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ANÁLISIS DE MUERTES VIOLENTAS CRIMINALES EN EL ECUADOR
La motivación en un acto que atenta contra la vida, es un tema de análisis para poder determinar las causas que conllevan al cometimiento del mismo, y es que existen varios factores que son fundamentales en determinar la hipótesis del delito, en este punto es donde se abre la brecha entre saber diferenciar un homicidio intencional de manera criminal o de manera interpersonal, sus variables y patrones delictuales realizadas por el victimario.
Las instituciones afines a la seguridad ciudadana tienen como reto el
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Tnte. Carlos Gabriel Oña Tapia ANALISTA DAI-DINASED
control de los delitos e indicadores que producen una problemática en el país, pero el incremento de la violencia criminal es visto como un fenómeno que advierte un cambio de cultura en la sociedad, en múltiples estudios realizados (Jimenez, J. 2017:2) indica que los patrones criminológicos de los homicidas varían de acuerdo a los casos, y es que existe diferencias en la motivación como la “instrumental” que nos lleva a un evento de manera criminal y la “subjetiva” que es llevada a cabo por impulsos, teniendo en consideración que cada caso tiene tres factores en común que son la motivación, la intención y la acción. El Código Integral Penal (COIP) señala en su Artículo 140 al delito de Asesinato como... “La persona que mate a otra será sancionada con pena privativa de libertad, de veintidós a veintiséis años”, estableciendo diez premisas condicionales para que sea tipificado como tal, y es aquí donde se particularizan los delitos contra la vida en el Ecuador, donde se encuadran todos los eventos que son tomados como de violencia criminal, por esta razón, se puede establecer el inicio de una acción de carácter multiagenciada entre los distintos entes que tratan de erradicar y sancionar al homicidio intencional, sabiendo que las decisiones judiciales marcan en gran parte la
percepción de seguridad de la población ecuatoriana.
Es fundamental conocer el concepto de Violencia Criminal (Manual de Conceptualización de Variables de Muertes, 2015) en el que indica que ser criminal puede significar haber realizado una variedad amplia de actos delictivos entre los que podemos señalar robos, homicidios, atentados, actos de violencia, violación de la propiedad privada, no respeto a la autoridad, destrucción, traición a la patria, entre tantos otros.
En Ecuador en el año 2019, la cifra de Homicidios Intencionales fue de 1188 de los cuales 672 fueron por Violencia Criminal y 516 por Violencia Interpersonal, pudiendo notar en comparación a los 467 eventos por Violencia Criminal, del año 2018, un incremento de 205 casos en los periodos anuales comparados, lo que representa un aumento del 44% de casos, cifra que permite percibir un mayor índice de criminalidad que mantiene el país, relacionado a los múltiples factores que causaron en su origen las muertes violentas registradas.
El estudio de la Prevención Situacional del Delito (Summers, L. 2009:2) no se interesa por las razones por las que una persona se convierte en delincuente (de hecho, mantienen que, en la mayoría de los casos, los delincuentes no son tan diferentes del resto de la población) y en cómo rehabilitarlos, sino en las circunstancias en las que se delinque y en reducir las oportunidades para el delito, es así que una de las clasificaciones de Cornish y Clarke (2003) establece el aumentar el esfuerzo del infractor, quiere decir hacer la comisión de un delito más difícil (o por lo menos aparentar que lo es, ya que lo importante es la percepción del delincuente potencial).
Esto se puede conseguir por medio del entorpecimiento del objetivo, el control de accesos, el control de salidas, la desviación de trasgresores y/o el control de los facilitadores del delito, de este último punto se puede establecer como un facilitador para el cometimiento del delito el uso de armas de fuego las cuales fueron protagonistas en 652 Homicidios Intencionales en el año 2019, detectando que la comercialización ilegal de armas en el Ecuador y la facilidad de su obtención puede ser el canal que utilizan los victimarios para concertar de manera más eficaz el acto delictivo.
Un factor importante de estudio en las muertes violentas es la diferenciación entre el cometimiento del delito por “mera muerte” y por “des
Fuente: DAI - DINASED
cargo”, existiendo en este último la presencia de sentimentalismos, lucro, venganza, etc., en la cual está inmerso el dato importante que, de las 652 muertes por arma de fuego, 261 fueron ocasionadas por impactos del proyectil en la parte superior del cuerpo, significando que en el 40% de las muertes por violencia criminal en el año 2019 se buscó de manera contundente el fallecimiento de la víctima.
La verificación de las zonas críticas en territorio permite la identificación de patrones delictuales como “Hot Spot” o nichos criminológicos donde nace, se desarrolla y naturaliza el crimen con los habitantes de dichos sectores, en tema de subzonas (Modelo de Gestión, Policía Nacional del Ecuador, 2008) se establece que en
Fuente: DAI - DINASED
Fuente: DAI - DINASED
el año 2019 el Distrito Metropolitano de Guayaquil con 232 eventos es la zona donde más delitos contra la vida, por violencia criminal se han cometido, seguido la subzona Los Ríos con 75 eventos, a continuación Manabí con 67 eventos, Guayas con 65 eventos y por último El Oro con 64 eventos.
Ante esta problemática, la Dirección Nacional de Delitos contra la Vida,
Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestros, DINASED, obedeciendo a su misión de prevenir e investigar los delitos contra la vida, desaparición de personas, la extorsión y el secuestro de ciudadanos ecuatorianos y extranjeros dentro del territorio nacional, ha logrado la identificación de 21 organizaciones delictivas en las cinco subzonas del país con mayor problemática en el año 2019, logrando desarrollar cuatro operativos denominados “Zeus” con el resultado de la detención de 101 personas relacionadas a delitos contra la vida, lo cual demuestra la reacción oportuna ante los hechos delictivos, estos cursos de acción van de la mano con la parte preventiva la cual mediante análisis estadísticos y estratégicos en el año 2020 propenderá encontrar la raíz del problema criminal realizando estudios integrales no solo operativamente sino socioeconómicos, apuntado como estrategia la realización de análisis prospectivos por parte del DAI - DINASED, con la finalidad de identificar futuras víctimas de una manera técnico-analítica manejando patrones conductuales y criminológicos, logrando establecerse como una dirección fortalecida no solo en la investigación del delito sino en el tratamiento de la información, llegando a focalizar la misión magna de la Policía Nacional que es la seguridad ciudadana y el orden público.