La venta ilegal e irregular de gasolina y diésel ha seguido al alza y en varias regiones del país, afecta ya la economía de un impor tante número de estaciones de servicio que compran productos de origen lícito y cumplen con los requisitos y las normas aplicables al comercio
Mercado negro de gasolinas POR Israel Mendoza PÉREZ FOTOS: QUEHACER POLÍTICO /ARCHIVO
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lvidado por la agenda prioritaria de salud y economía, el país tiene un grave problema en cuanto al tema de las gasolinas. No sólo se debe a los altos precios, razón que desde el sexenio pasado ha desencadenado un descontento colectivo por los “gasolinazos” recurrentes, y que el gobierno actual prometió disminuir, a pesar de que luce imposible debido a factores como los precios del petróleo que han ido en aumento a nivel internacional y de que el peso mexicano se ha depreciado en los últimos años. Otros de los males en este “explosivo tema” es la práctica del huachicoleo, misma que no se ha erradicado a pesar de las medidas de la 4-T al inicio de su sexenio. Incluso, el diputado morenista Ricardo Francisco Exsome Zapata, ventiló ante integrantes de la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados a una red de empresas importadoras, personas físicas, transportistas y gasolineras que introducen combustibles de contrabando procedente de Estados Unidos, donde la evasión fiscal asciende a los 500 millones de pesos diarios.
Octavio Romero Oropeza, Director General de Pemex.
Esto lo denunció a principios de febrero e invitó al Servicio de Administración Tributaria (SAT), de Raquel Buenrostro; a la CRE, de Leopoldo Raquel Buenrostro Sánchez, titular del SAT. Vicente Melchi; a la FGR de Alejandro Gertz Manero; a la PROFECO ahora a cargo de Surit Berenice Romero y a Pemex de Octavio Romero, a tomar cartas en el asunto ante esta práctica desleal que afecta los intereses de la nación y la libre competencia en los servicios petrolíferos del país. E incluso la Onexpo Nacional encabezada por Roberto Díaz Alejandro Gertz Manero, de León, recién alzó la voz para Titular de la FGR. manifestar que el mercado ilegal e irregular de gasolina y diésel ha seguido al alza y en varias regiones del país, afecta ya la economía de un importante número de estaciones de servicio que compran productos de origen lícito y cumplen con los requisitos y las normas aplicables al comercio. Y es que, el gobierno de la 4T aún no le pone fin al número descomunal de litros de gasolina y diésel que ingresa diario al país a través de las aduanas terrestres, marítimas y fronterizas donde los principales accesos se dan por Tamaulipas y el puerto de Manzanillo que, en contubernio entre empresas, particulares y el crimen organizado se salen con la suya. ABRIL 2021 / 10 / QUEHACER POLÍTICO
