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El páramo bajo
1/ Fundamentos ecológicos 35
tantes por km2 en las regiones cafetaleras). Los suelos, ligeramente ácidos, tienen una textura franca. Bajoel lecho, la materia orgánica se transforma y mineraliza rápidamente. El horizonte B es marrón grisáceo o rojizo y marca a la vez la tendencia al relave y fersialización. Pueden dar latosoles húmicos blandos. En las pendientes fuertes los suelos jóvenes,que todavía no han perdido sus bases intercambiables por el relave, tienen una cierta fertilidad a condición de que el escurrimiento no elimine rápidamente sus capas. Se trata así de un equilibrio dinámico, difícil de mantener en términos agrícolas. Una protección excesiva de las pendientes puede ocasionar la fersialización y empobrecimiento de las tierras; un decapamiento muy rápido de los terrenos cultivados lleva a descubrir rápidamente la roca madre. Entre las dos posibilidades el margen es mínimo.
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La selva umbrosa admite árboles de gran copa, con raíces poderosas, como "juglans tropico", tabaleia sp. Cedrela tissilis, ticus. Arboles que pierden hojas en la estación seca como el jacarandá, Cordia bombax, Erytrina sp. y que florecen al deshojarse. La selva permanente comprende tres estratos de vegetación arbórea. Después de la tala y abandono de los cultivos, los árboles colonizadores de los claros son los cecropiae ("yarumo") de grandes hojas, melastomacea (miconia, etc.). Es posible encontrar todos los pasos de transición entre la selva permanente y la selva clara de plantas espinosas, con árboles botella, cactáceas y tapiz gramíneo de estación.
Estas vertientes han sido fuertemente desforestadas desde el siglo pasado, debido al desarrollo del cultivo del café, cuya extensión alcanza en Colombia más de un millón de hectáreas. La variedad "arábica" bajo la sombra del "guamo", especialmente eritrina, en asociación con plátanos, y a veces con maíz y yuca, recrean un complejo ecosistema diversificado, que da lugar, cada vez más, al mantenimiento del monocultivo de "caturra", practicado sin sombra selvática y que crea un ecosistema monoespecífico que acentúa su posible fragilidad. Es también el sector del cultivo de la caña de azúcar para la fabricación de azúcar rubia no refinada y de ron para el consumo local, cultivo asociado o no a los alimenticios: maíz, yuca, camote, plátanos y de una ganadería de vacunos en pastizales sembrados (melipis minutitlora, guinea, imperata, etc.).