El juramento de la fidelidad oaxaqueña

* Joven lector, periodista y entrevistador originario de la ciudad de Oaxaca. Es desde los 14 años colaborador de periódicos y revistas locales. Fue miembro del CCPJEO y de la VII legislatura Juvenil del estado de Oaxaca, en 2019 publicó su libro Tras la sombra del panteón San Miguel. Uriel de Jesús SANTIAGO*

Como asegura la canción popular “Uno vuelve siempre a los viejos sitios donde amó la vida”. La situación actual nos ha obligado a permanecer confinados, lo cual no implica que no hayamos podido viajar a través de los libros, canciones y biografías de hombres y mujeres de la cultura de los que ya hemos discurrido en ediciones pasadas de la revista. Y sin embargo, habiendo tantos temas allá afuera de los que mereciera hablar, algo desconocido nos trae de vuelta siempre al gran tema que nos une: Oaxaca.

Divagando en el librero, hallé una añeja lectura que me recordó “El juramento de la fidelidad oaxaqueña”. ¡Momento!, ¿Oaxaca tiene un juramento? Sí, ¿así como el juramento a la bandera que recitábamos al unísono en la primaria? Sí. Y textualmente dice: “Oaxaca, Oaxaca de Juárez, Oaxaca inmortal; querida tierra donde nacimos: A ti que guardas generosa las cenizas de nuestros padres que te dieron amor, sacrificio y heroísmo, te juramos solemnemente ante la sagrada Bandera de la Patria, serte siempre fieles y estar contigo para cumplir tus gloriosos destinos, como tus leales hijos que somos y para honra de nuestro nombre de oaxaqueños”.

La autoría de este juramento corresponde al doctor Alberto Vargas Merino, destacado oaxaqueño, egresado del Instituto de Ciencias y Artes, donde se recibió como Médico Cirujano y Partero. Fue catedrático de clínica en la Escuela de Medicina y de lógica, literatura y estética en la Escuela Preparatoria. Fue legislador; connotado poeta y orador. En su amplio currículo destacan sus investigaciones sobre los indios y el folclore oaxaqueño, además de su participación como organizador de las fiestas del IV centenario de la elevación de Oaxaca al rango de ciudad y del Homenaje Racial, al lado de figuras de la talla de Guillermo Rosas Solaegui, Fernando Ramírez de Aguilar y Alfredo Canseco Feraud. Y fue precisamente un 25 de abril de 1932, en el teatro al aire libre del cerro del fortín, la ocasión en que, según nos dice Salvador Sigüenza Orozco en su libro Oaxaca 1932, se leyó “El juramento de la fidelidad oaxaqueña”, minutos antes de comenzar el programa cívico principal de las fiestas del IV centenario.

A 88 años de este suceso, muchos aspectos de la cotidianidad de entonces, canciones, actos, tradiciones y este juramento, son ya desconocidos, pero ahí están, como volcán dormido esperando a no ser consumidos por las llamas del olvido.

Un paso adelante dos atrás:

Refrendamiento de roles de género en el confinamiento

Enriqueta PÉREZ*

SAN LUIS POTOSÍ, SLP.-Las jornadas impuestas por la dinámica del confinamiento han impactado en las formas organizativas de la sociedad en general, pero particularmente ha dejado claro que México sigue siendo en ideas-mente y práctica un país profundamente patriarcal. Han sido las mujeres quienes a lo largo del día van desempeñando una serie de roles que claramente se les han impuesto socialmente, como es el caso de la maternidad, evidenciando que en materia de paternidades responsables y comprometidas aún tenemos un largo camino que recorrer. Es imprescindible llevar a los compañeros varones a procesos reflexivos a fin de cambiar paradigmas puntuales que abonen al cambio en las relaciones horizontales, así como seguir apoyando a las mujeres en el ejercicio de cuestionar dicho rol y sumarse en este cambio de paradigma deslindando las funciones consensadas entre ambos sexos a cada uno sin que sea por imposición o determinación social del rol.

De la misma manera podemos integrar a la reflexión las actividades que implican el trabajo doméstico; en ese sentido, en la pandemia las mujeres además de estar plantadas en la maternidad se involucraban en porcentajes muy altos en desempeñar actividades de limpieza y elaboración de alimentos. En ese punto, muchos hombres más que “ayudar o involucrarse”, necesitan un cambio de paradigma completo en las forma en cómo se integran horizontalmente en dichas labores concibiendo la responsabilidad como bandera.

Sumemos ahora, a estos dos roles, la frontera (auto)impuesta de las actividades del teletrabajo, que al estar en un espacio cautivo, no se delimita claramente en el tiempo de la jornada clásica y la actividad propia del quehacer laboral, extendiéndose ésta en jornadas aún más prolongadas de planeación, reflexión y acciones puntuales.

Esta pandemia visibilizó lo que miles de mujeres venían comentando y que las miradas masculinas han minimizado y subvalorado, las triples jornadas ya eran un hecho, pero en este escenario se conjugaron y se sumaron alojándose éstas bajo una sola tutela y responsabilidad a las mujeres aun cuando sea responsabilidad de todos los miembros de la familia.

En esta nueva realidad es una oportunidad enorme de repensar y rediseñar desde los colectivos las formas de interacción que desde la familia se proyectan como oportunidades de cambio a fin de construir el tejido socio-familiar más equilibrado y responsable a fin de que las mujeres puedan, con todo su potencial, ser dignas ejecutoras de ideas creativas, científicas y sociales sin tener que seguir reproduciendo los roles que históricamente han venido desempeñando y de los cuales ya se habían tenido conquistas. La idea es seguir avanzando y no dar pasos atrás en la reflexión-acción de la reproducción de roles de género.

* Socióloga por la UNAM. Actualmente soy Coordinadora académico del Programa Diploma de la Organización del Bachillerato Internacional, representante legal de Ambientare A C. Consultora de Ánimos Novandi AC en SLP, docente y oaxaqueña de corazón.

Desde el otro lado.

Mujeres grabando, Talleres de Oaxaca en Barcelona

Toño SALDAÑA*

BARCELONA, ESP.- Es el mes de julio del 2020, se nos permite salir a la calle (con las medidas de cuidado pertinentes) y me alegra enterarme que la promotora cultural Rosa María López M., junto con la cooperativa “Ultramarinos” y la galería “La Maldita Estampa”, estén presentando una exposición titulada “Mujeres Grabando, Talleres de Oaxaca” compuesta por una amplia y maravillosa selección de grabados realizados por mujeres de cuatro talleres oaxaqueños: Hoja

Santa, Cooperativa Gráfica Oaxaca, Taller Artístico Comunitario y Burro Press.

¿Rosy por qué en Oaxaca hay tanto arte?

Oaxaca es una región que destaca por su riqueza cultural, por la enorme creatividad y sensibilidad de sus habitantes. Aquí conviven las tradiciones ancestrales junto a las expresiones modernas de forma armoniosa. Destacan su sofisticada gastronomía, la música tradicional, los textiles que se aprecian en todo el mundo y por supuesto, su plástica.

¿Rosy, podrías hablarnos un poco sobre los talleres de grabado oaxaqueño?

Estos talleres tienen como modelo de autogestión la unión de talento, trabajo y experiencia con un fin común para fortalecer los conceptos de cooperación, solidaridad y valoración de su trabajo. También se practican y aprenden diversas técnicas aunque como ellas mismas lo dicen, se inclinan por la xilografía al considerar que está al alcance de todas. Sin duda, ellas son herederas de una larga historia de las artes gráficas y al mismo tiempo, conforman una nueva generación que bajo un modelo colaborativo, hoy por hoy, están creando una mirada refrescante y dinámica en la gráfica contemporánea oaxaqueña.

¿Cómo se vive una exposición después de la cuarentena?

Estamos viviendo una etapa muy difícil en la sanidad no solo en España, sino en el mundo, por ello el 26 de marzo tuvimos una inauguración virtual

y ahora con el distanciamiento social necesario, nos toca volver a la convivencia segura. Y qué mejor que sea de la mano de estas grandes artistas oaxaqueñas y su mundo creativo que cobra mayor sentido cuando se comparte, por ello, el pasado 9 de julio realizamos la inauguración “física” con todo lo necesario para garantizar la seguridad de quien la visite.

¿Podrías hablarnos de estas artistas oaxaqueñas y sus talleres?

Estas mujeres son emprendedoras y están organizadas en talleres comunitarios que fungen también como lugar de producción, impartición de cursos y de galería. La cooperativa Ultramarinos Cultura y Arte, y la Galería La Maldita Estampa, creemos en la pasión por el arte como una forma de vida de las mujeres oaxaqueñas. Por eso, esta exposición es tan importante porque damos a conocer en Europa las colecciones gráficas de cuatro talleres: Hoja Santa: Daniela Ram, Gabriela Morac, Mayra Cruz Díaz, Salime Guró; Burro Press: Edith Chávez, Misayo Tsutsui; Cooperativa Gráfica Oaxaca: Haydee Nucamendi Gaona, Guie Niza, Sachi Kitayama Andrea Cruz Vásquez, Laura Liliana Martínez Jiménez, Veneno; y Taller Artístico Comunitario: Ángela Melchor, Betsabé Chiara, Celeste Santiago, Laura Barragán Liliana López, Mariana Guzmán, Vianey Acevedo.

¿Se puede comprar la obra y hasta cuándo estará exhibida?

Claro que sí se puede comprar y al adquirirla, ayudas a que permanezcan los talleres de mujeres oaxaqueñas. La exposición estará hasta el 20 de agosto del 2020.

*Licenciado en Diseño Gráfico, especializado en pintura y expresión gráfica, Restaurador de Arte. Artista Plástico multidisiplinario con más de 25 exposiciones individuales dentro y fuera de México. IG: tonosaldanaartista

Imperativo ¡Resistir!

Texto y fotos: María Di Paola BLUM*

AJIJIC, JAL.-Cuando comenzó toda esta situación, no imaginé que el mundo se iba a paralizar de la forma en que ocurrió. No, eso fue demasiado hasta para mi imaginación. Y conforme el tiempo pasaba sin proporcionar vacunas, la realidad asumía aspectos deprimentes. La humanidad es vida, es energía, es ganas de victoria, de pertenecer a eso u otro grupo, de liderar, de investigar, de no hacerse pendejo en pocas palabras. ¿Cuánto será cierto -me pregunto- que esta pandemia sea una guerra anunciada? ¿Qué tiene de auténtico el hecho que hace cinco años Bill Gate le preguntaba al mundo entero si estábamos preparados para una guerra bacteriológica? ¿Y qué tal ese manifiesto de los “Illuminati”, de las Piedras Guías de Georgia, de mantener la humanidad a menos de 500.000.000 personas? Ello significa controlar a los seres humanos como gallinas en los

*Estudió Sociología en la Universitá degli Studi La Sapienza de Roma, Periodista inscrita al Albo Profesional Nazionale - Regione Lazio – Roma, cursa un diplomado en historia del arte universal en el Museo de la Ciudad de Guadalajara, directora de la Galería de Arte DI PAOLA en Ajijic, Jalisco, colabora en diversos medios de comunicación nacionales y extranjeros en varios idiomas como articulista y fotógrafa. galeriadipaola@yahoo. com.mx | @dipaolablum | instagram: dipaolablum gallineros acosta de deshacerse de las categorías de humanos que no encaja en su red productiva y para ello, hay que realizar abortos, arrasar con la tercera edad, con los discapacitados. ¡Dios solo sabe como piensan reducir la humanidad a 500.000.000!. ¿Nos obligarán a todos a ponernos la vacuna? ¿Iremos a la cárcel si somos irresponsables y no nos vacunamos? ¿Quién va a parar a esos illuminati? Por mientras, hay que resistir, regar plantas y cuidar el jardín y si no hay uno, cultivar lo que esta dentro de ti: crea, inventa, piensa, escribe, resiste, practica la terapia de primero vivir que ser un numero insignificante.

Cuando era joven Estados Unidos desataba guerras porque trabajaba por un “nuevo orden mundial”; hubo un presidente republicano Bush (padre) que creía tanto en eso, que en sus discursos públicos pronunció la frase “Nuevo Orden Mundial” 36 veces.

Me estoy haciendo vieja y ni el mundo está en orden ni los Estados Unidos. ¿Y si le preguntan a un ser humano si quiere vivir o morir viviendo?. Yo, sigo buscando la respuesta en el caos de mi existencia y disfruto la búsqueda.