LA CIUDAD QUE NO VUELVE

Page 1

Caracas

La Ciudad queno ~~~~.vuelve


ACERCA

DE

"LA CIUDAD QUE NO VUELVE" Nuevamente y con la tenacidad que lo caracteriza Guillermo Jose Schael nos sorprende con el magnrtlco conte­

nido antol6glco de "la Ciudad que no Vuelve". De sus paqinas tan vividas como las postales que la complementan, sirviendole a la vez de centro, se desprende no s61o la estampa de la Caracas de princlpios del siglo XX. sino ademas, el entrafiable cariiio por su ciudad natal que el autor, en esta como en otras ocaslones pone de relieve con tajante pluma de singular espontaneidad y sencillez. Mauro Paez Pumar Caracas,

diciembre 1968

de

Portada Calle que baja de Las Monjas a San Fran· clsco, de una foto de don Carlos Manuel Moller. iluminada por el artista Luis Alvarez de Lugo. La imagen responde al as· pecto que ofrecia el boulevard Este del Capitollo hacia 1877. El Palacio Federal qued6 totalmente concluido en febrero de ese mismo aiio. siendo presidente Antonio Guzman Blanco. Al fondo la Ceiba, plan· tada en 1868 por la hija de un oflclal de la policla municipal. De lzq. a derecha muro del Seminario de Santa Rosa hoy sede del Concejo Municipal: inmueble donde estuvieron oficinas y talleres de "la Opini6n Nacional" colindando con el edificio de dos pisos del "Hotel Sain Amand" hoy Banco Veneeolano de Credito: a continuaci6n sluo donde estuvo el escritorio del Dr. Jose Loreto Arismendi. y finalmente EsQ. San Francisco donde hallabase a principios de siglo el fotograbado G6mez.




Caracas

La Ciudad que no vuelve

Tercera Edici6n Ampliada

Guillermo

Jose Schael



ABRIL DE 1909 Este llbro es un hijo legftimo del amor, del amor de Schael por la ciudad que se va yendo ante sus ojos desconcertados. El recodo de la calle estrecha donde no se ve mas habitante que un perro echado soiioliento; la casucha de ventana de madera donde asoma su sonrisa un encendido clave! desde un tiesto humilde; los afiosos arboles que dieron a los viejos caraqueiios la fresca sombra de su cerrada vestidura; todo lo que recuerde la ciudad amenazada de morir, es para Schael motivo de meditaciones y de incitamiento para rememorar lo que fue la urbe caraqueiia solitaria y calmada, cuando por sus calles, como nos dijo Baroni en la Redacci6n de El Universal, se ofa el paso de ros transe(mtes. Debemos consignar aqui, que este Ii bro tiene para El Universal una seiialada significaci6n. En sus qraficas muestra la Caracas de principios de siglo, 1909, tiempo en que naci6 nuestro Diario. Era la madruqada del primero de abril, cuando todavf a los ciudadanos de Islas Canarias o sus descendientes, montaban en sus jacos para repartir la leche a domicilio. Tai vez uno. de ellos a la hora temprana de la salida del Diario fue el primero que lo compr6. Dos centavos y cuatro paqinas. Esa era la Caracas de los 90 mil habitantes, casi aldeana, al pie de su montaiia. Todavfa tenfa la brisa fresca y pura. Y esto es lo que vive aiiorando Schael, con mayor apremio hoy, agobiado por el ritmo violento de la ciudad de los dos millones de habitantes. Viendo estas qraficas de la urbe semi dormida, Schael encontrara en ellas un motivo de reposo ffsico y mental. Y esto es tambien lo que el ha querido brindar al lector en estas paqlnas, un refugio espiritual para la serenidad filosoflca y el descanso. Que asi sea. Luis Te6filo Nunez. Caracas, Diciembre de 1968. -5-


LOUBDES Y EL BOBIZORTE DEL ESTE

La Capilla de Lourdes, en El Calvarlo y vista de Caracas (1920).

La capillica de El Calvario conscruida bajo la advocaci6n de la Virgen de Lourdes fue edificada en menos de tres meses, segun se desprende de la fecha del Decreto que ordena su ejecu­ ci6n ­25 de enero de 1885­ y el de la Jerarquia Eclesiasrica por el cual se autoriza a celebrar misa en ella, 22 de abril de 1885.

-La eluded se despertaba: tras de ml iban saliendo los artesanos soiio­ llentos restregandose los ojos y bostezando; porque este frio de Caracas a las 6 y media de la manana, mas provoca dormir que trabajar. Uegue al Rinc6n, deje la carretera y eche cuesta arriba, camino viejo de El Valle, mlen­ tras Tierra de Jugo, con sus marmoles y su eterna trlsteza, rodeado de desler­ tas y ahumadas tejerlas se perdia a ml derecha. Oue de panoramas y recuer­ dos. La capital tendida a los pies del Avila, apoy8ndose en aquellas collnas que tornaban a vestirse de esmeralda con las prlmeras lluvias". De "Peonia", Nga. 8 Y 9 M. V. Romero­Garcia.

-6-


Postal Siempre nos babiarnos sentido tentados a recoger el dispe1·so material grtl/ico de Caracas representado por las postales de la mas pintoresca y variada procedencia, editadas a principios de siglo, casi todas ltamativas por m inspiraci6n tipica y elegres colores. F11e el bistoriador Carlos Manuel Moller q11ien cierta oez en Q11inta Anattco nos alent6 a compilar estas imagenes. Sostent« no sin razon que mas que las palabras, podrian estas seroir a las nue­ uas generaciones para explicsr lo que era nuesir« ciudad en una epo­ ca anterior al petroleo.

Lamentablemente pocos uestigios han podido ser preseroados,

excepto los que representan por ejemplo uno qfte oiro inm11eble como la de Q11inta Anaaco con m zigzagueante acceso de canto rodado o l~ C11adra Bolivar con ms [nentes, caballerizas y frescos corredores de obra limpi«. Por diferentes ceminos [ueron llegando a nuestra mesa de trabaio en El Universal algunas de las mencionadas postales. A mediados de este ano resoloimos reunirlas y editarlas ftmto con otras tomadas de 1m albttm de recuerdo familiar lo c11al bace posible hoy la apa­ rici6n de este inf orme grafico. Deseamos «prouecbar la ocasion para renooar naestro agrade­ cimiento a tos senores Eduardo Roosu/aag, [ulio Febres Cordero, Elizabeth Coello, Angel Pinedo, Helmnt Neumann, Erasmo Colina, Mercedes Loh de Moller, Federico Mila de la Roca, Amelia Feo, Mattro Paez P11mar Angel Mancera Galleti, al Sr. H. Patella, de Poto Paraiso, asi como a los pintores Marisa Kucice, Lnis Fernando Alvarez de L11go y Pedro Bargall6, por s11 colaboraci6n. En apoyo al interes qne pudiera despertar esta inici.ativa, basta­ ria mencionar el hecho de qne mas de cuatro millones y medio de habitantes son menores de edad, seg1ln cifras contenidas en el mas reciente inf orme sobre estadistica vital del Ministerio ·de Sanidad. Logico serla pues deduci« el f ascinante valor espiritual q11e adquieren estas imagenes, muchas de las cuales adem­is de ser sin dud« motioo de solaz para aquellos qtte oioieron la epoca, vendran a constitnir inapreciable tesumonio rejerencial de lo qtte f 11e en realidad Cara­ cas antes. de haber sido borrada por la incontenible acci6n del pro­ greso en rm lepso menor de oeinticinco anos, hecho qee prtede considerarse ins6lito en ?a historia de las cindades americanas. 1

Guillermo

-7-

Jose

Scbael


Caracas vista desde "le plenlcle". Detra• de las ultimas case: se dlvlun algunas copas de los caobos y mas all6 parte de las f6rtlles campli\as del Este regades por las agues de las quebradas de Checalto, Tocome, y el Caurlmare. Perdldos en el horlzonte, los cerros de Petare y estrlbaclones del Avila cerca de "LA Urbina". (Postal de la cpleccl6n Eduardo Rooswaag, 1920).

Calle de Santa Teresa a Camejo, tramo prlnclp11l de la Avenlda Sur, tal como se hallaba en 1911. Los edltores lnternaclonallzaron la presente tarjeta al colocar al pie con cierto alre presuntuoso, una leyenda que dice "Bank Avenue" • Caracas. Al fondo se divlsa, lnconfundlble la sllueta de la torre de Catedral.

:_

·­


LA CIUDAD OUE NO VUELVE Por espacio de mas de tres siglos Caracas no pasa de ser un caserio rodeado de floresras y cafiamelares. Asi la ve el hisroriador Oviedo y mucho mas tarde Depons y Humboldt. Su privilegiada situacion al pie del Avila, asi como lo agradable de SU clima y la fertilidad de la Cierra debieron influir en el animo de sus rnoradores para no abandonarla pese a la furia desencade­ nada de los rerremotos que cada 60 afios la embargan de espanco o de las pesres que peri6dicamence hacen estragos en la poblaci6n. Asi llega el 19 de Abril de 1810. La cruenca lucha por la inde­ pendencia, que iria a durar 11 largos afios, termina por reducirla a SUS mas minimas proporciones. Al promediar el siglo XIX, se produce en el mundo la Hamada revoluci6n industrial. Los ecos o repercusiones de este gran movimienco no rardan en presencarse con el telegrafo cuya primera linea entre Caracas y La Guaira comienza a funcionar en 1856. Vienen despues el ferrocarril, la luz electrics, el telefono, el auto­ m6vil y el avi6n. El piloro norceamericano Frank Boland evoln­ ciona sobre el Municipal con un biplano el 29 de seciembre de 1912. Pronto iba a brocar el petr6leo. La naturaleza habia puesco bajo rierra sobrados medics econ6micos con los cuales la ciudad recuperarla en solo treinta afios el tiempo perdido durance mas de rres siglos. Nadie podia sospecharlo. A parcir de aquel momenco empieza a operarse el milagro de la cransformaci6n. Por doquier caen tapias y vencanas voladas. El corral de las anriguas moradas se convierce en calles o estacio­ namiencos. Desaparecerr afiosos camarindos y bucares. El hiscoria­ dor Paez Pumar logra salvar dos mijaos. Desde su garita en el Concejo Enrique Bernardo Nunez contempla la acci6n dinamica de los rractores. Es el fin de la Ciudad de Los Techos Rojos. -9-


"A pesar de sus 40 mil aucom6viles y de sus 400 mil habirantes, de gran numero de bares, boites, dancing, resraurantes, ~nes y horeles, Caracas riene de noche cierto aire convenrual, cementa en 1942 el celebrado autor de "Cubagua"­. Las venranas esran cerradas, las calles desiertas. Se oye el coque de Animas. Hay esquinas y porcales con cruces y homacinas. Al norte,

el Avila, se perfila la rorre del Pance6n. Al sur corre el Guaire, despojado de verdor de sauces. Al oesce Caria, sicio de los prime­ ros establecirnienros. Al esce se desarrolla la gran arteria natural del fururo. Gentes de codos los paises se apoderan de ella. La ciudad de los techos rojos se encuencra hoy en la ruta de un gran exodo. Esta humanidad trae consigo una propia arquitectura. Mafia­ na cal vez, algun escritor se cuente entre sus descendienres. Senta­ do cerca de su vencana concern plara la noche serena, las escrellas errances. La brisa esparcira en rorno suyo el secreto de las cosas, de las generaciones desaparecidas y movido por la ternura del cielo, por el amor a la ciudad que ha visto desde nifio, acaso escriba un bello libro". ·

­oOo­­ En efecco el afanoso empefio de mas de medio millon de inmigranres espafioles, porrugueses e italianos, aunado al ingenio creador del venezolano hacen posible la evoluci6n de una aldca poblada de rancherias y casas de corredor, en una urbe cruzada de autopisras y· pasos a nivel. El valle de 17 kil6mecros de largo por 8 de ancho que antes parecla extenso es hoy estrecho para albergar dos millones de habitanres. Desde cualquiera de las coli­ nas circundantes Caracas luce como una ciudad de rascacielos en cuya periferia acampa la improvisada pobreza de los ranchos. Pero esre proceso aun no ha concluido. Cabe aqui recor­ dar que en julio pasado el Colegio de Arquitecros, por voz de su Presidente, Carlos Guirrand Baldo, convoc6 a ingenieros y direc­ tivos de la Oficina de Planeamienco Urbano a fin de cruzar ideas en torno a las previsiones que deberian tomarse para enfrentar el vertiginoso ritmo de crecimiento. Segun tales escimaciones Caracas tendra 4 millones de habicances en 1980. -10-


Avenlda de El Paralso, 1906 • Caracas.

Cercanias del Hipc)ctomo, frente a la Plaza de la RepUblica, un dia de carreras.

-11

-


-

EL PABAISO La urbanizaci6n El Paraiso es una de las primeras con que cuenra Caracas. Comienza a desarrollarse al principiar el siglo. Sus prornorores trazan algunas avenidas y edifican "chalets", como los que existen en las afueras de Paris. Todavfa no ha desapare­ cido del rodo la influencia afrancesada guzmancista. Los techos son pizarra de un rojo vivo. Entre los ingenieros proyectistas se encuencran Alberto Smith y Rafael Seijas Cook. Este ultimo, tra­ baja en los planes del Palacete de las Acacias construido para la familia Boulton. Otras importances residencias son las de Barto­ lome Lopez de Ceballos y don Carlos Zuloaga. Tarnbien se cuen­ tan encre los vecinos pioneros: don Aureliano Fernandez y Rai­ mundo Fonseca, el Dr. Jose Loreto Arismendi y Pedro Salas. La casa de don Carlos Zuloaga,' construida contra temblores con una armaz6n o estructura de hierro, fue parcialmence fundida por un rayo durance una rempesrad desacada sobre Caracas en octubre de 1908. En dicho suceso no bubo victirnas pero se per­ dieron valiosas obras ardscicas. Entre la segunda y tercera decada fue poblandose la nue­ va urbanizaci6n. Algunas de las familias pudiences, que vivfan en Altagracia, optaron por mudarse al Paraiso. Ya existia en sus predios el Hip6dromo y una gallera mandada a construir por Gomez, asi como un campo atletico propiedad de la colonia alemana y un primicivo estadio de beisbol ­Los Samanes­, adernas de una laguna y hermosos parques. Entre escos el de la Republics, doode se erigi6 el monumenco ecuestre a Paez y las Plazas Madariaga y Peci6n. El edificio que hoy ocupa el Colegio de San Jose de Tarbes fue levancado por el Gobierno Nacional a fin de que sirviera de sede a la primera grm exposici6n indus­ trial de Venezuela en 1895, siendo su constructor el arquirecto Juan Hurtado Manrique. ­12­


Avenlda C.rabobo en 1921. Al fondo, monumento conocido como La India, trasla· dado hoy a la entrada de La Vega.

Fachada del antiguo "Cuartel

la Planta" situado al oeste de Puente de Hierro Y frente a Villa Zoila.

­13­


Edlflclo del Coleglo de San Jos6 de Tarbes, construldo en 1895 para sede de una ferla Industrial.

Otro signo de ornate iba a ser la modernizaci6n de la Avenida Carabobo, en cuyo extremo oeste, foe erigido el monu­ menco conmemorativo de la batalla de este mismo nombre y cuyo boceto y ejecuci6n es del escultor Eloy Palacios. En la ciudad de aquel tiempo se convirti6 en uno de los mas celebrados motivos de atracci6n. Miles de postales tomadas desde diversos angulos fueron distribuidas a los ruristas teniendo por figura central la esbelta humanidad de la India. Pronto los caraquefios hicieron de la naciente urbanizaci6n uno de los paseos predilectos. Acudian de tarde en coches, a caballo o en tranvias. Desaparecieron las haciendas y antiguos tra­ piches y la tierra foe rapidamenre parcelada. En poco tiempo El Paraiso cambi6 de fisonornia y se integr6 a Caracas. En los predios de la urbanizaci6n ya no existen chalets, ni rornanticas cascadas. Altos edificios y centres comerciales, una Universidad y un cerro poblado de ranchos, han transformado la tierna fisonomia de otrora. Apenas queda erguido no lejos de la Plaza de la Republics el vetusro edificio de San Jose de Tarbes, en cuya fachada puede leerse todavia aquella significativa inscrip­ ci6n: ­iQuien C6mo Dios? ­14­


"El Angel" de El Paraiso en el angulo noreste de la Plaza Madariaga.

Postal evocadora de la avenida Carabobo y entrada del viejo Hipodromo.

­

15 ­


LAS CABBEBAS DE CABALLOS La primera temporada oficial de carreras de caballos cele­ brada en Caracas data de 1896. Fue durance la presidencia del General Joaquin Crespo. El Hip6dromo habia sido consrruido en terrenos de la actual urbanizaci6n Las Delicias, y sus activida­ des estaban regidas por el "Jockey Club" uno de cuyos direcrivos era por cierro el gran pinter Arturo Michelena. Algunos de sus mas conocidos cuadros evocan aspectos del circo de carreras de Saba­ na Grande, y pueden verse en el Museo Michelena, esquina Urapal de La Pastora. Los otros integranres de aquel direcrorio fueron Gus­ tavo Sanabria, Francisco]. Sucre, Federico Alcala, Octavio Escobar Vargas, John Boulton, Felipe Toledo, Lucas Ramella y Emilio Perez Vera, como principales: Marcin Tovar, Julio Perez Garcia, Luis Ustariz, Charles Rohl, Miguel Ellul, Joaquin Nunez y Eduardo Payer, suplences. Secretario M. de Valery. A mediados del aiio 1906 el Jockey Club inici6 negocia­ ciones por un terreno en El Paraiso, las cuales culminaron con la adquisici6n de diez hectareas a los Herrnanos Garcia Prim por la suma de veincidos mil bolivares. Las rribunas de Sabana Grande fueron desarmadas y cransporcadas a esre nuevo sitio, hecho muy celebrado por la afici6n pues renia la vencajosa particularidad de hallarse mas cerca de la capital. La primera reunion hipica se efec­ nio la tarde del 9 de febrero de 1908. Al evocar este aconrecimien­ to dice el Sr. Manuel Jimenez en sus memorias recienternente pu­ blicadas: ­"Asisti a su inauguraci6n. Un tupido matorral, cujies y abundances arboles cubrian casi la totalidad del campo, excep­ tuando la parte .que daba frenre a la tribuna que era utilizada por los pocos que asistian en coche y algunos quitrines, siendo uno de ellos, el quitrin de Don Gustavo Sanabria, que era uno de los prime­ ros que se observaba en el campo. Paree del publico se congregaba alli, como tambien los que concurrian a caballo, los cuales solian ­16­


Aspecto de la plsta de carreras y trlbuna• de El Parafso en 1910.

El c:aballo Robby gana holgadamenre el "Claslco Gobernaci6n del D.F." en 1946 sobre dlatanc:ia de 1.800 metros empleando 115 2/5: 2' Hat Trick; 3' Laponero y 4' Cas· cabel. Se lnicia en esta epoca la Hamada "edad de oro" del hlpismo con auge de la cria del pura­sangre crlollo. Entre otros lmpulsores del deporte se hallan­Her· man Stelling, Jose Murillo, Andres Carvallo, Manuel Fonseca, Rafael Rugero, H. Cipriani, Henrlque Lander, John Phelps, Carlos Penso, Manuel Azpurua, Henrlque Lhl6, Alfredo Abilahoud, Angel Corao, Roque Voris y los cronlstas Luis Plkldo Plsarello, Gonzalo Veloz, Eloy Perez, Alfonso Soules, Herman Ettedgul y otro• que mantlenen el entusiasmo y la espectativa desde las paginas de sus perl6dicos.

-17-


irse a los postes a presenciar Las partidas; al darse estas, atravesa­ ban el campo al galope, para ver tarnbien las llegadas. A partir de aquel rnomento, el inreres de los caraquefios por el hipismo continue creciendo. Se importaron algunos caballos de Escados Unidos y de Francia a fia de crear nuevo incencivo al especraculo. Casi sin interrupciones celebraronse las cemporadas en El Paraiso, dispurandose anualmence grandes clasicos como el del Presidente de la Republica, el de los Sprinters y el Clasico del Ejerciro, esta ultirna la prueba de mayor aliento, sobre una discancia de 3.200 metros. En 1934 el Hipodromo logro reunir la bolsa mas grande en una sola carrera por: "El Gran Premio Nacional" de Bs. 300.000, cantidad esca de inusicadas proporcio­ nes en aquella epoca. La competencia fue ganada por la yegua Marisela propiedad del Sr. Fernando Talavera y moncada por el jinere Rafael Quiroga. En las decadas subsiguiences irian a aparecer los grandes campeones como Grano de Oro, Hypocrite, Hylander o Cairnan. Algunos cronistas de la hipica coinciden en afirrnar que "es la mejor epoca del turf'. En medio de aquel enrusiasmo y auge eco­ n6mico, ­dicen­ subsisre el espiritu deporrivo. Los mas corredores, por ejemplo, eran reservados para la reproducci6n en el pats y no como ahora que se venden al exterior. Si en verdad ha ocurrido un notable incremento hasca el punco de que en La Rinconada se esran aposcando cerca de seis millones por semana no es menos cierco que ha decaido en mucho aquel sano encusiasmo de otros ciempos, cuando todavia concaba un poco del romanrico espiritu de los pioaeros quienes junco con la alternativa ernocionante del deporce, evaluaban tambien la noble parcicipaci6n durance siglos de la familia equina en codos aquellos evencos de provecho para el progreso humano. El Dr. Carlos Alvarez Pumar conserva en su archivo uno de los programas de la Temporada 1941­1942, epoca realmence de las mas interesantes de nuestro hipismo por ser precisamence antesala de la llamada "edad de oro". A titulo de informaci6n damos nornina completa de entrenadores, jinetes y caballos en aquella epoca segun informa el programa oficial de Carreras que nos proporciona esre aficionado.

-18-


El Dr. Jo•' Gil fortoul, dlplom,tlco e hlatorlador, era a la vez gran aficionado hlplco. Aqur lo vemos de paltQ­lovita al lado de su caballo "Astolfo" despue1 de Mber ganado la "Copa lnauguracl6n" en la Temporada de 1910. Jinete aobre el puraaangre Medardo Gutierrez, mientras que desde la caseta contempla la escena el Juez de Llegada Sr. Felipe S. Toledo. Al fondo la silueta del Avila.

TEMPORADA

1941

HIPICA

,

Cuadra bajo el cuido de L. E. Werner. ]inetes: R. F. Mendez, E. Paradela y Castillo (a) Ejemplares: Quebradeiio ­ Alrarnira ­ Indiecita ­ Katishka ­ Lucido Ketty ­ Odalisca ­. Princesita ­ ex­Lady Betta ­ Florian ex­Learn ­ Parapara ­ ex­Mountain Echoc ­ El Diablo ­ Pimpinela ­ Mufieca ­ Trago Amargo ­ Relampago y Siboney.

Cuadra bajo el cuido de H. Bouley.

lmeses: Chapellin y Ustariz,

Ejemplares: Speech'Day ­ Parlour Maid ­ High Rank ­ Silk Cloak ­ Burlesco ­ Pavlova ­ Nebulous.

Cuadra bajo el cuido de Luis Monasterios. /inetes: Pino y Ochoa. Ejemplares: Caravel ­ Castelar ­ Italia ­ Bandolera ­ Novelero ­

Gamboa.

­19 ­


Cuadra bajo et cuido del Dr. Herman Stelling. [inetes: Padilla II, Yumar, Olivares y Suarez III.

Ejemplares: Blacas ­ Citr6n.­ Queenie ­ Cavalla ­ Darsine ­ Sadl ­ Mondiale ­ King Like ­ Con Cuidado ex­Fair Chance ­ Coqueterla ex­Chance Mic. Cuadra bajo et cuido de ]. Rodriguez ("Chin go Juan''). [inete: Padilla I. Ejemplares: Time Winner ­ Simpada ­ Bernice R ­ Ballyhaste y Roe (Grano de Oro) . Cuadra bajo el cuido de ]. Hernandez. ]inete: Peraza. Ejemptares: Sir Scamp ­ Dame Paso. Cuadra bajo et cuido del Coronet ] ose Murillo. [inetes: Varela, Lara, Tovar III, Valbuena y Solorzano. Ejemptares: Violeta ­ Mi Fortuna ­ El Estanquero ­ Tonetta ­ Placer ­ Shirley Temple ­ El Mago ­ Don Pipo ­ Bicoca ­ Papyrus ­ Mae West ­ Marcelita ­ Morwel ­ Alajuela ­ Mary Sol ­ Palrnariro ­ Bucanero y La Errnitafia. Cuadra bajo et cuido de R. Quiroga. [metes: L. R. Harris y G. Gonzalez. Ejemplares: Cokrail Chileno III ­ Sun Henry ­ Cleopatra ­ Spooke ­ Tin Pitin ­ Cara Dura ­ Petarefia ex­Yomer ­ El Irlandes ex­Your Worship. Cuadra bajo et cuido de Antonio Algarbe. [metes: Peraza y Camejo.

Ejemplares: Por ·Los Palos ­ Pull ­ El Negro ­ Idumica ­ J6nica ­ Parafso ­ Rombica ­ ]. J. ex­Trans Lag ­ Isabelita ex­Sweep By Miss. Cuadra bajo el cuido de Blas Concepcion. [inete: Jesus Cruz. Eiemplares, Ritmica ­ Hestia ­ Rockbridge ­ Pletora ­ Caldereta ­ Patroclo ­ Consentida ex­Arornalr. ­ Mal Criada ex­ Ker ­ Rezon­ . g6n.

­20­


Despu's de la vlctorla el propletarto lnvlta a un brindls.

Las familias "acomodadas" presenciaban las carreras desde sus faetones descapotables.

-21-


Je.Us Cruz, Jlnete veterano de la caballerlza de Herman Stelling fotogratlado con su caballo durante uno de los ejerclcios matinales en El Paraiso.

Cuadra bajo el cuido de Ramon Sanchez. ]inete: Narvaez. Ejemplares: Tisbe ­ Silver Point ­ juguete y Pelipito. Cuadra bajo el cuido de ]. Archibould. ]inetes: Padilla I y Gutierrez II. Ejemplares: Electrics ­ Maruja ­ Valencia ­ Guaraguara ­ Alma Criolla ­ Arrollador ­ ~apariro ­ Tapatapa ­ Portena ­ Retazo y Argos ex­Flash Boy. Cuadra baio el cuido de Ch. Harris. ]inete: L. R. Harris. Ejemplares: Rernonta ­ Haras y San Carlos. ­22­


SAN JACINTO

Nuestro gran pintor Jesus Maria de las Casas, deja perpetuado en este lienzo, un recuerdo del viejo mercado de San Jacinto. Al pie del antiguo reloj de sol parecen comentar estas famulas, el resultado de sus compras del dia.

­

23 ­


SAN JACINTO El Mercado Principal era en realidad, en el mas adecuado y cabal senrido de la palabra el sicio mas concurrido y populoso de Caracas por ser fuenre pr6vida y segura para el abascecimienco necesario de los "rres golpes", denominaci6n con que en lenguaje criollo se alude a las tres comidas que diariamente se hacen con el favor de Dios. A dicho mercado, que por ser unico en una urbe de un poco mas de cien mil almas hace cuarenta afios, renia caracteris­ cicas de Gran Feria, acudia la famula de confianza con una gran cesca de mimbre de dos medias capas, para craer a la casa las vicuallas del dia con el consabido "fuerte del rnercado". Claro que con esos cinco bolivares se hadan "rnilagros" que ahora no pue­ den hacerse: pues esas monedas bascaban y sobraban para adquirir la carne de "lagarto" y los huesos (estos hasca los regalaban) para la sopa o el hervido; la de muy buena calidad para el asado o los "bistecs", amen de las verduras, comaces, cebollas y dernas condimencos indispensables a los menesreres de cocina. Pero adernas el Mercado cenia sus deparcamencos de re­ fresqueria, donde se expendia especialmence, chicha, caraco de arroz y de acupe en medias bocellas capadas con hojicas de lim6n o de naranja, "frescos" de jarabes de rodos los s..bores, granizados, helados y el famoso "guarapo fuerre" hecho de la fermencaci6n de las conchas de la pifia y papel6n, famoso por su inimitable. sabor y por sus cualidades digescivas. Fuera, ya hacia la plaza del Venezolano, escaban los "pues­ cos" de flores, donde se exhibia coda la variedad criolla. En la propia plaza habia kioscos para la venca de peri6dicos ( diarios o reviscas) e improvisadas librerias de lance o "chiveras" donde los chicos de enconces adquirian especialmence las Aventuras de Buf­ ­24­


O.telle Interior de una de las pulperfas exlstentes hasta blen entrado el si~lo por los alrededores del Mercado Principal.

Et comerclo de frutos desbordaba los confines del edificio e invadfa parte de la Plaza del Venezolano y aun la calle que baja de San Jacinto a Traposos frente a la Casa Natal del libertador.

­25­


falo Bill (Coronel Guillermo F. Cody), las de los Corsarios Negro, Rojo y Verde, los cuentos de Callejas y la de los piratas de la Malasia, Sandokan y Yanez de Gomera que operaban desde la Isla de Mornpracern, de Emilio Salgari, las novelas policiales de Nick Carter y Sherlock Holmes o las proezas de Klaus Stierteboe­ ker, un Capitan de 16 afios asi como las de Julio Verne, obras estas ultimas que tienen fundamenco ciencifico, y cuya narrativa era sumarnente graca En la plaza habia tarnbien amoladores con sus rnaquinas y pequerias irnprentas que se multiplicaban naruralmente en dias de Navidad y Afi.o Nuevo para rarjetas de visita y felicitaci6n. Despues existia la famosa Playa del Mercado, donde des­ cargaban los burritos que hacian cl transporte de verduras, Hores y frucas, lefia y carbon. Freme a la Playa, en la pane sur, esraban los "botiquines" o expendios de bebidas espirituosas, En "La Ararraya" predomi­ naba la venca de "fruta de burro', "naranjita" y "berro" y en "El Gato Negro" el islefio Luis Carro, expendia cierco vino de Las Palmas, a real el vaso .grande, comparable por su color y sabor al vino del Rhin, segun proclamaban los mas encusiasmados parro­ qu1anos. Con motive del reciente Cuarricentenario de Caracas se dio, por decirlo asi, una pincelada colonial a la Plaza, sicuando en lugar prominence al antiguo Reloj de Piedra, para dar cierto am­ bience sefiorial a la Casa Natal del Libercador, el Museo Bolivariano y la Sociedad Bolivariana.

( Lista oficial de precios en Diciembre de 1942) Apio, Kg A vejas verdes o amarillas, Arroz Canilla, Kg. . . . Auyamas Kg Avena, Kg Aves de corral, Kg. . . Azucar blanca de l ~, Kg.

. Kg. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ­26­

.. ..

Bs.

"

0,60 0,45 0,75 0,20 0,80 2,75 0,90


A la entrada norte se hallaban los puestos destinados a la venta de frutas entre otros el muy celebre "Natera", donde podfa verse la mas completa variedad desde las finas uvas lmportadas de California, hasta los ealmltos y nfsperos del jap6n especies estas ultimas casi desaparecldas def valle de Caracas. (Foto R. Muller).

Azucar blanca de 2~ Kg. . . Batatas, Kg. . . . . . . Beren jenas, una grande . Cafe Molido, Kg. . . . . Caraotas negras, Kg. Caraotas rosadas, Kg. Caraocas blancas, Kg. . . . . . Caraotas ponchas coloradas, Kg. . Cebollas coloradas secas, Kg. . Cebollas coloradas frescas, Kg. Cebollas blancas secas, Kg. . Cebollas blancas frescas, Kg. Cocos, uno hasca . Frijoles bayos, Kg. ­27­

.. .. "

..

0,80 0,15 0,15 1,30 0,45 0,70 0,75 0,85 0,60 0,50 0,50 0.45 0,20 0,45


Frijoles blancos, Kg. . . . . . Garbanzos, Kg. . . . . . . Harinas de maiz, Kg. . . . . Harinas de arroz, Kg. . . . . Harinas de rrigo, Kg. . . . . . Huevos, 8 por . . .

. . . . . . . . . . . .

Jab6n, Kg . Maicena, paquece . . . . . . Maiz amarillo en concha, Kg. . Malz blanco pilado, Kg. . . . Manceca de cerdo, Kg. . . . . Manceca vegeral, Kg. . Mancequilla de 1 ~. Kg. Mancequilla de 2~, Kg. Mapuey, Kg . Nabos, paquece . . . . . . . . . . Naranjas de California, docena hasca . Naranjas criollas, docena hasca Names criollos, Kg. . Ocumos, Kg . Papelon, uno hasca . . . . . Papel6n en panelas, una . . . Papas rosadas, Kg. de Bs. 0,25 a . . . . Papas blancas, Kg. de Bs. 0,25 a .... Pastas corriences, Kg. . . . . . Pascas especiales, Kg. . . . . . . Pescado Carite y Pargo fc., Kg. . Pescado Carice y Pargo sdo., Kg. . Pescado Mero fco., Kg. . . . Pescado fco., otras clases, Kg. . . Pimencones, uno grande . . . Platanos, 6 por . . . . . . . Queso de Maracay, Kg. . . Queso de 1 ~, Kg. . . . . . . Queso de 2~, Kg. . . . . . . Queso de rnano, Kg. Rabanos paquete . . . . . . . . . ­28­

"

.. "

. "

"

"

0,55 1, 10 0,35 0,80 0,65 1,00 l,00 0,20 0,20 0,22~ 2,00 1,85 5,00 3,50 0,25 0,12 Vi 1,00 0,30 0,20 0,25 0,60 0,40 0,70 0,60 0,80 1,15 1,30 1,35 1,25 1, 15 0,10 0,25 2,60 2,60 1,80 3,50 0,10


"La Atarraya" en el vlejo mercado de San Jacinto era una de las pulperias mas yfsltadas de arrieros, lntermedlarlos y pequenos negoclantesde frutos menores. Permanecla ablerta desde la madrugaday alli se expendia en frascos boeenes, el "malojlllo", "Fruta de Burro", "Canela" o "Zamurlto", especles de aguardlente que se vendlan "a centavoel poclllo". Como era de suponer,no pocas veces este sltio fue escenario de escandalosos sucesos.

0,12 Y2 0,20 0,20 0,40 0,20 0,40 0,15 0,12Y2

Remolachas, paquece Repollos, Kg. . . . Sal molida, Kg. . . Tomates rnanzanos, Kg. Tornates criollos, Kg. V ainitas, Kg. . . . Yucas, Kg ..... Zanahorias, paquete

PRECIOS DE LAS CARNES 0,50 0,50 0,50 0,50 0,50

Guaro, Kg ... Lagarto, Kg. . . . . . Falda de retablon, Kg. Contra lomo, Kg. Pecho, Kg .... -29-


Lil"1PiAR ZAPf\TOS.

Umplabotas en el 6ngulo noroeste de la Plaza del Venezolano, ~sq. de San Jacin­ to­ adyacente al Mercado. Enfrente se hallaban los almacenes de El Gallo de Oro, (Foto R. Muller).

Solomo abierto ard., Kg. Codillo, Kg. Trasero, Kg. Ganze, Kg. Punta de trasero, Kg. Pollo, Kg . Pulpa negra, Kg. . . . Solomo de cuerito, Kg. Chocozuela, Kg. . . . . . . . . . .

..

0,75

1,00 1,00 1,20 1,20 1,20 1,20 1,20 1,20

­Es una imperdonable groserfa el separar del pan una parte de su mlga, para traerla entre las manos y jugar con ella. Respecto a llegar en esto hasta former peloticas y arrojarlas a las personas o hacla cualquier otro objeto, este es un acto tal que no se concibe pueda verse jamas, nl entre personas de la mas descuidada educaci6n". Manual de Urbanldad de M. A. Carreno (De la conducta en la mesa. Pag. 255).

­30­


cotidlana en la llamada "playa" del antiguo mercado de San Jacinto. En medlo de aquella extrai\a promlsculdad se negoclaban huacales de tomates, verdu­ res y frutas de toda especie transportadas a lomo de burros o en carretas desde los campos vecinos. Escena

Caracas Bajo la arcada se hallaban las oficinas del "Regidor" y adyacente a estas las del "fiel contraste".

-

31 -


Lomico sin huesos, Kg. Lengua, una . . Sesos completes Higado, Kg ... Huesos de res, Kg. . Carne de cerdo, Kg. . Carne de cernera, Kg. . . . . Chicharrones, Kg ... Chivo fresco o salado, Kg.

" "

2,00 1,50 1,50 1,00 0,10 2,00 1,25 2,00 1,00

Si los articulos por usted comprados no son de buen« '"'" lidad, participelo inmediatamente a la Oficina de Fiscalizaci6n. decia tma nota al pie de esta lista ojicial. ­Cuando los castellanos descubrieron el valle de Caracas, fundaron la primera ciudad al pie de la colina, en direccl6n del abra de Catie, !Mir• en­ contrarse mas cercanos al mar. Enseguida se trasladaron al norte, al pie del Avila, para aprovecharse de sus aguas. Pocos sitios en el mundo presentan un panorama mas completo. El valle de Caracas aparece clrcundado de ver· des alturas colocadas en anflteatro menos por el norte donde se alza lmpo­ nente la mole del Avila, cuya cima visible desde el poblado es la Siiia de Caracas que se eleva a 2.665 metros sobre el nlvel del mar. El valle que se extiende de norte a sur y de oeste a este tlene dos pueblos que se divlsan desde la colina; uno, Petare, cuya torre que descuella sobre la verdure del horizonte en la direcci6n oriental, se asemeja a una blanca plramlde; otro, La Vega con sus ingenios y torreones que lo circunda y le clan un aspecto de antiguo castillo que realza la alfombra de esmeralda bailada por las agues del Gualre. La cludad en un piano inclinado de norte a sur y de oeste a este, no puede contemplarse a un mismo tiempo. Es necesario segulr el semlcirculo que desde el camlno de La Vega se extlende entre campos cultivados hasta el Este y despues a las faldas del Avila pobladas de qulntas, para rematar despues al oeste, en el abra de Catla y al pie de la colina, donde estin las ultimas casas de la cludad". "Desde la Colina" por Aristides Rojas • reimpreso en Cronica de Caracas ­ N' 4 y 5 ­ abril·mayo 1951.

­"El exterior de las cans de Caracas es triste, pero son muy c6modas interlormente; sus salas espaciosas y elevadas, y la divisi6n mucho mas apro­ piada al clima que las nuestras". De "Relaci6n de un viaje a Venezuela, Nueva Granada y Ecuador", por el Consejero Lisboa. Pag. 67.

-

32 -


MERCADO DE LOS PAJABOS

Ventll de pajaros en el Mercado de Caracas. (Postal editada en 1920. Colecci6n "La Perla").

Casi en la esquina de Sao J acinco angulo noroesce de la Plaza del Venezolano, se ubicaron los vendedores de pajaros. Comer­ ciaban principalmence con las especies aladas mas comunes en el valle de Caracas, azulejos, gonzalitos, paraulacas, canarios y crisro­ fues. Por siece reales podia comprarse un rurpial. Mas "economicos" eran los "canaries de tejado" de plumaje verdi­amarillento o los periquicos ofrecidos escos ultimos a dos bolivares y tres reales. Algunos miembros de la Sociedad Proceccora de Animales, como dona Camila de Perez Carreno, Victor Mileo o la doctora Maruja Zambrano encre otros presidian con encusiasmo la iniciativa de acudir el 4 de occubre de cada afio a dicho sicio para adquirir y poner en libercad ­­en presencia de numeroso publico, princi­ palmence de nifios­, algunas de las avecicas­sometidas a cauti­ verio. Gran imporcancia educaciva concedian a este simbolico aero. ­

33­


"Pasaje Ramella", entre Gradillas y San Jacinto.

Recordamos que al centre de la Plaza no lejos del antiguo reloj de piedra, exisria la estatua de Antonio Leocadio Guzman padre del Ilustre Arnericano, rodeada enronces de frondosos rnata­ palos e higueras. El espacio que habia sido converrido en gran estaciona­ miento fue transformado al fin de una graciosa plaza, donde se instalo el antiguo reloj de sol erigido desde 180 3 frente ~l portal del Templo y Convento de San Jacinto. Las obras ejecuradas a iniciativa del historiador Mauro Paez Pumar estuvieron conclui­ das en Julio de 1967 con motive de la .celebraci6n del cuatricen­ tenario de Caracas y comprendieron adernas la reinsralaci6n de 4 fuentes donadas por el Banco Caracas, una de las cuales censer­ va el antiguo pilar octogonal. La ejecucion de estos trabajos corri6 a cargo de los arquitectos Carlos Guinand Baldo y Tomas Jose Sanabria, .quienes presraron su colaboraci6n ad­honorern. En el mismo sitio se plantaron 40 caobos adolescenres, trasladados des­ de los viveros de la Direccion de Parques y Jardines por el sefior Carrozo. -34-


Tremo de la Plaza Venezuela hacla Sabana Grande en 1940. A la derecha los enagu• de la Hacienda Ibarra (Cludad Unlveriltarla). Comparada con la de hoy, Caracas era entonces una ciudad casl desierta (Postal a color de Marisa Kuclcs).

remos

El kiosko triangular de Puente de Hierro, cercano al runel de Roca Tarpeya, tal upecto que ofrecia en 1936. Dlcho sitlo es hoy uno de los mis criticos por con­ verger allf gran parte del trinsito hacia el sureste (Postal de Helmut Neumann).

­

35 ­


No mis de nueve metros de ancho, incluidas las cunetas, tenian entonces los caminos reclen pavimentados que conduclan a las urbanizaciones def Este, bordeando en ocasiones las estribaciones def Avila. Poco despues de haber sido desarrolladas las urbanlzaciones de San Agustin y El Conde, a partir de 1928 empiezan a surgir otras en las estribaciones def Avila como La Florida, Lqs Palos Grandes, Campo Alegre, Country Club, y Altamira. Una fotografia tomada desde la carretera del Este por don Luis Roche en 1942 nos muestra el Espejo de Agua y El Obelisco casi en medio de un desierto. Apenas existian las cercas o tapias de antiguas haciendas de cana y cafe cuyo destlno iba a ser tambien en breve plazo el def parcelamiento. A pesar de tan optimistas muestras de evoluci6n urbanistica, Caracas continuaba siendo por aquellos aiios una ciudad de escaso movlmiento. Despues de las nueve de la noche se acentuaba el signo de soledad. Al evocar por contraste con nuestra hoy bulliciosa urbe la mansa quietud de entonces el escritor y periodista Ram6n J. Velasquez, acucioso investigador de nuestra historia, comentaba en circulo familiar "que la primera vez en este siglo el habia visto una multitud fue con motivo de la vlsita a Caracas de Carlos Garde! en mayo de 1935. La gente lnvadi6 la avenida de la Estaci6n, o Cano Amarillo para dar la bienvenida en los andenes def Ferroca· rril de La Guaira al celebrado y popular cantante argentino. Mas tarde se congreg6 otro grupo de admiradores en la plazoleta del Municipal a fin de ovacionar al artista, quien correspondi6 a la manlfestaci6n con emocionado saludo desde uno de los balcones def Hotel Majestic".

­

36­


Af-.racia era hacla los aiios veinte, uno de los Templos mas concurridos de la arlstocracia caraqueiia. Su primitiva construcelon data de 1656 y fue erigido en parroquia el 8 de mayo de 1751 segun datos aportados por Monseiior Navarro en su Hlstoria Eclesiastica. El frontis sufri6 considerablemente con el terremoto del 29 de octubre de 1900. Actualmente desempeiia las funciones de cura parroco el sacerdote y periodista Jesus Hernandez Chapellin.

Esta postal tomada desde Carmelitas nos muestra al fondo parte de la graderia que da acceso a los portales de Altagracia. No pocos son los escritores e investigadores que visitan los archivos de este Templo ricos en datos acerca de personajes tan importantes como Andres Bello, Jose Angel Lamas, los Ustariz 6 Antonio leocadio Guzman, quienes fueron vecinos de la parroquia.

­37­


MIRAFLORES

En 1899 Miraflores era una de las 19 casas que los descendlentes del Presldente Joaquin Crespo reclbleron en herencla. Otras no menos elegantes eran Villa Zolla y Santa Ines. "El edlflclo de Mlraflores -dice el testamento- es una ccnstrucclen con grandes clmlentos y paredes de mamposteria, con corredores enclaustrados, pllastras y arquerfas, doble habltaclon del lado derecho y habltaclones del lado lzqulerdo, con gran sala al frente, corredOr hacla atras, una gran avenlda sobre el barranco, que le da entrada, otra hacla el lado derecho y jardlnes que ocupan un terreno quebrado; al fondo, defensa de mucho costo; en su Interior esta ornamentado con plnturas al oleo y decorado con gran lujo; el pavlmento, en general, es de mosalco muy flno, tenlendo en el centro del patio una plla de bronce .•. " Desde los dias de Gomez, paso a ser blen naclonal y en lo que paso a ser Palaclo de Miraflores, comenzaron a vlvlr y despachar nuestros presldentes. Es el centro de poder y de las declslones mas lmportantes del pais. En torno a Mlraflores gravlta la Vida venezolana. Con la democracla, se le ha permltldo al pueblo el acceso a sus lnstalaclones para que sean conocldas. Ahora, miles de nlnos van todos los meses a conocer la sede del Poder Ejecutlvo. Los jefes de estado vlven, desde 1966, en La Casona, al Este de la cludad y en jurlsdlcclon del Dlstrlto Sucre.

En el Boletrn Ht 4 del Archlvo Hlst6rlco se publlca toda la documentacl6n promovlda acerca de los origenes y construccl6n del Palacio de Miraflores, convertldo en sede del Presidente de la Repl4bllca oficialmente desde el 19 de )unio de 1911 fecha en la cual dicho inmueble fue adquirido por el Gobierno. Centro de la vlda polftlca venezolana desde los dias de Crespo, Miraflores ha sldo escenarlo de sen• lados sucesos en el lento dlscurrir de los ultlmos tres cuertos de slglo. La presente postal poco conocida nos muestra el momento en el cual el Presldente Crespo abandona el Despacho en su coche negro cerrado y pasa frente a la "Guardia de Hierro". (Estampa coloreada por la novel pintora Marisa Kuclcs).

­38­


LA SUBmA DE MOBEIO

Era tal la pobreza del •r!trlo publico, que IH rentas apenas alcanzaban entonces S)llra el mantenlmlento de prlmltlvos e Indispensables servlclos como los de Aseo Urbano, pollcl• y alumbrado, mereclendo por aquel entonces la atencl6n de la munlclpalldad s61o aquellos sltlos mas expuestos a la vista como los alrededores del Capltollo, la Plan Bolivar, San Francisco o el Pante6n, frecuentemente visitados por los turtstas. Sin embargo no lejos del Palacio de Miraflores, exlstia la llamada "Sublda de Moreno" la cual tamblen conducia a "Camino Nuevo". En estas postales clel senor H. Neumann podemos apreciar la cltada calle en ambas dlrecclones.

­39­


EL PUERTO. BBEVE ROTA SOBIE MACUTO Casto Fulgencio Lopez, dedic6 gran parte de su vida al es­ tudio de La Guaira. En su obra, "La Guaira, causa y rnatriz de la independencia arnericana", recoge un rrozo de la hisroria del puer­ to mas importance del pais. Del sirio escribe que al principio no era mas que una mancha verde y oscura Irenre al ruido del mar, donde muy cerca vivian los hombres de la Naci6n Tarrna, que en su hablar, llamaban al sitio Huayra. Francisco Fajardo, en uno de sus multiples viajes de exploraci6n por el literal central, fue el primero en avistar este lugar, que por 'su relativa proximidad al Valle de Caracas seria mas tarde el principal Centro de introduc­ ci6n y salida de mercancias. Alli se fragu6 tarnbien, en los dias de Gual y Espana el afio de 1796 la primera gran conspiraci6n contra el regimen de los espafioles, Oficialmente, el afio 1598, Diego de Osorio £und6 en nombre de la Corona la ciudad de La Guaira. Mas tarde la actividad cornercial fomentada por los vascos de la Guipuzcoana contribuy6 notoriamente al desarrollo de la actividad portuaria del sitio . Bellerrnan, el famoso artista que estuvo en Caracas hacia finales del siglo XVII pint6 bellas imageries de la rada, por don­ de sali6 Miranda para mas nun ca regresar en 1812, tras la capi­ tulaci6n y encrega y por donde enrraron, afios despues de su rnuerre, los resros del Liberrador . Paez Pumar atribuye al casco historico del puerto una im­ portancia capital por encontrarse hasta ahora casi intacto. Sin em­ bargo debemos registrar el hecho de que el periodista Gumersindo Villasana, formul6 energico reclamo en un reportaje escriro para "El Universal" protesrando el hecho de que algunos camiones han venido destrozando, a su paso por las estrechas calles volados y moldeaduras de las ventanas, ejecucados en la epoca colonial al torno y en ricas maderas criollas. ­40­


nemo recuerdo de •

La Gualra en 1918. Cocoteros, techos relos y la hlst6rlea torre la Iglesia del Carmen en estrecha comunl6n evoean el hermoso espectaculo

colonial del Primer Puerto de la Republlea.

0tra

panoramJca. Al fondo Malquetia

­

y mas allA la sUueta de Cabo Blanco.

41


Seda la ocasi6n de recordar que durance su paso por el Ministerio de Educaci6n, el maestro Reinaldo Leandro Mo­ ra, natural de La Guaira, influye ante el Gobierno a fin de que el casco tradicional de aquella ciudad fuese declarado' patrimonio his­ t6rico y ruristico,' con base a recomendaciones formuladas po~ el cronista Mauro Paez Pumar, quien desde 1949 habia pedido la apertura de Las B6vedas, asl como tambien la restauraci6n de "La Polvora", obra por cierto ya ejecurada . LA GUAIRA SEGUN UN VIEJO DICCIONARIO

En el Diccionario Geografico­Hisrorico de las Indias Oc­ cidentales o America . . . por Don Antonio de Alcedo, romo II, publicado en Madrid en 1787, se lee esta siguiente curiosa refe­ rencia sob re La Guaira: "GUAIRA, Pueblo de la Provincia y Gobierno de Vene­ zuela, fundado por el Gobernador Diego Osorio, en 15 69 tie­ ne un celebre Puerto defendido por un casrillo, y muy frecuenrado de coda especie de embarcaciones por donde se hace todo trafico y comercio de aquella Provincia; el afio de 17 39 lo atacaron tres navlos de Hnea ingleses, pero se retiraron con mucha perdida sin poder entrar en la vigorosa defensa que hizo, dexandose una ancla la Capitana, que se conserva alli por trofeo; y el 1743 lo envistio con 1 7 embarcaciones el Almirante ingles Carlos Knowles, que se vio precisado a desistir del ernpefio por mucho 'quebranto".

-El gran Ferrocarrll Aleman tlene para la famllla Seljas un recuerdo tragico y muy doloroso. Pag6 con su vida salpicando con su sangre llena de juventud los prlmeros carrlles de acero de tan grande via, el lngenlero Carlos Medina Seijas, apenas graduado, por su imprudencia fatal de abandonar un convoy de balasto en movlmlento y pretender saltar a una locomotora en afan de llegar mis presto a su hogar, a prepararse para la velada de honor que en el Municipal se ofrecla al blasonado autor de "La Pentesilea" a su triunfal regreso de Paris. Y este ~uctuoso accidente lo retrotralgo como remembranza que vino a mi mente al departlr ante el busto de don Gustavo Knopp con sus condiscipulos Perez, Razetti, Jahn, Ibarra Cerezo, Urbaneja Tello y otros compafieros del lngenlero martirlzado ya en las aulas universitarlas, ya prestando servlclos tecnicos en el trazado del ferrocarrll". "Horas Grlses". Rafael Seijas Coock (Lit. y Tlpografia Vargas 1928, p )g. 97).

­42­


v.... de I• r•d8 obtenld8 desde una l•nch• de I• Corpor•cl6n del Puerto en 1926.

El Tajamar.

-43-


ATAQUES PIRATAS Hacia 1910 Hegan a Caracas los primeros ejernplares de las "Relaciones Geograf icas de la Gobernaci6n de Venezuela" por Angel Alcoaguirre y Duval. Aunque no encaja en la cronologia de los sucesos consignados aqui nos parece de cierco interes ofrecer al leccor denrro de esra breve cr6nica la sinresis de lo cratado en dichas memorias acerca de algunas de las incursiones de que fuera vicrirna el puerco de La Guaira, asi como de la tenacidad y valenrla demostradas en mas de una ocasion por sus moradores para enfren­ tar a los atacances. Dice parte de la mencionada narraci6n poco conocida: El cemor a las invasiones de los piratas y las disensiones habidas entre el Gobernador D. Luis de Rojas y el Cabildo de Carballeda, hicieron que los vecinos de esra ciudad se crasladaran a Valencia y Caracas, abandonando el puerto por el que se efec­ tuaba la mayor parte del comercio maritime de Venezuela. En 15 87 D. Diego de Osorio, que habia substituido a Rojas, trac6 de resraurar la ciudad; pero ante la insistente negativa de los anriguos vecinos, determine poblar el puerto de La Guaira, que ofreceria mejores condiciones de defensa, y aunque en 15 88 so­ lo se instalaron algunos vecinos que construyeron en el unas bo­ degas, fue aurnentandose el nurnero de sus habitantes, arraidos por el lucro que proporciona el cornercio, hasta llegar a convercir la ciudad en la mas rica y de mayor movimiento mercanril de la Re­ publica, a pesar de los perjuicios que ocasionaron a su comercio, durance las siglos XVII y XVIII, las guerras de Espana con In· glaterra, Holanda y Francia, las depredaciones de los piratas que infestaban las coscas de America y el terremoto que en 1812 la destruy6 por cornpleto . En 1595 el filibustero ingles Amyas Preston desem­ barc6 en Macuto, cuatro kilometres al E. de La Guaira; escal6 las elevadas rnonrafias que la separan de Caracas y saque6 la capital; a mediados de diciembre de 1642, una escuadra inglesa de ocho buques bombarde6 La Guaira en canto que hr atacaban tropas que habian desembarcado, pero los invasores fueron rechazados por mar y tierra; mejor forruna tuvieron en 1680 los franceses, que -44-


l)esde

el sitio hoy conocldo como "Mare Abajo". En el cerro se destaca a lo lejos la fortaleza el Vlgla, ftUU..,...•Vll• ......

Un detalle de la costa, en la carretera de La Guaira a Macuto. Por entre los cocote­ ros pasan los rieles del tren que comunicaba el puerto con el balneario de Macuto.

­

45 ­


, a las 6rdenes de Grammont lograron penetrar en ella y saquearla. En 1703 rechaz6 un ataque de los holandeses, yen 1743 otro de la flora inglesa compuesta de 17 buques que mandaba el corno, doro Knowles. Esta situado el puerco de La Guaira en las playas del mar Caribe, a los 10° 36' 57'' latitud N., o­0' 35" longitud 0. de Caracas, de la que se halla separado por una elevada rnontafia qoe obliga a que el ferrocarril que le une a la capital tenga un desarro, llo de 36.500 metros, cuando en Ilnea recta la distancia es s6lo de 11 kil6metros . La Guaira con su rerrirorio formaba un partido de la ju­ risdicci6n de la ciudad de Caracas, y aunque en esta obra solo in­ cluimos las relaciones hechas por las ciudades y villas cabezas de jurisdiccion, que en sintesis comprenden las de los partidos, he­ mos hecho excepci6n de la correspondiente a La Guaira por la importancia que esra ciudad ha adquirido; es en la actualidad la capital del Departarnento Vargas en la secci6n Occidental del Dis­ trite Federal, siendo su poblaci6n de 14.000 habitantes. En La Guaira amarra el cable que por via de Curazao, Santo Domingo, Cuba y Florida, pone en comunicaci6n a Venezuela con el mundo entero . Las importantes obras realizadas ultimamente en el puer­ to le ban mejorado norablernente, pudiendo dar idea de su mo­ vimiento cornercial el que en el aiio econ6mico 1905­1906 el valor de las efecros exportados ascendi6 a 16.758.637 bolivares y el de los importados a 19.375.969,77. El valor de un bolivar equivale al de un franco . Concluyen los expresados historiadores: El esrado que la descripci6n se refiere expresa, en resu­ men, que en 5 de mayo de 1768 la poblaci6n de La Guaira se cornponia de 1.345 blancos de arnbos sexos, 1.291 pardos y 891 negros, o sea un total de 3.5 27 personas, y el de codas las habi­ tanres de la jurisdicci6n , ascend fa a 3. 918. -La cludad de Caracas se ofreci6 a nuestros ojos con bastante majest.d. Nos parecl6 grande, llmpla, elegante y blen construida. Conde de Segur.

­46­


Vista penor6mlca de 101 antiguos y desaparecldosbai\os de Macuto, regldos durante -' dncuenta ai\os por el popular Tacoa, de orlgen Carlbe, qulen segun el escrltor Antonio Reyes, era uno de los personaJessobresallentes de balnearlo. Tacoa fue Hevedo a la plla bautlsmal por el General GuzmAn Blanco durante el aeptenlo, i:uandofund6 el trlan6n de la Guzmanla.

lltlo Ideal para el descanso, Macuto se colmabade temporadlstassolo durante la ....._.. aanta o en las vacacionesde jullo y agosto. Durante casl todo el aiio poclla diafrutarse en el balneario de una apacibilidad casl paradisiaca. Su calle

principal era de tlEirra y a sus lados habfan sldo sembradospara darle sombra y &.cu... cocoteros y almendrones. De tarde todos concurrfan al paseo de la playa.

­47­


, EXJ!LICACION SOHRE ORIGEN Y FUNDACION DE LA GUAIRA Una de las fuenres mas antiguas de nuescra historia es la de Jose Oviedo y Banos. De su enrretenida relaci6n entresacamos por ejemplo un parrafo que sieve para explicar los orlgenes del pueblo de la Guaira: " ... conociendo que para la conservaci6n y crecimiento de su nueva ciudad de Santiago era preciso, y convenience hacer otra poblaci6n en las orillas del mar, que sirviendo de puerto, y abrigo a las embarcaciones del comercio, facilicase las convenien­ cias del trato, de que habia de resulcar los incereses para su mayor aumenco, se decermin6 a ponerla en planca, y buscando el sicio mas acomodado para su fundaci6n, baj6 personalmence a la cosca, llevando consigo sesenca hombres; y habiendo asencado paces con los caciques Mamacuri, Guaicamacuco, y los demas circunvecinos pareciendole el lugar mas a prop6sico el mismo donde Fajardo ruvo fundado el Collado, distance siete leguas de la ciudad de Santiago, el dfa ocho de sepciembre del aiio de quinientos y sesenca y ocho pobl6 en el una ciudad, (a) ( Ciudad de Caravalleda) que inti­ tulo nuescra senora de Caravalleda " EL BALNEARIO DE MACUTO El 10 de febrero de 1877, el Presidente Guzman Blanco, se traslad6 con su Comltlva a Macuto, con el prop6sito de inaugurar las obras de este bal· nearlo, que consistia en sus parques, acueductos, calles y banos. El Presidente de la Junta de fomento de aquellas obras, senor E. de Sola, proclam6 al senor General Guzman Blanco generoso bienhechor de Macuto y entre otras cosas, le dijo en su discurso. "Si a los que casi diariamente hemos estado viendo estos adelantos nos parece un sueno la transformacion que se ha operado 1.cuiil no serii la admiraci6n de los que recuerdan a Macuto como era antes y lo ven hoy por primera vez despues que conceblstels la feliz idea de sacarlo del abandono en que yacia y darle tama en el pais como un lugar de decente recreo". Gonzalez Guinan (t. XI. cap. LI.)

-48-


''Te desea mucha felicldad en el nuevo ano". El Dr. Alberto L. Urbaneja dlrlgia la presente po!!t•I desde Macuto a su amigo Roberto Guzman Blanco, 26 Avenlda Victor Hugo, Paris el 8 de diciembre de 1907.

Deede el muelleclto que comunlcaba a los bai'ios se aprecla parte del malec6n,

sombreado de uva de playas y cocoteros. Calle de por medlo estaba el Hotel La Alemanla, del Sr. Viloria y m6s alla la plaza de Las Palomas fundada por el poeta Ancfr•• Mata y la Estacl6n haste donde llegaba el trenclto de la empresa "Matharan".

­49­


Aspecto de le Avenlde El Celbo, Macuto, tel como se halleba en 1927. La postal fue despachada para Hannover ­via Nueva York­ el 15 de octubre dlrlglda • Kammann, Hockerstrasse 46 y la flrman colectlvamente Matilde, Walter, Hilda, Aura Marfa Rlnc6n, Hortensia de Wiiison, Victoria y Alfredo. "El Co)o" era uno de los l)llseos mas plntorescos, tan vlsltados en aquel tlempo como El Play6n o la Hacienda Juan Diaz.

A un coatado aollan llegar loa peacadorea.

­50­


PIU8 Lourdes de Maiquetia, en 1926. Hacia la parte sur se halla la gruta e Imagen "Cristo de Llmplas", en cuyo honor todos los anos a medlados de enero salen peregrinaclones desde la Iglesia de La Pastora, por el antlguo camino de los espal\oles.

del

Entrada de los antiguos baiios de Macuto.

­

51 ­


, ESOUINA DE LAS ANIMAS Tradiciones populares relacionan el nombre de esra esquina con hechos signados por la supersrici6n o el rnisterio. Te6£ilo Ro­ driguez arribuye tal nominaci6n a las consejas que circulaban en las posrrimerias del siglo XIX. Segun esras, los moradores de la vecindad aseguraban escuchar hacia ese sirio rezos en coro del san. ro rosario en las noches oscuras. Dedan que eran las animas. El General Jose Antonio Paez nos habla de las Animas en su aurobiografia. Relaciona esta popular advocaci6n con cierra milagrosa escapada que le salv6 la vida el ano 1813 cuando ha­ bia caido prisionero de Puy en Barinas . Refiere el Caudillo que una noche al escuchar Correa, lu­ garrenienre del sanguinario realista un disparo de fusil en las afueras y salir a verificar la novedad, crey6 ver bajo la luna y al ocro lado del rlo acampar numeroso ejercito. Y, afiade Paez, que al dar Correa el "Alco, quien vive" una voz grave y sonora riposr6 en media del silencio de la noche: ­jla America Libre!, jSoldados de la Muerte! Espancados los realistas con lo que s6lo debi6 ser fruro de la imaginaci6n corrieron a norificar lo aconrecido a su jefe por lo cual este conragiado de inmenso pavor dispuso levanrar el sitio olvidando a los prisioneros. Esa misma noche las fuerzas de Puy emprendieron recirada hacia San Fernando de Apure, rodo lo cual habia permicido a Paez salvar la vida. ( Pags. 39 y 40 aurobiogra­ fia del General Jose Antonio Paez, Vol. I). J

Nada existi6 tan atractivo en cuanto a jardineria se refiere, en la Ciudad de Caracas, como la casa solariega de Los Benitez cuyos balcones rebosaban de orquideas, y la trinitaria de Don Luis Ustariz en la esquina de "la Pelota", en la primera abrian al sol sus petalos embriagl\dos de aromas las rosas de Paez, Alejandria, de Bengala, Perla fina, Geranios, Clavellinas y "No me elvides" ademas de una cclecelen de "Yerbaluisa" que no habia logrado superar el floricultor de "la Viiieta" resldencla del General Paez. Lucas Manzano "Reminiscencias

­52­

Caraqueiias".

.


' Animas a Plaza Lopez, (Foto A. Muller, Caracas, 1920).

­

53­


Fachada con clerto alre g6tico de la antigua Unlversldad Central. Apreclamos en primer piano de la foto ­tomada de este a oeste­ varios cuadros de jardinerla asl como algunos de los decorativos faroles de la epoca guzmancista. Sin apremlos de trafico, el centro hlst6rlco habia sldo remodelado con alamedas y jardines, des­ tlnados al disfrute de los peatones.

Todavla es posible hallar en algunas avenldas de la cludad las mas variadas espe­ cies florales del valle de Caracas, tal como lo refleja este cuadro del pintor Luis Alvarez de Lugo, inspirado en el motivo que ofrece un tipico vendedor a la entrada de la urbanlzacion "La Florida".

­54­


Fuente .­<opla de la exlstente en la plaza de La Concordia en Pari._ y jardines centrales del Palacio Federal, lnaugurado en febrero de 1877.

"Plaza de La Ley" en 1911, al fondo la Ceiba de San Francisco, plantada el ano 1868.

­

55­


JOSE ANTONIO PAEZ Y PEREZ MUJICA Una carta de la viuda del escultor Perez Mujica acerca del monumento a Paez. Una carta de la senora Tatiana de Perez Mujica dirigida con fecha 11 de mayo de 1961 al Cronista de la Ciudad Enrique Bernardo Nunez sieve de aclaraci6n respecto al origen de la es­ tatua de Paez inaugurada por el Presidenre Castro el 2 3 de mayo de 1905 en la Plaza de la Republica. Don Eduardo Blanco para aquella epoca Ministro de Insrruccion pronunci6 el discurso de orden. La honorable viuda del esculror dice al cronista que "la obra fue concebida y realizada por mi esposo, la cual por sus sobresa­ lientes rneritos obruvo el premio en concurso promovido por el Gobierno Nacional en 1903. Recuerda asimismo que era Perez Mujica alumno de la Escuela de Bellas Arres y que "aun adoles­ cence estaba ya dotado de las cualidades que hicieron de el uno de nuestros mas grandes artistas". Sefiala que el premio fue otor­ gado por unanimidad y que la obra obruvo el raro privilegio de que el Dr. Eduardo Blanco autor de "Venezuela Heroica" y ulti­ mo edecan del General Paez quedara tan sorprendido al verla, que afirmara en presencia de varias personas, entre ellas el Dr. Nunez Ponce: ­"Este es el premio, indudablemente este es". Explica luego que la ampliaci6n del bocero y la fundici6n en bronce foe encomendada al senor Eloy Palacios, quien realiz6 su trabajo en Munich". ­"En la Avenida principal, a la lzqulerda y al cruzar para el Puente de Hierro hay un terreno lindlslmo que vale Bs. 5.000. En ml oplnl6n sl Ud. compra esta propledad y nombra una Junta para venderla barata, podria qulzi sacarle la suma invertlda y formaria un hello barrio a la ciudad en uno o dos anos. La fanega de tierra saldra mas o menos a Bs. 1.500 y los terrenos en los cuales estin fabricando casas hoy los compramos a una Compafiia An6nlma que los obtuvo del Tranvla ahora diez afios por Bs. 3.000 la fanegada". Carta de Carlos Zuloaga al Presidente Castro acerca de El Paralso ­19 de mayo de 1901­ publicada en "Boletln del Archlvo Hlst6rico de Miraflores".

­56­


Estatua del General Jose Antonio Paez. Plaza de la Rei>Ubllca.

Casa de la Hacienda a la entrada de Gamboa ­hoy San Bernardino­­ 1910.

­

57­


LA PLAZA BOLIVAR La Escacua Ecuescre del Libercador fue erigida en la Plaza Mayor de Caracas, coraz6n del cencro hisc6rico, el 7 de noviembre de 187 4. Habia sido conf iada su ejecuci6n a una celebre casa de Munich bajo la condici6n de que debia cener "forrnas y propor­ ciones monumentales" segun lo establecia el decreto de l 9 de noviembre de 1872. El bergancin "Thora" en el cual fuera embar­ cada la estatua encall6 frenre a Los Roques, concraciempo que decermin6 poscergar por unos dias de la fecha original previsca para su inauguraci6n, la del 28 de occubre de aquel mismo afio, onomasrico del padre de la Patria. En un foso existence bajo el pedestal hizo deposicar Guz­ man Blanco muescras de codas las monedas que circulaban para la epoca; un ejemplar de cada peri6dico, copia del Acea de la Independencia y una del Decreto firmado por el Presidence auto­ rizando la ejecuci6n de dicha obra. Cierra iniciaciva de la municipalidad de Caracas propo­ niendo en 1825 la erecci6n de una escacua del Libercador en la Plaza de San Jacinto, frence a la Casa Natal, habia quedado sin efecco y solo medio siglo mas carde se hizo posible macerializar can jusco homenaje en bronce al creador de nuesrra nacionalidad. Por espacio de mucho ciempo la Plaza Bolivar fue uno de los cencros sociales mas elegances y concurridos, principalmente los dias feriados cuando se ofrecian conciercos con la Banda Mar­ cial bajo la direcci6n del Maestro Pedro Elias Gutierrez. En el acta te " ... de mayor de Pend6n y

del Cabildo correspondiente al 7 de Julio de 1654 se lee lo algulen­ tiempo lnmemorial a esta parte ha sido costumbre que el alf6rez esta ciudad, la vispera y el dia del dicho Santo Ap6stol saque el Estandarte Real con que se gano ... " Hno. Nectario Maria, Hlstorla de la Conqulsta y Funda­ clon de Caracas. Pig. 117.

­58­


"'&I

Monumento ecuestre del llbertador erlgldo el 7 de novlembre de 1874.

Un detalle del paseo durante la retreta matlnal de la Plaza Bolivar en 1920.

­59­


LLEGA LA LUZ Encre los escudios mas cornpletos que se conocen sobre alumbrado publico, uso y aplicaci6n por primera vez de la elec­ rricidad en Caracas, se hallan los de don Bartolome Lopez de Ceballos y del hisroriador Ram6n Diaz Sanchez. El primero re­ monca sus investigaciones a los distances dias de la colonia, mien­ rras quc cl bi6grafo de Guzman, concreca sus narrativas a la etapa mas cercana de la industrializaci6n. Con motivo de cumplir el 7 de setiernbre de 1965 La Electricidad de Caracas 70 afios de accividades su Directiva dio a conocer una sinresis que nos parece del caso transcribir: ­"El 28 de occubre de 1873, en homenaje al Libertador en el dia de San Simon, refiere el historiador Manuel Landaeca Rosales que en Caracas se hizo uso de varios apararos elecrricos para el alumbrado, dirigidos por el celebre quimico Vicente Mar­ cano". Para la celebraci6n del centenario del nacimienco del Li­ bercador comenz6 a operar en 1883 una pequefia plants electri­ ca movida por un motor de vapor. Era propiedad del senor Carlos G. Palacios y estuvo sicuada 'en las inrnediaciones del Mercado de San Pablo, hoy Plaza Miranda. Se hizo una prueba a la caida de la rarde del 23 de julio y en la noche del 24 fueron ilurnina­ dos con lamparas de arco volcaico el Teacro Guzman Blanco, actual Teatro Municipal, la Calle del Comercio, es decir None 4 y Sur 4, y los Bulevares del Capicolio. Ya en 1881 habia consrruido el senor Henry Lord Boul­ ton una empresa de gas, la cual, posteriorrnenre a los ensayos que dejamos reseriados, se transform6 en la Compafiia del Gas y de la Luz Electrica y puso en funcionamienco una planca de eleccricidad sicuada en Bucare a Puence J unin. Entre los arreglos ­

60­


t.. Plaza Bolivar reclb16 iluminaclon electrica provisional la noche del 7 de noviem· bre de 1874.

-

6f -


para festejar el cencenario del Gran Mariscal de Ayacucho en 1895,

El Cojo Ilastrado anota: "magnlfico alumbrado electrico de las principales plazas y edificios publicos". La misma revista ( 1 ~ eooca), en SU edici6n de 1 Q de enero de 1882, en un Suelto Editorial y bajo el tirulo El Guaire, el gran factor electrico de Caracas, se referia a la Exposici6n de Electricidad, recien inaugurada en Paris, calificaba al siglo XIX El Siglo de la electricidad y terrninaba, aludiendo a la ucilizaci6n de las aguas del Sena como fuente de energia: "Ejecurados los trabajos hidraulicos necesarios para utilizar esra fuerza gratuira, Paris podria alumbrar a infimo precio sus calles y sus habitaciones. "Que sea pronto esta verdad pracrica una verdad cienri­ fica; que lo que es para Paris el Sena, lo es para Caracas el Guaire. "Bendita Providencia! "Y bendira la mano bienhechora que en nuestra querida Patria la convierca en verdad civilizadora". Al comenzar la ultirna decada del siglo se inici6 con gran exito en Alernania, en la ciudad de Frankfurt, la transmisi6n a larga distancia de corrienre alterna, hecho que habia de inspirar al joven ingeniero Ricardo Zuloaga las bases para una tentativa completarnente nueva en Venezuela. La Eleccricidad de Caracas se conscicuy6 oficialmente como empresa el 7 de seciembre de 1895, y el primer convenio para la formaci6n de una compafiia de eleccricidad esta fechado en 2 5 de ocrubre de aquel mismo afio. Son sus promotores Ricardo Zuloaga, Alberto Smith, Jose Antonio Mosquera, hijo y Eduardo Montauban.

­Las famlllas de Caracas llamaban a Luis F. Toro ­Torlto­ y todas lu personalidades que visitaron al pais tueron captadas por Toro: Lindbergh, con su cara de Muchacho, 61 Ministro Knox, que al principio no se dejaba retratar pero a qulen Torito convencl6 y hasta lo tom6 sentado en la "trompe" de la locomotora de La Guaira; los aviadores Costes y Le Brix, el General Pershing". Oscar Yanez "Cosas de Caracas" Pag. 215.

­62­


la Plaza Bolivar era un centro de reunl6n social durante las tres prlmeras d8caclas

del presente slglo.

Evocan nuestros costumbrlstas el hablto de los antlguos caraqueftos de recibir el caftonazo de Al\o Nuevo en la Plaza Bolivar.

­63­


DE LO PINTOBESCO Y TBADICIONAL La ciudad que no vuelve es aquella que recordamos. No podria volver. Es la Caracas de los amaneceres familiares. Alegre por incima. Estarnpada en esas imageries que parecen grabadas en la infancia para cobrar mayor incensidad en la nostalgia, con los anos. Y no es tan distance el espacio que de ella nos separa. No hace mucho tiernpo de las cargas de frutas, leche, pan y car­ b6n, en burros y carretas. La pobreza del pais de enronces hizo austeros a los caraquefios. El arquitecto Gustavo Wallis recordaba hace poco, con sonrience rostro de sorpresa, como en una fotografia tomada por el en la esquina de Veroes ­el afio 42­ aparecen 19 mulas atra­ vesando la calle hacia la Santa Capilla. Entonces la circulaci6n de vehiculos auromotores era escasa. Wallis guarda el tesrirnonio co­ mo un tesoro. Frescas estan las imagenes de los arreos con musica pro­ cedence de burritos campaneros; o las carretadas de malojo en direcci6n a Barcenas, por los empedrados de las calles. En Bar­ cenas habia cocheras. Desde cemprano escuchabase el preg6n de los distribuidores de la leche y el pan que recorrian las calles a caballo. Mas tarde aparecian el amolador y el frutero. En muchas esquinas amanecian adormitados los serenos envueltos en sus rua­ nas. Era la Caracas fresca, risuefia que pervive en algunos lienzos de Brandt, Golding o Monsanto. Se encendian las luces al atardecer. Resaltaba la discre­ ci6n con que las muchachas aventuraban sus rostros derras de las celosias en las vencanas. Los coches y tranvias de lento paso como unicos ejemplares de progreso en aquellos tiempos, en grata armonia con los caches 'o el burrito campanero. Con aquellas estarnpas desaparecieron, rarnbien, en mucho, sefiorio, respeto y buenos modales como caracterfsticos de la ciudad incima que crece en el recuerdo. -64-


Un vendedor de galllnas, lnstalado entre Socledad y Camejo ofrece su mercancia colocada en flla sobre la acera.

La "Cerreta del Carbonero".

­65­


Durante una epoca no muy lejana por _!:lerto la leche era distrlbulda en qultrlnes. Observese en la presente estampa al auriga eubrtendose con un paraguas del Intempestivo chaparr6n.

El valle donde esta poblada la ciudad de Caracas tuvo varias denominaciones "Valle de Gaire" por el rio Galre o Gualre que corre a sur: TOROMAYMA, nombre onomatopeyicc de un pajaro de variedad desconoclda, con el cual se design6 una tribu que inmigr6 con procedencia del litoral norte: "Valle de San Francisco" fue llamado despues, a principlos de febrero del ano 1560, por su deeeubrldor el Teniente Gobernador y Capitan General Don Francisco Fajardo, eligi6 este alll el sitlo que hoy ocupa la capital y lo fij6 como su centro de operaclones. Luis Oramas, Conquista y Colonizaci6n de la Provincia de los Caracas. Pig. 18 •

-Los caballeros se abstendran de dirigir la palabra o de ofrecer espontaneamente obsequios de ninguna especie a las senoras con quienes se encuentren en un festin, con las cuales no tengan amlstad y a quienes no hayan sido previamente presentados. M. A. Carreno (De los festines en General) Pag. 219

­66­


"El frutero", de una foto tomada en 1934 por el Sr. Helmut Neumann. Tramo de la calle Guanabano a Amadores, en La Pastora.

Con su carga de plfias los burritos esperan "filos6ficamente" frente a una pulperia en la esquina de Santa Barbara. De la puerta cuelga un "racimo" de escobas. ts:oto Helmut Neumann).

­67­


huiugurada el 2 de febrero de 1896, la Plaza de Toro• de El Metropolltano vlo deafllar los m6s aplaudldos dlestros de la epoca. A la primera corrlda eslstleron cerca de 4.000 personas. El escrltor Carlos Salas resei\a el acontecimlento y lamenta qua en tan memorable ocasl6n no hublesen podido demostrar sus aptitudes los matadores Manuel Hermosillo y Francisco Jimenez -alias Rebujlno- debldo a la baja calldad del ganado.

Nuevo Clrco de Caracas, construido en terrenos del antlguo matadero de San Mar· tin e lnaugurado el 26 de enero de 1919. Tenia capacldad para 12.000 espectadores.

­68­


EL OBSERVATORIO El Decrero de creaci6n del Observatorio de Cagigal data del 8 de setiembre de 1888. Lleva su nombre en homenaje a la memoria del Coronel de Ingenieros Juan Manuel Cagigal, funda­ dor de la Academia de Matematicas durance el primer Gobierno de Paez, el afio 1830. Consrruido en la Hamada "Colina de Quintana" al oeste de la ciudad, comenz6 a funcionar con equipos rudirnen­ tarios, un pequeno sism6grafo y un telescopio cedido por el Sr. Henry Lord Boulton, quien lo habia adquirido a la Casa Bardou de Paris. Primer Director del Instituto fue el Sr. Mauricio Busca­ lioni, italiano encendido en ciencias astron6micas y meteorologi­ cas, quien desernpefio estas funciones hasta 1894 cuando fue susti­ tuido por el doctor Luis U guero. Al decir del Dr. Rohl "El acerrado nombramienro del distinguido profesor Dr. Luis Uguero, se recordara en los anales del Observatorio, como una rnagna fecha. Fue debido a su entu­ siasmo y consagraci6n a las disciplinas ciennficas, el notable irn­ pulso que le comunic6 el institute tanro a su reorgapizaci6n como a los trabajos astronomicos los que desde el dempo de Buscalioni no se habian vuelto a sefialar". Por viaje del Dr. Ugueto a Europa, fue nombrado Direc­ tor en 19 31 el Dr. Henry Pirner quien logr6 que el gobierno ad­ quiriera nuevos instrurnentos, la construcci6n de orros departamen­ tos y el montaje de un juego de sism6grafos Weiedret, horizontal y vertical. A su regreso al pafs el Dr. Uguero asumi6 nuevamente la Direcci6n hasta su muerte en 1936. Desaparecido Ugueto fue nombrado el Dr. Francisco Jose Duarce. Durance su actuaci6n se publicaron dos anuarios astron6micos correspondientes a los afios ­

69­


1940 y l 941 y se adquirieron nuevos insrrurnenros meteorolo­ gicos. En esa epoca no era posible hacer observaciones astronomi­ cas por falta de instrumental. En 1954, el Gobierno encarg6 al Dr. Rohl de hacer los planes para construir un nuevo y gran Observarorio, eligiendo el del anriguo sitio, con el objeto de estar cerca de la Capital. Este proyecro no ha podido realizarse sino a medias. El instrumental se halla depositado en El Calvario esperando elec­ ci6n de un sitio apropiado. Nadie se explica c6mo fue que no previeron los anciguos direcrores del Institute que algun dia la ciudad habrfa de crecer en cal forma que la luminosidad noctur­ na no perrnitiria realizar observaciones astronomicas. Se ha pen­ sado llevar estos equipos a Siquisique o Merida. La Universidad de Orience ha expresado tarnbien interes en que el telescopic y la Camara Schmidt puedan ser instalados en algun lugar cerca de

Curnana. En el Instiruto funciona el Departarnenro de Sismologia, a cargo del Dr. Gunther Fielder. Fielder se hallaba en julio de 1967 siguiendo un curso en Japon y regres6 despues, llamado por el Gobierno para escudiar lo relativo al sismo que escremeci6 a Caracas a los 4 dias de su fecha cuatricenrenaria, el 29 de julio. Desde agosto de 1958 el Observacorio esra adscrico a la Comandancia General de la Marina. Accualmence su director es el Capitan de Navio Ramiro Perez Luciani quien com6 parce acti­ va en la organizaci6n de los accos conmemoracivos de los 80 aiios del Instiruto. En el Parque del Este funciona el Planerario Hum­ boldt a cargo de Enrique Ginnari. Dicho instituto depende del Observacorio Cagigal y fue conscruido en ese sitio el afio 1956 por iniciaciva del Dr. Eduardo Rohl. Los pianos del edificio fue­ ron realizados por el ingeniero Carlos Guinand.

-Si yendo a caballo vieramos que vamos a encontrarnos con el Viatico tomaremos inmediatamente otra calle; y si no podemos hacerlo, nos desmontaremos y no volveremos a montar hasta que la,procesi6n haya pasado". Urbanidad de Manuel Antonio Carreno. (Del modo de conducirnos en la calle, Pag. 110)

­

70­


EL OBSERVATORIO Dos aconteclmlentos memorables se producen entre 1910y1920. Entre los meses de abrll y mayo, precedldo con lugubres presaglos hlzo su aparlcl6n el famoso Cometa de Halley. El nucleo y cauda podla verse desde media dos de abrll ascender en el horlzonte detras del Avila. Fue espectaculo memorable para los carequenos de la epoca. Camilo Flammarlon desde Juvlssy radiodifundio mensajes al mundo desvlrtuando los rumores de un cataclismo. En Caracas leoncio Martinez hlzo un creyon del astro desde un p6stigo de El Universal cuando el peri6dico se hallaba en Las Gradillas. Otro suceso fue el eclipse total de sol visible el 3 de febrerode 1916. Comenz6alas10y15 de la mariana y su duraci6nfue de casl hora y media. En los anales del Observatorlo puede hallarse una relaclon del suceso. Halley regresa en 1986, pero sin despertar temores. El mundo de hoy se sobrecoge por otros motivos diferentes a los de una colls16n con los astros. El estallido por ejemplo, de una guerra nuclear entre las grandes potencias.

Nocturno del Observatorio

Cagigal, retocado por el plncel Pedro Bargall6.

­

71 ­

maestro

del Profesor


PUENTES DE CARACAS

Puente de Hierro, lnaugurado el 5 de julio'de 1875 por el Presldente Guzm6n Blanco, al extremo sur de la calle Ustariz. Era el primer paso para carruajes que se construia sobre el Gualre. La obra fue ejecutada por el Ing' Luciano Urdaneta, qulen la bautli6 con el nombre de "Puente de la Regeneracl6n". Su prlmltlva estructul'll fue destrulda por una creclente de rio en octubre de 1892.

Puente del Guanabano, al norte de la cludad. Orlglnalmente habra sldo construfdo con tablones. Facilitaba el acceso a S.an Jose del Avila y al Cementerio de los Hijos de Dios. Al fondo, saliente del cerro frente a la Puerta de Caracas. Durante muchos afics ostent6 la triste denominaci6n de "Puente de los Suicldas" Su construcci6n data del 4 de agosto de 1884. Era uno de los mas elevados sobre el cauce del Catuche.

­

72­


Puente Dolores, se abria paso en medlo de un hllera de esbeltos sauces plramlda­ lea, y era una de las vias preferidas por los paseantes que se dirigfan en coche a El Paralso. Hasta 1940 las vegas clrcundantes estaban destinadas al cultivo de forraje.

El "Viaducto" conslderado como una de las "mas atrevidas obras de ingenieria" construida durante la administraci6n del General Joaquin Crespo. Unia El Calvario con Pagiilta, pasando sobre Caiio Amarillo. A la entrada del puente exlstio hasta no hace mucho tlempo un cartelito que decla: "Vehiculos al peso". El Dr. Jose Gil Fortoul califlc6 en "El Pregonero" dicha obra como U"• disparate.

­

73­


"Puente Ayacucho", inaugurado en 1924 con motivo de las fiestas del centenario de la batalla, ganada por el Mariscal Sucre. Comunicaba la populosa parroquia de San Juan con la avenida El Ejercito.

El Puente de Hierro, visto desde el cerro de San Agustin. Su primitiva estructura fue arrastrada por la arrolladora creciente del rio en 1892.

­

74­


Puente 19 de diciembre, inaugurado en 1911. Fue ingeniero constructor de esta obra el doctor Herman Stelling. Su costo incluida una amplia avenida y redoma donde habla sido instalado el monumento a Sucre alcanz6 a Bs. 693.000, segun la memoria de Obras Publicas de aquel afio.

Puente Anauco al este de la Plaza Candelaria. En lmportancia histories y antiguedad le preceden solo los de San Pablo y Carlos Ill, ambos sobre el Caroata. Tenia un abovedado colonial de cierto valor arqultectonico.

­

75 ­


LOS TBANVIAS Nada se sabfa entonces de aglomeraciones o de prisas. Por eso el reemplazo en 1905 de los antiguos tranvias de oaballiros por carros electricos fue una novedad muy celebrada en Caracas. "La Religion" y "El Constirucional" sefi.alan en sendas notas que nues­ tra colectividad se moderniza verriginosamente. Inclusive los peri6dicos Hegan a comparar este servicio publico con el que ya existe en ciudades tan desarrolladas como Londres o Pads.' Poco ciempo despues el cronista Rafael Silva ­Lino Su­ til­ escribiria con coda seriedad en las paginas de El Universal ­1 o de abril de 1909­ una pormenorizada relaci6n del viaje inaugural a bordo de un tranvia electrico desde la Plaza Bolivar al Hospital Vargas. En esce mismo vehiculo sube frente a Cacedral el bachiller Jose Antonio O'Daly, aprovechado alumno de primer aiio de medicina de la U.C.V. Mas alla de Puente Trinidad el mo­ torista quiere hacer gala de la velocidad y aplica "los 7 puntos". Es asi como el tranvia cruza el terraplen recien consrruido y llega a las propias puertas del Hospital. Aquellos vehiculos podian des­ arrollar hasca 25 kph. casi lo mismo que un coche lanzado al galope. La empresa de origen ingles tenia firmado un contrato de 99 afios con el Gobierno para explocaci6n de las ruras urbanas. Segun memoria correspondiente al ejercicio 1911­1912, habia llegado a. movilizar un promedio de 2 5 0 mil pasa jeros por mes, incluidos los de las Iineas de El Valle y Sabana Grande, conside­ radas "exrra­poblados". El precio del pasaje era de Bs. 0,25 con derecho a "correspondencia". Bastaba indicar el lugar de destino, para recibir de manos del coleccor una contrasefia perforada. Te­ nia validez para recambio a otra linea sin cosro adicional. Adernas existia el sisterna de abonos y una carifa especial para escolares. ­

76­


Tranvlaa de Palo Grande y Puente Hierro, en la esqulna de las Gradillas.

Estae16n y talleres de los Tranvfas Elktrlcos a la entrada de San Bernardino 1925.

­77­


Un cronisra de fino ingenio como Juan Jose Churi6n ­­el Bachiller Mungia­ comencaba desde su leida secci6n en "La Esfera" cl cambio que empieza a notar en el espiritu de los caraqueiios. Decia, por ejcmplo, que nadic parecia resignado a sufrir aquellas largas esperas sin irrirarse en los desvios. A titulo anecd6rico ciraba la conversaci6n sostenida cierta vez con el cri­ rico musical Eduardo Feo Calcano acerca de la actuacion del nota­ ble baritone Tiera Ruffo rraido por la empresa Bracale, alla por los clias <le abril de l 923, y su descacada accuaci6n en "Mefisrofe­

les". El tranvia de Puente de Hierro se habia derenido enrre Pei­ nero y Pajaro "al irse" la corriente, receso aprovechado por Chu­ rion y Feo Ca lcafio para un largo inrercarnbio de recuerdos. Los talleres y escaci6n principal de tranvias se hallaban a la entrada de Gamboa o San Bernardino, no lejos de algunas vaqueras y campos aun dedicados a la siembra y cultivo de horta­ lizas. En medio de la espesa arboleda podia divisarse desde alli parte de un viejo torre6n de Quinta Anauco.

Poe espacio de casi medio siglo los carros eleccricos cons­ rituyeron el principal nervio motor del rransito urbano, signos de una vida reposada y seiiorial. Al decir de los abuelos, nada can graro enconces como dedicar una carde a "dar una vuelra en tran­ via por El Paraiso". La desaparici6n de esros vehiculos a mediados de 1947 casi coincide con la cala de las palmeras y jardines que crecian al naciente del Teatro Municipal. El mismo tracror arranca los rieles frence al Majestic. Abajo estan los rescos del gran rnusico y com­ posicor colonial Jose Angel Lamas, autor del Popule Meus, los cuales son recogidos y colocados en una urna. Misreriosamente esca se perdi6 de los deposiros de la Ingenieria Municipal y nunca mas ha sido hallada. No lejos de esce mismo sitio existio hasta la primera rnitad del siglo XIX la Iglesia y Cernenterio de San Pablo, lugares en el cual se yerguen hoy el remozado coliseo y las Torres del Centro Simon Bolivar, simbolos escas ultimas de la bulliciosa ciudad de nuestros dias. ­

78­


ASI LA VIERON ALGUNOS CORRESPONSALES

Nuestras colecciones de peri6dicos han sido siempre fuen­ re de rico material para la invesrigaci6n hist6rica. La mayor parte de la obra de Aristides Rojas o de Landaeta Rosales, por ejemplo, solo podia verse al principio en las paginas arnarillentas de los diarios de la epoca o en folleros recogidos por la Biblioteca Na­ cional. Todavia existe abundance material de alto interes y de diferentes autores publicados en revisras de corta vida a princi­ pios de siglo, no compilados. El repa.so de esras colecciones suele por lo general depararnos graras sorpresas o hallazgos de algun valor Enrre los afios 1911 y 1921 Caracas se vio muy visitada por corresponsales exrranjeros, diplornaticos y hombres de letras, casi rodes como invitados oficiales para asistir a los acres conme­ morativos del primer centenario de la independencia y despues la de la Batalla de Carabobo. Valdria la pena que alguien recogiera a titulo de curiosidad todos aquellos apuntes hechos en relaci6n a la impresi6n que les produce la ciudad. Cada quien hace la narrativa a su manera, pero coinciden en la descripci6n de aspec­ tos comunes. Por ejemplo, el Avila siempre les impresiona por ­

79­


su rnajestad y belleza. Aluden no pocos a la tradicional cordialidad de los caraquefios mencionada antes por el Conde de Segur o De­ pons asf como tarnbien a la distinci6n y buenos modales que hallan en las moradas donde son huespedes o en las recepciones a las cuales ban sido invitados. En aquel riernpo sobresalia en medio de la pobreza, cierro empefio por agradar, como anfitrio­ nes extremando las dotes de hospitalidad. Un periodista ingles nos habla de "que las corres de las Igle­ sias, el Panteon y el Capitolio", son casi las (micas estructuras que se elevan por encima de los tejados de la ciudad. Desde cualquier sitio, podia escucharse con claridad los cuarcos que daba el anti­ guo reloj de Caredral. Cierto corresponsal del "Time" de Londres, invitado en 1921 para asisrir a los acres conrnernorativos de la baralla de Carabobo deda: "Desde lo alto del Calvario se domina la imagen de Caracas, sobre rodo a la cambiante luz de la tarde, cuando la ciudad parece reclinarse sobre la rnontafia cuyas altu­ ras suelen por lo general, estar cubiertas de niebla ... ''. Por su parte Levis Miller, periodista de Nueva York habla tarnbien de la "high Mountain" y se entretiene despues al descri­ bir el "sello espafiol" que halla en portales y tapias, en las calles estrechas y "ventanas voladas". Las casas ­­escribe­­ son de un solo piso y tienen un gran patio interior alrededor del cual estan discribuidos los cuarcos. Refiere que por las cardes las rnucha­ chas buscan ubicaci6n en las ventanas, algunas con celosias mien­ tras que los caballeros ceremoniosos, acuden a la Plaza Bolfvar, donde esta el terminal de codas las lfneas de tranvias ...... "Se parece • VerHlles" dice Alberto Urdanet• •

"El aspecco de la ciudad es risuefio ­juvenil podremos decir, puesco que en su 'mayor parte es de construcci6n posterior al caraclisrno de 1812­ y la vegetaci6n y ternperatura del sitio donde se Ievanta, le dan no el aspecco de una ciudad clasica, sino mas bien el de un gran pueblo de fisonomia alegre; mas tiene de Aranjuez, sitio de recreo, que de Burgos, clasica pacria del Cid Campeador; es la coquera Versalles y no el anecd6tico y mo­ numental viejo Pads; en una palabra: Caracas es mas bonita, Bo­ gota, si la hubierarnos de compararlas, tiene aspecco y mucho me­ jor sabor de ciudad". ­80­


El edlficlo de la Casa Amarllla es uno de los pocos que han sido conservados. A fines del slglo XVII el solar donde esta constru1do fue adquirldo por el Gobernador Diego Martinez de Enciso para destlnarlo a "Carcel Real". En 1810 era el sltio donde se reunia el Ayuntamiento o Cabildo. Desde uno de sus balcones Emparan se dirigi6 al pueblo congregado en la Plaza Mayor, aquella memorable manana del 19 de abril, para preguntar si aun lo querian en el mando. La respuesta fue negativa.

Marcado acento de cludad espanola tenia Caracas a comlenzo de siglo con sus plazas y calles arborizadas, asi como p->r el estilo de sus edificios. La presente postal reproduce una Imagen fiel de la parte norte de la Plaza Bolivar, entre Principal y La Torre.

­

81 ­·


El Teatro Municipal en 1926.

1 eatro

Nacional, inaugurado en 1905. ­82­


Fachada norte del Capitolio Federal, uno de los edlflclos mas vlsltados por los turistas en las prlmeras decadas del presente slglo.

htrati

61ludo d1 V1n1 u1l1 Hort• de IA Pl& t 0. .. , C11!u1

El tranvia de La Pastora en la esquina

­83­

de La Torre.


Plaza Henry Clay, cerca de Santa Teresa. En medlo ·de sus jardlnes el Goblerno erlgl6 el 4 de jullo de 1928, dia de EE.UU., un busto al estadlsta que tanto habla abogado en el Congreso Norteamerlcano a favor del reconoclmento de las nuevas republlcas lndependizadas por Bolivar.

Una de las postales de mayor relieve de la coleeclen. En 1910 fue envlada por correo ordinario de Caracas a Vancouver, CanadA,de donde regreso a Venezuela como una curlosldadclncuen1aanos mas tarde,

-84-


Frontis de "Santa Ines" prlmltiva resldencla del General Joaquin Crespo, mas tarde convertida en oficlnas del Gran Ferrocarrll de Venezuela.

Al comenzar esta centuria Miraflores estaba rodeado de rancherias.

­85­


Aspecto del edlflclo y vista de Caracas, desde el vladucto de Cano Amarillo.

Parte sur del palaclo presldencial segun aspecto que ofrecia en 1931.

­86­


LA ESCUELA MILITAB El 5 de julio de 1910 es la fecha de la inauguraci6n de la Escuela Militar. Pareda una forrificaci6n construida en lo mas alto de una rnesera deshabirada y agreste al oeste del Paseo Independencia. El sirio elegido "por su importance estraregia y clima saludable", dominaba por una parce la ciudad y por la otra el camino de La Guaira. Era en aquella epoca Minisrro de Guerra el General M. V. Castro Zavala e inspector General del Ejercito, el General Felix Galavis. Uno de los primeros alumnos del insri­ tuto, F. J. Osuna Lucena, lleg6 al grado de coronet y a su acuciosidad se debe haber recogido algunos apunces de la activi­ dad inicial del instiruto entre cuyos primeros insrrucrores podfan citarse el Coronel Samuel Mc. Gil y al tenienre Francisco de Paula Valera, oficial y ayudance de planca esre ultimo. Figuran algunos de los "husares del centenario" entre sus primeros alumnos como Miguel Navarro Volcan, Gabriel Reyes Zurneta, Cecilio Sarmien­ to, Carlos Mendoza, Fernando Arisriguera, Jacinto Figarella, Mi­ guel Aguerrevere, Amable Saez Jugo, Jose Anselmi, Pedro· Del­ gado Correa, Julio Casanas Salon, Gregorio Emilio Escamez y otros, quienes un aiio ances de concluir el curso fueron destacados al Cuartel General de Campana del Presidenre G6mez esrablecido en Maracay. En 1914 se efeau6 el aero oficial de graduaci6n al cual guardara incorporados los fundadores Anibal Molina Alme­ nar, Modesto Rodriguez, Esteban Chalbaud Cardona, Felipe Jose Osuna Lucena, Jose Antonio Alvarado, Tulio Jose Matute Fonse­ ca, Juan Antonio Lozada, Fernando Aristigueta Badaraco, Alejan­ dro Fernandez Ortiz, Rafael Andueza, Juan de Dios Celis Pare­ des, Miguel Parra Entrena, Emilio Hernandez U., Francisco Leo­ nardi, Isaias Medina Angarita, Francisco Briceno Casas, Delfin Becerra y Guillermo Fesea Chuecos. ­87 ­


Oesde clerta dlstancla, la Escuela Mllltar lnaugurada el 5 de julio de 1910 parecia una fortlficacion coronando una meseta al oeste de El Calvarlo. Sus alrededores se hallaban deshabltados y habia poca vegetaclon. La Imagen es elocuente.

La revista presentada en el patio central por los cadetes en 1914 consistl6 en los slguientes numeros: 1' ejercicios sin armas; 2' manejo de fusil en sus distintas posiciones aplicados a la gimnasia: 3' evoluclones de la compania, con armas y 4' despJiegue de tiradores, con tlro de fogueo.

­88­


DE LA TRINIDAD AL PANTEON La rorre actual del Panreon, de cincuenta metros de altura fue concluida en 1930, afio cenrenario del fallecirniento del Liber­ rador, Su esrructura es diferenre al edificio reformado por Guzman Blanco, donde orrora se hallaba la antigua Iglesia de la Trinidad. Nuestro gran cronisra, Santiago Key Ayala en breves anotaciones sobre el Panteon, dice que fue bien cscogido cl edificio mismo quc caracreriza el simbolo grandioso porquc su historia propia guarda el aroma del romanricismo de fe y de conscancia. Antes de ser desrinado a Panreon humano, fue rernplo consagrado a la mas alta expresi6n. El edificio del Panreon es la anrigua capilla de la Santisima Trinidad. Con grande acierro se escogio la capilla para cransformarla y dedicarla a su nucvo destine. La copografia del rerreno donde se edif ico, pared a sefialarle cal desrino. La his­ coria, hizo lo dernas. "Bolivar habria de presidir la Asamblea de nuestros mayores grandes hombres y el nombre de Bolivar esta asociado de modo singular al culto de la Trinidad". El 24 de marzo de 1874, diose a conocer el Decrero me­ diante el cual se creaba el Panteon Nacional, declaraci6n que coin­ cidio con la ya celebre y discurida disposicion del Presidente, de excinguir los colegios, convencos y dernas comunidades religiosas de Caracas. Era arzobispo Monsefior Guevara y Lira. Trabajaron en las obras de rcacondicionamienco o conversion del ternplo en panreon enrre ocros los ingenieros Juan Hurtado Manrique, To­ mas Soriano, Julian Churi6n y Roberto Garcia. El edificio, foe inaugurado el 28 de occubre del ano 1875, en ocasion del onomas­ cico del Libertador. Un afio mas tarde, los restos de Simon Boli­ var fueron llevados en solemne procesi6n hasta el lugar que hoy ocupan, desde la Catedral Merropolicana, donde se encontraban en una cripta desde su repatriacion en 1842. ­

89­


Antigua

Iglesia de La Trinidad convertida en Pante6n Nacional por Decreto de Guzman Blanco en 1874.

Aspecto que ofrecia

el Panteen y sus jardines en 1911, lndependencla.

­

90­

centenario

de la


Primera Mlsa oflciada en el Valle de Caracas

La primera misa de que se tenga noticia en Caracas fue oficlada en el lugar que hoy ocupa la iglesla de la Santa Capilla, en la esqulna del mismo nombre. Por ese hecho trascendente en nuestra tradicion cat61ica, el ilustre Papa Pio XI le concedio el titulo de Basilica Menor segun se desprende del breve dictado el 5 de agosto de 1926 por Su Santidad, suscrito por el Secre­ tario de Estado, entonces Cardenal P. Gasparri. (Cronica de Caracas N• 60­61, pag. 236.)

­91

­


EL

ESTE

Por la carretera del Eate y a la aallda de Sabana Grande, el vlajero solla hacer un alto en "Chacalto", limlte del Dlstrlto Federal con el Eatado Miranda. Exlstian algunas posadas y casas de corredor, asl como dos o tres pulperlas. (La presente Imagen fue tomada de un original propledad del Dr. Felix Soublette Saluzzo).

Esquina de Camim~ Nuevo hacia Pagi.iita, segun postal de J. B. Chirinos, envlada desde Caracas a Valera en 1914 a la senora Blanca de Febres Cordero por su esposo. La c:alle estaba sltuada a s61o tres cuadras al oeste de la Plaza Bolivar.

­92­


y

EL

OESTE

Desde el "Vladucto Unl6n", construldo durante la admlnlstracl6n del Presldente General Joaquin Crespo, se aprecla parte de la Avenlda de Cano Amarillo, estacl6n del Ferrocarrll Caracas·Valencla y de la Gualra, asr como la plazoleta frente a Santa Ines. Al fondo se dlvlsa el cerro de Monte·Piedad y edlflclo de la Escuela Milltar al tope "de la antlgua "Colina Quintana". ~ffldo de c11r11e11s G ee: '!/J f"rom C.Jrt1e1111

lncrelble Imagen de la zona de Tlna)ltas y Agua Salud, en el camlno hacla Catla, tal como se hallaba todavla el aiio 1919. La postal de la coleccl6n de Bernardo Rooswaag solo define su perspectlva con la simple leyenda de "Una vista del oeste".

­93­


CATIA Toda la region de Cano Amarillo, Sama Ines y el Paseo El Calvario recibieron a partir de 1894 atencion especial del Pre­ sidente Joaquin Crespo. Adernas de estar aquellos sitios pr6ximos al mas importance Centro ferroviario de la epoca, existian por SUS alrededores importances industrias como aserraderos, alfarerias y empresas de rransportes. Monce­Piedad apenas comenzaba a po­ blarse. En julio de 1911 la colonia sirio­libanesa erigio un busco a Bolivar frente a la plaza adoquinada de la Estacion. Era esra zona ademas un centre econ6mico de incesante actividad. La mayor parte del comercio movilizaba coda su mercanda por via ferrea. Aun se puede recordar el caracrerisrico y penerrante olor que despedian los fardos de cafe y cacao acumulados a la entrada de los almacenes existences en todo el trayecto comprendido desde el Padre Sierra hasca el puence de Cano Amarillo, este ultimo primorosamente ornamenrado por Crespo con escacuillas alego­ ricas de amor y la forcuna y como vigiladas por dos grandes perros de bronce. El "viaducto" llamado originalmente "Union" cornunica­ ba los antiguos bafios de "Sans Souci" en El Calvario con Pagiiita y la primitiva avenida Sucre, la cual conduda a Catia y a las inci­ piences barriadas de Los Flores, Agua· Salud y Las Tinajicas. El desarrollo de la Nueva Caracas por iniciaciva del Banco Obrero en alianza con algunos urbanizadores a parcir de 1928, conscicuy6 uno de los primeros indicios de la creciente expansion de Caracas, tarnbien por el oeste. Los autobuses prolongaron SUS Servicios hasta las primeras 'casas levantadas cerca de la antigua tenerla de los Boccardo, foe cegada la pintoresca laguna y poco a poco empezaron a surgir en los terrenos ociosos o "Ilanuras del Teque" las primeras habitaciones conscruidas para la clase trabajadora. No pas6 mucho ciempo sin que la Direcci6n de Obras Publicas Municipales en su ­prograrna de expansion vial, acome­ tiera la empresa de abrir una pequefia carretera, de pronuncia­ das curvas y pendientes descinada a unir el extrerno oeste de Caria con San Martin, San Juan y la urbanizaci6n El Paraiso. Era como un amago en el despercar urbaniscico de la ciudad. -9'-


Escena pintoresca de la antigua Laguna de Catla, concurrido centro de recreacl6n popular en 1930. Los visitantes con sus trajes domingueros disfrutan de un agradable paseo en bote. Alrededor del pequefio Iago estaban plantados "sauces llorones" y bambues, los cuales daban una nota de frescuea al paseo. (Postal cortesia de Manuel R. Arias).

LA PERICA Jenny de Tallenay en "Recuerdos de Venezuela" y Jose Antonio Calcano en "La Ciudad y su Musica", testimonian como de simple copla regional, la canci6n de la perica la cual fue un exito el siglo pasado con prolongaci6n en el presente, gracias al compositor Italiano Gallignani, que le puso muslce durante su permanencia en Caracas, cuando era presidente Alcantara: Cuando la perica quiere que el perico vaya a misa se levanta muy temprano y le plancha la camisa Ay perica! Ay perica! A Galllgnani se debe en parte, que este tema folkl6rico haya tenldo tantas transformaciones; la ultima se dio hace pocos anos y lleg6 a ser obseslonante: "Yo no me explico como el perico teniendo un hueco debajo del pico pueda comer, no puede ser ... " Marisa Vannini de Gerulewicz "Italia y los ltalianos en la Historia y en la Cultura de Venezuela'', Pag. 144.)

­95

­


PLAZA ESPAIA Y BOULEVARD MACUBO El cranvia de San Jose dejaba la calle real y doblaba hacia el norce al llegar a la esquina de La Romualda pasando frence a la Plaza L6pez y al Boulevard Macuro. Bellos y umbrosos jabillos y una hilera de pomagas conscicuian las especies predominances del pequeno parque, el cual comunicaba adernas con el llamado "Callejon de Manduca". La vida en Caracas cranscurria dencro de un marco de habitual sosiego. De tarde algunos nirios iban a jugar el galgaro malojo en la graderia que daba acceso a la pequeria elevaci6n donde se habia rerigido el monumenco al Descubridor. Aquella pesada quiecud fue alcerada con la visica que a mediados del mes de mayo de 1921 hiciera a Caracas el Infance don Fernando de Baviera, Embajador del Rey de Espana, quien fuera alojado junco con su comiciva en la elegance residencia de don Eloy Anzola. Por can inusicado acontecimiento hubo en Caracas saraos, corridas de cocos y desfiles. Durance su estada, la Gobernaci6n del D. F. quiso dar una dernosrracion de amiscad a la Madre Patria y promulg6 un decreco en el cual eras asentar que aun no se habia dado denominaci6n oficial al Parque conocido con el nombre de "Plaza Lopez", sicuado al oesre del monumenco levan­ cado a Cristobal Colon, precisamence frente a la morada de su Alceza Real el Infante don Fernando Maria de Baviera y Borb6n y de la rnision que le acompafia, venia a Decrecar: Ar'ciculo 19­Denomfnese "Plaza ­Espana" al cirado Par­ que, y erijase en ella un Busco de Miguel de Cervantes Saavedra. Arciculo 29­Un ejemplar de esce Decrero, caligrafiado, sera ofrecido al Serenisimo Infante Don Fernando Maria de Baviera y Borbon, como una especial dernostracion de deferencia a Su Alceza Real. Dado en el Palacio de Gobemacion y Juscicia del Distri­ co Federal y refrendado por el Secrecario de Gobierno, en Caracas. a diez de mayo de mil novecientos veinciuno. En la Caracas de hoy, no existe la Plaza Espana. ­

96­


Escena pintoresca de la antigua Laguna de Catla, concurrido centro de recreaci6n popular en 1930. Los visitantes con sus trajes domingueros disfrutan de un agradable paseo en bote. Alrededor del pequeiio Iago estaban plantados "sauces llorones" y bambaes, los cuales daban una nota de frescura al paseo. (Postal cortesia de Manuel R. Arias).

LA PERICA Jenny de Tallenay en "Recuerdos de Venezuela" y Jose Antonio Calcano en "La Ciudad y su Musica", testimonlan como de simple copla regional, la canci6n de la perica la cual fue un exito el siglo pasado con prolongaci6n en el presente, gracias al compositor Italiano Gallignanl, que le puso musica durante su permanencia en Caracas, cuando era presidente Alcantara: Cuando la perica quiere que el perico vaya a misa se levanta muy temprano y le plancha la camisa Ay perica! Ay perica! A Gallignani se debe en parte, que este tema folkl6rico haya tenldo tantas transformaciones; la ultima se dio hace pocos anos y lleg6 a ser obseslonante: "Vo no me explico como el perico teniendo un hueco debajo del pico pueda comer, no puede ser ... " Marisa Vannini de Gerulewicz "Italia y los ltalianos en la Historia y en la Cultura de Venezuela", Pag. 144.)

­95­


Hist6rica foto de la colecci6n del Dr. Enrique Arevalo y una de las mas expreslvas de las que fueron tomadas con motivo de la visita def Infante don Fernando a Caracas.

­

98­


PllfTOBESCO ATUElfDO DE AID rmEYO En 1918 circulaba en Caracas la rev is ta "Actualidades" fundada y dirigida por Aldo Baroni. La edici6n del 6 de enero de ese afio trae una resefia de los actos que tradicionalmenre cele­ braban con rnotivo del Ano Nuevo. He aqui como describe el cro­ nista la ceremonia que se efecnia en el ala norte del Capitolio: "Bri­ llantisima fue la recepci6n de Ano Nuevo en el Salon Ellptico del Palacio Federal. El cuerpo diplornarico y los altos funcionarios del Estado, asi como los magnates de la Iglesia ­asi dice la reseria­e­ presentaron sus augurios al senor Presidence provisional de la Re­ publics, para el afio que se inicia y el Minisrro de Relaciones lnterio­ res General Ignacio Andrade dio lecrura a una alocuci6n del senor Presidente Provisional al pueblo de Venezuela en la que se alientan deseos de paz duradera y crabajo fecundo para el pals". Hay cuacro paginas con ilustraciones en las cuales pueden verse a los Minisrros de Escado, Generales y Diplornaticos luciendo el aruendo de la epoca. Entre ocros esran el Miniscro de Alemania von Prollius con­ versando con diplomaticos neurrales; al Minisrro de Colombia Sr. Victor M. Londono y al Secretario de la Legaci6n Dr. Jose de la Vega. En ocro angulo los Ministros de Inglacerra Sir Henry Ha­ mond Dawson Beaumont y del Brasil Sr. Barros Pimentel. Tam­ bien vemos a Monsefior Paolo Obbini, Nuncio de Su Santidad y a los Miniscros de Espana y Francia, Vizconde de la Fuente y Jean de Fabre. Aldo Baroni escuvo en Caracas en 1967, con motivo de la celebraci6n del cuatricenrenario. Deseaba pasar unos dias en la ciudad amable que habia conocido. Actualrnente se halla residen­ ciado en Mexico. Apenas lleg6 fue a visicar en El Universal a su amigo el Dr. Luis Te6filo Nunez, con quien hizo memoria de gracos aconcecimiencos arciscicos y literarios de la epoca, compar­ cidos en la causa comun del periodismo. Tuvimos el privilegio de haber asiscido a esca entrevisca cuya resefia fue publicada en los peri6dicos de aquellos dias. Baroni.contempl6 sorprendido la trans­ formaci6n de la ciudad. Y con un gesro de melancolia record6 a aquella Caracas, cuando en las calles se oia el paso de los caminantes. ­

99­


El Presldente Provisional Dr. V. Marquez Bustillos desciende de su coche para aslstir a la recepcl6n de Ano Nuevo (1918) en el Sal6n Eliptico del Palacio Federal.

-

100 -


Los Ministros de lnglaterra Sir Henry Hamond Dawson Beaumont y del Brasil Sr. Barros Pimentel con el atuendo de la epoca, durante la recepclen de Ano Nuevo en el Capitolio Federal, el aflo 1918.

-

101 -


PBIMEBOS CABBITOS POI PUESTO

Los cutlplanes o precursores del "carrito por puesto" solian concentrarse por los alrededores de "Calio Amarillo", "El Capltollo" o la "Plaza de Capuchlnos" a la es· pera de completar su "cupo" de pasajeros y emprender vlaje a su destlno. En la presente foto cortesla de don Angel Pinedo podemos ver uno de estos pintorescos vehiculos estacionado frente a la Plaza Bolivar de Maracay. Del otro lado de la acera una motocicleta con "side-car" •.

Los populares "Carritos por Puesro" ruvieron sus prede­ cesores en aquellos eleganres faecones descapocables de 7 asientos, can comunes en la Hamada "era clasica del auromovilisrno". Segun · informe del ferrocarril ingles dado en 19 3 3 los esfuerzos que realizara la empresa eleccrificando sus vias, fueron concrarrescados por la "cornpetencia ruinosa" de los cuciplanes. Posceriormence se escableci6 la ~mpresa "Quintero Tara­ zona" la cual oficializ6 el servicio por puesto regularizando la salida de sus vehiculos cada hora. Algunos iban hasca Barquisi­ meto y aun hasca San Antonio del Tachira, por la carrecera tras­ andina inaugurada en 1927. --Cuando una senora esta en su ventana y pasa un caballero de su amlstad, tan solo puede dlrigirle una mirada de frente para autorizar su saludo, pues toca siempre al caballero saludar el primero". M. A. Carreno (Reglas Diversas) Pag. 98.

­

102 ­


Un autom6vll "Cadillac" de 7 pasajeros, modelo 1924, propledad del Sr. Miguel Ron, estaclonado entre las esqulnas de Fe y Esperanza en 1924. Observese el rulnoso estado de la calle. (Foto cortesia de Alicia Ron Velutinl).

Estlmulada por la competencia que ya dejaba sentir en su economia el auge del automovlllsmo y la modemteaclcn de la carretera Caracas-La Guaira, la empresa ferroviaria reemplaz6 su antiguo equipo de carbon de piedra, electrific6 las vias e incorpor6 modernos vagones aligerando de paso sus itinerarlos. Todo result6 en vano. En 1937 la compaiiia operaba con grandes perdidas proceso que continu6 acentuandose hasta su total paralizaci6n. El primer tren Caracas-La Guaira corri6 en 1883, aiio- centenario del natalicio del Libertador.

­

103 ­


EL AUTOMOVIL DEL GENERAL

Un lujoso autom6vil Lincoln de 12 cillndros a prueba de balas fue obsequlado a G6mez en 1925. El Gerieral tenia por lo menos media docena de estos vehiculos para su uso personal.

Muy concados eran los aucomocores que circulaban por las calles de Caracas en la decada del veinte al treinca. Esporadi­ camence uno que otro cruzaba las boca­calles haciendo sonar sus "claxons". Los Ministros y altos funcionarios del regimen tenian poderosos "Lincoln" de 8 cilindros con chofer a la puerta de sus despachos. Generalmence circulaban sin placa de idencificaci6n y estaban exencos del pago de impuestos, arbicrario privilegio cri­ ricado en voz baja por la oposici6n. Eran los carros del "famoso leoncito". El mismo presidenre G6mez poseia casi una colecci6n de can afamada marca. Entre otros uno blindado que le habia sido obsequiado por el presidence Herbert Hoover en 1926. Esce her­ moso automovil permaned6 en el Garage de Miraflores aun mu­ chos afios despues de la muerce del diccador. Por una verdadera · casualidad se salvo de los saqueos de diciembre del 35. Posterior­ mence fue desmancelado y vendidas sus piezas en diferences "chi­ veras". ­104­


Rara vez en la ciudad de aquel tiempo se producian "co­ las" y aglomeraciones como las que estamos acostumbrados a ver

ahora, salvo en ocasi6n de excepcionales ceremonias oficiales, en los entierros, bautizos o matrimonios. La presencia, por ejemplo de rres o cuatro automoviles en una calle indicaba que habria cerca alguna recepci6n, un enfermo grave o acaso celebrabase con­ ciliabulo de algunos de los jerarcas del regimen. Asimismo solla verse desfilar diez o doce vehiculos por El Paraiso de tarde cuando el General Gomez venia a pasar breves dias en Caracas procedente de su residencia habitual en Maracay. Enronces salia a la calle un camion cisterna de los Acueductos y procedia a humedecer el piso para que el polvo no produciese irriraci6n al General. Nuestro admirado amigo el profesor Jose Antonio Cal­ cano siempre de amena conversaci6n y autor del interesante libro "La Ciudad y su Musica" al evocar con cierra nostalgia la aldeana quietud de aquellos riempos refiere como desde la Santa Capilla podfa escucharse con coda claridad el trote de los caballos de algun coche que subia de Carmeliras en direcci6n a la Iglesia de Altagracia. Con el escalonado canto de los gallos en la madrugada podfa oirse rambien denrro del perimerro urbano, los cuartos del reloj de Caredral y el prolongado silbato de los trenes que llegaban al arardecer a las esraciones de Quebrada Honda o de Sama Ines. Recuerda asimismo con nosotros el profesor Calcano que uno de los entrerenirnientos infanriles de entonces era el de "colear­ se'' en el eje trasero de las vicrorias, lo cual solia incomodar a los aungas. -Bajandopor la calle Real de Sarria, casl al final, sobre la mano izquierda, hay una quinta que tiene unas matas de mango.en el Jardin. Las he vlsto varias veces, porque es la via habitual que translto cuando me dirijo al centro. No me sorprende su presencia, pero si que esten florecldas nuevamente. Pareceria normal que los arboles florezcan otra vez en primavera, mas esta tan alterado el orden del universo humano,que me asombray emoclona algo tan simple y al mismo tiempo me conmueve, porque compruebo que todavia algu· nas cosas continuan cumpliendo con el eterno rito de vivir plenamente". Ruben Gonzalez, El Universal 23/2/65.

­

105 ­


SIN PBOBLEMAS DE TBANSITO Ni aun al advenir el cambio con Lopez Contreras y Me­ dina Angarica se incremenca en grandes proporciones el transiro automotor en Caracas. Bascaria recordar que en la memoria al Concejo que presenca el Gobernador Diego Nucere Sardi el afio 1942 el numero de vehiculos matriculados no excede a 12 mil. Casi codas las calles ofrecian la posibilidad de circular sin tropiezos. Entre otros Inspectores que cuvieron que enfrencar el crecimienco del transito e hicieron inrentos por regularizarlo cabe mencionar a Rafael Chirinos Lares, Alexis Pierri Ibarra y Rafael Fuentes, prirneros en escudiar los nuevos flechados, trazar rutas de aucobuses, instalar sernaforos y aumentar el numero de vigilan­ ces. El Br. Rafael Lorenzo Fuentes, asombrado en 1956 cornprobo que Caracas renla mas taxis que la populosa ciudad de Nueva York. El nurnero coral de vehiculos que circulan actualmente en el area rnerropolirana es del orden de 250 mil. Hace poco el Dr. Marcel Granier presidente de la Academia Nacional de Medicina alertaba sobre los peligros que entrafia para la salud la contarnina­ ci6n del aire con el mon6xido de carbono expelido por los motores de combustion. Ocro aspecco no menos impresionante es el que se ref iere a las esradisticas de rnortalidad por transito. El afio 1967 perecieron 3.85 7 personas a causa de choques y arrolla­ miencos y hubo un saldo de mas de 70 mil heridos, muchos con lesiones irreversibles que los incapacitan para el crabajo. Alcohol, velocidad e imprudencia son los principales faccores. Durance la Convenci6n Nacional de Traumat6logos celebrada a fines de 1966 en Barcelona, Esrado Anzoaregui, el doctor Alberto Jacir revelo el irnpresionante daco de las victimas de accidentes que agonizaban en las carreteras por falca de oportunos auxilios medicos y pidi6 establecer cencros de emergencia m6viles principalmenre en las carreteras de Orience, que son las que hoy acusan el mayor nurnero de colisiones fatales. . -

106 -


LA PAITEBA IEGBA

La prlmera llnea de autobuses

comenz6 sus actlvidades en 1912. Fue establecida entre Caracas y Petare, habiendo sido uno de sus promotores el Sr. Segundo Jor· dan, en cuyos talleres fue construida la carroceria e instalada en un chasis "D'Dlon Button". Mas tarde el senor Angel Pinedo lmport6 el primer autobus "Federal" obteniendo la eonceslon Cano Amarillo­Catia. ­192S­ Dicho colectivo fue bauti· zado por. el pueblo con el remoquete de "La Pantera Negra". En la foto vemos esta­ clonado el autobus del senor Pinedo, cerca de la antlgua alcabala de Blandin.

Despues de Estados Unidos y Canada, Venezuela es el tercer pals de America con mas elevado Indice de mortalidad por accidentes de transiro, segun daro revelado por el Ministro de Comunicaciones Dr. Hector Santaella en su informe al Congreso el afio 1966. "­Es desde 1936 cuando comienza a acelerarse el lncremento de la poblaclon del area metropolitana, tanto por la via demografica, como por la migratorla. La fasclnacl6n que el campesino siente por la ciudad debi6 inten­ sificarse por el cese de las limitaciones hast.a entonces vigentes, el saqueo y la destrucclon de numerosas propiedades rurales, la apertura de obras publi·. cas y la sltuaci6n general entonces creada. La impresi6n de que el nlvel de vida urbana supera al agrario siempre ha sido muy fuerte, aunque dicha Idea se desvanece si se examinan con frialdad los hechos". B. Llovera LI. "El Exodo Rural en Venezuela" Ediciones del Cuatricentenario de Caracas. Pag. 15.

­

107 ­


'

Oetalle de la Avenlda San Martin. Entonces lo que impresionaba mas al visitante era la soledad de Caracas. Hasta 1930 casi no se habia modlficado el aspecto urbanistico que conservaba desde el siglo XIX. Observese a un grupo de chlquillos alborozados en el viejo Ford estacionado frente a la casa del Sr. Luis Suarez Borges, sitlo que hoy corresponde al industrializado sector de Los Molinos y La Ouebradita.

Un llamativo Hudson propiedad de la familta Gathmann estacionado de Bolsa a Mercaderes el ano 1926.

-

108 -


LOS CAOBOS

El paseo o bosque de Los Caobos era ocaslonalmente vlsltado los domlngos. Solo contaba con un rustlco sendero de este a oeste por el cuaJ se aventuraban los automovilistas que se dirigian a Sabana Grande evitando el rodeo por Venus y Ouebrada Honda. En la fotografia el joven Juan Bautista Arlsmendi en 1927. Su automovil es un "Nash" 6 cilindros.

-109

-


Solo en las ceremonias oficiales, matrimonios y bautizos o en clertos entlerros de categoria, se producia una concentraci6n de carruajes como en la presente estampa, la cual nos permite apreciar un cortejo funebre saliendo de Santa Ines, encabezado por una carroza "de prlmera" tirada por caballos vestidos con negros crespones.

-

·110 -


Se fijaron nuevas rutas de autobuses como esta de "Paralsc-San Agustin". Es un "Diamond T" de 28 pasajeros cruzando la esqulna de Dolores. Al fondo los cha· guaramos del Cementerio de los Alemanes, todavia existente en 1942.

Confiados los carreteros podlan avanzar por en medio de las estrechas calles. Una disposici6n promulgada en 1936 no permitia a los conductores de estos vehteulos lanzar los caballos al galope dentro del poblado. (Pintoresca foto cortesia de

Anibal Dao).

-

111 -


EL GRAN FEBBOCABBIL El primer cren Caracas­Valencia corri6 el 1 o de febrero de 1894. Tenia esca lfnea una excensi6n de 17 6 kilornerros, 86 nine­ les y 212 puences. Unia al Distrito Federal con tres importances Escados Centrales, los de Miranda, Aragua y Carabobo. Aquel siscema venia a dar un impulso renovador a los medios tradiciona­ les de transporte como eran las diligencias y caballerfas, incrernen­ cando de paso el incercambio de pasajeros y carga enrre Caracas } pueblos incermedios. Durance el primer ejercicio la empresa ale­ mana habia vendido 194.232 pasajes. Encre Caracas y Valencia corrian dos rrenes diarios los cuales generalmence se cruzaban en la escaci6n de La Victoria. La rnaquina movida a carb6n de piedra podia arrascrar hasta catorce vagones. Entre las mas famosas loco­ mocoras se recuerdan aquellas que llevaban los nombres de "C.On­ dor" y "La Gavilan", Ismael Pereira Alvarez, en un reportaje escrico para "El Noticiero", narra algunas de las peripecias del viaje inaugural. Entre los invicados figuraban J. M. Soriano, director de "El Pro­ greso", Arturo Diez del "Re lampago", Arrivillaga Gallegos, cro­ nista de "El Siglo", Jesus Suarez, redactor jefe de "El Tiernpo" y Forcul Hurtado, director de "El Diario de Caracas". En el mismo vag6n se hallan encre otros pasajeros el Dr. Jorge Never, el Gene­ ral Venancio Pulgar y el Dr. Pedro Ezequiel Rojas, Miniscro del Exterior. Los vagones estaban docados de suncuosas butacas y lucian bella decoraci6n interior. A la caida de la rarde el ferrocarril llega a Valencia, donde el pueblo lo recibe con musica y repique de las campanas. Pereira Alvarez alude al encusiasmo y alborozo popular que habia obser­ vado en las escaciones incermedias, AnrfmanorLos Teques, Tejerias, Cagua y Maracay. Pero nada tan jubiloso y arrebacador ­dice­­ como el recibimienco que les da Valencia. -

tt2 -


Desde lo alto del vladucto, la Estacl6n del Ferrocarrll. El escrltor Diaz S6nchez, autor de una blografia de Crespo, dice que el nombre de "Caf\o Amarillo" fue puesto por el caudlllo al sector en recuerdo a una batalla ganada por la Revolucl6n Legallsta en los Llanos de Apure.

El tren cruza un puente sobre el Cabriales, Valencia.

­

1t3 ­


En su narrativa abunda en los mas minimos detalles. No escapa el de las modas que observa en damas y caballeros, aquellos que a su lado van en los coches de primera clase. Su cr6nica es rica en ese estilo, que los franceses Haman "Le perit histoire" tan bien cultivada por Lenorre, cuando describe la vida en la corce de Luis XVI. Dice por ejemplo Pereira Alvarez: "To­ dos los pasajeros descendieron del tren y paseaban por los alrededo­ res de la estacion, Enrre ellos iban la condesa de Kleisc, la senora Muller, esposa del Consul Aleman en Caracas y la senora Schi­ ricke, esposa de uno de los directores del Ferrocarril. La Condesa lucia un traje de taferan lila, con anchos pliegues vercicales; la senora Muller tenia un tra je de muselina de seda color ladrillo y la de Schiricke un vesrido de seda lila con rayas blancas pareadas, coleto de merino y esclavina. Tan porrnenorizada y cuidadosa es la descripci6n que Pereira Alvarez consigna, hasta la impresi6n que le producen algunos caballeros que ha visro de casaca y som­ brero de copa, ­lo cual dice­ no siempre es aconsejable bajo aquel calor canicular o expuescos a cualquier percance. La casa­ ca ­concluye diciendo­ es aconsejable mas bien para los acres de la tarde o de la noche que no para un viaje de semejance natu­ raleza, en el que se va tan expuesro a recibir el hollin de la loco­ morora y el polvo de los caminos. Esta Hnea ferrea contribuy6 a impulsar el intercambio econ6mico entre los Valles de Aragua y el Distrito Federal estimu­ lando la apertura de cencrales azucareros, alfarerias y ocras Indus­ trias. Hasta no hace muches anos el viejo cren cumpHa punnal­ mence sus itineraries. Expropiado a rnediados del afio 1943, pas6 a manos del Estado. Es aqul cuando definitivamente co· mienza a decliner. Durante los ulelmos quinquenios el Gobierno no ha demostrado el menor interes en planes ferroviarios de suerre que la Hnea halla accualmence desmantelada. De la pincoresca estaci6n de Los Teques no queda hoy por ejem­ plo el menor vestigio habiendo sido tronchados los pinos, sama· nes y jabillos que otrora constitufan encanco de aquel paraje y contribufan con su fronda a mantener la frescura del clima. La

se

­

114 ­


\

Ill

I

Jll'/'.114 \ •

Iu

't

I

I

\

I

I

1

1

\

n• ~ l• J;i

Gren Ferrocarril de Venezuela, Estecl6n de Antimano.

Laa AdJunt11.

­

115 ­

1


Estacl6n de Cagua.

inregridad del mismo Parque Knopp se halla acrualmente amena­ zada habiendo sido infructuosas todas las gesriones emprendidas para evitar su total ruina y destruccion. Por lo que respecca a los equipos ferroviarios debe~os solo a la gesti6n del Ingeniero Antonio Agostini, Director del Parque del Esre, y enrusiasta del "Museo del Transporte", el hecho de haber podido salvar siquiera una locornorora, dos o tres vagones, de los primeros puestos en servicio por los alemanes del aiio .. 94 ''.

Cuando los calores de mayo comienzan a resecar las hojarascas sobre el agua estancada y de las vegas emerge el vaho tiblo, poderoso y fecundo de la estacien, en lo alto de los mangos que durante el afio se vlsten de un verdor acerrimo, maduran los primeros frutos entre el racimo copioso, como un lampo de oro o aislados, rojes, escondidos en la oquedad del ramaje rotos por el festin de los "azulejos", destilando lentas mieles amarlllas. En todo junio los arboles no parecen tener hojas con que ocultar la cosecha que les agobia desde los capos hasta las gruesas bifurcaciones del tronco.

J. R. Pocaterra, Cuentos Grotescos. Pag. 224.

­

116 ­


LOS PUEBLOS VECINOS

"Plaza y calle real de Antimono", estampa del aiio 1915. Apre::iamos en primer piano un grupo de "temporadistas". Entre estos, segun testimonio de la senora Matilde Perez Matos de Alcock, se hallan los sefiores Manuel F. Herrera, Roberto Tejera, Oscar Zuloaga, Henrique Perez Matos y Ernesto Paris haciendo compafiia a bellas muchachas de la epoca. la pintoresca Imagen cuyo original esta en blanco y negro, fue coloreada por el celebrado artista Luis Alvarez de Lugo, y sirve de magnifico pretexto para evocar en cstas paginas la sencillez y familiaridad de las costumbres de la epoca.

a

Desde los dias de Guzman Blanco, Ancimano era uno de los sitios mas frecuencados como lugar de recreo de los caraqueflos habiendo sido construidas en las inmediaciones, hermosas casas de campo, entre estas la del propio Presidence, y donde SU bi6grafo Ramon Diaz Sanchez sugiri6 hace poco instalar un museo de la epoca. Refieren los historiadores que el "Ilustre Americana" quiso hacer de esta modesta poblaci6n lo que Luis XIV hizo en Francia con Versalles. De carde los veraneances solian acudir a la pequefia esra­ ci6n del Ferrocarril a recibir o despedir familiares. Hermosos bucares y jabillos daban con su espeso follaje un signo de extra­ ordinaria belleza y romanticismo a la empedrada calle, la cual en Iinea recca llegaba hasca la graderia de la Iglesia Parroquial. -

117 -


LOS TEQUES Los viajeros que se dirigian en automovil a los Valles de Aragua tenian que atravesar forzosamence la calle Hamada del "llano de Miquilen" en la vecina poblaci6n de Los Teques, capi­ tal del Estado Miranda, y sicio muy elogiado por su clima prome­ dio de 1 7 grados cenrigrados durance casi todo el afio. Con escasos 28 mil habiranres, Los Teques era una pincoresca aldea en la segunda decada del presence siglo, la mayor parce de cuyas calles esraban entonces sembradas de hermosos apamates, caobos y cas­ tafios. Por afiadidura, Los ingenieros constructores del Ferrocarril habian desarrollado parques y alamedas en las inmediaciones de la estacion, plancando preferencemence pines, eucaliptus y caobos, todo lo cual concribuia a mancener junco con la belleza estetica y el fresco clima de rnontafia, la atracci6n del turisrno. Los fines de semana mucha genre de la capital iba a pasear a Los Teques. Especial celebridad alcanz6 por aquel ciempo el Liceo San Jose, regentado por el benemerito educador J. J. Arocha y donde cur­ saban esrudios j6venes procedences de diferenres sicios de Vene­ zuela. Encre orros incernos del instituto mencionados en cua­ dro de honor que en 1918 publica la revista "Acrualidades" que dirigia en Caracas Aldo Baroni, figuran los nombres de Gustavo Risquez, Jesus Toledo Neri, Rolando Curiel, Pedro M. Iturbe, Ricardo Montilla, juan Branger, Rafael Velasco, Miguel A. Ferro, Manuel A. Pulido Mendez, M. Rojas Marquez, Jose Marfa Sorel­ do, Carlos Forcoul Saavedra, Julio de Armas y Mario Aurelio Ro­ mero. No lejos de Los Teques se hallaba el pinroresco paseo "El Encanto" muy concurrido los fines de semana. La empresa del Gran Ferrocarril de Venezuela realizaba excursiones especiales a esre sirio los domingos poniendo un rren a la disposici6n de los visitantes y el cual salia de Caracas a las 7 a.m. El Dr Gustavo Knopp amance de la naturaleza habia arborizado mediante cuida­ dosa clasificaci6n de especies una exrensa region situada al naciente -

118

-


Calle del Llano de Mlqullen, de una postal 1911.

de la Estacion. En 1920 constituia este Parque uno de los parajes mas visitados de los ternporadistas. A la entrada existe hoy un busto erigido en homenaje a la memoria del disringuido ingeniero y conservacionisca alernan. Es lastirna que las invasiones y acci6n destruccora de los ultimas anos hubiesen alcanzado la inregridad fisica de tan hermoso lugar. En 1968 bajo el pretexto de la "rernodelacion" de Los Teques cayeron innecesariarnenre anosos arboles, algunos mas que ocrogenarios. Hay quienes en Venezuela piensan todavia que la renova­ ci6n implica a la vez despiadada descrucci6n de la nacuraleza.

-Desde el momento que en una discusl6n observemos que nueatro ad· versario echa manos de sofismas, Interpret& torcldamente nuestros conceptos, o bien empieza a perder la calma y a exaltarse, abandonemosdecldida· mente la cuestl6n por medio de palabras suaves y corteses". Manual de Urbanidadde M. A. Carref.o (de los Temasde Conversacl6n) pagina 129.

-

119 -


EL PASEO

El vis • vis de 4 aslentos era uno de los coches de paseo mas eleg•ntes utllizaoos en la Caracas de los anos velnte para la celebracion de bodas o para aslstlr a "picnics" en las haciendas de los alrededotes. Este carruaje ocupado por lindas muchachas es propiedad det Sr. Eugenio Mendoza y ha sido donado al Museo del Transporte. La foto es de Julio Mesutti tomada en los predios de la hacienda de Manuel Diaz Rodriguez cerca de los Dos Caminos. hoy convertido en Parque del Este. La creacl6n en Caracas · del lnstituto fue decretada oficlalmente en 1963. Los pianos del proyecto ejecutados por el arquitecto Gustavo ~allis estan concluldos desde 1966, pero su ejecucion ha venido slendo lnexplicablemente aplazada. Ultima· mente el lngenlero Antonio Agostini ha tornado la feliz iniciativa de trasladar parte del antiguo material ferroviario a la zona 10 del MOP, area de galpones o terreno elegldo de primer lntento para materiallzar algun dia tan interesante proyecto. Ademis de este carruaje, una dillgencla de mediados del siglo XVIII, dos victorias y un quitrin, asi como una silla de mano, debidamente restaurados, amen de diferen­ tes vehiculos que han sldo ofrecidos en donacion por el mismo seiior Mendoza y por otros ciudadanos animados de sano espiritu p(iblico y con amor y res~o por las tradiciones, estan destinados a enriquecer el patrimonio de la lnstitucion. Por iniciatlva del Dr. Enrique Tejera Paris se halla en vias de constitulrse la empresa "Ferrocarril Hist6rico de El Encanto", sin fines de lucre, en el unico tramo que pudo salvarse de la antigua linea Caracas­Valencia.

­

120­


EFEllEBIDES

Todos los anos el 5 de julio, una de nuestras mas importantes efemerldes con la del 19 de abril, el Goblemo mandaba a tender la trope unlfonnada de gala frente al Salon Eliptico. en el ala norte del Capltollo. Poco despues de las 10 de la manana hacia acto de presencla el Presidente y sus Minlstros. Bajo los acordes del Himno Nacional se procedia a la tradiclonal ceremonla de la aperture del arc. donde se halla depositado el hlstorlco documento y luego se retiraba el jefe de est.do y su comitlva. El pueblo contemplaba a distancia la ceremonia del Dia de la lndepen­ dencia en, una cludad donde la vida transcurria, sin espectacularidad ni prise.

La topografia del Valle de Caracas propiamente dicho y presclndlendo por el

momento de los valles afluenciales, depende de un hundimiento tectonlco cuyo relleno parcial se realize> en el correr de milenios debido a la aportacl6n de materiales por parte de las diversas corrientes que se originaban en las elev• clones que rodeaban la presion teetenlea. Es indudable que El Guaire fue el agente principal en este proceso de sedimentacion; su acci6n se complemen­ taba con la de otras corrientes que le afluian dentro del valle. , M. Aurelio Vila, Area Metropolitana de Caracas. Pig. 18

Esta era una cludad, con un monte y un valle. Hubo quien dijera que el monte poseia virtudes magicas. Bastaba mirarlo para que se realizaran los deseos. Angel lnsausti, El Valle, La Ciudad y El Monte.

­

121 ­


PASEO IHDEPENDENCIA (EL CALVARIO) CAR"CAS

Una espesa vegetacl6n cubrfa el plntoresco Paseo lndependencla. Observese en primer termlno la pequei\a torre donde estaban los antlguos baiios piibllcos de "Sans Soucl".

Sector de "Monte·Pledad" tal como podfa verse en 1919.

­

122 ­


Por muchos anos el Paseo lndependencla desarrollado por los presldentes Guzmlln Blanco y Joaquin Crespo al oeste de la ciudad, constltuy6 uno de los sltlos recreaclonales mas visltados. Vista parclal tal como se hallaba en 1919.

La obra central existente en El Calvario era sin duda el Acueducto construido para una ciudad de 80.000 habitantes, iniciativa calificada como "de las mas senaladas obras de progreso" cumplidas por el "llustre Amerlcano". No lejos del inmenso estanque cuya capacidad alcanzaba para las necesidades urbanas, de entonces, exlstia la famosa redoma, especie de helicoide de la epoca, y en cuyo centro, aduladores de Guzman Blanco habian hecho levantar un monumento en vida que el pueblo bautiz6 con el remoquete de "Manganz6n".

­

123 ­


LOS ABCARGELES DE LA IGLESIA DE SAR JOSE La Iglesia Parroquial de San Jose foe construida, en ocho meses, por cuenca del Gobierno Nacional que presidia el Doctor Juan Pablo Rojas Paul. Los trabajos se iniciaron en la Sabana de Narauli el 5 de febrero de 1889 y concluyeron el 28 de octubre del mismo afio. la bendici6n por el Arzobispo Crispulo Uzcategui y la inauguraci6n por el Presidence Rojas Paul foe el 8 de noviem­ bre siguience. La obra cosc6 Bs. 419.449,40, incluidas imageries, campanas, ornamencos, etc. pero no el 6rgano. Su primer Parroco fue un ahijado y parience politico de Rojas Paul, el joven Pbro. Jose Maria Fortoulr. Segun refiere el Padre Juan Francisco Hernandez "el primer baucismo fue el 1 o de diciembre de aquel mismo afio siendo padrinos el Presidence de la Republica y su esposa dona Pepa".

La parroquia eclesiasrica fue erigida el 19 de octubre de 1819 por decreto del Arzobispo Crispulo Uzcategui y la Civil por decrero presidencial del 16 del mismo mes que figura en el N<.> 4.771 de la Gacera Oficial de los Esrados Unidos de Venezuela. En la porcada de "El Cojo Ilustrado" (N<? 52, 15 de febrero de 1894) hay una focografia de la Iglesia de San Jose en la cual se ven las calles de tierra y dos irnagenes de bronce rema­ tando las corres. Escas imagenes eran las de San Rafael y San Gabriel. La del otro Arcangel, San Miguel, remacaba el froncis. Por cierto que las rres estatuas fueron fulminadas por un rayo a principios de siglo, durance una rernpestad desatada sobre Caracas precisamence un dia de San Francisco. El Padre Hernandez dice que no es cierco que fueran derribadas por el terrernoto de 1900. "Ni en ese ni en el de 1967 subray6 el Parroco, la Iglesia de San Jose sufri6 mayores danos". -

124 -


Iglesia de San Jose, Caracas -

1910

­oOo­­ El reloj de la rorre Oeste estaba en Catedral y era el que habia susriruidc Guzman Blanco. Es el reloj publico mas antiguo de la ciudad de Caracas y sigue funcionando hoy perfecrarnente. Fue conscruido en 1844 en Liverpool por James Condlifr. Y sus tres magniflcas campanas fundidas en Londres ese mismo afio por C. & G. Mears Founders. Desde 1889 los Parrocos han sido: Jose Maria Fortoult ( 13 anos), Gustavo Eduardo Wanloxcen, Luis A. Yumar, Jesus Maria Acuna, su hermano Edmundo Evaristo Montenegro, Luis E. Mendoza ( 11 afios), Marcos Sergio Godoy que fue luego Obis­ po de Maracaibo, Manuel Monteagudo, Manuel Antonio Lopez, Andres del Carmen Vargas, Reinaldo Rivero. ( 22 afios ), Luis Castillo Toro y Juan Francisco Hernandez. -

125 -


CANDELARIA Y EL CAPITAN JUAN FBANCISCO DE LEON La Iglesia y Plaza de la Candelaria evocan el signo de aque­ llos: emigrados de las Islas Canarias que vinieron a establecerse en Caracas a mediados del siglo XVII y Jlegaron a ser colonia nume­ rosa y emprendedora. Las mas antiguas referencias sefialan que los islefios habitaban al excremo Este no lejos de la Alcabala, dedica­ dos en su mayoria al arresanado y al cultivo de la tierra. Fue pre­ cisamente de aquellos inrnigrantes que parci6 la idea de erigir un Templo alli bajo la advocaci6n de la Virgen de la Candelaria. Segun narraci6n del historiador Landaeta Rosales entre los vecinos que contribuyeron a la iniciativa cabe mencionar los nombres de: Blas Martin Dorta de la Cruz, Luis Gonzalez de Me­ dina, Lucas Hernandez, Jose Yanez de Barrios, Alvaro Hernan­ dez, Gregorio Hernandez y Trujillo, Francisco Diaz Vetancourt, Jose de Acevedo, Francisco Rodriguez de Figueroa, Lucas Gonza­ lez Mendez, Salvador Francisco Suarez, Melchor Hernandez, Gre­ gorio Alonzo Navarrete, Juan Borges Mendez, Francisco Rodri­ guez del Pino y el Capitan Antonio Yanez Fajardo. El 17 de mayo de 1772, Don Mariano Marti, Obispo de Caracas visic6 el Templo. Entre otras cosas dice el Prelado en sus memorias recogidas por Mons. Nicolas E. Navarro: "La fundaci6n de esca Iglesia fue hecha el afio de 1708 y cosceada por varies sujecos, naturales de las Islas Canarias, que escaban avecindados en esca ciudad, los cuales con motivo de haber trafdo desde alla una imagen de Nuest.ra Sefiora de la Candelaria, determinaron edificarle dicha Iglesia, para lo cual se Ies concedi6 por cl Cabildo secular un pcdazo de tierra y las correspondientes licencias por el llustrlsimo set\or Obispo de esta Di6cesis y por el set\or Gobernador y Capit•n General de esra Provincia; y des· de luego que se concluy6 una parte de la fibrica en que pod!a

­111­


Fachada de la Iglesia y Plaza de Candelaria, 1905.

Pina dt C1nd1t1rl1 ­ l1t1tu1 dtl Otntrll Mon1g11, -HY-


1 celebrarse misa, se coloc6 la referida imagen, llevandose en solern­ ne procesi6n el dia 14 de diciembre del mismo ano . En el afio de 1750 fue erigida en parroquia distinta de la Cacedral, con todas las prerrogacivas correspondiences, por el Iluscrisimo senor Don Manuel Machado y Luna, en virtud de Real Cedula de 2 5 de agosco del cicado afio de 5 0 y cuya erecci6n se aprobo por otra Real Cedula de 8 de ocrubre de 1752, que se ha­ lla colocada al folio 234 del libro 4 de Reales Cedulas".

~ I I

d

ACERCA OE LA CASA DE JUAN FRANCISCO DE LEON El nombre de la Candelaria esra inevicablemcnce asocia­ do a un hecho hisc6rico de significaci6n ocurrido en Caracas a mediados del siglo XVIII. Nos referimos al alzamienco de Juan Francisco de Leon, Alcalde de Panaquire, quien al frence de 8.000 hombres entra a la capital en 17 49 encabezando una procesca contra la Compa­ fiia Guipuzcoana. Con motive de este acontecimiento y de las represalias comadas mas tarde por los realistas, el notable invescigador de nuestra historia Pedro Grases en "Nuevos Temas de Bibliografia y culrura Venezolanas" ­publicaciones del Rectorado de la Univer­ sidad de los Andes, marzo 1968­, publica los siguiences documen­ tos poco conocidos relacivos a la demolici6n de cierta afrencosa columna que aun existia frente a la Plaza de Candelaria en los dias subsiguiences a la declaraci6n de la Independencia.

I

I

­" Acostumbrados a la vtda unlforme y dom6stlca, temen los caNqUefios las fatlgas y las mutaclones r6pldas de temperatura. Podrra declrse que allr no se vive para gozar de la vlda, slno unlcamente para prolongarla ". Humboldt, "Primera Ascension a la Silla de Caracas" Pjg. 12.

-"Una de las curlosidades de la capital venezolana es el alto pico, fre­ cuentemente menclonado en este relato, al que llaman "La Silla de Caracas", de la que Humboldt nos dejo una interesante informaclon". De "Relacl6n de un viaje a Venezuela, Nueva Granada y Ecuador", por el Consejero Usboa.

-

128 -

I


Don Enrique Bernardo Nunez en su excelente estudio "Juan Francisco de Leon, o el levantamiento contra la C.Ompaiiia Guipuzcoana", explica en el Capirulo V, incitulado "Lacasa arra­ sada" el casrigo a que fue somecido el hogar del jefe de la prores­ ta de 1749 concra el monopolio de la Compafiia Guipuzcoana de Caracas. La casa fue demolida y sembrada de sal. En el solar se

levanco una columna, como recuerdo del casrigo, con la siguienre inscripcion: "Esta es la juscicia del Rey nuescro senor mandada a hacer por el Exmo. senor don Phe. Ricardos The. General de los Exercs. de Su Majestad su Govr. y Capn. General desca Prova. de Caracas con Francisco Leon, amo de esca casa por perrinaz, rebelde y craidor a la Real Corona y por ello reo: Que se derribe y siembre de sal pa. perpecua memoria su infa".

­o­0­­o­ Proclamada la lndependencia el 5 de julio de 1811, los parriotas se apresuraron a borrar el testimonio de ignominia irn­ puesto al recuerdo de Juan Francisco de Leon. El 2 de setiembre de 1811, Rodulfo Vasallo, dipurado de Obras Publicas, solicit6 del Poder Ejecutivo la pertinence facultad para proceder al derribo y cancelacion del signo infamante. El Poder Ejecutivo lo autorizo por decrero de 14 de seciembre, que corre inserto en la Gazeta de Caracas, del 20 del mismo mes. El 1 g de octubre siguience, Rodulfo Vasallo comunicaba al secretario de Gracia y· Justicia el cumplimienro de dicha cornision. La decision del Poder Ejecutivo fue publicada por Fran­ cisco Javier Yanes en su Compendio de la Historia de Venezuela y por Aristides Rojas en sus Origenes de la reuolucion uenezolana; no asl el segundo documento que se inserc6 en la Gazeta de Caracas de 15 de octubre de 1811. Creo util publicarlos ambos, pues conscituyen un daro de interes en los anales de la hiscoria nacional. ­

129 ­


He aqui los documencos: I DECRETO D. Rodulfo Vasallo, Diputado Director de Obras Publicas en esta capital, por representacion de 2 del que rige soliciro facultad del Supremo Foder Ejecutivo, para demoler con coda solemnidad el poste de ignominia que desde mediados del siglo pr6ximo pasado hizo levancar el sistema de opresi6n y cirania en un solar que esra frence 'al cemplo de Nuestra Senora de Can­ delaria, y en donde tenia su casa de habicaci6n el rnagnanimo Juan Francisco de Leon, para rnanchar inicuamence la memoria de este, como caudillo de los valerosos varones, que en aquel enconces pre­ tendieron sacudir el duro yugo mercancil, con que la avaricia y despotismo de los Reyes de Espana escancaron el comercio de escas Provincias, por medio de la escafadora Compafiia Guipuzcoana, cuyos privilegios exclusivos hicieron gemir a los venezolanos por mas de cuarenca afios; y S. A. penetrado de estos mismos senti­ mienros accedi6 a la referida solicicud, mandando se ponga en la Gazeca para noticia del publico; en inceligencia de que dicho solar queda habil, para que los dignos herederos del heroe Le6n, o la persona a quien corresponda en dominio y propiedad usen de el a SU arbirrio. II Cumpliendo con la orden que V. S. se sirvi6 comunicarrne en su oficio de 14 de seciembre para demoler el poste ignominioso sicuado en el solar del Heroe Juan Francisco de Leon segun lo habia resuelco S. A. por mi representaci6n del 12 del mismo; he verificado dicha operaci6n ayer 30 de setiembre a las 5 de la tarde, acompanado de los alarifes de­ la ciudad, de una escolta de veinre soldados con su Oficial y tambor batiente del Cuartel de Morenos con seis presidiarios; al que concurri6 inmenso pueblo

-

130 -


que fue espectador de la honra que se le ha devuelto a" la memoria del magnanirno Juan Francisco de Le6n y sus dignos descendien­ res, viccoreando nuestra Independencia, la Patria y el Gobierno al ciempo que yo di los tres primeros barrazos en el ignominioso p<>sce. Enseguida fueron comados por los presidiarios los peda­ zos mayores de la cabeza derribada de dicho posce y conducidos al Puente del Rio Anauco, donde se sepultaron con nuevas vivas y aclamaciones, rodo con mucho orden. Lo parcicipo a V. S. para su inceligencia y que si lo tiene a bien· lo eleve al conocirniento de S. A. Dios guarde a V. S. muchos afios, Caracas, ocrubre 1<.> de 1811. Rodt,lfo Vasallo ­Aun podemos transitar a la vera de sus "castlllltos", atalayas defen­ slvas de la cludad, por el camlno que el Gobemador Osorio fabrlc6 con pledras y sudor de indigenas para unlrla con La Gualra; y pasar por el robusto puente de Cartos Ill, sobre el cauce del Catuche. EsUn en pie la Quinta de Anauco, la hacienda La Vega, la Cuadra de los Bolivar y la Casa Natal del Padre de la Patria. Subsisten San Francisco y la Catedral, con sus jureos y entallados altares, el anclano corwento de San Francisco, escondldo tras la fachada gotizante de GuzmAn Blanco, La Divina Pastora y su Purgatorlo de Rojas; el Capltollo Guzmanclsta y los apacibles rlncones de El Calvarlo y Los Caobos. Alli esta "Santa Ines", cuyos techos conservan las hermosas decoraclones de Herrera Toro; y por ultimo, entre tantos que menclonar qulslera, todavia cu­ bren de verdor sus copas el dos veces centenarlo Saman de La Trinidad, los Mljaos que admirara y midiera el Bar6n de Humboldt en "Los Palos Grandes", y a pocos pasos de este sltio la tan querlda Celba de San Francisco. A lo lar­ go del tlempo no han desaparecldo muchas de nuestras tradlclonales costum· bres. Dia a dia bajan de Galip8n los burrlqulllos con sas tradiclonales cargas de Hores, se despacha a domlcillo. comestibles, medlclnas y peri6dlcos. La torta bejarana. los dorados coqultos, las espigadas melcochas, el pan de horno, la refrescante chicha y las criollas arepas son consumldas en las esqul­ nas de la ciudad. Conserva el veclndario sus h8bltos navldenos, sus costum­ bres carnavalescas y sus ritos funerartos, y el caraqueno de orfgen o de adopcion, translta por las aceras y se detlene en ellas 'desordenadamente a escuchar el preg6n de los vendedores. Yo quiero rendir aqui ptibllco home· naje al ultimo de los pregoneros caraqueflos; aunque ya. no translta por las calles de Caracas. Hasta ayer lo vlmos, prlmero con su carretllla y despues con una cesta repleta de frascos plenos del ambarlno liquldo, pregonar levantando su grito en esta u otra esquina: "Yo soy Antonio Miranda Pero no el de La Carraca. · Yo soy el vendedor de miel. De las caUes de Caracas". Mauro Paez Pumar • (Del Discurso de Orden PronunclaJlo en el Ayunfa. miento el 25 de Julio de 1965 · Dia de Caracas).

­

131 ­


PALACIO DE GOBEBNACION Y JUSTICIA La Municipalidad de Caracas celebra sus sesiones en el

mismo sitio donde se firmara el 5 de julio de 181 i el Acta de la Independencia, acontecimiento perpetuado en un lienzo de Juan Lovera, "el mas profundo de nuestros pintores del siglo XIX". "Este inmueble era la sede del Colegio Seminario de Santa Rosa y estaba situado frente a la Plaza Mayor, donde para aquel tiempo se hada mercado. El edificio habia sido construido en tiempos de Ruy Fernandez de Fuenmayor ( 1637 ­ 1644) y colindaba por el naciente con una casa propiedad de Luis de Bolivar, donde hoy existe el Palacio Arzobispal, hace poco desalojado por la curia a causa de los dafios sufridos JX>r el terrernoto del 29 de julio de 1967. En las referencias a la historia de la Capilla de Santa Rosa cornpilados por el cronista Enrique Bernardo Nufiez, este asienta que "la porterfa del Colegio daba frente a la Plaza" y asi mismo recuerda que la dedicaci6n a la capilla donde debia de hacerse la declaraci6n de nuestra independencia, se efecnia el 30 de agosto de 1723, dia de Santa Rosa". La construcci6n actual data del afio 1904. Durante la Adminiscraci6n del General Cipriano Castro, mand6 este demoler el verusto inrnueble de dos pisos que alli existla para construir en su ~ "un palacio de Juscicia y Gobernacion" habiendo confia­ do su ejecuci6n al arquitecto Alejandro Chataing. Ocupaba casi la cuarta parte de la "Manzana" comprendidas las esquinas de Las Monjas, San Francisco, Sociedad y Las Gradillas. Cosco total de esta obra fue de quinientos mil bolfvares. Durante algun tiernpo la nueva coostrucci6n fue asien­ to de Tribunales de jusricia y de la Prcteccura o Comandan­ cia de Policia. Un destacamento de este ultimo cuerpo aun ocupa el ala sur, en la calle que baja hacia San Francisco. -

132 -


El Palacio de Gobernacl6n y Justlcla de Caracas en 1905.

Vista del mismo ediflcio desde uno de los balcones del Cine Rialto.

­

133 ­


CDlllOS DEL l YILA Los caraquefios de nuestro tiempo no son asiduos visitan­ res de la moncafia. Sus estribos embellecidos por las nuevas espe­ cies sembradas bajo la direcci6n del ingeniero Jose Rafael Garcia casi siempre permanecen desierros. Hay refugios y pincorescos senderos, amplias exrensiones de grama bajo copudas casuarinas y eucaliptus, ­que invitan al placido descanso del espiriru, En in­ numerables ocasiones hemos proclamado la imporcancia que ten­ dria para nuestros j6venes realizar peri6dicas excursiones a la rnontafia, donde se respira aire vivificador y se amplia el horizonce del pensamienco. No pecamos de exagerados si dijesernos aqui que acaso uno por diez mil de los habicances de la nueva ciudad conoce el esplendido paisaje que por ejernplo puede conternplarse desde el picacho de Galipan. A su alrura se recibe la fresca brisa que sopla del mar mienrras que abajo se ven casi codas las pobla­ ciones costeras del Deparcamenco Vargas, desde Caria La Mar a Los Caracas, seiialadas por el hilillo blanco de las olas. Hacia el sur puede apreciarse con la mirada el paisaje en coda su ex­ tension geografica del valle de Caracas, percibiendo encre racos el sordo rumor que emerge desde el fondo, mensaje a discancia de la dinarnica urbe, hoy desbordada en sus narurales linderos por galopanre y desordenado crecimienco dernograf ico . Ninguna expresion tan rica y llena de espontanea na­ turalidad y cernura como la que nos lega Santiago Key Ayala, en la cual declara: "Poseo rres devociones nacidas en mi ni­ fiez y a las cuales he sido fiel por el resto de mi vida: son el oceano, la prensa de imprimir y el Avila". El Avila visco desde el valle de Caracas, sencido y admirado desde Caracas. Son devocio­ nes suscraidas a la denundaci6n del ciempo y a la oxidacion del desencance­Son a la vez para mi, tres especraculos siempre nuevos. ­134

­


I

La

Silla de Caracas vista por el lado Este (Alt. 2.640 m.). Foto Eduardo Rooswaag.

-

135 -


Por su parte Manuel Diaz Rodriguez, quien tuvo en suer­ re poder contemplar todos los dfas el amanecer desde su hacienda de los Dos Caminos man if iesta su admiraci6n por la faz cambiance

de la monrafia: "Hoy esta vestido con una luz lila, ya es lila sola, dice. El Avila encero es como una enorme amatista ... ".El poera Nicanor Boler Peraza alude con tristeza a los efeccos que produce , la erosion en las estribaciones que dan al norte y asienta: "Esta cara del cerro es pelada a grandes trechos. La imprevisi6n del hombre, la exposici6n a un sol torrido, la situaci6n del monce en la zona que tiende a ser desertica por su posici6n geografica, han expulsado la frescura. Piedras desnudas se harcan de sol y lo de­ vuelven con ferocidad al descenso de la tarde y en la pesadez de la noche". Seda el memento de recordar con agradecimiento patrio­ tico el renovado esfuerzo que de un tiempo a esta parte realiza el profesor Francisco Tamayo, encaminado a recuperar como zo­ na verde las aridas vertienres de la quebrada de Tacagua. Lastima que tan noble iniciativa no hubiese enconcrado en los organismos competences y en el animo de sus conciudadanos, codo el respaldo necesario para ensanchar tan feliz experiencia y contener el avan­ ce del desierto . Ante renovadas intenciones de organismos oficiales y pri­ vados de utilizar el Avila para fines distintos a los que determina la Ley de Parqucs Nacionales, es oporruno recordar finalrnente, la obligaci6n moral en que estan los caraquefios de proteger a toda costa la integridad fisica de lo que en propiedad puede consi­ derarse hoy corno el ultimo recurso natural con que cuenta la capital venezolana. Innumerables referencias hallamos en la ancigua cr6nica acerca de la variedad de nuesrras especies florales. Casi todos los visitantes escudiosos de la nacuraleza han consignado en sus memorias la grara impresi6n que les causa el hallazgo en nuestros jardines de los lirios, berberias y claveles o de las rosas, orquideas y geranios. Durance su ascension al Avila en enero de 1800 el sabio Humboldt hace una pormenorizada clasificaci6n de las plancas que -136

-


Pico de Naiguata. Fasclnante aspecto ofrece desde los alrededores del Teleferlco.

Lagunazo y Fila Occidental de la Silla de Caracas. Aqui nace el tio Tocome.

­

137 ­


va encontrando en el camino. No puede dejarse de recomendar la lecrura de esre capirulo, uno de los mas Iascinantes que consa­ gra el naturalista en sus recuerdos a Caracas. Mas tarde Henri Pittier y Adolfo Ernst se entregan con verdadera pasi6n al estudio de nuestra flora. Esre ultimo es autor de una inreresante descrip­ ci6n de las especies que ha visto en los jardines de La Vifieta, residencia del General Paez. Su texto es recogido y publicado por la Sociedad de Ciencias Naturales. Le impresiona vivarnenre la suave fragancia del jazmin o velo de novia que esparce su flora­ ci6n en la quietud de las noches caraquefias . No menos importances son las anotaciones hechas acerca del peculiar olor de nuestros carnpos, los vahos de masrranto o alcanfor o aquel que se desprende al contacto con el sol de la her­ bacea silvesrre que canto se da en las estribaciones del Avila, co­ nocida con el nombre ·de "capin­melao". Adyacente a la Ciudad Universitaria y al margen de la autopista del Este se hallan los terrenos del Jardin Botanico. Los docrores Tobias Lasser y Leandro Aristeguiera ejercen las funciones de Director y Subdirector respecrivamente. Con fines de esrudio e investigacion, el Institute ha hecho traer especies de coda Venezuela. En sus invernaderos cultivan adernas una extensa variedad de plantas exoticas y medicinales. Gentes de codas par­ tes del mundo han elogiado la organizaci6n de sus diferentes de­ pendencias, como laboratorios, bibliorecas y los bosques y jardines que lucen cuidados con devoci6n y esmero. Al exponer al doctor Lasser nuestro proposiro de ofrecer en estas paginas un breve informe acerca de las especies florales mas comunes que se dan en el valle de Caracas, y pedirle aseso­ rarniento y colaboraci6n, accedi6 con su proverbial gentileza:

FLORES DEL VALLE DE CARACAS Azucena: Lilium candidum: hierba con numerosas hojas lanceoladas, £lores en racirno terminal, grandes, blancas, acarn­ panadas. Lirio: (Lirio africano): Agapanthus africanus: hojas ba­ sales lanceoladas; flores numerosas en umbelas, de color azul. Forma de embudo . -

138 -


Llrlo Azul, cerca de Ayala, fotografiado por el excurslonista Dr. Mila de la Roca.

las' rosas rojas, son las mas codiciadas y por consiguiente se les cultiva con preferencia en nuestros jardines. (Foto Paraiso).

-

139 -


Rosa: diversas variedades. Rosa cencifolia. Arbusco espi­ noso, flores con corola compuesta de variados colores. Muy valiosa en floriculcura . Dalia: Dahlia excelsa: Hierba perenne con callos hasca de 6 metros de alto; hojas muy grandes, pinadas. Cabezuelas con flores marginales purpureas o rosadas. D. pinnata: Hierba peren­ ne, 1­1,5 m. de alto. Hojas opuescas pinadas. Cabezuelas de Ho­ res marginales amarillas, rojas, purpuras, blancas o de ocro color. Gladiola: Gladiolas hortulanus: Hojas lineares o en for­ ma de espada. Escapo floral de 1 m. o mas de alto con bracteas foliosas y flores viscosas. Flores de color rojo, purpuro, amarillo, blanco, etc. Plancas sin caraccerfscicas especificas fijas porque se traca de numerosas hibridaciones . Margarita: Cbrysanseman maximun: Hierba perenne, ho­ jas alargadas. Cabezuelas cerminales sobre pedunculos largos. Flo­ res marginales blancas . Clavel de muerto: T agetes erecta: Hierba anual con hojas divididas. Capiculos solicarios largamence pedunculados. Flores rnarginales numerosas amarillas . Ave del Paraiso: Strelazia reginae: Escapes florales mas o menos can largos como las hojas. Flores muy irregulares, varias dentro de una bractea escapiforme. Sepalos de color amarillo­ anaranjado, petalos de color azul oscuro. Cata· btanca: Zantedescbia aetbiopica: Planca herbacea, hojas codas basales. Espata blanca o cremosa, ancha mas o menos abierca. Espadice amarillo mucho mas corto que la espaca. Cata rosada: Anthurirtm andreanum: Tallo corco y ergui­ do, carnoso. Hojas 'de forma ablonga. Espara aovada de color ro­ sado; espadice amarillenco. Existen variedades e hibridos con espata roja, anaranjada o blanca. Nooios: Pelsrgoniam zonale: Hierba erguida, poco rami­ ficada. Flores agrupadas en umbelas exilares. Perales de color rojo, rosado o blanco. Hortensia: Hydrangea macrophytla: Arbusco de hojas elipticas y Hores rosadas, azules o blancas, dispuescas en cimas grandes chatas o globulares. Flores por lo cormin esreriles . -

140 -


El "Anthurlum", ­­cala rosada­ de tallo corto y erguldo, especle claslflcada y des· crlta en el estudlo del Dr. Tobias Lasser, director del Jardin Botanlco.

En Caracas suele darse una extraordinaria varledad de rosas, desde la de petalos muy blancos, hasta las de tono purpura oscuro. En la foto eortesfa del Sr. Patella vemos una de suave tonalldad rosada.

-

141 -


Pensamiento: Viola tricolor: Hierba anual, 15­40 cm. de alto. Hojas basales redondas y caulinares lanceoladas. Flores gran­ des de tres colores generalmente, azules, blancas o amarillas. Violeta: Viola odorata: Hierba de hojas aovadas. Flores de color violaceo­oscuro, fragantes. Mas o menos 2 cm. de dia­ metro. Nardo: Poliantbes tuberosa: Hierba con hojas lineares; £lores blancas muy fragances, agrupadas en espiga terminal y er­ guida. Frecuenrernenre las flores son dobles. Geranio: Pelargonium peltatum: Hierba rasrrera, colgance o algo trepadora. Tallos de 5 0­100 cm. de largo, hojas aleernas suculentas. Flores en nurnero reducido, en umbelas. Colores rosada, blanca o lila de 2­3 cm. de diarnetro. Girssol. Helierubus annuus: Hierba anual de 1­3 mes. de alto. Cabezuelas generalmenre solirarias. Flores marginales amari­ llas visrosas, flores centrales de color rnarronuzco­purpuro. Flor del paraiso: Alpina speciosa: Hierba de 1­2 mes. de alto, hojas grandes lanceoladas, Inflorescencia terminal, paniculada. Bracreas anchas blancuzcas sosteniendo 2­3 £lores. Flores blancas vistosas, fragantes. Rosa de Berberia: Nerium oleander: arbusco de 3­6 mes. de alto. Hijas en verticilios, lanceoladas. Flores vistosas, Rojas, purpuras o blancas, dispuestas en terminales. Cariaqttito colorado: Lantana camara: arbusto 1­2 mes. de alto. Hojas opueseas aovadas. Flores agrupadas en cabezuelas den­ sas. Cocola de color anaranjado, anaranjado­amarillo, o cambiando hacia rojo o escarlara. Cariaquito morado: Lantana trifotia: sufrutice de 1­2,)mts. de alto. · Hojas lanceoladas. Florescencia cebeciformes cuando j6venes, mas tarde alargandose y entonces en forma de espiga. Corola rosada, azulada o purpurea, lxora: Ixora coccinea: arbusto de 3­5 mes. de alcura. Hojas ovaladas. Flores vistosas, rojas dispuestas en corimbos. La variedad lute« tiene flores amarillas. Platanillo: nombre coleccivo para varias especies del gene­ ro Heliconia. -

142 -


Flores y arbustos en el camlno hacla el pico de Naiguata. (Fotografia del Dr. Federico Mila de la Roca)

Dallas amarillas, purpura y blancas, una de las especies mas comunes del valle de Caracas. Sus tallos llegan a tener hasta 6 metros. (llustraci6n cortesia del Sr. ltalo Patella, de Foto Paraiso).

­143

­


Flor de Mayo: (Orquldeas) especies del genero Cattleya.

C. mossiae. Flor de mayo: planca epifira: hojas coriaceas, oblon­ gas. Sepalos y peralos de color rosado­violaceo; boca del labelo purpura.

Clave/ Drantbus caryophyllies: Planca herbacea de hojas angoscas y con Hores de color doble y de variados colores. Muy apreciada en floriculrera. Anciguamence nuescro Jardin Botanico tenia su sede en El Calvano, adyacence al zool6gico. Alli e'ritr,fviscamos cierca vez al poeca Jorge Schmidke, incansable defensor de la nacuraleza. Te­ nia en un caj6n ­por ejemplo­­ mas de dos mil chinas decomi­ sadas a los zagalecones sorprendidos infraganci eh la macanza de pajaros. Acudia tambien a El Calvario por aquel ciempo el estudioso botanico Tobias Lasser empefiado en ampliar lo que ya exisria en el campo de la clasificaci6n botanica. Lasser acaba de expresar publica inconforrnidad con el proyecco segun el cual los cerrenos que accualmence ocupa el Jardin Botanico, bajo su direr­ ci6n adyacences a la Ciudad Universiraria sedan cercenados para ampliar la auropista del Este. Es un desproposito porque la arte­ ria vial bien puede ensancharse del lado del rio, sin perjuicio de la zona verde.

EL TEATRO NACIONAL El Teatro Nacional fue construido en 1905, bajo la presldencla del Genenil Cipriano Castro por el Ing•. Alejandro Chataing, "a prueba de slsmos". La Clfgllllo zacl6n del programa estuvo a cargo del poeta Heraclio Martin de La Guardia,... zarzuela, una comedia del poeta, y varios numeros breves. En el elenco flgurllll Carmen Gaona, actrlz espai\ola que habia ingresado al pais en las Compaftlu • Operetas de don Miguel Leicibabaza. Segun reflere el Director de Teatro Edulrdl Calcano, esta actriz qued6 de residente en Venezuela hasta su muerte ocurrlda 1 fines de 1966, a edad muy avanzada. Entre los tramoyistas segun el mlsmo calClll figuraba Alejandro Hernandez, venezolano que lleg6 a ser con el tlempo el .,... de la Tramoya. En este mismo teatro se estren6 "la Viuda Alegre" con la emllllllll tiple Luisa Bonoris en la parte de la protagonista. Esta cantante habia est,...._ la opereta de Franz Lehar en Espana.

­144

­


Los llamados "Platos del Diablo" en las proxlmidades del pico de Nalguata.

Subiendo por el cauce de la quebrada de Chacaito el excursionista puede hacer un alto en el puesto del Guardabosques Pedro Nieves, primero en el camino hacla La Silla. Bajo aiiosas casuarinas crece desbordante de vitalidad la grama San Agus· tin, sobre la cual suelen reposar los fatigados viajeros. Este fue el mismo curso seguido por Humboldt en su historica ascension al Avila en 1800. (Foto de la coleccion del Dr. Rene De Sola).

-

145 -


EL CENTRO EXCURSIONISTA El Centro Excursionisca Caracas, fundado en 1929, ha realizado encomiable labor deporciva y de proteccion a la narura­ leza. Gracias a su esrimulo algunos j6venes han renido la oporruni­ dad de conocer las imponderables bellezas del Avila. Hace poco alguien planteo la idea de construir un camino apro para el transito rapido de aucom6viles hasta la cumbre. Algu­ nos conservacioniscas y la propia Direcci6n de Parques del MAC se pronunciaron en contra del proyecco. . "El Avila" es Parque Nacional desde la promulgaci6n del Decrero Ejecucivo de fecha 18 de diciembre de 1958, pero s6lo un afio despues comenz6 la tarea de reacondicionar los prirniti­ vos senderos, arnpliandolos para facilicar el acceso de los visitan­ res. Los Venados, es uno de los sirios mejor desarrollados del Parque y sus alrededores han sido acondicionados. a fin de que los excursioniscas puedan, inclusive, pernocrar alli. En el Parque esta prohibido practicar ejercicios de caceria, encender fogacas, consumir bebidas akoh6licas o llevar perros. Todas las semanas el Centro Excursionista realiza una ascension al Parque, generalmence los domingos, capitaneadas por algunos de sus directivos. Entre estos se descacan por su perseve­ rancia el Dr. Federico Mila de la Roca, y los setiores Eduardo Rooswaag, Rafael Romero, Herman Soriano, Eduardo Gomez, Marco Tulio Sanchez, Hector Perez Ibanez, Max Diaz y Bernar­ do Gomez, quienes tuvieron la iniciativa de construir hace ya algunos afios, en la ruta hacia el Pico de Naiguata el conocido refugio "Miguel Delgado" en homenaje a la memoria de uno de los direccivos fundadores del Cencro. La instirucion mostro igualmence interes ante organismos oficiales y privados en la rescauraci6n de los hist6ricos cascillos ­

146­


EL AVILA Y SU OXIGENO SALVADOR En abrll de este alio -1980- arqultectos, urbanlstas y representantes de medlos de oplnl6n, lnteresados por la vlda de la cludad, celebraron un foro en el Coleglo de lngenleros para tratar sobre la precarla sltuaclon por la cual atravlesa esta, debldo al creclmlento lncontrolado y anllrqulco de la poblaclon, lo cual vlene en mengua de la eflclencla de los servlclos publlcos. Expertos en estudlos de medlo amblente se han pronunclado por la necesldad que sean de erradlcar las Industrias por algunas dependencies admlnlstratlvas del Goblerno. El lnforme Varsechl, basado en estudlo de la flora del Av Ila revela que hasta la montalia ha llegado a sustanclas contamlnantes. En la vegetaclon se encontraron trazas de agentes degradantes. El profesor Francisco Tamayo, Premlo Naclonal de Conservaclcm, es partldarlo de tomar medldas expedltatlvas y un reordenamlento de la vlda de cada 4 mlllones de habltantes compactados en menos de 60 hectllreas. A no ser por la accten renovadora de oxlgeno que dlarlamente cumple "El Avlla", serla aun mayor el numero de personas que presentan trastornos cardlopulmonares debldo al alre lrresplrable generado por el mon6xldo, las chlmeneas y la cenlza de los llamados rellenos sanltarlos, con frecuencla expuestos a combustion. El Avila ahora mas que un sfmbolo slgue slendo salvaguarda de Caracas.

Desde el mirador de "Los Venados" se puede apreciar una gran extensl6n del valle de Caracas. lmpresiona al visltante el sordo rumor que transportado por la brisa emerge del fondo, donde se agita la dlnamica urbe de nuestros dias. Otrora acaso podia ,escucharse desde esa misma elevaclon el alegre replcar de las campanas de los templos o el prolongado silbato de los trenes.

­147­


o fortalezas siruados en el antiguo camino de los espafioles, que partiendo de la Puerta de Caracas, conduce hasta el vecino literal. Lamentablemente esta iniciativa no ha podido llevarse a felz rer­ mino. Uno de los enemigos implacables del Parque es el fuego. Incendios peri6dicos causan estragos duranre los meses de verano, aunque en los ultimos afios y debido a la vigilancia redoblada de guardabosques, estos han disminuido. Merece destacarse el gesco del Ingeniero Jose Rafael Garcia, quien escuvo a punto de pere­ cer combatiendo las llamas desacadas cierto dia del mes de marzo de 1963 en las estribaciones del Picacho de Galipan. Sufri6 que­ maduras de primero y segundo grade generalizadas. El Gobierno reconoci6 un afio mas carde la nobleza del aao imponiendole la Orden del Libertador.

UNA OPINION DE HUMBOLDT "El camino que conduce por el Avila del Puerto a Cara­ cas, capital de un gobierno de cerca de 900.000 habitantes, se parece al paso de los Alpes, a los caminos del San Gotardo y del gran San Bernardo. Cuando en la estacion de los grandes calores se respira el aire abrasador de la Guaira y se vuelve la vista hacia las montafias, no se puede menos de considerar con admiraci6n que a la distancia direcra de cinco a seis mil coesas, una poblaci6n de 40.000 almas reunidas en un valle estrecho, goza de frescura de la primavera y de una temperarura quc de noche baja a 129 del rermometro centesimal. El camino de la Guaira al Valle de Caracas es mucho mas hello que el de Honda a Santa Fe, y que el de Guayaquil a Quito. C.On buenas mulas no se necesitan mas de tres horas para ir del · puerto de la Guaira a Caracas ni mas de dos horas para la vuelca: con mulas de carga o a pie el camino es de cuatro a cinco horas".

De la obra de Alejandro de Humboldt, en "Viajes a las Regiones Equinocciales" Cap. XI, parte final, acerca de Caracas. ­

148 ­


"DGBA MABIPOSA"

El Dr. Federico Mila de la Roca aoatlene una "Tlgra Mariposa" atrapada en la flla del Avila, en el e11mlno hacla el Plcacho de Gallpan. Ea una de las serplentes mis pellgroaas ya que au poruoi\a es Ktlvislma y sOlo en ocaslones cede a la aeei6n de loa sueros antiofldleos pollvalentes, de ser estos aplleados a tlempo a las victlmas de au mordedura. "La Tlgra" es una de las especlea mas teml­ daa por la rapldez eonque .ctua su veneno. Las mas gran­ des Hegan a tener un metro 20 eentimetros. Suelen aallr de SUS escondrljoa a bu&Cllr allrnentOI haela ultimas horas del dia. Su mordedura e11sl slempre ea mortal. V6ase por ejemplo la presente narr.cion contenlda en el llbro .cerca de las "Serpientes Ponzofioaas en Venezuela" por F. Sandner Montilla ­1965­ pag. 57.

"A las siere de la maiiana fue mordida en el dedo pulgar derecho, una persona de aproximadamence 30 afios de edad de 64 Kg. de peso. El ofidio de la especie supracitada ( tigra mariposa) tuvo la oporcunidad de encajar sus dos largos colmillos y tiernpo suficiente de exprimir sus glandulas ponzofiosas y por cuanco el animal ofensor cenia una longitud de 1 merro y 3 2 centimetres puede calcularse que verri6 por' lo menos 100 miligramos de veneno seco dentro de la vkrima. A fin de lograr neutralizar ­

149 ­


dicha cancidad de veneno es menescer inyeccarle 10 cajas de sue­ ro anci­bochr6pico, si el animal ofensor hubiere sido "Borhrops Atrox", pero el suero no esra en condiciones de neucralizar todo su veneno cal como dije con ancelaci6n. Grave fue que los sueros que traiamos, ­pues veniamos cres dias caminando, desde el pico Naiguata y La Silla­ se habia quebrado y no hubo mas remedio que transporrar a la vicnrna unas horas por el cerro antes de llegar a Caracas. Inmediacamencc de mordida la vkrima. se observaron dos heridas puntiforrnes, coloradas marcas de la inserci6n de los colmi­ llos uno al lado del otro separados por un poco menos de dos cenrlmerros. La persona mordida dice haber experimencado un inten­ so dolor y ardor, como un hierro candencc fijo en el lugar. A los pocos minucos las dos heridas punciformes se rodearon de una aureola morada". Las 7 y 15 minucos: pierde el conocimienco, el dedo se hincha, se endurece, duele mucho y se coma rosado (edema herno­ rragico ). A manera de primeros auxilios, despues de! accidence se corc6 sobre las heridas punriforrnes con una hojilla se chup6 la sangre que indudablemence arrastro un poco de veneno hacia afuera. A las 9,30: aparecen fliccenas en el antebrazo. vejiguillas como las de las quemaduras y llenas de un liquido cerohernatico que puede infeccarse ( al romperse las flictenas, dejan a la vista zona de dermis colorada que se ulceran) . Las 11 am.: ingres6 por fin la victima en una clfnica parti­ cular y se aplicaron por via subcutanea, asociadas a introvenosas, seis cajas de suero anri­borhropico brasilerio o sea 60 cc. de suero. A esra hora habia ascendido por encima del codo, la parce donde apareci6 la herida punciforme de la insercion de los colmillos esta cransformada en una vejiguilla sanguinolenca. Todo el dedo hinchado, presencaba una coloraci6n morada acci6n necrosanre. Se tucieron presences los primeros sintomas del estado general de la victirna por medio de sangre por las encias. -

150 -


del bosque "La Zemurera" al este de la -estacl6n forestal de Los Venados, en el Parque Naclonal Avlla. La foto tomada por Hector Perez Ibanez, del Centro Excurslonlsta nos permlte apreclar la belleza del paraje. Por en medlo de la hllera de eucaliptus caminan lentamente los vlsltantes.

Detalle

Nido de avlspas en arbustos de incienso (Trixis de la familia de las Corombiferas).

­

151 ­


Las 12 y 30 aparecieron equimosis en el brazo ( manchas rnoradas) . Segun el examen de aguas, habia hernaturias y por el examen de sangre se evidenci6 descenso de la cantidad de leuco­ cites y erirrocitos. La necrosis se extendio en el cuadro clinico sigui6 su curso grave y agudo. Se inyectaron nuevos 60 cc. de suero antibothropico en la vena: efeccivo para el case de la mor­ dedura de una mapanare. La rardanza para comenzar el tratarnien­ co influy6 desfavorablemence dando por resulcado un escado ac­ tual grave de la victima. A las 5 pm. la digestion de los rejidos se hizo evidence, se desprendi6 parce de los mismos y pudimos observar entre la roja came bafiada de sangre, el hueso muy blanco ( acci6n necrosante ). Posreriormente sigui6 la descrucci6n progresiva de los te­ jidos en el area de la implanracion de los colmillos, SC forman escaras que llegaron hasca el desorendimienco de segmenc~s de cejido en el ancebrazo instalandose una gangrena que progres6 con rapidez. Las hemacurias, ( emisi6n de sangre por la orina) y melenas ( sangre de origen intestinal) se inscalan. Se ceme un derrame cerebral (Rosenfeld). Una debilidad general progresa, hay hipocermis e hipocensi6n arterial. La victima dice senrirse muy cansada y con un agudo dolor de cabeza. A las 6 y 40, cesa la vida del accidencado. ­"Para mi Caracas ha sldo un lugar de algun placer y muchas penas. Y sin embargo. ha sldo aqul, bajo la proteccl6n y dlrecci6n de ml goblerno don. de he podldo ahorl'8r alglin dlnero ", John Williamson, Encargado de Negoclos de EE. UU. "Las Comadres de Caracas .. P6g. 288.

­"Caracas eluded sencllla, la de las calles empedradas con aceras enla· jadas y en el patio el surtldor. Caracas la maravllla de una epoca pasada, mis nunca sera olvldada. 10ulen nos hublera dlcho, en aquellos amables dias de nuestra ciudad intlma devote y gentll, que aquellos c6modos tranvias lban a ser\menospreclados y burlados! Que el "tlan tlan" civillzador, ahora lo II• marian "morrocoy", estorbo y los calumniadores dlrian que era una desgracia montar en ellos ". Jose Garcia de la Concha, "Remlniscenclas". Pag. 172.

­152

­


LOS MEDICOS DE SAN LORENZO

Hlst6rlca fotografia del ano 1915 tomada en la antlgua Escuela de San Lorenzo, no lejos del Hospital Vargas. Estan en ella ademas del Dr. Izquierdo, de pies de lzquler· da a derecha: los doctores, Pedro Gonz61ez Rincones, Hector Landaeta Payares, Antonio Jose Castillo, Gustavo H. Machado, Guillermo Hern•ndez Zozaya, A. Gu­ tierrez Solis. Jose Ignacio Bald6, Pedro Gutierrez Alfaro, Bernardo G6mez, Pedro, del Corral y Martrn Vegas.

A pesar de los deseos del Dr. Luis Razetti de lograr la construccion de un institute destinado a la ensefianza de la anato­ mia, y no pudiendo llevarlo a cabo por carecer de suficientes sim­ patias poliricas, transcurri6 largo tiernpo, para la realizaci6n de can noble deseo, el cual cristalizo al fin siendo Ministro de Insrruccion Publica, uno de sus mejores discipulos, el Dr. Felipe Guevara Rojas, poseedor de vasta cultura canto medica como literaria, y quien previo examen, habia obtenido el honroso titulo de Miern­ bro del Real Colegio de Cirujanos de Inglaterra. Con anterioridad al desempefio del Ministerio, habia ejer­ cido Guevara Rojas el rectorado de la Universidad, destacandose ­

153 ­


como hombre serio, progresista, estricto cumplidor de sus deberes, jusriciero y adernas valiente para desaf iar la mentira y la envidia

que en vano se ensafiaron contra cl. Al recordar estos hechos que precedieron a la fundaci6n de la Escuela de San Lorenzo decia el Dr. Jose Izquierdo "que el afio 1913 y en el lugar de un anriguo cementerio fue fundado el Instituro Anat6mico. Sign if ic6 un extraordinario acontecimienco para la ensefianza medics: en aquel entonces era texto de anatomia el incomparable Tesruc. Los simbolos que caracterizaban a nuestra Universidad segun el brillanre profesor de Anacomia eran el orden y la disciplina. Si hoy a pesar de la falra de tales condiciones, toda­ via la catedra de anatomia se distingue por su eficiencia y seriedad, ­aiiade con su peculiar severidad­ ello se debe a la competen­ cia, al orgullo de cumplir con el deber, y el amor al estudio, cualidades que distinguen al personal de esa ensefianza". Mas adelance recuerda el Dr. Izquierdo que el curso fue doble porque foe dictado por el Dr. Rafael Gonzalez Rincones como Profesor Titular y por el como J efe de Trabajos Practices. Gonzalez Rincones daba su clase de 12 a 1 p.m. y el Dr. Izquier­ do de 8 a 9 pm. Con aquel curso se inicio en la carrera docente' el respetado profesor de medicina y traductor de Kempis, hoy dedicado a los ensayos literarios y a escribir ocasionalmente comen­ tarios politicos en los periodicos, El Dr. Izquierdo recuerda complacido "que en Los curses reinaban gran atencion y seriedad; ninguno de los discipulos era capaz de distraerse ni de asistir frivolamente vestido, ni de cruzar las piernas, ni de furnar". Despues de las clases dedicaban una hora a ejercicios gim­ . nasricos, y ello contribuia ademas de forcalecer el cuerpo, a unir amistosamente a profesor y estudiantes. Entre aquellos alum­ nos se cuencan Pedro Gonzalez Rincones, Hector Landaeta Paya­ res, Antonio Jose Castillo, Gustavo Machado, Guillermo Hernan­ dez Zozaya, A. Gutierrez Solis, Jose I. Baldo, Pedro Gutierrez Alfaro, Bernardo Gomez, Pedro del Corral y Martin Vegas. ­

154­


SAK JUAlf

Iglesia de San Juan y parte sur de la "Plaza de Abril" o "Capuchlnos", donde estaha "el fauno" al cual se reficre nuestro gran cuentlsta don Pedro Emilio Coll.

Freme a la Iglesia Parroquial de San Juan existe una plazoleta en forma triangular. Este sitio se llama tambien Plaza de Capuchinos o Plaza de Abril. En una explicaci6n muy amena de la Delpinada que hace nuestro gran ensayista Pedro Emilio Coll, se ref iere a cierta incerpretaci6n que algunos recatados vecinos dieran a un curioso monurnenro que alli existia. No lejos, entre el Guarararo y Quinta Alcantara vivia don Francisco Delpino y Lamas. En su gracioso comentario tirulado "La Conspiraci6n del Fauno", dice don Pedro Emilio Coll: "En la verde y triangular plaza de San Juan una tarde de abril en que el sol tamizaba su arnbar luminoso al craves de los copudos arboles y en la. que en el agua dormida de una fuente publica se reflejaba una burda figura de piedra, mientras en el otro extreme de la plazuela la estatua de Ezequiel Zamora amenazaba con la espada a invisibles godos; precisamente en aquel dorado crepusculo, unos cantos veci­ -

155 -


nos de la popular parroquia, reunidos alli con quedas, pero enar­ decidas pa la bras discutian si la f igura ornamental de la pila elegi­

da por las auroridades guzmancisras represenraba un fauno sin pa­ ras de cabra, pero rodas de acuerdo en la inmoralidad o indecencia de su desnudez. Para no verlo ya no se abrian las venranas de las casas contiguas y al pasar cerca de el, de transito hacia la Iglesia parroquial, marronas y doncellas bajaban los ojos para no pecar de indecorosas. En las terrulias familiares hervian las protestas contra el irnpasible mufieco de bronce recien inaugurado enrre coheres y pinaras. El ingenuo levira se larnentaba en su homilia de la deca­ dencia de las cosrumbres cristianas y de la invasion del paganismo. En su salira de peluqueria adornada con calendarios pinrorescos y olorosa agua florida y polvos bararos, el barbero vivaracho, parlanchin y en mangas de camisa, amolando su navaja, proponia una manifesraci6n ante el Sr. Arzobispo para que exigiese la demo­ lici6n del irnpudico fauno. Inrervino un italiano zaparero, de opi­ niones mas modernas, insinuando como transacci6n del conflicro y asi, fue aceptado por el Jefe Civil, concluye diciendo don Pedro Emilio Coll, que la parre mas ostentosa del sexo del fauno se oculrase con una hoja de parra rallada en piedra",

le picegunt6 una vez el Dr. Hemilndez a cierto alumno desapllcado: iCuil es tu profesi6n? ­Soy estudiante ­ contesto. ;.Y por que no la ejerce? Eduardo Carreno, Vida Anecd6tlca de Yenezolanos Pig. 220.

­"Hay en Caracas 140 esquinas con sus nombres, que en algunos casos son monumentos de propiedacl particular o de titulos de famllia, como las del Conde, de Las Madrices, de las Pelayas, etc". De "Relaci6n de un viaje a Venezuela, Nueva Granada y Ecuador", por el Consejero Lisboa. Pig. 66.

­156­


Entrada del Caracas Country Club, antigua hacienda "Blandin" de una fotografiL del Ing'. Carlos Gulnand, tomada en 1928 a raiz de la construccl6n del edificlo. Actual presldente del Club es don Rafael lsava Nunez. Sus campos de golf se hallan hoy vlrtualmente en el centro geogr6fico de la eluded.

Fachada del Club Florida, uno de los p;incipales centros soclales existentes en la ciudad de los anos treinta. Su primer presidente fue el Dr. Antonio Jose Castillo, dlstinguido medico y mas tarde Rector de la Universidad Central. En el lugar que ocupaba se halla hoy la Iglesia de la Chiquinquira. Fue inaugurado en 1928. (Foto cortesia de R. A. Borrego).

­157 ­


­­

­

EL DllEBO Cada uno de los Bancos particulares existences en Vene­ zuela antes de la fundaci6n del Banco Central concaba con su pro­ pia emisi6n de billetes. Esre regimen fue sinembargo modificado al promulgarse la Ley del Banco Central aprobada por el Congreso de 1939 con el Ejecurese del Presidenre Eleazar Lopez Contreras y refrendada por los Miniscros de Hacienda y Fomenro, Francisco J. Parra y Manuel R. Egafia, respectivamente. La Ley encr6 en vigencia el 13 de julio de 1939 y se daba en ella plazo de cinco afios a los Bancos para recoger su emisi6n de billeces. Asimismo aucorizaba abrir sendos crediros a los institutes privados por una cancidad . igual a sus respectivas emisiones, menos el monco de las reservas de oro, las cuales deberian ser enrregadas al Banco Central, conforme le~ establecian disposiciones del nuevo Estatuto. Caus6 espectativa en aquel tiern­ po la querella judicial que incrodujo el Banco Venezolano de Cre­ dito al oponerse esre Banco en nombre de sus accionistas a acep­ car la obligaci6n de hacer encrega al Banco Central de las reservas de oro que respaldaba su emision. Bajo la presidencia del Sr. Jesus M. Herrera Mendoza, asumi6 el Banco Central las responsabilidades en lo sucesivo de ser el unico Banco emisor y ernpezo a recoger los billeres que esra­ ban en manos del publico o que eran presenrados para su cambio por los Bancos Comerciales. El plazo expire cinco afios despues ­­en 1944­ fecha en la cual desaparecieron definitivamence de la circulacion los billeres de los Bancos privados. Dentro de los signos monetarios que han dejado de cir­ cular en los ulrimos tiempos cabe mencionar las anciguas mone­ das de oro y de placa. Entre estas ultimas la de cinco bolivares, · y cuya primera acufiacion data del afio 187 6. ­

t58­


Facsimil de cien bolivares del Banco de Venezuela. El instituto se fund6 el 1' de agosto de 1890, siendo primer presidente el Sr. J. J. Vaamonde. Su colorldo se· asameja mucho al de lgual valor del Banco Central de Venezuela.

Anverso del mismo billete de Bs. 100 de un color ocre suave. El Banco ha multi· plicado agenclas en todo el pais y elevado su capital a 105 mlllones de bolivares con 90 millones de reserva. Actualmente es presidente de la Junta Directiva el Sr. Eduardo Sosa Fernandez, quien cornparte esa responsabilidad con los sefiores Jorge Arevalo Gonzalez y Carmelo Lauria 1• y 2' vicepresidentes respectivamente. Son vocales el Sr. Vicente Lecuna hijo, Pedro Herrnoso Dominguez, Angel Ugueto y Miguel Octavio.

-

159 -


Blllete de ochocientos bolivares del Banco Caracas, instituto establecldo el 4 de octubre de 1890 con un capital de Bs 6.000.000.00. Su presidente era el Sr. L. A. Mendoza. Entre los primeros directores del Banco figuran F. Baash, Augusto Gulnand, Francisco Hern6ndez, Eduardo Baash, Francisco Hern"z, Luis Dominguez Carlos Echeverria. El facsimil est6 flrmado por los seftores Dominguez y Augusto Gulnand.

y

El otro lado de este raro blllete del Banco Caracas puesto en clrculaclon el afto 1892. Por muchos aftos el instituto tenia sus oflcinas entre las esqulnas de Came· jo y Santa Teresa · Avenida Sur. Actualmente su junta directive esta presidida por Andres Velutini, siendo principales: Andres Sucre h. Augusto Dominguez, Vicente Grisanti y Jose Herrera Uslar. Desempefta las funciones de Gerente el Sr. Jose Domingo Sanchez, a cuya cortesia debemos la reproducci6n de tan curlosa muestra.

-160-


Entre otros el Bs. 10 al iniclar dador Henrlque Federico Eraso, Gonzalez, Felix

Venezolano de Credito emltl6 un blllete de tono rosado de sus operaclones el 30 de mayo de 1925, bajo el lmpulso de su fun· • Perez Dupuy, qulen estaba en la empresa aeompanado de don Miguel Ron, Santiago Alfonzo Rivas, Carlos Braun, Juan Santos A. Guerrero, Alejandro Lara y otros hombres emprendedores. Su r.apltal inlclal fue de Bs. 6.000.000.00.

De un tono verde vivo, este facsimll corresponde a uno de los bllletes mas popu· lares de la Venezuela de los anos trelnta. Pertenecl6 a la emisl6n del Banco Mer· eantll y Agricola fundado con el nombre de ''Banco Neerlando-Venezolano" el 23 de rnarzo de 1925 con un capital de 3.200.000. Su director ejecutivo Sr. Ram6n Sahmkow, seiiala que el 15 de julio de 1926 le fue camblado el nombre por el de ·Banco Mercantil y Agricola, y su capital aumentada. a 8s. 8.000.000.

­

161 ­


Este blllete esta firm.do por H. P6rez Dupuy y Santiago Alfonzo Rivas. El caplt1I actUlll del Banco Venezolano de Credito es de 52.500.000 con reserv11 de 22.090.000. Desempena las funclone1 de director principal el Sr. Henrlque P6rez Dupuy. (Este f1c1imil fue proporclonado para su reproducci6n p0r el Sr. Jose V. Lovera, 1ctual director del Banco).

Reverso del billete del Banco Mercantil y Agricola. Su actual presldente es el Dr. Alfredo Machado G6mez y le acompanan en la directive el Dr. Pedro ft. Tinoco vlce­ presldente, Sr. Francisco Gimenez, Dr. Gustavo Marturet, Dr. Ricardo Zuloaga, Dr. Manuel Reyna, Dr. Alfredo Paul Delfino y Dr. Gustavo Vollmer, como principales. El Sr. Ram6n Sahmkow • cuya gentileza debemos la reproducci6n facsimilar recuerda que la prlmera junta dlrectlva del Banco eleglda en 1926 estaba lntegrada por Carlos Osio, Presidente y prlncipales Miguel Carabano, Pedro M. Delgado, Alfredo Vollmer y Mariano Fem6ndez Hurtado.

­162

­


De tono oscuro estos bllletes de clncuenta bolivares del Banco de Venezuela guardan bastante parecldo con los actuales del Banco Central, excepto los motlvos que slrven de llustr,cl6n. Don Vicente Lecuna presidente por espacio de muchos aiios del Banco de Venezuela, gran bolivarlano, dlo impulso con su dtselplina y acertada direcci6n a las actlvldades del instituto. Durante su mandato el Banco aument6 sus operaciones y abrl6 nuevas agencies o sucursales.

Copia facsimilar del reverso del billete de cincuenta bolivares de color amarillo oro, el cual empez6 a circular casl desde la tundacl6n del Banco en 1890. Las oficinas prlncipales del instituto se hallan entre las esquinas de Sociedad y Traposos. Cada billete llevaba la firma de por lo menos dos directores, tarea por la cual recibian un emolumento. La reproducci6n de estos billetes ""8 sido posible graclas a la cortesia del Sr. Eduardo Sosa Fernandez.

­

163 ­


TITIJLO IX De la emisi6n Articulo 50.­El Banco Central de Venezuela rendra el derecho exclusivo de emirir y poner en circulaci6n billeres en codo el rerritorio de la Republics. Ni el Gobierno, ni los orros Bancos del pals, ni ninguna otra institucion privada o publica, cualquiera que sea su naturaleza, podran emitir billetes u ocros documencos que tengan caracter de moneda 0 puedan circular como tal. Articulo 51.­ Los billetes del Banco Central seran de denominaci6n no menores de diez .bollvares ni mayores de mil; y tendran las dimensiones, disefios y colores que disponga el Directorio, con la aprobaci6n del Ejecutivo Federal. Paragrafo unico.­ Cada tipo de billete debera tenet un color predominance que lo discinga de los dernas tipos. Articulo S 2.­ Los billeres del Banco Central seran reci­ bidos a la par y sin limitaci6n alguna en el pago de impuestos, contribuciones o de cualesquiera otras obligaciones, publicas o privadas, sin perjuicio de disposiciones especiales de las leyes, que prescriban el pago de irnpuestos, concribuciones u obligaciones en determinada forma y del derecho, canto del Gobierno como de los particulares, de estipular modos especiales de pago. Arrlculo 5 3.­ El Banco sera el encargado de gestionar la ejecuci6n de las acufiaciones de monedas y de poner estas en circulaci6n. Articulo 54.­ El Banco Central s6lo podra poner en circulaci6n billetes monedas: 1 <>­Mediante la compra de oro; i<>­Mediante la compra de cambio extranjero; y 3<>­Mediante· la realizaci6n de las operaciones de crediro especificadas en las Secciones II y II del Tftulo VII de esta Ley. Podrla agregarse que casi todos los temas impresos en los billetes retirados de la circulaci6n e incinerados hace ya m~ de un cuarto de siglo, correspondian a signos predominances en

y

-

164-


la vida econorruca del pats preferenternente el agro y la crla. Entre los Bancos emisores de importancia caben sefialar el Vene­ zuela y el Caracas fundados en 1890, el Banco Venezolano de Credi co 192 5, el Mercantil y Agricola en 192 6. Los billeces eran de mayores proporciones y mas gruesos que los accuales. Algu­ nos moscraban alegodas arciscicas de la fortuna, o de la abundan­ cia, campos de labranza, potreros, reproducci6n de algunos des­ nudos del renacimienco, ramos de olivas o diversos rnotivos del arte universal o folkl6ricos, coleadas de toros y hasta querubines y ciernas palomas. En el presence trabajo ofrecemos a tirulo de simple curio­ sidad copias facsimilares de algunos de aquellos billetes, enrre los cuales figuran, por ejemplo el de 800 bolivares ernitido por el Banco Caracas ya casi olvidado y ocro del Banco de Venezuela cuyo terna central era el de unos coleadores de ganado. Este no lleg6 por cierro a circular, debido a que para el mornento de· salir la ernision, encraba en vigor la Ley del Banco Central. Uno de los Presidentes del Banco de Venezuela, Don Feliciano Pacanins ( 1954­1965) referfa a tirulo anecd6tico que durance las dos primeras decadas del presence siglo casi todo el cornercio con el interior del pais se hacia a base de onzas de oro o morocoras por lo cual, los via jeros de los Bancos y casas prin­ cipales de Caracas ­y el era uno de ellos­ debian llevar alfor­ jas o gruesos cincurones para el intercambio. Solo cuando los Bancos fueron escableciendo sus agencias, empez6 a cobrar auge y confianza del publico el papel moneda. ­Por aquel riernpo, dice con cierta nostalgia el Sr. Pacanins, recorriamos rodo el pais a lomo de mula, haciendo co­ branzas en los pueblos. Eran entonces muy raros los casos de asal­ cos en los caminos. "Soliarnos dormir en hamacas en las "casas de corredor", seguros de que nadie durance la noche, entraria a despojarnos del oro o de la vida. . . Por su parce el sefior Ramon Sahmkow, del Cornice Ejecurivo del Banco Mercantil recordaba hace poco en sus oficinas, hablando de los origenes de ese insti­ ruro. que por Resoluci6n del Ministerio de Fomento del 15­8­26 se autorizo al Banco Mercantil y Agricola a emitir billeres hasta -

165 -


por la cancidad de 12.000.000,00, respaldados con oro en una rercera parte, deposicados en las propias areas del Inscicuco. A causa del tiernpo necesario para la elaboraci6n de los billeres ­agreg6­­ no fue sino hasta el 17 de Diciembre de 1926 cuan­ do se pudo hacer la primera emisi6n de aquellos".

­"Las cases de Caracas estan en general construldas de tlerra, de lo que ae lllima "taplal" en algunas de nuestras provlnclas, no es mas que tlerra amasada, y en algunos casos ligada por medio de caja picada (adobes). Las ventanas exterlores altas y anchas protegldas por rejas de hierro, dando a las habltaclones un aspecto de dlrcel al que los ojos extranjeros se acostum­ bran con dlflcultad. De "Releci6n de un vlaje a Venezuela, Nueva Granada y EcuHc>r", por el Consejero Lisboa. Pag. 138.

Entre las cervecerias mas notables de la segunda decada del slglo cabe mencionar las de Strich y Donzella, centros casi obligados de tertulia y reunion de la bohemla caraquena. Lucas Manzano dedica una pagina al recuerdo de la extrafia personalidad del Duque de Roca Negras y a las gratas reuniones celebradas alli antes y despues de las tradicionales retretas ejecutadas en la Plaza por la Banda Marcial.

­166

­


PRIMER VUELO

Est1mpa del despegue realizado por Frank Boland con su prlmltlvo aeroplano el 26 de setiembre de 1912 desde el Hip6dromo, retocada por el pince! de Pedro Bargallo. Aquella maiiana Boland realiz6 algunos "pasajes" sobre el Municipal. Gran parte del publico contemple extasiado desde las azoteas de sus casas las peripecias de Boland. Era la primera vez que un avion volaba sobre Caracas. Pesaba este aeroplano 300 kilos. Su fuselaje habia sido hecho de tela abrochada sobre varas de bambu, segun descripci6n textual del Dr. Rafael Seijas Coock, mlembro del comite de recepci6n. Boland murl6 un mes despues a causa de un accidente en Puerto Espana, Isla de Trinidad.

Aunque el primer avion que sobrevol6 a Caracas fue un primitive biplano Curtis que rrajo de Filadelfia Frank Boland el 26 de setiernbre de 1912, puede afirmarse que corresponde al senor Pedro Coll Font los honores de haber sido pionero de la aviaci6n en Venezuela, pues en 188 3 con motivo de la cele­ braci6n del centenario del natalicio del Libertador, solicito permi­ so de las aucoridades distritales para probar el 24 de julio de aquel ario una "maquina voladora" de su invenci6n con la cual prerendia iniciar un vuelo de prueba y demoscraci6n desde "El Calvano". ­

167 ­


La autorizaci6n foe concedida y estaba incluido esre nu­ mero entre los programados para la fecha pero no pudo reali­ zarse debido a una falla irnprevisra ajena a la voluntad del inven­ tor, segun amplia justificaci6n que corre inserta en un nurnero de "La Opinion Nacional", peri6dico oficial de la epoca. Cotejados afios mas tarde los pianos de la maquina inven­ tada por Coll Font, con los principios de aeronautica enunciados por los hermanos Wright en EE. UU. y Santos Dumont en Brasil, pudo comprobarse que los del venezolano tenian funda­ rnento y asimismo que de no haber sido por el seiialado incon­ venience hubieramos visto cal vez adelantada la fecha de la inicia­ ci6n de la actividad aerea como medio de transporte y comunica­ ci6n en Venezuela.

­Eet 1939 empez6 la segunda guerra mundlal y a pesar de la angustla y pestml~"1o general, Luis Roche emprendl6 una nueva organlz11Cl6n: esta vez la de Los Caobo1. Compr6 junto con Rafael lsava Nunez la 1ntlgua hacienda de Marts>'rez de los hermano1 Cruz, qulene1 1eg\in escrlbla mas tarde el proplo Roche, habfan adqulrldo dlcha po1esl6n por 81. 80.000 para cultivar alli malojo que vendla para 101 caballo1 y las mula1 que deambulaban por las calle1 de ~ledra1 de hueslto que yo mlsmo conocl ... " "La Sonrlsa de Luis Roche" por Marcel Roche, Pig. 71.

­"Pocas, muy poca1 ur'n las personal que dejen de experlmentar cler­ to untlmiento de respeto a la sola vista de la sagrada eflgle que lleva el nombre del Nazareno, orgullosa de poseer tal monumento la S.sillca de Santa Ana, uno de 101 mas hellos templo1 de Caracas, apena1 11 en determlna­ da• oca1lone1 la exponen a la veneracl6n de los fleles". Te6fllo Rodriguez, "Tradiclone1 Populares" Pig. 48.

­168

­


RAQUEL

MELLER

Raquel Meller, una de las mas grandes cupletlstas de todos los tiempos cuya can­ ciori "El Relicario" alcanzo gran popularidad en Caracas. (Postal de 11 coleccl6n "Fama de Cuba" propiedad del Sr. Jorge Coll Nunez).

-

169 -


Raquel Meller es una de las grandes cupletistas de la "Belle Epoque'', Se Barnaba Fernanda Marquez y posefa gracia y simpatia personal desbordances. Sus mayores exiros ardscicos tienen lugar en Espana y Francia en la decada del veince al trein­ ta. Entre sus muchas canciones ganan rapidamenre acepcaci6n "Va­ lencia", "La Violetera" y "El Relicario", con musics del Maestro Jose Padilla y Ietra de Ramiro Ruiz. Su matrimonio con el poera Enrique G6mez Carrillo en el Teatro Olimpia es un aconcecimienco de singular relieve artis­ rico y social. Reline a las personalidades mas descacadas del tea­ tro y de las letras de su tiernpo. Asisten adernas no pocos repre­ senrativos de la aristocracia espanola. Entre sus padrinos de boda figura el Conde de Romanones. Las canciones de Raquel Meller no rardan en desbordar las fronceras de Espana. En la Caracas de 1925, por ejemplo, ya esra de moda "El Relicario". Nb existe pianola sin los compases en su repertorio de tan alegre melodia. Dirfase que todos los pro­ gramas sociales bailables comienzan con este garboso pasodoble y cierran al cornpas de la inimitable "Alma Llanera" del maestro Pedro EHas Gutierrez. "El dia de San Eugenio yendo hacia el Prado le conoci era el torero de mas tronio y el mas garboso de to Madrid.

I ha en calesa pidiendo geerra y yo al mirarlo me estremeci

y el comprendiendo salt6 del coche y muy garboso se vino a mi tir6 el cepote con gesto altivo y muy mimosa me dijo asi: Pisa morena, pisa con garbo que un relicario me voy bacer con el trocito de mi capote que haya pisado tan lindo pie . . "

-

170 -


Recuerda el escritor Antonio Reyes que esta copla fue compuesta en un cafe pr6ximo a la "Gran Via" cierra tarde del mes de mayo de 1921 poco despues de haber sido cogido y muerto en la Plaza de Madrid el torero Florentino Ballesteros. En si era un hornenaje de los artistas en memoria del diesrro tragicarnente fallecido y SU melodia rapidamente cundi6 por toda Espana. Raquel Meller vivi6 hasra principios de 1964. Falleci6 a la edad de 79 afios en su retiro de las afueras de Barcelona, cuya municipalidad acord6 recienternenre erigirle un monumento. Habia sido una gran embajadora de la canci6n.

Raquel Meller nacl6 en Zaragoza el ano de 1888, hablendo comen­ zado su vlda artistlca, prlmero en el Palacio de Cristal y luego en el Alcazar Espanol de Barcelona. Los hermanos Alvarez Quintero dljeron clerta vez refl· rlendose a su personalldad artistlca: "A veces el espectador cautlvado, cree observar que la voz tiene luz y los ojos muslca". Ademas de "Valencia" y "El Rellcario" otras canclones de exlto lnolvtdable fueron "Gltana" y "La Mon­ teriaf' estrenadas en la "Sala lmperio". Raquel Meller, tenia la Cruz de la Legl6n de Honor conferlda en 1932 por el Goblemo de Francia. Sus ultimas actuaciones como artista fueron para la compania vienesa de "Franz Johan". Fllm6 entre otras peliculas "Violetas lmperiales". Si alguna voz guarda seme­ janza con la suya es la de lmperlo Argentina. Ambas agotaron en los escena­ rios del mundo hlspano­americano el repertorio sentimental del cuple.

­"Curlosa la soc:ledad caraquena respecto de las vlsltas de etiqueta, las cuales se hacian por la tarde. Era necesaria la venia de la familia obsequi• da con horas mas· o menos de antlcipacl6n, con lo cual se recordaba que debfa prepararse a reclblr a la familia obsequlante, con conflturas y bebidas, que se servian en platos y platillos de China o def Jap6n". Aristides Rojas,. "Capitulos de la Hlstoria Colonial de Venezuela" Pag. 115.

­

171 ­


LA BELLA

OTERO

Una de las bailarinas mas famosas que ·uenara casi medic siglo en la historia del teatro ligero y de la galanteria en Europa fue la "Bella Otero". Con su extraordinaria belleza fisica cauciv6 al gran pubico y el coraz6n de los politicos, banqueros, princi­ pes y literaros mas famosos de SU tiempo. Su presenracion en el Tearro Kursaal de Madrid en la primavera de 1906 con las her­ manas Anita y Marfa Delgado consrituyo un clamoroso exiro. El mismo escritor Reyes evoca en alguna pagina de sus Memorias los galanteos de que fuera objeco la bella danzarina por genre de la importancia de Eduardo VI Rey de Inglacerra, del Baron de Rothschild y del Sultan de Turqufa, quien la invic6 con rodo su elenco a la ya occidencalizada ciudad de Consran­ tinopla. Su epoca mas gloriosa en las tablas data de 1918 a raiz del armisticio cuando participo en una serie de funciones bene­ ficas haciendo una recorrida triunfal por las mas importances ciudades de Francia. Casi coda su forcuna la dej6 en Momecarlo. Senna una irrefrenable pasi6n por el juego. Murie en enero de 1966 a la edad de 83 afios en su retiro de la Costa Azul, abandonada y pobre. Los peri6dicos dedi­ caron enronces algunos reportajes y evocaron la epoca de sus exitos y glorias en el mundo tearral y romanrico de aquel entonces. En el Descubrimiento y en la conquista inicial, el elemento humano llega. do a America estaba formado, salvo excepciones de un modo mayoritario por hombres lo cual explica el lmpacto del mestizaje desde los comienzos. Tamblen resulta claro que en etapas posteriores del poblamiento y la conquista un numero apreciable de mujeres acompafiaba a la hueste. Manuel Pinto, "Primeros Vecinos de Caracas". P8g. 19.

­

172­


La Bella Otero, en una de las mas llamativas poses artistlces. Es otra de las 1rna.

genes de "atracci6n" distribulda por la empresa tabacalera entre los fumadores de la marca "Fama de Cuba". Pertenece a la colecc16n de Jorge Coll Nunez.

­

173 ­


LA CASA AMABILLA Numerosas leyendas corren alrededor de la Casa Amarilla, uno de los edificios mas antiguos de la ciudad y hoy sede del Ministerio de Relaciones Exteriores. Dicho inmueble paso de ma­ nos de la Diputacion Provincial al Gobierno de la Nacion por Decrero de fecha 19 de noviembrede 1840. LA DIPUTACION PROVINCIAL DE CARACAS C onsiderando: 19­Que el Gobierno de la Republica la ha excicado a renovar el negocio que desde i834 propuso ella al Cuerpo Legis­ larivo sobre el edificio que posee la provincia en la esquina del Principal de esta ciudad; 29­Que la propuesca que por acuerdo de la Dipuracion se hizo al Congreso, fue la de ceder el edificio a la Nacion por las cantidades erogadas por las rentas municipales; y 39­Que obteniendo la provincia en parte de pago los edificios que ofrece el Gobierno, se hara de un local bien capaz para la Diputacion, Concejo Municipal y Oficinas Provinciales, y podra ademas destinar la suma que recibira en rneralico a la construccion de una carcel de que carece esta ciudad, RESUELVE: Articulo 19­ La Diputacion provincial vende al Gobierno de la Nacion el edificio de la esquina del Jrincipal y las canas­ tillas y portales de SU frenre en el ultimo trarno de la plaza, que pertenecen al Concejo Municipal de esre canton, excluyendo la· arqueria que sirve de base a los portales. -174-


Por el primer balc6n del 2' pl10 a la derecha se lanz6 el President• Cipriano Castro a raiz del temblor que sacudi6 a Caracas la madrugada del 29 de octubre de 1900.

Solo por clrcunstanclas ocaslonales se podfa observar un movlmlento lnuslta­ do de carruajes en los alrededores del Palacio Federal. . (Postal coloreada por Marisa Kuclcs).

­175­


Articulo 2<>­Recibira en pago las cancidades siguiences: rreinta y un mil quiniencos pesos invertidos en el edif icio hasta el 29 de noviembre de 1834: treinta y ocho mil cienco treinta y dos pesos, cuarenca y siere centavos Jnvercidos desde aquella fecha hasra hoy; y las dernas cancidades que se eroguen desde esra fecha hasta que esre contraro sea racificado por el Congreso. Igualrnenre recibira siere mil . pesos por las canastillas y porrales. Arrfculo 39­El pago de la suma coral del edificio se verificara en los rerminos siguientes: IP­Admire la provincia las dos casas ofrecidas por el Gobierno, una la antigua administracion de tabaco, y otra la con­ rigua hacia el Oesre, que servia de almacenes de aquella adrni­ nistracion, las cuales se valuaran por peritos nombrados por el Gobierno y el Concejo Municipal de esta ciu<lad, y se recibiran por las dos cerceras panes de sus avaluos. 2<>­Siece mil pesos que se pondran a disposicion del Concejo Municipal de esce canton. 3<>­ Cinco mil pesos en rneralico, dos meses despues que sea ratificado esre convenio por el Congreso. · 4<>­Y el resto de la suma en tres afios de plazo por sextas partes, cornenzandose el primer pago el dia primero de Julio del afio pr6ximo de 1841. Articulo 49­ Se nornbrara por la Diputaci6n una comi­ sion de dos miembros, para que bajo las anceriores bases proceda a formalizar el contrato con el Gobierno y a ororgar la escritura correspondience luego que el Congreso presre su. aprobaci6n. Arnculo 59­La Dipucaci6n da por definitivamenre con­ cluido y ratificado el negocio, que bajo las anceriores bases hagan sus comisionados. Ardculo 69­Aprobado por el 'Congreso esre contrato, procederan los mismos comisionados, asociados del adminiscrador principal de rencas municipales, a· la entrega y recibo de los res­ pectivos edificios con las formalidades estipuladas. En caso de falcar alguno de dichos comisionados, sera reemplazado por el Concejo Municipal de esta ciudad con uno de sus miernbros. -

176 -


Estampa poco conoclda entresacada del llbro "The Land of Bollv.r W•r, P.. ee •nd Adventure In the Republic of Venezuela", por James Mudie Spence, cuyo original consultamos en I• Academia de I• Hlstorl•. Al pie de I• llustrKl6n se lee: "llumlna· tlon of The Plu• Boliv•r, Car8C8s". Esta obr• fue editada en 1875.

Articulo 79­Los comisionados daran cuenca a la Dipu­ caci6n en su pr6xima reunion de todo lo que ejecucen en vircud de la aurorizacion que se les da por esca ordenanza. Artkulo 89­Comuniquese al gobierno de la provincia para su ejecuci6n. Dada en Caracas, a 19 de Noviembre de 1840, afio 11 9 de la Ley y 309 de la Independencia.­El Presidente, M. Pala­ cio.­El Secretario, Ignacio J. Charquert. Gobierno superior de la provincia.­ Caracas, Noviem­ bre 21 de 1840, 119 y 30­Ejec{icese.­Bartolome Manrique.­ El Secretario, Francisco J. Perez.

­

177 ­


Por decreto de 20 de febrero de 1895 dispuso el Goblerno levantar • la entrada del paseo El Calvarlo el Arco de la Federacl6n. La ejecucl6n de este monumento conmemoratlvo foe encomendada • los arqultectos Juan Hurtado Manrique y Alejandro Chatalng. En la parte mas elevada puede apreciarse un motlvo aleg6rlco • la Guerra Federal. A cada lado y de frente adosadas a la estructura sobresalen eseulturas femeninas sostenlendo espadas guerreras. Crespo complet6 con obru de ornato la lnlciatlva de su antecesor Guzman Blanco.

Fachada del antlguo camposanto de los Hijos de Dlos, al norte de San Jose del Avila.

­178

­


Somnollentos los aurlgas descansan en el pescante a la espera del eventual pasajero ·en aquella solitaria ciudad. El preclo de "una carrera" era de Bs. t,50 dentro clel perimetro urbano.

-179

-


LOS SUCESOS

La tarde del 21 de dlclembre de 1935, el pueblo atac6 e lncendl6 autom6vllea oflclalea eataclonados a las puertas del Palacio de Justlcla y sede de la Gobernacl6n Dlstrl· tat, entre otros el de Eustoqulo G6mez. (Fotografia del Dr. Marcel Granier).

Esqulna de Pajaritos hacia San Francisco, poco deapues de haber sido saqueada una Tlpograff1, a raiz de la muerte de G6mez. En 11 fotografia vemos • "La S• grada" dlrlglendose al 91lope hlcla el sltlo de los sucesos para tratar de contener la vlolencla. l6pez Contreras como sucesor de G6mez en el poder, logr6 sortear con exlto la tensa sltuacl6n politic• y asfmlsmo pudo encaminar el pals hlcia la democracla lnstltucional.

­180­


1936

DEL

Hist6rica Imagen de los sucesos politicos de 1936 en la cual vemos • la caballeri.­ marchar frente • la Escuela de Musica ­Santa Capilla • Veroes­ precediendo uno de los camiones militares, "lngenleros tren" movlllzados en los prlmeros dlas de su Gobierno por el General Eleazar L6pez Contrer.. para eontener la furl• popular desatada1 a raiz de la muerte def dlctador. (Foto cortesia del Dr. Marcel Granier).

Despues de una paslvldad qua habia tenldo e.. 1 tres decades de duraci6n, la eluded parecia despertar con furia en los sucesos politicos de diciembre de 1935 y febrero del 36. En est• fotografia tomada desde la Esquin• de Llaguno podemos ver una manifestacion encabezada por la Federaclon de Estudiantes cuando se dlri­ gia a Miraflores, poco despues de los traglcos aconteclmlentos ocurrldos en la Plaza Bolivar.

­

181 ­


EL CAMBIO La· n6mina o distribuci6n de presupuescos de miles de millones de bolivares anuales como signo de prosperidad fiscal, data de muy poco tiempo. Basrarfa recordar, por ejernplo, el hecho de que durance la administraci6n del Presidence Medina Angarita ­1941­194 5­ los ingresos fiscal es no exceden de 300 millo­ nes. Es sinembargo el momenco en el cual se emprende la gran obra transformadora de Caracas, con la reurbanizaci6n de "El Si­ lencio", grupos escolares e importances obras de vialidad. El siguiente parrafo tornado de un informe del Goberna­ dor Diego Nucete Sardi al Concejo Municipal en 1943 es elo­ cuente: · "Segun el ultimo censo, la poblaci6n del Disrriro Federal es de cuatrocientos mil habicances, de los cuales 300.000 corres­ ponden a Caracas, mas de 10.000 al puerto guairefio y el resto a las demas parroquias y zonas rurales del Departamento Vargas. La importancia politica y comercial del Distrito Federal, robusteci­ da considerablernente del treinta y seis a hoy, y la circunstancia de sec una de las comarcas mas saludables de la Republics, expli­ can la afluencia de genres de la provincia que, sobre rodo en lo que va de regimen dernocratico, se ha hecho notar en el centre. Esce fen6meno que .tiende a agudizarse a medida que surgen com­ plicaciones originadas por la guerra, ha traido como consecuencia el nacimienco de una serie de pequefias induscrias y el aumento, verdaderamente asombroso, de las conscrucciones, que en Cara­ cas alcanza su punto culminante con la reurbanizaci6n de El Si~ tencio, plan de gigancescas proporciones realizado por el gobierno del general Medina Angarica con el concurso tecnico del Banco Obrero". Ese mismo afio comienzan a desarrollarse las urbanizacio­ nes del Este entre otras las de Los Caobos, Campo Alegre y Alta­ m1ra. -182-


Bloque

"7" de El Silencio

frente

a la Plaza Miranda,

en 1943.

Entrada de la urbanizaci6n Los Caobos, promovida por don Luis Roche tal como se hallaba en 1943. En esta fotografia esta igualmente patentizado el signo de la soledad. Ni un edificio, ni una sola casa construida.

-

183 -


El crecimienco demograf ico de Caracas ha escado circunscrico a las posibilidades de espacio fisico. Para hacer un calculo de cuan giganresco ha sido esre fen6meno durance los ultimos cinco luscros . bascaria serialar que de 110 habitanres JX>r hectarea en 1945, la densidad subi6 a 180 en 1966. El area urbanizada en el mismo periodo creci6 de 4.000 a 11.000 hectareas, segun dacos obreni­ dos del informe proporcionado por la Oficina Ministerial del Trans­ porte. Pero ese crecimiento repentino y desmedido de la ciudad no es producco de un hecho cuyos fundamencos esran desligados de una razon econ6mica cuya acci6n solo gravica sobre el proble­ ma dernografico y el estallido de los nucleos urbanos. El desa­ rrollo ha estado enmarcado fundamencalmence JX>r el aprovecha­ mienco progresivo ­bueno o malo­­ que se ha hecho de nuescra riqueza a raiz de la reforma de la legislaci6n fiscal pecrolera en 1943. De los dos millones de personas que comparten la vida hoy en Caracas, unas 647 .051 viven en apartamencos. Se escima que se han conscruido unos 8. 5 00 edificios. Calculos hechos JX>r la mis­ ma Oficina Ministerial del Transporte adviercen que dos millones de personas viviran en 1990 en 20.000 unidades residenciales proyeccadas en sencido vertical. Segun dicho informe la necesidad de espacio obligara a que la ciudad se planifique verticalmente para aprovechar hasta el 60 por cienro del area disponible. En Caracas hay un aucom6vil por cada 11 habicances. Mas de 250.000 vehiculos se desplazan acrualmente por la red vial de la ciudad, la cual pese a que se han invercido cerca de dos mil mi­ llones de bolivares en desarrollarla, ofrece solo un 26 por ciento de vias rapidas. En conjunro, las autopisras, avenidas, calles, erc., represencan el 17 por cienco del total del espacio vital de la ciudad

­"A Sablina Grande, hoy parroqul• de El Recreo, acuden los caraquenos en la estac16n seca para bai\arse en el rio, y es cosa ficll obtener alli, en esta estacl6n, una cau para alqullar". De "Relacl6n de un villje • Venezuela, Nueva Granada y Ecuador", por el Consejero Usbc>L

­184­


ESQUINAS

DE CARACAS

No pocas son las Esquinas de Caracas que han cambia­ do de nombre. Por ejemplo en un mapa de 1843, reedirado en la colecci6n "Contribucion al Escudio de los Planos de Caracas", con rnotivo del Cuatricentenario, por Irma De Sola Ricardo, apare­ cen esquinas como las de: De Tio Pedrico; del Padre Guzman, de Ramon Pifiango, ( Pifiango), Padre Mufioz (Mufioz ); de la Ala­ meda, del Tenience Rei, Cuartel de Veteranos, del Basurero, (Cu­ ramichate) , Las Marrones, del Teque, Cerrito del Diablo (Plaza Lopez), Algarrobo (Puente Yanes), J uego de Peloca (Pele el Ojo). Ademas de las menciones precedences cabe sefialar que el piano correspondienre al afio 1852 incluye denominaciones can pintorescas como las de Tio Medina, Las Pilicas, de Ochoteco, de la Saba y de San Mauncio, esta ultima hoy Santa Capilla; de la Faltriquera (Marcos Parra), la Sociedad, Mercaderes, hoy la Bolsa, de la Sanabria, Pilita de San Lazaro, Casa de la Misericordia. Esquina de Santana y de Don Gregorio, del Campo Santo; monte de El Calvario y El Silencio; San Felipe, de la Sociedad y de Matanza, asl como tambien "Campo de Maree", de jesus Maria y Jose, Quebrado y Cuarcel de Milicias; del Hoyo Vicioso, asi como las de Vicente Hernandez y del Padre Rodriguez; de los Palacios; Hacienda del Padre Quintana, del Amparo y del Marques de Leon; Alcabala de El Valle, de Echezuria, de Aurioli y de la Noria. Hemos saltado algunos nombres que en la accualidad exis­ ten, habiendo mencionado solo aquellas Esquinas ya desapare­ cidas o conocidas con orras denominaciones. En 1865 ­­­<:oncluida la Guerra Federal, existian Calles de Esce a Oesre llamadas Las Fuentes, La Paz, Proteccion, Margarita, Bravos, Ciencias, Sol. -

185 -


Extrai'ia fotografia, del archive de Jose Francisco Martinez, correspondiente a la Esqulna de Pajarltos. El "traflco" esta detenldo mlentras una carroza funebre dobla hacia Santa Teresa.

Esquina del Padre Sierra, donde se inicia el boulevard oeste del Capitolio Federal. La postal cortesia del Dr. Armando Betancourt fue tomada en 1918 con motivo de la visita oficial a Caracas de don Fernando Maria de Baviera y BorbOn.

-

186 -


Orinoco, juncai, Union

(no lejos habia una Gallera publica) ,

Agricuitura, Fertilidad, Lindo,· Comercio, Leyes Patrias. Por ejern­ plo en la Calle Margarita estaban el Teacro Caracas; el Colegio Chaves, y el Convenco de las Monjas Carrnelitas, en la Calle Los Bravos, la Iglesia y Plaza de Candelaria; en la Calle de Cien­ cias, el Convento de las Monjas Concepciones, Capilla del Semi­ nario, Palacio Arzobispal, Iglesia y Plaza de San J acinco; en la Calle Orinoco, las Oficinas de la Loterfa; en la Calle de La Ferti­ lidad, se hallaban la Iglesia y Plaza de San Juan; la Calle Lindo, Gobernaci6n de la Provincia, Corte Superior, Juzgado de Provin­ cia, J uzgado de Circuito ( Esquina del Cuarrel Viejo). A la Catie Comercio daba la Iglesia y Plaza de Altagracia, y en la Calle Leyes Patrias, · 1a Iglesia de Las Mercedes, la de San Mauricio, Tesoreria General y Tribunal de Cuencas ( Esquina de San Mau­ ricio y Principal), Palacio de Gobierno, ( Esquina de Principal), Colegio Roscio, entre La Palma y Miracielos, y La Carcel, esquina de Los Palacios. En 18 5 9, se concaba con el Paseo de Caracas, o sea Plaza de la Trinidad, al Norte. Habia, solar y cirnienros para la penitenciaria; Casas parciculares, Iglesia, jardin, pila de agua y SU cisterna, un belvedere para Comar vistas, arboles grandes y algu­ OOS bancos; arbustos y Hores, enramadas con asiencos, senda de pasear y faroles (hoy es Plaza del Panteon ) . El 19 de abril de 18 5 9 se comenz6 la edif icaci6n de esca Plaza de la Trinidad. (Daros tornados del Diccionario de Mac­Pherson). ( y de la obra de Irma De Sola Ricardo) .

-"Los caraquenos beben agua del rio Catuche, recogida en un dep6slto que hay cerca de la entrada de la poblaci6n, en el camino de La Gualra, hacla la sierra; es distribuida despues por conductos de barro cocido por varias fuentes publlcas y casas partlculare.s". De "Relaci6n de un viaje a Venezuela, Nueva Granada y Ecuador", por el Consejero Lisboa. P&g. 70.

­

187 ­


LA CASA NATAL ..... Mas por sobre minucias, mas alto que cualquier otro comentario, hay un hecho absorvente, absoluto, dominador dcl pensamiento y de la emocion: en esta casa naci6 Simon Bolivar, el Libertador, el 24 de julio de 1783. En la casa mas eminence de la ciudad. Y a la vista de ella puede bastar para llevar de Caracas una impresi6n honda que durara canto corno la vida del visirante Angelica Palma, paso un dia por La Guaira. La escada en el puerco del buque que la llevaba a Europa seria de pocas horas. La gencil limefia, la hija de Ricardo Palma, com6 un aucom6vil para dar una visira a la ciudad. Y por coda orden dijo al chofer: ­Lleveme a la casa donde naci6 el Liberrador . . . " El parrafo anterior corresponde a una emocionada pagina del cronisra e historiador Santiago Key Ayala. La Casa de los Bolivar, foe adquirida por la Nacion en el aflo 1910, luego que una Junta Promotora integrada por Manuel Diaz Rodriguez, Santiago Key Ayala, Eduardo Calcano, Angel C. Rivas, Jose Vicente Lozano, Oscar Blanco Fombona y L. Torres Abandero, hizo los arreglos necesarios para despertar inreres a fin de que la casa fuera convercida en sitio de veneraci6n y homenaje a la memoria del padre de la Patria. El cosro del inmueble, para enconces propiedad de la seno­ ra Ana Teresa Ibarra, viuda de Guzman, foe de 114.326 bolivares, de los cuales 46.675,25 aporto el pueblo de Caracas Fue abierta ·al publico, durance una sencilla cerernonia con rnotivo del Pruner Centenario de la Independencia y el pintor Tito Salas tuvo a su cargo la decoraci6n interior del inrnueble. ­"En la margen lzqulerda del rio Anauco, y por consiguiente contiguo a \a cludad, esta el primer lngenio de cat6 de la veclndad de la capital, uno de los que mayores beneflclos proporciona a su dueiio". · De "Relac16n de un vlaje a Venezuela, Nueva Granada y Ecuador", por el Consejero Usboa. Pjg. 109:

­

188 ­


Fachada y alrededores de la Casa Natal del Ubertador tal como podian verse en 1919. (Postal cortesia de Gumerslndo Torres hljo).

En 1918 establecio el Padre Machado un internado para ninos pobres al norte de la cluct.d, bajo la advocacl6n de San Jose del Avila. Esta obra social ha sldo con· tinuada por los Benedictinos. La presente postal nos muestra aspecto que ofrecia el acceso al Colegio y pequena Iglesia, y una vista panortmica de la cludad en. 1920. (Foto del Archlvo de Monsei\or Je.Us Maria Pellin).

­

189 ­

d


DEVOCION Y DRAMA

Lo mejor era la ingenuidad y sencillez de las costumbres populares, el amor de padres a hijos, y la unidad y convivencia de los grupos familiares. De una foto tomada del Album de Plinio Mendoza Neira 1945 -por Tierras de Venezuela- durante la admlnlstraclcn Medina Angarita. (Reproduccion Antonio Hueck Condado).

­190­


DE LOS CARAQUENOS

Lo peor, la violencia, el conflicto pertnllnente con su secuela de victimas, el injus­ tificaclo culto a lo material, y la progresiva disoluci6n de la familia, perdida de la fe y escua valoracion de lo espiritual y perdurable de la vida. (Foto de archivo de El Universal, "saldo de un dia d~ vlolencia en Caracas" por Salvatore Veneziano, copia de Ely Saul Lopez Montano).

-

191 -


LO MEJOB Y LO PEOB No codo en aquel ciempo era bueno, ni codo lo de nuestra epoca es malo. -Lo peor eran las enfermedades y las pesces que diezma­ ban a la poblaci6n. Porque claro, no exiscia ni el enrerobioformo, ni la penicilina, encre otras panaceas modernas. Lo mejor: la vigen­ cia del afecco, la paz, la cranquilidad y la vida reposada. Los mucha­ chos de enronces teniamos para nuescro solaz los frescos y apa­ cibles senderos campesinos de Gamboa y la sefiera canci6n del Anauco. (Que es lo mejor y lo peor de Caracas de hoy? ­Las condiciones de conforcabilidad que tiene y ofrece la vida es lo mejor. Poder, por ejernplo, helar el agua en una buena refrigeradora; conservar la leche inconcaminada; usar racio­ nalmence la maravilla que es el transistor, uno de los mas· grandes logros de la tecnica humana junco con la exploracion del espacio. Eso pertenece a todos, es verdad, y enrre codos los hombres del rnundo, los caraquefios somos unos de los grupos que podemos disfrutar de can sefialadas vencajas. Lo peor es el desafecto, ta· poca pre­disposicion del hombre para culcivar la amiscad .desin­ teresada. (Cuales eran las caracrerfsticas de ayer y cuales son las virtudes de hoy en el caraqueiio? ­Yo creo que lo principal ayer y hoy es su idealismo, su arnor a la ciudad, el orgullo que ha senrido siempre de consi­ derar a Simon Bolivar, el Genio de America como su paisano. ( Respuestas a unas preguncas del periodisca Ruben Gonza­ lez, publicada en el peri6dico "La Verdad" 23 de diciembre de 1966, afio vispera del Cuacricencenario de Caracas). De todos nuestros queridos y saudosos sltios, El Calvarlo perdura slem­ pre en el ambient• apltallno, trasegando sus vlejos arboles todo el esplendor de otras epocas, en que con el nc>mbre de "Paseo Guzman Blanco" fue lnaugu­ rado en 1875. Ha sido teatro de Batallas y muchos aconteclmlentos que por

su indole formarian un glosarlo de anecdotas venezolanas. Nlcol6s Ascanlo Buroz "Cr6nicas de Santiago de Le6n" Pig. 47.

­192

­


MIRANDA

Con motlvo de las fiestas centenarias de 1911 fue eriglda en medio del parque adya· cente al Pante<>n Nacional, una estatua del Precursor Generalfslmo Francisco de Miranda. Como se sabe, sus restos jamas pudieron ser repatrlados ya que se perdieron en el osario comun del cementerio de la prlsl6n de Cadiz. Nuestro plntor Arturo Michelena, perpetua en uno de sus mas famosos llenzos la Imagen del Pr6cer.

TEATRO MUNICIPAL La primera temporada lirica que se present6 en los tablados del Teatro Guzman Blanco, estuvo a cargo de una compafiia italiana traida por el empresario Fortunato Corvaia. La opera elegida para la funeton inaugural fue El Trovador, segun recuerdan en "Sesquicentenario de la Obra de Caracas", Carlos Salas y Eduardo Feo Calcano. lnicialmente se habia senalado el 3 de enero de 1881 como fecha de apertura del Municipal, pero por lndlsposlcien de la primadonna, fue pospuesta para el siguiente dia. El Presidente de la Republica y su senora esposa, acompanados de los Ministros asistieron a la funclon inaugural.

-

193 -


LA REFORMA TRIBUTARIA El Presidente Isaias Medina Angarica es en propiedad des­ pues de Guzman el segundo gran transforrnador del escenario colonial caraquefio. Durance su adminiscraci6n hace demoler el viejo Silencio para convertirlo en una urbanizaci6n destinada a familias de clase media; concibe la Ciudad Universitaria y asi­ mismo promueve la conscrucci6n de una serie de grupos escolares, hospitales y autopistas. Con el escaso presupuesco de no mas de 300 millones de bolivares, Isaias Medina Angarira realiz6 verdaderos prodigies ad­ ministrativos. En el informe que presenc6 al Congreso su Minis­ tro de Hacienda, don Rodolfo Rojas, ­1943­1944­ la distribu­ ci6n concede el mas alto porcenraje al capitulo de Obras Publicas. Le siguen en importancia Sanidad y Educaci6n. S6lo el l 0 por cienro destina el Presidente Medina al Ministerio de Guerra. Tanto la reforma de la legislaci6n petrolera como el estable­ cimiento del Impuesro sobre la Renea y otras medidas de caracter fiscal le permitieron hacer un calculo optimists con respecco al rengl6n de ingresos durance lo que iba a ser el ultimo afio de su mandate: 400 millones de bolivares, suma esra menor al presu­ puesro de hoy correspondiente al Disrrito Federal. Seda asimismo importance recordar el hecho alrarnente beneficioso para el rendi­ rniento adrninistrarivo segun el cual mas del 5 5 por cienro de los ingresos eran destinados a obras reproductivas. Por la manana a eso de las ocho era cuando la plaza del mercado estaba en toda su gloria de decoracl6n, de actividad y de bulliclo, presentaba un aspecto -.eductor. Los tenduchos abiertos de par en par, mostraban estantes cuajados de luciente quincalleria, los armatostes se veian cubiertos de panuelos a chi· llones cuadros, de vistosas e18sticas, de sombreros, medias y otras prendas destinadas a ambos sexos. Bolet Pera.za. Articulos de Costumbres. Pig. 76.

­194­


Una de las grandes conqulstas del regimen Medina Angarita fue la reforma de la legislaci6n petrolera, hecho este que permiti6 a partlr de marzo de 1943 el incremento de las rentas fiscales de la nacion. En la foto edificio ocupado por el Ministerio de Fomento en 1944, siendo. titular de ese Despacho el Dr. Gustavo Herrera.

-

195 -


Hl1t6rlc. foto de R•fael Revenv­ en I• cu•I vemo1 •I Presldente lsalH Medin11 Anv­rlt• haclendo au entrllCbt • C•r•M•, en coche descubierto •comp•ii•do de au Hpo18 despues de I• jlra , .. uzacta por algunos p81ses bollv8rlanos, en 1943. El pueblo de C•r•c.• le reclbl6 con •pl•usos y Hores. (Reproduccl6n de R•fHI M6rmol).

Otro ioforme del Ministro de Hacienda, don Rodolfo Rojas, cornenrado en 1944 por ­Plinio Mendoza Neira­ senala que para el 30 de abril de 1944 el Banco Central de Venezuela renia oro en deposito por valor de Bs. 307 .207 .967 y los billetes erni­ tidos y en circulaci6n para esa misma fecha represenraban Bs. 275.405.700, a codas luces una econornia s6lida y saneada. Algunos estudiantes o genre nacida despues de 194 5 podria pensar que la politica administrativa del regimen era impopular. La siguiente declaraci6n del mismo Minisrro Rojas, explica su orientaci6n para conrener cualquier tendencia especulativa frenre a criricas acusaciones sobre alza de precios en abril de 194 3. "Nuestro Gobierno ha intervenido, interviene e intervendra en lo futuro cuando los Iegitirnos derechos del pueblo requieran su intervencion y cuando las circunstancias amenacen destruir el . justo equilibrio que debe existir siempre entre el productor y cl consumidor". ­196

­


Fotografia de la Plaza Venezuela, tal como se hallaba en 1~. No habla paso • dos niveles. Los autom6vlles clrculaban en distlntas direcclones. A la lzquierda terrenos hoy del Jardin Botanlco y de la U.C.V. (Foto cor1esia de Fred Charles Heath).

Dijo rambien el Miniscro Rojas que "en lo econ6mico hay un inreres supremo que debe tenerse en cuenta por encima de co­ dos los dernas, y ese es el valor humano, con sus necesidades y problemas, con su mayor o menor capacidad.para la lucha y como fuerza de progreso efectivo y. constance para la Nacion". Hombre de espiritu humano y civilista asi como de innata bondad y sencillez personal, su recuerdo pervive entre los vene­ zolanos.

Salir como la CopacaNna es frase muy conoclda entre las famillas de C• racas, hace siglos, queriendo significar con ello • una persona o famllia que sale poco • la calle, de cuando en cuando y en determinados casos reeee­ dando de esta manera a la virgencita de Copacabana que, desde 1596 hasta ahora, la sacaban en procesi6n de San Pablo a la Metropolitan• para que lloviera y tambien cuando la langosta visitaba las sementvas· de Caracas. Aristides Rojas. Cr<>nicas ·de Caracas. Pjg. "3.

­197 ­


~

1~

~!arJ•

l'IP't"

Unldol de V

!

poet&l.

Unl6a Pbltlt Universal.

~

Cou'tlpCJlllllMle

~~ t4V ~ ~ ~ ~t :&' \.>..........._ ~. i ...fl

l 1

t.~l ilMl l il

4.;.

e: ~

•'Jtl• ..J UNA OPINION DE CARLOS D'ASCOLI "Ante ese estado de cosas, no es, pues, de extraflar que en los progra· mas de los dos candldatos a la Presidencia de la Republica para el periodo 1941-1946el General Medina Angarita y el maestro R6mulo Gallegos, apareclese de manera promlnente la reforma trlbutaria. Por cuanto al ultimo corres· ponde, recogia, ademas, una asplraci6n fundamental de ORVE y el P. D. N .. partidos que hlst6ricamente son los precursores de "Acci6n Democratlea", la organizaci6n politica al serviclo def pueblo venezolano que habia de nacer de la campaiia presldencial de Gallegos. Y en cuanto se refiere al General Isaias Medina Angarita, quien habia de tener la oportunidad y el meritcS de realizar desde el poder la lmplantaci6n del lmpuesto sobre la renta, hay que decir que no solo hizo efectiva asi una incumplida promesa del regimen precedente, sino que bien puede deducirse que satisfacia una conviccion personal en pro de la justlcia fiscal, hondamente arralgada en su animo por la lectura de la tesis doctoral de su hermano Julio, que trata precisamente con toda propiedad el tema del impuesto sobre la renta y la necesidad de su establecimiento en Venezuela. Por Decreto de 31 de julio de 1941, suscrito por el Presidente Medina Angarita y por el Ministro de Hacienda, doctor Alfredo Machado Hernandez, fue creada la Comisi6n de Estudio de Legislaci6n Fiscal que habia de aboearse a la preparaci6n de la reforma tributaria y que elabor6 el ante-proyecto de Ley de lmpuesto sobre la Renta, presentado como proyecto del Ejecutivo al Congreso Nacional en las sesiones de 1941. Fueron designados para esa Comision los doctores Manuel Egaiia, entusiasta ps.epulsor de la reforma y animador infatigable de la Comision, Julio Medina Angarita, Rafael Pizani, Aurelio Arreaza, T. C. Salazar Maza, Cesar Gonzalez, Manuel Maria Marquez (hijo), Manuel Perez Guerrero, el capitan Pedro Gonzalez y quien escribe". Carlos A. D'Ascoli (tornado de "Venezuela 1945") Plinio Mendoza Neira.

­

198 ­


Las fiestas de carnaval sollan ser motlvo de sano regocifo calle)ero en le cludad del primer cuarto de siglo. Esta foto del album de la senora Josefina Reyes de Manrique es evocadora de aquel antruejo, hoy reducido a los balles en los centros social es.

Al fondo a la izquierda fotc)grafos con sus primitives "camaras de caj6n" a la espera de sus clientes. Los domingos y feriados eran productlvos para estos continuadores del arte de Daguerre. Ya en 1930 los fot6grafos del mercado tenian el merito de entregar sus postales en clnco minutos.

-

199 -


EL CAMPOSANTO

Vista de\ Cementerlo de los Hljos de Dlos. Alli se perdleron los restos del perlodlsta y trlbuno Juan Vicente Gonz41ez.

"La impresi6n que produjo la epidemia del colera, obli­ go a varies vecinos de Caracas a pensar de nuevo en la creaci6n de un cernenterio que correspondiese a las necesidades de la capi­ tal, y en la rnafiana del dos de noviembre de 18 5 8 se reunieron 50 personas a fin de colocar la primera piedra del nuevo santo lugar en la planicie superior al pie del cerro del Avila, a que conduda un carnino Carretero que comenzaba en Las Dos Pilitas. Los asistentes, poniendose en forrnacion, trazaron alrededor de la piedra fundamental el drculo que simboliza la eternidad y en el costado derecho de la puerta principal colocaron un envase de vidrio conteniendo el acta que hacia el historial de la nueva obra y el reglarnenro de la empresa inserto en un ejemplar del Diario de Avisos. El senor Jose Padilla, ley6 el acta y discurrie­ ron los sefiores Olegario Meneses y Francisco Conde". Tornado de la Hiscoria Conternporanea de Vene­ zuela, obra de Francisco Gonzalez Guinand. ­

200 ­


TESTAMENTO DEL LIBEBTADOB

Copla del Cuadro de Federico Brandt "Testamento del Llbertador" de la colecc16n Ernesto Armitano. En el presente estudlo el Dr. Luis Villalba VIiiaiba, presldente de la Socledad Bollvarlana de Venezuela esclarece de una vez por todas las cir· cunstancias que rodearon los ultlmos lnstantes del Padre de la Patria en San Pedro Alejandrlno.

Por Simon Bolivar tenernos, tiene America, independen­ cia y nombre. Pero ese var6n sin segundo, codo genio, fue mas alla todavia, al dejarnos la herencia sustancial de sus ensefianzas, que hoy son no solo recogidas, sino estudiadas, analizadas, cerni­ das, por codas las naciones verdaderamente civilizadas. La vida de Bolivar para todos los pueblos redimidos por su verbo y su espada es hontanar inagotable de las mas ennoble­ cedoras rnediraciones y una fuente insustituible de ensefianzas que no debemos dejar en el plano de las efimeras fantasias, sino que han de traducirse en aleccionadoras realidades para un mundo sometido a las mas dolorosas y desgarradoras convulsiones. Hoy, como nunca, cuando se evade maquiavelicamente coda sumisi6n a un orden moral, forzoso es que los hombres y los pueblos se ­

201 ­


vuelvan agradecidos hacia el resplandor oriencador con el cual se alonga hacia la inmorcalidad el Hijo Maximo de la America Meridional. Una de las paginas mas encernecedoras de la historia de America, es aquella en que se narra la muerre del Padre en San Pedro Alejandrino, donde en torno del lecho rnortuorio los corazones unidos en un solo ritrno de amor y de veneraci6n rin­ dieron tribute, el mas preciado, de cuanros podian ser sofiados por los rnorrales. Alli se congreg6 la America de la epopeya, del sentimienro y de la accion. America supo cornpenetrarse de ese aero de' perdon y ha sabido valorarlo en su profundo senrido de eternidad. Monsefior Nicolas E. Navarro escribio una monografia amplificada como Homenaje de la Academia Nacional de la Histo­ ria al Padre de la Patria en CXXV Aniversario de su rransito a la Eternidad, (la primera edicion fue de 19 30), en la cual quedan pulverizadas las majaderias, por no decir patrafias, tejidas en corno a Jos sucesos que rodearon el fallecimiento del Padre de la Patria en Santa Marta. Para expresarlo con las mismas palabras de quien fuera inolvidable Presidenre de la Sociedad Bolivariana de Venezuela, Bolivar penetro en la eternidad envuelto en el radiance pabellon de su fe crisriana, como legirimo hijo de la Iglesia Carolica y con pleno derecho a la bienavencuranza celes­ tial. "No es solo el testimonio clasico del Dr. Alejandro Prospero Reverend, medico que lo asistio sin separarse un instance de su cabecera, y la garantia incontestable de la partida de entierro, documencos que cada uno de por si basta para poner fuera de duda el suceso, sino que tambien orros apuntes aurorizadisimos de personas que igualmenre los presenciaron se han venido a agregar providencialmente en este afio cencenario de aquella muerte ( 19 30) la particularidad de que quienes lo cuentan hacen resaltar el sincero sentimiento religioso de­ Bolivar y la manera viril con que se sobrepuso a coda vanidad de filosofismo descreido al dar esre ejemplo de surnision a Dios". Y al refutar a D. Salvador de Madariaga que "rnetio como a hurtadillas entre el rnatorral ·de las paginas de Apendice del rorno segundo de su malhadado -

202 -


libro la nota majadera de ncgar que el Libertador se confesara en el trance de la despedida de esre mundo y desconocer la fuerza de los tesrirnonios mas palrnarios", subraya con aquella precisi6n y exaccicud que le eran can caracceriscicos: El colmo de los colmos. Ni siquiera morir en paz con Dios le ha perrnirido a SIMON BO LIV AR Don Salvador de Madariaga. La certificacion

del Escribano Jose Catalino Noguera quc

inserta Monserior Navarro, lo dice rodo:

"Yo el infrascrico escribano publico certifico: Que el Exmo. Sr. Libercador de la Republics de Colombia, Simon Bolivar, a mi presencia y la de los Sres. ilustri­ simo Obispo de esta di6cesis Dr. Jose Maria Estevez, general comandanre general del deparramenro Mariano Montilla, general comandante de armas de Sama Marca Jose Maria Carreno, general de division Laurencio Silva, el auditor de guerra y marina del departarnento Dr. Manuel Perez de Recuero, el coronet Jose de la Cruz Paredes, el coronel Belford Wilson, edecan de S. E., el coronel de Milicias de Santa Marca Joaquin de Mier, el primer cornandanre de milicias de Barranquilla y Sole­ dad Juan Glen, el Juez polirico de Santa Marca Manuel Ujueca, el medico de cabecera de S. E. el Libertador Dr. Alejandro Prospero Reverend, el capitan Andres Ibarra, edecan de S. E., el capitan de la guardia de S. E. Lucas Melendez, y el tenienre de la misma guardia Jose Marfa Molina, firm6 la anterior alocuci6n que dirige a los Colombianos en su entero y cabal juicio, el dia 10 de los corrientes, despues de haber recibido los auxilios espiricuales en la hacienda de San Pedro Alejandrino, una legua distance de Santa Marca. Y para constancia f irman los referidos Sres. en la indicada hacienda, a once de diciembre de mil ochocientos treinta. Jose Maria, Obispo de Santa Marta.­ Mariano Montilla.­ J. Maria . Carreno++ Jose L. Silva.­ M. Perez de Recuero.­­ Jose de la C. Paredes.­ Belford Wilson, edecan de S. E. El Libertador.­ Joaquin de Mier.­ Juan Glen.­ -

203 -


Manuel Ujueca.­ Alejandro Prospero Reverend.­ A. Ibarra, edecan de S. E. El Libertador Lucas Melendez.­ Jose Marfa Molina.­ Ante mi: Jose Catalino Noguera, escribano. El Colo/on de Nicolas Eug. Navarro, Arz. Tic. de Carpachos, y en aquel entonces Director de la Academia de la Hiscoria, realza sobremanera el rnerito eminence de sus probanzas: Poe consiguiente, ­dice­ la pregunca lanzada en Caracas en febrero de l 8 7 7 en es cos terrninos:

c·Q11­ien administr6 los santos sacramentos al Liberta­ dor? r:·F11e el Obispo de Santa Marta o el Cur« de Mam,1­ toco? Docurnentos que esclarecen el punto. Queda hoy 23 de noviembre de 1930, definicivamen­ re concescada en esra forma:

El Obispo de Santa Marta, Dr. Jose Maria Estevez, con/ eso al Libertad or, pero los sacramentos de Viaico y Extremauncion se los administr6 el CMa de Mama.. toco, Pbro. Hermenegildo Barranco. Cuando finalize su vida en las playas atlanricas de Santa Mar­ ta, el verbo del Libertador, que hasta entonces no habia sido sino el Hijo Maximo de las Tierras Nuevas, cobr6 autentico timbre de universalidad. "Si, al sepulcro. . . pero les perdono", Palabras que segun Reverend parecian salir de la tumba y que a el y a los circun­, dantes no solo consternaron, sino les arrancaron lagrirnas. Ante la cristiana rnuerte del Liberrador todos los pueblos del orbe se ponen de pie cransidos de admiraci6n y gracicud. La Socie<lad Bolivariana de Venezuela, que para mi honor preside, experimenca el orgullo de ver corno venezolanos integra­ les y patriotas, como Guillermo ]. Schael, no cransigen con quienes 'rnenosprecian el heroismo y el apostolado de los varones de la Jndependencia y andan a la husma de cuanco pueda vanamence ernpariar la grandeza del Padre de la Patria. LUIS VILLALBA VILLALBA Caracas, diciembre 1968.

-

204 -


EL PICACHO DE GALIPAN

lmpreslonante imagen ofrece el Picacho de Galipan cuya maxima elevacion es de 1.978 metros. Desde esta altura pueden dlvlsarse las poblaclones de la costa, asi como los caserios de sus estrlbaciones habitados per famllias dedicadas desde hace muchislmos ai\os al cultivo de especies florales hortalizas y frutas. De alli proceden por ejemplo los claveles y duraznos y la mas bella variedad de flores y frutas que son traidas diariamente al mercado de Caracas. Desde la fragata en la cual Bolivar se alejara de La Guaira con destlno a Cartagena el S de julio de 1827, para no regresar, debi6 divisar con nostalgia la silueta del Picacho perdiendose tras el horizonte. (Foto del Sr. Eduardo Rooswaag).

-

205 -


ESTAMPAS PERDIDAS

Aspecto del primer tramo de la llamada "Gran Carretera Occidental" entre Cara­ cas y Antimano, conocido entonces como "La Vuelta del Pescoz6n", no lejos del sitio donde hoy se halla el nuevo Hospital de los Seguros Soclales. (Foto Cortesia de Rafael Romero).

Hasta no hace mucho tiempo existi6 un pintoresco "Paso a Nivel'' en el cruce de la linea ferrea Caracas­Petare­Santa Lucia con la entrada del Country Club. Por aque­ lla trocha =­adernas del tren­ circulaba un tranvia de dos pisos que hacia itlnerario regular entre la estaci6n de Santa Rosa y Petare. Actualmente es parte de la Avenida Libertador.

­206­


CRECIMIERTO EXPLOSIVO

La cludad comenz6 a tomar flsonomfa de meh'Opoll hace unos velnte anos, aunque solo fue a pertir de la decada del sesenta cuando se despert6 una verdadera furia en el campo de la construcci6n, llegandose hasta el extremo de lnvadlr con altas edificaciones algunas collnas circundantes. Esta foto tomada por el Ing' Carlos Blaschltz, reclentemente desaparecldo, reproduce la Imagen de la Plaza O'Leary de El Sllenclo. La cludad se hizo mlllonarla en 1956, casl a punto de concluirse las dos torres del Centro Simon BoHvar.

Alguien ha comparado el crecimiento experimentado por Caracas en los ultirnos 25 afios como "una estampida casi brutal". Bastaria recordar que hacia fines del afio 1945 la ciudad apenas llegaba al medio rnillon de habitantes. De alli que la construe­ ci6n del Hotel Majestic frente a la antigua plaza de San Pablo y el Teatro Municipal, en la decada del treinta se considerase una de las iniciarivas mas expresivas del progreso citadino. Solian alojarse en aquel elegance hotel de esrilo frances los huespedes del gobierno, jefes de estado, ciendficos, artistas, embajadores y rninisrros. Desde uno de sus balcones salud6 el malogrado can­ rarxe Carlos Gard el a miles de simpatizanres que le aclamaban en abril de 19 3 5. El edificio de s6lo 4 planras, fue demo lido una noche del mes de febrero de 1949 cuando comenzaban en firme los trabajos de apertura de la Avenida Bolivar. Desernpe­ fiaba entonces la gerencia del Centro Simon Bolivar el Ing? Oscar Rodriguez Gragirena. ­207­


En pagmas precedences tuvo el lecror la oportunidad de apreciar la encantadora ciudad d,e comienzos de siglo, la cual sufrio pocas modificaciones en cuanto al aspecco aldeano que ofreda desde la epoca de Guzman. Con el incrernento del ingreso pecco­ lero y durance las adminiscraciones de Lopez Contreras y Medina Angarica, ernpezo a producirse el proceso de vertiginosa transfer­ maci6n que aun no ha terrninado. El presence grabado tiene la particularidad de ofrecer para la historia de la ciudad, una perspec­ tiva desde la reurbanizaci6n de El Silencio hace jusramente un cuarto de siglo cuando comenz6 a construirse la Avenida Bolivar, obra de la cual dice el Ing? Cipriano Dominguez que tuvo su base de gescaci6n el 6 de abril de 1938, cuando el Gobernador del D.F. decrero la creaci6n de la Direcci6n de Urbanisrno, con el objero primordial y especifico de estudiar un piano regulador para la ciudad capital. La Direcci6n se inscal6 en agosro de aquel mismo afio y se cre6 una comisi6n consultiva inregrada por notables arquitectos. En el proyecco de pianos originales tuvo marcada influencia el asesorarnienco de urbanistas franceses. Con el tiernpo los planes originales fueron corregidos. La Ave­ nida se abria en abanico frence al hisc6rico bosque de I:os Caobos, comando un ramal hacia lo que es hoy la Avenida Libercador y otro al sur del do Guaire por "donde hoy corre la autopista del Esce. Habia pasos a nivel en cada boca­calle sur none con el fin de no dividir la ciudad. Estas ejecuciones sufrieron sin embargo demoras y eras de haberse expropiado coda la urbanizaci6n de El Conde, dichas tierras permanecieron muchos afios ociosas. Al hacer nuevas modificaciones sobre el proyecro original surgi6 la · idea del Parque Central admirada por unos, acacada por orros, y alli donde otrora estuvo el campo de furbol del Deporcivo, se yergue un conjunto de edificaciones con aire de rascacielos.

-208-


INTERIORIDADES DE URO DE LOS EDIFICIOS MAS AlmGUOS DE LA CIUDAD SE DA hoy el nombre de "La Casa Arnarilla" al edificio consrruido en la esquina Hamada "El Principal". Estuvo desrinado en sus primeros tiernpos, en forma sucesiva, a Carcel Real, a residencia de los Gobernadores de la Provincia de Caracas y asiento de la Hamada "Guardia Principal" que debi6 su denominaci6n a la mencionada esquina. En relaci6n a la vida de la ciudad, es bastante tardio el momenco en que se realiza la construcci6n del edif icio y el des­ tino que se le da. La fundaci6n urbana que hizo D. Diego de Losada y a la cual plasma en su conocido plano el Gobernador D. Juan de Pimentel, no cuenta con recursos suficienres para acorneter la construcci6n de edificios que habrian resultado de­ masiado lujosos para la humilde aldehuela que se atribuia el. pomposo nombre de ciudad. Como apunca Enrique Bernardo Nufiez en su prestigiosa obra que dedica a "la ciudad de los techos rojos": "I os conquistadores eran pobres. Y escaso el oro que se extraia ... " La primera construcci6n dedicada a residencia de los Gobernadores que se realiza en el angulo noroeste de la Plaza Mayor es llevada a cabo con la conrribucion de los vecinos hasta con la prestaci6n personal. Pero se ­viene a tierra con el terrernoto del 11 de junio de 1641. Y transcurre casi un siglo sin que se piense en reedificarla. En 1763 se mandan a vender los maceriales acumulados en el recinro que el descuido y abandono en que se le tiene ha convertido en un aurentico muladar. Y se construye, en una area que mide cincuenta y tres ( 5 3) varas de frenre por setenta y ires ( 7 3) varas de fondo, un edificio de dos pisos que se destina a Carce! Real. · Hay quien apunta que el prirnitivo edificio fue tambien Carcel Real. Y se menciona entre los que alli estuvieron cautivos al venerable hidalgo D. Simon de Bolivar con quien tenia con­ rraida la ciudad crecida deuda de gratitud por las diligences y . efectivas gestiones que en su obsequio hizo ante la Corte de Madrid, y a quien se cometio la injusticia de intentar proceso por futiles razones. Y tambien se mencionan como huespedes de la -209-


Detalle de uno de los corredores del Ministerlo de Relaclones Exterlor,,s.

prisi6n a los Gobernadores Gil de la Sierpe y Canas y Merino a quienes se proces6 y depuso por irregularidades que cornetieron en el ejercicio de sus funciones. · Por fin, a mediados del siglo XVIII se realiza la construe­ ci6n del edificio. Es Carcel Real, asiento de la Guardia Principal, y en una porci6n fronteriza a la Plaza Mayor, hacia la parte sur, se elevo una dependencia que va a servir de sede aL Ayunramiento que hasta entonces y contraviniendo disposiciones expresas de las Leyes de Indias, ha venido efectuando sus reuniones en la casa del Gobernador. Detalle muy de la epoca es el de que cuando se construyeron los calabozos o "reparriciones" se les ubic6 frenre a la Plaza Mayor con el ingenuo proposito de que los presos "pudieran solicitar la caridad publica". Tarnbien escuvo cautivo alll el protomartir de la Indepen­ . dencia D. Jose Maria Espana. Del siniestro recinto se le sac6 el 8 de mayo de 1 799 para ser ejecurado en el cadalso. Se hallaba este a pocos metros de la encrada, en el angulo noroeste de la Plaza Mayor. En su libro "Calles y Esquinas de la Ciudad" la escritora Carmen Clemente Travieso refiere algunos acontecimien­ tos que cuvieron por escenario dicho historico inmueble durance -210-


Balcones sltuados en la parte sur de la tachada, donde se reunla el Cablldo en los dias colonlales. Por uno de estos se asom6 el capitin Vicente Emparan la meme­ • rable mai\ana del 19 de abril a consultar al pueblo si este querla o no que con­ tlnuase en el mando, y desde alli escuch6 la respuesta negative. Era el comlenzo de la emanclpacl6n americana.

los ultirnos dias de la Colonia. Por SU parte siempre sosruvo el cosrumbrista Lucas Manzano que por debajo de la Casa Amarilla pasaba un ninel abovedado que desde el anriguo Convento de San Francisco, recorria hacia el norte un gran trecho de la ciudad para salir a las mar genes del Catuche, cerca del viejo­ Cuartel San Carlos. Un trozo de esre pasaje secreto qued6 al descubierto cuando fue demolido el antiguo edificio del Telegrafo. Su entra­ da puede aun verse cerca de las fuentes en el angulo norte de la plazuela Santa Capilla. Por esre mismo subterraneo debio escapar el Gobernador y Capitan General Don Juan Francisco de Caste­ llanos cuando en abril de 1749 entr6 con 8.000 hombres a la ciudad el alcalde de Panaquire Juan Francisco de Le6n, quien encabezaba un movimienco contra la Compafiia Guipuzcoana, alentado por el manruanismo criollo. La dependencia mencionada como sede del Ayuncamienco fue teatro de los sucesos del 19 de abril de 1810. Fue a alli donde se dirigi6 a regafiadientes el Capitan General D. Vicente de Emparan y Orbe cuando al darse cuenca de la actirud, favorable a los revoltosos, de su propia guardia personal, convino en atender ­211­


a la energica exciraci6n a volver al Ayuntamiento que le hizo el arriesgado pacrioca D. Francisco Salias en la puerca misma de la Caredral a donde se dirigia para asistir a los oficios religiosos

del Jueves Santo. En medio del clamoreo de la numerosa concu­ rrencia que colmaba la Plaza Mayor, fue hacia el sal6n de. sesiones del Ayuntamiento, sico como se ha dicho en la parct sur del edificio de la Carcel Real. Conocido es el episodio que culmina con la deposicion del alto funcionario y los dernas aconrecirnien­ ros que conforman el nacirniento de la nacionalidad. El edificio continue siendo cuarcel de la Guardia y mas tarde pas6 a ser asienro de los poderes consticuidos. Denominabasele Palacio de Gobierno aun cuando se le consideraba como propiedad de la Diputacion Provincial de Caracas. Y fue en ejercicio de cal faculrad como, con fecha 19 de noviembre de 1840, la mencio­ nada Diputacion Provincial vendio a la Nacion el rnencionado edificio, aceprando como pago de cal venta, aparte de las cantida­ des invertidas en la reparaci6n y rnantenirnienro del edificio que se estimaba en unos setenta mil pesos ($ 70,000) la cesion de dos casas y una cantidad en meralico que alcanzaba a unos doce mil pesos ($ 12,000) mas, recibiendo el Gobierno, adernas del edificio, "las canastillas y portales de SU frenre en el ultimo trarno de la plaza, que pertenecen al Concejo Municipal, exclu­ yendo la arquerfa que sirve de base a los porrales". Tales son los terminos del contrato de venta. Esta negociacion se hizo por excitaci6n que hizo el Gobierno de la Nacion de "renovar el negocio que desde 1831 propuso al Cuerpo Legislativo". Las casas cedidas por la Naci6n eran: la antigua Administracion de la Renea. de Tabaco y la casa concigua que servfa de deposito o almacenes de la mencionada Adminis­ tracion. Y quedo desde entonces el edificio de la esquina del Principal como sede del Gobierno de la Republica. Es despues del rriunfo de la Revoluci6n de Abril de 1870 cuando Guzman Blanco decide convertirla en mansion presiden­ cial, haciendole las mejoras adecuadas a su nuevo destine. Y los gustos parisinos del "Ilustre Americano" encuenrran expansion en la escogencia del mobiliario y la ornamentaci6n que se le hace al edificio. Tapices, alfornbras, muebles de Boule, esplendidas -212-


Patio interior de la Cancilleria, a ralz de SU ultima remodelaclon hace veinte anos. El z~o de azulejos en los corredores fue ordenado para su fabrlcacion en Sevilla, de acuerdo con el modelo de una pieza descubierta en las excavaciones hechas en la ista de Cubagua.

­213­


arafias que iluminaban los amplios salones, fueron fascuoso esce­ nario de las fiestas que congregaban a los altos funcionarios del gobierno, a los miembros del cuerpo diplornarico y a los elemen­

cos mas distinguidos de la sociedad caraquefia. Los gobiernos que sucedieron a la hegemonia guzmaniaca cuvieron asienro oficial en el edif icio que, como simbolo de la viccoria del federalismo, habia sido ornado con pincura gualda por lo que se le llam6 desde enconces "La Casa Arnarilla". Cuando aparece criunfance la Causa Liberal Restauradora, el jefe del nuevo gobierno instala su domicilio en La Casa Arna­ rilla. Y alli permanece desde el dia en que encr6 rriunfante a Caracas hasta que llega el terrernoto del 29 de octubre de 1900. El Presidence Castro, loco de terror, se arroja por un balc6n (el quinto a contar desde la esquina) lujandose un cobillo. Y en conocimienco de que en el Palacio de Miraflores hay una habita­ ci6n acondicionada "contra rernblores", craslada su residencia ha­ cia el palacio que mand6 construir el general Joaquin Crespo y del cual su tragico desrino no le perrnitio disfrutar, En 1904, la Casa Arnarilla a la que no se ha designado funci6n especial es por breve ciempo sede de las Cortes y Tri­ bunales de jusricia. Mas tarde, todo el Foder Judicial ira a ocupar el flam anee edificio que en la esquina de Las Mon jas ha cons­ truido el arquicecco Dr. Alejandro Chataing, desrinandolo a Pa­ lacio de Juscicia, hoy sede del Concejo Municipal. Durance el regimen de Gomez la Casa Amarilla alcanza por fin SU destino definitivo: Sera sede de la Cancillerla, y en las alusiones que en lo adelance se hagan a la polfrica exterior del Gobierno venezolano, asi como se habla del "N9 10 Downing Street" de Londres o el madrileiio Palacio de Santa Cruz, asi se hablara en terminos diplomaticos de "la policica de la Casa Arna­ _rilla". Aparce de que, para completar la denominaci6n simb6lica, el libro que conciene el informe anual del Ministerio de Relacio­ nes Exteriores es denominado "Libra Amarillo", Conforme a deci­ sion oficial de 1881. Asiento definicivo de la Cancilleria, el airoso edificio de dos . pisos que enfrenta a la Plaza Bolivar, alberga en su piso bajo las oficinas de sus diversas dependencias. En los altos de la parce ­214­


Aspecto del "Sal6n Bolivar" de la Casa Amarllla, generalrnente usado para las recepclones cuyas paredes lucen hellos tapices. Es completamente nuevo el artesonado de todos los techos cuya ejecucl6n fue obra de reputados ebanlstas, de acuerdo con dibujos efectuados al efecto. lgual sucedio con las puertas. Gran parte de los salones se hallan tapizados en seda. Algunas de las lamparas, fanales y faroles fueron traidos de Espaiia.

sur, donde esruvo el anciguo Ayuncamienco, esra el despacho del Ministro. Freme a la Plaza, ocupa coda la segunda planca el Salon Bolivar, destinado a las recepciones. Hace poco se ofreci6 alli un agasajo al Secrecario General de la ONU, Kurt Wadheim, quien visito a Caracas en compafiia de su esposa con motive de la instalacion de la III Conferencia sob re los Derechos del Mar. Adyacente al Gabinere del Miniscro se halla el Salon de los Em­ bajadores de elegance sobriedad. Adernas de retraros de algunos de nuescros pr6ceres, se aprecian importances obras de arte, rnue­ bles de Boule, porcelanas de Sevres, capices de Aubusson y de la Savonnerie. . El area primitiva que ocupa el edificio y que aparece men­ cionada en todas las ref erencias que de el se hacen, ha sido au­ ­215­


Fachada de la Casa Amarilla y ia esquina del Principal en 1900. Adosado a uno de los muros del edificio existe una placa de marmot con una leyenda al relieve que dice a la letra "La sangre generosa de Jose Maria Espana rego en este sltlo desde lo alto del patibulo, el 6rbol sagrado de la libertad de la Patria. La gratitud nacional · lo honra en el proplo lugar de su martirio". Espana fu.e sacrificado el 8 de mayo de 1799.

­216­


mentada con la adici6n que se ha hecho de una parte de la casa que le era vecina, comprada por el Gobierno Nacional a los herederos de dona Emilia Barrios Parejo, Marquesa del Campo. Esta dama, miembro de una discinguida familia de la sociedad caraquefia, y que contrajo matrimonio con un aristocrata espariol que la dej6 premaruramence viuda, tiene una especial figuraci6n en la literatura venezolana: es el personaje que con el mismo nombre: Emilia, aparece con exquisita presrancia como la espiri­ tual amiga y confidence de Marfa Eugenia Alonso, la heroina de la conocida y celebre novela "Ifigenia" cuya aurora . fue la gran escrirora venezolana Ana Teresa de la Parra Sanojo, o sea "Teresa de la Parra". No hace de esco mucho ciempo que a un Ministro se le ocu­ rri6 la idea de encomendar a cierto pinter frances la ejecuci6n de unos frescos evocativos de ciudades europeas, los cuales des­ enconaban con el ambience. Anos mas carde ocro Canciller ordeno eliminarlos devolviendo asf al recinto su austera prescancia. Esta iniciativa fue emprendida en 1956 por el doctor Jose Loreto Arismendi cuando esre desempefio la cartera de Relaciones Exteriores. El distinguido jurista puso gran ernpefio en dar un toque de elegancia y austeridad al aspecto interior del edificio. Se trajeron herrnosos tapices como los de la Casa de los Medina Celli, asi como tambien colocaronse pisos de la mejor calidad. La obra de remodelaci6n encargada al arquitecto Gustavo Wallis incluy6 la instalacion de un z6calo con mosaicos mandados es­ pecialmente a hacer en Sevilla de acuerdo a una muestra hallada en la isla de Cubagua. El actual Canciller Dr. Efrain Schacht Aris­ teguieta conscience del significado hist6rico del inmueble asi como de las joyas de arte que encierra, ha puesco especial enfasis en su conservaci6n, actividad encomendada a funcionarios id6neos . . La casa adyacente que daba enfrente a la calle de Principal a Conde, lado oeste de la Cancillerfa la cual perteneda desde los dfas de Guzman al Dr. Martin J. Sanabria fue adquirida por el Gobierno a la sucesi6n el aiio 1958, y convertida en solar o esta­ cionamiento para los vehiculos de los empleados de! Ministerio. Existe sin embargo el proyecto de construir en el futuro una edificacion c6nsona con el estilo actual del historiado edificio. -217-

j


LA VIDA EFIMERA DEL TROLLY·BUS EN CARACAS

Si nunca pudo saberse cual fue el destino de los tranvias que clrcularon sobre rleles por las calles de Caracas desde 1905, menos noticias se tlene del paradero de aquel c6modo y pintoresco transporte colectlvo, especie de hibrido entre el "electrico" y el "autobus" llamado "trolly-bus" con vida efimera en el marco semilaldeano de la cludad. La foto es de Jaime Albanes ANTE LA MUERTE DE JOSE TADEO MONAGAS De una lnformacl6n apareclda en "El Co)o llustrado" de la segunda quincena de enero de 1897, en la cual se alude a los hechos politicos y utillzaci6n del reloj campanario en la tradicional fecha religiosa de la Semana Santa, recordaba a titulo anecd6tico que durante el gobier· no provisorio de 1868 se ·consider6 una "calamidad publica" el fallecl· miento del General Jose Tadeo Monagas ocurrido el 18 de novlembre de aquel ano, y mando dlcho Goblerno que tanto el reloj de Cate· dral, como el de la Casa amarilla y los de las demas oficlnas publicas quedasen parados marcando la hora del tallecimiento del General y que "no se le hiciese marchar nuevamente sino despues de haberse veriflca· do los funerales decretados en honor del llustre Procer de la lndepen· dencia".

­218­


LA ESTACION DE OUEBRADA HONDA

Antigua estaclon del Ferrocarrll Central, en Quebrada Honda, de una fotografia gentilmente cedida por el Sr. Harry Jagemberg. Este tramo ferroviario que tenia 83 kilometros de extension hasta su estacion en San Francisco de Yare, comenzo a ser construido en la segunda mitad del siglo XIX. Atravesaba -por la ruta que hoy es Avenida Libertador- las poblaciones de Sabana Grande, Chacao, Dos Caminos, Petare, El Encantado, Ura, Santa Lucia, Ocumare del Tuy y San Francisco. Era de pasajeros y carga y por lo general traia a los mercados de la cludad leJjumbres, frutos, papel6n y lei\a. La empresa originalmente era britanica hasta que fue expropiada por la Nacion en 1943. Es de recordar a titulo anec~ tico en estas lineas la proeza realizada por el Ing' Luis Caballero Mejias, quien utilizando los rieles del tranvia logr6 con un grupo de alumnos de la Escuela de Artes y Oficios en 1940 y para evitar la total paralizaci6n del ferrocarril, trasledar atravesando toda Caracas desde Gano Amarillo a Ouebrada Honda, una pe­ sada locomotora de vapor, cedida en venta por la empresa del Ferrocarril Aleman. A la entrada del edificlo pueden verse un tranvia de ca.ballitos y una vlctoria, en espera de la llegada del tren. Al norte de la estacion el gerente de la empresa ferroviaria acondlclon6 un campo y organize>, segun reitera Eleazar Diaz Rangel en su "Historia del Beisbol en Caracas", la primera novena deportiva. Dicho sitio era conocldo con el nombre de "Stand del Este" y su patrocinante fue el senor Douglas C. Cherry.

­219­


BACIA EL FUTUBO

Un tramo de la Cot.a Mil o Avenida Boyaca la cual seni continuada hast.a empalmar con el extremo norte de la Baralt. En la actualidad tiene una extensi6n de 18 kil6metros desde San Bernardino a su encuentro con la autopista del Este, pasando por Petare.

La parte no rte de la ciudad, por las faldas del Avila, esta comunicada por la "Coca Mil" o Avenida Boyaca que ciene una longitud de 18 kil6mecros desde San Bernardino­El Marques y su empalme con la autopista del Esce, obra concluida en los dos ultimos peri odos conscicucionales. Al asumir el presidence Carlos Andres Perez la primera magistratura el pasado 12 de marzo dio inscrucciones a su Miniscro de Obras Publicas Ing? Arnoldo Jose . Gabaldon de acelerar la conscrucci6n de la autopista Petare­Gua­ renas, la cual tendra veinte kilometros desde el Distribuidor Uni­ -220-


de 5 .4 por ciento. Las es­ pecificaciones del proyectista Ing? Enrique Samaniego sefialan que en algunos sitios contara con seis canales de circulaci6n, mas hombrillos y una isla de tres metros. Entre las obras im­ portances que incluye esta vital arteria esta la construccion de un viaducto de 340 metros de largo y con estructura similar al de Los Chorros. Sin embargo, se ha previsro eliminar las continuas juncas de dilataci6n en el tablero y hacer una sola grande, de acuerdo con las ultimas tecnicas que estan siendo utilizadas en la construccion de puentes. Otro date no menos importance es el del ninel que se perforara a la altura del kil6metro 3.5 con una longicud de 680 metros. Por primera vez se construira en Venezuela un paso de esta nacuraleza con tres canales de circulacion por tubo. Se con­ templa asirnismo, dotar a los percales de cierta arquirectura con­ sona con el paisaje y la naturaleza, asi como rambien inrroducir tecnicas para evitar eventuales filrraciones, la cuales vendrian a elevar el cosco de mantenimiento y causarfan ademas rnolestias a los usuarios. A la altura del kil6metro uno va a ser desarrollado un terminal para todo el transporte de oriente, conectado con la futura red del metro y dotado de rodes los servicios, restau­ ranres, hoteles, estacionamientos, bafios, etc. Se estudia asimismo esrablecer a lo largo de la autopista zonas adyacentes de protec­ ci6n en las cuales sedan abiertos parques recreativos para los habitances de la ciudad, sitios de vigilancia para la GN y puescos de mantenirnienro vial. Quiza en poco menos de tres afios podria estar concluida esta autopista. No se ha descartado desde luego ejecutar los estudios realizados por el MOP en los ultimos afios para abrir una nueva salida al mar por el Este a fin de aliviar el transito considerado ya como en su etapa critica entre Caracas y La Guaira por la actual autopista, Esta via acercaria a la ciudad la zona recreacional del Departamento Vargas y estimularia el. desarrollo de los complejos turisticos accualmente en promoci6n. versidad, con una pendiente maxima

-221

-


El SAMAN DEL PAROUEDEL ESTE

Uno de los centros recreativos mas visitados de la ciudad moderna es el Parque del Este, el cual reune unos sesenta mil habitantes cada fin de semana. Ocupa 77 hectareas sembradas totalmente de grama y dentro de sus instalaciones funciona un planetarium, un pequefio zoo16gico, restaurantes populares, y en uno de sus lagos quedo instalada la replica de fa nave Santa Maria, la cual se hallaba en Puerto Cabello, siendo hoy uno de los motlvos de atracci6n turistica del Parque. Por decreto presldencial y aprobacion del Congreso, fue creado el lnstituto Nacional de Parques, seg(Jn Ley promulgada con fecha 3 de octubre de 1973, organlsmo al cual qued6 incorporado el Parque del Este. Prim8f' Presldente del lnstituto fue designado el Ing. Antonio Agostini, quien tomo posesion del cargo el pasado 1' de enero. la foto corresponde al Saman plantado alli por el escritor don R6mulo Gallegos acompaiiado de don Ricardo Montilla, Enrique Tejera Paris y del Ing. agr6norno Saul Padilla. Junto al arbol se halla el botanico Leandro Aristeguleta y uno de sus hljos. El tema fue usado corno Tarjeta de Navidad y estimulo de la · conservaci6n.

­222­


IND

ICE Peg.

Abril de 1909 . Lourdes y el Horfzonte del Esta . . . . • . .. • . . . . . • . . . . . .. . . • . . • . . . . . . . . • • . . . • . . . . . • • . . .. . . . . Postal . la Cludad que No Vuelve . . . . . . . . . • . .. . . . . .. • . . . . . . • . . . . . . . . .. • . . . . . • . . • • . . • . . . .. • . . El Parafso . las Carreras de Caballos . . . • . . . .. . . . . . . .. . • . . . . . . . . . . • . . .. . . . • . • • • . . . . . . . . . • . . Sa.n Jacinto . . . . . . . . . . . . . .. . . . . • . . .. • . . .. • . . .. .. . . . . .. • . . .. . • . • . • . • . . . . • .. • . . Mercado de lo• P6jaros . . . . . . . . . . . • . . • . . . .. .. . . . . • . . . • . . . • . . . . . . . . . . . . . • . • .. . • . • • . . . Miraflores . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. . . . . . .. . . . . .• . .. la Sublda de Moreno . . . . . . . . . . . . . . . . . . • .. .. • . . . .. . . . . • .. . • . • . .. .. . . • . . • . • . . . . • . • . • • El Puerto. Breve Nota sobre Macuto . . . . . . . • • . . • . . • . • . . . . • . . • .. . • . . • . . . . . . . .. • • .. .. . .. . • . la Gualra Segun un vlejo Dlccloru1rlo . . . . . .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. . . . . . • . . . .....

:~:~,~~~1/n1

c;;,g~·~ ·

r~:i:re· y. ·F~.;.i~~i6n.·c1~··~ Guetra··.:::::::: :: ::: : : . : : : : : :·:::::: : : : : : : : : ·: · Esqulna de las Animas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. . . . . • • .. . .. Jos6 Antonio Paez y Perez Mujica . . . . . . . . . . . , .. .. • .. . . . .. . . . • . .. • . . . . la PiaH Bolivar . . . . • . . . . . . . . . . . • • . . • . . . . . . . . . .. . • . . .. . .. . . . • . .. . . .. . . . . llega la Luz . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. • . . . . • . . . . . . . . . . . . . . • • . . . --.:. • • • . . . . • . • • . . .. . . . ... De lo Plntoresco y Tradlclonal . . . . . . . • . . . .. . . . . .. . . . • . • . . . • . .. . . .. . . .. . . • • . . . . .. . . • . ... El Observatorlo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . • • . . . . . . . . .. .. . .. • . . . . . . . . . . . . . . .. . • . . . .. . . • . •.. Puentes de Caracaa . . . . . . . . . . . .. . .. . .. . . . • . .. . • . . . . . . . . . . • . • • • . • .. • . . . . • . . .. . • . .... Los Tranvlas 1••............................................ Asl la vleron algunos corresponsales .. . . . . . . . . . . . . . .. .. la Eacuela Mllltar . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . De la Trinidad ol Panteon . . . . . . . . . . .. • . .. . . . • • . . . . . • . . . . . . . . • .. . • . . .. • . El Este y el Oste . . . . . . . . . . . . .. , .. . • .. . • . •...• Plaza Espalla y Boulevard Macuro .. . • . . .. . .. .. .. . .. . . . .. . . . . .. . . . .. • • . .. . • .. . • .. .. Plntoresco atuendo de Aflo Nuevo . . . . . . • .. . • • . . . . . • . .. . •..•....•.. , . • .. • . . • . . • .. . Prlmeros earrltos por puesto . El automovil del General . . . . . . . . . . . . . . • . • . . . • . . . . . . • . • . . . . . • .. . . . . • . . . . . • . . . • • • . . . ..•.• ~n P~~:~:m::iir~e. tr.~~sl.t~.. : : : : : : : : ·:: '. : : : : '. : : : • : : : : : : : : : '. : : : : : : : : : '. '. : : : : : : : : : : : : '.:: : . : : : : : : : : : '. . : Los C.aobos . El Gran Ferroc.rrll . . . .. . . . . . . . . .. . .. . . .. • . . . . . . . • . . . • . . . . • . . . .. . . .. . • . . . . . . . . .. . . Los pueblos veclnos . . . .•..•.........•..•..•...... , . .. . . . . . . • . . .. . . • . .. . . . . . . . .. • . . . . . . . .. Los Teques . El Paseo . Efemerldes . Paseo lndependencla (El Calvario) . Los Arcangeles de la Iglesia San Jose . . . . . . . . . . .. . . . . . .. .. . . . . . • .. . .. . • .. . . . • • . . . . . . . . . . . . • . . Candelaria y el Caplt'n Juan Francisco de Leon . . .. • . . Palacio de Gobernacl6n y Justlcla . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. . . . . • . . . . . . .. . . . . .. . . Caminos del Avila . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . • . . . . . . • .. . • • . • . . .. . . . . . . . . . • . . • . . • . .. . . . Flores del Valle de Caracas . El Centro Excursionlsta . Una opinion de Humboldt . "Tlgra Mariposa" . Los M6dicos de San Lorenzo . . . . . . . .. . . . . . . . . .. . . • . . . . . . . . . . . . . .. . . . .. . . . . . . • . . . . . . • . • . . . . . . San Juan . El Dinero . Primer Vuelo , . . . .. .. . . . . .•......... Raquel Meller . la Bella Otero . la Casa Amarilla . Los Sucesos de I Aiio 1936 . El Cambio .. Esqulnas de Caracas . la Casa Natal . lo Mejpr y Lo Peor . Miranda. Nota acerca del Teatro Municipal . La Reform• Trlbutaria . El Camposanto . Testamento del Libertador . Crecimiento Explosivo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . -· lnterioridlldes de uno de los Edlflclos mu AntiQt10sde la cludad ..........•...•......•..•.... Hacia el Futuro .

­223­

s

6 7 9 12 16 23 33 38 39

40

42 44 48 52 56 S8 60 64 69 72 76 79

87 89

~

96

99 102 104 106 107 109 112 117 118 120 121 122 124 126 132 1:U 138 146 t48 149 153 155 158 167 169 172 174 180 182 185 188 190

193 194 200 201 207 209

220


'

Esra Tercera Edici6n ampliada, consra dcJo.­000 ejerh­ · plares y se rermin6 de imprimir en el mes de junio de 1980, en losTalleresdeGrificas Armirano, C.A., siro en la 4• Transversal de la Avenida Principal de Boletra, Edificio Cenrro Industrias 2°Piso. TeMfonos: 34.08.65­ 34.08. 70 ­ 34.8549. Caracas ­ Venezuela. deposiro legal If. 80.0198

..

Ii •

~....

\.

-224-

:-....

~



Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.