La nueva Davis

El formato por naciones y sus más de 100 años de historia hacen de Copa Davis un torneo único en el mundo del tenis. Desde 2019, experimentará una de sus más significativas revoluciones.

Polémica. Así se puede tildar -a lo menos- la decisión de la Federación Internacional de Tenis de modificar el formato de la tradicional Copa Davis. En agosto pasado se sometió a votación y el proyecto presentado por la empresa Kosmos (holding de inversión en deporte y espectáculo fundado, presidido y dirigido por el futbolista Gerard Piqué) logró el sí difinitivo para revolucionar la clásica competición desde 2019 y por los próximos 25 años.

La determinación generó ruido. Grandes figuras como Federer y Djokovic deslizaron críticas o derechamente se mostraron opositores, mientras otros -como Nadal- sugirieron darle una oportunidad. Pero, ¿entendemos cómo será el nuevo formato? A continuación te explicamos.

Modo Mundial

La Davis 2019 trae como principal novedad la forma de desarrollo de su Grupo Mundial. Las ahora 18 mejores naciones se enfrentarán durante una semana en una sede única previamente establecida para definir al gran campeón anual. La primera edición se disputará entre el lunes 18 y domingo 24 de noviembre en el estadio La Caja Mágica de Madrid, España.

Los 18 países en competencia se definirán de la siguiente manera: los cuatro semifinalistas de la versión anterior, dos wildcard y los 12 ganadores de las llaves clasificatorias a disputarse en febrero de cada año. Para esta edición, ya están inscritos Croacia, Francia, Estados Unidos y España. Gran Bretaña y Argentina también accedieron vía invitación, mientras que los 12 cupos restantes se definirán este 1 y 2 de febrero.

Durante la cita de noviembre los competidores se dividirán en seis grupos de tres países cada uno. Cada serie constará de dos partidos individuales y uno de dobles. Entre lunes y jueves, jugarán una liguilla -round robin- que definirá a los ocho clasificados a Cuartos de Final, a disputarse el viernes (seis ganadores de grupo más dos mejores segundos). De ahí en más se emplea eliminación directa: sábado de semifinales y domingo la final.

La clasificación de los grupos se ordenará por llaves ganadas. De existir igualdad, mandarán los sets y juegos, respectivamente.

En cuanto a los años siguientes, los cuatro semifinalistas aseguran su cupo en la próxima edición, mientras que del quinto al decimosexto lugar participan en las llaves clasificatorias de febrero. Los dos peores competidores descienden a su respectivo Grupo Zonal I.

Los grupos zonales, en tanto, seguirán con el mismo formato buscando acceder a las clasificatorias de febrero.

Chile quiere estar en la fiesta

Las llaves de clasificación ya están armadas y sólo falta definir a los 12 países que animarán la semana de tenis de noviembre próximo en Madrid.

Chile es candidato a la cita máxima y en febrero podría cerrar su participación en la primera Davis bajo esta modalidad. Para ello deberá derrotar a Austria en Salzburgo. Los austriacos no podrán contar por lesión con Dominic Thiem, su principal figura.

La historia de Copa Davis ha enfrentado en tres ocasiones previas a Austria y Chile, con un 100% de efectividad para el elenco sudamericano. El primer cara a cara ocurrió en 1952, cuando Chile venció en Viena a los europeos por 4-1. Siete años después (1959), el triunfo fue otra vez chileno en la capital austriaca (3-1). Tras eso pasó medio siglo. Recién en 2009 se repitió el cruce, esta vez en Rancagua y por mantenerse en el Grupo Mundial. La victoria fue nacional (3-2), con un aguerrido último punto en que Nicolás Massú venció 6-4, 4-6, 6-4 y 7-6 (6) a Stefan Koubek en más de cinco horas de partido. Su frase tras el triunfo fue un broche de oro: “Nada es imposible...”.

Diez años después veremos qué pasa.