El comienzo del último cuarto del siglo XVIII, en las regiones fronterizas de lo que hoy es el sur de Córdoba, sur de Santa Fe y norte de Buenos Aires, encontraba a esta vasta región sumida en las consecuencias de los más trágicos malones, que producían las huestes aborígenes procedentes de parajes del actual territorio de La Pampa, tales como el Mamil Mapu (País del Monte), de orillas del río Chadileuvú, de las Salinas Grandes, etc. Del estudio de estos hechos ocurridos contemporáneamente a la creación del Virreinato del Río de la Plata, en particular del asalto a la tropa de carretas donde viajaba el canónigo Cañas, ha sido posible conocer con cierta profundidad, no solo el suceso trágico en si, sino asimismo quienes lo cometieron, cual era su lugar de hábitat y procedencia, las rastrilladas por las que llegaban a estas latitudes del sur de Córdoba y Santa Fe, la precaria situación fronteriza, las acciones de represalia y las consecuencias de estos devastadores malones.