Buenos Aires, Octubre 2012
Queridas Comunidades Parroquiales, Capillas, Colegios e Institucion es Católicas de todo el país, queridos amigos de la misión: El Mensaje del Papa Benedicto XVI, para la 86º Jornada Mundial de las Mision es, para este año, nos ofrece la oportunidad de revisar nuestro compromiso con la misión univers al de la Iglesia. Podemos preguntarnos ¿dónde estamos parados? ¿Qué tan involucrados nos sentimos, y si lo estamos concretamente, en la misión de toda la Iglesia? En consonancia con el Año de la Fe, me vuelven a la memoria aquellas hermo sas palabras de Aparecida: “Al llamar a los suyos para que lo sigan, les da un encargo muy preciso: anunciar el Evangelio del Reino a todas las naciones (Cf. Mt 28,19; Lc 24,46-48). Por esto todo discípul o es misioner o, pues Jesús lo hace partícipe de su misión, al mismo tiempo que lo vincula a Él como amigo y herman o. Cumplir este encargo no es una tarea opcional, sino parte integrante de la identidad cristiana, porque es la extensión testimonial de la vocación misma” (DA 144) Tanto el Mensaje del Papa como Aparecida, en el contexto del Año de la Fe, nos hacen tomar conciencia de nuestra identidad misionera y de la gran responsabilidad que tenemo s todos en la misión universal de la Iglesia. El lema elegido para la Colecta Mundial de las Mision es 2012, en Argentina: “Compartiendo la fe, creceremos juntos”, y la figura misionera de la Beata Teresa de Calcuta, son instrumentos que nos ayudarán en la reflexión. Los invito a utilizar y divulgar el material preparado para la formación y animac ión en el octubre misionero y durante la Colecta Mundial por las Misiones: 13 y 14 de octubre. Sugiero recurrir en modo particular, a la edición especial de la revista “Iglesia Misionera Hoy”, rica de contenido y sugerencias para toda la comunidad, en todos los puntos del país y diferentes realidades y situaciones, y así poder hacer de nuestras comunidades, verdaderas parroquias misioneras. Concluyo compartiendo con ustedes esta frase de la Conferencia de Aparecida: “En el seguimiento de Jesucristo, aprendemos y practicamos las bienaventuranzas del Reino, el estilo de vida del mismo Jesucristo: su amor y obediencia filial al Padre, su compasión entrañable ante el dolor humano, su cercanía a los pobres y a los pequeños, su fidelidad a la misión encomendada, su amor servicial hasta el don de su vida. Hoy contemplamos a Jesucristo tal como nos lo transmiten los Evangelios para conocer lo que Él hizo y para discernir lo que nosotros debemos hacer en las actuales circunstancias” (DA 139) ¡Que vivan en familia y en la comunidad un profundo y fecundo octubre misione ro! Encomiendo a cada uno a la protección de María, Reina de las Misiones.
Pbro. Osvaldo Pablo Leone Director Nacional Obras Misionales Pontificias
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Revista
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sep-nov2012
«Iglesia Misionera Hoy» Equipo de Redacción Pbro. Pedro Brassesco Hna. Marcela Davies Hna. Sonia María Zbrun, HdM Antonia Martinez Favio Rosso
Director Pbro. Osvaldo Pablo Leone Agr ade c e m os a todos l os que c ol abor ar on e n e sta e di c i ón e spe c i al . Oración Octubre Misionero: Pbro. Dante De Sanzzi
Nº 491
Suscripción y Envío Favio Rosso Gastón Juliani Marín Administración Cdra. Norma Jiménez Diseño y Diagramación Juan C. Repik
Diseño de afiches - Estampa: Claudio Navarro
Diseño de Tapa y Contratapa Claudio Navarro
Edición DVD Animación Misionera: Jorge Román Canal 21 Locución Promo Radio & TV: Ricardo Grella - Radio María
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Parroquia Vietnamita Edición especial de 68 páginas con material de información, formación y testimonios misioneros. Ud. puede ser un difusor más de la revista, obteniendo suscriptores entre sus familiares, amigos y compañeros de trabajo o estudio. Por adelantado le damos las gracias: $ 12.- Cada ejemplar $ 40.- Suscripción anual USD 45.- Extranjero
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Propietario: Obras Misionales Pontificias - Domicilio Legal: Medrano 735 (1179) Buenos Aires
1/ Editorial |
Especial
Subsidios Animación Misionera
Testimonios Misioneros
Material Misionero
>Contenido Pbro Osvaldo Pablo Leone
4/ “Llamados a hacer que la Palabra de Verdad resplandezca” | Mensaje del Papa Benedicto XVI para la Jornada Mundial de las Misiones
8/ 86ª Jornada Mundial de las Misiones – Historia sobre esta Jornada | Equipo de Redacciòn 10/ Catequesis del Afiche y Lema para la Jornada Mundial de las Misiones |Claudio Navarro -Hna. Ana María Palma
41/ Compartiendo la fe, creceremos juntos – Subsidio para la IAM | Hna. Marcela Davies
11/ Guión para la Santa Misa | Pbro. Gustavo Ballario
43/ Subsidio para catequesis primera comunión|
13/ Sugerencia para la Homilía |
Equipo Colaborador OMP
Pbro. Gustavo Ballario
14/ El coraje y el riesgo – Testimonio Misionero | Pbro. Carlos Bazzara
15/ Ser Iglesia Misionera, prioridad renovada – Reflexión sobre el Mensaje Papal | Mons. Vicente Bokalic, MC
17/ Volver el corazón a Dios – Testimonio Misionero | Eugenia Carrizo
45/ Estar dispuestos para la misión – Subsidio para grupos y misioneros y jóvenes |Equipo Colaborador OMP
47/ La fe se fortalece dándola – Subsidio para colegios primarios | Hna. Facunda Lamas - Dolores Lenna Coghlan
49/ Discípulos misioneros en la escuela – Subsidio para colegios secundarios |
18/ Vigilia Misionera de Oración |
Hna. Facunda Lamas - Dolores Lenna Coghlan
P. Andrés Mochalski, S.V.D.
52/ No hay nada más misionero que el amor – Testimonio Misionero | Hna. Gabriela Burgos, SSpS
22/ Te daré gracias Señor de todo corazón por tu amor y fidelidad – Testimonio Misionero | Hna. Gabriela Barría
53/ Anuncia el Evangelio, hoy el mundo te espera – Subsidio para seminaristas |
23/ Lectura Orante de la Palabra de Dios |
Federico Aquino, Oscar Cáceres, Sergio Castro
Adriana Pesci
55/ Vida contemplativa: don para la Iglesia y el mundo – Subsidio para monasterios |
26/ La guerra en Siria no es sólo una noticia Testimonio Misionero | Anónimo
Sor María Nora, OP
27/ Ayuda económica de la Iglesia Argentina a la Misión Universal | Cdra. Norma Jiménez
57/ Con mirada atenta a los nuevos escenarios – Subsidio para comunidades religiosas |
29/ Proyectos financiados por la Colecta Mundial por las Misiones 2011 | Equipo de Redacción
59/ Ser misioneros desde el dolor – Subsidio para enfermos y ancianos misioneros | Equipo Colaborador
31/ La ayuda a la Misión en cifras |
Missio - CEI
32/ Labor misionera en Macao, China – Testimonio Misionero | Fr. Alberto Rossa, cmf 33/ Te doy gracias Señor por tu amor, no abandones la obra de tus manos | Pbro. Osvaldo Pablo Leone
Hnas. Misioneras Nuestra Señora de los Apóstoles
OMP
61/ Diversidad de Pueblos y Culturas Originarias – Subsidio para misioneros que acompañan comunidades aborígenes | Pbro. Gustavo Tartaglia 63/ Cadena del Rosario Misionero - Subsidio sobre cómo participar | Equipo de Redacción
37/ Llevemos la fe hasta los confines del mundo – Subsidio para las comunidades parroquiales |Equipo Colaborador OMP
65/ Anunciando en la tierra del caldén – Testimonio Misionero | Pbro. Fabián Mondini
39/ Ser misioneros de manzana – Subsidio para misioneros de manzana |Equipo Colaborador OMP
Hna. Lic. Sonia Zbrun, HDM
66/ 31º Curso de Misionología | 68/ Enventos destacados año 2012 - 2013
Redes sociales de las Obras Misionales Pontificias
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Mensaje del Santo Padre Benedicto XVI Jornada Mundial de las Misiones 2012
«Llamados a hacer que la Palabra de verdad resplandezca» (Carta Apostólica Porta Fidei, 6) QuerIDOs herMaNOs y herMaNas, La celebración de la Jornada Misionera Mundial de este año se carga de un significado especial. La celebra-
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ción del 50 aniversario del Decreto Conciliar Ad Gentes, la apertura del año de la Fe y el Sínodo de los Obispos sobre la Nueva Evangelización, convergen en la reafirmación de la voluntad de la Iglesia a comprometerse con más valor y celo en la misión ad gentes para que el Evangelio llegue hasta los confines de la tierra. El Concilio Ecuménico Vaticano II, con la participación de tantos obispos de todos los rincones de la tierra, ha sido un signo brillante de la universalidad de la Iglesia, reuniendo, por primera vez, un inmenso número de Padres Conciliares procedentes de Asia, África, América Latina y Oceanía. Obispos misioneros y obispos autóctonos, pastores de comunidades dispersas entre poblaciones no cristianas, que han llevado a las sesiones del Concilio la imagen de una Iglesia presente en todos los continentes y que eran intérpretes de las complejas realidades del entonces llamado "Tercer Mundo". Ricos de una experiencia derivada de ser pastores de Iglesias jóvenes y en vía de formación, animados por la pasión de la difusión del Reino de Dios, ellos han contribuido significativamente a reafirmar la necesidad y la urgencia de la evangelización ad gentes, y de esta manera llevar al centro de la eclesiología la naturaleza misionera de la Iglesia.
eCLesIOLOgía MIsIONera
La PrIOrIDaD es evaNgeLIzar
Hoy esta visión no ha disminuído, al contrario, ha experimentado una fructífera reflexión teológica y pastoral, y, al mismo tiempo, vuelve con renovada urgencia, ya que se ha expandido enormemente el número de aquellos que aún no conocen a Cristo: "Los hombres que esperan a Cristo son todavía un número inmenso", comentó el beato Juan Pablo II en su encíclica Redemptoris Missio sobre la validez del mandato misionero, y agregaba:" No podemos permanecer tranquilos, pensando en los millones de hermanos y hermanas, redimidos también por la Sangre de Cristo, que viven sin conocer del amor de Dios" (n. 86). Yo, también, en la proclamación del Año de la Fe, he escrito que Cristo "ahora como entonces, nos envía por los caminos del mundo para proclamar su Evangelio a todos los pueblos de la tierra" (Carta Apostólica Porta fidei 7); proclamación, que, expresó también el Siervo de Dios Pablo VI en su Exhortación Apostólica Evangelii Nuntiandi, "no constituye para la Iglesia algo de orden facultativo: está de por medio el deber que le incumbe, por mandato del Señor, con vista a que los hombres crean y se salven. Sí, este mensaje es necesario. Es único. De ningún modo podría ser reemplazado" (n. 5). Entonces, necesitamos retomar el mismo fervor apostólico de las primeras comunidades cristianas, que pequeñas e indefensas, fueron capaces, a través de su anuncio y testimonio, de difundir el Evangelio en todo el mundo entonces conocido.
El mandato de predicar el Evangelio no se agota, por lo tanto, para un Pastor, en la atención hacia la parte del Pueblo de Dios que se le ha confiado a su cuidado pastoral, o en el envío de algún sacerdote, laico o laica Fidei donum. Esto debe implicar todas las actividades de la iglesia local, todos sus sectores, en fin, todo su ser y su trabajo. El Concilio Vaticano II lo ha indicado con claridad y el Magisterio posterior lo ha confirmado con fuerza. Esto implica adecuar constantemente estilos de vida, planes pastorales y organizaciones diocesanas en esta dimensión fundamental de ser Iglesia, especialmente en nuestro mundo que cambia de contínuo. Y esto vale también para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólicas, como para los Movimientos eclesiales: todos los componentes del grande mosaico de la Iglesia deben sentirse fuertemente interpelados por el mandamiento del Señor, de predicar el Evangelio, de modo que Cristo sea anunciado por todas partes. Nosotros los Pastores, los religiosos, las religiosas y todos los fieles en Cristo, debemos seguir las huellas del apóstol Pablo, quien, "prisionero de Cristo para los gentiles" (Ef. 3, 1), ha trabajado, sufrido y luchado para llevar el Evangelio entre los paganos (Col. 1, 24-29), sin ahorrar energías, tiempo y medios para dar a conocer el Mensaje de Cristo.
No sorprende, por lo tanto, que el Concilio Vaticano II y el posterior Magisterio de la Iglesia insistan de modo especial en el mandamiento misionero que Cristo ha confiado a sus discípulos y que debe ser un compromiso de todo el Pueblo de Dios, Obispos, sacerdotes, diáconos, religiosos, religiosas, laicos. El encargo de anunciar el Evangelio en todas las partes de la tierra pertenece principalmente a los Obispos, principales responsables de la evangelización del mundo, ya sea como miembros del colegio episcopal, o como pastores de las iglesias particulares. Ellos, efectivamente, "han sido consagrados no sólo para una diócesis, sino para la salvación de todo el mundo" (Juan Pablo II, Carta encíclica Redemptoris missio, 63), "mensajeros de la fe, que llevan nuevos discípulos a Cristo" (Ad Gentes, 20) y hacen "visible el espíritu y el celo misionero del Pueblo de Dios, para que toda la diócesis se haga misionera"(ibid., 38).
Incluso hoy, la misión ad gentes debe ser el horizonte constante y el paradigma en todas las actividades
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eclesiales, porque la misma identidad de la Iglesia está constituida por la fe en el misterio de Dios, que se ha revelado en Cristo para traernos la salvación, y por la misión de testimoniarlo y anunciarlo al mundo, hasta que Él regrese. Como Pablo, debemos dirigirnos hacia los que están lejos, aquellos que no conocen todavía a Cristo y todavía no han experimentado la paternidad de Dios, con la conciencia que "la cooperación misionera se debe ampliar hoy con nuevas formas para incluir no sólo la ayuda económica, sino también la participación directa en la evangelización " (Juan Pablo II, Carta encíclica Redemptoris missio, 82). La celebración del Año de la Fe y el Sínodo de los Obispos sobre la nueva evangelización serán ocasiones propicias para un nuevo impulso de la cooperación misionera, sobre todo en esta segunda dimensión. La fe y eL aNuNCIO
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El afán de predicar a Cristo nos lleva a leer la historia para escudriñar los problemas, las aspiraciones y las esperanzas de la humanidad, que Cristo debe curar, purificar y llenarlas con su presencia. Su mensaje, efectivamente, es siempre actual, se introduce en el corazón de la historia y es capaz de dar una respuesta a las inquietudes más profundas de cada hombre. Por esto la Iglesia, en todas sus partes, debe ser consciente que "los inmensos horizontes de la misión de la Iglesia, la compleja situación presente exigen hoy modos reno-
vados para poder comunicar efectivamente la Palabra de Dios" (Benedicto XVI, Exhortación apostólica postsinodal Verbum Domini, 97). Esto exige, en primer lugar, una renovada adhesión de la fe personal y comunitaria en el Evangelio de Jesucristo, "en un momento de cambio profundo como el que la humanidad está viviendo" (Carta Apostólica Porta fidei 8). Uno de los obstáculos para el nuevo impulso de la evangelización, de hecho, es la crisis de fe, no sólo en el mundo occidental, sino de la mayoría de la humanidad, que sin embargo tiene hambre y sed de Dios y debe ser invitada y conducida al pan de vida y al agua viva, como la samaritana que va al pozo de Jacob y conversa con Cristo. Como cuenta el evangelista Juan, la historia de esta mujer es particularmente significativa (Cf. Jn. 4,130): encuentra a Jesús que le pide de beber, luego le habla de una agua nueva, capaz de saciar la sed para siempre. La mujer al inicio no entiende, se queda en el nivel material, pero lentamente es dirigida por el Señor a realizar un camino de fe que la lleva a reconocerlo como el Mesías. A este respecto San Agustín afirma: "después de haber acogido en el corazón a Cristo Señor, ¿qué otra cosa hubiera podido hacer (esta mujer) si no dejar el cántaro y correr a anunciar la buena noticia?" (Homilías 15,30). El encuentro con Cristo como Persona viva que colma la sed del corazón puede sólo conducir al deseo de compartir con otros el gozo de esta presencia y de hacerlo conocer para que todos la puedan experimentar. Es necesario renovar el entusiasmo de comunicar la fe para promover una nueva evangelización de las comunidades y de los países de antigua tradición cristiana, que están perdiendo la referencia de Dios, de forma que se pueda redescubrir la alegría de creer. La preocupación de evangelizar no debe quedar nunca al margen de la actividad eclesial y de la vida personal del cristiano, sino caracterizarla fuertemente, conscientes de ser destinatarios y, al mismo tiempo, misioneros del Evangelio. El punto central del anuncio sigue siendo el mismo: el Kerigma de Cristo muerto y resucitado para la salvación del mundo, el Kerigma del
amor de Dios absoluto y total para cada hombre y para cada mujer, que culmina en el envío del Hijo eterno y unigénito, el Señor Jesús, quien no dudó en compartir la pobreza de nuestra naturaleza humana, amándola y rescatándola, a través del ofrecimiento de sí mismo en la cruz, del pecado y de la muerte. La fe en Dios, en este designio de amor realizado en Cristo, es ante todo un don y un misterio que tenemos que acoger en el corazón y en la vida y del cual estar siempre agradecidos al Señor. Pero la fe es un don que nos ha sido dado para que sea compartido; es un talento recibido para que de fruto; es una luz que no debe quedar escondida, sino iluminar toda la casa. Es el don más importante que se nos ha dado en nuestra existencia y que no podemos guardar para nosotros mismos. La PrOCLaMaCIóN se traNsfOrMa eN CarIDaD ¡Ay de mí si no evangelizase!, dijo el apóstol Pablo (1 Cor. 9:16). Estas palabras resuenan con fuerza para cada cristiano y para cada comunidad cristiana en todos los continentes. También para las Iglesias en los territorios de misión, iglesias en su mayoría jóvenes, frecuentemente de reciente creación, el carácter misionario se ha vuelto una dimensión connatural, incluso cuando ellas mismas aún necesitan misioneros. Muchos sacerdotes, religiosos y religiosas, de todas partes del mundo, numerosos laicos y hasta familias enteras dejan sus países, sus comunidades locales y se van a otras iglesias para testimoniar y anunciar el Nombre de Cristo, en el cual la humanidad encuentra la salvación. Se trata de una expresión de profunda comunión, de un compartir y de una caridad entre las Iglesias, para que cada hombre pueda escuchar o volver a escuchar el anuncio que cura y, así, acercarse a los Sacramentos, fuente de la verdadera vida.
Junto a este grande signo de fe que se transforma en caridad, recuerdo y agradezco a las Obras Misionales Pontificias, instrumentos de cooperación en la misión universal de la Iglesia en el mundo. Por medio de sus acciones el anuncio del Evangelio se convierte en una intervención para ayudar al prójimo, la justicia para los más pobres, la posibilidad de instrucción en los pueblos más perdidos, en asistencia médica en lugares remotos, la emancipación de la miseria, la rehabilitación de aque-
7 llos que son marginados, apoyo al desarrollo de los pueblos, la superación de las divisiones étnicas, el respeto de la vida en cada una de sus etapas.
Queridos hermanos y hermanas, invoco a la obra de la evangelización ad gentes, y en particular a sus trabajadores, la efusión del Espíritu Santo, para que la gracia de Dios la haga caminar de modo mucho más decisivo en la historia del mundo. Con el Beato John Henry Newman rezo así: "Acompaña oh Señor, a tus misioneros en las tierras por evangelizar, pon las palabras justas en sus labios, haz fructífero su trabajo". Que la Virgen María, Madre de la Iglesia y Estrella de la Evangelización, acompañe a todos los misioneros del Evangelio. Vaticano. 6 de enero de 2012, Solemnidad de la Epifanía del Señor
BENEDICTUS PP XVI
Historia de la Colecta «C om p artiendo l a f e, c rec erem os juntos» “La Obra Pontificia de la Propagación de Fe despliega su actividad a lo largo de todo el año, pero con mayor intensidad durante el mes de octubre. Este debe ser considerado en todos los países como el Mes de las Misiones, del que el penúltimo domingo (en Argentina, el 2º domingo de octubre), denominado Jornada Mundial de las Misiones, es su momento culminante” (Estatuto de las Obras Misionales Pontificias, art. 7)
Octubre: un mes dedicado a la mision universal
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“El mes de octubre, con la celebración de la Jornada Mundial de las Misiones, ofrece a las Comunidades diocesanas y parroquiales, a los Institutos de Vida Consagrada, a los Movimientos eclesiales y a todo el pueblo de Dios, la ocasión para renovar el compromiso de anunciar el Evangelio y dar a las actividades pastorales una dimensión misionera más amplia. Esta cita anual nos invita a vivir intensamente los itinerarios litúrgicos y catequéticos, caritativos y culturales, mediante los cuales Jesucristo nos convoca a la mesa de su Palabra y de la Eucaristía, para gustar el don de su presencia, formarnos en su escuela y vivir cada vez más conscientemente unidos a Él, Maestro y Señor. En octubre, además, la Iglesia nos invita a aprender de María, mediante el rezo del Santo Rosario, a contemplar el proyecto de amor del Padre sobre la humanidad, para amarla como Él la ama. ¿No es este también el sentido de la misión?” (Benedicto XVI)
historia de la Jornada Cuando el Cardenal-Arzobispo de Milán, Aquiles Ratti, es elegido Papa en 1922, con el nombre de Pío XI, ya se lo conocía como un gran promotor de las misiones. En su diócesis había instituido un activo Secretariado Diocesano de Misiones haciendo conocer en toda su diócesis la Obra de la Propagación de la Fe. También había establecido una Jornada anual, que debía celebrarse en todas las Parroquias e Instituciones religiosas de la diócesis.
A las pocas semanas de su elección como Papa (3 de mayo de 1922), promulga como Pontificia a la Obra de la Propagación de la Fe, junto con la Obra de la Santa Infancia y la Obra de San Pedro Apóstol, declarándolas instrumento principal y oficial de la cooperación misionera de toda la Iglesia Católica. En febrero de 1926, publica la célebre encíclica Rerum Ecclesiae, en la que reafirma la importancia y urgencia de los objetivos misioneros programados al principio de su Pontificado y manifiesta su resolución inquebrantable de acortar las etapas para su realización. "La Iglesia -afirma en esta encíclica- no tiene otra razón de ser sino la de hacer partícipes a todos los hombres de la redención salvadora, dilatando por todo el mundo el Reino de Cristo". Y es, precisamente en este año, cuando va a tener lugar otro hecho significativo: La institución de la Jornada Misionera de octubre. Las Obras Misionales Pontificias (OMP), desde su promulgación como Pontificias en 1922, se habían ido desarrollando, bajo el impulso de sus Consejos Generales y de sus Direcciones Nacionales y Diocesanas, en muchos países. Así, en este clima tan favorable, surge en el Consejo General de la Pontificia Obra de la Propagación de la Fe (algunos creen que por determinación del mismo Pontífice) la iniciativa de celebrar una Jornada Mundial de las Misiones, que ayudara a recordar a todo el Pueblo de Dios, su corresponsabilidad en la misión universal de la Iglesia.
se proponían 5 objetivos: 1. Promover la oración por las misiones. 2. Dar a conocer la situación de la misión en todo el mundo. 3. Favorecer la animación misionera de los sacerdotes y el entero Pueblo de Dios. 4. Dar a conocer la Obra de la Propagación de la Fe. 5. Promover la cooperación económica como ayuda concreta a las misiones. El lema 2012 en Argentina es: “Compartiendo la fe, creceremos juntos”. Compartiendo la fe… es compartir la propia vida de fe, la que vivimos cada día, en las pequeñas y grandes cosas. Creceremos juntos… compartiendo la fe en Jesús. ¡Claro esto fortalece nuestra vida personal, espiritual y comunitaria!. La Madre Teresa de Calcuta, de quien conmemoramos en el mes de septiembre, 15 años de su partida a la Casa del Padre, es la figura misionera que elegimos para el Mes de las Misiones de este año 2012.
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Catequesis del Afiche y del Lema «Compartiendo la fe creceremos juntos» Con el testimonio de su vida, Madre Teresa recuerda a todos los bautizados que la misión evangelizadora de la Iglesia pasa a través de la caridad, alimentada con la oración y la escucha de la palabra de Dios.
Lema
Afiche 10
Para el diseño del afiche de la Colecta Mundial por las Misiones 2012, se tuvieron en cuenta tres elementos de la vida y obra de la Beata teresa De
CaLCuta:
su presencia: representada en su imagen, que nos recuerda que, aunque pequeña mujer, enamorada de Dios, humilde mensajera del Evangelio e infatigable bienhechora de la humanidad, nos dejó el ejemplo de una fe sólida, de una esperanza invencible y de una caridad extraordinaria. Su respuesta a la llamada de Jesús, hizo de ella una Misionera de la Caridad, una “madre para los pobres”, un símbolo de compasión para el mundo y un testigo viviente del amor de Dios.
su obra: representada en la parte superior, en imágenes de su acción por los más pobres. Toda la vida y el trabajo de Madre Teresa fue un testimonio de la alegría de amar, de la grandeza y de la dignidad de cada persona humana, del valor de las cosas pequeñas hechas con fidelidad y amor, y del valor incomparable de la amistad con Dios.
su proyección, su legado a la Iglesia: representada por el movimiento de las cintas de los colores de los cinco continentes que surgen a la altura de sus manos.
Compartiendo la fe… es compartir la propia vida de fe, la que vivimos cada día, en las pequeñas y grandes cosas. Es la fe en Jesús muerto y resucitado, esta es la Buena Noticia que queremos compartir con todos. Lo hacemos a través de gestos concretos, como lo son la oración, el servicio, una contribución económica para las misiones. Los Obispos de América Latina y el Caribe en la V Conferencia de Aparecida nos exhortaron a la misión, a “ser instrumentos para que Jesucristo sea encontrado, seguido, amado y anunciado a otros (DA, 14) Creceremos juntos… compartiendo la fe en Jesús. ¡Claro esto fortalece nuestra vida personal, espiritual y comunitaria! Afianza la comunión con la Iglesia presente en mi capilla, parroquia y diócesis. Dilata el propio corazón para que podamos ver el mundo en la realidad de los cinco continentes, y nos ayuda a mirar el mundo con compasión como lo mira Jesús, que es el Buen Pastor.
La Madre teresa de Calcuta, de quien conmemoramos en el mes de septiembre 15 años de su partida a la Casa del Padre, es la figura misionera que elegimos para el Mes de las Misiones de este año 2012. Ella nos anima y enseña que la fe en Jesús se comparte, que para eso la tenemos y que al hacerlo compartimos la alegría de crecer juntos como sus discípulos misioneros. Aparecida nos anima diciéndonos que “Este es el Señor de Vida que la Iglesia tiene que ofrecer a las personas y naciones” (DA, 14) Claudio Navarro, Laico de la Diócesis de San Luis - Miembro del Equipo Nacional de Grupos Misioneros Hna. Ana María Palma, Directora Diocesana OMP Diócesis de Merlo-Moreno
Guión para la Santa Misa 86º Jornada Mundial de las Misiones 2012
entrada Hermanas y hermanos: Un cántico cristiano nos recuerda que Dios es Dios familia, Dios amor, Dios Trinidad, “de tal palo tal astilla”, somos su comunidad. Comunidad engendrada por la Palabra y comunidad portadora de la Palabra. Hoy nuestra iglesia Argentina en consonancia con la iglesia que peregrina en el mundo entero celebra la Jornada Mundial de las Misiones. Jornada en que uniendo la oración, los sacrificios y la ayuda económica por las misiones, queremos reforzar nuestra identidad de ser discípulos misioneros de Jesús. Nos ponemos de pie y comenzamos la celebración cantando…
Primera lectura El don de la sabiduría fue pedido por Salomón a Dios. También el discípulo misionero deberá suplicar este don para saborear y dar sabor a la vida de muchos, ya que somos la sal de la tierra.
segunda lectura La misión no es simple propaganda ni es proselitismo. La misión es compartir una vida alcanzada por la Palabra Viva.
evangelio Seguir a Jesús conlleva renuncias. El discípulo misionero sabe que su única propiedad es el Reino de Dios. Escuchemos el relato evangélico que nos invitará a renovar nuestro deseo de seguir a Jesús.
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Oración de los fieles Respondemos: “Escucha, Señor, la oración de tu pueblo”
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1. Por el Papa Benedicto XVI, para que sea fortalecido por los dones del Espíritu Santo, en su misión de guiar a toda la Iglesia. Oremos… 2. Por los pastores de la iglesia, para que sean capaces de estar cerca de los marginados, postergados y alejados. Oremos… 3. Por los que gobiernan las naciones y los pueblos, para que promuevan la libertad religiosa. Oremos… 4. Por los fieles laicos, para que renueven su vocación de ser “levadura en la masa”, testigos en medio del mundo. Oremos… 5. Por los religiosos y religiosas, para que sigan siendo entre nosotros testimonios vivos de las promesas de Jesús, como lo fue la Madre Teresa de Calcuta Oremos… 6. Por los misioneros y misioneras que viven la persecución, para que no decaigan en su entrega. Oremos… 7. Por los misioneros y misioneras que han partido a la casa del Padre, para que podamos recoger su testimonio de vida. Oremos…
Ofertorio El grano de trigo que cae en tierra y muere, puede ser nuestra propia historia de fe, entregada por la proclamación del Evangelio. Como ha sido la vida de Teresa de Calcuta y es la de muchos misioneros en la actualidad. En el silencio fecundo de la semilla en la tierra, está el corazón de tantos hermanos y hermanas que con su testimonio de vida van dejando paso al Evangelio. Hoy traemos al altar estas historias. Ellas son historias de salvación. Cantamos…
Comunión El Amén que decimos antes de comulgar nos compromete a vivir la verdad del amor al Cristo Total: Cabeza y Cuerpo. Es un amén que nos compromete a amar. La misión que anuncia el Evangelio de la vida, ayudando a cada hombre, a cada mujer a vivir de acuerdo a su dignidad, es un acto de verdadero y auténtico amor, que no podemos eludir. Nos acercamos a recibir a Jesús cantando…
Despedida El sacerdote en este saludo final no nos da “un permiso” para retirarnos sino que, en nombre de Jesús, nos envía al mundo como sus testigos. La finalización de la misa es el inicio de la misión. Cantamos… Pbro. Gustavo Ballario - Director Diocesano OMP Diócesis de San Francisco
Sugerencia para la Homilía La vida misionera... ¿Pérdida o ganancia? Había una vez un hombre con mucho dinero que tenía dos hijos. En su lecho de muerte, el padre llama a los hijos y les dice que el día de su sepultura quería ser enterrado junto con todo su dinero. Los hijos se turbaron con la idea de su padre. Pero lo querían y respetaban y no podían negar su último deseo. De todos modos no estaban muy convencidos de enterrar así nomás la gran herencia. Al hijo menor se le ocurre una brillante idea: hizo un cheque a 30 días y lo puso en el ataúd el día del entierro de su padre. Sabemos que cuando morimos dejamos todo lo que tenemos y nos llevamos solamente lo que dimos. La muerte entonces nivela a pobres y ricos. La muerte pone fin a los bienes materiales y posibilita la expresión total a los bienes espirituales. Solo ahí se ve con claridad la verdadera cosecha de la verdadera siembra. El personaje de hoy es un joven rico. Un joven que se acerca a Jesús. Un joven recto y consciente de haberse conducido en una vida irreprensible. Sin embargo en él hay una profunda inquietud y pena que lo hace sufrir. Y se acerca a Jesús porque intuye que de Él puede venir una palabra de esperanza y serenidad. Hasta desde su visión teológica está acertado el joven: la vida eterna es “heredada” .Ella es un regalo, no una conquista. El joven se acerca a Jesús con una pregunta. Pero como era habitual entre los maestros de Israel, Jesús le responde con una contrapregunta. Como si le dijera: “tú ya tienes un maestro bueno que es Dios, el cual te instruye a través de la Escritura”. Luego, para ayudarlo, le recuerda los preceptos que el Señor ha revelado a su pueblo y que constituyen la condición mínima para acceder a la vida. Cita el Decálogo, aunque de modo incompleto. Pasa de largo los tres primeros mandamientos, ya que el único modo de manifestar el amor a Dios es vivir su proyecto en favor del hombre. (Cf. 1 Jn. 4, 11). Seguramente delante de Dios este joven valora su propia vida con un cierto optimismo, ya que los rabinos enseñaban que para ser justo era suficiente observar los mandamientos. A esta altura del diálogo Jesús ve que el joven está preparado para dar el gran salto cualitativo. Después de mirarlo con amor le dice: “vete, vende todo lo que tienes y reparte el dinero entre los pobres, y tendrás un tesoro en el Cielo. Después, ven y sígueme." No se trata de un nuevo precepto agregado al decálogo sino de una invitación a vivir una lógica completamente nueva: no
se puede ser su discípulo si no se desprende el corazón de todo lo que se posee. También los filósofos conocen esto: Cratete, un discípulo de Diógenes, arrojó sus cosas al mar. Pero Jesús, frente a los bienes de este mundo asume una actitud diversa: no invita a destruirlos sino a darlos a los pobres, no como limosna sino renunciando a todo. ¿Cómo hacer posible esta exigencia? El ideal cristiano no es la miseria y el hambre sino la comunión de bienes: no todo lo que es “mío” es “para mí”. En Marcos la historia termina tristemente: tiene miedo y se aleja con tristeza. No se da cuenta que el hombre está hecho para el amor infinito y que ninguna criatura puede saciar el corazón del hombre. El joven rico seguramente después del encuentro con Jesús siguió siendo justo, pero no llegó a ser cristiano, no llegó a ser discípulo de Jesús, no se animó a dar el salto cualitativo. En este Domingo Mundial de las Misiones, en el cual la iglesia se une en oración, concientización y aporte solidario por las misiones en el mundo entero, ponemos la mirada en el grano de trigo que cae en tierra y muere: son las vidas entregadas completamente, vidas que dieron el salto cualitativo de un seguimiento total a Jesús. Sin cálculos de pérdidas. Sin mezquindades. Debemos mirar a estos hombres y mujeres, laicos y laicas, religiosos y religiosas, sacerdotes y obispos. Han abandonado todo para lanzarse en el surco de tierras lejanas. Solo así crece el Reino de Dios. Solo así, en la entrega y el despojo, hay Pascua. Pbro. Gustavo Ballario - Director Diocesano OMP Diócesis de San Francisco
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El coraje y el riesgo
“El mundo está en las manos de aquellos que tienen el coraje de soñar … y arriesgan para vivir sus sueños” (P. Coelho). Estas palabras del escritor brasileño me hacen pensar a la vida y a la muerte de Mons. Brésillac. Leer las ultimas paginas de la vida de nuestro fundador, es para mi como sumergirse en las actas de nuestros mártires. Su muerte oblativa continua manifestándome su vida y su pasión misionera. Marion Brésillac no solo tuvo el coraje de soñar con la misión de aquella “Voz que lo llamaba”, sino también que arriesgò con el don total de su vida. Ser apasionado es permanecer fiel a Aquel que orienta toda nuestra vida y a Quien le hemos dado todo nuestro corazón. Esta pasión desvela la violencia del amor para entrar en la lógica del Reino.
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La fidelidad de nuestro fundador y de sus discípulos revelada en Freetown, proviene de un corazón despojado de todo aquello que no pertenezca al Reino de Dios. No se puede versar la sangre sin derramar el propio “ego”. La fe es un don y una conquista que requiere un combate cotidiano. Este no es otra cosa que el sacrificio de abandono y de renuncia, para hace de cada “lavatorio de pies”, una Eucaristía. Se trata de volverse pobre, pequeño y contemplativo. En el encuentro de la Sociedad de las Misiones Africanas de Parakou (Benin) hemos presentado un buen
informe a nuestros colegas, donde se habla de la búsqueda de una iglesia pobre. Decíamos: “La iglesia habla desde su pobreza … El Niger es un país que demanda un gran esfuerzo para despojarse de uno mismo y a menudo nuestra actividad se reduce a una simple presencia … Y esto representa una chance, un don de Dios y una oportunidad para toda la SMA. Aquí nos empequeñecemos …” La muerte de Mons Bresillac leída a la luz de su vida misionera, me parece que nos empuja a vivir concretamente una conversión misionera permanente (personal y comunitaria) para arriesgar y crecer en la oblatividad a la Mision de Dios. La misión del Niger es la misión de un Dios nómade, y que nos llama a una misión nómade, no permitiéndonos instalarnos. Decia nuestro fundador: “ El amor a la pobreza, mejor aun, este amor practico de la pobreza, no es otra cosa que el primer paso hacia la renuncia de uno mismo” (M. de Brésillac, SVC 207) Me siento llamado a vivir, según mis posibilidades, como alguien que quiere desmalezar el campo de la misión, en una iglesia mas contemplativa y preocupada de reducir al máximo sus estructuras. Una iglesia que tenga el coraje de arriesgar y encarnar el sueño histórico del Nazareno partiendo de nuestros límites y vulnerabilidad. Y porque es pobre, es entonces permeable a un dialogo sincero, profundo y veraz con el mundo musulmán. Una iglesia que no viva en el encarnizamiento del “hacer”, sino que viva el “ser”, o mejor aun “el ser del hacer”. Y si no somos hombres de oración “el hacer” será una escapatoria para no arriesgar nada. Una iglesia que sea consciente de su pequeñez, pero que tenga el coraje de arriesgar y encarnar el sueño que el Espíritu ha soplado en su alma. Una iglesia no paternalista, sino dispuesta a caminar junto al pueblo y a los laicos, y que haga -como decía Mons. Casaldaliga- “del canto de su pueblo el ritmo de su marcha”. Todo esto significa un regreso ineludible a una iglesia mas profética y con un rostro mas africano. Que no tenga miedo de ser pequeña y utilizar medios pobres. Arriesgar este sueño, creo que valga la pena! Pbro. Carlos Bazzara, SMA - Niger Sacerdote de la Arquidiócesis de Córdoba
Reflexión sobre el Mensaje del Papa
Ser Iglesia Misionera, prioridad renovada A 50 años del decreto conciliar ‘ad gentes’ OCtuBre es en la Iglesia el mes de las MIsIONes y este año, viene cargado con varios acontecimientos que tienen una clara significación misionera. Se cumplen 50 años del inicio del Concilio Vaticano II.
donde estamos implicados todos como Iglesia. Nos corresponde en primer lugar a los Obispos, pero en este llamado urgente están incluidos todos los bautizados, ya que somos “discípulos-misioneros” de Jesucristo.
Así mismo el Papa Benedicto XVI nos convoca al Año de la Fe y la realización del Sínodo de Obispos sobre la Nueva Evangelización que se celebrará en la Santa Sede.
En este sentido el Papa en su mensaje afirma “para un Pastor, pues, el mandato de predicar el Evangelio no se agota en la atención por la parte del Pueblo de Dios que se le ha confiado a su cuidado pastoral…Debe implicar todas las actividades de la Iglesia local, todos sus sectores y en resumidas cuentas, todo su ser y su trabajo.” Esto puede traducirse cuando DA habla de “conversión pastoral”. Es el desafío constante de “dejar estructuras caducas” o estilos pasivos o de conservación: cuando son muchedumbres inmensas las que aún no conocen el amor de Dios manifestado en Jesucristo, o de tantos que abandonaron nuestras comunidades. Es una conversión que toca al corazón de la Iglesia: en sus responsables pastorales y en todos los proyectos y realizaciones. Es un cambio de estilo y de actitud, ya que implica “salir de uno mismo, de lo que se hace habitualmente y de las seguridades que nos brindan nuestros lugares y grupos; es un llamado a des-instalarnos.
El Papa destaca en su mensaje para la Jornada Mundial de las Misiones, el carácter misionero del Concilio Vaticano II por la presencia y participación de Iglesias jóvenes del 3er. Mundo. Estas, representadas por Obispos de África, Asia y América Latina, eran el fruto de testimonios misioneros que han sembrado el Evangelio en esas tierras, que en ese entonces ya tenían una entidad propia y vitalidad. Esta realidad llevo a la reflexión y a implantar una Eclesiología misionera como lo menciona Benedicto XVI. Uno de los frutos es el decreto conciliar Ad-Gentes, sobre la actividad misionera de la Iglesia. Este documento fue fruto de largos y fecundos años de acción misionera de la Iglesia en pueblos y continentes que aún no conocían a Cristo. Fue inspirador de un fecundo magisterio posterior de los Papas Pablo VI, Juan Pablo II y ahora Benedicto XVI y también iluminó a conferencias continentales y nacionales para asumir el desafío de una Nueva Evangelización. En América Latina tenemos el acontecimiento de Aparecida: es un hito reciente en esta proyección misionera de nuestra fe y nos plantea, como comunidad eclesial, el llamado a una conversión pastoral en clave misionera que nos lleve a vivir como Iglesia en estado de Misión permanente. Este espíritu debe atravesar toda la pastoral de las Iglesias, renovándola y proponiendo acciones programáticas de misión, no solo de eventos misioneros, sino que es un llamado a la “conversión pastoral”
“…el inmenso horizonte de la misión de la Iglesia, la complejidad de la situación actual, requieren hoy nuevas formas para poder comunicar eficazmente la Palabra de Dios” Verbum Domini, 97. Para comunicar la novedad del Evangelio debemos “recomenzar desde
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La vida de santos misioneros despertó muchas vocaciones de consagración a la misión. El conocimiento de nuestros misioneros despierta interés, deseos de colaboración y porque no pensar que pueden ser instrumentos de nuevas vocaciones misioneras. Hay testimonios maravillosos de misioneros: válidos para nuestra juventud y para nuestras familias. Cuando conocemos sus vidas, su acción, su pasión por el Reino, sus grandes necesidades, nacen deseos de ayudar, de rezar por ellos, de comunicarnos para alentarlos y surgen laicos y familias, que después de un sincero discernimiento van a la misión ad-gentes: colaborando con misioneros que ya están en esos frentes.
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Cristo”: convertir las actividades de la Iglesia en espacios donde el anuncio kerigmático, conduzca a un “encuentro con Cristo como Persona viva, que colma la sed del corazón y que nos impulse a compartir con otros el gozo de esta presencia y de hacerla conocer, para que todos la puedan experimentar.” Cuando se logra esto se renueva la fe en Jesús y en su Reino, se siente más hondamente el vacío, la soledad, el abandono y marginación de tantos hermanos. Se siente compasión verdadera y se quiere comunicar lo vivido. Esto lleva a superar fronteras. Ya no podemos quedarnos tranquilos. El llamado urgente a renovar nuestro compromiso misionero no puede estar ausente la “misión ad-gentes, según el Papa “debe ser el horizonte constante y el paradigma en todas las actividades eclesiales.” ¿Cómo despertar ese interés misionero en nuestras diócesis, parroquias, congregaciones y movimientos? Esto es la tarea específica de los Equipos Diocesanos de aNIMaCION MIsIONera. Una manera es dar a conocer acerca de misioneros/as principalmente de nuestro país que están trabajando y sirviendo en tierras de misión ya que “Nadie ama lo que no conoce”. ¿Conocemos misioneros argentinos que están dando su vida en tierras y pueblos de misión? ¿Tenemos algún contacto personal o comunitario con ellos? ¿Como publicitamos en nuestras comunidades las actividades de estos misioneros?
Corremos con el riesgo de encerrarnos en nuestros horizontes reducidos y perdemos la dimensión universal del llamado de Jesús: “vayan a todos los pueblos de la tierra”. Somos pocos los evangelizadores para tantas necesidades y urgencias entre nosotros. Vuelve a la memoria lo que nos decía el Documento de Puebla: “debemos dar desde nuestra pobreza”. Muchos que han hecho esa opción, en medio de necesidades locales, y hoy el Señor ha bendecido a esas comunidades con nuevas vocaciones y florecimiento de las comunidades eclesiales: tanto diocesanos como de la vida consagrada. Que María, Reina de las Misiones, nos alcance la gracia de renovar nuestro fervor misionero para que el Señor nos lleve hacia nuestros hermanos hambrientos de Pan, Verdad y Amor, aquí y mas allá de las fronteras.
Mons. Vicente Bokalic, MC. Presidente de la Comisión Episcopal de Misiones (CEA)
Volver el corazón a Dios
Les cuento que mi vida transcurre desde hace casi 6 meses en Bolivia, pero particularmente desde hace ya 3 meses en San José del Cavitu, que es una pequeña comunidad de la selva amazónica boliviana con cerca de 60 familias, un lugar perdido para los gobernantes, para los mapas y casi para el resto del mundo; pero que no es un lugar desconocido ni ajeno para Dios. Ya que como Dios hizo en la pequeña Belén ha decidido morar también en esta comunidad marginada, pobre y sin nada, sin nada material aclaro; porque tienen una fe y una convicción capaz de mover montañas. Son tan asombrosos en su encuentro con su Padre Creador que no viven su pobreza como carga, tampoco con resignación, ni mucho menos como castigo divino; es más bien como una sabiduría que les dice que Dios en la naturaleza les proveerá aquello que necesiten para vivir; y así sucede definitivamente puesto que: el río les provee el agua necesaria para beber, bañarse, cocinar e incluso recrearse, y es también fuente de comida con la pesca; el monte les provee de los animales salvajes que son un preciado bien: las anta, los o’ochi, los manechi entre otros; la flora les provee de cítricos por doquier que crecen como frutos silvestres, la tierra por su parte les es propicia para sembrar yuca, plátano, arroz y chocolate base de su alimentación, a su vez que les da el preciado barro con el que construyen sus casas mezclados con las ramas de jatata. Viven en el día a día; practican eso que Dios nos dice de que “A cada día le basta su preocupación” cada día recogen lo que han de comer, comen lo que hay y cuando hay; mas nunca les falta. Ustedes me preguntaran como se hace para vivir así, yo aun no entiendo nada, pero sé que en ellos la maldad y el egoísmo tienen muy poca cabida. Es real que tienen necesidades y que su vida no es un cuento de hadas; pero viven!. Es verdad que a mis ojos occidentalizados les hacen falta muchas cosas: un doctor permanente y recursos sanitarios, un camino por el que pueda transitarse todo el año, agua potable, energía eléctrica, mejores oportunidades educativas y algún medio de comunicación; pero insisto creo que son más mis necesidades que la de ellos mismos. En cuanto a un tema extraordinario de creer es que
el dinero en sí mismo prácticamente no circula en san José puesto que no hay quioscos, almacenes ni nada que se le parezca (ni nada en que gastar), el comercio se da fundamentalmente por el intercambio de bienes; en temporada seca cuando puede venderse la producción la gente cuenta con dinero para ir a la ciudad (San Ignacio) y comprar allí lo que no producen sal , azúcar (si no han podido hacer miel de caña) aceite (sino extrajeron bastante del motacu para satisfacer sus necesidades) y obviamente ropas, remedios y útiles escolares. Ya les he contado algo de San José y su gente; ahora paso a contarles de mi vida en esta realidad. Y la verdad es que cuando me detengo a reflexionar le pregunto a Dios cómo puede ser que por unos instantes se me hubiese ocurrido pensar que podía traer algo de Su mensaje a este pueblo; si en verdad soy yo quien día a día ha sido la reevangelizada. Me han abierto a un redescubrimiento de la vida, una vida más sencilla y austera, menos vacía de sinsentidos y bienes materiales, pero más llena de gratitud y reconocimiento de los infinitos regalos que Dios me ha hecho y hace a cada minuto de mi vida, una vida más semejante a la que Cristo propone para quienes quieren seguirlo. Me voy despidiendo de ustedes, con el profundo deseo y ahínco de que estas cosas que he querido compartirles les lleguen, ojala mis palabras en este texto pudiesen tener la pasión y el fervor necesarios para convencerlos (y también convencerme a mí misma) de que “ya es hora”, es el tiempo de volver el corazón a Dios. Carta de Eugenia Carrizo, misionera laica de la Diócesis de Río Cuarto
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Vigilia Misionera de Oración
En el Año de la Fe y dejándonos inspirar por la figura de la
Madre Teresa de Calcuta sugerencias prácticas:
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Aconsejamos que la Vigilia sea acompañada de imágenes – dibujos (rostro de Cristo Misionero, del Papa Juan Pablo II, de Madre Teresa, de los leprosos, marginados, de los misioneros/as); la Biblia, el mapa del mundo, velas en colores de los continentes. Se necesitará también equipo de sonido, para reproducir suave música instrumental. Todo esto para un mejor desarrollo de la Vigilia. INtrODuCCIóN Primer momento Lector 1: Nos ponemos en la presencia de Dios origen y fuente inagotable de la Misión Trinitaria (aquí hacemos la señal de la Cruz). Porque, en esta Vigilia, procuraremos sintonizar nuestro corazón con el de Jesús, abrirnos a la fuerza renovadora y misionera de su Espíritu Santo; alimentar nuestra fe con su Palabra y así sentirnos de nuevo enviados como sus discípulos misioneros a anunciarlo a todos.
Lector 2: Como en su tiempo lo hizo Agnes Gonxha Bojaxhiu – hija de Nikola y Drane – nacida 27.08.1910, en Skopje (pueblo Albanés de la antigua Yugoslavia, hoy capital de Macedonia). Quizás este nombre a muchos no les dice nada, pero si decimos MADRE TERESA DE CALCUTA es diferente. También nosotros queremos vivir aquellas palabras que pronunció un día “ama hasta que te duela, si te duele es la mejor señal”. Cantamos…
Segundo momento Lector 1: Ahora les proponemos algunas frases tomadas de la Carta Apostólica, Porta Fidei, del Papa Benedicto XVI. Como también, breves testimonios sobre la vida y la obra, de esta pequeña pero, a la vez, santa religiosa fundadora de los Misioneros y las Misioneras de Caridad (En la medida de lo posible presentarlas escritas en papel afiche e ilustrar con imágenes apropiadas). Lector 2: “La puerta de la fe” (Hch 14, 27), que introduce en la vida de comunión con Dios y permite la entrada en su Iglesia, está siempre abierta para nosotros. Se cruza ese umbral cuando la Palabra de Dios se anuncia y el corazón se deja plasmar por la gracia que transforma. Después de cada frase podemos contestar juntos: Señor creemos, pero acrecienta nuestra fe. Lector 3: El Año de la fe es una invitación a una auténtica y renovada conversión al Señor, único Salvador del mundo. Dios, en el misterio de su muerte y resurrección, ha revelado en plenitud el Amor que salva y llama a los hombres a la conversión de vida mediante la remisión de los pecados (Hch 5, 31). Lector 4: La fe, en efecto, crece cuando se vive como experiencia de un amor que se recibe y se comunica como experiencia de gracia y gozo. Nos hace fecundos, porque ensancha el corazón en la esperanza y permite dar un testimonio fecundo.
Lector 5: Deseamos que este Año suscite en todo creyente la aspiración a confesar la fe con plenitud y renovada convicción, con confianza y esperanza. Será también una ocasión propicia para intensificar la celebración de la fe en la liturgia, y de modo particular en la Eucaristía, que es “la cumbre a la que tiende la acción de la Iglesia y también la fuente de donde mana toda su fuerza”. Lector 6: Por la fe, María acogió la palabra del Ángel y creyó en el anuncio de que sería la Madre de Dios en la obediencia de su entrega. (Quizás en este momento se pueda colocar en un lugar destacado la imagen de María, Reina de las Misiones) Por la fe, los Apóstoles dejaron todo para seguir al Maestro. Creyeron en las palabras con las que anunciaba el Reino de Dios, que está presente y se realiza en su persona. Por la fe, los discípulos formaron la primera comunidad reunida en torno a la enseñanza de los Apóstoles, la oración y la celebración de la Eucaristía. También nosotros vivimos por la fe, para el reconocimiento vivo del Señor Jesús, presente en nuestras vidas y en la historia. Lector 1: Antes de pasar a algunos comentarios sobre la vida testimonial y misionera de Madre Teresa, vamos a cantar: Si tuvieras fe como un granito de mostaza u otro canto apropiado para este momento Lector 1: Ahora sí, con el corazón predispuesto y los oídos atentos escuchemos los testimonios: Lector 2: La Madre Teresa fue una mujer de gran fe, que vivió amando a los pobres, fue una gran mujer que todos en la Iglesia quieren venerar - decía en una oportunidad el Cardenal Ángelo Sodano - . Después de cada testimonio podemos decir juntos: SEÑOR, HAZNOS MISIONEROS SANTOS, COMO MADRE TERESA. (Sugerimos para este momento proyectar las frases en power point, con imágenes de la Madre Teresa y una música suave de fondo) Lector 3: Toda la vida de esta gran mujer fue la brillante encarnación de servicio a grandes ideales humanos de bondad, compasión, generosidad y fe - comentaba Boris Yeltsin, Presidente de Rusia -. Lector 4: La vida y la muerte de la Madre Teresa debe servir de ejemplo para la humanidad, especialmente para los jóvenes, a fin de desterrar la indiferencia y la destrucción. Nuestro mundo ha perdido una mujer frágil, pero fuerte en su interior - nos decía el Cardenal Norberto Rivera Correa, Arzobispo Primado de México -.
Lector 5: Se puede decir que la Madre Teresa era una reina, una reina de la caridad - expresaba Oscar Luigi Scalfaro, Presidente de Italia -.
Tercer momento actividad: Después de analizar atentamente los textos escuchados, les proponemos lo siguiente: compartir libremente aquellas frases o palabras sueltas que más les impactaron.
Primera Parte: Ser discipulos para ser y hacer misioneros
Primer momento Lector 1: Seguramente muchos de ustedes se preguntarán, ¿cómo hacer este paso de convertirnos más y más en discípulos misioneros del Maestro? Simplemente, así como lo hizo Madre Teresa con y entre los leprosos y marginados de Calcuta. Como ya dijimos al inicio, estamos aquí reunidos en oración para agradecer al Señor, que nos vuelve a llamar cada día. Pero, al mismo tiempo, vamos a renovar nuestro compromiso de ser sus discípulos misioneros y de hacer discípulos misioneros para Él, que hemos recibido el mismo día de nuestro bautismo. Lector 1: Para esto, les proponemos que cada uno le haga la señal de la cruz en la frente a la persona que tiene al lado llamándolo por su nombre mientras le dice “que el señor renueve en ti la gracia de ser su discípulo misionero, aquí, ahora y más allá de tus fronteras” (luego de este gesto el quien preside la ce-
lebración puede rociar a los participantes con agua bendita). Segundo momento Lector 1: Veamos, ahora algunos aspectos misioneros de la vida y la obra de Madre Teresa, su santidad en la
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contemplación y la acción. Aspectos, que también, deben ser enraizados en lo cotidiano de nuestras vidas. Lector 1: Escuchemos como lo reafirma el Papa Juan Pablo II en su homilía en la Misa de Beatificación: Lector 2: “el que quiera ser el primero entre ustedes, será esclavo de todos” - Mt 10, 44. Estas palabras de Jesús a los discípulos, que acaban de resonar en esta Plaza, indican cuál es el camino que conduce a la grandeza evangélica. Es el camino que Cristo mismo recorrió hasta la Cruz; un itinerario de amor y de servicio que va contra toda lógica humana. ¡Ser el servidor de todos! La Madre Teresa pone de relieve el significado más profundo del servicio: un acto de amor hecho al que tiene hambre, sed, al extranjero, al que está desnudo, al prisionero (Mt 25, 34-36), se hace al propio Jesús.
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Lector 3: ¿No es significativo que su beatificación tenga lugar precisamente en el día 19 de octubre de 2003 en que la Iglesia celebra la Jornada Mundial de las Misiones? Con el testimonio de su vida, ella nos recuerda a todos que la misión evangelizadora de la Iglesia pasa a través de la caridad, alimentada en la oración y en la escucha de la Palabra de Dios. Emblemática de este estilo misionero es la imagen que refleja la nueva Beata mientras sostiene, con una mano, la de un niño y, con la otra, recorre la corona del Rosario. Contemplación y acción, evangelización y promoción humana: la Madre Teresa proclama el Evangelio con su vida entregada por entero a los pobres, pero, al mismo tiempo, envuelta en la oración. Honremos en ella a una de las personalidades más relevantes de nuestra época. Acojamos su mensaje y sigamos su ejemplo. Sugerimos cerrar este momento con una canción misionera. Para el momento siguiente quizás a medida que cada lector va haciendo los comentarios respecto a la Madre Teresa, se pueda ir colocando un cirio encendido al lado de su imagen.
Lector 1: También podemos citar las palabras de Monseñor Leo M. Maasburg, Director Nacional de las Obras Misionales Pontificias en Austria: Lector 2: Madre Teresa de Calcuta es venerada por personas de todas las naciones y religiones como ejemplo a seguir, santa y símbolo luminoso del servicio gratuito al prójimo. Era una misionera de un amor sin confines: sin confines en su extensión geográfica, como los Apóstoles enviados por el Señor; sin confines en su profundidad espiritual, según el mandamiento único y nuevo de Jesús, “ámense los unos a los otros, como yo loe he amado”. Ella lo vivió en un modo extraordinariamente auténtico y completo, haciendo resplandecer la luz de Cristo dondequiera que se encontraba. A través de su ser y su actuar demostró al mundo qué significa la misión hoy – no predicaba el amor con sus palabras, sino con su modo de vivir. Lector 3: Madre Teresa se confió completamente a la guía divina con la fundación de las Misioneras de Caridad, cuyo objetivo era llevar la luz de Jesús a los más pobres entre los pobres en los suburbios de Calcuta y seguidamente a todos aquellos que sufren por la pobreza material, social y espiritual en todo el mundo. Lector 4: Se dio cuenta de que el lugar, donde la sed de amor de Jesús puede ser placada, son los hambrientos, los sedientos, los desnudos y los desamparados; en una palabra: “Jesús vestido como el más pobre entre los pobres”. Así ella se hizo Misionera de Caridad anticipando la globalidad de la igualdad entre pobres y ricos, y al mismo tiempo, demuestra la misión de toda la Iglesia y la vocación de cada hombre, independientemente de la raza y de la religión, del color y de la ideología: “a ser hijos de Dios, creados para amar y para ser amados”. Cerramos esta parte de la Vigilia, con un canto adecuado para este momento
Segunda Parte: Con Jesús Sacramentado (Momento de oración con el Santísimo expuesto)
Primer momento Lector 1: Madre Teresa comenzaba su misión todos los días antes del amanecer, delante de Jesús Sacramentado. En el silencio de la contemplación, escuchaba su grito en la cruz: “Tengo sed”. El grito que la empujaba, día a día sin cansancio, hacia las calles de Calcuta y de todas las periferias del mundo. En busca de Jesús en el pobre, abandonado, desnudo y enfermo.
Así también nosotros Señor Jesús, inspirados con este ejemplo, nos ponemos delate de tu presencia real en el Santísimo Sacramento.
Segundo momento Lector 1: Señor Jesús, ella como Tú: Fuente y Dador de Vida”, sabía por su propia experiencia que la vida adquiere todo su valor cuando encuentra el amor. Siguiendo tu Evangelio fue el “buen samaritano” de la persona que encontró, de toda existencia en crisis y despreciada. A continuación se lee el Evangelio de Lc 10, 25-37
Tercer momento Lector 1: Recemos juntos: (hacer copias de lo que sigue para todos)
Iglesia misionera te hace conocer a Ti y a tu envido Jesucristo.
Venga a nosotros tu Reino: Porque sólo en tu Reino, llegamos a ser hijos tuyos y hermanos entre nosotros. Tu Reino de paz, de fe y de caridad implantan los misioneros en el corazón de la humanidad. Hágase tu voluntad: Conocerte a Ti, reconocerte en Cristo y amarte en el Espíritu Santo es tu voluntad. Sálvanos, Padre, para que podamos salvar a nuestros hermanos y se cumpla así el deseo de tu Hijo: “que haya un solo rebaño un solo Pastor”.
El pan nuestro de cada día dánosle hoy: “No sólo de pan vive el hombre sino de toda palabra que sale de la boca de Dios” y este pan de tu palabra el mundo lo reclama. Envía predicadores del Evangelio para saciar a la multitud hambrienta y sedienta de justicia y de amor. Perdona nuestras deudas: Porque hemos pensado poco
Señor Jesús, manso y humilde de corazón. A la luz del Evangelio recién escuchado, queda claro una cosa muy bonita: es fundamental compartir la alegría de amar. Amarnos los unos a los otros, como Tú mismo nos has amado hasta el extremo.
en nuestro deber de llevar a los que no te conocen la fe que recibimos gratuitamente. Perdónanos, Señor, porque no comprendemos todavía, la grandeza de la misericordia hacia los demás.
Por algo, Señor Jesús, la Madre Teresa solía decir: “Ama hasta que te duela, si te duele es la mejor señal”. Hoy, Señor Jesús, ella ya contempla el rostro del Dios de la Misericordia y nos sigue inspirando con sus palabras.
dalizarnos, ni de desconfiar de tu providencia amorosa ante aquellos que no creen, después de dos mil años de la muerte en la cruz de tu Hijo por nosotros.
Señor Jesús, delante de tu presencia real en el Santísimo Sacramento, te pedimos humildemente y nos hacemos disponibles para que hagas nuestro corazón muchas veces endurecido, tierno y compasivo como él tuyo. Para que hagas de nuestra vida una hoguera ardiente de amor. Para que hagas de nosotros, mediante la acción renovadora de tu Espíritu Santo, tus alegres y comprometidos discípulos misioneros, aquí y más allá, ahora y siempre. Tu que vives y reinas con el Padre, en la unidad del Espíritu Santo, por los siglos de los siglos. Amén.
sidades de los que no te conocen aún. De este mal de indiferencia, líbranos, Señor. Amén.
Después de un canto “Danos un corazón” u otro parecido, les proponemos rezar el Padre Nuestro Misionero. Hacemos copias para cada uno.
Padre Nuestro que estás en el cielo: Creemos ¡OH Dios! Que eres nuestro Padre porque nos lo ha revelado Jesús. Pero hay una multitud de hombres que todavía ignora el amor de tu corazón paternal y no saben rezarte la oración que tu mismo Hijo nos enseñó.
Santificado sea Tu nombre: Padre, en tu nombre está encerrado el mensaje de tu amor y la historia de nuestra salvación. Anunciando a los pueblos tu paternidad, la
No nos dejes caer en tentación: En la tentación de escan-
Líbranos del mal: Del mal de ser insensibles a las nece-
Finalizamos la vigilia con la reserva del Santísimo Sacramento y un canto apropiado. P. Andrés Mochalski, S.V.D. Director Diocesano OMP - Díócesis de Puerto Iguazú
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“Te daré gracias Señor de todo corazón por tu amor y tu fidelidad” (salmo 138) Testimonio de Gabriela Barría, neuquina, estuvo tres años en Mozambique. Regresó, entró en la congregación de las Carmelitas Misioneras, en marzo de este año recibió sus primeros votos y ahora está en Brasil, desde allá nos envió estas noticias. Estos dos primeros meses has sido de adaptación y de ir conociendo un poco la realidad de Brasil y de ir entendiendo aunque siento que todavía falta mucho por conocer y entender.
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Que les puedo compartir de Brasil. Por lo que voy conociendo el pueblo de Brasil es muy alegre, acogedor y solidario. En este poco tiempo, he tenido muestras de todo eso, y además son muy simpáticos. Voy percibiendo que la Iglesia de Brasil es una Iglesia viva, con mucha participación de laicos y también muy alegre. Las eucaristías son muy animadas. También voy descubriendo que es también una Iglesia comprometida con lo social, con los más pobres. A nivel Diocesano se lanza cada año lo que se llama la “Campaña de la Fraternidad” que aborda cada vez, un tema social emergente para ser reflexionado y trabajado a nivel de las parroquias, este es el año de la Salud, bajo el lema: “ Fraternidad y Salud Publica”. Por otro lado, la Arquidiócesis, se está preparando para celebrar la IV “Asamblea del Pueblo de Dios”, donde participan sacerdotes, religiosos, laicos, para pensar entre todos el proyecto pastoral a seguir. Teniendo como
eje “Iglesia viva siempre en misión” Bueno, me doy cuenta que no les conté donde vivo, mi comunidad “San José” está en Betim, provincia de Minas Gerais. La patrona de Betím es Nuestra Sra del Carmen. Vivimos en un barrio alejado del centro: “Bandeiriñas” Formamos la comunidad, Hna Nieves, Andreia y yo. Nuestra parroquia es: “Santa Teresita” y tiene 9 comunidades, no hay una comunidad sede, sino que se trabaja en “red de comunidades”, todas las comunidades comparten y se ayudan unas a otras. Por ejemplo, el otro día fue la fiesta de San Juan Bautista, la comunidad que festeja su patrono, organiza un triduo preparatorio, pero las demás comunidades participan activamente, una se encarga de los cantos, la otra del guión, la otra del ofertorio, la otra de hacer algún recuerdito para entregar a los que van llegando.. y así entre todas, es muy lindo!. Hace poco celebramos las “fiestas juninas”, donde además de la celebración litúrgica, se festeja el patrono con stands de comidas típicas y danzas tradicionales. Los jóvenes bailan “cuadrilla” (como nuestro Pericón, aunque con momentos graciosos) Que les puedo decir de mí?. Creo que el Salmo expresa con fidelidad lo que hay en mi corazón: gratitud, gratitud al Señor porque me ha traído aquí, gratitud a la Provincia que ha confiado en mí, y gratitud a las Hnas de la Delegación Ntra Sra de Aparecida que me han recibido muy bien, con alegría y mucho cariño. Estoy muy bien, contenta, y disfrutando de lo que voy viviendo en este tiempo, el ser ojos y oídos, primera etapa de la misión. Algunas veces con ansiedad, pero sabiendo que este tiempo requiere de paciencia y apertura de corazón. Que María, Madre del Carmelo, nos haga cada día mas discípulos y misioneros como ella.
Lectio Divina
Lectura Orante de la Palabra de Dios Invoquemos la presencia del Espíritu Santo con las palabras de de la Santa Carmelita Edith Stein Oraci ón al e sp í ri tu s a n to (L: Edith Stein- M: Hna Ely)
¿Quién eres tú, Luz que me inunda y la oscuridad de mi alma alumbra? Me conduces con mano materna y si me dejaras, no sabría andar. Más cercano a mí que yo misma, y más íntimo que mi intimidad. Me has despertado a nueva vida, y nueva vida me das día tras día. Tú eres rayo que irrumpe en el alma y penetras en lo oculto de sus llagas. Eres tú el maestro que construyes y sostienes tu obra en el mundo. Dulce canto de amor que siempre suena y reúnes los sonidos de los seres. Armonía donde uno encuentra el sentido secreto de su ser.
El Dios samaritano sale a nuestro encuentro en el camino de la Vida “Cuesta abajo, cuesta arriba, es Dios de Cabalgadura (en ella carga a todos los heridos) es Dios de aceite, es suavidad, que es alimento, que es medicina; es Dios de vino, que es alegría y es canto” 1
“Lámpara es tu Palabra para mis pasos, Luz en mi sendero” (Salmo 118,105)
Lectura del texto eL BueN saMarItaNO Evangelio según San Lucas, capítulo 10 25 Un maestro de la Ley, que quería ponerlo aprueba,
1. X.Pikaza,, El Dios Samaritano
se levantó y le dijo: «Maestro, ¿qué debo hacer para conseguir la vida eterna?» 26 Jesús le dijo: «¿Qué está escrito en la Escritura? ¿Qué lees en ella?» 27 El hombre contestó: «Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con todas tus fuerzas y con toda tu mente; y amarás a tu prójimo como a ti mismo.» 28 Jesús le dijo: «¡Excelente respuesta! Haz eso y vivirás.» 29 El otro, que quería justificar su pregunta, replicó: «¿Y quién es mi prójimo?» 30 Jesús empezó a decir: «Bajaba un hombre por el camino de Jerusalén a Jericó y cayó en manos de unos bandidos, que lo despojaron hasta de sus ropas, lo golpearon y se marcharon dejándolo medio muerto. 31 Por casualidad bajaba por ese camino un sacerdote; lo vió, dio un rodeo y siguió. 32 Lo mismo hizo un levita que llegó a ese lugar: lo vio, dio un rodeo y pasó de largo. 33 Un samaritano también pasó por aquel camino y lo vio, pero éste se compadeció de él. 34 Se acercó, curó sus heridas con aceite y vino y se las vendó; después lo montó sobre el animal que traía, lo condujo a una posada y se encargó de cuidarlo. 35 Al día siguiente sacó dos monedas y se las dio al posadero diciéndole: «Cuídalo, y si gastas más, yo te lo pagaré a mi vuelta.» 36 Jesús entonces le preguntó: «Según tu parecer, ¿cuál de estos tres se hizo el prójimo del hombre que cayó en manos de los salteadores?» 37 El maestro de la Ley contestó: «El que se mostró compasivo con él.» Y Jesús le dijo: «Vete y haz tú lo mismo.»
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Meditando tu Palabra, Señor, muéstranos tu rostro! … a modo de pistas: ¿Qué me quieres decir, Señor, por medio de tu Palabra viva, a mí, en este día, en este momento de mi vida? ¿Qué me quieres revelar, Señor, de tu misterio y del secreto de mi corazón? ¿A qué me llamas? ¿De qué he de convertirme? ¿Cómo iluminas hoy, con tu Palabra, mis inquietudes, mis preguntas, mi vida? Vamos saboreando el evangelio: Los PROTAGONISJesús y un maestro de la ley que quiere saber, pero que no pregunta para ampliar sus conocimientos, sino para probar los de Jesús, aunque le llame «Maestro» Ante la pregunta inicial, Jesús no asume el papel que le propone y, en vez de darle la respuesta pedida, lo lleva a buscarla dentro de su corazón, quiere sacarlo del mundo del saber, lanzándolo al del hacer. El jurista se escabulle y busca de nuevo otro saber «informativo», pero a su pregunta« ¿quién es mi prójimo? », Jesús le devuelve otra: quién se hizo prójimo para el otro. Los personajes de la parábola, un hombre, bandidos, un levita, un sacerdote, un samaritano- todos excepto «un hombre», aparecen designados por su función social, unos con prestigio y otros al mundo marginal (bandidos, samaritano). El hombre, aunque desconocido, ocupa el centro del relato ya que todos los demás personajes aparecen en TAS:
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relación con él: los bandidos lo asaltan, despojan, golpean y dejan, el sacerdote y el levita lo ven y pasan de largo, el samaritano lo ve, se conmueve, se acerca, le cura. Incluso cuando lo lleva a la posada, seguirá siendo el polo de los desplazamientos. Esta organización de movimiento en el espacio en torno a un hombre reducido a la impotencia, indica su rol central aun dentro de su pasividad. Todos los personajes se definen a favor o en contra de él: es asaltado, desnudado, molido a palos, dejado medio muerto, compadecido, vendado, conducido, cuidado... Pasa de viajero a cuerpo inerte y, abandonado por unos, reencuentra vida gracias a otro. Las ACCIONES los tres personajes que ven al hombre herido adquieren un saber sobre él. Para el sacerdote y el levita se convierte en un obstáculo a evitar, dan un rodeo y se alejan: las normas de pureza les prohibían mancharse con el contacto con la muerte, ya que deben mantenerse puros para participar en el culto. Por el contrario, para el samaritano el hombre es alguien que atrae su compasión (un verbo que aparece en los evangelios referido solamente a Dios o a Jesús). Lo ve privado de un bien que hay que restituirle, asume el encuentro y se deja interpelar por la necesidad del otro cuya vida cuenta para él más que continuar su viaje. Hay por lo tanto dos maneras de ver: PERMANECER AJENOS O IMPLICARSE. El sacerdote y el levita no cambian, a no ser en el rodeo, pero el contraste de su actitud con el samaritano los hace aliados de los bandidos en el signo de la exclusión: salen del relato solos, limitados por su proyecto, con exclusión del otro. El samaritano lo asume en su desplazamiento y, cuando se va, no lo abandona ni se va ya sólo, sino referido a alguien que ha dejado atrás. 1
En la oración dialogamos con Él en la confiaza, abandonándonos en sus manos y abriendo nuestro corazón a su presencia viva. “La oración ensancha nuestros corazones hasta darles la capacidad de contener el don mismo de Dios.” Madre Teresa A la luz del texto, ¿que le decimos a Dios? “¿Y quién es mi prójimo? Nadie… si lo preguntas. Cualquiera… si lo amas”, nos comparte Dolores Aleixandre.
1 Cf. J. Delorme, Au risque de la parole. Lire Les Evangiles, Parìs 1987, 93-140 - Ref. Aleixandre, Dolores, rscj
Que podamos tener tu mirada Señor, amar como vos los hacès con nosotros. Sin rodeos, que nos acerquemos… Como Madre Teresa, que estuvo en todas partes sirviéndote en los más pobres entre los pobres. Ni siquiera los conflictos y las guerras lograron detenerla. Regalanos la capacidad de caminar por la vida, en lo cotidiano, con los ojos y el corazón bien abiertos, para detenernos ante el clamor de la gente de nuestro pueblo, que necesita nuestra cercanía. Sin escondernos detrás de “nuestras ocupaciones”, ni refugiarnos en hermosas teorías. Sea tu gracia, el aceite y el vino de la alegría que curen, y nuestras manos las que abracen, acaricien y venden sus corazones despojados y golpeados. Ayudanos a salir de nuestra cabalgadura, de nuestra propia comodidad, para que en ella carguemos el dolor de nuestra gente y permanezcamos con ellos. Que nuestras comunidades sean “la posada”,… “ “Betania”, donde se cuida la vida, casa del amigo para el corazón…Al ser peregrinos que van por la vida, se abren heridas de andar y de amar, la misericordia nos tiende una mano, buen samaritano que ofrece ayudar. Betania es la casa en donde la vida por fin resucita y vuelve a surgir, un grito profundo, salir hacia fuera, es amor que libera y convoca a vivir”. 1
Contemplamos a Aquel que es la Palabra Viva, para alcanzar el amor. …y estamos “Llamados a hacer resplandecer la Palabra de verdad” 2 Cuando Jesús concluyó, dejó bien claro que esta no era, simplemente, una historia. Al maestro de la ley le dijo: “Vete y haz tu lo mismo” (Lc.10, 37), Jesús nos envía a hacer, no solo a comunicar saberes. El centro del Reino, es el amor. En el amor a Dios y al prójimo unidos, ya ahora se entra a la vida eterna, en la que nunca pasará, porque Dios es el amor que nunca muere. Este amor debe ser eficaz como el del samaritano que resuelve el problema del herido sin quedarse en buenas intenciones. Llegó donde estaba el hombre, se conmovió, le vendó las heridas, lo puso en su propia montura, lo llevó a una posada y lo cuidó. Pero también fue un amor gratuito. El Samaritano no puso límite ninguno en el cuidado a ese desconocido del que no sabía absolutamente nada, si era un buen hombre o era un bandido más del camino. Tampoco puso un tope a los gastos. Le dijo al dueño de la posada que lo cuidase, que a la vuelta él le pagaría lo
que gastase de más. Debemos buscar la eficacia en el amor, pero solo será evangélicamente eficaz cuando también sea gratuito. Nosotros no podemos amar como quien hace una buena inversión bien calculada en tantos porcientos y rendimientos a plazo fijo. Nuestro trabajo apostólico pasa por momentos de éxitos contables, pero prueba su verdad cuando se pierde en el misterio de Dios que cuida de la historia. En el compromiso con los descalificados, o en el anuncio del evangelio en medio de la indiferencia religiosa de un mundo harto y satisfecho de si mismo, el amor solo puede durar y dar fruto si es gratuito. 3 El impulso del Espíritu no termina al descubrir al herido al lado del camino, sino en el comprometerse con él: entrar eficazmente en su camino, comprometerse en su liberación. Cuantas veces, es nuestro pueblo, con el que compartimos la fe, el que nos “hace un sitio en su montura”, como “al caballero herido y derrotado, cargado de amargura, que no puede batallar”, al que le canta Joan Manuel Serrat, en “Vencidos”. Ellos son nuestra “Posada”, lugar de encuentro donde compartimos la Vida, donde hacemos Fiesta, donde crecemos juntos… Ellos son nuestro buen samaritano que nos hacen reflejo no de lo que ya vivimos y somos, sino que nos manifiesta lo OTRO, lo que no somos, la distancia de conversión que tenemos que recorrer y nos ponen frente a la mirada que nos adentra en nosotros mismos y nos permite acceder al verdadero rostro del prójimo. Ellos con su “terca esperanza” 4 son las “vendas” que curan nuestras heridas y nos enseñan a resistir… Que podamos dejarnos sanar por la fe de la gente sencilla que se acerca a nosotros como Buen Samaritano, para que podamos hacer lo mismo, compartiendo la fe que nos enriquece y renueva en la esperanza... Adriana Pesci - Directora Diocesana OMP Diócesis de San Nicolás de los Arroyos
1. Germán Pravia, Canción “Betania” 2. Benedicto XVI, Mensaje del Santo Padre para la Jornada Mundial de la Misiones 2012 3. Cf. Benjamín González Buelta, sj. “Orar en un mundo roto” 4. Cf. Dolores Ailexandre, rscj., Congreso Internacional de la Vida Religiosa
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La guerra en Siria no es sólo una noticia
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Con gran preocupación por el curso que está tomando el conflicto en Siria un sacerdote relata en conversación telefónica con Ayuda a la Iglesia Necesitada como están viviendo los habitantes de Damasco la situación en los últimos días. Al mismo tiempo el sacerdote hace una llamamiento para que el mundo no se acostumbre a esta situación de violencia. “El sábado tuvimos de nuevo bombardeos, yo estaba en otro barrio de la ciudad, así que cuando se oyeron las primeras bombas decidí regresar a casa, fue imposible encontrar un medio de transporte y tuve que cruzar la ciudad andando. Me sentía en un mundo “surreal”. Muchas tiendas están cerradas pero algunas todavía abren, la gente necesita seguir ganando algo de dinero para sobrevivir. Durante el camino escuchaba una y otra vez una expresión que era como un clamor unánime: ‘Oh, Señor’; una expresión muy árabe.” La situación en Alepo, informa, es mucho mas difícil y dramática que en Damasco. El número de cristianos en esta ciudad es mayor, ya que la gran parte de la minoría cristiana se encuentra en Alepo. La tensión y el miedo son enormes. “Es importantísima la labor que están haciendo mis hermanos sacerdotes y religiosos en esta ciudad, su presencia entre los que sufren da consuelo y alimento espiritual. En una situación como la que estamos pasando se aprecia que la religión no es algo arcaico, obsoleto o privado, como nos quieren hacer pensar a veces, las personas aquí no pueden hacer nada para que las cosas tomen otro curso a nivel político, pero necesitan un apoyo espiritual que les devuelva la paz al corazón y hay que alimentar la fe y la esperanza, aunque el estallido del bomba nos asuste” comenta el sacerdote. Refiriéndose a la situación de los refugiados internos el sacerdote describe la gran labor que esta realizando la
Iglesia: “Se habla de mas de un millón de refugiados internos, que se mueven de un barrio a otro o a otras partes de Siria… pero es una cosa muy precaria nunca se sabe cuanto se va a poder estar ahí. Muchos tienen terror a volver a sus casas. Las diferentes organizaciones de ayuda de la Iglesia se están moviendo mucho para buscar fondos, intentar dar un poco de dignidad a esas personas, arrendar casas.” Especialmente difícil es hacerse a la idea de lo que significa para los muchos niños y jóvenes - la población siria es muy joven – estar prácticamente encerrados a 38° o 40° de calor, sin ventiladores muchas veces, psicológicamente es una carga enorme, expone el sacerdote. Lo mas importante y mas difícil a la vez para él es “no perder la sonrisa”. La gente tiene mucho miedo, “es difícil pensar o hablar de otra cosa, pero con ello la angustia y el dolor no hace sino crecer. Todos queremos que esto termine. A veces uno siente tanto cansancio, pero no pierdo la fe. Tenemos un papel muy importante. En mi homilía del domingo intente que los fieles que venían con un peso tan grande, salieran mas aliviados. Es importante recordar a la gente que no somos solo materia, el espíritu es más que todo eso.” “Siento cansancio” dice el sacerdote. El rezo del salmo 33 “Esta lejos del mal, haz el bien, busca la paz y síguela”o la oración de Santa Teresa “Nada te turbe, nada te espante, todo se pasa: Sólo Dios basta” son una fuente de consuelo y animo para el sacerdote. Para finalizar hace también un llamamiento claro: “De que nos sirve toda esa tecnología y desarrollo del siglo XXI, todos esos avances si acabamos viviendo así: terror, violencia, muerte… Lo que estamos viviendo era inimaginable aquí hace tres o cuatro años. Parece imposible, pero le puede tocar a cualquiera. Pero, no tiene por qué ser así, las cosas no son inevitables, no se acostumbren a la situación en Siria. No queremos ser solo parte de una noticia. La guerra en Siria no es solo una noticia, es parte de nuestro presente y quizá también de nuestro futuro.” Este testimonio por motivos de seguridad es anónimo. Agradecemos a: María Lozano, Dpto de Comunicación de Ayuda a la Iglesia necesitada www.ain-es.org
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región Patagonia-comahue
región Litoral
región centro
san isidro Buenos aires Lomas de Zamora san Martin san Miguel san Justo Quilmes Merlo Moreno Laferrere Morón avellaneda-Lanus
región cuyo
región Buenos aires
A y u d a e co n ó mic a d e la I g les ia Ar gent in a a la Mi sión U n iv er sal C ol e c t a s 20 09 , 2 0 1 0, 2 01 1 y co m par at ivo (c if r as en pes os )
córdoba río cuarto Villa María san Francisco cruz del Eje Deán Funes
Mendoza san rafael san Luis La rioja san Juan
circunscriPción santa Fe rosario Paraná concordia rafaela Gualeguaychú Venado Tuerto san nicolás
circunscriPción neuquén alto Valle río Galleqos com. rivadavia san carlos Baril Viedma Esquel
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Varc.10-11
97.870,32 97.148,00 34.533,00 16.410,26 16.635,32 13.632,00 17.267,00 3.551,35 1.689,60 3.075,00 9.140,00
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310.951,85
439.782,07
431.370,42
35.961,92 -24.548,13 -9.369,00 1.198,21 -3.856,36 -4.571,00 -668,14 5.724,20 -462,35 -61,00 -7.760,00 -8.411,65
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Varc.10-11
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2009
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2009
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A yu d a e c on óm ic a d e la I g les ia Ar gen tina a la Mi sión U n iv er sal Co l e c t a s 2 0 0 9 , 2 01 0 , 2 0 11 y co m par at iv o ( cif ras en pes os )
región nEa
circunscriPción Formosa resistencia Posadas san roque corrientes Puerto iguazú reconquista Goya Oberá santo Tomé
circunscriPción
Otros
región Platense
región nOa
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Tucumán Jujuy catamarca salta Orán cafayate santiago del Est añatuya concepción Humahuaca
circunscriPción
2009
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Varc.10-11
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2009
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Varc.10-11
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2009
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Varc.10-11
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circunscriPción
2009
2010
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Varc.10-11
Maronita Opus Dei armenia ucraniana castrense Oriental
3.770,00 1.264,60 -
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Zárate-campana Mar del Plata Bahia Blanca nueve de Julio santa rosa azul chascomús Mercedes-Luján La Plata
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Cdra. Norma Jiménez - Administración OMP
De s t aca m o s a lg u no s d e lo s má s de 30 .0 00 Pr oy ec to s f i nan ci ados por la C o l ec t a M u n d i a l de las Mi s io nes 2 01 1
AMÉRICA
a quienes se les quiere brindar programas de formación de líderes, de 2-3 días.
Antillas
Subsidio otorgado: USD 4.000 Construcción de un muro de contención entorno al almacén de la diócesis y la construcción de una estructura en acero inoxidable para aumentar la capacidad del almacén.
La diócesis para ayudar a los más pobres distribuye todo tipo de cosas de primera necesidad. Para hacer esto, ya desde hace más de 20 años, ha adquirido un terreno y ha construido un almacén para colocar allí toda la mercadería que será distribuida. El almacén ha sido también dañado por el ciclón Emily (2004/5). El terreno y el almacén fueron destruidos. Para evitar posteriores daños a las personas y a las cosas, se ha decidido construir un muro de contención y al mismo tiempo ampliar el almacén con una estructura en acero inoxidable.
Indonesia Pedido de ayuda para la reconstrucción de la Iglesia “Asunción de María”, en la parroquia de Sebuku: La parroquia tiene alrededor de 600 católicos. La Iglesia actual ha sido construida de madera en 1996 y ahora está seriamente dañada y sus cimientos. Quisieran reconstruir la Iglesia.
Subsidio otorgado: USD 9.000
Kazakhstan Parroquia de Isik: Pedido de ayuda para la restructuración de un viejo edificio parroquial, para convertirlo en un Centro Juvenil.
Subsidio otorgado: USD 10.000
Subsidio otorgado: USD 4.000
Colombia
Myanmar
Adquisición de tres motores de abordaje, 2 de 40 HP para la comunidad de Barrancominas y El Sejal, y 1 de 15 HP, para la comunidad de Sarrapia. Las vías de comunicación de la Vicaria son los ríos. Los motores son esenciales, pero también son muy viejos. Es urgente sustituirlos.
Po-Ga Village: Los fieles de la diócesis viven la fe en medio de muchos problemas legales y restricciones políticas. En particular se quisiera realizar en esta ciudad extremadamente pobre, una capilla, también como signo para animar y fortalecer a los cristianos.
Subsidio otorgado: USD 10.000 Subsidio otorgado: USD 10.000
ASIA India Pedido de ayuda para la construcción de una casa de formación: Teresapuram es un centro de evangelización que llevan adelante las Hermanas de “Our Lady of Mercy” que se ocupan de difundir los valores del Evangelio en uno de los lugares más alejados y pobres, donde la mayor parte de las personas viven de la agricultura. Tienen necesidad de una casa de formación.
Subsidio otorgado: USD 16.000
India - Shillong Pedido de ayuda para el sostenimiento económico de cursos de formación de líderes: La arquidiócesis tiene una población de 273.639, distribuidos en 32 parroquias, 1.048 pequeñas comunidades con 46.608 familias católicas y cerca de 70.000 jóvenes,
Pakistán Región de Rahimyar Khan: Pedido de ayuda para la Evangelización de las comunidades tribales de Marwari Bheel, a cargo de la Congregación del Espíritu Santo. Marwari Bheels es la tribu sin tierra, discriminada por las castas y con serios problemas de sanidad, pobreza y educación. Por esto es importante continuar con la catequesis y con el diálogo interreligioso y los programas de evangelización a cargo de la Congregación del Espíritu Santo.
Subsidios otorgados: USD 4.000
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ÁFRICA
las máquinas que se necesitan para este fin. Consideran que esto reduciría mucho los costos.
Algeria
Subsidio otorgado: USD 25.000
Gardaia y Ouargala: solicitan ayuda para el sostenimiento de la biblioteca. Las dos bibliotecas son centros de diálogo Islámico-Cristiano. Se solicita ayuda para poder renovar las suscripciones y para la reparación de algunos equipos.
Parroquia “Saints Martyrs d´Ouganda”: Pedido de ayuda presentado para la adquisición de un grupo electrógeno. Esto resolvería el problema de iluminación.
Subsidio otorgado: USD 1.500
Subsidio otorgado en el año 2010: USD 8.000
Burkina Faso Parroquia de Solenso: Piden ayuda para la construcción de un Centro para jóvenes. Quieren construir un centro juvenil parroquial con dos grandes salas, algunas aulas y una biblioteca.
Subsidio otorgado: Euros 25.000
Burundi
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Pedido de ayuda para proseguir con la construcción del Centro de Formación Permanente para Laicos: Con el subsidio otorgado por la Conferencia Episcopal Italiana (CEI) de 110.000 euros y el otorgado por la Pontificia Obra de la Propagación de la Fe en mayo de 2010 de USD 60.000, se dio inicio a la construcción del Centro de Formación. Se ha podido avanzar con estas ayudas, pero quedan para completar la obra, ventanas, puertas, revestimiento y las instalaciones.
Subsidio otorgado: USD 20.000
Congo (Rep. Democrática) Diócesis KALEMIE-KIRUNGU: Pedido de ayuda presentado para la adquisición e instalación de pantallas solares para la iluminación de 19 parroquias de la diócesis. Esto resolvería el problema de electricidad.
Subsidio otorgado: USD 20.000 KONGOLO: Pedido de ayuda para adquirir máquinas para la fabricación de ladrillos y tejas para la construcción de infraestructuras eclesiales. Para resolver el problema de la adquisición de ladrillos y tejas para la construcción, la diócesis quiere adquirir
EUROPA Azerbaijan, P.AP. Parroquia Cristo Redentor: Pedido de ayuda para la reparación del techo de la Iglesia parroquial.
Subsidio otorgado: USD 8.000
OCEANÍA Tokelau: Pedido de ayuda para las actividades pastorales y de formación de los jóvenes de la misión “Sui iuris”. El padre Oliver ha buscado desde el inicio de su misión, crear un sentido de comunión entre los fieles de las islas. Se solicita ayuda para sostener los gastos de traslados (de 34 a 64 millas) debido a las grandes extensiones de agua que separan las parroquias pertenecientes a la misión.
Subsidio otorgado: USD 4.000
Nueva Zelanda Pedido de ayuda para el sostenimiento de las actividades, que lleva adelante el departamento oficial de misioneros laicos, de la Conferencia Episcopal de Nueva Zelanda. Los misioneros voluntarios reciben normalmente un lugar donde vivir, pero en todo lo concerniente a gastos de viajes, deben hacerse cargo ellos mismos.
Subsidio otorgado: USD 3.000
Papúa Nueva Guinea Pedido de ayuda para el sostenimiento de las actividades pastorales, de la oficina diocesana para la educación religiosa escolar. Esta oficina tiene a su cargo la educación católica en 193 escuelas donde estudian 23.000 niños.
Subsidio otorgado: USD 3.000
La ay uda a la misión en cifras “Las Obras Misionales Pontificias son la expresión de la comunión y de la solidaridad universal” Estatuto de las OMP, 20
Ayuda recibida en el 2011 y distribuida por las Obras Misionales Pontificias a la “Iglesia Misionera” Pontificia Obra de San Pedro Apóstol Formación de las vocaciones nativas en tierras de misión, (seminaristas, novicios y novicias)
África
América
Asia
Europa
Oceanía
24.499.103
426.737
6.588.771
374.916
384.975
47.702.288
4.187.432
28.767672
1.443.862
3.001.744
11.780.500
957.700
7.312.910
80.000
326.500
80.981.891
5.5714.869
42.639.353
1.898.778
3.713.219
PontificiaObra de la Propagación de la Fe Construcción y mantenimiento de Iglesias, capillas y edificios pastorales Sostenimiento de radios, TV e imprentas católicas Medios de transporte para misioneros, sacerdotes, religiosas, catequistas Obras apostólicas y sociales
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Pontificia Obra de la Infancia Misionera Asistencia médica (hospitales, centros de salud) Educación escolar Formación cristiana de los niños
Total (todas las cifras están expresadas en dólares USA)
Igualmente se han distribuido otros USD 21.865.631 para: Asistencia a obispos y sacerdotes ancianos de las Iglesias nuevas en tierras de misión Contribución a la Congregación para las Iglesias Orientales y a la Pontificia Comisión para América Latina (CAL) Becas de estudio para la formación especial de sacerdotes y religiosos/as Ayudas por situaciones de emergencias Total General: USD 159.670.741 La Comunidad Católica de Argentina ha contribuido en pesos argentinos: 2.362.367,93 Fuente: Secretarías Generales de las Obras Misionales Pontificias, Roma - Italia
Labor Misionera en Macao, China
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La presencia misionera en una frontera de la Iglesia como es esta de China tiene matices muy variados. El interés y preocupación especial del grupo de misioneros que estamos en Macao (frontera con China) es ‘formar a los formadores’. En otras palabras, ofrecer desde nuestras posibilidades una formación sólida a los líderes católicos chinos. Ofrecerles una formación lo más completa y adaptada possible, pues ¡son los chinos los que deben evangelizer China! Cuando es posible (que no siempre lo es), traemos grupos de jóvenes a Macao y durante una semana les damos cursos intensivos, a la vez que nos enteramos de la situación concreta que estos líderes experimentan. Otras veces organizamos cursos y retiros para sacerdotes chinos. El permiso de estadía en Macao es solo de una semana y hay que aprovechar el tiempo al máximo. Otras veces somos nosotros y gente de nuestro entorno que cruzamos la frontera y acompañamos a las pequeñas comunidades: escuchándoles, dándoles aliento, formación y esperanza. Somos testigos de grandes testimonios de fidelidad y compromiso cristiano de las comunidades cristianas en China. Recientemente las relaciones oficiales han sufrido un fuerte revés a raiz de dos ordenaciones episcopales muy conflictivas y ahora el control es bastante más severo.
Personalmente mi trabajo se centra en la labor editorial. Hace unos años nos preguntamos cuál es nuestro major aporte a la evangelización en China dada nuestra experiencia y nuestros recursos. Vimos que nuestra misión está en presentar la Palabra de Dios, la Buena Nueva, de forma actualizada de manera que el pueblo sencillo pueda tener acceso y la pueda entender. Estamos concentrados en una nueva traducción de la Biblia al chino moderno. Se trata de una ‘Biblia Pastoral’ con estas característticas: • Una traducción conforme a las lenguas originales • Utilizando el chino moderno, fácil de entender • Con comentarios bíblico-pastorales que ayuden al lector a comprender el texto • Una guía para la Lectio Divina para cada capítulo de la Biblia. Quizás sea la primera vez que aparece el texto Bíblico con comentarios y con Lectio para cada capítulo de la Biblia. ¡Y aparece por primera vez en Chino! Hemos publicado ya los cuatro Evangelios (con comentarios y con Lectio) y publicaremos todo el Nuevo Testamento antes de finales del 2012. En preparación para publicación en 2013 está la Biblia completa. Todo el material está disponible gratuitamente en nuestra página web; allí lo pueden ver: http://www.bibleclaret.org/chinese/index.php Además publicamos el “Evangelio y Vida 2013” – un libro similar a los que existen en Argentina pero con comentarios escritos por chinos. Quizás conozcan La Biblia de Nuestro Pueblo; pues también es fruto de nuestro equipo y desde China, donde imprimimos, la enviamos a todos los países hispanoparlantes. Como primicia les cuento que pronto tendrán en Argentina “El Nuevo Testamento con Lectio Divina” y en 2013 “La Biblia de Nuestro Pueblo con Lectio Divina”… una primicia que ya vio la luz en idioma chino. Fr. Alberto Rossa, cmf
¡Te doy gracias Señor por tu amor, no abandones la obra de tus manos!
Queridas Comunidades Parroquiales, queridos amigos de las Obras Misionales Pontificias:
Providencialmente, inmersos en un nuevo año en el que celebraremos juntos el 86º Domingo Mundial de las Misiones, quiero compartir con todos, que éste es mi último año de servicio como Director Nacional de las Obras Misionales Pontificias, que Dios me ha pedido por cinco años (2007-2012).
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Hemos experimentado juntos muchas alegrías y desafíos a lo largo de estos años de trabajo, y he tenido la gracia de poder ver y caminar al lado de cada uno de los equipos diocesanos de misiones que se han ido afianzando año a año. El Domingo Mundial de las Misiones vivido cada uno de estos años, nos ha ido manteniendo alertas en el reto de ser misioneros aquí y más allá de las fronteras; mantiene actualizada nuestra memoria de que vocación y misión van juntas.
Recuerdo y doy gracias a Dios por cada uno de ustedes y por el compromiso que han asumido en sus diócesis para que cada una de las Obras Misionales pudiera prestar el servicio para el que surgieron en la Iglesia. Tengo en mi corazón los rostros y también los desvelos de ustedes y de quienes codo a codo en la Sede Nacional, me han acompañado a lo largo de estos años de servicio a la Iglesia argentina.
El Mes de las Misiones, que bus tra vocación misionera y de entr oración el rostro de niños y adoles sioneros, ancianos y enfermos, que uno a uno veo pasar ante el
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El Señor Jesús, también me ha enseñado en este tiempo, que es hermoso vivir el gozo de ser su discípulo, pero que también es fuente de alegría sentirme pecador, pobre, débil, necesitado del perdón de los hermanos y pedir perdón sin desanimarme por esto, cuando me equivoco una y otra vez. Les agradezco que hayan disimulado mis faltas, que me hayan perdonado y me hayan hecho sentir como en casa cada vez que he estado con ustedes en sus parroquias, comunidades, colegios, diócesis y familias, en la más variada geografía y cultura argentina.
La figura amable de la Madre Teresa de Calcuta, a quien de un modo particular estamos recordando en este Mes Misionero, ilumina mi corazón para evaluar este tiempo de servicio, como un tiempo en el que Dios se ha manifestado, y en el que todos me han ayudado a buscar el bien, a elegir cada día, vivir el estilo de Jesús haciendo el bien, como lo único que importa verdaderamente.
sca ahondar en nosotros nuesrega generosa, me devuelve en la scentes, animadores, grupos mifamilias, misioneros ad gentes l sagrario y en la eucaristía.
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Todas las responsabilidades tienen también su cruz, es parte de nuestra vocación misionera de seguimiento al Maestro. La cruz es esa marca que me une a Jesús crucificado, y confirma que soy su discípulo. De esto son testigos muchos hermanos que sufren de distintas maneras, laicos, padres de familia, consagrados.
36 Aprovecho para agradecer al Señor el regalo de haberme sentido acompañado por tantos amigos suyos en los momentos de mayor cruz y de haberme dado la gracia de refugiarme en su perdón y misericordia para seguir adelante.
Permaneceremos muy unidos en cada eucaristía, y seguimos caminando, sirviendo al Señor, allí donde él nos quiera pedir que le sirvamos y le entreguemos la vida. Pbro. Osvaldo Pablo Leone Director Nacional Obras Misionales Pontificias
Llevemos la fe hasta los confines del mundo SEMANA DE ORACIÓN POR LAS MISIONES
SEMANA DE LA COOPERACIÓN MISIONERA
Acompañemos el camino de los misioneros
Anunciemos el Evangelio a través de la caridad
“La oración debe acompañar el camino de los misioneros, para que el anuncio de la palabra resulte eficaz por medio de la gracia divina” (RM 78).
“Las necesidades materiales de las misiones son muchas y aumentan cada día. Los sacrificios económicos de los fieles son indispensables para construir la Iglesia y dar testimonio de la caridad” (RM 83).
Propuesta de actividades Realizar con los grupos de oración, Apostolado de la Oración, grupos de adoración, grupos de la Renovación Carismática, etc, una hora de adoración al Santísimo Sacramento por las misiones y los misioneros Repartir la oración por las misiones a todos los fieles de parroquias y capillas, rezarla en algún momento de la misa diaria y dominical, invitarlos a rezar cada día en familia, pidiendo por los misioneros del mundo entero. Impulsar el rezo del Rosario Misionero. Colocar en un lugar visible el afiche de la Colecta Mundial por las Misiones y dar a conocer la catequesis del afiche y lema de este año. Repartir los sobres para la colecta y poner a disposición una alcancía en la puerta de la parroquia/capilla/colegio invitando a los fieles a participar de la Colecta los días 13 y 14 de octubre. Animar a las familias a realizar un gesto económico de ayuda a las misiones como familia. Plasmar en una cartelera misionera, la presencia misionera de la Iglesia en los distintos continentes. Dar a conocer el aporte de la Argentina a las misiones en el año 2011. Recurrir para la animación misionera en las comunidades de la parroquia y en los colegios, al material confeccionado con este fin, por las Obras Misionales Pontificias.
Propuesta de actividades Entregar a los fieles el Mensaje Mundial de las Misiones del Papa Benedicto XVI para el año 2012. Dar a conocer el servicio de las Obras Misionales Pontificias. Explicar su rol en relación a la Colecta Mundial por las Misiones, a través del texto que se encuentra en el Mensaje del Papa: “Junto a este grande signo de fe que se transforma en caridad, recuerdo y agradezco a las Obras Misionales Pontificias, instrumentos de cooperación en la misión universal de la Iglesia en el mundo. Por medio de sus acciones, el anuncio del Evangelio se convierte en una intervención para ayudar al prójimo, la justicia para los más pobres, la posibilidad de instrucción en los pueblos más perdidos, en asistencia médica en lugares remotos, la emancipación de la miseria, la rehabilitación de aquellos que son marginados, el apoyo al desarrollo de los pueblos, la superación de las divisiones étnicas, el respeto de la vida en cada una de sus etapas”.
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Hacer una catequesis con el Mensaje Mundial de las Misiones. Divulgar la vida de la Venerable Paulina Jaricot, esta joven laica misionera, con quien se inician las Obras Misionales Pontificias, trabajando algunas de sus expresiones como: “Yo amé a Jesucristo más que a nada en la tierra y, por su amor, yo amé más que a mí misma a todos aquellos que estaban en el trabajo o en el dolor”
SEMANA DE SACRIFICIO
Podemos ser misioneros desde el dolor
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“Ustedes no deben sentirse al margen de la vida de la Iglesia, elementos pasivos de un mundo en excesivo movimiento, sino sujetos activos de un período humano y espiritualmente fecundo de la existencia humana. Tienen una misión que cumplir, una ayuda que dar” (Beato Juan Pablo II, Christifideles Laici 48) Propuesta de actividades: Proponer a las comunidades de la parroquia, el ofrecimiento de algún sacrificio unido a la oración por la misión universal de toda la Iglesia y por los misioneros. Dar a conocer a través de la Pastoral de la Salud, Pastoral del alivio, Ministros extraordinarios de la comunión, Diáconos Permanentes, Pastoral Misionera, entre otros; a la Unión de Enfermos y Ancianos Misioneros (UEAM), a los enfermos y ancianos de la comunidad, para que también ellos puedan ser misioneros con el ofrecimiento de su enfermedad y limitaciones. Visitar los hogares de ancianos de la parroquia y darles a conocer la presencia misionera de la Iglesia en los distintos continentes. Invitarlos a sumarse a la misión como misioneros, a través de la oración.
SEMANA DE LA VOCACION MISIONERA
Sintámonos involucrados en la misión ad gentes “El anuncio del Evangelio requiere anunciadores, hombres y mujeres consagrados de por vida a la obra del Evangelio, dispuestos a ir por todo el mundo a llevar la salvación” (RM 79). Propuesta de actividades: Reflexionar con los fieles y grupos que integran la parroquia, acerca de la segunda parte del Mensaje Mundial de las Misiones: “la prioridad es evangelizar” Proponer a todas las comunidades de la parroquia la realización de una misión en los lugares más alejados del Centro Parroquial. Invitar a la comunidad a realizar una vigilia de oración por el aumento de vocaciones misioneras en la propia comunidad y comprometidas con la misión de la Iglesia en el mundo entero. Si es posible, presentar a la comunidad algún testimonio misionero concreto. Equipo Colaborador OMP
Ser misioneros de Manzana
Caminantes: Los misioneros de manzana son los que van de casa en casa, los que cultivan con la gente de la parroquia uno de los aspectos más importantes de la Iglesia que es la ser familia, pueblo de Dios. En esta familia que es la Iglesia, el niño, el joven, el anciano, el enfermo, todos, tienen su lugar y su misión. Los misioneros de manzana son los que hacen camino con las alegrías y sufrimientos de las familias del barrio y le llevan el Pan de la Palabra que es Jesús mismo.
Voceros: El vocero del que estamos hablando anuncia a Jesús con la palabra y la vida y queda bien claro para todos, que no se anuncia a sí mismo. Transmite con su vida de fe y alegría que el Señor Jesús es la Vida en abundancia para todos.
Misioneros: Cada misionero de manzana visita las familias y lugares de su parroquia, no en nombre propio, sino enviado por su comunidad parroquial. En permanente diálogo con su párroco, lleva adelante una misión que no es “su misión”, sino la de su comunidad parroquial, que “sale” a través suyo, al encuentro de sus hijos.
Llegar al corazón de la gente Paulina Jaricot, era una joven francesa que creyó, como los misioneros de manzana, que es posible llegar al corazón de la gente. Creyó que no era una utopía o algo pasado de moda ser misioneros. También ella, comenzó su obra siendo misionera de manzana. En 1819 impulsada por el amor a Jesús, a quien amaba tanto que decía que quería “ser una Eucaristía viviente”, decide armar un plan de ayuda a las misiones. Con este fin fundó la Obra de la Propagación de la Fe, sobre las bases firmes de la oración, el servicio y la ayuda económica. Estrechamente unida a la Iglesia y a sus pastores, se animó a salir de sí misma, de sus propias cosas y convocar primero a quienes eran de su pueblo, de su barrio, a quienes estaban más cerca, se
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animó a ser misionera de manzana. Para Paulina, ser misionera era serlo primero en la propia comunidad, pero con un corazón universal, sin olvidar las necesidades de anuncio del Evangelio en el mundo entero.
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Hoy cuando todos queremos que nuestras parroquias sean parroquias misioneras, tenemos que seguir ahondando en estos elementos que vemos en la vida de Paulina Jaricot y que también deben ser muy importantes en la vida de un misionero de manzana: la oración, el servicio, la ayuda económica a las misiones y un corazón universal.
EL AMOR COnCRETO DE TERESA DE CALCUTA Este año, las Obras Misionales Pontificias, han elegido como figura iluminadora para el Mes de las Misiones y la Colecta Mundial de las Misiones, a la misionera Teresa de Calcuta. Un misionero de manzana se encuentra muchas veces visitando a las familias de su parroquia, con experiencias de desamparo, pobreza extrema, soledad, dolor, como las que se convirtieron en oportunidades de servicio concreto para Teresa de Calcuta. A estos desafíos, les dedicó lo mejor de sí, los llevo a la oración e hizo de ellos su gran oportunidad de amar a Jesús concretamente.
Reflexionemos: 1. Preguntate: ¿cómo vivís los desafíos que se te presentan al recorrer cada una de las familias? ¿Son oportunidades de amar más concretamente a Jesús ? 2. Lee el texto de Lc. 15, 1-7 y detenete en los gestos y expresiones del Pastor con la oveja perdida. Preguntate con sencillez y confianza si tus gestos se parecen a los del Buen Pastor. Equipo Colaborador OMP
CATEQUESIS
«Jesús nos llama a vivir en comunión» Ambientación: Mantel, vela encendida, Biblia, imagen de Santa Teresita y San Francisco Javier, flores. Cartel: "JESÚS NOS LLAMA AVIVIR EN COMUNIÓN ". Carteles con el nombre de cada continente. Servirán para los 4 encuentros. Láminas de niños ayudando, rezando, compartiendo. Un árbol con 5 ramas. En el tronco: Jesús. En cada rama un continente y los nombres de los niños/adolescentes. OBJETIVOS: Que reconozcan la importancia de
la cooperación misionera. MOTIVACIÓN: Saludo Misionero. Leemos el lema. Canción. ORACIÓN: A 5 niños le colocamos el nombre de un continente y le daremos una oración: África: Señor, Africa sufre hambre, guerra, pobreza y enfermedades. Por eso te decimos... América: Señor, AmÉrica sufre el abandono, la explotación y la violencia, Por eso te decimos... Europa: Europa dejó enfriar su amor hacia ti, le falta compromiso, y comunión. Por eso te decimos... Asia: Señor, Asia sufre la pobreza extrema y la explotación del trabajo en niños y mujeres. Por eso te decimos... Oceanía: Señor, Oceanía sufre la división y la marginación para con los aborígenes. Por eso te decimos... REFLEXIÓN: (Se pondrá el árbol a la vista de los niños y adolescentes). Estamos todos unidos a Jesús, todos somos hermanos, sin embargo hay algunos que no conocen a Jesús y otros que lo conocen pero no son capaces de ayudar a sus hermanos. Nosotros, podemos ayudar a otros niños y adolescentes a través de la Cooperación misionera ACTIVIDAD CENTRAL: "Seamos anunciadores de la verdad" Dividimos al grupo en 5 continentes, cada grupo preparará un discurso pequeño sobre "cómo podemos ayudar a otros niños a través de nuestra cooperación misionera". Leemos las propuestas .
COMPROMISOS: Personal: Dejaré de comprar algo que me gusta y lo pondré en la alcancía de la IAM. Comunitario: Comentaré lo que he aprendido sobre la cooperación misionera. Más allá de las fronteras: Rezaré por las necesidades de los niños del mundo entero. ORACION: Rezamos el Padre Nuestro. Nos despedimos con el Saludo misionero. Para el próximo encuentro traer velas. El animador preparará los sobres del DOMUND para entregar a los niños.
ESPIRITUALIDAD MISIONERA
«Jesús me llama a misionar con mi vida» OBJETIVOS:
"Que se sientan importantes para la Cooperación Misionera”. Ambientación 1. Cartelera: "JESÚS ME LLAMA A MISIONAR CON MI VIDA” 2. EI árbol. 3. Dos velas grandes: una, con la imagen de un niño con los brazos abiertos la otra, con la imagen de un niño con los brazos cruzados. 4. Manitos, piecitos y corazones pequeños. -en los corazoncitos escribir: "quiero amar y ayudar a todos" -en las manitos: "quiero amar y servir a todos", -en los piecitos:" quiero amar y llegar a todos .
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MOTIVACIÓN: saludo misionero. Mostramos el árbol, revisamos los compromisos. ORACIÓN: (ver en catequésis misionera) Iluminación: (Mt. 5,13-16) REFLEXIÓN: El animador enciende la vela del niño con los brazos abiertos y coloca al lado la otra vela (apagada). Juntos reflexionaremos sobre qué actitudes presenta cada niño. Se llega a la conclusión de que el niño con la vela apagada es un niño cerrado, incapaz de dar. Luego, se enciende la vela apagada y se demostrará al niño que un misionero de verdad debe ofrecer su vida, su trabajo, su dinero y su tiempo. ACTIVIDAD CENTRAL: Jesús nos pide compartir para ser misionero en comunidad. El animador entregará a sus niños las manos, los pies y los corazones, los firman y se encienden las velas que trajeron, mientras se canta. Finalizamos realizamos el saludo misionero . COMPROMISOS: Personal: prepararé tarjetitas para la Misa. Comunitario: invitaré para la misa del DOMUND. Más allá de las fronteras: me ocuparé de hacer colecta por las misiones ORACIÓN: Espontánea
CON JESÚS" (cartelera que se utilizará luego para colocarla en el altar). 2 El animador preparará , el guión , las lecturas y el salmo, las intenciones oración universal que lo leerán cinco niños misioneros o la cantidad de peticiones que haya. 3 Se preparará el cancionero y un coro. 4 Se elegirá a los niños que puedan realizar una representación. MOTIVACIÓN: saludo misionero Leemos juntos el cartel y luego dialogamos sobre los compromisos del encuentro pasado. ORACIÓN: (ver en catequésis misionera) Iluminación: (Jn. 13,34-35) ACTIVIDAD CENTRAL: preparación de la Misa. COMPROMISOS: Personal: prepararé algo para compartir con mis amigos en la vida de Grupo. Comunitario: Invitaré a un amigo a la IAM Más allá de las fronteras: rezaré por los misioneros del mundo entero.. ORACIÓN FINAL: Espontánea
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PROYECCIÓN MISIONERA
«Cuando compartimos, aprendemos a darnos, a dar a Jesús» OBJETIVOS:
"Que celebren la Cooperación Misionera en comunidad”. Ambientación: 1 cartelera: dirá "CUANDO COMPARTIMOS, APRENDEMOS A DARNOS, A DAR A JESÚS Y A DARSE
VIDA DE GRUPO
«Felicidades misioneritos por cooperar con la misión» OBJETIVOS: Que experimenten la alegría de ayudar a las misiones. Ambientacion: 1 Mesas, sillas, globos, guirnaldas y el altar. 2 Cartelera que dirá: "¡FELICIDADES POR COOPERAR CON LA MISION!! MOTIVACIÓN: saludo misionero Revisamos los compromisos anteriores. ORACIÓN: (ver en catequésis misionera)Luego de la oración llevaremos a los niños hasta el lugar de reunión. Iluminación: Mt. 5,1-11. ACTIVIDAD: compartimos lo que trajimos (alimentos, bailecitos, poesías, cuentos, chistes, títeres, juegos, etc.). COMPROMISOS: Personal: seré un misionero alegre. Comunitario: ayudaré en casa, con alegría. Más allá de las fronteras: Iré a misa la ofreceré por los niños del mundo entero.. ORACIÓN FINAL: Espontánea Hna. Marcela Davies Secretaria Nacional de la IAM
«Compartiendo la fe, creceremos juntos» Nosotros los niños Amamos al estilo de Jesús, sin fronteras. Este dibujo dice cómo es esto de amar sin fronteras.
Nos preguntamos en el encuentro de catequesis 1. ¿Qué vemos en el dibujo? 2. ¿Cuáles son nuestros gestos de amor y servicio en la vida cotidiana, en casa, con los amigos? 3. ¿Qué gestos de amor y servicio podemos tener con los niños de otros países del mundo?
Te cuento un plan Paulina Jaricot, era una joven amiga de Jesús y de los niños. Tenía 22 años cuando inventó un plan para ayudar a las personas a encontrarse con Jesús.
¿Qué tenía de particular este plan? Incluía a todas las personas del mundo, a niños y adultos, jóvenes y ancianos, enfermos y sanos, a todos. ¿Cómo hizo para ayudar a todos, en distintas partes del mundo? A través de los misioneros que están en distintas partes del mundo.
¿En qué consistía el plan? En un compromiso con la oración y el trabajo por las misiones en los 5 continentes. ¿Concretamente cómo lo hizo? Organizó grupos de 10 personas con un coordinador. ¿Qué tenían que hacer las personas? 1. Rezar cada día 1 Padre Nuestro, 1 Ave María y 1 Gloria por los misioneros y las misiones en el mundo. 2. Todos los integrantes del grupo, debían aportar cada semana para las misiones, un mínimo de ayuda económica (ella pedía apenas un céntimo). Funcionaba como una alcancía. 3. Cada miembro del grupo tenía que comprometer a otra persona para formar otros grupos de 10, y seguir llevando adelante este Plan de Solidaridad Universal.
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Es
un plan sEncillo y crEativo .
nosotros En EstE mEs dE
p odEmos octubrE , El mEs
Al estilo de Jesús
dE las misionEs .
Una alcancía gigante
sentir «Tuvo compasión de ellos y sanó a todos los que estaban enfermos» (Mt.14-21)
ve r «Les aseguro que esta viuda pobre dio más que todos» (Lc. 12, 41-44)
oír «Hagan lo que Él les diga» (Jn. 2, 1-12)
h ace r Cuando ustedes oren digan «Padre Nuestro» (Lc. 11, 1-13)
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hacErlo también
1.
Preguntate si lo que sentís, ves, oís y haces, se parece a lo que Jesús siente, ve, oye y hace.
2.
Fijate en qué cosas tendrías que mejorar para parecerte cada vez más a Jesús.
La Madre Teresa Vivimos en una sociedad en la que parece que está bien pensar solamente en nosotros y nuestras cosas. Podemos rezar y reflexionar un poquito sobre la oración de la Jornada de las Misiones.
Todos los años, las Obras Misionales Pontificias (OMP) promueven una Colecta Mundial para las Misiones. En nuestro país se realiza el 2° domingo de octubre, es decir que este año es el fin de semana del 13 y 14 de octubre en todas las capillas, parroquias y escuelas de nuestro país. Con todo el dinero que se recauda se forma un «Fondo de Solidaridad Internacional», ya que esta Colecta se realiza en todo el mundo. Con este Fondo, se ayuda a mucha gente, niños, jóvenes y adultos en los lugares más pobres del mundo. El primer objetivo de este dinero, es llegar a todos para anunciarles a Jesús, con el testimonio de vida, la palabra y las obras y con todo lo que podemos hacer para ayudarlos. En muchos de estos lugares de menos recursos se construyen escuelas, capillas, salas de primeros auxilios, todo lo que sirva para hacerles sentir que Dios los ama siempre y que no están solos, que también estamos nosotros que somos sus hermanos. Para poder ayudar, es importante que la colecta que se hace con este fin, sea entregada en su totalidad en la Sede Nacional de las Obras Misionales Pontificias. También porque es muy importante respetar la intención de ayudar a las misiones del mundo entero, que tiene el niño, joven o adulto que ha colabora haciendo su aporte económico en la Colecta Mundial de las Misiones.
¡Avisales a todos! ¡En tu casa, el barrio y la escuela; que todos puedan participar en la Colecta Mundial de las Misiones! Contales qué es y para que se utiliza el dinero.
Equipo Colaborador OMP
«Estar dispuestos para la misión» Ese «aire fresco, lleno de vida» Hablamos de los Grupos Misioneros y de los jóvenes de nuestras comunidades. Ellos son un grupo de personas que, superando la estrechez de sus propios límites sociales, culturales, religiosos y geográficos, se lanzan más allá de sus propias fronteras, para emprender una tarea evangelizadora en situaciones que requieren un primer anuncio o un anuncio nuevo del Evangelio y una renovada y vital presencia de la Iglesia. Tienen capacidad para oponerse a las falsas ilusiones de felicidad y a los paraísos engañosos de la droga, del placer, del alcohol y todas las formas de violencia. En su búsqueda de sentido de la vida, son capaces y sensibles para descubrir el llamado particular que el Señor Jesús les hace (Cf. DA 443)
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Una joven que inventó un Plan de Globalización de la Solidaridad
Paulina Jaricot, tenía alrededor de 22 años cuando fundó la Obra de la Propagación de la Fe y con ella un Plan de globalización de la solidaridad.
Era un plan que nacía de una mirada sobre la humanidad, muy semejante a la de Jesús, de una extraordinaria sensibilidad como la de los jóvenes. Comenzó invitando a otros jóvenes y a distintas personas que conocía. El plan consistía en comprometerse con la oración y el trabajo por las misiones de todo el mundo. Organizó grupos de 10 miembros con un coordinador. El compromiso suponía hechos concretos, así como les gusta a los grupos misioneros y a los jóvenes: 1. Rezar cada día 1 Padre Nuestro, 1 Ave María y 1 Gloria por los misioneros y las misiones en todo el mundo. 2. Que cada semana cada uno apoyara a las misiones con un mínimo de ayuda económica (ella pedía apenas un céntimo). Funcionaba como una alcancía. 3. Cada uno debía comprometer a otra persona para formar otros grupos de 10 personas que pudieran vivir este Plan de Globalización de la Solidaridad.
¡Ahora nos toca a nosotros llevarlo adelante! ¿Se animan? “Yo amé a Jesucristo más que a nada en la tierra y, por su amor, yo amé más que a mí misma a todos aquellos que estaban en el trabajo o en el dolor” Paulina Jaricot
Acompañados por la Madre teresa de Calcuta
Reflexionemos sobre algunas de nuestras actitudes y acciones misioneras en la propia comunidad
AyUDAR a la propia comunidad de origen para que abra el corazón a aquellos que, viviendo en el mismo territorio de la capilla, parroquia, diócesis, necesitan escuchar el anuncio del Evangelio de la Vida.
N
A IMAR a nuestra propia comuni-
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dad para que cada vez más, esté informada de los problemas misioneros del país y del mundo. Promover la difusión de publicaciones que reflejen la realidad misionera tanto de Argentina como de otros lugares del mundo.
I
INCENt VAR a la propia comuni-
dad para que conozca y acompañe a los misioneros “Ad Gentes”, ese grupo silencioso de hombres y mujeres que dan su vida en otros lugares del mundo.
MAR y colaborar en la
ENtUSIAS
organización de actividades concretas que respondan a las necesidades de los más pobres en la comunidad, signo necesario y alentador.
Una frase para pensar
“El fruto del silencio es la oración. El fruto de la oración es la fe. El fruto de la fe es el amor. El fruto del amor es el servicio. El fruto del servicio es la paz”. Una oración para rezar Señor, cuando tenga hambre, dame alguien que necesite comida. Cuando tenga sed, dame alguien que precise agua. Cuando sienta frío, dame alguien que necesite calor. Cuando sufra, dame alguien que necesite consuelo. Cuando mi cruz parezca pesada, déjame compartir la cruz del otro. Cuando me vea pobre, pon a mi lado algún necesitado. Cuando no tenga tiempo, dame alguien que precise de mis minutos. Cuando sufra humillación, dame ocasión para elogiar a alguien. Cuando esté desanimado, dame alguien para darle nuevos ánimos. Cuando quiera que los otros me comprendan, dame alguien que necesite de mi comprensión. Cuando sienta necesidad de que cuiden de mí, dame alguien a quien pueda atender. Cuando piense en mí mismo, vuelve mi atención hacia otra persona. Haznos dignos, Señor, de servir a nuestros hermanos. Dales, a través de nuestras manos, no solo el pan de cada día, también nuestro amor misericordioso, imagen del tuyo.
A
IMPULS R y coordinar reuniones
de estudio sobre temas misioneros o relacionados con la misión evangelizadora de la Iglesia. RESPALDA
R todas las iniciativas
en la tarea evangelizadora que surjan en la propia comunidad.
Equipo Colaborador OMP
Madre Teresa de Calcuta
AMBIENtACIÓN Colocar en un lugar visible un cartel con el lema del año 2012:
“Compartiendo la fe, creceremos juntos” Debajo de este letrero colocar una cartelera misionera teniendo como figura central a la Beata Madre teresa de Calcuta, en donde se podrán colocar noticias de la labor de la Iglesia que nos ayuden a crecer en nuestra fe y el espíritu misionero de querer “ser” y “hacer” discípulos para Jesús”.
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ILUMINACIÓN APrENDErMoS JUNtoS Este año, la frase que nos ayudará a recordar, rezar y colaborar con las misiones es: “Com-
partiendo la fe, creceremos juntos” pensando en la Beata Madre teresa de Calcuta, que siempre servía en medio de los pobres, a los más pobres de la sociedad. también este año, el Papa Benedicto XVI ha declarado “el Año de la FE”, un año para que tratemos de profundizar y volver a recorrer la historia de nuestra fe. Que el Espíritu Santo que es el “Alma de la Iglesia”, haga más fuerte nuestra fe, nos haga signo esperanza, para que llevemos la alegría de Jesús a todos los pueblos. Que María Madre y Maestra de la Misión, nos ayude a vivir este compromiso de fe.
Mc.10, 17-27: “Jesús fijando en ellos su mirada dijo: para los hombres es imposible, pero no para Dios, porque para él todo es posible“
Mc 10, 46-52: “Vete, tu fe te ha salvado” Santiago 2,14-21: “La fe sin obras, muere sola”
Lc 1,37.38. 45: En la fe, María acogió el anuncio y la promesa que le traía el ángel Gabriel, creyendo que “nada es imposible para Dios” y dando su sentimiento: He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra” Isabel la saludó: “Dichosa la que ha creído que se cumplirían las cosas que le fueron dichas de parte del Señor”.
Lc 1,45: Por esta fe todas las generaciones la proclamarán bienaventurada.
Hech 1-2: La Iglesia nace en la Pascua según el designio el Padre Dios, por la Acción del Espíritu Santo y como fruto del sacrificio del Hijo Jesús. Nace desde la fe en Cristo resucitado La Iglesia nació del discipulado convocado por el Maestro, fueron discípulos que iban con El, le amaban y aprendían en la convivencia diaria. Los discípulos aprendieron la misión en la vida, así se forjaron apóstoles enviados por Jesús, impulsaos por el Espíritu Santo.
Siendo dóciles al Espíritu Santo como lo fue María, la Servidora del Señor. Cuidando el don de nuestra vida, de la vida de los demás, de la vida de la naturaleza. Comprometiéndonos con la defensa de la vida desde el nacimiento de la persona hasta la muerte natural. Usando bien los MCS (internet, facebook, el celular, la tele) para que sean un medio que nos acerque a Dios y a los hermanos.
Jn 20, 21-22 Jesús les volvió a decir: “La paz esté con ustedes. Como el Padre me envió a mí, así los envío yo también “ Dicho esto sopló sobre ellos y les dijo: “reciban el Espíritu Santo;…”
Para reflexionar teniendo en cuenta la iluminación: 48
Volvé a leer los textos bíblicos de la iluminación, elegí uno y pensá que quiere decir para vos ese texto y qué te invita a hacer por los demás. Escribí que actitud debemos adoptar a) Cuando nuestra fe se debilita b) Cuando nuestra fe crece Escribí un mensaje que ayude a crecer en la fe, y compartilo con tu compañero, amigo. EStE
realizar una lista de actitudes que tiene que tener un niño, un adolescente para cuidar la vida. (por ejemplo rezar por los niños no nacidos, invitar a la misa a las mamás embarazadas, juntar alimentos, ropa etc. para los niños de escasos recursos, visitarlos en los hospitales, guarderías, escuelas tanto urbanas o rurales, etc) Elegir mensajes bíblicos, frases de Madre teresa de Calcuta u otros santos, escribirlos en una tarjeta para repartirlos entre las familias del colegio, en escuelas cercanas, plazas, u otras instituciones. Hacer afiches con las cosas, actitudes, pensamientos que nos acerquen a Dios, y luego pegarlos en distintas partes de la escuela.
Año EL LEMA NoS AyUDA A rECorDAr,
rEzAr y CoMPArtIr NUEStrA FE.
NoSotroS PoDEMoS CrECEr EN LA FE
y CoM-
PArtIrLA rEzANDo MáS, tENIENDo ENCUENtroS PErSoNALES CoN JESúS, EL
MISIoNEro PADrE, IMPULSADo Por EL ESPírItU SANto, y A trAVéS DE DIFErENtES ACtIVIDADES, ACtItUDES: Imitando a los Santos y personas que dejaron, todo al igual que Madre teresa de Calcuta, por amor a Dios. DEL
Actividades
Conclusión
La fe viva consiste en encontrar a Jesucristo resucitado que me conoce, que me ama, que me llama y que me invita a seguirlo
Pidamos que el Espíritu Santo sea derramado en nuestros corazones y en toda nuestra sociedad. Hoy más que nunca necesitamos que el Espíritu de Dios renueve nuestros corazones y surja en nosotros una conversión que nos permita tener gusto por las cosas de Dios, y ser instrumentos de paz y amor con nuestro prójimo.
Hna. Facunda Lamas SSpS, Directora de OMP de la Diócesis de Jujuy - Sra. Dolores Lenna Coghlan, Directora de OMP de la Diócesis de Río Gallegos.
ambientación Colocamos en un lugar visible un cartel con el lema del Domingo Mundial de las Misiones (DOMUND) de este año “Compartiendo la fe, creceremos juntos”. Junto al letrero podemos colocar una cartelera misionera con las figuras centrales de Jesús y la Beata Madre Teresa de Calcuta y noticias de la labor de la Iglesia en los cinco continentes, que expresen el lema del DOMUND elegido para este año.
aprendemos juntos Este año el lema que nos ayudará a recordar, rezar y colaborar con las misiones es: “COMPartIeNDO La fe, CreCereMOs JuNtOs” teniendo como figura central a la Beata Madre Teresa de Calcuta, testimonio de servicio misionero en medio de los pobres, más pobres de la sociedad. Una persona que con su vida, nos evidencia que la fe en Jesús es para compartirla con todos y que de este modo crecemos como discípulos misioneros de Jesús. También tendremos en cuenta en este mes de las misiones, que el Papa Benedicto XVI ha declarado este año y parte del año 2013 el “Año de la FE”, con motivo del 50° aniversario del Concilio Vaticano II y los 10 años del nuevo Catecismo de la Iglesia Católica. El tema central de la celebración del “Año de la Fe” es: La “Nueva Evangelización”. A través de este acontecimiento el Papa nos dice que estamos “llamados a hacer resplandecer la Palabra de verdad”, con el deseo de que “el Evangelio llegue hasta los últimos confines de la tierra”. Sin olvidar que el mandato de predicar el Evangelio “debe comprometer toda la actividad de la Iglesia particular, todos sus sectores, es decir, todo su ser y todo su obrar”. El Papa Benedicto XVI considera que uno de los problemas para la evangelización, es la crisis de fe, no sólo del mundo occidental, sino de gran parte de la humanidad, que tiene también hambre y sed de Dios y debe ser invitada y conducida
al pan de vida y al agua viva.. (Ver Mensaje del Papa para la Jornada Misionera Mundial de las Misiones 2012) El mes de las Misiones nos invita a salir de nuestras cosas, a mirar un poco más lejos, para compartir nuestra vida de fe en Jesús como escuela. Será con nuestros vecinos, en nuestro barrio, y más allá de las fronteras. Lo podemos hacer con la oración, con algún servicio y participando de la Colecta Mundial de las Misiones, como comunidad educativa. Algunas frases sobre “la vida” de Madre Teresa, pueden ayudarnos a reflexionar sobre el inmenso valor de la propia vida y la de los demás. Puede ayudarnos a ver con mayor claridad que la vida es un don para compartir con los demás en la entrega y el servicio. La vida es una canción, cántala La vida es un juego, juégalo. La vida es un desafío, enfréntalo La vida es un sacrificio, ofréndalo La vida es una oportunidad, aprovéchala. La vida es bella, admírala. La vida es beatitud, saboréala. La vida es un sueño, hazlo realidad. La vida es un reto, afróntalo. La vida es preciosa, cuídala. La vida es riqueza, consérvala. La vida es un misterio, descúbrelo. La vida es promesa, cúmplela. La vida es amor, gózalo. La vida es tristeza, supérala. La vida es un himno, cántalo. La vida es una tragedia, domínala. La vida es aventura, vívela. La vida es felicidad, merécela. La vida es vida, defiéndela.
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Iluminación
Nuestro compromiso con la misión
Llamamos a la Palabra de Dios “El Pan de la Palabra” ya que alimenta nuestra vida de fe. Nos enseña cómo ser discípulos misioneros en la vida cotidiana. Algunos de los textos que podemos leer y reflexionar son los que siguen: Mc.10, 17-27 “Jesús fijando en ellos su mirada dijo: para los hombres es imposible, pero no para Dios, porque para Él todo es posible” Mc 10, 46-52 “Vete, tu fe te ha salvado” santiago 2,14-21 “La fe sin obras, muere sola…” Lc 1,37.38. 45 En la fe, María acogió el anuncio y la promesa que le traía el ángel Gabriel hech 1-2 La Iglesia nace en la Pascua según el designio el Padre Dios, por la Acción del Espíritu Santo y como fruto del sacrificio del Hijo Jesús.. Jn 20, 21-22… “Dicho esto sopló sobre ellos y les dijo: Reciban el Espíritu Santo;…”
El lema del Domingo Mundial de las Misiones de este año “Compartiendo la fe, creceremos juntos” nos invita a compartir la fe en la sencillez de cada día que vivimos y a través de gestos concretos. Se trata de crecer compartiendo nuestra fe a través de diferentes actividades, actitudes y del encuentro personal con Jesús, el Misionero del Padre. Puede resultar de gran ayuda, considerar algunos de los ítems que siguen:
La Iglesia también nos enseña. Podemos tomar algunos de los textos que nos propone para profundizar en nuestra vida de discípulos misioneros, llamados permanentemente a compartir la fe: Catecismo de la Iglesia Católica (CIC nº 150 al 184 ) En el documento de aparecida los obispos, junto con el Papa Benedicto XVI, expresan que el patrimonio más valioso de la cultura de nuestros pueblos es: “la fe en Dios Amor” En diálogo con todos los cristianos y al servicio de todos los hombres, asumen “la gran tarea de custodiar y alimentar la fe del Pueblo de Dios, y recordar también a los fieles de este continente que, en virtud de su Bautismo, están llamados a ser discípulos y misioneros de Jesucristo” (Benedicto XVI, Discurso Inaugural).
Otros quizás piensen que estamos solos en este desafío, pero no es así. Contamos con la fuerza del Espíritu Santo. Podemos recordar cómo lo hizo María, la Servidora del Señor, la llamada dichosa por haber creído. Mirándola, podemos animarnos también nosotros a cuidar el don de la vida en todas sus dimensiones y matices, y así nuestra vida de fe y la de los demás.
Quizás alguno esté pensando que es un ideal demasiado difícil “compartir la fe”. Sin embargo si nos detenemos a ver la vida de los santos, como por ejemplo la de Madre Teresa de Calcuta, caeremos en la cuenta de que es posible vivir la fe en Jesús y compartirla en la vida cotidiana a través de distintos gestos. Veremos que cada uno de nuestros días están llenos de miles de oportunidades para poder hacerlo.
Pero vivir la fe en Jesús,también significa comprometerse a defender la vida humana desde su concepción hasta la muerte natural. No son dos cosas separadas, la vida por un lado y la fe por otro, sino que van juntas, sino es una fe light, centrada no en Jesús, sino en nosotros y a nuestra medida. Algunas veces estamos como adormecidos y pasan por delante de nuestros ojos muchos mensajes, imágenes, textos de los Medios de Comunicación Social y no nos damos cuenta que tenemos que ser responsables y críticos, que hacerlo es parte de nuestra vida de fe.
actividades Les proponemos:
1.Realizar una lista de actitudes que tiene que tener un adolescente, un joven para cuidar la vida. (Por ejemplo rezar por los niños no nacidos, por los niños, adolescentes y jóvenes que viven la fractura de sus padres y que no tienen contención en la sociedad, por los que no le dan sentido a sus vidas porque no encuentran testimonio de fe, esperanza y amor en los adultos. juntar alimentos, ropa etc. para donar en escuelas de escasos recursos, etc.)
2.Ser mensajeros de buenas noticias. Para esto pueden elegir mensajes bíblicos, frases de Madre Teresa de Calcuta u otros santos, escribirlos en una tarjeta y repartirlos entre las familias del colegio, en escuelas cercanas, plazas, u otras instituciones.
3.Armar una exposición misionera con el curso. Confeccionar los afiches teniendo en cuenta diferentes situaciones de la vida en los cinco continentes que nos lleven a reflexionar sobre actitudes, pensamientos y cosas que debe vivir un auténtico discípulo misionero de Jesús, un joven que vive y comparte la fe.
Para reflexionar teniendo en cuenta la iluminación: 1.Releer los textos bíblicos de la iluminación, eligiendo uno o dos. Reflexionar acerca del significado para la propia vida y el compromiso que supone. 2.Elegir un texto del Documento de Aparecida (DA) o del Catecismo de la Iglesia Católica (CIC) citados en la iluminación para compartir con dos o tres compañeros. Luego entre todos y a partir de lo reflexionado en el grupo, escribir un mensaje que pueda ser útil para el crecimiento en la fe de otro adolescente o joven. Se puede entregar a algunos jóvenes personalmente o a través de un email, Facebook, etc. 3.Compartir el salmo misionero que te proponemos a continuación, con tu familia, amigos, etc.
saLMO del MIsIONerO Quiero ser luz en la noche de cada hombre. Quiero ser palabra que despierte al hombre dormido. Quiero ser agua fresca que dé vida a la planta seca. Quiero ser pan partido, roto, dado en abundancia. Quiero ser copa que desborde lo íntimo de mi ser. Quiero ser racimo de uvas exprimido en el lagar. Que tu Espíritu, Señor, sea derramado sobre mí. Que tu Espíritu, Señor, sea la fuerza de mi debilidad. Que tu Espíritu, señor, me conduzca al hombre oprimido. Que con tu Espíritu libere al hombre de los cepos. Que con tu Espíritu arranque de los labios las mordazas. Que con tu Espíritu quite las vendas de los ojos. Que con tu Espíritu rompa las cadenas de los pies. Que con tu Espíritu deje al hombre sin fronteras. Señor del alba, quiero hacer camino en tu camino. Señor del alba, quiero hacer verdad en tu verdad. Señor del alba, quiero hacer vida en tu vida. Señor del alba, aquí estoy a la voz de tu llamada.
Conclusión La fe viva consiste en encontrar a Jesucristo resucitado que me conoce, que me ama, que me llama y que me invita a seguirlo. Pidamos que el Espíritu Santo sea derramado en nuestros corazones y en toda nuestra sociedad. Hoy más que nunca necesitamos que el Espíritu de Dios renueve nuestros corazones y surja en nosotros una conversión que nos permita tener gusto por las cosas de Dios, y ser discípulos misioneros en la escuela y en todas partes, compartir la fe en Jesús en la sencillez de la vida cotidiana, en el encuentro con todos, con los que están cerca y los que están lejos. Hna. Facunda Lamas SSpS, Directora de OMP de la Diócesis de Jujuy - Dolores Lenna Coghlan, Directora de OMP de la Diócesis de Río Gallegos.
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No hay nada más misionero que el amor con sus realidades particulares. Ahora me estoy preparando para visitar la zona de la costa después de la asamblea regional en la cual me pidieron que de dos charlas: una sobre “Violencia de Género“ y la otra sobre “Plan Estratégico”. Tengo muchas esperanzas de que las diócesis poco a poco vayan adquiriendo un color misionero, pero también siento mis limitaciones, si bien soy relativamente joven, el estar constantemente viajando desgasta muchísimo, las reuniones me hacen sentir mas vieja y preparar temas en ingles no es algo simple, pero confio en la Gracia Inmensa de Dios y su amor.
“…Andando los caminos de la vida…” me en-
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cuentro viviendo la novedad de las cosas sencillas que encuentro en este pais. Desde mi experiencia quiero compartirles a grandes pinceladas experiencias en esta tierra. Papua Nueva Guinea es un país muy interesante, es pequeño pero muy diverso, existen mas de 820 dialectos, y muchísimas etnias, el idioma oficial es Pidgi y el Ingles, este ultimo solamente lo utilizan los religiosos y la gente que tuvo y tiene posibilidad de asistir a la Universidad (que son muy pocos) todos hablan pidgin que es la lengua madre. La gente es muy simple, sencilla muy parecida a la gente con la que se encontró Jesús algo que me fascina de este pueblo es su simplicidad, y el fuerte sentimiento que tienen sobre sus tradiciones. Mas allá de todos los desafíos encontrados en la misión, desde el año pasado cuando los Obispos me pidieron que ayude en “FAMILY LIFE”, (una de las instituciones responsables de llevar Educación-Formación humana y Espiritual a todas las Diócesis de Papua Nueva Guinea (PNG), tratamos de colocar las cosas en orden y me he enfrentado con muchos problemas culturales y sociales con respecto a este ministerio, pero como buena Latinoamericana me dije “voy a continuar haciendo lo que desde la oración y mi conciencia me reclaman hacer”, asi que los zapallos comenzaron a acomodarse mientras la carreta andaba. Este año con mas tranquilidad desde enero he visitado algunas diócesis para ver como implementar el plan pastoral, eso me ha implicado estar mucho tiempo tiempo fuera de la comunidad, pero al mismo tiempo me ha brindado la posibilidad de conocer nuevas culturas y poder tener una información mas clara y objetiva de las diferentes diócesis
El misterio de las culturas en PNG me invitan a leer y leer mas para poder entender sus dinámicas y desde ellos poder armar nuevos proyectos, y hablando de proyectos les comparto que Australia colabora con dinero para las visitas y los talleres sobre violencia y la Conferencia de Obispos colabora con dinero para producir material espiritual. Desde que comencé las visitas a las diócesis y las remotas áreas de PNG descubrí que no existe ninguna institución dando talleres sobre los efectos del aborto o haciendo algún trabajo de prevención. El mismo es una práctica tradicional y cobra demasiadas vidas de bebes por nacer y de las mamás, lo cual esta llevando a una generación huérfana de Madres ya que muchas mueren en la practica del mismo. También estamos trabajando con un proyecto para prevenir el uso de marihuana en la sociedad pobre y joven de PNG aunque en mi mente y mi corazón aún resuena el grito de tantos niños y mujeres que necesitan tener información sobre lo que es el Aborto ya que estoy segura que la falta de conocimiento sumado a la fuerte creeencia cultural esta causando desastres en la sociedad Papuanense. Hna. Gabriela Burgos, Misionera Sierva del Espíritu Santo. Es jujeña y con destino definitivo en Papúa Nueva Guinea.
«Anuncia el Evangelio, hoy el mundo te espera» “…a ustedes que se están preparando para el sacerdocio, les pido que no se midan en esfuerzos en cuanto a la oración, que hagan oración continua, ya que el fruto de la oración es la fe, el fruto de la fe es el amor, y el fruto del amor es el servicio, y el fruto del servicio es la paz…” (Alocución de la Madre teresa a seminaristas mexicanos en 1988) Estamos nuevamente transitando el octubre misionero. Qué alegría saber que la Iglesia sigue profundizando el pedido de Jesús, su fundador y maestro: “vayan por todo el mundo y anuncien el Evangelio a toda la creación” (Mc 16, 15). Claro que esta es la vida de la Iglesia y de todos sus hijos: ¡la misión! Que bueno es poder compartir esta fe, ¡que es un regalo! y así poder crecer juntos. Queremos mirar con especial atención y cariño a la Beata teresa de Calcuta: madre, hermana y misionera de la caridad. Este aporte quiere llegar a ser para todos los seminaristas un espacio de oración, de profundización, de cercanía a Jesús, quien llamó a la Madre teresa y quien nos llamó a cada uno de nosotros a esta gran aventura de seguirlo y anunciarlo. Les proponemos aquí cuatro momentos que nos pueden ayudar a seguir renovando el impulso del amor primero, amor que nos dilata el corazón y nos hace misión permanente:
El fruto de la oración es la fe: llamados a una vida de misión en la intimidad (cfr. Lc. 1, 26-45) La Madre teresa nos ha mostrado con toda su vida que el amor debe ponerse más en las obras que en las palabras. La gente, los medios de comunicación, las altas personalidades se admiraban de su forma de vida y de su servicio. Siempre aparecía la gran pregunta ¿qué la llevaba a hacer lo que hacía, por quién, para quién? Quizá muchas personas no comprendían qué fuerza, qué idea genial movía cada día a la Madre teresa a darse por entera a los hombres, especialmente a los más pobres. Quizá no lo comprendían pero intuían que detrás de esa pequeña mujer había algo grande que la habitaba y que impregnaba toda su vida. De hecho su día se iniciaba con la Misa y la posterior adoración al Santísimo, hábito que su congregación ya lo tiene más que arraigado. Ella decía: “mi secreto es la sencillez misma: rezo… ¿cómo? Mi oración es Jesús mismo, ser uno con él… cuando no tengo nada que decir, él lo dice, cuando no tengo nada
que darle, él me pide hasta eso: pide mi incapacidad… al final lo que quiere es seguir amando a través de mi corazón”. Lo cotidiano de la vida del seminario, es un espacio para que podamos adentrarnos en esta escuela de intimidad: la vida de oración y contemplación. Cada día es una oportunidad para crecer en el amor a Jesús, en dejarnos atrapar por su proyecto, proyecto que va madurando en la apertura de un corazón disponible y generoso. En la intimidad de la oración ocurre la primera evangelización. Somos misionados en la humildad de una oración; es en esa Voz pronunciada en el silencio de nuestro corazón donde ocurre la primera presencia misionera de Jesús. La “otra orilla” que ansía cruzar Jesús es la de nuestra propia persona, está sediento de evangelizar nuestros afectos, fortalecer nuestras voluntades e iluminar nuestra inteligencia. Allí también, en la humildad de una oración esa Voz es capaz de romper nuestra sordera y abrirnos a la misión: “tengo sed de almas”, “yo te envío”, “¿acaso te negaras?”.
El fruto de la fe es el amor: llamados a una vida de misión en comunión (Cfr. Jn 15,8-17) “ámense los unos a los otros como yo los he amado” (Jn. 15, 12). Madre teresa comprendió que estas palabras de Jesús debían de hacerse carne en sus comunidades, entre sus religiosas y sacerdotes. Antes que amar a los pobres, cada Misionera de la Caridad tenía que amar a las hermanas que el Señor puso en su camino. Ella afirmaba: “… ¿Quiénes son los más pobres entre los pobres? Mis hermanos, mis hermanas, mis padres, cada miembro de nuestra familia de misioneros de la Caridad. Ahí es donde comienza este hermoso don del amor, de saciar la sed de Jesús de amor y de almas…”
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Una vida de misión en comunión, de vivir el don del amor es lo que Jesús quizá había pensado al mandar a sus discípulos de dos en dos, él nos llama y nos envía con otros, nunca solos. Para la aventura del Evangelio no necesitamos otra cosa que un compañero, un amigo, un hermano. El será así un instrumento de Dios para la misión. La comunión es el amor en acción, y empieza en lo pequeño de una casa de formación, de un seminario.
El fruto del amor es el servicio: llamados a una vida de misión que es entrega de nosotros mismos. (Cfr. Jn 13,1-17) La Madre teresa vivió en su vida religiosa esta experiencia intensa de Dios que la “llamaba dentro de su propia llamada” , esta Voz que le llegó al corazón durante un viaje en tren, fue decisiva para iniciar esta obra que impactaría, que impregnaría el mundo entero. Ella lo recordaba siempre como el “día de la Inspiración”.
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“…fue una llamada dentro de mi vocación. Era una segunda llamada. Era una vocación incluso para abandonar Loreto, donde estaba muy feliz, para ir a las calles a servir a los más pobres de los pobres. Fue en aquel tren, oí la llamada para dejarlo todo y seguirlo a él a los barrios más miserables… para servirle en los más pobres de los pobres… yo sabía que era Su Voluntad y que tenía que seguirle. No había duda de que iba a ser Su obra…” (Martes 10 de septiembre de 1946 – tren Calcuta – Darjeeling) La misión es una vocación dentro de cada vocación, y ¿qué es lo que Dios nos pide? ¿En qué consiste esto que podríamos llamar segunda llamada? Ante todo estar con él, seguirlo a él… ir con él, llevarlo a él… salir con él desde nuestras seguridades, desde nuestras cotidianas felicidades, cruzar con él hacia esa otra orilla de las necesidades humanas, donde él nos estará esperando para ser servido. Este ir a las calles con Jesús, para encontrarnos con él, significa para nosotros seminaristas en primer lugar, obediencia a Dios, a Su llamada, a su Voluntad, a su obra; la podríamos llamar una “obediencia apostólica”. Ir donde él está esperando que lleguemos. Puede ser el barrio más lejano de nuestra parroquia, aquel enfermo terminal o aquel anciano, esos jóvenes que no se sienten
escuchados o comprendidos, que se sienten solos, que están envueltos en la droga y en el sin sentido; la invitación es absoluta, ir a los más pobres de los pobres… los no amados, los olvidados, los sin esperanza… basta que observemos y empiezan a dibujarse rostros concretos. Jesús esta esperándonos allí, ¿acaso nos negaremos?
El fruto del servicio es la paz: la misión de llevar la Alegría al mundo. (Cfr. Flp 4,4-7) “…estoy más decidida que nunca a repartir alegría donde quiera que vaya –la fragancia de la alegría de Cristo-…” Sabemos que la Madre teresa vivió una profunda oscuridad interior, aquella de la que muchos santos atravesaron, esa impresión de no encontrar a Dios. Parece una paradoja pero nunca lo reveló a sus hermanas ni a sus pobres y se propuso en cambio no negarle nada a Dios y sonreír siempre, a todos. Ella decidió convertirse en “apóstol de la alegría” en medio de un mundo muchas veces triste y vacio. Madre teresa llevó al mundo la sonrisa de Jesús, eso lo experimentaban los miles de enfermos, moribundos, leprosos que recogió de las calles. Pero no solo ellos, también las grandes personalidades, los ricos y poderosos. Ella tenía el efecto de la irradiación cristiana. Hoy la misión nos pide ser servidores de la paz, misioneros y testigos de la Alegría, discípulos de un Dios que ama al mundo y no lo condena. La irradiación cristiana es nuestro servicio para el mundo, el papa Benedicto XVI nos decía “…queridos amigos quisiera alentarlos a ser misioneros de la alegría… Vayan a contar a los demás jóvenes la alegría de haber encontrado aquel tesoro precioso que es Jesús mismo.” (Mensaje para la Jornada Mundial de la Juventud 2012) Hoy como cristianos podemos ofrecer al mundo el testimonio de haber sido alcanzados por el amor de Dios, sorprendidos por el evangelio de Cristo, enamorados de su estilo de vida. Ser para el mundo humildes servidores del Evangelio de la vida, alegres comunicadores de nuestra amistad con Dios. El mundo necesita el milagro de santos cotidianos. Que la beata teresa de la Caridad nos impulse y nos llene de entusiasmo para compartir la fe y crecer juntos.
Federico Aquino, oscar Cáceres, Sergio Castro. Seminaristas de la diócesis de Formosa, Seminario Interdiocesano “La Encarnación” resistencia – Chaco.
Fuentes: KoLoDIEJCHUK, Brian. Madre teresa. Ven sé mi luz. trad. Pablo Cervera, Buenos Aires, Booket, 2011. (Las cartas privadas de la santa de Calcuta) ArrIBAS SáNCHEz, Pedro. Evangelio de una santa. Buenos Aires, Lumen, 2007.
«Vida Contemplativa: don para la Iglesia y el mundo» “En la liturgia se realiza el misterio de la salvación, sobre todo en la Eucaristía, en la que Cristo es comido, se renueva el memorial de su pasión, el alma se llena de gracia y se nos da la prenda de la vida futura…demos culto a Cristo en su misterio Eucarístico, para que de este admirable intercambio, El nos aumente la fe, la esperanza y la caridad.”
tránsito y una pascua, hasta que llegue la Pascua consumada. Entonces comprenderemos que para vivir hace falta morir. y pasar por muchas cosas para poder entrar en el reino de los Cielos. Madre Nuestra, Virgen del rosario: haz que aprendamos de ti cada vez más profundamente, que la vida es siempre un SI y un muchas gracias. Amén.
Con la humildad de sabernos simples granos de trigo, custodiamos la firme certeza de que el amor de Dios, encarnado en Jesucristo, se quedó con nosotros para alimentarnos, para no desfallecer mientras peregrinamos en este destierro. El también nos prepara el banquete nupcial y nuestro lugar en el Cielo. Ahora, es nuestro cielo anticipado. Como es El mismo quien está en la Eucaristía, se da como por necesidad, el encuentro, el diálogo, la oración. Si El se nos entrega, recibirlo significa inclinarnos ante El, adorarlo, invocarlo. He aquí nuestra dignidad, libertad y grandeza: ponernos de rodillas, suplicarle.
“tengan especial aprecio por el rosario, pues esta manera de orar lleva a la contemplación del misterio de la salvación, en el cual la Virgen está íntimamente unida a la obra de su Hijo”
“Las monjas amen intensamente y honren a la Virgen María, modelo sublime de meditación de las palabras de Cristo y de docilidad a la propia misión” Enséñanos María, la gratitud y el gozo de todos los encuentros con tu Hijo y Esposo nuestro. Enséñanos a decir siempre que si, con toda el alma. Entra en la pequeñez de nuestro corazón y pronúncialo tú misma por nosotras. Se la alegría, la fuerza en el camino, la serenidad en todas nuestras tareas. Acompáñanos siempre mientras vamos peregrinando por la vida, hacia la Casa del Padre. Enséñanos a encontrar a Jesús en lo pequeño de cada día. Ayúdanos a descubrir que esta vida es siempre una partida, un desprendimiento y una ofrenda. Siempre un
rosario misionero. 1º: por Europa. oración: Jesús, tu que en el transcurso de más de 2000 años suscitaste en Europa numerosos misioneros. Por medio de María, Madre de las Misiones, te pedimos que en Europa reconozca sus raíces cristianas. renueva la fe y el ardor de la caridad que parece enfriarse, para que todos encuentren en ti el sentido de sus vidas y la civilización del amor resurja con nuevo impulso misionero. 2º: por Asia. oración: Dios omnipotente y misericordioso, te damos gracias por las maravillas que obraste en la Madre teresa
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de Calcuta. te pedimos por su intercesión, que los pueblos asiáticos te conozcan y crezcan en tu amor.3º: por Africa. oración: oh Dios, que a través de innumerables misioneros sigues llamando a los pueblos de este continente a la fe, te pedimos suscites numerosas vocaciones para todos los estados de vida. Así se plenificará tu Cuerpo místico y perderán eficacia los ritos tribales y las sectas animistas. Fortalece a todos los miembros de la iglesia nativos, por medio de María, la reina de áfrica. 4º:por oceanía. oración: Madre Nuestra, que manifiestas tu clemencia y compasión por todos los que buscan tu amparo, escucha la oración que con filial devoción y confianza te dirigimos. te pedimos que hagas cesar la violencia y persecución a los cristianos de este continente. Pacifica tú los corazones y haz que reciban el don de la fe en tu Hijo. 5º por América. oración: Virgen de Guadalupe, Niña mía, hoy como ayer Juan Diego, acudimos a ti a presentarte las rosas de nuestras vidas. Guárdalas en el regazo de tus brazos. Haz que cese el cultivo y tráfico de drogas, que minan la buena fecundidad de nuestras tierras y el trabajo honesto de los habitantes. Llena de contenido la religiosidad popular de nuestra gente que peregrina a tantos santuarios tuyos. Fortalece el conocimiento de tu Hijo para que pierdan fuerza las sectas, para que todos lo en-
cuentren y sean libres en El. oración final: Jesús que en tu amor redentor has deseado la salvación de todo el mundo, te pedimos por intercesión de tu Madre, reina de las Misiones, des plena fecundidad a la obra misionera de tu Esposa la Iglesia. A ti que vives y reinas… “La celda monástica es un cuarto cerrado de oración escondida”, en un mundo donde hay tanto ruido, tanta superficialidad, donde se vive tan aceleradamente, para mantenerse fiel en la fe y vivir cumpliendo la voluntad de Dios, Santa Catalina nos enseña su doctrina siempre actual de la celda interior. Llegar a la profunda calma, para morar dentro de sí. Aquietar las estridencias externas y sobre todo, internas: la imaginación y la memoria. Crear un espacio interior para ahondar en el conocimiento de sí mismo y de Dios. Conociendo a Dios que habita en nosotras, del cual somos templo y esposas, contemplar todo lo creado desde El, con su mirada. y permanecer en su presencia, dejando que sea El en nosotras. Desde esta celda interior, buscar el Corazón de Dios, desde nuestra voluntad humana y frágil, encontrarse con la voluntad de Dios. Sor María Nora, oP Monjas Dominicas Contemplativas Monasterio Santa Catalina de Siena, Córdoba
Con mirada atenta a los Nuevos Escenarios Queridas hermanas y hermanos, Nos acercamos a ustedes con el fin de compartir un momento de reflexión y oración misionera. “La celebración de la Jornada Misionera Mundial de este año adquiere un significado especial. La celebración del 50 aniversario del comienzo del Concilio Vaticano II, la apertura del Año de la Fe y el Sínodo de los Obispos sobre la Nueva Evangelización, contribuyen a reafirmar la voluntad de la Iglesia de comprometerse con más valor y celo en la misión ad gentes, para que el Evangelio llegue hasta los confines de la tierra.”(Benedicto XVI, octubre misionero 2012). Nuestras sociedades descristianizadas pero con intensa sed de espiritualidad, nos impulsan a estar vigilantes a los nuevos escenarios donde debe ser anunciado el Evangelio. La riqueza de los carismas de nuestros institutos, don para la Iglesia universal, deben ser compartidos y entregados. Nuestros Fundadores y Fundadoras, dóciles al Espíritu Santo, supieron ser creativ@s en su momento histórico, comprometiéndose con audacia a humanizar a sus contemporáneos. Desde las OMP de Argentina, nos proponen la figura de la Beata Madre Teresa de Calcuta, que recreó la presencia de la vida religiosa saliendo al encuentro de los más pobres y abandonados en las calles de Calcuta, y luego, en el mundo entero. Dinámica: sugerimos buscar imágenes con distintas realidades internacionales y locales.
La realidad que contemplamos, nos interpela a responder desde la fe y experiencia de encuentro personal con Cristo. Este inmenso regalo que Jesús nos hizo, de experimentar tan fuerte y personalmente su amor, al punto de consagrarle toda nuestra vida, es lo que su Santidad Benedicto XVI nos pide transmitir con creatividad y fidelidad evangélica, especialmente a los no creyentes: “uno de los obstáculos para el impulso de la evangelización es la crisis de fe, no sólo en el mundo occidental, sino en la mayoría de la humanidad que, no obstante, tiene hambre y sed de Dios y debe ser invitada y conducida al pan de vida y al agua viva, como la samaritana que llega al pozo de Jacob y conversa con Cristo.” La misión es un compromiso constante, que nos invita a romper viejos esquemas y dejar atrás los temores, para responder con audacia y generosidad. “La profesión y la comunicación de la fe forman parte de la misma identidad cristiana. El docu-
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mento de Aparecida presenta la vida cristiana como una única vocación de discípulos misioneros de Cristo, nacida en el propio bautismo para formar parte de una gran familia que es la iglesia. La fe, vivida en la iglesia, nos libera del aislamiento del yo y nos pone en comunión con Dios y nuestros hermanos.” (Orientaciones pastorales para el trienio 2012-2014, n° 14) “Para un Pastor, pues, el mandato de predicar el Evangelio no se agota en la atención por la parte del Pueblo de Dios que se le ha confiado a su cuidado pastoral, o en el envío de algún sacerdote, laico o laica Fidei donum. Debe implicar todas las actividades de la iglesia local, todos sus sectores y, en resumidas cuentas, todo su ser y su trabajo. Esto implica adecuar constantemente estilos de vida, planes pastorales y organizaciones diocesanas a esta dimensión fundamental de ser Iglesia, especialmente en nuestro mundo que cambia de continuo. Y esto vale también tanto para los Institutos de Vida Consagrada y las So-
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ciedades de Vida Apostólicas, como para los Movimientos eclesiales.” (Benedicto XVI, mensaje octubre misionero 2012.) Urgidos por los desafíos de la misión, “la cooperación misionera se debe ampliar hoy con nuevas formas para incluir no sólo la ayuda económica (y espiritual), sino también la participación directa en la evangelización” (Redemptoris missio, 82). La celebración del Año de la Fe y el Sínodo de los Obispos sobre la nueva evangelización serán ocasiones propicias para un nuevo impulso de la cooperación misionera, sobre todo en esta segunda dimensión. ¿Cuáles son, entonces, los gestos misioneros que como comunidad religiosa (en la misión compartida y el trabajo en redes) queremos promover y/o sostener en nuestros ámbitos pastorales?
Hermanas Misioneras Nuestra Señora de los Apóstoles.
Ser misioneros desde el dolor ¡Mi único tesoro es la cruz! La fundadora de la Propagación de la Fe, quien conoció muy de cerca el sufrimiento y la soledad, en las horas más difíciles e inciertas, afirmaba que su único tesoro era la cruz. En la experiencia del dolor encontró su corazón la ocasión para unirse íntimamente a Jesús “Qué me importa, voluntad amada y amable de mi Dios, que me quites los bienes terrenales, la reputación, el honor, la salud o la vida, que me hagas descender mediante la humillación hasta el pozo y el abismo más profundo…acepto tu cáliz” (Paulina Jaricot) Paulina Jaricot convirtió su dolor y soledad en un tesoro. Te invitamos a rezar a modo de oración, la frase que citamos de ella, poniendo en las manos de Dios con toda confianza, tus dolores y sufrimientos. Para un encuentro con la Palabra de Dios podés rezar con el texto que sigue: “¡Padre, cómo deseo que me libres de este sufrimiento! Pero que no suceda lo que yo quiero sino lo que tú quieres” (Lc 22,41)
¿“Ir de misión” o ser misionero? unión de enfermos y ancianos Misioneros (ueaM) La UEAM nació el año 1928, fruto del espíritu misionero de Margarita Godet. Esta mujer quería ser misionera, pero no podía ir de misión porque estaba inmovilizada por su enfermedad. Pero esto no le impidió ser misionera: se ofreció como "enferma misionera" al seminario de Misiones Extranjeras de París y así, de este modo tan sencillo, nació la Unión de Enfermos y Ancianos Misioneros. Desde entonces son millones los enfermos y los ancianos que se suman a la misión universal de toda la Iglesia como misioneros desde el dolor y las propias limitaciones.
¡ese tesoro de la enfermedad y la ancianidad! “El encuentro con Cristo tiene lugar, de modo especial, en la experiencia del dolor y de la propia limitación. La experiencia del propio sufrimiento es un lugar privilegiado para el encuentro con Cristo…todos los que sufren han sido llamados de una vez para siempre a ser partícipes de los sufrimientos de Cristo... Cristo al mismo tiempo ha enseñado al hombre a hacer bien con el sufrimiento y a hacer bien a quien sufre" (Juan Pablo II, Salvifici Doloris, sobre el sentido cristiano del sufrimiento humano, 30). “Vosotros no debéis sentiros al margen de la vida de la Iglesia, elementos pasivos de un mundo en excesivo movimiento, sino sujetos activos de un período humano y espiritualmente fecundo de la existencia humana. Tenéis una misión que cumplir, una ayuda que dar” (Juan Pablo II, Christifideles Laici 48) Para reflexionar: ¿Cómo vivo esta etapa de mi vida? ¿De qué manera sentís que podes darte a los demás?
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En Argentina son más de 3.000 los enfermos y ancianos asociados a la Unión de Enfermos y Ancianos Misioneros. Las Obras Misionales Pontificias cuentan con un Equipo Nacional de la UEAM, quienes colaboran con las diócesis para que todos los ancianos y enfermos que quieran ser misionerosa través de este canal, presente en tantos lugares del mundo, puedan hacerlo. Para poder asociarte a la UEAM, podés ponerte en contacto con el Director de Obras Misionales Pontificias en tu diócesis. También podés informarte en www.ompargentina.org.ar o bien por email a ueam@ompargentina.org.ar
acompañados por la Madre teresa de Calcuta Siempre ten presente que…
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La piel se arruga, El pelo se vuelve blanco, los días se convierten en años… Pero lo importante no cambia; tu fuerza y tu convicción no tienen edad. Tu espíritu es el plumero de cualquier tela de araña. Detrás de cada línea de llegada, hay una de partida Detrás de cada logro, hay otro desafío. Mientras estés vivo, siéntete vivo. Si extrañas lo que hacías vuelve a hacerlo. No vivas de fotos amarillas… Sigue aunque todos esperen que abandones. No dejes que se oxide el hierro que hay en ti. Haz que en vez de lástima, te tengan respeto. Cuando por los años no puedas correr, trota. Cuando no puedas trotar, camina. Cuando no puedas caminar, usa el bastón. Pero nunca te detengas!!! Madre Teresa de Calcuta
Te invitamos rezar la oración de la Unión de Enfermos y Ancianos Misioneros y a rezarla no solamente hoy, sino cada día. Señor Jesús, tú nos has enseñado que nuestro sufrimiento humano, unido al amor redentor de tu pasión y de tu muerte, coopera a la salvación del mundo. En unión con mis hermanos enfermos y minusválidos de todo el universo, en unión también con todos los hombres de buena voluntad, te ofrezco los sufrimientos y las alegrías de este día para unirme a la misión de la Iglesia y dar testimonio de tu esperanza viva. Amén.
fondo de solidaridad para las misiones ¿Qué sentido tiene? Todas las ofrendas recogidas por las Obras Misionales Pontificias (OMP) en todas las parroquias y diócesis de todos los Ritos en el mundo, constituyen un Fondo de Solidaridad para dar vida a un programa de ayuda universal. Su finalidad es la ayuda económica a las Iglesias en Territorio de Misión en sus esfuerzos de evangelización, de desarrollo eclesial y social así como también de educación y asistencia. Esto es un signo de la unidad de fe, de amor y de justicia que une en el mundo a todos los miembros de la Iglesia y a todas las Iglesias particulares en la comunión de la Iglesia Universal, dado que a ello contribuyen todos los fieles de todas las Iglesias en todos los rincones del mundo (Art. 61 Obras Misionales Pontificias) Las ofrendas de los fieles recogidas por las OMP en las Diócesis para la misión universal deben ser íntegra y puntualmente entregadas a la Dirección Nacional de las OMP. Estas ofrendas, recogidas para la misión universal de la Iglesia en la Jornada Mundial de las Misiones «en todas las diócesis, parroquias e institutos de todo el mundo» (cfr. Juan Pablo II, Mensaje para la Jornada Mundial de las Misiones, 21 de octubre de 2001, 75º Aniversario de la Jornada Mundial de las Misiones), o en otras ocasiones especiales, no pueden ser destinadas a otros fines diversos (cfr. CIC, c. 1267 § 3; Cooperatio Missionalis, 8, 13 d), (Art. 62 Obras Misionales Pontificias) Equipo Colaborador OMP
Diversidad de Pueblos y Culturas Originarias La propuesta es desde el lema del Octubre misionero de este año y dejándonos iluminar por algunos textos que nos ayuden a comprender lo importante del diálogo interreligioso con los pueblos indígenas. Podremos así compartir la fe para crecer juntos.
El documento de Aparecida nos dice: “Como discípulos de Jesucristo, encarnado en la vida de todos los pueblos descubrimos y reconocemos desde la fe las “semillas del Verbo” presentes en las tradiciones y culturas de los pueblos indígenas de América Latina”. (529) “Nuestro servicio pastoral a la vida plena de los pueblos indígenas exige anunciar a Jesucristo y la Buena Nueva del Reino de Dios, denunciar las situaciones de pecado, las estructuras de muerte, la violencia y las injusticias internas y externas, fomentar el diálogo intercultural, interreligioso y ecuménico”. (95) Como misioneros debemos profundizar el conocimiento del proyecto de vida del pueblo o comunidad que acompañamos, dialogando con los sabios, ancianos o líderes indígenas para rescatar los sueños, mitos, tradiciones o ritos de cada cultura. Nos encontraremos con formas distintas de expresar realidades trascendentes y de encontrarse con ellas, en un lenguaje más simbólico que conceptual. Daremos un ejemplo que lo planteamos desde la realidad del pueblo mapuche en el sur argentino pero se puede recrear desde los relatos de otros pueblos indígenas que encontramos en diferentes lugares del país.
Relato del Trentren y Cai Cai Recopilado por Cesar Fernández, 1989 Narrado por Pedro Curruhuinca, Quila Quina, 1968. Esto pasó en los tiempos de antes, cuando solo había reché, los antiguos y verdaderos mapuches. Si no llovía se hacía una gran rogativa. Había que ir al lago Lácar y golpear el agua con ramas de pehuén para que viniera la lluvia. Y después, cuando venía la tormenta, había que estar a pura panza no más. Nada de protegerse con un toldo o ponerse al reparo. Decían los abuelos, cosas que a ellos les habían contado, que una vez apareció un hombre que decía que era el mandado de Nguenechén. Contó que se iba a enojar Caicaifilú y todo se iba a inundar. Había que ir a la mahuida Trentrén para salvarse. Se cansó el hombre de hablar, pero nadie le hacía caso y se fue. Ese año hicieron la rogativa. Y llovió y llovió. No sabían que hacer para que no diluviara más. Y ahí fue cuando la Caicaifilú, que vivía en el fondo del lago y estaba muy rabiosa con los mapuches, empezó a golpear el agua con su cola para hacer subir más el agua todavía. La Caicaifilú llamaba al Pillán del Mahún. Y los mapuches disparaban para todos lados.
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Algunos se acordaban del mandado de Nguenechén y empezaron a subir al Trentrén. También iban los animales como el choique, luan, pudú, pangui, nahuel… Sombrero de palo tenían que ponerse para subir, si no Antú los dejaba sin pelos. De esa vez quedaron con el color de piel oscura, por estar cerca del sol. Los mapuches que caían al agua se hacían peces y los animales, rocas. Tanto batifondo armó Caicaifilú que Trentrén se despertó. Estaba en su cueva, en la punta de la montaña. La Trentrén, para que los hombres y los animales no se murieran, se encorvaba y así subía la mahuida. Todo se había inundado y solo el cerro flotaba. Pero la Caicaifilú se revolcaba y levantaba el agua.
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La filú buena gritaba: -¡Trentrentrentren! Y la montaña subía. La filú mala decía: -¡Caicaicaicai! Y aumentaba el agua. Mucho tiempo dice que duró la pelea. Pasó entonces que la Caicai quiso ir a sacar a los mapuches de la cueva del Trentren, donde se habían metido.Se enroscó en una roca muy grande para poder llegar hasta arriba. Pero Trentren le dió un golpe con la cola y la tiro al fondo del lago. Ahí cayó la filú y la roca encima. Murió. Al poco tiempo dejó de llover. Entonces los mapuches hicieron una gran rogativa para agradecer a Trentren por haberlos salvado de Caicaifilú.
Dicen que esa montaña está apoyada en cuatro patas y si vuelve a diluviar se va a levantar de nuevo. Hay varios Trentren por San Martin de los Andes, Junín, Bariloche, Aluminé y también en Chile. Hay piedras con formas de animales que están en las islas de los lagos que son de los animales del tiempo de antes. Quedaron así desde el diluvio. Y esta es la historia que paso hace tantísimo tiempo, cuando solo había mapuches. Vocabulario: Filú: Serpiente Trentrenfilú: serpiente de la montaña Caicaifilú: serpiente del agua Nguenechén: Ser Supremo Antú: Sol Pillán: espíritu del antepasado Mahuida: montaña
Leer las siguientes citas bíblicas, luego reflexionar desde el relato mapuche y la Palabra de Dios las similitudes o semejanzas en los mensajes. Números 21,4-9 (Moisés pone la serpiente de bronce en un estandarte para sanar a los mordidos por las serpientes venenosas). Juan 12, 31-36 (Jesús elevado en la cruz salva a la humanidad). Podemos terminar con una oración de acción de gracias por la diversidad de pueblos y culturas originarias que en- contramos en nuestro país y la sabiduría que cada una nos transmite. Pbro. Gustavo Tartaglia Director Diocesano OMP Diócesis de San Carlos de Bariloche
Jesús recorría todas las ciudades y los pueblos, enseñando en sus sinagogas, proclamando la Buena Noticia del Reino y curando todas las enfermedades y dolencias. Al ver a la multitud, tuvo compasión, porque estaban fatigados y abatidos, como ovejas que no tienen pastor. Entonces dijo a sus discípulos:
«La cosecha es abundante, pero los trabajadores son pocos. Rueguen al dueño de los sembrados que envíe trabajadores para su cosecha». (Mt 9,35-38)
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La oración del Rosario Misionero nos ayudará a recordar los misterios de la vida de Jesús, recorriendo los pueblos y ciudades de África, de América, como también los de Asia,Europa y Oceanía, colocándonos ante cada una de las realidades del mundo con los mismos sentimientos de Jesús.
Este año, junto con la realización de la Colecta Mundial por las Misiones, las Obras Misionales Pontificias en la República Argentina, por 5º año consecutivo, proponen a todas las diócesis del País, celebrar la comunión en la cooperación espiritual, a través de una Cadena de Rosarios Misioneros, los 31 días de Octubre, las 24 horas del día, cada media hora. Todos los interesados pueden reunirse en la parroquia, capilla, colegio, grupo, institución o movimiento eclesial, en familia, con vecinos, solos o en comunidad,
ofreciendo el rezo del Rosario Misionero por la misión, por los misioneros argentinos y de todo el mundo, por los más pobres de la tierra y por la difusión de la alegría del Evangelio en cada rincón de nuestra Patria, del Continente americano, en misión permanente, y en el mundo entero.
¿Qué hacer para participar? 1. Unirte a tu diócesis en el día que ya tiene designado para participar de la cadena del Rosario Misionero, o cuando cada uno/a pueda hacerlo.
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2. Notificar al director/a de OMP o delegado/a de tu diócesis, o bien, informar al siguiente e-mail: director@ompargentina.org.ar, o al teléfono: (011) 4863-1357. Brindando los siguientes datos: nombre completo, parroquia/movimiento/ grupo/ colegio, diócesis a la que pertenece, día y hora que se compromete a rezar el Rosario Misionero (teniendo en cuenta que se rezará las 24 horas del día, y la duración de cada rosario es de 30 minutos) para que se pueda completar la jornada y lo podamos colocar en el sitio web oficial de las OMP: www.ompargentina.org.ar 3. Multiplicar y difundir esta propuesta a través de las distintas redes sociales en todas las diócesis del País y más allá de las fronteras, para que sean muchos los que se unan y así, promover nuestra cooperación misionera con tantos hermanos que anuncian a Jesús en el mundo entero. 4. Enviar, si así lo desea, un e-mail compartiendo testimonios de la experiencia vivida a partir de esta propuesta de la cadena del rosario misionero.
DíA ASIGNADO A CADA DIóCESIS PARA UNIRSE A LA CADENA DEL ROSARIO MISIONERO EN OCTUBRE, MES DE LAS MISIONES: Arqui/ Diócesis/ Prelatura Día asignado
Buenos Aires Bahía Blanca Córdoba Corrientes La Plata Mendoza Mercedes-Luján Paraná Resistencia Rosario Salta San Juan de Cuyo Santa Fe de la Vera Cruz Tucumán Alto Valle del Río Negro Añatuya Avellaneda-Lanús Azul Catamarca Comodoro Rivadavia Concepción Concordia Cruz del Eje Chascomús Formosa Goya Gregorio de Laferrere Gualeguaychú Jujuy La Rioja Lomas de Zamora Mar del Plata Merlo-Moreno Morón
Arqui/ Diócesis/ Prelatura Día asignado
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Neuquén Nueve de Julio Oberà Oran Posadas Puerto Iguazú Quilmes Rafaela Reconquista Río Cuarto Río Galleqos San Carlos de Bariloche San Francisco San Isidro San Justo San Luís San Martín San Miguel San Nicolás de los A. San Rafael San Roque Santa Rosa Santiago del Estero Santo Tomé Venado Tuerto Viedma Villa María Zárate-Campana Cafayate Deán Funes Esquel Humahuaca
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Paulina Jaricot, en el año 1822 cuando funda la Obra de la Propagación de la Fe, impulsada por la certeza de que la oración hace fecunda la actividad misionera, crea una “cadena de corazones comprometidos en aportar ayudas espirituales a toda la Iglesia” llamándolo Rosario Viviente. «Me pareció que había llegado la hora de realizar el proyecto de una asociación accesible a todos, que permitiera alcanzar la unión de la oración con un modo único, breve y práctico, sin cansar a nadie y que pudiera facilitar, al menos durante algunos minutos, la meditación cotidiana de los misterios de la vida y de la muerte de Jesús» Venerable Paulina Jaricot
Anunciando en la tierra del Caldén Alrededor de una docena y media de sacerdotes de la Arquidiócesis de Buenos Aires están ejerciendo su ministerio en otras diócesis motivados por el deseo de ayudar a otras Iglesias particulares donde hay escasez de clero. Por ello hay sacerdotes porteños en otras diócesis de nuestro país como Jujuy, Salta, Comodoro Rivadavia, Esquel, Bariloche, Luján, Santa Rosa, Añatuya, Oran, Neuquén y en el gran Buenos Aires. Yo soy parte de ese grupo, que no tenemos nada de especial, que trabajamos para anunciar a Jesús, a la par de otros hermanos sacerdotes en las diócesis en la que estamos colaborando. En mi caso desde siempre en mi formación me resonó la respuesta de Jesús “vayamos a otra parte, a predicar también en las poblaciones vecinas, porque para eso he salido” (Mc 1,38). A estas palabras de Jesús se le sumaron luego las de la Iglesia en el concilio, “Piensen, por tanto, los presbíteros que deben llevar en el corazón la solicitud de todas las iglesias. Por lo cual, los presbíteros de las diócesis más ricas en vocaciones han de mostrarse gustosamente dispuestos a ejercer su ministerio, con el beneplácito o el ruego del propio ordinario, en las regiones, misiones u obras afectadas por la carencia de clero.” Y las de los obispos en Aparecida “El insuficiente número de sacerdotes y su no equitativa distribución imposibilitan que muchas comunidades puedan participar regularmente en la celebración de la Eucaristía. Recordando que la Eucaristía hace a la Iglesia, nos preocupa la situación de miles de estas comunidades privadas de la Eucaristía dominical por largos períodos de tiempo” . Todo esto me llevo después de discernirlo en la oración a ofrecerme para ir a ejercer el ministerio a alguna diócesis con escasez de clero a fines del año 2007. Un año después a fines del 2008 comencé a ir en los tiempos litúrgicos fuertes; adviento/navidad, cuaresma/ Semana Santa y en las patronales a dos comunidades de la diócesis de Santa Rosa, La Adela en la margen norte del Río Colorado y a Cuchilo-co distante unos 120 Km. Desde marzo del año pasado estoy ejerciendo mi ministerio de forma permanente y por unos años,
además de los pueblos mencionados anteriormente, en Alpachiri, Colonia santa María y Colonia San Juan. Es una zona extensa y semi árida, donde predomina el caldén, árbol típico de La Pampa. Más allá de las tareas cotidianas y habituales de la pastoral, acompañar estas comunidades me ha hecho crecer como hombre y como sacerdote, ojalá esté ayudando a ellas a crecer también en el seguimiento de Jesús y en la misión que Él nos envía a todos. Una geografía de largas distancias entre comunidades me ha permitido ser más reflexivo, el ritmo rural me ha enseñado a ser más sereno, el hombre de campo, creyente y trabajador, me ha abierto otras perspectivas. Al contemplar la belleza de los cielos pampeanos he podido contemplar a su Bello Creador. Vivo este tiempo y estas comunidades con mucha alegría y como una gracia enorme hacia mi por parte de Dios. Esta experiencia la vivo personalmente, pero como parte de un presbiterio porteño que sostiene, se abre y se compromete con aquellas zonas donde hay pocos sacerdotes. Estoy convencido que este tipo de experiencia nos enriquece a todos: a las comunidades, al presbiterio y a las diócesis que reciben y a las que envían. La dimensión eclesial es esencial para que este tipo de experiencias sean fecundas. Por último quisiera pedirles que recen por aquellas diócesis donde hay una gran necesidad de clero para que el Señor las fortalezca y les conceda la gracia de una nueva primavera de vocaciones sacerdotales. Pbro. Fabián Mondini
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Las Obras Misionales Pontificias de Argentina ofrece, desde el año 1982 un Curso de Misionología, y con motivo de los 30º aniversario del Centro de Misionología para el Cono Sur “Juan Pablo II” ha actualizado la propuesta con un nuevo plan formativo teniendo en cuenta los cuatro ejes que propone Aparecida: experiencia religiosa, vivencia comunitaria, formación bíblico-doctrinal y compromiso misionero de toda la comunidad.
¿Por qué necesitamos formarnos para misionar?
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Todos los bautizados: laicos, religiosas, religiosos, sacerdotes necesitamos nutrir nuestro corazón para estar fortalecidos y compartir la fe. Necesitamos vivirla, celebrarla y gozosamente darla! Nuestra vocación misionera es entrega de la vida, desde la propia pobreza y desde la alegría de la fe como nos inspira Aparecida (DA 379). Estas afirmaciones confirmadas con la experiencia personal y comunitaria nos llevan a redescubrir las expresiones más hondas del Evangelio y fundamentar que verdaderamente necesitamos formarnos. Es por ello que leemos en Aparecida que “La vocación y el compromiso de ser hoy discípulos misioneros de Jesucristo en América Latina y El Caribe, requieren una clara y decidida opción por la formación de los miembros de nuestras comunidades… (DA 276). Porque necesitamos madurar nuestra fe en el seguimiento apasionado de Jesús, asumir su estilo de vida, su modo de relacionarse con el Padre, con los hermanos, con la realidad. Porque estamos invitados a entrar en el dinamismo del Espíritu para encarnar el Evangelio en la historia concreta y testimoniarlo con alegría y humanidad, respetuosos y favorecedores de la dignidad de cada ser humano. Porque ante climas adversos necesitamos tener fortaleza interior, profundas convicciones y madurez afectivo-espiritual para afrontar las dificultades en la certeza del Amor del Dios de la Vida.
Porque necesitamos abrir la mente y el corazón, entrar en un camino de conversión permanente para compartir la alegría de ser cristianos audaces en todo tiempo y lugar, confiados en el Señor. Necesitamos ir al encuentro de cada hermano en su realidad cultural y celebrar la Buena Nueva de Jesucristo para la vida del mundo entero. Vida en abundancia que Él nos regala liberándonos de todo aquello que nos esclaviza, ata, ahoga y no permite que seamos sus amigos y amigas de verdad. Porque la Iglesia es familia y necesitamos sentirnos enviados a anunciar el Reino y a jugarnos por Él, por esta causa estar construyendo fraternidad, justicia y paz en la sociedad, transformándola desde adentro. Consolidados como personas y como comunidades, creyendo que el Reino crece sea que estemos dormidos o despiertos. Es por ello que continuamos sosteniendo una propuesta formativa válida a través de un recorrido de tres años y en un esfuerzo para el Cono Sur: el Curso Presencial de Misionología. Las materias, los momentos personales de oración, la mesa compartida, la Eucaristía, la convivencia cotidiana respetuosa y servicial colaboran en la formación experiencial de misioneros, misioneras… laicos, religiosas –también necesitamos- religiosos y sacerdotes. Queremos contribuir a una mayor conciencia misionera desde el diálogo y la reflexión como espacio de gracia y bendición.
Informes e inscripciones: Hna. Lic. Sonia María Zbrun, HdM - Directora c-misionologia@ompargentina.org.ar www.ompargentina.org.ar - Tel/Fax: 54-11- 4863-1357 / 4862-4136
Curso Presencial 1. Introductorio:
2. Formación Misionera
OBJETIVOS DEL CURSO: • Lograr que los alumnos adquieran un corazón y una mente de discípulos misioneros. • Crecer en criterios adecuados y actitudes renovadas para vivir la dimensión misionera desde la propia vocación. • Brindar los contenidos básicos para el compromiso con las necesidades misioneras locales, de otras comunidades hermanas y más allá de las fronteras.
Consta de dos años cíclicos, luego de aprobadas todas las materias y talleres se egresa con la presentación de un trabajo de investigación personal. Destinado a laicas/os, religiosas/os, seminaristas y sacerdotes comprometidos en la animación misionera de sus respectivas comunidades o diócesis; y /o aquellos que desean prepararse para la misión ad gentes que hayan cursado y aprobado el Introductorio.
OBJETIVOS DEL CURSO: Lograr que los alumnos vivan en plenitud la catolicidad de la Iglesia y desde ella discernir los signos de los tiempos presentes en la misión. Profundizar los criterios adecuados y las actitudes para vivir la dimensión misionera ad gentes desde la propia vocación. Brindar los contenidos básicos para el compromiso con la misión ad gentes y la animación misionera en la Iglesia particular.
Contenidos: Materias: 1. Panorama actual de la misión. 2. Fundamentos teológicos en la misión. 3. Dimensión misionera de la Liturgia. 4. Espiritualidad misionera. 5. Formación de discípulo misionero. 6. Pastoral misionera y Obras Misionales Pontificias.
Primer año: 2013 Contenidos: Materias: Historia de la misión. Misión en el Antiguo Testamento. La misión en el Nuevo Testamento I. Antropología y cultura para la misión. Cristología para la misión. Ética y moral para la misión.
Talleres: 1. La Misión en el Magisterio reciente. 2. Medios de comunicación al servicio de la misión. 3. Sectas y nuevos movimientos religiosos. Nota: durante el dictado del curso los alumnos realizarán una experiencia de Misión organizada por OMP.
ce rt if ic ad os Lo s C en tr o ot or ga do s p or el “J u an de M is io n ol og ía av al ad os Pa bl o II ” es tá n U n iv er p or la Po n ti fi ci a de R om a si da d U rb an ia n a ci a U n iy p or la Po n ti fi a A rg en ve rs id ad C at ól ic de la ti n a, a tr av és bl o II . C át ed ra Ju an Pa
Talleres: Trabajo de investigación. Espiritualidad de la religiosidad popular.
PROFESORES DEL CURSO DE MISIONOLOGÍA 2013: Pbro. Dr. Guillermo Juárez OP. Pbro. Lic. Aldo Vallone. Lic. María Andrea Green. Pbro. Lic. Alonso Sánchez, cmf. Pbro. Pedro Brassesco. Pbro. Dr. Eduardo Farrell. Hno. Lic. Fernando Kühn, cmf.
Cátedra Juan Pablo II UCA
Lic. Constanza Levaggi. Lic. Leandro Verdini. Lic. Sergio Campos. Pbro. Lic. Fr. José Cereijo, omp cap Dra. María Alcira Sodor Hno. Ángel Dupples, fm Pbro. Leonardo Rodríguez.
Pontificia Universidad Urbaniana
Comisión Episcopal de Misiones - CEA
Inscripción hasta el 3 de diciembre de 2012 para el Curso 2013
Destinado a laicas/os, religiosas/os, seminaristas y sacerdotes comprometidos en la animación misionera de sus respectivas comunidades locales. Miembros de grupos misioneros y participantes en misiones populares que desean iniciarse en la teología y pastoral misionera.
Obras Misionales Pontificias - Av. Medrano 735 (1179) Buenos Aires Tel. Fax: 54 - 11 - 4863-1357 | 4862-4136 - Email: comunicacion@ompargentina.org.ar web: www.ompargentina.org.ar