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Cora Yako 90’s
LO PRIMERO QUE PUEDE llamar la atención de “Cora Yako” es el sonido tan indisimuladamente noventero que presenta, sobre todo teniendo en cuenta la juventud latente en el combo. Algo que Carlos Sennacheribbo –guitarrista y teclista del grupo afincado en Madrid– aclara y a la vez puntualiza. “Desde luego es una época en la que hay muchísimos grupos, pero no es la única en la que nos fijamos; también en los ochenta, principios de los dosmiles e incluso en cosas actuales. Los grupos de los noventa tienen un sonido más oscuro y más alternativo que los de otras, y quizá eso nos hizo acercarnos más. También creo que tiene que ver con una forma de hacer las cosas, más casera”. Las letras de Cora Yako, trazadas en castellano, son otro de los elementos llamativos del álbum, con el grupo inspirándose en vivencias personales. “Las letras vienen de nuestro día a día. En este caso, de tener veintialgo años y no tener nada claro qué te deparará el futuro. Desde situaciones cotidianas que nos pasan en nuestro día a día a otras más existenciales acerca de nuestra forma de ver el mundo, nuestro mundo. Son un reflejo de cómo somos nosotros y de nuestra actitud”. La producción del disco solo cabe entenderse como un acierto, tras resultar tirando a austera y siempre respetuosa con lo que parece ser la esencia de las canciones. “Buscábamos algo que no sonara ‘súper-producido’ y que fuese algo des- gastado en comparación con la mayoría de producciones de ahora. Sobre todo, el objetivo era distanciarnos de sonidos que ya habíamos explorado y darle un toque más oscuro y sucio sin perder la esencia pop”. La conclusión es que “Cora Yako” incluye mayoría de singles potenciales, sugiriendo que la urgencia del trabajo podría haber sido objetivo prioritario de Luis, Daniel, Pablo y el propio Carlos. “El primer y casi único objetivo es hacer un disco que nos podríamos poner en casa de principio a fin, sin puntos débiles o canciones de relleno. En cuanto a la urgencia, al menos por ahora es una constante en nuestra forma de trabajar. Nunca paramos de componer y a veces es cansado, pero disfrutamos del resultado y de la reacción del público”.
ESTE ES EL SEGUNDO DISCO del combo tras “Una de los nuestros” (Altafonte, 20), existiendo sensibles diferencias entre aquel estreno y la presente continuación. “Guardamos buen recuerdo de ese primer disco, pero ahora mismo nos da bastante reparo escucharlo. Creo que como a la mayoría de artistas cuando escuchan sus anteriores trabajos. Supongo que cambiaríamos el tipo de sonido a algo más crudo. En este estamos más seguros de cómo queremos sonar, y eso se junta con que hemos evolucionado y mejorado mucho en todos los aspectos: composición, producción, grabación, etcétera. Gracias a esas dos cosas hemos hecho un trabajo más propio y del que estamos más orgullosos”. Cora Yako encajan en esa sección de la actual escena