Patagon Journal #7

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Patagon Journal Nº 7 / Verano 2015 www.patagonjournal.com

REVISTA DE LA PATAGONIA

NATURE - CULTURE - TRAVEL - OUTDOORS / NATURALEZA - CULTURA - VIAJES - AIRE LIBRE

The

Photographic

Issue Nº7 / 2015

Especial fotográfico PLUS Packrafting inside the new Patagonia Park

Packrafting dentro del nuevo Parque Patagonia Climbing virgin stone Escalando piedra virgen Chile $4.000 / Argentina $39.00 / USA and other countries $9.95

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Patagonia in photos Commemorative Book of the 2nd Patagonia Photo Contest Libro Conmemorativo del 2º Concurso de Fotografía de la Patagonia

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Patagon Journal, Casilla 1254, Puerto Varas - Chile


contents <contenidos>

20 FEATURES ARTÍCULOS PHOTOGRAPHIC ISSUE / ESPECIAL FOTOGRAFICO

10 From the water Desde el agua Fly fishing photography. Fotografia de pesca con mosca.

10

50

By Brian O’Keefe

20 Pure Patagonia Pura Patagonia Minimalist photography. Fotografia minimalista. By Pablo Valenzuela

30 A region at risk Una región en riesgo Environmental photography. Fotografia medioambiental. By Bridget Besaw

40 Wild Patagonia Patagonia salvaje Nature photography. Fotografia de naturaleza. By Augusto Domínguez MOUNTAINEERING / MONTAÑISMO

50 Virgin Stone Piedra Virgen Journey to unclimbed rock near Futaleufu. Viaje al granito no escalado cerca de Futaleufú. By Niels Tietze

40 DESTINATIONS DESTINOS 58 Packrafting on the Chacabuco Packrafting en el río Chacabuco By Tyler Williams INTERVIEW / ENTREVISTA

64 Kris Tompkins Building Patagonia Park Construyendo el Parque Patagonia

DEPARTMENTS SECCIONES CURRENTS ACTUALIDAD

70 Puesco Fest, a solar gold rush, science tourism in Aysen, and the ATTA summit. Puesco Fest, fiebre del oro solar en Chile, el turismo científico en Aysén, y la cumbre ATTA.

FLY FISHING PESCA CON MOSCA

74 Salmon are here to stay.

Los salmones llegaron para quedarse.

By Jimmy Langman

By Rodrigo Sandoval

66 Photo safaris Fotosafaris

TREKKING

Photo tours take off in Patagonia. Excursiones de fotografía despegan en Patagonia

Valle de Cochamó. By Tomás Moggia

76 Cochamo Valley.

By Tomás Moggia

ENVIRONMENT MEDIOAMBIENTE

78 Let’s change society, not the climate. Cambiemos la sociedad, no el clima. By Manuel Baquedano

HOTELS HOTELES

30

68 Noi Centro de Ocio, Península de Rilán, Chiloé.

80 DIRECTORY & CLASSIFIEDS

By Jimmy Langman

DIRECTORIO & CLASIFICADOS

DINING PARA CENAR

69 Se Cocina, Frutillar, Chile. By Javiera Ide

A “living fossil” in Patagonia. Un “fósil viviente” en la Patagonia.

COVER/PORTADA: Gaucho, Parque Patagonia. Photo by BRIDGET BESAW

Patagon Journal

SPECIES PROFILE PERFIL DE ESPECIE

82 Monito del Monte

3


editor’s letter <editorial>

Photogenic Patagonia Patagonia fotogénica

Executive Editor/Editor Ejecutivo: JIMMY LANGMAN Deputy Editor/Subeditor: TOMÁS MOGGIA Associate Editor/Editor Asociado: JORGE LOPEZ OROZCO Editors-at-Large/Editores Adjuntos TRENTON MCDEVITT, NANCY MOORE, CHRISTIE PASHBY Graphic Design/Diseño Gráfico: MIGUEL BENDITO LÓPEZ Translations/Traducciones: DANA HOLAHAN, JAVIERA PUENTES, TABOADA DIAZ, SEAN DILLON Contributing Editors/Editores Contribuyentes: BRIDGET BESAW, FRANCISCO CASTAÑO, PETER HARTMANN, CAROLYN MCCARTHY, JACK MILLER, CAMILO RADA, RODRIGO SANDOVAL, PATRICIO SEGURA, PABLO VALENZUELA

T

here are few if any places in the world better suited for photography than Patagonia. To that end, Patagon Journal hosts an annual Patagonia Photo Contest that is sparking worldwide interest. Last year, our second photo contest received more than 2,200 entries from professional and amateur photographers from 14 countries. (Stay tuned for info on our upcoming contest.) We are thrilled to present you now with “The Photographic Issue.” There are many other great photographers working today in the region, but our special photography issue features four extraordinary perspectives from some of the best. Brian O’Keefe, co-founder of Catch Magazine, gives us stunning images of fly fishing at the region’s rivers and lakes. We have a photo essay highlighting the minimalist photography of our contributing editor, Pablo Valenzuela. There is an environmental photo essay from Bridget Besaw, an award-winning photographer for several magazines in the United States. Renowned Chilean photographer Augusto Dominguez contributes a nature photo essay from the wilds of Patagonia. In Issue 7, among our diverse other topics, we also feature guidebook writer Tyler Williams, who takes us on a surprising packrafting trip on the Chacabuco River in the new Patagonia Park. Patagon Journal interviews Kris Tompkins, the leader of Conservacion Patagonica, the non-profit organization that is building Patagonia Park. And Niels Tietze is here with an entertaining tale about his discovery and first ascent of El Hermano, a virgin mountain far off the beaten track in Palena. We appreciate greatly the many letters of support we have received from our readers! Our first three years publishing this magazine have not been easy. Sponsors come and go, so without your support, dear reader, this magazine would not be possible. We’re a small outfit but with a big mission: build a greater appreciation, understanding and environmental protection of Patagonia. Please consider being a part of Patagon Journal in 2015 as a subscriber, donor, or advertiser. Thank you.

E

xisten pocos o quizá ningún lugar en el mundo más adecuado para la fotografía que Patagonia. Por ello es que Patagon Journal alberga anualmente un Concurso de Fotografía de la Patagonia, despertando interés en todo el mundo. El año pasado, nuestro segundo concurso de fotografía recibió más de 2.200 imágenes de fotógrafos profesionales y aficionados de 14 países. (Pronto, más información sobre nuestro próximo concurso.). Ahora estamos encantados de presentarles nuestro “Especial Fotográfico”. Hay muchos otros grandes fotógrafos trabajando actualmente en la región, pero nuestra edición especial de fotografía incluye cuatro extraordinarias perspectivas de algunos de los mejores. Brian O’Keefe, cofundador de Catch Magazine, nos entrega impresionantes imágenes de pesca con mosca en los ríos y lagos de la región. Tenemos un ensayo fotográfico destacando la fotografía minimalista de nuestro editor colaborador, Pablo Valenzuela. Hay un ensayo fotográfico medioambiental de Bridget Besaw, una fotógrafa galardonada por su trabajo en varias revistas en Estados Unidos. Además, el reconocido fotógrafo chileno Augusto Domínguez contribuye con un ensayo fotográfico de la naturaleza de las tierras salvajes de la Patagonia. En la edición 7, entre otros temas diversos, también contamos con el escritor de guías Tyler Williams, quien nos lleva en un sorprendente viaje de packrafting por el río Chacabuco en el nuevo Parque Patagonia. Patagon Journal entrevistó a Kris Tompkins, líder de Conservación Patagónica, la organización sin fines de lucro que está construyendo el Parque Patagonia. Y Niels Tietze está aquí con una entretenida historia sobre su descubrimiento y primera ascensión de El Hermano, una montaña virgen situada lejos de los caminos trillados en Palena. ¡Estamos muy agradecidos por las numerosas cartas de apoyo que hemos recibido de nuestros lectores! Nuestros primeros tres años publicando esta revista no han sido fáciles. Los avisadores van y vienen, así que sin tu apoyo, querido lector, esta revista no sería posible. Somos un equipo pequeños, pero con una gran misión: construir una mayor apreciación, comprensión y protección del medioambiente de la Patagonia. Por favor considera ser parte de Patagon Journal en 2015 como suscriptor, donante o anunciante. Gracias. Jimmy Langman, Editor Ejecutivo

4

Patagon Journal

Editorial Advisory Board/Consejo Editorial: WAYNE BERNHARDSON, RUTH BRADLEY, BRIAN BYRNES, XIMENA CAMPBELL, LUCAS CHIAPPE, RODRIGO CONDEZA, ANDRES ERGAS, DANIEL GONZALEZ, BILL HINCHBERGER, ANDREW JACKSON, RICK KLEIN, NICOLAS LA PENNA, JUAN ANTONIO MERINO, ALFREDO SEGUEL Special thanks/Agradecimientos especiales: Weeden Foundation, Veronica Moya, Guillermo Muñoz, Libby Sauter, Javiera Ide, Ann Langman, Steve Langman, Beatriz Vial, Benjamin Barros, Jorge Moller, The Santiago Times Subscribe/Suscríbete: subscribe@ patagonjournal.com or online/en línea www.patagonjournal.com Advertising/Publicidad: (56 65) 2235056, editors@patagonjournal.com Submissions, Questions, Suggestions/ Aportes, Preguntas, Sugerencias: editors@patagonjournal.com ISSN 0718-8978 No part of this magazine may be reproduced without written permission from Patagon Journal and its contributors. Views expressed herein do not necessarily reflect the views of Patagon Journal. Queda prohibida la reproducción de cualquier parte de la revista sin previa autorización de Patagon Journal y sus contribuyentes. Los opiniones expresadas en la revista no necesariamente reflejan los opiniones de Patagon Journal. © Patagon Journal Publicaciones Printing/Impresión: This edition of Patagon Journal is printed in Concepción, Chile, by Trama Impresores on paper certified by Forest Stewardship Council (FSC) for ecologically sustainable forest management. Esta edición de Patagon Journal se imprime en Concepción, Chile, por Trama Impresores en papel certificado como ecológicamente sustentable para el manejo de los bosques por Forest Stewardship Council (FSC).

PEFC/24-31-6200

Distribution/Distribución: The print edition of Patagon Journal is distributed in Chile by Meta S.A. and Lonely Planet Chile, and in the United States by Ubiquity Distributors. The digital edition is available on iPad, Android, Zinio, other tablets and smartphones. La edición impresa de Patagon Journal es distribuida en Chile por Meta S.A. y Lonely Planet Chile, y en los EE.UU. por Ubiquity Distributors. La revista digital está disponible en iPad, Android, Zinio, otros tablets y smartphones.


contributors this issue <contribuyeron en esta edición> BRIANO'KEEFE

PABLOVALENZUELA

BRIDGETBESAW

One of the world’s top fly fishing photographers,

A contributing editor to Patagon Journal, not

The photographer of our cover photo this is-

Brian O’Keefe is co-founder of the leading fly

long after getting his civil engineering degree

sue, Bridget Besaw has won numerous national

fishing digital publication Catch Magazine.

at Chile’s Catholic University, Pablo Valenzuela

press awards in the United States for her envi-

Based in Oregon, he has been a fly fishing

instead opted to work full-time photographing

ronmental photos in publications such as News-

guide, instructor, and fishing tackle rep, and for

Chile’s natural and cultural heritage, publish-

week, Time, Forbes, Fortune, and The New York

more than two decades photographed around

ing the first of his eight photo books in 1993.

Times. Principal of Seedlight Pictures, Bridget

the globe for international media such as Fly

His most recent book, Patagonia, which shows

also does photo and video projects for diverse

Fisherman, Fly Rod & Reel, Field & Stream, and

the region through minimalist landscapes, was

clients and has published two photo books.

Los Angeles Times.

released in October 2014.

El fotógrafo de nuestra foto de portada de esta

Uno de los mejores fotógrafos de pesca con mos-

Un editor contribuyente de Patagon Journal, no

edición, Bridget Besaw, ha ganado numerosos

ca a nivel mundial, Brian O’Keefe, es cofundador

mucho después de haber obtenido el título de

premios de la prensa nacional de Estados Unidos

de Catch Magazine, una publicación digital líder

ingeniero civil en la Universidad Católica de Chile,

por sus fotografías ambientales en publicaciones

en pesca con mosca. Radicado en Oregon, ha sido

Pablo Valenzuela optó por trabajar a tiempo com-

como Newsweek, Time, Forbes, Fortune, y The

guía de pesca con mosca, instructor, representan-

pleto fotografiando el patrimonio natural y cultural

New York Times. Directora de Seedlight Pictures,

te de aparejos de pesca y por más de dos décadas

de Chile, publicando el primero de sus ocho libros

Bridget también hace proyectos de foto y video

ha fotografiado alrededor de todo el planeta para

de fotografía en 1993. Su libro más reciente, Pata-

para diversos clientes y ha publicado dos libros

medios internacionales como Fly Fisherman, Fly

gonia, que muestra la región a través de paisajes

de fotografía.

Rod & Reel, Field & Stream, y Los Angeles Times.

minimalistas, fue lanzado en octubre de 2014.

AUGUSTODOMÍNGUEZ

TYLERWILLIAMS

MANUELBAQUEDANO

Chilean photographer Augusto Dominguez

Tyler Williams has paddled more than 300

One of Chile’s pioneering environmental leaders

has been photographing nature in Chile and

rivers worldwide, including 20 first descents

for more than thirty years, Manuel Baquedano

Patagonia since the late 1980s, along the way

and several source-to-sea journeys. A regular

is the founder and president of the Santiago-

contributing photos to several national and inter-

contributor to Kayak Session and Canoe & Kayak

based Instituto de Ecología Política. He has a

national media and publishing five photography

magazines, through his Funhog Press he has

degree in sociology from Catholic University

books. Since 1995, he has published an annual

also published seven guidebooks. This is his first

of Louvain (Belgium), and has been active in

calendar, Chile de Aventura. He is also director

story for Patagon Journal. Between his outdoor

climate change issues since 1991, when he

of AtacamaPatagonia Photo Expediciones and

adventures, Tyler lives in Flagstaff, Arizona, with

founded the Latin American Climate Change

Diapostock image bank.

his wife, Lisa.

Committee (CANLA).

El fotógrafo chileno Augusto Domínguez ha es-

Tyler Williams ha remado más de 300 ríos en todo

Uno de los líderes ambientales pioneros en Chi-

tado fotografiando la naturaleza en Chile y Pata-

el mundo, incluyendo 20 primeros descensos y

le por más de 30 años, Manuel Baquedano es

gonia desde finales de los 80, contribuyendo en

varios viajes desde el origen hasta el mar.

fundador y presidente del Instituto de Ecología

el camino con fotos a varios medios nacionales

Colaborador habitual de las revistas Kayak Session

Política con sede en Santiago. Tiene un título en

e internacionales y publicando cinco libros de

y Canoe & Kayak, a través de su Funhog Press

sociología en la Universidad Católica de Lovaina

fotografía. Desde 1995, ha publicado un calen-

también ha publicado siete guías de actividades al

(Bélgica), y ha participado activamente en temá-

dario anual llamado Chile de Aventura. También

aire libre. Este es su primer artículo para Patagon

ticas vinculadas con el cambio climático desde

es director de AtacamaPatagonia Photo Expe-

Journal. Entre sus aventuras al aire libre, Tyler vive

1991, cuando fundó el Comité de Cambio Climá-

diciones y del banco de imágenes Diapostock.

en Flagstaff, Arizona, con su esposa, Lisa.

tico en América Latina (CANLA).

Patagon Journal

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La revista de la Patagonia


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Photographic Issue Especial fotográfico

Four perspectives of Cuatro perspectivas de Patagonia

O

ne of the greatest outdoor photographers to ever hoist a camera, Galen Rowell, once advised aspiring photographers: “Tune into your passion, and follow it.” The photographers featured in our special edition on photography exemplify such thinking. They share a passion not just for taking photos, but even moreso are passionate about the subjects of their photography -- often the vital element that can separate a merely good photo from a great one. Brian O’Keefe has long focused his sights on fly fishing. He started his interest in fly fishing and photography as a young boy, and eventually was discovered by a magazine editor who upon seeing a large selection of his images not only bought some of his first photos but used six of them on the cover of his magazine. It was the start of a career in photography that has spanned more than four decades. For Pablo Valenzuela, first it was his passion for travel, hiking and mountains in his youth that later led him to photography as a way to communicate that passion. In Patagonia, in particular, he says he has found the perfect canvas for his interest in minimalist photography. “All of Patagonia inspires me. I especially have a passion for the extreme lights and lines that the skies and clouds generate in Patagonia.” Environmental activism was part and parcel of Bridget Besaw going back to her childhood. An accomplished photographer in the United States, she also lived in Chile for several years and along the way doing extensive photography of environmental issues in Patagonia. Some of her best work has been in Aysen, her favorite part of Patagonia, which she calls “an underappreciated gem” and where she has documented conservation projects and the people and environment at risk from the possible construction of hydroelectric dams. The photography of Augusto Dominguez has been in large measure informed by his passion for the outdoors. Like the other photographers featured herein, Augusto Dominguez, too, says that he has been drawn again and again to Patagonia because of its pristine nature. Says Dominguez: “I find myself inspired by the wilderness. I love to visit natural areas where there is little to no human intervention.”

G

alen Rowell, uno de los más grandes fotógrafos de naturaleza que alguna vez sostuvo una cámara, en una oportunidad se dirigió a unos aspirantes a fotógrafos diciendo: “Descubre tu pasión y síguela”. Los fotógrafos incluidos en nuestra edición especial de fotografía ejemplifican dicho pensamiento. Ellos comparten una pasión no sólo por tomar fotos, sino que son todavía más apasionados por las temáticas de sus fotografías –a menudo el elemento vital que puede separar una buena foto de una excelente. Brian O'Keefe ha centrado durante mucho tiempo su mirada en la pesca con mosca. Su interés en por ella y la fotografía comenzó cuando era un niño, y finalmente fue descubierto por un editor de una revista, quien al ver una gran selección de sus imágenes no sólo compró algunas de sus primeras fotos, sino que utilizó seis de ellas en la portada de su revista. Fue el comienzo de una carrera en la fotografía que se ha extendido por más de cuatro décadas. Para Pablo Valenzuela, primero fue su pasión de juventud por los viajes, el senderismo y las montañas lo que más tarde lo llevó a la fotografía como una forma de comunicar esa pasión. En particular en la Patagonia, él dice que ha encontrado el lienzo perfecto para su interés en la fotografía minimalista. “Toda la Patagonia me inspira. Tengo una pasión especial por las luces y líneas extremas que los cielos y las nubes generan en Patagonia”. El activismo ambiental ha sido una parte importante para Bridget Besaw desde su infancia. Una fotógrafa consumada en Estados Unidos, también vivió en Chile por muchos años mientras en el camino hacía una amplia cobertura fotográfica de las temáticas medioambientales en la Patagonia. Algunos de sus mejores trabajos han sido en Aysén, su parte favorita de Patagonia, que ella cataloga como “una joya poco apreciada” y donde ha documentado proyectos de conservación y a las personas y al medioambiente en riesgo ante la posible construcción de represas hidroeléctricas. La fotografía de Augusto Domínguez ha sido formada en gran medida por su pasión por la naturaleza. Al igual que los otros fotógrafos destacados aquí, Augusto Domínguez también dice que ha sido atraído una y otra vez a la Patagonia debido a su naturaleza prístina. Domínguez señala: “Me inspiro en la naturaleza virgen. Me encanta recorrer lugares donde poco y nada se nota la mano del hombre”.

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Patagon Journal


Patagonia

PABLO VALENZUELA


Brian O’Keefe Fly fishing photography | Fotografía de pesca con mosca

From the water

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Patagon Journal


Photographic Issue Especial fotográfico

Desde el agua

Brian O’Keefe

Co-founder of Catch Magazine and a pro fly fishing photographer for more than two decades. Cofundador de la revista Catch Magazine y fotógrafo especializado en pesca con mosca desde hace más de dos décadas. www.brianokeefephotos.com

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photo essay <fotoreportaje>

Previous page / Página anterior: Río San Pedro, Chile.

Above and right / Arriba y derecha: Fly fishing at Puelo, Chile. Pesca con mosca en Puelo, Chile. Below / Debajo: Rainbow trout underwater. Trucha arco iris bajo el agua.

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Patagon Journal


Photographic Issue

Especial fotográfico


Above / Arriba: Lake fishing in Argentina. Pesca en un lago de Argentina. Left / Izquierda: Catching brook trout in autumn in Patagonia. Pescando trucha de arroyo en otoño en la Patagonia.

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Patagon Journal


Above right / Arriba derecha: Fly casting in Argentina among incredible vistas. Lanzamiento en Argentina entre vistas increíbles. Right / Derecha: A rainbow trout in Argentina. Una trucha arco iris en Argentina.

Patagon Journal

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photo essay <fotoreportaje>

Above / Arriba: Near Esquel, Argentina. Cerca de Esquel, Argentina.


Photographic Issue

Above / Arriba: Fly casting at one of Chile’s spectacular lakes. Lanzamiento en uno de los lagos espectaculares de Chile. Right / Derecha: Río Petrohue.

Left / Izquierda: Fly fishing at Mt. Fitz Roy. Pesca con mosca cerca de Cerro Fitz Roy.

Patagon Journal

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Especial fotográfico


Interview | Entrevista: Brian O’Keefe

What’s the life like of a professional fly fishing photographer? I sold my first fly fishing photograph when I was 16 and now I am 60. So, after 44 years of quite intense fishing and travel, it feels good to look back at all the great places I have been and all the great people I have met along the way. I’ve been really lucky that my hobby turned into a job, and even though it does not pay very well, I am rich with experiences and friends. How is it different from other kinds of photography? Fly fishing photography has its unique challenges. For one, there is a live animal involved: trout. If you miss a shot of a golfer or tennis player, wait a few minutes and you will have another chance. Miss a jumping trout and that could be the shot of the week. Trout live in remote places and all kinds of weather is involved. If a photographer is confined to a boat, it can be tough. So can walking a long ways with camera gear. There are anglers involved. Can they cast well? Are they wearing appropriate clothing? Can they hold fish? Was another photographer just there and is everyone getting tired of photographers! What gear do you bring with you to a place like Patagonia? I’ve been told that I bring a lot less than most photographers. I have my primary DSLR camera – Canon 5D Mark III, and two main lenses – 17-35mm wide angle zoom and a 70-200mm tele zoom. Those two lenses do 90 percent of my work. I’ll add a 15mm fisheye, a 50mm macro and a 300mm tele on occasion. But I try to stay agile and mobile for climbing up hills for “high shots,” scrambling over boulders, and jumping in and out of boats. I also bring a decent point and shoot camera, a flash, polarizing filter, and extra batteries and memory cards. I also have an inexpensive plastic dive bag for my point and shoot camera. What is your most memorable moment photographing in Patagonia? I have had so many incredible opportunities and situations in Patagonia, that I do not have a favorite. Seriously, almost every day is amazing. I get up and organize my gear, have a great breakfast with new friends, then float a new river and fish and photo and have a great lunch, then an amazing afternoon of fishing, then dinner, wine, pisco… So much fun. I am the luckiest man in the world. Did you catch a lot of fish in Patagonia? Yes. The fishing in Patagonia is fantastic, if not some of the best in the world. I’ve had technical “match the hatch” dry fly fishing with 6X tippet in Argentina one day, then landing monster rainbows at Jurassic Lake the next. I’ve fished for large rainbows in Yelcho Lake with dry dragonfly patterns in the morning and streamer fished the Yelcho River for big browns in the afternoon. My favorite day was spent on Chile’s San Pedro River - the most beautiful river I have ever seen in the world.

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¿Cómo es la vida de un fotógrafo profesional de pesca con mosca? Vendí mi primera fotografía de pesca con mosca cuando tenía 16 años y ahora tengo 60. Entonces, después de 44 intensos años de pesca y viajes, se siente bien mirar hacia atrás y ver todos los lugares en los que he estado y las grandes personas que he conocido a lo largo del camino. He tenido mucha suerte de que mi hobby se haya transformado en un trabajo, y a pesar de que no paga muy bien, yo soy rico en experiencias y amigos. ¿Cómo se diferencia de otros tipos de fotografía? La fotografía de pesca con mosca tiene sus desafíos únicos. Por un lado, hay un animal vivo implicado: la trucha. Si te pierdes un disparo de un golfista o un tenista, espera unos minutos y tendrás otra oportunidad. Piérdete una trucha saltando y esa podría ser la toma de la semana. Las truchas viven en lugares remotos y todo tipo de clima está involucrado. Si un fotógrafo está confinado a un bote, puede ser complicado. También puede ser complicado caminar un largo trecho con el equipo de cámara. Además, hay pescadores implicados. ¿Pueden aparecer bien? ¿Están usando la ropa adecuada? ¿Pueden mantener el pez? ¡Había otro fotógrafo justo ahí y todos se están cansando de los fotógrafos! ¿Qué equipamiento traes contigo para un lugar como Patagonia? Me han dicho que traigo muchos menos lentes que la mayoría de los fotógrafos. Tengo mi cámara DSLR primaria –Canon 5D Mark III -y dos lentes principales, un gran angular de 17-35 mm y un teleobjetivo de 70-200 mm. Esos dos lentes hacen el 90% de mi trabajo. Añadiré un ojo de pez de 15 mm, un macro de 50 mm y un teleobjetivo de 300 mm para ciertas ocasiones. Pero trato de mantenerme ágil y móvil para subir colinas con la intención de obtener “disparos altos”, trepando por las rocas, y entrando y saliendo de los botes. También llevo una cámara compacta decente, flash, filtro polarizador, baterías extras y tarjetas de memoria. Además, tengo una bolsa plástica de buceo barata para mi cámara compacta. ¿Cuál es tu momento más memorable fotografiando en Patagonia? He tenido tantas oportunidades y situaciones increíbles en Patagonia que no tengo un momento favorito. Hablando seriamente, casi todos los días son sorprendentes. Me levanto y organizo mi equipo, tomo un buen desayuno con nuevos amigos, después navego un río nuevo, pesco, fotografío y tengo un gran almuerzo, y posteriormente una tarde increíble de pesca. Luego, la cena, vino, pisco... Demasiado divertido. Soy el hombre más afortunado del mundo. ¿Pescaste muchos peces en Patagonia? Sí. La pesca en Patagonia es fantástica, si es que no uno de los mejores lugares del planeta. He tenido unos técnicos “match the hatch” de pesca con mosca seca con 6X tippet en Argentina en un día, también he atrapado arco iris monstruosas en el lago Jurassic. He pescado grandes arco iris en el lago Yelcho con patrones de libélula secos en la mañana y he pescado grandes marrones por la tarde en el río Yelcho. Mi día favorito lo pasé en el río San Pedro en Chile, el río más hermoso que he visto en el mundo.

Patagon Journal



Pablo Valenzuela Vaillant Minimalist photography | Fotografia minimalista

Pure Patagonia

Pura Patagonia

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Patagon Journal


Photographic Issue Especial fotográfico

Pablo Valenzuela Vaillant

With eight photography books published, his most recent book about Patagonia released in October. Con ocho libros de fotografía publicados, su más reciente libro sobre la Patagonia fue lanzado en octubre pasado. www.pablovalenzuela.cl

Patagon Journal

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photo essay <fotoreportaje>

Previous Page / Página anterior: Patagonian steppe Estepa Patagónica. Above / Arriba: Patagonian steppe Estepa Patagónica. Right / Derecha: Lago Nordenskjold

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Patagon Journal


Photographic Issue

Above / Arriba: Cuernos del Paine. Below / Debajo: Puyhuapi

Especial fotográfico


Interview | Entrevista: Pablo Valenzuela Above / Arriba: Patagonian steppe Estepa Patagónica.

Why did you decide to make photography your career? I’ve always been attracted to traveling, hiking and climbing. Having contact with the mountains awoke in me a deep love for nature and the need to convey that sentiment. So, after I graduated from engineering school, I wanted to dedicate myself to what I’m most passionate about: photographing Chile and, in that way, contributing to the appreciation, care and conservation of our heritage. What do you feature in your new book about Patagonia, and why does this region inspire you? Patagonia has been a great source of inspiration for me, not only for its pristine landscapes but also for the imprint that man

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Patagon Journal

has left on these lands. As in my previous work, with this book I intend to portray and show the great value of the natural and cultural heritage of southern Chile. The photos in your essay in this edition are minimalist. What do you look for when you do this kind of photography? Any creative process requires motivation and not losing your sense of wonder. This search concerns not just the search for new places but to look at things from a different perspective, with new eyes – at both the known and yet-to-be-known places. That’s why I try not to portray landscapes from a documentary-style point-of-view. In that regard, Patagonia, with all its lines, lights and textures is tremendously inspiring. It is the minimalist Patagonia at its best.


¿Por qué decidiste dedicarte a la fotografía como tu carrera profesional? Siempre me atrajo viajar, caminar y subir cerros. El contacto con la montaña despertó en mí un profundo amor por la naturaleza y la necesidad de transmitir estas sensaciones. Por eso, una vez que me titulé de ingeniero, quise dedicarme a lo que más me apasiona, fotografiar Chile y contribuir a la valoración, cuidado y conservación de nuestro patrimonio. ¿Qué destacas en tu nuevo libro sobre Patagonia y por qué esta región te inspira tanto? Patagonia ha sido una gran fuente de inspiración, no sólo por sus paisajes intocados, sino también por la huella que el hombre ha dejado en estas tierras. Al igual

que en mis trabajos anteriores, con este libro pretendo retratar y poner en valor el patrimonio natural y cultural del extremo sur de Chile. Las fotos de tu ensayo en esta edición son de estilo minimalista. ¿Qué buscas cuando haces este tipo de fotografías? Todo proceso creativo requiere de una motivación y de no perder la capacidad de asombro. Esta búsqueda no es de nuevos lugares, sino de mirar en forma distinta -con nuevos ojos - los ya conocidos e, incluso, los por conocer. Por eso cada vez me alejo de retratar paisajes naturales desde una mirada documental. En este sentido, Patagonia, con sus líneas, luces y texturas, es tremendamente inspiradora. La Patagonia minimalista en su mayor expresión.

Patagon Journal

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Above / Arriba: Ice at Seno Ainsworth. Hielos Seno Ainsworth.



photo essay <fotoreportaje>

Left / Izquierda: Paine Grande.


Above / Arriba: Estrecho de Magallanes. Left / Izquierda: Torres del Paine. Above right / Arriba derecha: Quelat National Park. Parque Nacional Quelat

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Patagon Journal


What for you is a great photo? The most important thing is the point-of-view and the moment. A great photograph is one that manages to convey something, a photo that moves you. It’s a photo that captures a reality given by the space and an exact time, from a personal perspective, without falling into obviousness. A great photo is that which is achieved with that individual perspective, and not with the use of technical effects that do nothing but remove the magic of that moment. How do you prepare for doing photography in Patagonia? What gear do you bring with you? I always go there informed about my destination and with a clear objective, which in turn affects the

equipment I carry. As in Patagonia the weather is very unstable, one must always be prepared for wind, cold and rain. While I always prioritize taking very good photographic equipment, in certain conditions I have to reduce my gear due to space limitations. What is your most memorable moment with a camera in Patagonia? I've had plenty of great experiences and an enormous satisfaction in getting to know and doing photography in this wonderful region.There is however a memorable trip that I still remember; it was when I first went hitchhiking in Torres del Paine, over thirty years ago. I came away forever fascinated with the beauty of the lands at the end of the world.

Patagon Journal

¿Qué es para ti es una gran foto? Lo más importante es la mirada y el instante. Una gran foto es aquella que logra transmitir algo, aquella que conmueve. Una foto que dé cuenta de una realidad dada por el espacio y el instante, desde una perspectiva personal, lejana a la obviedad. Una foto que se logra con la mirada, no con los efectismos técnicos que no hacen otra cosa que quitar la magia de ese instante. ¿Cómo te preparas para fotografiar en Patagonia? ¿Qué equipo llevas? Siempre voy muy informado y con un objetivo claro, lo que condiciona el equipo que debo

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llevar. Como en Patagonia el clima es muy cambiante, siempre hay que ir bien preparado par el viento, el frío y la lluvia. Aún cuando priorizo llevar un muy buen equipo fotográfico, en ciertas condiciones debo reducirlo por limitaciones de espacio. ¿Cuál es tu experiencia única y más memorable con una cámara en Patagonia? He tenido grandes experiencias y una enorme satisfacción de conocer y retratar este terreno maravilloso. Como un viaje memorable recuerdo la primera vez que fui a dedo a Torres del Paine, hace más de treinta años. Quedé fascinado con la belleza del fin del mundo.


Bridget Besaw Environmental photography | Fotografia medioambiental

A region at risk

Una región en riesgo

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Patagon Journal


Photographic Issue Especial fotográfico Juan Jose Soto playing in the icy glacial waters of Lake O'Higgins near the Pascua River. This place would have been flooded if the dams had proceeded. Juan José Soto jugando en las gélidas aguas glaciares del lago O´Higgins cerca del río Pascua. Habría sido inundado si las represas se hubieran concretado.

Bridget Besaw

Environmental documentarian through both photos and video for diverse publications and institutions. Documentalista medioambiental tanto a través de fotos como videos para diversas publicaciones e instituciones. www.bridgetbesaw.com

Patagon Journal

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photo essay <fotoreportaje>

Above / Arriba: Cecilio Olivares at his home in Cochrane, Chile. Olivares was a passionate activist against the proposed dams on the Baker River. Cecilio Olivares en su casa en Cochrane, Chile. Olivares era un apasionado activista que luchó contra las represas proyectadas en el río Baker. Augusto Hernandez collects drift wood near Caleta Tortel, Chile. Many in Aysén feared the dams would drastically change their way of life. Augusto Hernández recoge madera dejada por la corriente cerca de Caleta Tortel, Chile. Muchos en Aysén temían que las represas llegaran a cambiar drásticamente su forma de vida.


Erasmo Betancur herding sheep and cattle in the new Patagonia National Park. Erasmo Betancur arreando ganado ovino y vacuno en el nuevo Parque Nacional Patagonia.

Interview | Entrevista: Bridget Besaw What got you interested in environmental photography? I’ve been an environmental activist since I was a kid. Add to this a childhood spent mostly outdoors and an early love of photography and voila, the ingredients for an environmental photographer! While my style and subject matter has adapted to my varied outdoor and environmental passions over the years, I still make pictures with the same intention to evoke emotion and to heighten awareness. What environmental issues have you documented in Patagonia? I’m lucky to have photographed several issues Patagonia has faced in recent years— from

my first trip to the region for The Nature Conservancy to cover an adaptive grazing practices project they were nurturing on Tecka Ranch in Argentina, to a project with the International League of Conservation Photographers for the Sin Represas campaign, to a long-term project for Patagonia Sur, where I documented their work in reforestation, eco-tourism and marine research. Patagonia is one of those mysterious places for a lot of people. I think somewhere in all of our hearts we are comforted to know there are big, wild, untouched places out there. But like so many other remote places on the planet, Patagonia is a changing landscape.

Patagon Journal

¿Qué fue lo que te interesó en la fotografía medioambiental? He sido una activista ambiental desde que era niña. Sumado a esto tuve una infancia que transcurrió mayormente al aire libre y tuve un temprano amor por la fotografía ¡esos son los ingredientes para un fotógrafo medioambiental! Si bien mi estilo y las temáticas se han adaptado a mis múltiples pasiones al aire libre y medioambientales a través de los años, todavía hago fotos con la misma intención para evocar emoción y aumentar el nivel de conciencia. ¿Qué problemática medioambiental has documentado en Patagonia?

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Tengo la suerte de haber fotografiado muchas problemáticas que Patagonia está enfrentando en este momento, desde mi primer viaje a la región para The Nature Conservancy para cubrir un proyecto adaptativo de prácticas de pastoreo que estaban realizando en Tecka Ranch en Argentina, un proyecto con la Liga Internacional de Fotógrafos de Conservación para la campaña Sin Represas, hasta un proyecto a largo plazo para Patagonia Sur, donde documenté su trabajo en reforestación, ecoturismo e investigación marina. Patagonia es uno de esos lugares misteriosos para muchas personas. Creo que en alguna parte de todos nuestros corazones nos consuela saber que


Valle California Gaucho Javier Vera takes a mate rest while shoeing horses in the campo. El gaucho del Valle California, Javier Vera, toma mate y un descanso mientras trabaja herrando caballos en el campo.

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Patagon Journal


Right / Derecha: Gaucho Javier Vera on horseback looking down at Valle California. Gaucho Javier Vera a caballo en el Valle California.

Patagon Journal

Your photos often show the human side of environmental problems. Most of the images in my essay in Patagon Journal represent the culture of Patagonia as it exists within the landscape. In my work I try to show the human relationship to nature, and in Patagonia that relationship is alive and well —and perhaps closer than in many other places in the world. It has always seemed to me that the natural elements were simply a second skin to most Patago-

nians. So I’ve tried to depict this comfort in my images. From the child who joyfully played in the glacial waters of Lake O’Higgins, to the young gaucho taking a mate break by the fire in between shoeing horses in Valle California, to the scientist wading out in Melimoyu Bay as the tide came in. And I’ve included the beautiful face of Sin Represas activist Cecilio Olivares as a reminder that we must all get on board with protecting the planet that sustains us. Photographing Olivares was

hay grandes, salvajes y vírgenes lugares por ahí. Pero como muchas otras áreas remotas en el planeta, Patagonia es un paisaje cambiante.

cerca que en muchos otros lugares del planeta. Siempre me ha parecido que los elementos naturales eran simplemente una segunda piel para la mayoría de los patagones. Así que he tratado de describir esto en mis imágenes. Desde el niño que jugaba alegremente en las glaciares aguas del río Pascua, el joven gaucho tomando un descanso con mate junto al fuego entre caballos herrados en Valle California, hasta el científico vadeando la bahía Melimoyu mientras ingresa la marea. Y he incluido la hermosa cara del activista de

Tus fotos suelen mostrar el lado humano de los problemas medioambientales. La mayor parte de las imágenes de mi ensayo, en Patagon Journal, representan para mí la cultura de la Patagonia tal como existe dentro del paisaje. En mi trabajo trato de mostrar la relación humana con la naturaleza, y en Patagonia esa relación está viva, quizá más

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photo essay <fotoreportaje>

Above / Arriba: A gaucho herding sheep on Estancia Tecka in Argentina, they are working with The Nature Conservancy to adapt their herding practices to protect the native grasslands.

Bellow / Debajo: Lago O’Higgins, the headwaters of Rio Pascua, one of the rivers targeted by the HidroAysen dams project.

Un gaucho pastorea ovejas en la Estancia Tecka en Argentina, trabajan en conjunto con The Nature Conservancy para adaptar sus prácticas ganaderas para proteger los pastizales nativos.

Lago O’Higgins, cerca del río Pascua, uno de los ríos amenazados por el proyecto de represas Hidroaysén.

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Patagon Journal


Gauchos with branding prods in fire at Estancia Tecka. Gauchos con marca de hierro al rojo vivo en la Estancia Tecka.

A marine researcher working in the shoreland area of Melimoyu Bay. Un investigador marino trabajando en la costa de la bahía Melimoyu.


Photographic Issue

Especial fotográfico

Eliana Casanova and her daughter Karen hold hands as they ride in Valle Chacabuco Eliana Casanova y su hija Karen se toman de la mano mientras cabalgan en el Valle Chacabuco.

an honor as he was one of those wise, passionate people inspiring and guiding us in the right direction. How do you prepare for photographing in Patagonia? What gear do you bring? I bring about 3 camera bodies, (Canon and Leica), and an assortment of Leica and Zeiss lenses. I bring a tripod or 2 for timelapse and night scenes. And lots of lens cloths for all the rain and dust that inevitably covers the surface of everything. What is your most memorable moment in Patagonia with a camera?

I remember photographing Beta, the gaucho working with the Tompkins’ in the new Patagonia Park several years ago. As I was following he and his family on horseback, his wife and daughter, who were riding side-by-side, just reached out and held hands for a few moments as they rode along. It was a tender human exchange set amidst a wild, overwhelming landscape. I remember thinking that we’d have an easier time protecting big wild places if more young people had the chance to get comfortable in nature the way that young girl was with her mom just riding along into the mountains.

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Sin Represas, Cecilio Olivares, como un recordatorio de que todos tenemos que luchar por la protección del planeta. Cecilio era una de esas sabias y apasionadas personas que nos guiarán hacia una senda más sostenible. ¿Cómo te preparas para fotografiar en Patagonia? ¿Qué equipo traes? Traigo unos 3 cuerpos de cámara (Canon y Leica), y un surtido de lentes Leica y Zeiss. Traigo uno o dos trípodes para timelapse y escenas nocturnas. Y un montón de protectores de lentes para la lluvia y el polvo que inevitablemente cubre la superficie de todo.

Patagon Journal

¿Cuál es tu momento más memorable con una cámara en Patagonia? Me recuerdo fotografiando a Beta, un gaucho que trabajaba con los Tompkins en el nuevo Parque Patagonia hace muchos años atrás. En un momento, mientras lo seguía a él y su familia a caballo, su esposa y su hija, que montaban pegadas, juntaron sus manos y las sostuvieron por un breve momento mientras cabalgaban. Recuerdo que pensé que nos iría mejor protegiendo lugares grandes y salvajes si más jóvenes tuvieran la oportunidad de sentirse cómodos en la naturaleza de la forma en que la niña estaba con su madre simplemente cabalgando junto a las montañas.



Augusto Domínguez Nature photography | Fotografia de naturaleza

Wild Patagonia Patagonia

Torres del Paine.

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Patagon Journal


Photographic Issue Especial fotográfico

Salvaje

Augusto Domínguez

A photographer and expedition leader with five photo books and an annual nature calendar among his credits. Fotógrafo y líder de expediciones, cuenta con cinco libros de fotos y un calendario anual de naturaleza entre sus créditos. www.diapostock.cl

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Interview | Entrevista: Augusto Domínguez What are your favorite places to photograph in Patagonia and why? It’s difficult to choose just one place. Personally, I have a passion for the area between Alerce Andino National Park and Lake General Carrera. Yes, that is an extensive area, which features the Futaleufú Valley, an ample section of the Carretera Austral, the Cerro Castillo Reserve, and the former Chacabuco ranch, just to name a few places. I must also mention the Conguillío and Huerquehue national parks in the Araucanía region of Chile. How do you prepare for doing photography in Patagonia? What gear do you bring? The truth is that the gear I bring with me to Patagonia is basically the same as for the Araucanía or Altiplano regions; the difference is that in Patagonia there is a greater chance of rain than in the northern part of the country, so one needs to plan ahead for that. What is the most memorable experience you have had in Patagonia with a camera? Maybe one of the most memorable experiences, and which happened many years ago, was an adventure I was doing alone – my first full circuit around the Paine massif, or the “O" as they call it nowadays. It was raining quite heavily, and I had a lot of weight on me: cameras, lenses, a tripod, a tent, food, etc. I got some great pictures in 35 mm slides. To this day, I'm still posting some photos from that trip. Whe re do yo u ge t y o ur i ns p i ra t i o n from for your Patagonia works? I find myself inspired by the wilderness. I love to visit natural areas where there is little to no human intervention. What does it mean for you to take photos in this region? Whenever I take photographs in Patagonia, I do it while thinking that we should preserve this untouched territory, with wild rivers, stunning glaciers, and undiscovered places. For me, traveling to Patagonia is like traveling to a privileged natural place with countless special attributes unlike any other place in the world. For example, you can do a wonderful hike along a trail in a national park and not run into a single tourist. This has incalculable value.

¿Dónde están tus lugares favoritos para fotografiar en Patagonia y por qué? Es difícil quedarse con un lugar solamente. A mí personalmente me apasiona el tramo comprendido entre el Parque Nacional Alerce Andino, incluido éste, y el lago General Carrera. Sí, es una zona extensa donde destaca el valle de Futaleufú, un amplio sector de la Carretera Austral, la Reserva Nacional Cerro Castillo y la ex hacienda Chacabuco, por nombrar algunos lugares. No puedo dejar de mencionar el Parque Nacional Conguillío y el Parque Nacional Huerquehue, ambos en la región de la Araucanía. ¿Cómo te preparas para fotografiar en la Patagonia? ¿Qué equipo llevas? La verdad es que el equipo que llevo para Patagonia es básicamente el mismo que para la región de la Araucanía o el altiplano; la diferencia es que en Patagonia hay más posibilidades de lluvia que en el norte, por lo que uno debe prever eso. ¿Cuál es tu experiencia única y más memorable con una cámara en Patagonia? Quizá una de las más memorables y que sucedió muchos años atrás, fue una aventura en solitario; el primer circuito completo al macizo del Paine o la “O”, como la llaman ahora. Me tocó bastante lluvia, iba cargando mucho peso, con cámaras, lentes, trípode, carpa, comida, etc. Conseguí fotos buenísimas en diapositivas de 35 mm. Hasta el día de hoy sigo publicando algunas fotos de ese viaje. ¿En qué te inspiras para realizar tu trabajo fotográfico en Patagonia? Me inspiro en la naturaleza virgen. Me encanta recorrer lugares donde poco y nada se nota la mano del hombre. ¿Qué sentido tiene para ti fotografiar en este territorio? Siempre que fotografío en Patagonia lo hago pensando en que deberíamos preservar este territorio intocado, con ríos salvajes, glaciares impresionantes y lugares aún por descubrir. Para mí, viajar a Patagonia de alguna manera es viajar a un territorio privilegiado por la naturaleza y con características que lo hacen único. Puedes hacer una caminata maravillosa por el sendero de un parque nacional y no toparte con ningún turista. Eso tiene un valor incalculable.

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Photographic Issue

Especial fotográfico

Waterfall on the Carretera Austral, near Rio Ibanez. Cascada en la Carretera Austral, cerca de Río Ibáñez.

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Clockwise / En el sentido de las agujas del reloj: A Chilean flicker, un pitío. Torres del Paine. A forest combed by the winds. Bosque "peinado por los vientos". Cabo Froward. A colony of King cormorants. Colonia de cormoranes imperial Humpback whale, ballena jorobada. Isla Carlos III. Sei whale, ballena sei. Laguna San Rafael.

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Patagon Journal

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Special photography

Especial fotografía Clockwise / En el sentido de las agujas del reloj: Lenga. Reserva Nacional Cerro Castillo. Southern caracara, traro. Torres del Paine. Martín Pescador. Fiordo Quitralco. Guanaco. Torres del Paine.

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photo essay <fotoreportaje>

Above / Arriba: Glaciar Grey. Torres del Paine. Right / Derecha: A sea gull on the ice, gaviota sobre témpano. Laguna San Rafael.

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Virgin Stone:

Journey to El Hermano Piedra virgen: Viaje hacia El Hermano By NIELS TIETZE Photos by LIBBY SAUTER and NIELS TIETZE

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mountainering

<montañismo>

T

he Holy Grail of rock climbing, the Kaaba to be worshiped, is a spanking new route on an untouched, beautiful, difficult mountain. It’s sort of like a mountaineer’s version of winning the World Cup. With resources far beyond its famed copper, Chile is one of the last places in the world where there is still an abundance of Virgin Stone. The well-known Cochamo Valley in Chilean Patagonia just tickles the iceberg at what awaits those climbers and hikers willing to search further along. Doug Tompkins knows this. The renowned and controversial conservationist holds many of these places in his back pocket after bringing acre upon acre of Patagonian wildlands under protection. Flying around in his single engine Cessna he has near limitless access to the remote lands otherwise guarded by a fortress of bamboo, mud and sanguijelas. Perhaps in a gesture to the mountaineer’s version of the creation myth, he gifted a photo of such a monolith to our friend, the late great journalist Mike Ybarra, with the implied message, “Go South, Young Man.”

E

l Santo Grial de la escalada en roca, la Kaaba a donde dirigir las plegarias, sería una hermosa nueva ruta en una gigantesca y difícil montaña virgen. Para un montañero sería algo así como ganar la Copa del Mundo. Con recursos naturales mucho más allá de su famoso cobre, Chile es uno de los últimos lugares en el mundo donde todavía hay abundancia de Piedra Virgen. El conocido Valle de Cochamó en la Patagonia chilena es sólo un reflejo del enorme tesoro que les espera a aquellos escaladores y excursionistas que están dispuestos a buscar más allá. Doug Tompkins bien sabe esto. Poniendo bajo protección las tierras salvajes de la Patagonia hectárea tras hectárea, el renombrado y controversial conservacionista se ha echado al bolsillo buena parte de este tesoro. Volando en su Cessna monomotor tiene acceso casi ilimitado a las remotas tierras que son custodiadas por una fortaleza de quila –una especie local similar al bambú-, barro y sanguijuelas. Quizá en un gesto que podría ser la versión montañera del mito de la creación, le regaló la foto de un secreto monolito a nuestro amigo, el fallecido y gran periodista Mike Ybarra, con el mensaje implícito, “Ve hacia el sur, joven hombre”.

Clouds envelope El Hermano in the early morning. Nubes rodean El Hermano en la madrugada.


Words like expedition, explorer, voyager, adventurer are a thousand times more likely to refer to pavement princess elite SUVs and trucks, garage cradled and waxed, than their honest original namesake. And although we are surrounded by an emasculated and dull world of car euphemisms, many climbers and the curious venture forth, taking a bite of the apple - still hungry for the unknown and uncertain. When an offer and an image of that foreboding granite face gave its Mona Lisa smile, I knew there was little power in me to resist. Being blessed with a strong back and weak mind, I was selected to join a team that had been derailed by tragedy for the past three years. Two of the original members had died high in the mountains and the final member had suffered a 90 degree angulated tib-fib fracture to narrowly avoid the mountain reaper. Orphans Preferred. Death Likely. I don’t remember these ever-present warning signs when I began this life of mine. Superstitions ignored. Eye sockets wrung dry. It was time for better luck and hopefully redemption. It would take some work.

Expedition to El Hermano

W

e dubbed our destination “El Hermano,” as it looks almost like a brother to El Capitan in Yosemite National Park. My preparations for the rock climbing expedition to El Hermano, which is near Rio Correntoso in Chile’s Palena province, involved purchasing: a full yellow fisherman’s suit, bamboo resistant rubbered trompabout boots, an umbrella, heavy duty garbage bags, an army of dry bags, 16 pairs of socks, a full anti-footrot kit, emergency whiskey, and of course two full Shakespearian plays. With a moody Hamlet holding my hand, I sauntered into the soggy doggy nightmare that northern Patagonia climbing had promised to be. Yes, you guessed it. We saw exactly three drops. Distance is a funny thing when moving through virginal land. Beyond the chipper chimes of my two lovely teammates, Libby Sauter and Althea Rogers, I also started to hear other companions in my head. My favorite Johnnies: Cash and Lennon. They had started whispering their one liners in my ear as the days went by: “Sweat baby sweat, only two more swings” and “Booooyy, You’re gonna carry that load, carry that load…..”. These are the parts that most magazine pictures miss. The solitude of deep rainforest bringing forth the voices from within own mind. One more machete stroke for my carpal tunnel clenched hand. One more narrowly avoided impalement on bamboo turned Vietcong spikes. Miles went by. Endless bamboo walls converted to vertical incisors marked our slow progress up the vegetation rich valley where our granite grail lay. Ten days have passed since we were left at the mouth of Rio Correntoso by our boatman Jaime. Glaciers eventually reach the sea, raindrops fall to the earth and we inevitably opened those bamboo curtains and gazed on the granite face of our divine. A familiar 4,500-foot tall white cliff that matched the photos we’d stared at for years. Whoot, whoot, but, jubilation aside, now what? “What the hell am I doing here?,” that was the question I asked my self three days later while being needled by biting tabanos, long out of sight of my climbing partner, and digging my fingers deeply into the moss bed that occupied every conceivable part of climbable crack on the rock face. Annoyance was followed by fear as I tried to excavate pseudo solid steps out of the now vertical slime that

"When an offer and an image of that foreboding granite face gave its Mona Lisa smile, I knew there was little power in me to resist” "Cuando recibí la oferta con esa imagen que presagiaba ser la pared de granito que hizo sonreír a la Mona Lisa, supe inmediatamente que no tendría la voluntad para resistirme"

Hoy en día, palabras como explorador, viajero, trotamundos y aventurero probablemente se refieren más a algún monstruoso vehículo todoterreno “urbano” de elite, encerado y reluciente, que a su original y honesto homónimo. Y a pesar de que estamos rodeados por un mundo lleno de eufemismos y castrado a la medida del consumismo, muchos escaladores y curiosos sedientos de aventura, tras morder la manzana, aún tienen hambre por lo desconocido e incierto. Cuando recibí la oferta con esa imagen que presagiaba ser la pared de granito que hizo sonreír a la Mona Lisa, supe inmediatamente que no tendría la voluntad para resistirme. Bendecido con una espalda fuerte y una mente débil, fui seleccionado para unirme a un equipo que en los últimos tres años había sido desarticulado por la tragedia. Dos de los miembros originales habían fallecido en lo alto de las montañas y el último integrante había sufrido una fractura de 90 grados de tibia y peroné evitando por poco al verdugo de la montaña. “De preferencia huérfanos, muerte probable”. No recuerdo estas omnipresentes señales de advertencia cuando me recluté en esta vida. Ignorando las supersticiones y tras llorar hasta la última lágrima, ya era hora de tener mejor suerte y una esperanza de redención. Pero tendríamos que trabajar duro.

Expedición hacia El Hermano

N

osotros llamamos nuestro destino como “El Hermano”, debido a que pareciera ser el familiar sureño de El Capitán del Parque Nacional Yosemite, en Estados Unidos. Mis preparativos para esta expedición de escalada en roca en las cercanías del río Correntoso en la provincia de Palena, Chile, involucraron adquirir un traje de goma amarillo, botas de goma resistentes a la quila, un paraguas, bolsas de basura altamente resistentes, un ejército de bolsas secas, 16 pares de calcetines, un kit completo para evitar necrosis en el pie, un whiskey de emergencia y, por supuesto, dos obras completas de Shakespeare. Con un Hamlet caprichoso sosteniendo mi mano, me dirigí hacia la pesadilla empapada que la escalada, en la Patagonia norte, prometía ser. Sí, adivinaron. Vimos exactamente tres gotas.

It took 10 days to get from the Rio Correntoso to El Hermano. Se necesitaron 10 días para llegar desde el Río Correntoso a El Hermano. Climbing a river of green on a section of El Hermano. Escalando en un río de verde en esta sección de El Hermano.

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called itself vegetation. Hammered pitons mockingly jumped out of their placements. Little green rivulets trickled down my fingers and covered the rubber of my shoes guaranteeing every inch I gained was fraught with sphincter puckering concern. The day ends. We’re nowhere near where we wanted to be. So, like the brave mountain climbers we are, we courageously returned to camp. Brooding on the honest difficulty of what we were up against meant we opened up the emergency whiskey. Then the weather report came in via satellite phone. Three Days. That’s all we had before the Noah’s never ending spigot would baptize our mission out of existence. Predictions of 40 milliliters of rain were followed by 30 were followed by 20 for the next few weeks. Gulp. That’s like a death sentence to this trip, and certainly a dangerous amount of rain to be stuck in without an ark. Our tent was secure, but surely would not float. Weary yet determined, we returned after only a nights rest to our high point and pushed a few rope lengths further, taking turns on fear gardening our way toward the promised land of the cumbre. A ledge was found that night, and we settled down for what is optimistically called sloped napping. The next day a heavy mist rolled in but gradually, the jungle gave up its hold on the cliff face and we found ourselves legitimately climbing on rock. The ghostly white and bullet hard stone of our Palena peak whispered to us the story of what it must have been like some 50 or 60 years ago at our usual favorite climbs at Yosemite Park in California.

The three climbers, who regularly climb in Yosemite National Park, named the mountain El Hermano because it reminds them of El Capitan in Yosemite. Los tres alpinistas, que escalan regularmente en el Parque Nacional Yosemite de California, nombraron la montaña El Hermano porque les recuerda a El Capitán en Yosemite.

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mountainering

<montañismo>

La distancia es una cosa curiosa cuando uno se mueve a través de selva virgen. Más allá de los alegres cuchicheos de mis dos encantadoras compañeras de equipo, Libby Sauter y Althea Rogers, también comencé a oír otros compañeros en mi cabeza. Mis “Johneses” favoritos: Johnny Cash y John Lennon. Habían comenzado a susurrar sus líneas en mi oído mientras los días pasaban: “Sweat baby sweat, only two more swings” (suda baby suda, sólo dos balanceos más) y “Booooyy, You’re gonna carry that load, carry that load...” (Chico, vas a cargar esa carga, cargar esa carga). Estas son las partes que faltan en las fotos de la mayoría de las revistas. La profunda soledad de la selva trae voces desde el interior de tu propia mente. Uno tras otro mi mano asestaba golpes de machete que retumban en mi adolorido túnel carpiano. Uno se salva por poco del empalamiento en una quila transformada en trampas del Vietcong. Los kilómetros van quedando atrás. Infinitas paredes de quila convertidas en incisivos verticales marcan nuestro lento progreso por la densa vegetación del valle donde yace nuestro grial granítico. Diez días han pasado desde que fuimos dejados en la boca del río Correntoso por Jaime, nuestro barquero. Así como los glaciares eventualmente llegan hasta el mar y las gotas de lluvia a la tierra, inevitablemente las cortinas de quila se abrieron ante nosotros para revelarnos el granito de nuestra devoción. Un blanco acantilado de unos 1.400 metros altura que nos era familiar gracias a las fotos que tanto habíamos mirado durante los últimos años. ¡Hurra! ¡Hurra!, pero dejando la celebración de lado, ¿ahora qué? ¿Qué diablos estoy haciendo aquí? Esa fue la pregunta que me hice tres días más tarde mientras era picado por los tábanos durante los largos instantes que permanecí fuera de la vista de mi cordada,

Patagon Journal

“What the hell am I doing here?,” that was the question I asked my self three days later while being needled by biting tabanos” "¿Qué diablos estoy haciendo aquí? Esa fue la pregunta que me hice tres días más tarde mientras era picado por los tábanos"

al tiempo que excavaba con mis dedos profundamente en la capa de musgo que cubría todos los rincones escalables de las fisuras que surcaban la pared. La rabia daba paso al miedo mientras trataba de hacer escalones cuasi sólidos en la baba barrosa y vertical que se hacía llamar vegetación. Clavos metidos a martillazos burlonamente saltaban fuera de las fisuras. Pequeños riachuelos verdes corrían por mis dedos y cubrían la goma de mis zapatos garantizando que cada centímetro se ganara a costa de sudor frío y esfínteres apretados. El día llega a su fin y todavía estamos lejos de donde queríamos estar. Pero como los valientes escaladores de montaña que somos, con coraje regresamos al campamento. Tras meditar sobre la enorme dificultad a la que nos enfrentábamos, no nos quedó más remedio que abrir el whisky de emergencia. Luego, el informe del tiempo llegó vía

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mountainering <montañismo>

"The ghostly white and bullet hard stone of our Palena peak whispered to us the story of what it must have been like some 50 or 60 years ago at our usual favorite climbs at Yosemite Park in California”

"De blanco fantasmal y dura como el acero, la roca de nuestra cumbre de Palena nos susurraba una historia de cómo deben haber sido nuestras rutas favoritas en Yosemite hace unos 50 o 60 años”

There is a truth few climbers like to admit. That is, climbing is a bit slow and boring. But rather unlike a politician’s speech, we eventually arrived at the point. We reached the summit. Stretching out beyond sight are the green embraced glacier ridges of Patagonian granite. Tucked under the summit rocks we find ash from the Chaiten volcano, whose eruption six years ago nearly destroyed its namesake town. The view of Corcovado volcano erupts through the thick clouds blanketing the waters to our west. It takes two days to return down by rappelling, but beyond the few drops of worry that came in the form of drizzling rain on the second day, we pull it off without a hitch. Terra Firma. Safety. Success. Exhaustion. Still, it wasn’t the triumph of a first ascent or any feeling of laying the dead to rest that has stuck with me as I look back on it all. Far more so, it is the mystery of walking in a land rarely touched by humans. The same sensation of treading on hollowed ground that is becoming more and more rare in this world.

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teléfono satelital. Tres días. Eso es todo lo que teníamos antes de que el diluvio universal de Noé bautizara nuestra misión para su muerte. Las predicciones afirmaban que 40 milímetros de lluvia serían seguidos por 30 más y luego otros 20 durante las próximas semanas. Un trago amargo, ya que eso era una sentencia mortal para este viaje y, ciertamente, una peligrosa cantidad de precipitaciones a las que enfrentarse sin un arca. Nuestra carpa era segura, pero probablemente no flotaría. Cansados, pero decididos, volvimos después de sólo una noche de descanso hasta el punto más alto que habíamos alcanzado y forzamos un par de largos de cuerda más, turnándonos en la jardinería del terror rumbo hacia la tierra prometida de la cumbre. Encontramos una repisa esa noche y nos instalamos para lo que con optimismo se suele llamar “siesta en pendiente”. Al día siguiente, una pesada niebla comenzó a avanzar, pero gradualmente la selva abandonó su dominio sobre la pared y nos encontramos legítimamente escalando en roca. De blanco fantasmal y dura como el acero, la roca de nuestra cumbre de Palena nos susurraba una historia de cómo deben haber sido nuestras rutas favoritas en Yosemite hace unos 50 o 60 años. Hay una verdad que a pocos escaladores les gusta admitir: la escalada es un poco lenta y aburrida. Pero a diferencia de lo que ocurre en un discurso político, nosotros eventualmente llegamos a la meta. Alcanzamos la cumbre. Más allá de lo que alcanza la vista, las aristas glaciares de granito patagónico se extendían cuajadas de verde. Escondida bajo las rocas de la cumbre encontramos ceniza del volcán Chaitén, cuya erupción hace seis años casi destruyó la ciudad homónima. La imagen del volcán Corcovado brota a través de las gruesas nubes que cubren las aguas hacia el oeste. Se necesitaron dos días rapeleando para regresar a la base, pero más allá de las pocas gotas de preocupación que llegaron en forma de llovizna en el segundo día, logramos descender sin ningún contratiempo. Tierra firme. Seguridad. Éxito. Agotamiento. Sin embargo, no fue la sensación del triunfo de una primera ascensión o la de una misión cumplida la que se quedó conmigo al mirar atrás. Mucho más intensamente permaneció el misterio de caminar en una tierra virgen, rara vez tocada por humanos. La misma sensación de abrir senda en un territorio desconocido que se ha vuelto cada vez más escasa en este mundo.

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destinations <destinos>

Into the wild Patagonia Park | Hacia el salvaje Parque Patagonia

Packrafting

on the

en el río

Chacabuco

Text and photos by TYLER WILLIAMS

O

ut of our boats, we hacked through brush to a rocky point on the rim of the gorge, standing atop a wall of black cliffs that rose 100-meters above the plain. Below us, the river snaked in, disappearing, like a serpent crawling back into its hole. Looking into the cleft at an S-turn rapid, Lisa suggested we deflate our pack rafts and move on foot, but I thought it looked "easy enough." She acquiesced, and we ran the rapid. I flipped. As my pack, tied on the front of the boat, rose in slow motion before me, I tried to high-side but instead fell out, into a seam of water away from the main current. Bobbing about, I could only watch as my boat floated away downstream. Before leaving the United States for our trip, I’d learned that the Chacabuco River winds its way through Doug and Kris Tompkins' latest preservation effort, ambitiously titled "Patagonia National Park.” Patagonia’s blue water rivers like the Baker, Futaleufu, and Palena attract paddlers from around the globe. The Chacabuco,

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H

abiendo dejado nuestros botes, nos hicimos camino entre los arbustos hasta llegar a un punto rocoso al borde del desfiladero y encontrar un zigzagueante rápido. Una pared de negros acantilados de unos 100 metros se alza sobre la planicie, y el río se curva, desapareciendo, como una serpiente volviendo a su nido. Lisa sugirió que desinfláramos nuestros packrafts y siguiéramos a pie, pero me pareció que no sería complicado continuar. Ella cedió, y tomamos el rápido. Me volqué. Mientras veía como mi mochila, amarrada al frente del bote, flotaba en cámara lenta frente a mí, traté de equilibrar la balsa. Pero lo único que logré fue caer al agua, lejos de la corriente principal. Flotando, sólo pude ver como mi balsa se alejaba río abajo. Antes de dejar Estados Unidos para comenzar nuestro viaje, descubrí que el río Chacabuco cruza el más reciente esfuerzo de preservación de Doug y Kris Tompkins, ambiciosamente denominado “Parque Nacional Patagonia”. Ríos de agua azul cielo como el Baker,

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As my pack, tied on the front of the boat, rose in slow motion before me, As my pack, tied on the front I tried high of the to boat, rose in slow motion before me, I tried to high As my pack, tied on the front of Asthe my boat, pack,rose tied in onslow the front motion before me, of the boat, rose in slow motion I tried to high before me, I tried to high


however, is something different. Chalky white and shallow with abrupt canyons of sharp rock, this is not high quality whitewater. It held neither glaciers, nor big waterfalls, or misty rain forests – so what was the big deal? Yet, as we drove down a road trailing a lonely cloud of dust into the Chacabuco Valley, my doubts about the place were put to rest. Old glacial moraines that appear as lumpy black ridges line the valley; mountain peaks tower above. The valley is open grassland painted yellow by the flowers of thorny buckwheat. Driving eastward, herd after herd of guanacos stretched their long necks curiously as we passed. The increasingly less snow-bound peaks revealed stark ridgelines studded with rock towers. Ahead was a gathering of maybe 30 condors, pendulously flapping and circling upward, their long feathers extending like fingers at the end of the wing. Our shuttle driver, Roberto Contreras, looked on curiously while we inflated the tiny pack rafts which had been stuffed in our backpacks for days. Roberto has a keen eye for such innovative craft. Two decades ago, he brought kayaking to this isolated corner of Chile. When Argentine adventurer Marcos Olviday paddled past his hometown of Cochrane on a trans-continental journey in 1996, Roberto begged a kayak lesson. As an ex-gymnast, he took to the sport with vigor and started the Club Nautico Escualo, (The Swimming Sharks) in 1999. During the next decade, Roberto and his wife, Claudia, introduced over one thousand youth from Cochrane and surrounding communities to kayaking. Today, the Escualo

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Kayak Center sits at the edge of town beside the cerulean waters of the Cochrane River. The old shed houses mostly vintage gear but is due for a facelift next season. Few places are more deserving. Roberto helped us lay plans for the neighboring Chacabuco, and drove us to our starting point at Casas Grandes. We crawled into our boats on the banks of the shallow river in a stiff Patagonian wind. The tempest threatened to slow us, but the Chacabuco ran swiftly. So long as we kept our paddles in the water, the river moved us smoothly down the valley. Volcanic badlands and high sparse peaks climbed above. A herd of guanacos spooked at our floating boats. At a bend, we went ashore to eat lunch in the shelter of nirre trees. With a backrest of bunch grass, the warm sunshine threatened to turn the lunch break into an afternoon nap. I was fully awake an hour later, after my unexpected whitewater swim at the first gorge. Stroking and swimming with the aid of my paddle, I caught the runaway boat and tried to right it while kickingoff approaching boulders. As I flipped my boat over and crawled back in, Lisa cleanly ran the rapid, and pointed me to an eddy. Back on shore, I dumped water from my raft as we looked downstream at an unknown horizon that spewed mist. It was a timely recovery. A short portage and a couple small rapids delivered us to the mouth of the first canyon, and an impeccable camp atop a grassy knoll. Sipping red wine in a gentle breeze, we speculated on the river ahead. The first canyon had been indecipherable both on our large scale map and the satellite imagery we viewed beforehand. What other unexpected

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Futaleufú y Palena atraen remeros de todo el mundo. El Chacabuco, por otra parte, es algo completamente diferente. Blanco y poco profundo, está lleno de abruptos cañones con afiladas piedras, no es agua brava de calidad. No veíamos sus grandes atractivos, no tiene glaciares, grandes saltos de agua ni bosque lluvioso. Pero cuando manejamos por un camino de tierra siguiendo una solitaria nube de polvo que nos llevó al valle Chacabuco, todas mis dudas se desvanecieron. El Chacabuco está en la cordillera de los Andes, al final del continente americano en la Patagonia. Cornisas negras y antiguas morrenas glaciares rodean el valle; picos montañosos se alzan sobre él. El camino nos llevó hacia el este entre manadas de guanacos que estiraban sus cuellos con curiosidad al vernos pasar, mientras las cimas cada vez menos nevadas revelaban una cordillera hecha por torreones de piedra. Adelante, planeando lentamente, un inconfundible cóndor. No mucho después vimos una bandada de unos treinta que emprendieron vuelo cuando nos acercamos, con sus largas plumas extendidas como dedos al final de sus alas. Roberto Contreras, nuestro conductor, miraba con curiosidad mientras inflábamos nuestros pequeños packrafts, que llevaban días metidos en las mochilas. Roberto presta especial atención a innovaciones como ésta. Hace dos décadas, él trajo el kayaking a este aislado rincón de Chile. Cuando el aventurero argentino Marcos Olviday remó lejos de su nativo pueblo de Cochrane para embarcarse en un viaje trans-

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continental en 1996, Roberto le suplicó una lección de kayak. Como exgimnasta, se dedicó a este deporte con vigor y comenzó el Club Náutico Escualo en 1999. Durante la siguiente década, Roberto y su esposa enseñaron kayak a más de mil jóvenes de Cochrane y las comunidades aledañas. Hoy el Escualo Kayak Center está en las afueras del pueblo junto a las aguas azul cielo del río Cochrane. Las viejas casetas están llenas de equipo antiguo, pero la próxima temporada estará completamente renovado. Roberto nos ayudó a desarrollar los planes para el Chacabuco, y nos llevó hasta el punto de partida en Casas Grandes. Nos metimos a nuestras balsas en la ribera de este río poco profundo con un duro viento patagónico que amenazaba con disminuir nuestra velocidad, pero el Chacabuco corría rápido. Mientras mantuviéramos nuestros remos en el agua, el río nos movería valle abajo. Terrenos volcánicos y picos altos y distanciados estaban sobre nuestras cabezas. Nuestros botes asustaron a una manada de guanacos que estaba mucho más acostumbrada a los vehículos que pasaban por el camino cercano. En una curva, salimos a tierra para almorzar refugiados bajo los ñirres. Con el acurruco del pasto, el cálido sol amenazaba con convertir el almuerzo en siesta. Pero más tarde estaba completamente despierto luego de mi sorpresiva zambullida en las aguas bravas de la primera garganta. Nadando, y ayudándome de mi remo, logré recuperar el bote y traté de enderezarlo pateando las rocas que se acercaban. Mientras daba vuelta mi bote y lograba entrar en él, Lisa pasó por el primer

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surprises lay ahead? The perfect evening put our trepidations at bay, but we also took solace in our choice of boats. Pack rafts are easy to deflate, excellent for traveling and also ideal for escaping narrow canyons. For actually running serious whitewater in the gorges of the Chacabuco, a kayak would have been the better choice. Yet the focus of this trip, whether paddling or hiking, was to see the future Patagonia National Park. Still, our packs seemed damn heavy. We hoped any unexpected gorges would pass easily, on the water. A short morning float led to the next canyon. This one was expected, with several sharp bends and unrunnable drops. We went into hiking mode, deflated the boats, and started a 3-kilometer walk to the far side. But upon reaching the rim, something was amiss. The canyon below us was straight, and the rapids were none too impressive. This was not the zig-zag gorge we had anticipated. We could have, and should have, stayed with the river! Chalking up our mistake as a "practice portage," we searched for a route back down. A vertical cliff that ran between us and the water forced a downstream march while gazing down longingly at smooth river current. When a game trail opened amidst the buckwheat, we picked our way down in the hoof steps of guanacos. Several bends after relaunching, we were at the real zig-zag gorge, and it was menacing. Cliffs pinched the river into a 5-meterwide gap. A roar echoed from beyond. Exiting the water, we walked up an easy grass slope to peer at the adrenaline maze from above. Away from the river, yellow prairies stretched toward toothed spires of the northern Patagonia Icefield. A ubiquitous wind swept unobstructed across the plain. Sitting on a gravel beach beside our small cooking fire that night, I scanned the map for answers

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to the Chacabuco puzzle. One or two canyons remained, I couldn't be sure. But I was resolved to this: After our unnecessary portage at the second canyon, we were going to stick it out next time, and stay with the river to its end. The next day, we ran two rapids below camp before arriving at a boulder-choked falls. Here, the sharp, irregular rocks forced us to put our inflatables in the packs as we scrambled along shore. Below the first portage came another, and soon we were forced upwards onto a steep scree slope. Downstream, the rapids continued, and portaging looked slow and difficult. Despite any campfire resolutions, we were hiking out. With binoculars, I spotted a route leading through the rimrock far downstream, but Lisa plunged ahead for a nearby break in the capstone. Scrambling up a bluff of compacted dirt and crumbly moraine, she paused at the crux, still in her drysuit, before squirming to the top. Twenty minutes later, we were out of the canyon. There is a kind of liberation when emerging from a gorge; possibilities seem endless compared to the limited options of the canyon depths. Nonetheless, we returned to the river for one final canyon of blissfully mild whitewater. The Carretera Austral bridge passed overhead, signaling the nearby Baker. Its vibrant azure blue surged and swirled, dwarfing the humble dirty green Chacabuco. Days later, we would continue down Chile's biggest river, passing its carpeted mountains and roaring waterfalls and hanging glaciers, to salty seas. Despite all that, walking above the gorges of the Chacabuco defined wild Patagonia to me. A place of subtle hues, austere landscapes, roaming herds and soaring flocks, where long summer days conjure dreams of adventure.

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rápido. De vuelta en la orilla, saqué el agua de mi balsa mientras mirábamos aguas abajo el horizonte desconocido. Me salvé a tiempo. Un breve porteo y un par de pequeños rápidos nos llevaron hasta la boca del primer cañón, y a un campamento perfecto sobre una verde loma. Tomando vino tinto con una agradable brisa, tratamos de adivinar qué nos traería el río. El primer cañón había sido imposible de prever, invisible tanto en nuestro mapa a gran escala como en las imágenes satelitales que vimos con antelación. ¿Qué otras sorpresas nos encontraríamos más adelante? La tarde perfecta alejó nuestras preocupaciones, y también nos consolaba nuestra elección de bote. Los packrafts son fáciles de desinflar, excelentes para viajar e ideales para sortear angostos cañones. No obstante, para enfrentar el agua brava del Chacabuco hubiese sido mejor un kayak. Pero el propósito de este viaje, ya fuera caminando o remando, era poder ver el futuro Parque Nacional Patagonia. De todos modos, como remeros, nuestras mochilas eran muy pesadas. Esperábamos que las gargantas que se avecinaban pasasen con facilidad. Un corto tramo navegado nos llevó al siguiente cañón. Este lo habíamos visto venir, tenía varias curvas cerradas y caídas imposibles. Nos pusimos en modo de caminata, desinflamos los botes y empezamos los 3 kilómetros de camino hacia el otro extremo. Pero al llegar a la orilla algo no estaba bien. El cañón que veíamos abajo era recto y los rápidos nada impresionantes. Esta no era la garganta en zigzag que anticipamos. ¡Pudimos, y debimos, habernos quedado en el agua! Buscamos una ruta para volver a bajar. Había un acantilado vertical entre nosotros y el agua, lo que nos forzó a caminar siguiendo la corriente mientras mirábamos con anhelo la tranquila superficie del río. Cuando un camino de pastoreo apareció entre la hierba, empezamos a bajar siguiendo las huellas de los guanacos. Varias curvas después nos encontramos con la garganta sinuosa que esperábamos, y se veía peligrosa. Acantilados encerraban el río en un espacio de 5 metros generando un rugido que se podía escuchar a la distancia. Salimos del agua y caminamos por una suave ladera para ver el espectáculo adrenalínico desde arriba. Lejos del río, a la distancia, praderas amarillas se extendían hacia los picos dentados de los campos de hielo patagónicos. Un viento ubicuo corrió sin obstáculos por la pradera. Esa noche, sentados en una playa de gravilla junto a nuestro pequeño fuego, revisé el mapa para encontrar más información sobre el puzle de Chacabuco mientras Lisa se acurrucó tranquilamente en la carpa. Al día siguiente, recorrimos dos rápidos bajo el campamento antes de llegar a una catarata rodeada de peñascos. Allí, las piedras filosas e irregulares nos obligaron a poner nuestras frágiles embarcaciones en las mochilas mientras nos movíamos por la orilla. La ruta más fácil nos llevó a caminar por el río con el agua hasta la cintura. En la siguiente caída, nos vimos forzados a salir del agua nuevamente y a caminar por una empinada subida de rocas sueltas. Más abajo, siguiendo la corriente, los rápidos eran demasiado técnicos, y el porteo de los botes se veía lento y difícil. A pesar de estar decididos a acampar, seguimos caminando. Con binoculares logré divisar una ruta que llevaba a través del acantilado avanzando con la corriente, pero Lisa siguió buscando un punto débil más cercano. Subiendo por una morrena de tierra compacta y quebradiza, ella se detuvo en un punto crucial, todavía

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vistiendo su traje seco, antes de arreglárselas hasta la cima. Veinte minutos después habíamos salido del cañón. Hay cierta liberación al salir de un desfiladero; las posibilidades parecen infinitas comparadas con las limitadas opciones al fondo de un cañón. Luego retornamos al río, casi de mala gana, para un último genial cañón de agua brava. El puente de la Carretera Austral pasó sobre nosotros, anunciando al cercano río Baker. Su vibrante azul cielo se arremolinaba, empequeñeciendo al humilde, sucio y verde río Chacabuco. Días después continuaríamos bajando por el río más grande de Chile, pasando sus alfombradas montañas, cascadas rugientes y glaciares colgantes hasta el salado mar. A pesar de todo eso, caminar sobre los desfiladeros del Chacabuco definió para mí la Patagonia salvaje. Un lugar de tintes sutiles, paisajes austeros, manadas libres y bandadas volando a lo alto, donde los largos días de verano traen sueños de aventura.

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Interview | Entrevista: Kris Tompkins

Building Patagonia Park

Construyendo el Parque Patagonia

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or many years the chief executive officer of Patagonia, Inc., in 1993 she married nature philanthropist Doug Tompkins and moved to southern Chile to help advance his ambitious conservation initiative at Pumalin Park. In 2000, Kris Tompkins founded her own organization, Conservacion Patagonica, for creating national parks to protect wild areas in Patagonia. In 2002, the group donated land to create the 165,000-acre Monte Leon National Park on the coast of Argentine Patagonia. In 2004, they purchased the 178,000acre Estancia Chacabuco in Chile’s Aysen region with the overall goal of making it the centerpiece of a new, 650,000-acre national park that would also include the adjacent Jeinimeni and Tamango National Reserves. Patagon Journal executive editor, Jimmy Langman, interviewed Kris Tompkins at the headquarters of the new Patagonia Park in Valle Chacabuco. Excerpts: Do you know how the fire in your park this past April got started? Where it started there is a shrine. Some say maybe someone lit a candle there and it blew over, or maybe someone flicked a cigarette. But we can’t say with complete certainty. How did you get the fire under control? It was rough. We had the guys from Pumalin, from our Puerto Varas office, the army, of course Conaf, Onemi. Some 300 people were here to put this out. We had four helicopters dropping water they got from the Baker River. The biggest fear was the fire getting up into these forests because then there would be no way to stop it. It started on a Wednesday afternoon, and by Friday night we were making preparations to evacuate if it got any closer. It was the driest point of the year, and big winds just killed us. Though it would die down in the nighttime when it cooled off, and then the last couple nights it started snowing from above. That was a scary time but it really brought the team together. Your goal is to donate this land to Chile to form a national park. If and when the government takes over, how confident are you that they will continue your work in protecting and restoring ecosystems here? Would they take care of everything as we would? Probably not. But that is the price you pay. We would love to see that happen during

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urante muchos años directora ejecutiva de la marca Patagonia, en 1993 se casó con el naturalista y filántropo Doug Tompkins, y se trasladó al sur de Chile para ayudarlo a avanzar en su ambiciosa iniciativa de conservación en el Parque Pumalín. El 2000, Kris Tompkins fundó su propia organización, Conservación Patagónica, con la intención de crear parques nacionales para proteger áreas silvestres en Patagonia. El 2002, el grupo donó tierras para crear las 64.000 hectáreas del Parque Nacional Monte León en la costa patagónica de Argentina. El 2004, compraron las 81.000 hectáreas de Estancia Chacabuco en la región de Aysén en Chile con el objetivo principal de convertirla en la pieza central de un nuevo parque nacional de 263.000 hectáreas que también incluirá las adyacentes Reservas Nacionales Jeinimeni y Tamango. El editor ejecutivo de Patagon Journal, Jimmy Langman, entrevistó a Kris Tompkins en la sede del nuevo Parque Patagonia en Valle Chacabuco. Extractos: ¿Sabes cómo se inició el fuego en tu parque el pasado abril? Donde comenzó hay un santuario. Algunos dicen que tal vez alguien encendió una vela allí y se cayó, o quizá alguien encendió un cigarrillo. Pero no podemos afirmarlo con toda seguridad. ¿Cómo conseguiste mantener el fuego bajo control? Fue duro. Teníamos chicos de Pumalín, de nuestra oficina en Puerto Varas, del ejército, por supuesto de Conaf y Onemi. Alrededor de 300 personas estuvieron aquí para controlar esto.Tuvimos cuatro helicópteros que lanzaban agua que obtenían del río Baker. El mayor miedo era que el fuego alcanzara estos bosques porque entonces no habría ninguna manera de detenerlo. Todo comenzó en la tarde de un miércoles, y en la noche del viernes estábamos haciendo preparativos para evacuar en caso que se acercara más. Era el punto más seco del año, y los grandes vientos nos mataron. A pesar de que iba a morir en la noche cuando se enfriara, luego el último par de noches empezó a nevar desde arriba. Fue un momento de miedo, pero realmente unió al equipo. Su objetivo es donar esta tierra a Chile para formar un parque nacional. Cuando el gobierno tome el control, ¿confías que ellos continuarán tu trabajo en la protección y restauración de estos ecosistemas? ¿Se harán cargo de todo como nosotros lo haríamos? Probablemente no. Pero ese es el precio que pagas. Nos encantaría ver que eso suceda

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TRAVEL PLANNER: PATAGONIA PARK / PLANIFICADOR DE VIAJES: PARQUE PATAGONIA How to go: From Coyhaique, the capital of the Aysen region, by car its about six hours on mostly dirt road. Services: The park includes an excellent 6-room lodge and El Rincón Gaucho bar and restaurant. Near park headquarters, Westwinds Campground can host up to 60 tents and has bathrooms, showers, and cooking shelters. A second campsite, Stone House Campground, located in the middle of the Chacabuco Valley, is set to open in February. Trails: There are five trails for hikes in the park, ranging in duration from 2 hours to a full day. Prices: Rates at the lodge from US$ 150 to $US$ 350, depending on the number of persons. Camping is US$ 10 per person per day. Operating hours: The park and lodge is open only from October 1 to April 30. Cómo llegar: Desde Coyhaique, la capital regional de Aysén, el viaje en auto puede durar unas seis horas por un camino que casi en su totalidad es de tierra. Servicios: El parque cuenta con un excelente lodge de seis dormitorios y el bar restaurante El Rincón Gaucho. Cerca de administración, el sitio de Camping Westwinds puede albergar hasta 60 carpas y tiene baños, duchas y refugios de cocina. Un segundo campamento, Camping Casa Piedra, situado en el centro del Valle Chacabuco, se inaugurará en febrero. Senderos: Existen cinco rutas habilitadas para hacer caminatas en el parque, con una duración que va desde las dos horas hasta un día completo. Tarifas: Los valores del lodge van desde los $US 350 por persona en estadía individual, hasta los $US 150 por persona en caso de ser un grupo de cuatro individuos. El precio del camping asciende a $5.000 ($10 USD) por persona por día. Temporada: El parque está abierto desde el 1 de octubre hasta el 30 de abril. More information / Más información: www.conservacionpatagonica.org

this presidency, but that is up to the government. We will take them some proposals and see what they think. We would also love to donate Pumalin. We are here to create national parks. We want to donate all 2.2 million acres that we own to the State.

durante esta presidencia, pero eso depende del gobierno. Les haremos algunas propuestas y veremos qué es lo que piensan.También nos gustaría donar Pumalín. Estamos aquí para crear parques nacionales. Queremos donar todas las 2,2 millones de hectáreas que poseemos al Estado.

Why not continue with the private park model? We grew up in the United States with a national park system, and believe in it. National parks are the gold standard in conservation; it’s the top way to protect land. And these big properties should go back to the State. These places really belong to all Chileans and Argentines. This goes way beyond donating the land back, it is about forwarding the feeling that we all grew up with in which national parks and nature are important for all of society. It changes the sense of national pride.

¿Por qué no continuar con el modelo de parque privado? Crecimos en Estados Unidos con un sistema de parques nacionales, y creemos en eso. Los parques nacionales son el estándar de oro en la conservación; es la mejor manera de proteger la tierra. Y estas grandes propiedades deben ser devueltas al Estado. Estos lugares realmente pertenecen a todos los chilenos y argentinos. Esto va mucho más allá de donar la tierra, se trata de transmitir la sensación de que todos crecimos donde los parques nacionales y la naturaleza son importantes para toda la sociedad. Cambia el sentido de orgullo nacional.

Are there other properties you might want to purchase at some point? No, we’re definitely in the phase of finishing up what we started. Doug is 71, I am 64. We will be lucky if we finish up everything we got now and do it well.

¿Hay otras propiedades que es posible que desees comprar en algún momento? No, definitivamente estamos en la etapa de finalizar lo que comenzamos. Doug tiene 71, y yo 64. Tendremos suerte si concluimos bien todo lo que tenemos ahora.

How does Patagonia Park compare with other parks in the region? In terms of raw beauty, I don’t think you can compare any place on the planet with Torres del Paine. It is absolutely a jewel. But this is right up there. This park has a much more varied landscape, and a lot of water systems. All of the original species in the Patagonia region are found here. But it’s a different kind of beauty. It takes more time to really understand the beauty of this park and getting up into the side valleys. This is a very little known area within Patagonia. Very few of the peaks here have been climbed. There is the ice cap to the west, and Lago General Carrera at the northern edge. If you take the whole area altogether it is just extraordinary.

¿Cómo se compara Parque Patagonia con otros parques de la región? En términos de belleza natural, no creo que ningún lugar del planeta se pueda comparar con Torres del Paine. Es absolutamente una joya. Pero estamos a la altura. Este parque cuenta con mayor variedad de paisajes, y muchos sistemas de agua. Todas las especies originales de Patagonia se encuentran aquí. Pero es un tipo diferente de belleza. Se necesita más tiempo para entender la hermosura de este parque y adentrarse hacia los valles transversales. Esta es una zona muy poco conocida dentro de Patagonia. Muy pocos de los picos que hay aquí han sido escalados. Hacia el oeste está el Campo de Hielo, y el Lago General Carrera está en el extremo norte. Si tomas toda la zona en conjunto es simplemente extraordinaria.

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Photo safaris: capturing wild nature Foto safaris: capturando la naturaleza indómita By Tomás Moggia

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he weapons have stepped aside and now its cameras that accompany the "hunters" of the 21st century in wild places like Patagonia. The reward is to capture great photos of wildlife and surrounding nature. They’re called photo safaris, and they are increasingly popular in the world of travel. Its not necessary to have expensive, new photography gear. Just an interest in photography, but above all a love of nature. "Everyone goes at their own pace, and we have been pleasantly surprised with the photos of the participants. The key is to learn how to look,” says photographer Augusto Domínguez, who is also a part owner of AtacamaPatagonia Photo Expediciones (www.photoexpediciones.cl). Generally, the photo safaris days begin early in the morning and extend until after sunset. The idea is to maximize daylight hours and receive advice and technical recommendations to improve the photographic skills of each client. The key to success then for these photo tour operators is that participants

come away satisfied with the photos they have shot. To do so, its important to have guides with photography experience but that are also trained to lead people to really unique places that attract few other tourists. Christopher Ganderats, a guide and photographer, explains his company, Ganderats (www.ganderats.com), is not just about photographing nature. For him, the best photos tell a story while doing so in a way that demonstrates a command of technical aspects and composition. "I invite you to take metaphors, anyone can participate who has an interest in traveling and seeing things from another perspective. It is an experience that combines art and travel because it involves learning to observe deeply and developing messages through a visual language,” he says.

In search of the lion of the Andes Secretive and suspicious, the puma moves like a ghost among its isolated domains in Patagonia. Only the lucky few have had

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AUGUSTO DOMÍNGUEZ

as armas han dado un paso al costado y ahora son las cámaras fotográficas las que acompañan a los “cazadores” del siglo XXI en regiones salvajes como Patagonia. El premio es poder capturar en una foto al animal y su entorno. Se llaman foto safaris, y son cada vez más populares en el mundo de los viajes. No es necesario tener un equipo costoso y de última generación. Basta con interesarse en la fotografía, pero por sobre todo ser un amante de la naturaleza. “Cada uno va a su ritmo y hemos quedado gratamente sorprendidos con las fotos de los aprendices. La clave está en aprender a mirar”, sostiene el fotógrafo Augusto Domínguez, quien además es dueño de la agencia chilena AtacamaPatagonia Photo Expediciones (wwwphotoexpediciones.cl). Generalmente, las jornadas de los Photosafaris comienzan bien temprano en la mañana y se extienden hasta después del atardecer. La idea es aprovechar al máximo las horas de luz

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para después recibir consejos y recomendaciones técnicas para mejorar las habilidades fotográficas de cada cliente. La clave del éxito radica entonces en que los participantes vuelvan satisfechos con el material recolectado, y para ello las agencias cuentan con guías experimentados en fotografía y que también están capacitados para llevar a las personas a lugares realmente únicos y poco transitados. Cristóbal Ganderats, guía y fotógrafo explica que el sello de su agencia –Ganderats (www.ganderats.com) - consiste en fotografiar no sólo la naturaleza. Para él, la mejor foto es la que relata un cuento tomando en consideración la técnica y la composición. “Yo invito a sacar metáforas, por lo que puede participar cualquier persona que tenga interés por viajar y ver las cosas desde otra perspectiva. Es una experiencia entre el arte y el viaje porque se vincula con aprender a observar profundamente y elaborar mensajes a través de un lenguaje visual”, afirma.

En busca del león de los andes Sigiloso y desconfiado, el puma se mueve como un fantasma por los aislados dominios de la Patagonia. Pocos son los afortunados que han tenido la posibilidad de verlo en su hábitat natural. Dicen que Parque Nacional Torres del Paine es el mejor lugar del mundo para encontrar al león andino y esa es una de las grandes razones por las cuales las agencias de foto safaris se dirigen a esa zona, allí


NATPHOTO

the chance to see them in their natural habitat. Its said that Torres del Paine National Park is the best place in the world to find this Andean lion and that's one of the many reasons why photo safari companies are attracred to this park, where it is possible to find numerous species of Patagonian wildlife, including the huemul, guanaco and condor. Another of the several Chilean companies offering photo safaris is Natphoto (www. natphoto.cl). They organize 14 expeditions every year, both in Chile and abroad, but their most coveted trip is without doubt Torres del Paine, in particular by those who are searching for the puma, although they obviously can not guarantee an encounter with the big cat. "We do not go with clients just to look for puma, but we put together an expedition focused as well in photography of sunrises and sunsets, the local icons of Torres del Paine, and seeing

the many other wonderful species. Meantime, we have a team of puma trackers that are totally separated from the group. If they find a puma, we stop everything we’re doing and we go after them,” says Rodrigo Moraga, a marine biologist and director of education for Natphoto, who in recent years has become an expert tracker of the puma. But beyond the possibility of photographing a puma, says Moraga, Patagonia is a privileged and totally photogenic place, possessing a geography of extremes, with lush and virtually untouched nature. "The contrasts in the landscape, the possibility to see vulnerable wildlife as well as other more powerful animals, that transforms this region into a world class destination. You can go many times and always will see something different. But perhaps just as important is to be in a place where wildlife do not fear you and you can be close to enjoy them.”

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donde también es posible observar muchas de las especies de la fauna patagónica, entre ellas el huemul, el guanaco y el cóndor. Natphoto (www.natphoto. cl) es otra de las empresas chilenas que se dedica a este rubro. Realizan cerca de 14 expediciones tanto en territorio nacional como en el extranjero, pero la más codiciada es Torres del Paine, justamente por la búsqueda del puma, aunque lógicamente no se puede garantizar el encuentro con el felino. “Nosotros no andamos con los pasajeros buscando el puma, sino que armamos una expedición enfocada en fotografía de amaneceres y atardeceres, de lugares íconos de Torres del Paine, además de seguir especies maravillosas. Mientras tanto, tenemos un equipo de rastreadores de pumas que están totalmente separados

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del grupo. Si encontramos un ejemplar, todo se suspende y vamos tras ellos”, explica Rodrigo Moraga, biólogo marino y gerente de Educación de Natphoto, quien en los últimos años se ha transformado en un experto rastreador del león andino. Pero más allá de la posibilidad de fotografiar un puma, dice Moraga, la Patagonia es un lugar privilegiado y totalmente fotogénico, poseedor de una geografía extrema y una naturaleza exuberante y prácticamente virgen. “El contraste que tiene el paisaje, la posibilidad de ver animales vulnerables y otros tan poderosos, eso la transforma en un destino de clase mundial. Puedes ir muchas veces y siempre vas a ver algo distinto. Pero quizá lo más importante es estar en un lugar donde los animales no te temen y puedes estar cerca para disfrutarlos”, señaló el fundador de Natphoto.


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Hotels Hoteles

Noi Centro de Ocio Península de Rilán, Chiloé, Chile. By Jimmy Langman

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he word “ocio” comes from the Latin word “otium,” its meaning mainly referring to the individual pursuit of peace, quiet and leisure. The Noi Centro de Ocio is thusly aptly named. Set amid the sleepy Chiloe Island countryside on the site of a former sheep ranch, dozens of sheep still roam all over the verdant grounds, merging with the cool, often cloudy environment and luxurious lodging facilities to help form a true oasis of peace, quiet and leisure. Located in Peninsula de Rilan, about 20 minutes north of the city of Castro, the hotel is also perched on a hill that overlooks the estuary and the city -- an astounding view that becomes a well-lit, visual masterpiece at night. Cristián Medina, the Chilean owner, said as soon as he discovered the spot he knew he must have it. At first a vacation spot for family and friends, little by little he transformed the place into a stunning hotel and eventually dropped out of the big city rat race in Santiago altogether to make Chiloe his home. Family and business brings him back to Santiago on occasion, but the smile on his face when talking about his life in Chiloe makes it clear where he prefers. He has made this hotel a passion and that’s reflected in the quality and the details found throughout. There are three large and stunning independent suites/cabins, assorted rooms in a renovated Chilote farm house, two spacious rooms in the main lodge, and a row of connected apartments in the upper area of the property. Each of the suites and rooms maximizes the fantastic views amid a well-designed space that superbly evokes the best of local culture and nature. For instance, the building materials and furniture are made from native woods from the island, while the interior decorations incorporate local handicrafts and Chilote wool. Moreover, the new buildings were built using sustainable design practices that adapt to local climatic conditions, thereby lowering energy and heating costs and minimizing environmental impact. The hotel opened in early 2012, and last year Noi Hotels, a upscale hotel chain in Chile, forged a business alliance with Centro de Ocio, bringing to bear their considerable hotelier experience on the hotel’s prospects. This is one of the best new luxury hotels to arrive in Chiloe, if not Chile.

How to go / Cómo ir Península de Rilán, Castro, Chiloe Tel. (56 65) 2971911 – www.centrodeocio.cl

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a palabra “ocio” proviene del término latín “otium”, cuyo significado principalmente se refiere a la búsqueda individual de paz, tranquilidad y tiempo libre. El Noi Centro de Ocio está, por tanto, nombrado acertadamente. Está situado en medio del somnoliento campo de la Isla de Chiloé en el sitio de un antiguo rancho ovejero. Decena de ovejas vagan por los verdes jardines, fusionándose con el frío y a veces nublado ambiente, y con las lujosas instalaciones de alojamiento que ayudan a formar un verdadero oasis de paz, tranquilidad y ocio. Localizado en la Península de Rilán, a unos 20 minutos al norte de la ciudad de Castro, el hotel también se alza sobre una colina que domina el estuario y la ciudad –una vista impresionante que se convierte en un lugar bien iluminado, una obra maestra visual por la noche. Cristián Medina, el propietario chileno, cuenta que tan pronto descubrió el lugar sabía que debía adquirirlo. Al principio era un sitio de vacaciones para la familia y amigos, pero poco a poco él transformó el lugar en un impresionante hotel y finalmente se retiró del ajetreo cotidiano de la ciudad de Santiago para hacer de Chiloé su casa. La familia y los negocios lo llevan de vuelta a Santiago en algunas ocasiones, pero la sonrisa en su rostro al hablar de su vida en Chiloé deja claro lo que él prefiere. Ha hecho de este hotel una pasión y eso se refleja en la calidad y los detalles que se encuentran en todo. Hay tres cabañas independientes que son grandes e impresionantes, un surtido de habitaciones en una renovada casa de campo chilota, dos amplias habitaciones en la casa principal, y una fila de apartamentos conectados en la zona alta de la propiedad. Cada una de las suites y habitaciones maximiza las fantásticas vistas en medio de un espacio bien diseñado, que evoca magníficamente lo mejor de la cultura local y la naturaleza. Por ejemplo, los materiales de construcción y los muebles están hechos de madera nativa de la isla, mientras las decoraciones interiores incorporan artesanía local y lana chilota. Por otra parte, las nuevas edificaciones se construyeron utilizando prácticas de diseño sustentable que se adaptan a las condiciones climáticas locales, lo que reduce los costos de energía y calefacción, minimizando el impacto ambiental. El hotel abrió a principios de 2012, y el año pasado Noi Hotels, una cadena de hoteles de lujo en Chile, forjó una alianza de negocios con el Centro de Ocio, trayendo así su gran experiencia sobre las proyecciones del hotel. Este es uno de los mejores nuevos hoteles de lujo al que llegar en Chiloé, si es que no en Chile.

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Restaurants Restaurantes

Se Cocina

Frutillar, Chile. By Javiera Ide

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iners become witness to a family’s creativity and hard work, and to their love of tradition, at the restaurant Se Cocina. When you first arrive, a wooden walkway takes you to a small house covered with Chiloe-style shingles. It was in this same place that over a century ago the family´s grandfather, of German descent, built a hearth to prepare barbecues and homemade sausage. The restaurant is simply beautiful. The tables, chairs, plates and glasses are colorful and no two are the same. The kitchen is integrated into the dining room and an enormous wooden table covered with utensils, pots, baskets and flowers is the room’s centerpiece. Everything is done by family members here; Verónica, the owner, and her two daughters both run the kitchen and wait on the diners. They welcomed us warmly. The menu changes every day and the dishes are designed using available ingredients and the inspiration of the moment. To start our meal, they recommended the house cocktail - Ulmo Sour. We were quite taken by the flavor the honey gave it - a perfect twist on this typical Chilean drink to give it a southern Chilean identity. There were two options for appetizers: cream of organic vegetables from their own garden with cheese and a seafood stew with Parmesan cheese. While Francisca, the chef, prepared the soup on the wood-burning stove, she told us about the history of this place. An old black-and-white photo of an enormous family sitting around a table decorates part of a wall. “The child there is my grandfather and my great-grandparents are on the other side. The photo was taken in this very place, and as you can see, an appreciation of good food seems to run in the family,” she explained, smiling. When the soup was ready, it arrived at the table steaming hot in a clay bowl with a generous helping of melted blue and Gruyere cheeses. All of the main dish options were tempting, but we opted for pork cooked over a wood fire with a side of creamy polenta. For dessert, we had a delicious apfelstrufel (apple strudel) made using an old family recipe, and homemade ice cream. The best one was the berry ice cream, delicious and fresh, the ideal finishing touch to our lunch. After a long after-lunch conversation looking out over the lake and watching the cows calmly graze in the fields, we decided to go out for a walk. In a yard next to the house, the last lemon apples, a typical variety of apple that grow in Chile´s Los Lagos region, were still on the trees. When Verónica saw me there, she brought me a bag and told me to take all the apples I wanted. Its for little gestures like these that I will return many times over because, although its expensive and the food isn’t yet dazzling, at every moment you are made to feel at home at Se Cocina.

How to go / Cómo ir Km. 2 sector Quebrada Honda, Frutillar, Chile – Tel (09) 8972 8195 – www.secocina.cl

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isitar el restaurant Se Cocina es ser testigo del esfuerzo y creatividad de una familia y del amor por las tradiciones. Al llegar, una pasarela de madera te lleva hasta una pequeña casa cubierta de tejas chilotas. En este mismo espacio varios años atrás, el abuelo de la familia descendiente de alemanes, construyó un fogón para preparar asados al palo y longanizas artesanales. Hoy una muralla negra manchada con hollín se mantiene sin pintar para preservar vivo ese recuerdo. El lugar es sencillamente hermoso. Las mesas, sillas, platos y copas son coloridos y ninguno es igual al otro. La cocina está integrada al comedor y un enorme mesón de madera lleno de implementos, ollas, canastos y flores, es el protagonista. En Se Cocina todo es en familia: Verónica es la dueña y sus dos hijas se encargan de la cocina y de atender a los comensales. Nos recibieron cálidamente. La carta varía cada día y los platos se construyen de acuerdo a los ingredientes disponibles y la inspiración del momento. Para comenzar, nos recomendaron el aperitivo de la casa, el Ulmo Sour. Quedamos fascinados con el toque que le daba la miel, el giro perfecto para entregarle a este típico trago la identidad del Chile Austral. De entrada había dos opciones, crema de verduras orgánicas de la huerta con queso y mariscos a la parmesana. Mientras Francisca, la chef, preparaba la crema en la cocina a leña, nos pusimos a conversar sobre la historia del lugar. Una antigua foto en blanco y negro de una enorme familia en torno a una mesa tapizaba parte de una muralla. “El niño que está ahí es mi abuelo y al otro lado están mis bis abuelos. La foto fue tomada en este mismo campo y como ves, el gusto por la buena comida parece ser de familia”, nos explicó sonriendo. Cuando la crema estuvo lista, llegó muy caliente a la mesa en una paila de greda con una generosa cantidad de queso azul y gruyere derretido. Todas las opciones de fondo eran tentadoras, pero la mayoría se decidió por el lomo a la leña acompañado con polenta cremosa. De postre comimos un exquisito apfelstrudel basado en una antigua receta de la familia y helados caseros. El mejor logrado era el de berries, rico y fresco, ideal para coronar nuestro almuerzo. Después de una larga sobremesa mirando el lago y el pastar tranquilo de vacas por las pampas, decidimos salir a caminar. En una quinta al lado de la casa quedaban las últimas manzanitas limón, variedad típica de los campos de la región de los Lagos. Verónica, al verme cerca de los árboles, me trajo una bolsa y me dijo que me llevara todas las manzanas que quisiera. Por estos detalles volvería a Se Cocina una y mil veces, ya que a pesar de no ser barato y que a la comida aún le falte para ser deslumbrante, en todo momento te hacen sentir como en casa.

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Puesco Fest:

Celebrating free and sacred rivers Festejando por los ríos libres y sagrados T

he granites towers of Las Peinetas (“the combs”) shine magically to catch the last rays of light at Puesco Fest as Silverio Loncopán captures the attention of everyone. He says that over the years he has seen how tourism has become an important source of income for local communities here. Fast rivers, lakes and lush forests are part of the treasure hidden in Puesco, a town located about 60 kilometers from Pucon. Loncopán, a Mapuche and president of the indigenous community Camilo Coñoequir Lloftunekul, also talked about the big problems they have faced recently. In the Trancura River watershed, authorities have approved 59 small-scale hydroelectric water projects. He said the Añihuerraqui run-of-the-river dam is one of the more controversial projects planned for the zone. It would intervene not just in the waters of the Trancura but affect Nguillatuwe, sacred ground where his indigenous community performs Nguillatún, a Mapuche ceremony in which they pray for prosperity, rain and a good harvest. According to Loncopan, the company behind the project, GTD Negocios, has divided their commmunity. "All we want is that this company disappears so that we can continue living as we did before. We do not want compensation or money, because this territory has infinite value.” More than a festival of great music and cultural activities, the mission of Puesco Fest was to draw attention to the uncertain future for this mountainous area located in the region of Araucania, where several dam projects threaten to jeopardize the growing tourism

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os torreones del cerro Las Peinetas brillan mágicamente al recibir los últimos rayos de luz mientras en el escenario de Puesco Fest don Silverio Loncopán capta la atención del público. Cuenta que con el correr de los años ha visto cómo el turismo se ha transformado en una importante fuente de ingresos para las comunidades locales. Ríos rápidos, lagunas y bosques exuberantes son parte del tesoro que se esconde en Puesco, localidad ubicada a unos 60 kilómetros de Pucón. Loncopán, un descendiente mapuche y presidente de la comunidad Camilo Coñoequir Lloftunekul, confiesa también la gran problemática a la que se han visto enfrentados durante el último tiempo. Y es que en la cuenca del río Trancura hay otorgados 59 derechos no consultivos de aprovechamiento hidroeléctrico de aguas, lo que se traduce en el mismo número de potenciales hidroeléctricas de pequeña escala en un territorio sumamente acotado. Dijo que la Central Hidroeléctrica de Pasada Añihuerraqui es uno de los controversiales proyectos que se pretende instalar en la zona, interviniendo las aguas y afectando un Nguillatuwe, que es el terreno sagrado donde se realiza el Nguillatún, ceremonia mapuche en la que ruegan por la prosperidad, por las lluvias y las buenas pasturas. Según Loncopán, la empresa detrás del proyecto, GTD Negocios, ha dividido su comunidad. “Lo único que queremos es que la empresa desaparezca para seguir viviendo como antes. No deseamos compensaciones ni plata, porque este territorio es de un valor infinito”. Más que un festival de buena música y actividades culturales, la finalidad del Puesco Fest radica en visibilizar el futuro incierto que recae sobre esta zona cordillerana ubicada en la región de la Araucanía, donde varios proyectos amenazan con poner en jaque

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sector and ancestral Mapuche culture. More than 500 people from Chile, Argentina, Peru, the United States and other countries attended the event which called for letting the rivers run free. In Mapudungún, the Mapuche language, Trancura means noise or thunder stones, and the communities that live here want the river of the same name to be protected. To demonstrate the potential of the river, as part of Puesco Fest a kayaking competition was held at Tres Troncos, one of the world’s most difficult rapids and that each year attracts countless tourists and professional kayakers. A situation that may soon change if plans for building the Epril hydroelectric dam go ahead.

al creciente turismo y a la ancestral cultura mapuche. Más de 500 personas de Chile, Argentina, Perú, Estados Unidos y otros países asistieron a este evento que abogó para que los ríos corran libres. Trancura, en mapudungún, significa ruido o trueno de piedras, y la intención de las comunidades es que permanezca tal cual. Para demostrar su potencial, en el marco de Puesco Fest se efectuó una competencia de kayak por Tres Troncos, uno de los rápidos más técnicos a nivel mundial y que año tras año atrae a inumerables turistas y deportistas profesionales. Un panorama que podría cambiar prontamente con el desarrollo del Proyecto Central Hidroeléctrica de Pasada Epril. (Tomas Moggia)

Solar Gold Rush in Chile Fiebre del oro solar en Chile

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hile is now moving fast to develop its vast renewable energy potential. In 2014, about US$7 billion dollars in investment poured into the country for 70 solar projects by nearly three dozen companies—a pace that according to international experts made the country the world’s most active market for non-conventional renewable power over the past year, is bringing down the cost of solar power in Chile, and sparking what some here have termed a “solar gold rush.” Among the several large-scale solar investments underway in the Atacama Desert of Chile’s north include a 698-megawatt solar farm involving 11 companies called Campos del Sol Sur that when completed next year will rank among the biggest solar farms in the world. Solar energy isn’t the only untapped renewable-power blessing for Chile. With a lengthy Pacific coastline and smack-down winds in the Patagonia region, the country is an ideal place for wind power. And experts believe geothermal resources in this highly volcanic country could be enormous. “I think the new Bachelet government has worked considerably to streamline the permitting processes and encourage investment in solar and wind in the near term,” says Nelson Stevens, founder and director of the Puerto Montt-based Wireless Energy, one of Chile’s first renewable companies dating back to the mid-1990s. “Technical hurdles must be addressed concerning power-transmission bottlenecks and grid stability issues. But exciting times are coming to Chile for sure.”

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hile se está moviendo rápido para desarrollar su enorme potencial de energía renovable. En el año 2014, llegaron alrededor de US$7 mil millones de dólaresen inversión al país para 70 proyectos de energía solar. Este ritmo,según los expertos internacionales, hace de Chile el mercado más activo del mundo para las energías renovables no convencionales en el último año, bajando el costo de la energía solar en Chile, y provocando lo que algunos han llamado aquí como una "fiebre del oro solar." Son varias las inversiones solares a gran escala en marcha en el desierto de Atacama, en el norte de Chile, e incluyen un parque solar de 698 megavatios en que participan 11 empresas llamado Campos del Sol Sur; cuando esté terminado el próximo año figurará entre los parques solares más grandes del mundo. La energía solar no es la única bendición en energía renovable para Chile. Con su extenso litoral en el Pacífico y recios vientos en la Patagonia, Chile es un lugar ideal para desarrollar la energía eólica. Y los expertos creen que los recursos geotérmicos en este país altamente volcánico también podrían ser enormes. “Creo que el nuevo gobierno de Bachelet ha trabajado bastante para agilizar los procesos de permisos y fomentar la inversión en energía solar y eólica en el corto plazo”, dice Nelson Stevens, director de Wireless Energy, con sede en Puerto Montt, una de las primeras empresas de energías renovables de Chile que datan de mediados de la década de 1990. “Deben abordarse obstáculos técnicos en relación con cuellos de botella en la transmisión de energía y problemas de estabilidad en la red. Pero ciertamente están llegando tiempos emocionantes a Chile”. (Jimmy Langman).

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Aysén: scientific tourism on the rise Aysén: El turismo científico en aumento

CLAUDIO FRIAS

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harles Darwin was one of the pioneers and today more and more researchers visit Patagonia. Due to its remote nature, for years its acted as a magnet attracting scientists from around the world who come for exploration and research in fields as diverse as geology, archeology, geography and biology, among others. Looking at cave paintings left behind by ancient indigenous Tehuelche communities in the Lake General Carrera watershed, analyzing the behavior of the southern Chilean frog around Villa O'Higgins, or searching for blue whales and other cetaceans in the Las Guaitecas Archipelago, are part of the budding growth in scientific tourism in the Aysen region. "Indeed, it is another aspect of our tourism that is being promoted heavily. We have managed to show us as a focus of interest for hundreds of researchers who come to Aysen from all latitudes," says Sandra Navarro Oyarzun, the regional director of SERNATUR in Aysen. Although it has been several years since the first explorations in Aysen, there remains much undiscovered territory, especially on the coast due to its largely inaccessible and inhospitable character. And one area experts say demands greater conservation efforts and support for developing further scientific research. "It would be interesting to conduct a study in this area to identify, characterize and geo-reference archaeological sites in the fjords, with the aim being a broader understanding of the prehistory on the coast of Aysen," said Eduardo Silva, an archaeologist specializing in zooarcheology at SEK University in Chile.

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harles Darwin fue uno de los pioneros y hoy en día cada vez son más los investigadores que visitan Patagonia. Debido a su naturaleza remota, por largo tiempo ha actuado como un verdadero imán atrayendo a científicos de diferentes partes del mundo, quienes se acercan para realizar exploraciones e investigaciones en ámbitos tan diversos como geología, arqueología, geografía y biología, entre otros. Observar pinturas rupestres dejadas por las antiguas comunidades tehuelches en la cuenca del Lago General Carrera, analizar el comportamiento de la rana austral chilena en los alrededores de Villa O'Higgins y avistar ballenas azules y otros cetáceos en el archipiélago de Las Guaitecas, son parte de un atractivo incipiente en la Región de Aysén: el turismo científico. "Efectivamente es otra veta de nuestro turismo que se está potenciando fuertemente. Hemos logrado mostrarnos como un foco de interés para cientos de investigadores que llegan a Aysén desde todas las latitudes”, explica Sandra Navarro, directora regional de Sernatur. Pese a que han pasado varios años desde las primeras exploraciones en Aysén, todavía queda mucho territorio por descubrir, en especial en el litoral debido a su carácter inaccesible e inhóspito. Un sector donde los expertos demandan mayores esfuerzos de conservación y apoyo para el desarrollo de investigación científica. “Sería interesante poder realizar un estudio en esta zona con el fin de identificar, caracterizar y geo-referenciar aquellos sitios arqueológicos emplazados en los fiordos, con el objetivo de poder llegar a comprender de manera más vasta la prehistoria en el litoral de Aysén”, asegura Eduardo Silva, arqueólogo especialista en zooarqueología de la UISEK. (Patricio Espinoza)

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Instagram Champion #PatagonJournal Campeón Instagram #PatagonJournal

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rancisca Mellado was the winner of our special Instagram contest in November, with this photo entitled "Slackline,” taken at Cerro Punta de Cortés in Rancagua, Chile. The contest sought out the best images of mountains and mountain life. Francisca won two nights at Hosteria Ecole in Pucon, a subscription to Patagon Journal, and the entire collection of our past issues. Follow Patagon Journal on Instagram @patagonjournal

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rancisca Mellado fue la ganadora de nuestro concurso especial de Instagram en noviembre, con esta foto titulada "Slackline," tomada en Cerro Punta de Cortés en Rancagua, Chile. El concurso buscó las mejores imágenes de las montañas y la vida de montaña. Francisca ganó dos noches en Hosteria Ecole en Pucón, una suscripción a Patagon Journal, y la colección completa de nuestros números anteriores. Sigue Patagon Journal en Instagram @patagonjournal

Adventure Travel World Summit Chile 2015 Cumbre Mundial de Turismo de Aventura Chile 2015

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ver the past decade, adventure travel is growing at an unprecedented rate around the world. The Adventure Travel Trade Association (ATTA), an organization whose mission is to promote adventure tourism worldwide and has more than a thousand members in more than 80 countries, says last year the industry generated 263 billion dollars in business. ATTA has chosen Chile as the host of the eleventh version of the world's top adventure tourism conference, to be held October 5-8, 2015 in Puerto Varas. The event is expected to draw more than 700 participants from diverse countries, including tour operators, media and other stakeholders in the industry. The conference will include workshops and meetings on varied subjects in the industry, from sustainability to marketing. More info: www.adventuretravel.biz

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n los últimos años el rubro del turismo aventura ha crecido a un ritmo insospechado en el mundo entero. Adventure Travel Trade Association (ATTA), una organización cuya misión es promover el turismo aventura a nivel internacional y que cuenta con más de mil miembros en más de ochenta países, asegura que la industria anualmente mueve unos 263 mil millones de dólares. ATTA designó a Chile como sede de la undécima versión de la cumbre mundial del turismo aventura para el año 2015, a realizarse entre el 5 y el 8 de octubre en Puerto Varas. Al evento asistirán más de 700 delegados de diversas nacionalidades, entre tour operadores, prensa y otros actores del rubro, quienes realizarán intercambios comerciales, capacitaciones y reuniones para abordar diferentes materias como sustentabilidad y marketing. Más información: www.adventuretravel.biz

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fly fishing pesca con mosca

Salmon are here to stay

Los salmones llegaron para quedarse By Rodrigo Sandoval

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" went for nearly an hour casting my flies, trying all types and colors, without getting anywhere. The cold outside was beating me back little by little, so I decided to do five more casts and move elsewhere. Throwing a shooting line requires some getting used to, which during this fishing season I had not yet mastered, but it seemed the best choice to achieve adequate depth at this spot. " "I was finishing the third cast, when I felt a pull. Instantly, the adrenaline I felt made me forget about the cold, but when raising the rod two times it appeared that the fly was stuck at a point near the bottom of the water. I immediately thought of the trunk or rock that was about to make me lose one of the most beautiful flies I have, a fly that had taken so long for me to tie during winter.” "I tried changing my position, to see if a pull in another direction could free up the fly, but after renewed attempts it seemed as if the trunk had moved upstream. So I pulled again, lifting the rod, but again, the trunk inexplicably moved a few meters more. Finally, just a second after I understood what was really happening, the water exploded and the tension in the rod changed drastically, together with the squealing of my reel." Fishermen in Chile have become used to finding salmon in rivers like the Toltén, Petrohué, Puelo, among several others, so stories like the above have become more commonplace. However, the presence of salmon in this part of the world is somewhat recent, only becoming a significant presence during the last few decades. Salmon have arrived here not only due to efforts to cultivate salmon during the first half of the 20th century for enhancing sport fishing, but also because of the salmon farming industry, which has developed at an intense pace since the late 1980s in Chile, including in some cases using freshwater methods, wherein they opt to harvest just a small percentage of salmon that return years after natural feeding in the sea.

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levaba cerca de una hora paseando mis moscas por la mitad final del pozón, probando todo tipo de formas y colores, sin lograr nada. El frío me estaba ganando poco a poco, por lo que decidí hacer los últimos cinco lanzamientos y moverme a otro lugar. Lanzar una shooting taper requiere algo de costumbre que durante la temporada no alcanzo a adquirir, y que resultan la mejor elección en línea para lograr la profundidad adecuada… o lo que uno espera que sea la adecuada. “Estaba terminando el tercer paseo de la mosca por el final de este pozón, cuando sentí el tirón. Instantáneamente la adrenalina me hizo olvidar el frío, pero cuando dos levantadas de caña evidenciaron que la mosca estaba fija en un punto cerca del fondo, pensé en un tronco o una roca que me harían perder una de las hermosas moscas que me costó tanto atar en el invierno. “Intenté cambiándome de posición, para ver si un tirón en otra dirección lograba soltarla, pero al tercer o cuarto intento, me pareció percibir que el tronco se había movido unos tres metros corriente arriba. Volví a tironear levantando la caña y, nuevamente, el tronco avanzó otros metros. Apenas un segundo después de que entendí qué estaba pasando, el agua explotó en el pozón y la tensión en la caña cambió drásticamente, junto con el chirrido del carrete.” Los pescadores chilenos del siglo XXI ya se acostumbraron a buscar las “corridas” de salmones en ríos como el Toltén, Petrohué, Puelo, entre otros varios, por lo que historias como la anterior se han vuelto más frecuentes todos los años. Sin embargo, la presencia de los salmones es algo de las últimas décadas, debido no sólo a las siembras con fines deportivos realizadas en la primera mitad del siglo XX, sino que a la industria salmonera, que se desarrolló intensamente desde fines de la década del ’80, incluyendo esquemas de crianza libre, optando por cosechar el reducido porcentaje de salmones retornados después de años de engorda natural en el mar.

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Today, the great majority of salmon specimens that have adopted the Patagonian waters as their home are descendants of these first efforts to introduce salmon, with the population further expanding in numbers after the occasional escapes from countless salmon farming cages found from the fjords near Puerto Montt, to the canals of the Magallanes region in the far south. Among these species, the most common type are the Atlantic salmon (Salmo salar), coho salmon (Oncorhynchus kisutch) and chinook salmon (Oncorhynchus tshawytscha), also called king salmon. The first two, along with rainbow trout, are the most exploited species by the fishing industry today. The coho and the chinook belong to the group of salmon found in the Pacific region, which, unlike Atlantic salmon, die after spawning. Although these species are the most common, there are other species such as keta and sakura, which were released in the waters of the Aysen region as part of a free cultivation technique called "ocean ranching". Every fly fishing season, especially in the last few months of the season, fishermen aspire to snag one of these giants. Chinook runs are found as far north as the Toltén River and its tributary, the Allipén River. The Atlantic salmon go up the Maullín River. The runs of Pacific salmon can be seen in the Petrohué River and its closest river, the Puelo. As well, they run in the nearby tributaries of the southern channels. Sometimes they go up the network of tributary rivers arriving as far as the border with Argentina, such as the waterfalls of the Espolón River in Futaleufu. Further south, the Aysen River, Mañihuales River and the lower section of the Baker have their regular visits. In the Magallanes region, there are diverse, small rivers in Tierra del Fuego which have recently been receiving migratory visits from the family of Pacific salmon. This population promises only to grow greater in numbers with the increasing salmon farming concessions operating in the surrounding area. The wide distribution of the fish, together with the continuing presence of the salmon farming industry, will assure the survival of this species in Patagonia for a long time to come. As such, fishermen would do well to learn to understand their cycles and their preferences for flies.

Hoy, la gran mayoría de los especímenes que han adoptado las aguas patagónicas como su hogar son descendientes de esos primeros ejemplares, engrosados en población con los ocasionales escapes de las innumerables jaulas de cultivo que se encuentran desde los fiordos cerca de Puerto Montt hasta los canales de la Región de Magallanes. Entre las especies dominan el salmón del Atlántico (Salmo salar), salmón Coho (Oncorhynchus kisutch), y el salmón Rey o Chinook (Oncorhynchus tshawytscha). Los primeros dos, junto a la Trucha Arcoiris, son las especies más explotadas por la industria actualmente; mientras que el Coho y el Chinook pertenecen al grupo de salmones del Pacífico que, a diferencia de los del Atlántico, mueren luego de desovar. Aunque estas variedades son las más frecuentes, hay otras como el Keta y el Sakura, que fueron soltados en aguas de la región de Aysén para el cultivo libre llamado “ocean ranching”. Es así que cada temporada, en especial en la segunda mitad, los pescadores buscan y aspiran a lograr enganchar uno de estos gigantes. Corridas reconocidas son las de Chinook tan al norte como el Río Toltén y su tributario, el Allipén. Los salmones del Atlántico que suben por el Maullín. Las corridas de salmones del Pacífico en el río Petrohué y el cercano río Puelo. Incluso en varios de los tributarios de los canales australes. A veces, suben por la red de tributarios hasta llegar muy cerca del límite con Argentina, como es el caso del Salto del Río Espolón, en Futaleufú, que se transforma en el punto de detención de los peces. Más al sur, el Río Aysén, e incluso el Mañihuales, tienen sus visitas regulares, junto con el tramo inferior del Baker, y otros tanto más. En Magallanes, diferentes ríos pequeños de Tierra del Fuego recientemente han incluido visitantes migratorios de la familia de los salmones del Pacífico, que con el incremento de las concesiones operando en la región, sólo prometen ir aumentando. Esta amplia distribución, junto a la potencia de la industria salmonera, aseguran la presencia de salmones por mucho tiempo y será cosa de los pescadores aprender a entender sus ciclos y sus preferencias de mosca.

Fly Fishing in Puelo Pesca con Mosca en Puelo Río Barraco, Lago Tagua Tagua - Puelo, Región de los Lagos, Chile www.barracolodge.com - jaimef@turismobarraco.com - 56 9 6830 8111


Trekking Trekking

PHOTOS: CARLOS GUTIÉRREZ

Valle de Cochamó: hiking among granite giants Valle de Cochamó: caminando entre gigantes de granito By Tomás Moggia

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n the distance, the unmistakable sound of the river is heard again after a long while. After a few hours walking through a dense and humid Valdivian rainforest the thunderous roar of falling water is like a blessing, despite breaking the silence and stillness of the forest. Gradually, the trail comes to a clearing located on a riverbank. From there, for the first time, its possible to glimpse the granite giants that we had been so anxiously looking for. Its about a four to five hour hike from the beginning of the trail to La Junta, located in the upper part of the Valle de Cochamo, and from where we can begin to appreciate the true magnitude of the gray domes of rock that dominate the landscape. La Junta also serves as a base camp or starting point for a series of excursions that can take you to the base of many of these granite spires possessing huge walls that are reminiscent of Yosemite National Park in the United States.

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lo lejos, el inconfundible sonido del río vuelve a escucharse luego de un largo rato. Tras unas horas caminando, por un denso y húmedo bosque valdiviano, el estruendo provocado por el descenso de las aguas resulta una verdadera bendición, pese a romper con el silencio y la quietud de la selva. Poco a poco, el sendero se acerca hasta un claro ubicado en la ribera del río. Desde allí, por primera vez, es posible vislumbrar los gigantes de granito que con tanto anhelo estamos buscando. Son poco más de cuatro horas de caminata desde el inicio de la ruta hasta el sector de La Junta, una planicie desde la cual es posible apreciar la real magnitud de las grisáceas moles de roca que dominan el valle de Cochamó. La Junta sirve de campamento base o punto de partida de una serie de excursiones, muchas de las cuales llevan a la base de estos centinelas de piedra, poseedores de enormes paredes que hacen recordar al Parque Yosemite en Estados Unidos.

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Located 110 km (68 mi) from Puerto Montt, Valle de Cochamó is one of the great treasures hidden within the Los Lagos region of Chile. Formerly an area that was mostly used as a transit point between Chile and Argentina by early settlers and cattle traders traveling on foot and horseback via the border crossing at Paso El León, it wasn’t until the late 1990s that Cochamó began to attract a significant stream of hikers and climbers from around the world. The following are some recommended treks one can do from La Junta: • Los Toboganes: a short hike of about 15 minutes takes you to a smooth plaque of granite molded over time by the constant flow of water, and transforming the place into a fun and refreshing natural water slide that empties into a pool of ice cold water. To get there you have to cross the La Junta creek, a few meters from the confluence of the creek with the Cochamó River. • Trinidad Canyon: to take this trail its first necessary to cross to the other side of the Cochamó River. Afterwards, the trail goes through a tangled forest that in the higher reaches includes ancient alerce trees. After about two and half hours of walking, you arrive at the base of Cerro Trinidad, which with walls nearly 1000 meters high really makes one feel insignificant. About an hour later you arrive at a beautiful lake nestled at the foot of a vertical wall, and immersed in a breathtaking lanscape of granite mountains. • Cerro Arcoíris: located next to La Junta, this is one of the best alternatives for trekking. The trail takes three hours to reach an incredible viewpoint of the entire Cochamó Valley, along the way passing by alerce trees and where its necessary to climb rock with ropes and ladders that have already been installed there to aid your ascent. For the more adventurous, the summit can be reached by extending your ascent two hours more. • El Arco: a trail that goes into Cochamó Valley and, after about four hours, provides access to a place which, as its name implies, looks like an arc of natural rock that has formed with the passage of time by water. As well, in this area its possible to see an unfortunate, yet stunning field of dead alerces.

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Ubicado a 110 kilómetros de Puerto Montt, el Valle de Cochamó es uno de los grandes tesoros que se esconden al interior de la Región de Los Lagos en Chile. Un rincón que antiguamente fue utilizado como vía de comunicación entre Chile y Argentina por los primeros colonos y comerciantes de ganado a través del paso El León. No obstante, recién a finales de los ’90, este sector comenzó a atraer a un número significativo de senderistas y escaladores de distintas partes del mundo. A continuación, algunos de los senderos más emblemáticos que es posible realizar desde La Junta: • Los Toboganes: corto trayecto de unos 15 minutos que lleva a una placa de granito que el agua ha pulido con el paso de los años, transformándola en un divertido y refrescante tobogán natural que desemboca en un helado pozón. Para poder llegar es necesario cruzar el estero La Junta, a pocos metros de la confluencia de éste con el río Cochamó. • Cajón del Trinidad: para acceder a esta ruta es necesario cruzar hasta la otra orilla del río Cochamó. Tras ello, el sendero se interna por un enmarañado bosque que en la parte alta cuenta con añosos alerzales. Luego de unas dos horas y media de caminata, se arriba a la base del Cerro Trinidad, que con sus paredes de casi mil metros de desnivel nos hace ver insignificantes. Cerca de una hora más adelante es posible llegar una bella laguna enclavada a los pies de una pared vertical, inmersa en un sobrecogedor paisaje de montes graníticos. • Cerro Arcoíris: ubicado a un costado de La Junta, representa una de las mejores alternativas para hacer trekking. Un sendero que en tres horas y media lleva hasta el mejor mirador del valle de Cochamó, atravesando por alerzales y donde es necesario realizar pasos de roca por medio de cuerdas y escaleras que han sido instaladas para el ascenso. Para los más avezados, la cumbre se puede alcanzar extendiendo la subida en cerca de dos horas más. • El Arco: recorrido que se interna en el valle de Cochamó y que, luego de unas cuatro horas, permite acceder a un lugar que, como su nombre lo indica, corresponde a un arco de roca que se ha formado a través de los años por acción del agua. Asimismo, en este sector es posible encontrar un impactante cementerio de alerces.

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Environment Medioambiente

Let’s change society, not the climate

Cambiemos la sociedad, no el clima By Manuel Baquedano

JAVIER VIERAS

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014 will end as the hottest year we have on historic record. Without a doubt, we are literally cooking because of temperature increases that are small but sustained, and annul any perception of imminent danger to the human species. The syndrome of the frog who dies happy because he isn’t able to perceive the temperature changes that make him lose his reflexes can also be applied to humans. I have participated -if my memory serves me- in twelve of the twenty preparatory conferences that have been held by UN member countries, without making any serious progress on a worldwide climate change treaty that would include the main polluting countries. The current meeting in Lima (COP20) will surely end with many nice promises but no concrete solutions. The situation is so grave that after 20 years of negotiations, the UN and scientists have given up on achieving a treaty that will return the Earth to its normal temperature (350 ppm) and today are negotiating a world that is two degrees hotter than normal (400 ppm) for the year 2050. The bad thing is that at the end of 2014, we are already bordering on 399 ppm, which doesn’t leave us much margin for the future. How have we gotten into such a dramatic situation? Today’s civilization, in which we happen to live, has based its growth on the use of

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l año 2014 terminó siendo el más caluroso del que se tenga registro histórico. Sin duda nos estamos literalmente cocinando por aumentos de temperatura que son pequeños, pero sostenidos, y que anulan toda percepción de peligro inminente para la especie humana. El síndrome de la rana que muere feliz cocinada al no poder percibir los cambios de temperatura que le hacen perder sus reflejos se aplica también a los humanos. He participado -si mal no recuerdo- en doce de las veinte conferencias preparatorias que se han realizado entre los países miembros de la ONU, sin que se logre avanzar seriamente en un tratado mundial para el cambio climático y que involucre a los principales países contaminantes. De la reunión que se realizó en Lima (COP20) durante diciembre de 2014, seguramente saldrán bonitas promesas, pero nada concreto. Tal es la gravedad de la situación, que después de 20 años de negociaciones la ONU y los científicos han renunciado a lograr un tratado que le devuelva a la Tierra su temperatura normal (350 ppm), para actualmente negociar por un mundo con dos grados más de lo normal (400 ppm) para el 2050. Lo malo es que a fines del 2014 ya bordeamos los 399 ppm, lo que no nos deja margen para el futuro.

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fossil fuels that have saturated the atmosphere with greenhouse gases, of which CO2 is the most well known. This is part of the problem, which the UN hopes to intervene with mitigation and climate change adaptation measures. The other part of the problem is our consumer society, the real way this civilization expresses itself, where the wellbeing of human beings has been linked to the continuous and infinite increase of material goods as a way to satisfy human needs. The climate treaty currently being discussed in Lima and next year in Paris is not about changing our consumer society, which is truly responsible for climate change, but about ways to make it more sustainable, trusting that science, technology or God will save us from its foreseeable collapse. A few days ago, an announcement was made that the UN has formed an official interdisciplinary group of experts from several countries to work on how to announce to humanity that a global disaster may occur. The group has met several times and the next meeting is scheduled for January 2015. Some may think that the group is talking about a large meteorite or a solar blaze; others may think it could be communicating about global economic collapse or a nuclear war. Maybe the climate discussion can at last give us the opportunity to talk about the society in which we can and want to live. Because if a meteorite hit our planet and killed millions of human beings, maybe humanity would learn quickly and terribly that we should give environmental sustainability absolute priority over economic development, and as a species we might be able to save ourselves. But since the rise in temperature is slow but sustained, we won’t react until the moment when we are about to expire. It will be neither capital nor the State that will save the Earth. Only a powerful, worldwide citizen’s movement that carries a new culture that puts an end to our society of consumption and waste can give us the opportunity to keep dwelling in this beautiful planet. When this issue becomes central to international negotiations, I will once again participate in the climate change conferences.

"The other part of the problem is our consumer society...the well-being of human beings has been linked to the continuous and infinite increase of material goods” "La otra parte lo constituye la sociedad de consumo, donde la mejora del bienestar de la especie humana, se ligó al aumento continuo e infinito de las mercancías materiales"

¿Cómo llegamos a esta dramática situación? La actual civilización en la que nos tocó vivir ha basado su crecimiento en el uso de combustibles fósiles que han saturado la atmósfera de gases de efecto invernadero, de los cuales el CO2 es el más conocido. Esta es una parte del problema, que la ONU pretende intervenir con medidas de mitigación y de adaptación al cambio climático. La otra parte lo constituye la sociedad de consumo, que es la manera como se expresa en la realidad esta civilización, donde la mejora del bienestar de la especie humana se ligó al aumento continuo e infinito de las mercancías materiales como forma de satisfacer las necesidades humanas. El tratado climático que se discutió en Lima y que se hará este año en París, no es sobre el cambio de la sociedad de consumo, verdadera responsable del cambio climático, sino de las medidas para hacerla más sostenible, confiando en que la ciencia, la tecnología o Dios nos salvarán del previsible colapso. Hace algunos días se conoció la información en relación a que la misma ONU formó un grupo oficial interdisciplinario de expertos de los distintos países, para trabajar sobre cómo anunciarle a la humanidad la ocurrencia de un desastre global. El grupo se ha reunido varias veces y su próxima junta se anunció para enero del 2015. Algunos pensarán que podría tratarse de la llegada de un gran meteorito o una llamarada solar; otros pensamos que también podría tratarse de comunicar un colapso económico mundial o de una guerra nuclear. Tal vez la discusión del clima nos abra por fin la oportunidad de discutir sobre la sociedad en que podemos y deseamos vivir. Si la llegada de un meteorito golpeara nuestro planeta matando a millones de seres humanos, quizá la humanidad aprenda en forma muy rápida y terrible que debemos darle a la sustentabilidad ambiental una prioridad absoluta por sobre el desarrollo económico, y así nos podríamos salvar como especie. Pero como el incremento de la temperatura es lento, pero sostenido, no reaccionaremos hasta el momento en que estemos a punto de expirar. Ni el capital ni el Estado salvarán a la Tierra, sólo un movimiento ciudadano mundial potente, portador de una nueva cultura que termine con la sociedad de consumo y el despilfarro nos puede dar la oportunidad de seguir morando este hermoso planeta. Cuando este tema sea central en las negociaciones internacionales, volveré a participar en las conferencias de cambio climático.

MARÍA JOSÉ BUSTAMANTE

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Species Profile Perfil de Especie

Monito del Monte

MARCELA FRANCO

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onsidered a “living fossil,” because it is the only surviving member of an order of opossums called Microbiotheria that went extinct some 40 million years ago, the monito del monte resembles moreso a strange kind of rat than a marsupial that climbs trees with ease. But the monito del monte (Dromiciops gliroides), whose name means “little mountain monkey” in English, is a unique species closely related to Australian pouched mammals like the kangaroo. Some scientists even speculate it migrated from Australia to South America during the prehistoric Eocene era before the ancient supercontinent Gondwana split up. The intriguing monito del monte is only slightly larger than a mouse, with a long tail, brown fur, round ears, and black rings around its eyes. A nocturnal animal, it is found in the temperate rainforests of southern Chile from the Bio Bio region to Chiloe Island, and Lago Nahuel Huapi in Argentina. A few years ago, a scientist from Austral University in Valdivia, Chile, claimed the monito del monte may actually be half-reptile because of their low metabolic rate and their astounding variation in body temperature during activity. Still, there is considerable scientific debate about whether it can indeed be called a “reptile with fur” and how much the species has evolved from its ancient past. In recent years, as scientific methods for tracking the animal have improved, the species is now considered to be relatively abundant within its small range, yet it is a rare animal - the last of it’s kind – and remains a conservation priority and a vulnerable species.

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onsiderado un “fósil viviente”, porque es el único miembro sobreviviente de un orden de zarigüeyas llamadas Microbiotheria y que se extinguieron hace unos 40 millones de años, el monito del monte se asemeja más a una extraña especie de rata que a un marsupial que trepa árboles con facilidad. Pero el monito del monte (Dromiciops gliroides) es una especie única estrechamente relacionada con mamíferos australianos como el canguro. Algunos científicos incluso especulan que emigró desde Australia a Sudamérica en la época del Eoceno prehistórico, antes que el antiguo supercontinente Gondwana se dividiera. El intrigante monito del monte es apenas un poco más grande que un ratón, con una larga cola, piel marrón, orejas redondas y anillos negros alrededor de sus ojos. Es un animal nocturno que se encuentra en los bosques templados del sur de Chile desde la región del Bío Bío hasta la Isla de Chiloé, y el lago Nahuel Huapi en Argentina. Hace unos años atrás, un científico de la Universidad Austral de Valdivia, afirmó que el monito del monte podría ser en realidad mitad reptil debido a su baja tasa metabólica y su sorprendente variación en la temperatura corporal cuando está activo. Aún así, existe un considerable debate científico sobre si en realidad puede ser llamado un “reptil con piel” y en torno a qué tanto la especie ha evolucionado a partir de su antiguo ancestro. En los últimos años, a medida que los métodos científicos para rastrear animales han mejorado, la especie ahora es considerada como relativamente abundante dentro de su pequeño rango de distribución. Sin embargo, es un animal raro –el último de su tipo- y sigue siendo una prioridad de conservación y una especie vulnerable.

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