Virgen del Rosal

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La Verónica

Estilo e lconog raÍia La primera

d.

o\

J6,

de

¿s

t¿blas t ene

i,.l ..'r odorl

-'."

ugar su Crucit rión. Este ter¡a entra d-lleno en e c clo de n¡á9enes r¡ás importante de os representados en

e arte

¡

cristiano: l¿ Pasión de Crlsto. Con

o'l d-," . ," .1. -.

d-.dó c^

r.. o.

J\ )

t.

ó "

Muerte y Resurrección, se nstruye e i ustra

l.r o óré tF.o glesia, ¡ Rede¡clón \o

,.-,,"d-L

e e e,

rle

llet¡

e de

{l'sto Fnrt¡n.ln

a

tlruT

fundament¿l se represent¿ en form¡ de

l,.o,r" .. " do o.o'-,. -. o érro

de rn¿nera narrativa Par¡ este f n se des¡rro ó e ret¿b o, un conjunto de {:l ló ó 'tó mogó.r6 q.F " "r .

prograrna concreto, ¿ vida de Cristo,

a

v 9', 1ro f J b ' o é- rn.r | | tod-.b. o

po, o que es láci1 suponer que forniaría parte

d^L o J.l op-ddo q ,o io o o lróJó

e ce¡tro encontrafnos cofno lrqura or 'o. in 9or do o o-o o ó r d- - - ". r. _ Ld.do po, ot o1t-, o'l \ ó.,Jó¡ ()1ó refor¡a¡do o tráglco de momento con - rolo"mo " "dod- "p- o o ojo enrolecidos y c!blertos de ágrimas Lo m smo ocurfe co¡ e grupo rr¡pon¿¡te que lo acornpaña en e carn nor a V rgen Mar a, 5¿n.luan, M¡ri¡ M¡gdn en¿, Tnuest¡¿n su

..ón.o rolo.

s- o o, -"do p-.o ^ -p-i.o'l"V-o '¡ ' térni no, rnuestr¡ el p¿ño con ¡ imegef dot -,doóloró4.o o a so

dados y sayones, estos

u i^o..o 9.'.o,o .."d ro.

o ..

ó r. I

ó ,ó da ép

..

o\

ró. o\. a -r o,.

que nos

rarLrestra esta

hace muchas conces ones a a tr¿diclón p dórlca alejada de mundo renacentst¿ Ia l¿no: cierta rigidez en posturas y gestos de los personajes, el gLrsto por e dorado en los ador¡os de los ropajes

y

os nimbos, el dibujo muy perfi ado,

: ..nf,<

|

prot¿gonrstas

El estilo

-.

p.

: .-mññ<.i-.

n.a

hacen recordar rasgos de aÍc hispanoflamenco e i¡c uso restos got cist¡st si tuvléramos que buscar en a obr¿ de Correa un estilo se¡nelante, nos lev¿ría

de mayor intluenc ¿ de su maestro.luan de Borgoña Es posible que sea una obT¿ con nteTVencon importante deltaler a sLr época

Podernos ffrencionar como curlos d¿d a ap¿riclón de un personaje,

cuyo rostro aparece alfondo detrás de <¡. ¡ ¡n é<+o --..^.-,-^. .h.-,,,drrectarnc¡tc, ausente de la escena

representada, y nos hace recordar a existe¡cia de r¡uchos auLorretr¿tos de

Correa de Vvar o

- .^.r ^ ¡de desconocldo

plntor de n cialcs TR, que quiso delar su firm¿ en l¿ hoja de una de las armas de los so d¿dos. E¡ cu¿ quier caso todo

esto entra en e c¿mpo de

a

especulación aunque no deja de añadir interés a a contemplaclón de un¿ obra

lEst De .ono!

f¡fi¡ L¡Vctu¡c.


e tratarniento de las as re igiosas o a ingenuidad arcaizante de os querubines y as carte as con ¿s p¿labras sustituidas por imágenes, que p¿recen lnvltar al ilel a partic p¿r en un luego en e que se imp lque de forma cierta r gidez en flguras

directa con a imagen representada.

agLr oo oo'l o rm.qó'lo i o I io " m¿tern¿ de a Virgen María con el N ñoJesúsen brazos. Esd{ícil encontrar un ter¡.r rnas repetido a o largo de la historia de ¿rte, especialr¡ente de a¡1e españo , país de antiquísim¿ o oo ir 'poo- éoé ^r'", ord'."oi :o1 m"."r " " "v g--d- Po ".r'r"o. V rgen no narrai vo sino devoc onal, d rlgldo directamente a co¡Tnover a fiel a través de la bel eza de los rostros, el equi ibr o de acomposcióny a serenldad y dulzura que emana de la imagen. Esta t pología de V rgen tiene una larga h storla, pues tuvo su or gen en a neces dad de represent¿r e dlfícl mornento de a Concepción lnrnacu ada de María, idea que originó encend dos debates teo óglcos desde su p ante¿r¡iento y que enfrentó tanto ¿ órdenes rel giosas como a la nob eza o al pueblo lano y que perr¡¿¡eció vd ros

l.

s

Se¿, pues, o no, adn¡itida la autorí¿ de Correa en estas obras resulta innegable a exce ente calidad de e as y as rererenc as y punro ambas y otras obras de autor niás conoc das: en e caso de ¡ Vlrgen del Rosal hay que fjarse, por ejemplo, en a V rgen de Convento de Jerónlrn¿s de

San Pab o, en To edo, donde

glos más adelante, permitiendo una interesante evo ución en as imágenes

encontr¿mos esos rasgos sLraves oe ros rostros o la cita itera de nir¡bo de rayos

Tras varios intentos que no

de oro, o expres ones y paños de

consigLr eroll expres¿r con c aridad e

concepto, corno elArbo de Jes-¿, ,Ab¡azo en la Puert¿ Dorada o a Santa Ana Tr ple, se egó a a imagen de ia Virgen tota puichra, en l¿ que ¿parece l¿ Virgen rodead¿ de sír¡bolos ytextos

que exa t¿lran a pureza oe s(r nacimjento sin rna¡cha; A esta ¿PULd"pL'!di

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¿ 9ur

E.d

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d

María como vencedora del pecado, y aún otr¿s, l¿ Virgen de a Ascensión

o a de

Rosario, que combinaba símbo os prop os de las anteriores. o^¡mñ<

.

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nuestra tabla que, sin intent¿r reso ver problernas teológicos, consigue legar alliely es urla rluestra represent¿tiv¡ de ¿ imagen de devoción de sig o

E¡ l¿ tab a se nos rnuestra

a l¿ Virgen r camente coronada;

sostiene en su braTo izquierdo a su Hijo m entr¡s q!e con a mano lbre e ofrece una flor que

e Niño trata de

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,r:

creciente, rodeados por un¿ rn¿ndorl¿ de luz de suaves co ores con rayos de oro; e gesto de ¿ Virgen es dllce y ¿Lrsente y con Lrna eve sonrlsa ncl na

s{.r

Deta

P dP

cabeza sobre a de Niño,

su Madre. Rodeándolos entre nubes unos querub nes excl¿Tnan a abanz¿s ¿ la pureza de ¿ Virgen a ¿ m¿nera de a mencionada magen de laVrgen tota pu/chr¿; en el paisaje que forma

el p ano terrenal dos monjas ¿rrodll adas rezan admirando

escena con gesto sereno

¿

de la mura a, as lormas comLr¡es de V rgen del Rosal presenta diferencias est lísticas ev dentes con la tabl¿ de Cristo c¿mino del Ca vario. La atr buc ón a Juan Correa de Vivar parece més c ar¿ dada a sernejanza de estio L¿

de esta obra y otras conocldas y atribuidas con segur dad al autor

toledano. L¿ m¿nera de representar as flguras, espec alme¡te la Vlrgen, ¡os

m:.^<

- ñérf é< ¡é

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ñ l.L

detal es de las p edras del suelo o la vegetaclón que encontramos en el Abrazo en ¿ Puerta Dorada de Santa lsabe de los Reyes e¡ To edo. Estas sin¡ itudes delan e campo abierto a estudios més profundos que puedan ¿rrojar más llz sobre épocas y autores tan interes¿ntes y obras de t¿nta be leza.

acerca a un autor que tlene conocir¡iento dc estilo renacent sta Ita ano' la ¡f uencia de su maestro Juan de Borgoñ¿ se hace evidente en los

o en

a

sensación espacial construid¿ co¡ una uz dláfa¡a y suave; sin ernbargo este est lo se su¿viza aún más y se acerca a

arte de Leon¿rdo en el uso de

un

sut y un d iuminado rnuy p¿rticLrlar del artista ta ano, tanto e¡ as figuras, los ropajes o c fondo de c ¿roscuro

pais¿le; esta lnfluencia posib emente

fuese recogida a través de a(lsta va enci¿no Yáñez de a A medina, u¡o de os int¡oductores en España delestio

eon¿rdesco que anticlpaba ia cr s s m¡nier sta. Encontrarnos, además, otros r¿sgos dentro de esta tabla que hacen pensar de ¡uevo e¡ a nte¡vención de ta er, hecho mlry frecuente en esta época y que respondía a a neces dacl de sat slacer la dem¿nda de obra de os pintores nrás so iclt¿dos; se trata de Det€ e de a mon¡a oFni€ derccha

Deta ede a Vrcen con € Nño

Esiio c .ono!1.¡fi¡ Vr¡.n de F..i¡l

I

a

Anunciac ón de Guisando o el Nacirniento de Guada upe. DelCamino de Ca vario son poslb es ¿ntecedentes la ¿rquitectura

l¡ ¡nnrl¡ D.anú 4!.rd¿

vo úrnenes contunde¡tes

XV.

de

Esr o e

(rrrlllÉfia Vflen delB.5¡


tsr..l.l.¡

TRATAÍ\4IENTO DE L tl Y RESTAURACION

\)trKVA[-lt] \

ESTUDIOS PREVIOS

Aná isis de muestras. Se feco¡li,¡ron un LoL¡

tl critero genera de a ntervencron ir¡ sl.Jo e .le .l-.vo ver ¡ rs obr¡s la funciona dad y 'dllr'l respet¡rrdo a nráxlnro e aspecto histórico, esrerco y los rn¡icr ¡ as.omposilivos, d-. ia form¡ qLre lo.lo ré<r m-.;^

,lF

ñ¡<¡¡^

q^li

é!i\,¡

< émñl

'Y'u 'oo

¡o lntefler¿

en su co¡servacló¡. Con esta pfenr sa,

os pro.csos

d. iftcrvcn.ión, .stá¡

lust f.a.los ¿

as

' e,o"le d. ,t.oo de on er " ron oe . m sm¡s y h¡¡ qu,.d¡.lo recogidos grálc¿rr,¡¡te r¡ed ante lotografí¿s, p an metrias c informcs.

Se ha

evitado e ¡etoque ¡buslvo, l¿ recreación iusionista

y a rc.onstnr..ion, len.l en.io siempr-Á a ¡ ¡ni¡ima lntervención, a I n de consegu r u¡¿ ectLrra y pefcepc óf .rom;t c¡ y estét ca corfp eta. E tr¿t¿rn ento de conserv¿cron

y

reqtauración h¡ co¡sistido fu¡¡l¡¡¡enL¡ r¡enLe en ¡ conso da. ón de os estratos compos t vos, soporte,

Jp" l "l -,ó así

l,

o

,

m na.ión dc c cr¡cnios dñad dos, rep ntes y bar¡ices ¿ntiguos deterior¿dos

dorados,

y enncgrccidos por ol p¡so dc iic¡npo. ¡l, iTf¡lir¡.:rro.l.l-o¡...!¡.¡r¡ttl.rr

.r.!r

l

de 15 m cfomuestf¡s

de pol cromíi: y 2 rJe madera. Con a apl r:;c ón d-. d versas técnic¡s de ¿nálisls físlco qLrhlcos, se obtuvo la v su¡liz;ciór de l¡s div-.rs¿s c¡p¡s de ¡pdr-ójo,

irnprir¡¡clóf y policromía' l¡ lde¡tlfic¿clón de .Js p gmentos' ¿ n¡tura ez¿ de os dg utln¡ntes (aceite de linaza y cola aninr¡l en ds pigr¡e¡tdc o¡es de

I qu q ¡ ó "." d- -" IdL FJ" -l de m¿dera emp eada (Pl¡us s lvesrr s r.r l',.

Ref

lecrografía

I

nf

I

rarroja.

S.l ,calzó un barrido seneral esp-.cíf.a y se ¡caistraro¡ as lrnágc¡es que mostraban

dlbuto p',.p¡raror o L,r obt.nc ón dc d bujo suliy¿ce¡te con esr¡ té(-_¡ica, dcpcn.le rle a cofce¡trdciórr rle r:¡rbo¡o en

1a

cornpos c ón dc

enrple¿.Jo Fn "L¡ V rq-.n .l.l Ros¡ " c .libulo encoirtrado ef rosLr.Jrj y m¡¡os d-¡ l¡ Virqcn, N ño y o¡¿ntes, se ¡e¿ izd.le form¡ r¡uy -.sboz¡cl¡, slmp e y directa, c.rf ¿ i¡ter]cióf d-.1 ¡rL st¡ de encal¡r ¡s formas en a conrposir-ión genef¡l E¡ "L¡ Verónic¡" no son muy s gni{icativos os 1r¡los e¡.ontr¡dos en a cara y manos de Crisro, m¡no del s¡yón y rostro dc San.lu¿¡, del¡idr¡ ¡ ¡ esc¡s¿ concentració¡ .le qralito o c¿rbón en el m¡tera en¡peado nrdter

¡

iE3r: .. D'.!o. r rf¡r¡n,.¡r¡

I

]

a


Estudio por rayos X.

56 rórog ó'or L,t o ¿ de '0 pl¿ ¿\ ¡dur

jror' d

d, ¡

*

10 dl dé

d

Tratamiento de desinsectación. Anoxia.

rp-,fr. prrroÍ.¿. D- '..Llt¿do d- o\ mr m¿< có obtuvieron imágenes en b ¿nco y negro que aportaron datos estructura es, confirrnando a rnolologia de os soportes: núrnero de paneles ensamblados (3); tipo de corte tangencial de a madera, colas de mllano cor¡o elementos de refuerzo en las uniones de os

po.F

é. ooar- "V.01 d

de clavos

de

,;lo.

"

,,", io,r

) 1 -ero

os travesaños de refuerzo; la disposición

!vova)

y c)r!P.)

c

'

ou

'1

tableros; rayado cruzado con gubia de lig¡raria para faci ltar

yprépdrd ro'r

e

ó de

o

a superficie

agarre de las capas de aparejo

L . ¡.^lodl ..ddod6 on ór.d

se detectaron as zonas ¡¡ás afect¿d¿s por

ol

Dado al a taque sufrido

de soporte

por

lnsectos xi ófagos, se rea izó un tratamiento curativo consistente en a e rninación tota de oxigeno en as obras, sustituyé¡do o por gases inertes de nitrógeno de alta concentraclón y pureza. Para el o se colocaro¡ l¿s obras e¡ una burbuj¿ o cár¡ara estanc¿, con contro diario de los parár¡etros de ter¡peratura y hurnedad

fó a.r\¿. ¿.r .omo d- o. 1i\o é. d- o\ gaao ) nltrógeno, recogidos en gráficos. Esta técnica ofrece grandes garantías frente a ataque de os insectos x ófagos, siendo tota mente nocua para las obras de

e ataque

de xilófagos, con rnenoT densidad radiográfic¿; y 'roqLFdoo rr rro oqL,lo. I óp ,lréq ó1 ¿ policromía. Se loca izaron también pequeños arr--pentimientos o correcciones orig na es del autor

Consolidación del soporte. La conso

idación deisoporte se ha realizado

conJuntarnente al tratam ento preventrvo de desinsectación, por impregnación de resina acríllca de etil metacriato y permetr na, nsecticlda de ar¡plio espectro tanto para co eópteros e isópteros (insectos xilófagos), dislreltos en disolvente nitroce ulósico, de excelentes propledades de penetraclón en a rnadera. f " \o .. or . h. dpl,.do I ó\ \dmór ró é1 .ór ó ma¡os, h¿sta comprobar su eficacia, en cua¡to a endurecimiento y buena consistenci¿ estructural del m¿teria igneo.

Dado qlre los soportes se mostraban estables, para -óvltar tensiones gratuit¿s e lrreparables en e soporte, no se ha inte¡tado restituir a superilcie

pl"r " d. o

Fotografía de fluorescencia con luz ultravioleta. Para este estudio se iluminarorr ¿s oo¡¿s

01 J.. o.ubo de 2A^-, ¿0wd. l"np" " d.

Wood. Las fotografías se tomaron con f ltro ar¡ar I o específico, para e irninar al máximo la connotación , ob.r- d ^d9., e dé "2"'d ".d"ior f uorescenc a de b'arnices, repintes y e ementos añadidos, rnuy int-oresantes previo al proc,aso de

propios de las maderas que se conservan de esa época. Las juntas o unlones de piezas no h¿n sldo 'e, "d¿. tor"lme¡,- d-j"-do 1". db- rJ'" - | m" de dilatación-contracción.

La reconstruccón

de

travesaño en "La

Verónica" y las pérd das internas de soporte en ambas

tablas, fueron rellenadas con resina epox, con

a

lirnp eza. Los repintes puntuales encontrados,

.d.ro. d- bo r" de po Lr6ré^0 p.r. origa.dr

f uorecian en un tono oscuro y ópaco, localizándose rnayorr¡ente en "La Virgen del Rosal", en l¿s zonas perimetrales a las gr¿ndes lagunas y en "La Verónica", en e área del paño de Cristo y la Cruz. El barniz de

carga. Par¿ integrar en el soporte estas zonas, fueron

o

chapad¿s con madera teñida de s m a¡es característ c¿s a l¿ orlginal. Las estopas de refuerzo fueron repuestas con fibra vegetal y enco adas con

¿ animal, tal corno estaban dlspuestas

ambas fluorecía en un co or arnaril o verdoso,

co

lrregularr¡ente repadido, apreciándose acumu ac ones

orlginalmente. La mo dura perdida del marco de "La Virgen de Rosa " fue restltulda por otra de ta la y r¡orfología idéntica ¿ origina.

en forrna de goterones y a huel a de brocha.

1O>> lEstudios p.€vios a t.at¿m entol

"b-ro< r p¿lr"r d-[o. ¿.ro1é.,

revirados en a gunos tr¿vesaños y colas de milano, considerando adernás éstos, como rnovrm entos

lT¡¿tam ent¡ de consetuacón]>>

I1


Fijación de policromías y dorados. Para devo ver a las po icromias y dorados un¿ adecu¿da cohesión se rea zó una f¡ac on con

ooolgoo a | ¿ r aop 1, " ord-p. or niediante espátu a termlc¿, radiac ón infrarroj¿

ca

Lirnpieza de barnices y repintes.

oP'" o d' l^ P'/-

'

c aboraron tcst dc sohb idad, para a el m nac on de los diforentes barnic-.s y rep ntes ex stentes en as obras, con objelo dc dctcrminar os d so ventes rnás adecLr¿dos, que fueran inocuos y no

r¡od ficaran

en r¡odo ¿ guno,al conjunto estrat gráfico, teniendo en cuent¿, ¡der¡ás en las me/cl¿s y proporc ones, e gf¡do .le ev¡pofdc óf, ¿ fin d-Á qLre no perr¡¿necieran en los estratos pictór cos y en lo posib e, una b¿ja tox c d¿d. Estucado. o ,, Jro , I o otrd u-¿p¿r-lo iopoli om".oo l " cn dorados, con la ;p i.a. ón do estuco t¡adiclona , co a ¡nim¡ satur¡da con sulfato cá cico y fung cida. E es1¡cado se imitó ¿ los bord,.s de as agun¡s

sin desbord¿rl¿s y nivelándolo ¡l orig na.

1! :: { Tf¡r,n¡.r,r.. ¡.r R,,f¡L,f¡r: i,¡

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iTf¡l.anrrrrr)

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F.r,l¡Lrfir rr'

l


La Epoca. La Pintura

enacentista en Espa単a



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