Asesinan a ‘El Chueco’; deja crímenes impunes

Espera Fiscalía confirmar ADN; mantendrán vigilada zona Tarahumara

REFORMA / STAFF

“A Alejandro Camacho lo conocí desde hace 28 años, ya que fuimos compañeros durante nuestra época universitaria. Es una persona que merecía toda mi confianza y todo mi respeto, se distinguió por ser un gran padre de familia, por ser un hijo honorable y, sobre todo, por ser una persona incorruptible”, escribió junto a una foto del ahora occiso.

De acuerdo con la Organización Causa en Común, van 18 asesinatos de elementos de seguridad en lo que va del 2023 en Guanajuato, por lo que el deceso de Camacho sería el número 19.

CHIHUAHUA.- José Noriel Portillo Gil, “El Chueco”, líder de un grupo criminal vinculado al Cártel de Sinaloa, y responsable del asesinato de dos sacerdotes jesuitas en Cerocahui, Chihuahua, fue encontrado muerto en un camino de terracería en la sindicatura de Picachos, en el municipio sinaloense de Choix.

El Fiscal de Chihuahua, César Jáuregui, informó ayer que el cadáver fue localizado el sábado con una herida de bala en la nuca, de las armas conocidas como R-15, aunque en la escena se encontraron 16 cartuchos percutidos.

La noche del martes, explicó, recibió comunicación de la Fiscalía de Sinaloa sobre el hallazgo del cuerpo, encontrado al parecer unas 24 horas después de haber sido asesinado.

Hasta ayer, el cadáver se encontraba en la ciudad de Los Mochis, a donde se trasladó personal de la Agencia Estatal de Investigación, así como personal de inteligencia militar para corroborar que se trata de “El Chueco”.

El Fiscal refirió que una mujer de nombre Diana Carolina Portillo, identificó el cadáver como su hermano. Sin embargo, precisó que hasta que se corrobore con las pruebas de ADN que el cuerpo corresponde a “El Chueco”, se podrá confirmar.

z El cuerpo de “El Chueco” fue localizado en un camino de terracería en la sindicatura de Picachos, municipio de Choix, Sinaloa, en los límites con el estado de Chihuahua.

Historial Delictivo

Nació

Buscado desde 2017

Según información de autoridades locales, le decían “El Chueco” porque tenía una pierna más corta que la otra.

Algunos de los hechos delictivos que se adjudican a Portillo Gil: Ataque a la sede de la Agencia Estatal Investigaciones en Urique el 14 de septiembre de 2017.

Asesinato del activista Cruz Soto Caraveo, integrante del Colectivo de Familias Desplazadas Forzadamente de la Sierra Tarahumara, quien desapareció el 13 de octubre de 2019, y cuyo cuerpo fue encontrado seis días después.

z El domingo pasado, cuando el empresario entraba a su casa, los secuestradores lo subieron por la fuerza a un vehículo.

Hallan sin vida en QR a empresario plagiado

REFORMA / STAFF

CANCÚN.- El empresario Cipriano Torres, secuestrado el domingo afuera de su casa en Othón P. Blanco (Chetumal), Quintana Roo, fue hallado muerto la noche del martes en un camino de terracería del mismo municipio. De acuerdo con reportes locales, la víctima fue localizada embolsada en la Colonia Antorchistas.

Personas cercanas al empresario compartieron en redes sociales sus condolencias.

Apenas el lunes, familiares de Torres abordaron a la Gobernadora morenista de Quintana Roo, Mara Lezama, para pedirle ayuda en la localización del empresario, y revelaron que fueron extorsionados.

“Estoy desesperada, ya tiene más de 24 horas. Las amenazas que hemos recibido siempre son llamadas de extorsión y derecho de piso, cosas como esas. Por miedo no fuimos a ratificar la demanda, nos fuimos del país. La verdad ahorita estoy desesperada, yo sé que ustedes pueden hacer algo más todavía, estoy desesperada y quiero que me ayude señora Gobernadora”, dijo Eunice Huerta, esposa de la víctima. En un video de cámaras de seguridad quedó grabado el momento en el que el empresario fue secuestrado por tres hombres armados. Torres era dueño de varios establecimientos de venta de artículos de pesca y de refacciones en Chetumal.

Cuestionado sobre el modo en que fue asesinado, Jáuregui refirió que la investigación corresponde a la FGE de Sinaloa, pero que, hasta donde se le ha informado, no hubo reportes de algún tiroteo.

Aunque “El Chueco” era buscado desde 2017 por diversos crímenes, el 20 de junio de 2022 se extendió su historial delictivo tras asesinar a los sacerdotes jesuitas Javier Campos Morales y Joaquín Mora Salazar, así como el guía de turistas Pedro Palma, y el jugador de beisbol, Paul Berrelleza, en Cerocahui.

El Fiscal informó que las fuerzas estatales y federales no se retirarán de Urique porque existe un compromi-

REFORMA / STAFF

Para la Compañía de Jesús, la aparición sin vida de José Noriel Portillo, asesino de dos sacerdotes en Urique, no es un triunfo de la justicia ni resuelve el problema de la inseguridad en la región de la Tarahumara.

“En espera de la confirmación de la identidad, desde ahora señalamos que, si se verifica que se trata de la persona implicada en el homici- so signado con la comunidad jesuita, derivado de medidas dictadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). dio de los padres jesuitas, su aparición sin vida de ninguna manera puede considerarse como un triunfo de la justicia ni como una solución al problema estructural de violencia en la Sierra Tarahumara”, afirmó en un comunicado.

Plagio y asesinato del maestro estadounidense Patrick Braxton-Andrew, el 28 de octubre de 2018, en un lugar conocido como La Playita.

“Al contrario, estamos ahorita en estos momentos reforzando nuestra presencia y además va a haber bases permanentes de los tres niveles de gobierno, ya está en puerta la construcción de una comandancia de la Policía Estatal y de una comandancia de la Guardia Nacional”, sostuvo.

“Este desenlace, de confirmarse, no es el que esperábamos ni es por el que trabajamos”.

Así respondió al anuncio de la Fiscalía de Chihuahua sobre el hallazgo del cuer- po de “El Chueco”, presunto responsable del asesinato de los sacerdotes jesuitas Javier Campos y Joaquín Mora, así como del guía de turistas Pedro Palma y de un joven identificado como Paul Berrelleza, ocurridos el 20 de junio de 2022.

Desaparición de los vendedores zacatecanos de enseres domésticos Javier Muñoz Pérez, Juan Antonio Martínez Parra y Rubén Flores Cisneros, también en octubre de 2019 en la comunidad de San Rafael.

Cuestionado sobre la postura de la comunidad jesuita, de que no es un triunfo de la justicia el encontrar muerto a Portillo Gil, señaló: “Para nosotros, lo verdaderamente importante es haber obtenido prácticamente el desmantelamiento de la banda (...) tras los hechos de Cerocahui, prácticamente no se tuvo noticia de ningún acto delictivo cometido por él”, dijo, “es decir, era alguien que se sabía rodeado, vigilado, en términos policiacos”.

“La ausencia de un proceso legal conforme a derecho con relación a los homicidios implicaría un fracaso del Estado mexicano frente a sus deberes básicos y confirmaría