INTRODUCCIÓN

INTRODUCCIÓN

El mundo está constituidos por sociedades, es la humanidad, una que habla idiomas varios, posee costumbres diversas, creencias politeístas, ha estado sumida en conflagraciones desde tiempos inmemoriales, por capricho, megalomanía e independentistas, estas últimas las más significativos, aunado a dos guerras mundiales, de las cuales no se ha podido recuperar, dado el egoísmo desmedido que generó dicho conflicto iniciando el siglo XX.

En Venezuela, los acontecimientos antes mencionados impregnaron a esta nación de estos desmanes que solo pasan debido a la inmadurez, acinesia mental y la falta de conocimiento de la historiografía del país caribeño, existe la posibilidad de la existencia de una ceguera mental de las personas que habitan esta región suramericana, empero son muchos los acontecimientos que hacen posible que las generaciones actuales y futuras no sufran las desigualdades que afrontaron nuestros antepasados.

La memoria histórica colectiva del mundo y en especial la de Venezuela, debe mantenerse activa, en lo político, educativo, en fin, en toda la sociedad en general, para no caer en los -errores históricos- entuertos que ha venido confrontando dado que no ha entendido que el pasado desde los inicios de la humanidad, reafirma que hubo dificultades y las masas sociales de ese momento histórico, sacrificaron sus vidas buscando erradicar la esclavitud, la miseria, el hambre y primordialmente el rescate de sus tierras, todo esto por la ceguera mental y que los poderosos de otrora mantuvieron y se aferran en sostener en la actualidad.

En el recorrido de la humanidad, quienes se hacen ver hoy como portentosos del pasado, solo se han dedicado a someter a los desposeídos, aprovechándose de su ignorancia y acinesia, beneficiando así, a los emperadores, reyes, dictadores y sátrapas del mundo, entiéndase que fue una manera de hacer riqueza a expensas de los brazos, ingenio y destreza de la sociedad súbdita, diría Marx “del proletariado” , sin embargo, todo eso quedo en el pasado, es tarea de quienes tienen la

responsabilidad de investigar y todo aquel que sienta pasión por la historia, no estaría demás la ética historicista que impulse hacia un desmontaje de la historiografía elitesca y burguesa, poética fantasiosa dedicada a los grandes dictadores del pasado, como los romanos, la iglesia católica, con sus cruzados, templarios y penitentes negros, y son estas sociedades dentro de otras que causaron la perdida de la memoria histórica y la identidad de los pueblos, que hoy está latente, de manera que en la actualidad debemos ver hacia atrás, evitando no cometer los errores del pasado en el presente y preparar el camino hacia el futuro, guardo siempre la memoria colectiva de los pueblos junto a su cultura ancestral.

EL AUTOR.