Deporte que se mueve con tecnolog\u00EDa

Por: Camila Caicedo, Coordinadora de Comunicaciones, Asociación RUAV.

Desde su llegada a la Institución Universitaria Escuela Nacional del Deporte, en el año 2006, el ingeniero de sistemas Ower Solarte ha tenido la oportunidad de impulsar el crecimiento y modernización de la institución, que hoy cuenta con cerca de 4000 estudiantes activos, en sus cuatro facultades.

Solarte, quien es nacido en La Cruz, Nariño, empezó su labor en la Unidad de Registro Académico, en el cargo de coordinador. Allí, una de sus experiencias más importantes fue la implementación del software para la administración de los servicios académicos, el cual facilitó la vida de los docentes de la época, que aún diligenciaban manualmente mucha información. Además, para el funcionario representó un enorme aprendizaje acerca de las necesidades de administrativos, profesores y estudiantes, y de las características de servicio que debía ofrecerles, para cumplir con sus expectativas.

“Conocí a fondo la plataforma y quién era el público para el que trabajamos, por lo que al llegar a la Unidad de Sistemas, pude asumir mejor los retos que había en el área, que eran muy similares a los que ya había solventado”, explicó.

Y es que el 16 de septiembre de 2018, el ingeniero asumió el cargo de director de dicha unidad, en la que se propuso a enseñar el criterio de los usuarios finales a su equipo y a los proveedores, pues considera que, al ser la Escuela Nacional del Deporte una entidad que enfoca sus programas en la capacitación deportiva, las soluciones deben adaptarse a esa visión.

Uno de los proyectos más relevantes, según las directrices del Con- sejo Directivo de la escuela, es ofrecer un servicio de educación virtual pertinente, que permita llevar sus programas a otras zonas del país.

“Tenemos un grupo de trabajo multidisciplinario que nos permite entregar un servicio de calidad, para que los estudiantes de esa modalidad adquieran las mismas competencias de quienes asisten presencialmente. Que un director técnico aprenda, a través de objetos virtuales de aprendizaje, cómo aplica las metodologías indicadas con un deportista o un equipo, por ejemplo”. Igualmente, el líder, quien tiene a su cargo a cinco personas, se ha trazado la meta de generar una cultura organizacional a partir de la gestión del conocimiento que se obtiene en las aulas, y que esta continúe siendo insignia de cada uno de los egresados de la institución.

Viviendo la colaboración en RUAV

Desde el inicio de su nuevo cargo, el funcionario, quien tiene una maestría en Gestión de Informática y Telecomunicaciones, ha participado del Comité de Proyectos de RUAV, con sus colegas de las demás instituciones asociadas, lo que lo ha impulsado a fortalecer las alianzas y generar proyectos de investigación colaborativos, a partir de la data que se genera en sus laboratorios, contribuyendo académicamente a la región.

“Desde que entré a RUAV, he interactuado con compañeros que tienen puntos de vista y campos de acción diferentes, eso es una gran retroalimentación, que siempre quiero llevar a mi organización. He conocido las mejores herramientas para innovar en procesos internos, y las personas que contribuyen para llevar mejor nuestros servicios”, expresó.

Entre el deporte y la ingeniería

A nivel personal, Ower comparte la misma pasión de la institución que representa, pues hace parte del equipo de fútbol sala, del que participan varios de sus compañeros, y practica buceo de forma regular. Del mismo modo, la ingeniería siempre ha estado presente en el día a día del padre de Emmanuel, de seis años, quien adquirió nociones de programación, en sus años de colegio, que lo animaron a tomar el camino de buscar nuevas soluciones.

“Cuando uno puede escoger algo que le gusta, lo hace con más amor, precisamente eso encontré en la ingeniería de sistemas, donde concentré todas mis habilidades, para destacarme en mi estudio y ocupación”. </>