El "meaculpa" de la socialdemocracia

22/10/2012 La socialdemocracia debería entonar el "meaculpa" de sus fracasos y rectificar su "hoja de ruta", si no quiere seguir desmoronándose, como lo está demostrando en cada proceso electoral

Los socialistas, que han dejado de ser marxistas, los socialistas que han dejado de ser obreros, los socialistas que defienden el capitalismo a capa y espada, son copartícipes del asalto al Estado del Bienestar, que se está llevando a cabo so pretexto de resolver una crisis que ha generado el sistema capitalista, desregulado y dominante. Los socialistas han de plantearse si van a seguir haciendo de palanganeros de un sistema político, que se asienta en la desigualdad, la especulación… el despotismo capitalista.

Desde hace tiempo que el lenguaje socialdemócrata se ha ido suavizando de tal forma que resulta imposible distinguirlo del lenguaje de la derecha. Los enemigos del pueblo son aquellos que luchan por oprimir al pueblo, los enemigos de la clase obrera son los explotadores, los enemigos del socialismo son los capitalistas. Este lenguaje sencillo, claro y contundente es el que entiende el pueblo llano que sufre el embargo de sus casas, padece el paro sistémico capitalista y ve como día a día se reducen las conquistas sociales arrancadas al capitalismo con a las movilizaciones de la clase obrera, con las luchas del pueblo. Las crisis del capitalismo siempre tienen la misma causa: No obtienen los beneficios que desean. La socialdemocracia debe pedir perdón por sus pecados, por haber favorecido la liberación de los mercados.

Euskadi y Galicia marcan el camino

La socialdemocracia debe pedir perdón por no haber impuesto una ley de hierro al capitalismo. La socialdemocracia es cómplice del desmantelamiento del Estado del Bienestar.

La socialdemocracia es el mejor aliado del capitalismo salvaje, porque es su parachoques frente a las protestas de la clase obrera, frente a la desesperación del pueblo. La socialdemocracia ha dejado de ser el partido de los trabajadores, ya no busca soluciones para los problemas de los trabajadores, busca soluciones para que los ricos sigan ganando cada día más. Lo que era un instrumento válido para la defensa de los trabajadores, se ha convertido en un instrumento válido para la defensa de los intereses del capitalismo, de los especuladores financieros, de la gran banca, de los enemigos de la clase trabajadora, los enemigos del pueblo. La socialdemocracia debe comenzar por borrar las siglas de su partido en España, nada de Socialista, nada de Obrero, que se quede en PE (Partido Español) la va a salir que ni pintado, para los tiempos que corren.