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Colombia en una familia Un relato familiar para entender a un país herido

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Nombramientos

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miguel maRtínez* COLOMBIA EN UNA FAMILIA. UN RELATO FAMILIAR PARA ENTENDER A UN PAÍS HERIDO

La ópera prima de Reinaldo Urueta cuenta un relato íntimo del conflicto armado en El Salado, Bolívar. Este documental que está nominado a ser tesis meritoria, resalta la resiliencia de las familias ante el horror de la guerra.

El día que Reinaldo Urueta entró al Centro Ático de la Pontificia Universidad Javeriana, se terminó de convencer sobre qué quería estudiar. Desde muy joven sabía a qué se quería dedicar, pero había estado explorando diversos enfoques. Perteneció a la primera promoción de bachilleres de su pueblo natal, El Salado, en el departamento de Bolívar. Fue justamente allí donde con un grupo de amigos formaron el colectivo de comunicaciones Coco Salado.

Primero crearon un periódico mural con información que le podía interesar a sus vecinos. Estas hojas las pegaban en las cinco tiendas del pueblo. Pero para ellos no era suficiente, querían explorar su voz. Así que condicionaron una grabadora para narrar las noticias en audio. Reinaldo se montaba con la grabadora en un burro e iba por todo el pueblo reproduciendo los CD que grababan semana a semana, a manera de una emisora ambulante: el burrófono.

Nunca había salido de su pueblo y un día llegó a Bogotá porque quería estudiar Comunicación Social. Lo que más lo sorprendió fue toda la infraestructura y equipos con los que cuenta la Universidad. Claro, pasar de un pueblo tranquilo en los Montes de María a una ciudad enorme y caótica fue un choque cultural que lo sacudió en ese momento. “Mi condición de ser víctima del conflicto, ser desplazado, ser de escasos recursos, pesó mucho al momento de

Reinaldo Urueta, estudiante de Comunicación Social.

llegar a estudiar a una universidad de élite”, relata. “Pero ver siete pisos de última tecnología para los estudiantes, me terminó de convencer”, agrega. Desde ese momento supo que quería hacer el énfasis audiovisual de la carrera.

La historia de Colombia

La historia de Reinaldo Urueta es solo suya, pero bien podría ser la de muchos colombianos. Desde su niñez, su círculo más cercano ha estado inmerso en el conflicto armado. En 1997 su familia sufrió un primer desplazamiento, pero fue en febrero de 2000 que su vida cambió radicalmente. En ese momento vivía en El Salado. Una pequeña población ubicada en los Montes de María, a unas tres horas de Cartagena.

Entre el 16 y el 19 de ese mes se produjo uno de los capítulos más oscuros de la historia colombiana. La capital

tabacalera de Colombia fue tomada por cerca de 450 paramilitares quienes durante tres días perpetraron toda clase de crímenes en contra de la población civil. 67 personas asesinadas, entre ellos dos tíos de Reinaldo; 23 desaparecidos, torturas, violencia sexual, robos y demás vejámenes a la población. Ante esta inexplicable brutalidad, su familia, como todas las demás, no tuvo más opción que desplazarse de nuevo. Durante dos años anduvieron por diferentes partes de la costa Caribe, pero fueron tan difíciles las condiciones, que incluso era preferible pensar en volver a sus tierras, con todo lo que ello significaba.

En medio de la zozobra algunas familias, como las de Reinaldo, volvieron para darle vida de nuevo a un pueblo fantasma. Ya no había cultivos ni animales, muchas casas fueron atrapadas por la maleza, incluso las carreteras se habían desdibujado. Es que dos años de destierro se sienten de todas las formas posibles.

El conflicto, los enfrentamientos y los bombardeos seguían, también la angustia. Pero como el mismo Reinaldo menciona, esta es una historia de resiliencia. A pesar de perderlo todo, los saladeños trabajaron aún más fuerte para recuperar la tierra que siempre fue suya. Reconstruyeron la infraestructura de las calles y sus casas. Volvieron a sembrar, a criar el ganado, las gallinas y los perros. Poco a poco más familias volvieron al pueblo. Las fachadas se llenaron de color, la música empezó a sonar y aun con el dolor de la muerte por dentro y la zozobra de las armas que seguían sonando, llenaron de vida el pueblo en el que tenían sus raíces.

Colombia en una familia

El resurgir de El Salado se debe completamente a la tenacidad de sus habitantes. Fueron años de mucha incertidumbre sobre qué podría pasar cuando decidieron volver. Pero fue tanta la insistencia de los saladeños que retornaron, hicieron poner los ojos del mundo allí. Con la experiencia del periódico mural y el burrófono, Reinaldo entendió la potencia de la comunicación. Pero ya en la Universidad, la quería utilizar para contar la historia de su pueblo. Muy pronto se dio cuenta que hay muchas historias sobre El Salado. Medios de comunicación, ONGs y entidades estatales han dejado registros de la barbarie que allí sucedió. ¿Cómo enfrentar el reto de hacer algo diferente? “Eso implica mirar para adentro. Tener una visión objetiva de lo que se va a decir. Analizar cómo se cuenta todo un conflicto y toda una situación bastante compleja”, dice Reinaldo. Finalmente decidió hacer un relato íntimo, desde los más cercanos, desde su propia familia.

“Estos trabajos son bastante complejos. La memoria siempre está en construcción, no hay una mirada única, todas las personas tienen una manera diferente de contar las cosas,

El Salado, Bolívar.

porque la vivieron de manera diferente”, explica. Y justamente, la versión de sus padres no había sido contada antes. Los relatos de doña María Isabel Retrepo y de don Rafael Enrique Urueta fueron la fuente principal de esta historia. Tal vez difiere mucho a otras historias por muchos detalles, pero tal vez el relato mismo del conflicto colombiano puede ser contada por medio de Hay muchas las vivencias de la familia de Reinaldo. historias por contar

En este reto, en la Facultad de Co- y ha recorrido municación y Lenguaje de la Javeriana varias regiones del se encontró a la profesora Laura Cecilia país en esta labor. Cala, quien fue la guía para explorar di- Espera documentar versas formas, académicas y artísticas, los relatos para para crear su opera prima. Colombia en que el país nunca una familia: historias de resiliencia frente olvide la crueldad al horror es el documental que cuenta que vivieron parte de la historia de El Salado y que, las regiones. a su vez, fue parte del trabajo de grado de Reinaldo como comunicador. Se complementa con un trabajo escrito de cerca de 100 páginas.

Este trabajo está nominado a ser tesis meritoria, pero para Reinaldo, lo más importante es poder contar la historia de resistencia y fortaleza de su familia para sobreponerse a las marcas que ha dejado el conflicto armado colombiano. Sabe que hay muchas historias por contar y ha recorrido varias regiones del país en esta labor. Espera que su formación javeriana le ayude a documentar los relatos para que el país nunca olvide la crueldad que vivieron las regiones, pero aún más, para entender el valor de las luchas por enfrentar el olvido y la enorme resiliencia de las comunidades por renacer en contextos tan difíciles.

Este proyecto de creación y memoria hace parte de las ponencias del V Encuentro Javeriano de Arte y Creatividad

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