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Alison Quintero LargoJerman, el niño feliz
Jerman, el niño feliz
Alison Quintero Largo Escuela La Florida - Talca
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Jerman era un niño lleno de felicidad que siempre estaba sonriendo porque su mamá, su papá y él vivían en una ciudad rodeada de naturaleza, muy bonita.
Un día su padre se tuvo que marchar a prestar servicio militar, pero le prometió que volvería para su cumpleaños.
En esos días Jerman se sentía muy solo y deprimido pues sin su papá la casa estaba muy vacía, además algunos niños lo molestaban diciendo que su padre no volvería nunca, pero aún así Jerman lo esperaba.
Hasta que el ansiado día llegó, su cumpleaños. Jerman invitó a todos sus amigos y familiares, quiso organizar la fiesta más grande que pudo. Mientras se divertía, comía papas, tomaba bebida, también estaba pendiente de la puerta para ver si su padre llegaba; pero fue pasando el tiempo y no aparecía.
Llegó la hora de partir el pastel y Jerman al soplar las velas pide un deseo, con todo el corazón; que su papá volviera a casa. Pero el día llegó a su fin y su padre no llegó. Se fue a dormir con una enorme tristeza en su corazón, pero al día siguiente tocan la puerta, “toc toc”. Jerman la abre con tristeza, dirige su mirada hacia arriba, y al ver al hombre parado fuera de casa su rostro se le iluminó, ya que aquel hombre era su padre que había vuelto. El niño comenzó a saltar muy alto lleno de felicidad.
Jerman les dice a los niños que lo molestaban: - Ya ven como mi padre si volvió; tal vez no regresó para mi cumpleaños, pero regresó a casa.
Los niños se impresionaron al ver al padre de Jerman; avergonzados le pidieron perdón por ser tan malos y crueles con él, y Jerman les dice: - Con esperanza, fe y voluntad todo se puede lograr.