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La eliminación de DACA, una medida sin precedentes PRAXIS, consulting Introducción Desde 2017, cuando Donald Trump asumió la presidencia de los Estados Unidos de América se destacó por idealizar políticas anti migratorias, dedicadas a desprestigiar la confluencia de inmigrantes ilegales dentro de la nación, las mismas que incluso en ocasiones se tornaban un poco xenófobas. Como medida a esto, se esbozó que en su mandato se haría todo lo necesario para dar por terminado el programa DACA 1, una política iniciada por su predecesor, Barack Obama, que estaría ligada a permitir a jóvenes inmigrantes indocumentados permanecer en la nación norteamericana, en caso de que tengan menos de 31 años y hayan llegado al territorio antes de los 16. Para lo cual, en el presente ensayo argumentativo se evaluará: ¿Qué razones favorables pueden hacer que la eliminación de DACA sea una medida inconsistente? Ante esto, se valorará por qué el programa contribuye a desarrollar la economía nacional norteamericana; y así, se demostrará que los jóvenes inmigrantes son respetuosos de la ley; y finalmente, se evidenciará que su derogación evitaría la separación de familias de inmigrantes. Desarrollo Hoy en día, los jóvenes inmigrantes beneficiarios del programa DACA ayudan a desarrollar la economía de los Estados Unidos. De tal manera que existen alrededor de 800,000 jóvenes inmigrantes indocumentados que usan el programa DACA para cooperar con la fuerza laboral de la nación, una vez hayan completado su formación profesional. Por ejemplo, un estudio del Center for American Progress "calculó que poner fin a DACA eliminaría al menos
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Acción Diferida para los Llegados en la Infancia DACA (siglas en inglés).
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$433.4 mil millones del producto interno bruto de Estados Unidos, el mismo que es acumulado durante una década” (Wolgin, 2018, pág. 32). En consecuencia, poner fin a DACA, tendría un efecto negativo bastante drástico para la economía americana, que incluso, su secuela se vería reflejada directamente en el bienestar económico del estadounidense promedio. Además, los jóvenes inmigrantes del programa DACA, en su mayoría, buscan tener registros policiales prácticamente limpios, para que una vez hayan culminado sus estudios puedan obtener un empleo a futuro y logren mantener su estatus migratorio en el país. Motivo por el cual, se los puede considerar colaboradores positivos de la sociedad estadounidense. Estas personas que desean vivir el sueño americano, incluso en ocasiones, contribuyen más a la sociedad estadounidense que los propios norteamericanos. Para sostener lo mencionado, el Instituto CATO “estimó que las personas beneficiadas por el programa DACA tienen una tasa de encarcelamiento del 0,98% en 2015, en comparación con una tasa de encarcelamiento del 1.12% que tiene los nacionales propios del país” (Instituto CATO, 2017, pág. 73). Es decir, los jóvenes inmigrantes tienen menos probabilidades de cometer crímenes que aquellos de su edad que nacieron en el territorio de los Estados Unidos, incluso en ocasiones los inmigrantes ilegales no elegibles del programa DACA, son aún menos propensos a ser encarcelados; razón por la cual la problemática del mal social de exportación de talento humano no probo, no tendría cabida. Mantener juntas a las familias inmigrantes es motivo suficiente para querer que el programa DACA continúe. Es de sincera admiración, “la valentía y el coraje de las personas inmigrantes que, a más de abandonar su territorio, abandonan, en ocasiones, sus costumbres y tradiciones en beneficio de su sobrevivencia en el país que los acoge” (Moreta, 2018, pág. 103). En consecuencia, muchos de los jóvenes a los que el programa DACA los ha favorecido han adoptado un nuevo sistema de vida por fuera de su origen cultural paterno. Por lo que es deber
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del gobierno velar por la seguridad de las familias que han exigido el reconocimiento de derechos civiles en favor de las personas inmigrantes. Conclusiones Para concluir, es pertinente destacar que muchos de los jóvenes inmigrantes beneficiarios del programa DACA continúan aportando social y económicamente a la vida y desarrollo de los Estados Unidos. Quienes plantean que la seguridad de la nación y la erradicación del malestar social serían un motivo suficiente para alentar la eliminación de DACA apoyan un ideal incongruente, como se demostró previamente. En el pasado, los estadounidenses y los inmigrantes se unieron para protestar y exigir los derechos civiles y para mantener o cambiar programas sociales como DACA. En cambio, los Estados Unidos de hoy en día, manifiestan, en su mayoría, el orgullo de poseer una herencia única de personas de todo el mundo que perseveran e intentan comenzar de cero con valores similares, en convivencia pacífica multinacional y pluricultural, pero este ideal, actualmente va careciendo de vigor por las políticas Trump.
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Referencias Instituto CATO. (2017). El impacto econรณmico y fiscal de la derogaciรณn de DACA. Washigton D.C. Moreta, E. (2018). Aporte al la sociedad estadounidense del programa DACA. Houston Estados Unidos: Texler ediciones. Wolgin, P. (2018). More work needed to sustain progress on DACA renewals. New York: Center for American Progress.
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