4 minute read

Bebel Ibarra Asencios

16

APU LLAMOQ Y SU PRESENCIA EN LA REGIÓN DE CONCHUCOS

Advertisement

Bebel Ibarra Asencios

INTRODUCCIÓN

Siempre se ha tenido a la vista, desde los inicios de la ciudad de Huari, el imponente Llamoq, el apu de la provincia, el apu de los huarinos; también se le puede denominar la huanca, el awilu, la jirca; pero este juego semántico, no cambia el significado que tiene para los huarinos, del «apu del pueblo», el protector.

Los apus constituyen los ancestros, que tienen cierto carácter divino y que se representan de muchas maneras, como por ejemplo: cerros y lagunas. Un ancestro que en la antigüedad tuvo la misión de fundar el pueblo de Huari (no se hace referencia al actual Huari), proteger al pueblo, proteger las cosechas y que ahora se muestra en el paisaje en forma de un cerro, algo muy común en los andes peruanos.

El Apu Llamoq y su presencia en la región de Conchucos

LAS REFERENCIAS HISTÓRICAS

Revisando documentos escritos correspondientes a los tiempos de la Colonia, se halló la siguiente referencia: Rodríguez Príncipe, quien vivió entre 1578 y 1638, menciona la existencia de una huaca, también llamada Llamoq, en el pueblo de Marca en el Callejón de Huaylas. Al respecto señala:

«... a un cuarto de legua desta población muy antigua donde en un adoratorio rodeado de cantería y en medio hecho un caracol estaba su respetada y principal Huanca llamada Llamoq que era una piedra al modo de una calavera tan pesada como fiera que mirarla ponia horror estaba rodeada de muchos sacrificios adorábanla con airjuas y trompetas estos llactas y era huaca e la madre del cacique y los deste ayllo dijeron proceder de esta huaca….».

En la Relación de los Primeros Religiosos Agustinos que data de 1560, se menciona que en Huamachuco se veneraban a piedras redondas o munigundo, a las peñas muy grandes a las que se les denominaba Yamaguaca y Yamoguanca.

En la zona de Huachis, en la zona denominada Jatoviejo, los pobladores tienen miedo de subir a un cerro al cual llaman falso Llamoq, (también lo conocen como Winaj); porque: «cuando uno sube a él, se aparece en el Llamoq de Cajay».

Los ancestros también pueden haber sido conquistadores, que llegaron de otros lados y se establecieron en un lugar. Es por eso que la representación de una huanca conquistadora, que irrumpió en la zona de Conchucos proveniente del Callejón de Huaylas o viceversa podría explicar del por qué existen varios Llamoq en la sierra de Ancash.

Otro dato sobre las huancas – cerros, es el que señala Cristóbal del Albornoz en 1584, quien se refiere: «Existe Anco-vilca, la huaca principal de los indios de Huanuco y Pincos, la cual es una piedra

Bebel Ibarra Asencios

que está en un cerro pequeño junto al pueblo de Pincos». Este pueblo de Pincos se halla cerca de Huachis. En la actualidad Ango, es el nombre del único nevado fuera de la Cordillera Blanca, al cual los huachisinos llaman «Apu Ango».

LLAMOQ Y LOS DATOS ARQUEOLÓGICOS

Quienes han subido alguna vez a Llamoq, pueden haber notado que el cerro constituye un sitio arqueológico, rodeado por una serie de muros, que ascienden de manera concéntrica, para luego terminar en una plataforma circular, sobre la que actualmente se halla una cruz (Fig. 1).

Debe aclararse que Llamoq tiene dos cimas, dos cruces, una de ellas es la que se ve desde Huari, y en donde a mediados del 2008 los pobladores colocaron una nueva cruz y detrás de ésta se halla la otra cima, que no es visible desde Huari, y es a la cual se refiere el presente texto (Fig. 2).

Casos similares se repiten en muchos de los sitios arqueológicos que ahora presentan cruces, como por ejemplo: - La cruz de Chullin, se halla sobre un sitio arqueológico (Ampas). - La cruz de Gantujirca (se halla sobre un inmenso sitio arqueológico con muros que superan los 8 metros de altura) se localiza en Yacya. - La Cruz de Winaj en Huachis, este sitio presenta las mismas características que Llamoq: presenta una serie de muros que rodean al cerro, culminando en una plataforma, sobre la cual se encuentra la cruz.

En fin, existen cruces y huancas a lo largo del territorio de Huari.

COROLARIO

El Apu Llamoq y su presencia en la región de Conchucos

La presencia de numerosas cruces obedece al hecho que durante el periodo de la conquista los antiguos peruanos, tuvieron que cambiar sus creencias, obligados por el poder católico de aquel entonces. Pero sucedió que muchos de los pueblos que tenían sus ancestros en los cerros, en los lugares arqueológicos, decidieron colocar las cruces cristianas en estos lugares para no separarse de sus ancestros, lo que generó que los extirpadores de idolatrías, aquellos mandados por la Santa Inquisición, vieran que dichas cruces cristianas eran objeto de culto; surgiendo así una simbiosis entre lo antiguo y lo moderno (europeo), que perdura hasta la actualidad, lo que se refleja en el hecho de que muchas festividades católicas, fueron «enmarcadas» por la Iglesia dentro del calendario antiguo para su continuidad en el tiempo.

Bebel Ibarra Asencios

Figura 1. Vista panorámica de la Cruz de Llamoc.

Figura 2. Vista de una de las estructuras que rodea el sitio de Llamoc.

232

This article is from: