JUAN MARTÍN “EL EMPECINADO” Y SUS LUCHAS EN LAS PROVINCIAS DE GUADALAJARA Y CUENCA Para mi amigo Arturo Culebras Mayordomo
La denominada “Guerra de la Independencia” (1808-1814), fue uno de los episodios más interesantes de la Historia de este país que aún llamamos España. La crueldad de la invasión del territorio nacional por parte de los franceses (primeramente de forma pacífica y con la excusa de conquistar el territorio portugués, aliado de su enemiga Inglaterra) y después ya de manera descarada en un intento por parte de Napoleón de construir bajo su mandato un gran imperio que abarcase gran parte de Europa; la calamitosa actuación de los reyes españoles, quienes pusieron a disposición del Emperador, perjurando de la defensa de los intereses de la Corona y del pueblo español; la vil y cobarde actuación por parte del Príncipe de Asturias y después rey Fernando VII, apoyando y aplaudiendo desde territorio francés –donde vivía protegido por el mismo Emperador– el avance y las victorias del ejército francés sobre las reducidas y mal pertrechadas fuerzas con que contaba el ejército español que defendía su derecho a reinar; el saqueo de los pueblos y ciudades por donde pasaban las tropas napoleónicas y las terribles venganzas sobre los civiles que, ansiosos de mantener su independencia y deseando la vuelta de su rey, hizo que en estos largos años de enfrentamientos se dieran episodios y actuaciones de valentía y grandeza por parte de los españoles, como así ha sido reconocido por prestigiosos investigadores e historiadores de todo el mundo, quienes, asombrados ante la diferencia del potencial bélico de uno y otro ejército, 1