más allá del SCRUM

Formas de trabajar

La agilidad más allá de SCRUM

Por Diego Ochoa Rivas.

Aunque hoy en día Scrum es el marco de agilidad más popular y utilizado a nivel mundial por empresas y personas que necesitan acelerar y mejorar sus resultados. Con más de 6,000 profesionales capacitados, formados y acompañados, puedo decir que sólo el 30% de las situaciones y necesidades de los equipos y organizaciones pueden ser resueltas exclusivamente con Scrum.

Algunos de los principales elementos que ocupa Scrum, entre otros son:

1. El sprint. 2. Planeación del sprint. 3. Historias de usuario. 4. Reuniones diarias. 5. Entrega y revisión de producto por sprint. 6. Retrospectivas al final de cada sprint

Aunque estas son consideradas prácticas cuya base es la agilidad, no resuelven muchas situaciones como, por ejemplo: ¿Qué pasa si la organización nunca ha hecho agilidad?, ¿Cómo elijo todos los roles necesarios en Scrum?, ¿Cómo coordino múltiples equipos?, ¿Scrum me sirve en proyectos de innovación, gestión del cambio o no tecnológicos? Estas y muchas otras son algunas de las preguntas que Scrum no puede responder.

Para tener un poco más de contexto, recordemos que: “La agilidad es la capacidad que pueden desarrollar las personas, equipos u organizaciones para entregar valor de forma adaptativa y continua en un entorno de mucha turbulencia” (tomando como referencia algunas definiciones generales). Al ser una capacidad esta puede ser desarrollada por diferentes “caminos”, entre ellos se encuentran: marcos, prácticas, metodologías, etc., dependiendo del contexto, tamaño, necesidad y capacidad de cada equipo u organización estos pueden ser diferentes.

Derivado de lo anterior, podemos decir que cualquier entorno en donde exista alto nivel de incertidumbre y/o complejidad puede requerir desarrollar capacidades ágiles, sin embargo, las características propias de cada entorno determinarán qué prácticas son más efectivas. A continuación, compartimos algunos ejemplos:

7 Si lo que requieres es sólo gestionar actividades o flujos de trabajo personales o para equipos no mayores a 15 personas sin modificar los procesos, el método Kanban puede ser el más

apropiado, ya que éste te permite mejorar continuamente a partir de los procesos actuales. 7 Para gestionar proyectos con un equipo de 5-12 personas como máximo, en donde el propósito este claro pero la incertidumbre en los requerimientos es alta indudablemente se recomienda Scrum, adicional a lo anterior es importante considerar que este marco requiere 3 roles principales: Scrum Master, un Product Owner y un Developer Team. 7 Cuando tus equipos de desarrollo de software necesitan ser más rápidos o incrementar la calidad de desarrollo o liberación prácticas como

Extreme Programming o DevOps podrían ser de gran ayuda. 7 En el caso de que requieras coordinar y sincronizar múltiples equipos de forma más ágil o desarrollar esta capacidad en medianas o grandes empresas, los marcos de escalamiento como

SAFE (Scaled Agile Framework), DA Disicpline

Agile o Scrum of Scrum pueden ser de mucha utilidad. 7 Para el desarrollo de productos o servicios innovadores que requieran mayor madurez, se pueden utilizar metodologías como: Design

Thinking y Lean Startup, estos pueden ser claves, ya que se diseñaron para entornos de alta incertidumbre y complejidad. 7 Por último, si lo que buscas es desarrollar o fortalecer una cultura ágil a nivel, se podría fomentar el Management 3.0 o utilizar Lean Change

Management, como una palanca en el cambio cultural.

Indudablemente estos son algunos de los principales marcos o prácticas ágiles, es importante mencionar que no porque ocupes una mayor cantidad de estas prácticas, la capacidad de tu equipo u organización será mayor, lo ideal aquí es que puedas identificar claramente cuál es la necesidad y capacidad de tu equipo u organización para seleccionar a aquella(s) práctica(s) más adecuadas.

De igual forma este artículo no supone en ningún momento demeritar las prácticas predictivas, ya que estas en entornos donde se requiere alto control y existe baja incertidumbre son de gran utilidad. Tampoco olvidemos las prácticas híbridas que combinan enfoques predictivos con ágiles y que son más adecuadas en organizaciones medianas y grandes del sector salud, farmacéutico, financiero y gubernamental.

Independientemente del marco o práctica que quieras aplicar, recuerda que lo más importante es fortalecer una mentalidad ágil a través de los valores y principios, ya que en múltiples ocasiones he tenido la oportunidad de ver empresas que siguen en la práctica al pie de la letra, sea cual sea, sin mejorar sus resultados y esto en gran medida por una falta de mentalidad ágil en las personas, por ejemplo: realizar reuniones diarias de pie, en donde cada miembro del equipo solo de un estatus, en vez de concientizar que esa reunión es para comunicarse, debemos asegurarnos de que todos estemos alineados y que llegáremos a los resultados comprometidos.

Por último me gustaría recordar que Scrum nace a partir de la necesidad de las organizaciones por entregar resultados en menor tiempo, donde se debe de contar con una mayor adaptabilidad, pero sobre todo el poder mejorar la comunicación, colaboración, y aprendizaje de todas personas involucradas en los proyectos (clientes, equipos, patrocinadores etc.), por tal motivo te invito a que no dejes de aprender continuamente aplicando el conocimiento, reflexionando sobre los resultados y adaptándote a los cambios que tu entorno pueda tener, lo más recomendable es seleccionar la práctica que sea de mayor utilidad.

Referencias: Compendio Principales Marcos Ágiles Master in Agile https://masterinagile.org/ La Guía Definitiva de Scrum: Las Reglas del Juego 2020 Ken Schwaber and Jeff Sutherland Guía práctica de agilidad 2017 Project Management Institute, Inc. Todos los derechos reservados.