época tardía de la vida han elegido estar juntos.
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Muchos eventos de la vida son especialmente típicos de la familia de edad avanzada, como volverse abuelo”
Por lo general la decisión de divorciarse llega temprano en un matrimonio; las parejas que permanecen juntas a pesar de las dificultades son
adulta intermedia, los que con frecuencia llevan a hombres y mujeres en direcciones opuestas. Como el esposo se involucra menos con el trabajo y está más interesado en la intimidad, la esposa puede interesarse más en el crecimiento personal y la autoexpresión. En el cambio de roles, las parejas pueden argumentar sobre tareas domésticas, entre otras.
capaces de superar sus diferencias y de llegar a una relación mutuamente satisfactoria. Otra posible razón por la cual las personas de edad avanzada reportan mayor satisfacción en el matrimonio es que a esta edad están más satisfechas con la vida en general. Su satisfacción puede surgir de factores externos al matrimonio, como el trabajo, el fin de la crianza de los hijos, ó más dinero en el banco.
Los matrimonios de edad avanzada por lo general se ponen a prueba por las dolencias de salud de uno de los cónyuges. Las personas que deben cuidar de su pareja incapacitada pueden sentirse aisladas, enojadas y frustradas, sobre todo cuando ellos mismos tienen precaria salud. Cuidar a un cónyuge que padece demencia es algo que exige de manera especial, y comúnmente da como resultado un sentido de pérdida de identidad. Tanto la personalidad como el desempeño externo influyen en la manera como los responsables del cuidado pueden adaptarse a las exigencias que se le presentan. Aquellos que son optimistas y están bien adaptados para comenzar con esta labor y los que mantienen contacto con amigos, logran desempeñarse mejor.
También es posible que consideren que su matrimonio es feliz como una justificación consciente o inconsciente por haber permanecido en él tan largo tiempo. Fortalezas y tensiones en el matrimonio en la edad adulta tardía: Estar enamorado es todavía importante para el matrimonio exitoso en la edad adulta tardía. Los esposos de edad avanzada también valoran el compañerismo y la expresión abierta de los sentimientos, como también el respeto y los intereses comunes. Pero pueden surgir problemas provenientes de diferencias en valores, intereses y filosofías.
Algunas parejas disfrutan el retiro porque les permite tener tiempo de ocio para viajar, pasar momentos con los hijos y nietos, y perseguir otros intereses, juntos o por separado. No obstante, la jubilación no siempre hace que un matrimonio sea mejor.
Una nueva libertad llega en cuanto el esposo y la esposa se apartan de los roles de sostén de la familia y de la crianza de los hijos, a medida que cada uno de los dos se vuelve más interesado en la personalidad del otro, y a medida que cada uno disfruta de modo creciente la compañía del otro. Además, la capacidad de las personas casadas para manejar los altibajos de la edad adulta tardía con relativa serenidad puede resultar de su mutuo apoyo. Esto refleja tres beneficios importantes del matrimonio: intimidad (sexual y emocional), interdependencia (compartir tareas y recursos), y sentido de la pareja de pertenecer uno al otro.
Surgen problemas con mayor frecuencia en aquellas situaciones en que el esposo se retira y la esposa todavía sigue trabajando. La esposa puede sentir que su carga de trabajo es injusta, dado que los esposos en edad de retiro gastan menos de ocho horas a la semana, en promedio, en tareas domésticas, mientras que sus esposas invierten cerca de 20 horas más a la semana y hacen más de tres cuartas partes de los quehaceres doméstico.
El éxito de un matrimonio en la edad adulta tardía puede depender de la capacidad de la pareja para adaptarse a los cambios de personalidad de la edad La Tercera Edad
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EL TRABAJO:
TRABAJO EN LA TERCERA EDAD: CÓMO AFRONTAR LA JUBILACIÓN Gracias a la medicina, los estilos de vida más saludables y la cada vez mayor esperanza de vida, la jubilación ya no puede estar asociada al ocaso de la existencia, ni tampoco a la idea de un descanso definitivo después de muchos años de vida laboral. Tomado de: muysaludable.sanitas.es/ envejecimiento/trabajo-en-latercera-edad-como-afrontar-la -jubilacion/
Durante la tercera edad también podemos ser útiles para nuestra comunidad, ya sea a través de voluntariado o actividades cuya remuneración sea transparente. Naturalmente, en los países donde se anima a las personas mayores a seguir desempeñando algún oficio o trabajo, participando de forma activa y productiva en la sociedad, se procura que éstos sea distintos a los que ya desempeñaban. Además no deben suponer una carga fiscal para ninguna de las partes ni servir como tapadera de una explotación encubierta. Gerontosociedad. En los últimos años podemos constatar que en todos los países de nuestro entorno tiene lugar un progresivo envejecimiento de la población, lo que pone de relieve, cada vez más, la importancia de la gerontología, la ciencia que estudia la vejez y sus consecuencias, y que se divide en múltiples disciplinas, como la geriatría, la gerontología social, la psicología de la vejez, la tanatología, o el trabajo social gerontológico, entre otros. Se estima que para 2050, uno de cada tres habitantes en los países desarrollados tendrá 60 años o más años. A esto se suma el hecho de que, al haber un porcentaje mayor de ancianos, así como una base social joven en claro retroceso, cada vez resulta más difícil garantizar una prestación para la jubilación lo suficientemente generosa. Con todo, el trabajo en la tercera edad no debería estar tanto orientado a la supervivencia como a la necesidad humana de sentirse útil en la sociedad.
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Gracias a la medicina, los estilos de vida más saludables y la cada vez mayor esperanza de vida, la jubilación ya no puede estar asociada al ocaso de la existencia”
Trabajo anímico. El trabajo en la tercera edad, pues, es más un trabajo anímico que uno propiamente dicho: se lleva a cabo fundamentalmente para sentirse realizado, útil, ocupado y, también, activo y más joven.
trabajadores de la tercera edad porque son más estables, responsables y disponen de una mayor experiencia.
En España hay 7.782.904 mayores de 65 años, el 16,7% de la población. Y el 60% de los pensionistas quiere poder seguir trabajando después de cumplir los 65 años, según la Encuesta sobre Personas Mayores 2010 realizada por el Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso). El 60% de estas personas, cerca de cuatro millones y medio, percibe su salud como buena o muy buena. Y el 75% de los españoles reconoce el desperdicio que supone para nuestra sociedad el no aprovechar el caudal de conocimientos y experiencias profesionales de quienes se jubilan.
Las acciones emprendidas para facilitar que durante la tercera edad se continúe trabajando están ya adoptando diversas formas, desde medidas paliativas (sistemas de incentivos para estimular el empleo, empresas sociales, ONG´s y cooperativas) hasta medidas de apoyo (grupos de autoayuda, asociaciones para el envejecimiento activo, capacitación psicológica, etc.). Cualquier avance en ese sentido repercutirá en un envejecimiento más saludable, pues son las personas que se sienten más útiles e imprescindibles las que son más felices. Y también más sanas: la categoría profesional de una persona puede predecir mejor sus posibilidades de un ataque cardíaco que la obesidad, el tabaquismo o la hipertensión.
Los ancianos que quieren continuar activos, pues, pueden encontrar cada vez más una amplia oferta laboral ajustada a sus necesidades. Un ejemplo práctico lo encontramos en México, en el Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores (Inapam), que propicia que los ancianos puedan llevar a cabo trabajos de este tipo. Pero ello no significa que estos trabajos sean improductivos: de hecho, muchas empresas empiezan a contar con
"El abandono de ancianos es como la eutanasia" (Papa Francisco)
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01 OCTUBRE DIA INTERNACIONAL DE LAS
PERSONAS DE EDAD
El 14 de diciembre de 1990 la Asamblea General de las Naciones Unidas design贸 el 1 de octubre como el D铆a de Internacional de las Personas de Edad. Esta iniciativa se apunta a la necesidad de responder a las oportunidades y los desaf铆os del envejecimiento de la poblaci贸n en el siglo XXI y para promover el desarrollo de una sociedad para todas las edades.
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PERSONAJES:
ARTHUR RUBINSTEIN (1886-1982) Pianista polaco, nacido en Lódz y fallecido en Ginebra. Hijo de un matrimonio de industriales y el último de siete hermanos, mostró de niño un precoz talento musical. A los ocho años ingresó en el Conservatorio de Varsovia, donde estudió con el profesor Roziycki. El famosísimo violinista Joseph Joachim, que se había casado con una de sus hermanas, le presentó a Brahms y éste, cautivado por el talento del muchacho, le hizo ir a Berlín a continuar sus estudios con Heinrich Barth, y más tarde con R. Breithaupt, M. Bruch, R. Hahn y Paderewski.
insuperable y la más cálida de las lecturas pianísticas. En el repertorio de Rubinstein no faltaban tampoco los compositores modernos como Ravel, Stravinski, Villa-Lobos y Poulenc. En 1916 el propio rey Alfonso XIII le había proporcionado un pasaporte español para que pudiera viajar libremente en sus recitales en plena I Guerra Mundial, y en 1946, terminada la segunda gran contienda, tomó la nacionalidad estadounidense. Rubinstein interpretaba como nadie a Chopin a los 90 años, una edad que pudiera ser considerada por muchos como para no hacer nada.
Fue en Berlín también donde inició su carrera de gran virtuoso del piano acompañando a su cuñado Joachim en el Concierto en “La” de Mozart. En España, donde apareció por vez primera en 1916, demostró su gran conocimiento de la música de Albéniz y Falla.
Tras su muerte en 1982, a los 95 años, sus restos descansan en el cementerio del "moshav" "Aminadav" situado en los montes jerosolimitanos. En el lugar, donde hay un bosquecillo, se elevó un monumento en su memoria en forma de teclado de piano que deviene en oleaje.
El temperamento romántico de Rubinstein le permitió interpretar de forma magistral a Brahms, Schumann y Beethoven, pero fue en Chopin donde alcanzó una rica y detallada expresión, un rigor La Tercera Edad
Fuente: www.biografiasyvidas.com/biografia/r/rubinstein.htm
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¡Y PUNTO! Jannin Castellano - jcastellanov@gmail.com Llegar a este estadio en la vida ya es un gran mérito, es por eso que se vuelve importante compartir.
Abogado de profesión, egresada de la Universidad “Santa María” en 1990. Life Coach, certificada por ILC Academy. Formación profesional en Gerencia de RRHH y Educación en valores.
La tercera edad no es más que un nombre que le hemos dado a una etapa en la evolución de la vida, cada uno de nosotros a medida que se hace mayorcito va alargando sus puntos de comparación y evaluación de lo que es en palabras más feroces volverse viejo. Yo analizando estas etapas y tratando de ser objetiva para no caer en desmanes emocionales que afecten mi entender, he separado por puntos la llamada tercera edad. Empecemos por el principio que sería en la edad 3ª el punto 1. 3.1 es una etapa casi imperceptible donde muchos incluso caen en la común fase emocional de negación, “me estoy haciendo mayor”, algunos se deprimen por la canas, las arrugas, los calores, la falta de apetito, la fatiga muscular y cierta tendencia al cansancio físico, otros se ocupan de redoblar el entrenamiento y mejorar los hábitos que en la 2da edad habían descuidado por el disfrute de todas las posibilidades que esa etapa de juventud madura nos permite, así este grupo de la 3.1, gana buen terreno y disfruta intensamente de este estadio, consolida relaciones, vive nuevas pasiones sin presión, disfruta de la edad casi adulta de los hijos, se involucra con éxito en proyectos de apr endizaje y descubr im ient o personal que lo hacen mucho más efectivo y le permiten disfrutar de una etapa maravillosa. Mi invitación en esta etapa es a salir de la negación si
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allí te encuentras, para disfrutar la delicia de ser un adulto mayor que vive desde lo aprendido y sueña con inmensas posibilidades de ser quien quiere ser. Si eres de los más abusados en esta etapa, te invito a fijar límites, la realidad como la vida son sólo una y cada vivencia cuenta para ser feliz. Buen punto. 3.2 puede ser una etapa de verdadero disfrute, ya has aceptado que eres el sabio asesor familiar y logras una visión 360 de cuanto has hecho a tu paso, es fácil caer en depresiones en esta etapa, si en la anterior no has fijado los límites necesarios y ajustado las velas del navío para llegar a puerto seguro, muchos caen en cuenta de que no han hecho las cosas del todo bien y por ello sus resultados no son los esperados; es necesario darse cuenta de que aun hay tiempo de revisar las acciones y especialmente las emociones que esto te causa para poder pensar en una solución que te permita estar tranquilo y orientar con aplomo a quienes han confiado en ti. En esta 3.2 es importante mantenerte en los valores sembrados, ser objetivo y al mismo tiempo avanzar con el ritmo necesario para evolucionar con la juventud que te rodea, seguramente tus hijos y entorno ya va siendo adulto y aunque el tiempo no permite que se empareje la cronología, ya puedes compartir criterios y acordar puntos de vista que en acciones brindan los mejores frutos familiares, de trabajo, de pareja o de relaciones en contexto general. Es la etapa en la que los acuerdos se cumplen y cuanto se emprende cuenta con tu visión y tu experiencia
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ya madura y sabia, los errores se minimizan y los que te siguen consolidan una visión adulta que les lleva a ser quienes quieren ser haciéndote sentir el más orgulloso padre, madre, amigo, compañero o guía. En 3.2 el mayor disfrute son los nietos, aun tienes energía para pasear, disfrutar y ser ligero al consentir los caprichos de los nietos, está en ti convertirte en ese abuelo o abuela cómplice disfrutando de esta delicia sin la responsabilidad de la formación de estas nuevas personitas de tu vida, es la etapa de verdadera plenitud, en la que no hay reglas que cumplir, has logrado una posición que hasta te permite ser espontáneo sin ser impertinente, hablas y eres escuchado, disfrutas sin ser criticado, opinas y eres tomado en cuenta, conservas tu integridad y mantienes relaciones placenteras bien por consolidadas o bien por carecer de las formalidades sociales, total tú ya has hecho lo que debías hacer y te sientes libre de hacer lo que quieres hacer. Esta es la etapa donde los sueños y los recuerdos se confunden y te sientes realmente realizado, no es momento de desperdiciar sino efectivamente de vivir al máximo. Es el mejor punto. La etapa 3.3 es una etapa a la que ya no puedo hacer recomendaciones, quienes están en este proceso es factible que no estén en posición de comprender ni aceptar que han llegado aquí, es la etapa más difícil sobre todo cuando hay consciencia y se genera resistencia, más que una fase de negación emocional, en la 3.3 el adulto mayor, sabio y experimentado, se vuelve rebelde, dice la gente que vuelve a ser como niño y cuesta inmenso para quienes le rodean llevar la cotidianidad. En su consistencia física comienza a presentar desgaste, en los mejores casos son dolencias sin trascendencia y en oportunidades aparecen ya los resultados de los hábitos y descuidos de la juventud y de la edad adulta anteriormente desatendidos, el caso es que empezamos a requerir atención y dedicación detallada y debemos estar preparados para no hacer resistencia a nuevas formas de vida menos activas. El punto de mayor atención es como siempre el emocional, el volvernos rebeldes en esta etapa responde simplemente a que estamos conscientes de que nos queda menos tiempo y demandamos mayor atención, mayor compañía, mayor dedicación; ocurre generalmente y de manera natural, que nuestro entorno familiar tiene otra agenda y le resulta cuesta arriba emparejar actividades, si a esto le sumas que en esta etapa el adulto que hemos llegado a ser no La Tercera Edad
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Es fácil caer en depresiones en esta etapa, si en la anterior no has fijado los límites necesarios y ajustado las velas del navío para llegar a puerto seguro” logra comprender su realidad, se hace bastante más difícil la situación, en la mayoría de las familias se tensan las relaciones y se afectan ciertos vínculos. La verdadera estabilidad se logra mantener cuando los más jóvenes aceptan el reto de aferrarse al amor y siendo incondicional con quienes nos han dado desde la vida hasta las muchas vivencias, nos dedicamos con paciencia, atención y tiempo para acompañar y atender hasta donde es posible los requerimientos de estos sabios que ya sólo esperan un llamado a la trascendencia. Ahora bien, para los que en esta etapa aun pueden leer estas líneas sin dificultad y para quienes están por pasar de 3.2 a 3.3, es posible que este sea un momento de despertar de consciencia, que les permita como he podido observar en muchos, asumir una actitud dócil de disfrute de la vejez desde el espectador de lo vivido, de lo logrado y construido, una actitud de agradecimiento con lo que tienes hoy, con los avances de tus pasos; hay adultos 3.3 que conscientes de que cada momento vivido fue necesario y determinante para llegar a este día y para disfrutar de los que queden por vivir, agradecen la vida y sueñan con el descanso prometido desde la plenitud de haber hecho lo mejor que pudieron hacer. Vivir la etapa 3.3 es un verdadero reto y tú decides como enfrentarlo si desde temprano siembras afectos y vives desde las mejores intenciones de tu corazón, quienes te rodean sentirán el goce y la delicia de disfrutar de tu compañía y tu sabiduría hasta el día que la vida tenga destinado compartir tus méritos. El ser humano vive la vida aprendiendo a vivir, el hecho es que la 3ª edad no espera, llega y punto.
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SURCANDO EN LOS MARES DE LA SABIDURÍA Francisco Ramírez - psic.francisco87@gmail.com
Psicólogo Clínico egresado de la Universidad Arturo Michelena (UAM). Diplomado en Psicología Industrial y Organizacional. Diplomado en Constelaciones Familiares. Director-Fundador de la revista “Bienestar Mental”. Miembro de la Asociación de
En esta oportunidad deseo expresar en las siguientes líneas, la historia de una mujer, que actualmente posee 79 años de felicidad y vida, ella se llama María Yolanda Mejías Delgado. Comenta, que desde muy pequeña siempre ha sentido una fuerte conexión con del servicio al prójimo, y es porque su madre Yselina Delgado, le inculcó en su educación familiar el valor del amor y del buen trato hacia los demás, y es porque eso es lo único que realmente se acumula en el tiempo y se convierte en el mayor y más preciado de los tesoros que se pueda tener. María Yolanda, nació el 19 de octubre de 1.935, en Calderas de Barinas, ciudad ubicada en el Piedemonte Andino, entre Trujillo y Barinas. Ésta dama nació adornada por las flores y el aroma del café, sus oídos se deleitaban por las retretas de la plaza que entonaban con maestría los valses de la época, siendo uno de estos Conticinio, pieza musical compuesta por el Maestro Laudelino Mejías, quien con orgullo y emoción siempre juvenil, la entrevistada dice “Él es primo de mi papá, yo lo llegué a ver en una oportunidad, yo estaba muy pequeña, pero lo recuerdo muy bonito con su traje de levita y muy bien peinado” Para hacer más amena la entrevista, me dispuse a realizarle una serie de
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preguntas, las mismas fueron respondidas con mucha espontaneidad y apertura, éstas fueron las siguientes: Entrevistador: ¿Qué momento de su vida recuerda con mayor alegría? María Yolanda: Son muchos… Pero si te pudiera decir cuál es, con toda seguridad te digo que todos los días, si es cierto que hay momentos duros en la vida, pero el solo hecho de despertarte, respirar y mirar la creación de Dios, eso ya llena de mucha alegría. E: ¿Tienes hermanos o hermanas? M.Y: Si, somos diez (10) hermanos, siete (7) hembras y tres (3) varones, ya algunos han muerto, eso me ha dolido mucho, porque éramos muy unidos desde pequeños, solo sufrimos una pequeña separación cuando nos tocó estudiar fuera del pueblo, porque la educación era muy limitada. Ahora solo quedamos tres (3) E: ¿A qué edad salió de Calderas para continuar sus estudios? M.Y: Estaba pequeña, yo tenía diez (10) años, para mí fue fuerte porque me iba a un sitio lejano y que no conocía, me fui a Caracas a estudiar, un par de hermanos se habían ido primero a estudiar al Seminario Diocesano de Caracas y me ubicaron junto con otra hermana llamada
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Juana residencia con unas familias que ellos conocieron, mi hermana se fue con un grupo familiar y yo me fui con otro, nos trataron muy bien, nos enseñaron modales y etiqueta,
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La vida no es un momentico como muchas personas pretenden hacerla ver, para mí ha sido un cúmulo de muchos momentos irrepetibles” casos y les doy solución. E: Para nuestros lectores de Mérito Compartido, puede usted darles algún consejo de vida.
además nos dieron estudios en Colegios internados, mi hermana Juana estudió en el Colegio Guadalupe y en mi caso cursé estudios en el Colegio San José de Tarbes. E: ¿De su vida laboral qué me puede relatar? M.Y: Mi primer trabajo lo hice como Maestra Normalista, al pasar el tiempo decidí estudiar para ser trabajadora Social, me fue excelente, en el camino conocí a una abogada que me impactó con su manera de hablar, ella me aconsejó en cuestiones laborales y me animó a estudiar derecho, me inscribí en la Universidad Central de Venezuela, allí conocí a mi futuro esposo y antes de graduarme de abogado ya tenía a mi hija. Al pasar el tiempo me mudé a Carabobo por cuestiones de salud y allí mi carrera fue muy prolífera, con muchos logros entre ellos el tener hoy en día más de cuarenta (40) años de ejercicio profesional, porque la edad para mí no es un límite, aun atiendo
M.Y: Claro, no faltaba más. La vida no es un momentico como muchas personas pretenden hacerla ver, para mí ha sido un cúmulo de muchos momentos irrepetibles, en donde cada uno me ha dado grandes aprendizajes. Y eso es la vida, aprender de cada cosa que vivimos, reflexionar y buscar hacer mejor las cosas cada día y como me enseño mi madre, servir al prójimo con amor porque ese es el mejor tesoro que se puede acumular. Esta entrevista me ha dejado un gran aprendizaje, la vida debe llevarse con amor y respeto, no solo para uno como persona sino para el otro, ya que todos formamos parte de un mismo sistema, esto puede garantizar una vida en paz enmarcada en múltiples recuerdos gratos, ajenos a las asperezas del rencor.
"Un pueblo que no protege a sus abuelos y no les trata bien es un pueblo que no tiene futuro" (Papa Francisco)
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¿A QUÉ EDAD SE INGRESA A LA TERCERA EDAD? Zuleima Martínez - zuleima.martinez@gmail.com
Químico, egresada del Tecnológico-Politécnico IUTEVAL, Administrador Comercial, egresada de la Universidad de Carabobo, Maestría en Finanzas egresada de la Universidad Santa María, con Especializaciones en Seguridad Industrial, Higiene y Salud Ocupacional, Gestión Ambiental, egresada de la Escuela de Negocios Lincon Group- USA. Responsabilidad
Por vanidad, por conveniencia, por costumbre, o por lo que sea, las personas generalmente ocultan su edad, al punto que preguntar por ésta ha llegado a considerarse como una falta de educación e incluso como una ofensa, sobre todo cuando se trata de mujeres. Claro está que eso no se predica de todas, pues generalmente las muy jovencitas y las bien mayorcitas no tienen inconveniente en confesarla. Las primeras, porque no tienen motivos para ocultarla, y las segundas, porque ya no tiene sentido esconder algo que de por sí se hizo ya muy evidente. Así las cosas, la preocupación por la edad se contrae a aquella franja que oscila entre uno y otro extremo. Sin embargo, se dan situaciones en que decir la edad, e incluso aumentarla, genera dividendos. Basta observar cómo mujeres de edades cercanas a los 55 años y hombres de 60 o un poquito más, no tienen reparos en ubicarse en la cola de los “viejitos” cuando se acercan a las ventanillas de los bancos, o cuando reclaman una silla indicativo azul en dichas entidades financieras. Pero donde la exigencia a recibir un trato preferencial en consideración a la edad se vuelve regla general, es en la reclamación de la pensión de
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vejez. Resulta que por la incapacidad del IVSS de resolver oportunamente las solicitudes de pensión que presentan los afiliados, éstos generalmente se ven obligados a acudir a la acción de tutela para forzar su inmediato reconocimiento. Y es allí y en ese momento en donde la señora que recién llegó al “quinto piso” y el “sesentón” que ya ha empezado a tinturarse las canas y el bigote, pasan de repente a ser unos pobre viejitos “tuntunientos” dignos de un amparo excepcional y urgente. Basta leer las dem andas de tut ela par a percatarse de que uno de los argumentos centrales que en ellas se exhibe es el de tener una edad avanzada y unas condiciones de salud deplorables. Desde luego que no se trata de trivializar y mucho menos descalificar aquí el derecho que les asiste a las personas de exigir que sus solicitudes de pensión se les resuelvan de manera rápida, sobre todo cuando la falta de ese ingreso económico atenta contra su mínimo vital. Lo que yo me propuse destacar en este artículo, -y creo que eso no necesita aclaración porque sé que todos así lo han entendido- es la manera como las personas manejamos el tema de la edad. www.meritocompartido.com.ve
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Ahora bien, el asunto se vuelve serio cuando nos vemos avocados a tener que desprendernos de esas veleidades y ubicarnos en el lugar que realmente nos corresponde. Sabemos que ya no somos jóvenes, pero sentimos que todavía no nos merecemos que nos llamen “ancianos”. Y entonces viene la pregunta que siempre creímos que tardaríamos mucho en planteárnosla, pero que de pronto se nos vino encima: Somos viejos? somos de la tercera edad? somos adultos mayores?, somos ancianos? Qué carajo somos!!! ¿Quién nos puede responder esa pregunta? Los amigos nos dirán que todavía “aguantamos”, los jóvenes nos responderán que “ya estamos pistoneando en las curvas” y los mayores nos subirán el ánimo diciéndonos que aun estamos muchachos. Conclusión: seguimos en las mismas!!!
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Por vanidad, por conveniencia, por costumbre, o por lo que sea, las personas generalmente ocultan su edad” menos resistencia les ofrecía era la de “personas de la tercera edad”. En horabuena! Esa es la edad de la tercera edad!. Finalmente termino mi artículo con esta frase de Dane Peddigrew. “La madurez de los sesenta estaría mejor invertida si llegara a los veinte años.”
En una encuesta que leí hace poco, los entrevistados-todos mayores de 60 añoscoincidieron en que la denominación que
"Qué bello es el aliento que el anciano logra transmitir al joven en busca del sentido de la fe y de la vida" (Papa Francisco—Catequesis audiencia general, Ciudad del Vaticano, 11/03/2015)
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CINETERAPIA — Por: @Ardp2012
EL EXÓTICO HOTEL MARIGOLD Llegar a la jubilación, quizás sea uno de los tragos más agridulces que ha tocado o nos tocaría vivir a muchos quienes hemos pasado parte importante de nuestra vida, trabajando por nuestro presente y futuro. De igual forma, a veces se puede sentir como jubilado sin haber laborado nunca de manera formal en ninguna oficina, planta o negocio…pero la sensación de entrar en la última recta de la época; que muchos definen como productiva, nos toca a todos los que tenemos o tendremos la fortuna de llegar a lo que todos llaman la tercera edad. En esta película, se encuentran varios personajes que comparten precisamente este trayecto del viaje, cada uno con sus propias historias, paradigmas, visión de vida pero sobre todo sus propias fórmulas para enfrentar el otoño de la vida. Ocho ingleses que llegan a la India, buscando quizás su herencia de toda la vida, o el premio por haber casi completado el ciclo vital.
Momentos reflexivos , sobre lo que ha sido el recorrido de cada personaje, descubrimientos, liberaciones, van sucediendo dentro y fuera del exótico Hotel, quien es como un anciano más que comparte venturas y desventuras con los 7 ingleses. Al final, cada personaje descubre y obtiene lo que necesita, para estar tranquilo consigo mismo y darse por satisfecho del camino recorrido. Y todos podrían entender que” Al final todo estará bien…y si no, es porque aun no es el final…. ”
Evelyn (Judi Dench) enfrenta a la viudez reciente, con cierto optimismo, quizás negándose a su propia soledad y al pasado o realidad de su difunto esposo, Muriel (Maggie Smith) una ortodoxa mujer que siempre estuvo al servicio de otros, con disciplina y abnegación., Graham (Tom Wilkinson) es un juez decepcionado y con una culpa a cuesta que intenta resolver allí mismo donde se originó, Douglas (Bill Nighy) ex funcionario del gobierno, algo sentido por la decepción a la que lo expuso su hija y con insatisfacciones de no poder complacer a su esposa Jean (Penelope Wilton), cuyas expectativas y concepto vida, nunca son satisfechas, por lo que prefiere encerrarse en sus propias fronteras. Norman (Ronald Pickup), un tipo que siente la necesidad de gritarle a las féminas que aun es capaz de dar amor y placer, negando ante si y a los demás. Madge (Celia Imrie).una enérgica abuela que esta decida a conquistar un marido más, y disfrutar de cada momento por si fuera el último.
Encantadora película del inglés John Madden (Shakespeare in Love), nos mantiene entretenidos e interesados durante más de dos horas, y en lo particular, hace más amable la espera a la tercera edad (por lo menos al final de la peli) Muy buenas actuaciones y música, enmarcada en una historia optimista y romántica. FICHA TÉCNICA:
El entusiasta anfitrión Sonny (Dev Patel, el actor de Quien quiere ser Millonario), quien contagia el optimismo y manipula con un encanto natural a los residentes del Hotel, tiene su propia historia, (herencia, novia, celos, madre) aún lejos de las historias de ocaso de cada uno de sus inquilinos, logra una química e intensión con cada uno.
Título original: The Best Exotic Marigold Hotel. Año: 2012. País: Reino Unido. Duración: 124 min. Género: Comedia. Director: John Madden. Reparto: Judi Dench. Tom Wilkinson. Maggie Smith. Bill Nighy. Penelope Wilton. Celia Imrie. Dev Patel. Ronald Pickup.
Entre la decepción inicial de no encontrarse con el lugar soñado visto por internet, los encuentros y desencuentros que los inquilinos están experimentando entre ellos y consigo mismos, la película va transcurriendo con un fresco aroma exótico y picaresco aderezado con una música mística, en la narración de las vivencias de Evelyn. La Tercera Edad
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LIBROS — Por: @Ardp2012
EL VIEJO Y EL MAR Autor: Ernest Hemingway Una de las obras más célebres de la literatura en inglés, del gran y controversial novelista norteamericano, uno de los mayores orgullos de Estados Unidos. Es la historia de Santiago, un viejo pescador a quien el paso de los años pareciera también ir mermando su fortuna y capacidad para la captura de peces. Su joven pero leal amigo (Manolito), también se aparta, buscando mejores oportunidades con otros pescadores de la localidad, para mantener su sustento. Esto hace que Santiago, un día “Se eche a la mar” con el firme objetivo de cambiar su racha y volver a sentirse tan productivo y capaz como en sus años de más joven. La determinación y madurez que solo se obtiene con los años, es la principal arma que lleva Santiago para alcanzar su objetivo y luchar contra quienes lo agreden moralmente (hombre y naturaleza). Historia con minuciosas descripciones y detalles de la pesca artesanal, y con recorrido al mundo interior del personaje principal que nos permite invadir sus pensamientos.
Todo un clásico de la literatura mundial, estamos aún a tiempo de encontrarnos con esta inspiradora historia que nos habla de no rendirnos hasta ver nuestros sueños realizados.
Los complejos y demonios de Santiago, pueden ser los de cualquier persona en la tercera edad, pero éste los enfrenta con la fuerza y convicción de que posee la fuerza física y espiritual para alcanzar lo que se propone, con el esfuerzo necesario como de cualquier pescador que sabe que los peces nunca caerán con la lluvia.
"Los abuelos son la sabiduría de la familia, son la sabiduría de un pueblo. Y un pueblo que no escucha a los abuelos es un pueblo que muere" (Papa Francisco—Encuentro Mundial de las Familias, Roma, 27/10/2013)
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