Derecho y Construcción:
Columnas del Desarrollo Social de Costa Rica Como es por todos nosotros conocido, El Derecho tiene como fin último la regulación de las relaciones humanas y las diferentes actividades que entre ellos se realizan, con el objeto de permitir, hasta donde nos sea posible, la armonía social.
Por José Luis Lee Ching. Abogado y Notario.
18 | Arkhitekton Marzo 2010
Podríamos decir que “nada escapa” a las relaciones jurídicas. Cada una de las manifestaciones del quehacer humano está siempre impregnada de un elemento fundamental que comúnmente definimos como legalidad. Nos levantamos en la mañana, hacemos una compra rápida en el abastecedor de la esquina, y ya, sin saberlo, hemos realizado una actividad tutelada por el Derecho Mercantil: Una Compra Venta. Sea que nos dirijamos a nuestro trabajo en autobús o en nuestro vehículo personal, ya estamos siendo tutelados por el Derecho de Tránsito. Llegamos a nuestro trabajo y somos parte activa de la Legislación Laboral. Nos casamos, tenemos hijos, adquirimos bienes…En fin, todo está tutelado por ese conjunto de normas que comúnmente conocemos como Derecho. Bajo esta perspectiva, es claro que el sector de la construcción (sea Ingeniería, Arquitectura, Ingenierías,Topografía o cualquier otra rama propia del sector) no escapa a esa cobertura de legalidad. Desde hace muchos años, nuestro país ha legislado directamente esta importante actividad del desarrollo. Ejemplos claros son la Ley de Construcciones, la Ley de Planeamiento Urbano, la Ley de Caminos Públicos y más a lo interno de la actividad La Ley Orgánica del Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos y su Reglamento. Sin obviar otros cuerpos legales que también inciden en el sector de la construcción y en quienes se desenvuelven en él, como la legislación penal, civil, laboral, municipal, etcétera. ¿Porqué esa supuesta “intromisión” (como dirían algunos) del mundo de lo jurídico en el ámbito de la construcción? No pertenezco directamente al gremio, más sin embargo tengo claro que el Sector Construcción es sinónimo de Desarrollo Social, y es menester que ese desarrollo debe ejecutarse de tal manera que los derechos de todos estén asegurados, tanto en lo particular como en lo general. Deben respetarse, por ejemplo, tanto los derechos de nuestro vecino (Derecho Urbanístico) como el derecho de todos de mantener nuestros recursos naturales, los cuales en el caso de agotarse, no sería posible la sostenibilidad de la vida en esta bendita tierra, (Derecho Ecológico, Normas de Impacto Ambiental, entre otras). Y en un segundo plano, pero no menos importante que el referido, quienes actúan en este importantísimo sector de la sociedad, deben al menos tener noción de sus derechos, obligaciones y responsabilidades.
Ahora bien, no solamente estas normas que se sienten muy propias de la actividad deben ser conocidas y aplicadas en las labores diarias de tan importante sector. ¿Es acaso que temas como Normas Municipales, de Derecho Laboral, de Riesgos y Seguros, de Propiedad Horizontal, de Derecho Mercantil y hasta de Derecho Penal, entre muchas otras, no deben conocerse y tenerse siempre presentes? Por supuesto que sí. Y desde luego no me refiero a que entonces no sea esa la labor específica del asesor legal de cada una de las empresas dedicadas a la construcción en nuestro país y de los profesionales y personas que de una u otra manera están vinculadas en esta actividad. De hecho, a ese gremio sí pertenezco, y no pretendo con este comentario negarnos nuestro trabajo diario. Mi intención con este comentario es solamente incentivarlos a que como sector, los profesionales de la construcción de nuestro país tengan clara la necesidad de tener presentes estos temas, instándoles a informarse y reflexionar sobre ellos. En esta primera edición de “ARKHITEKTON” no puedo dejar de manifestar mi complacencia al saber que sus páginas se convertirán en un foro donde, quienes tenemos conocimiento en Derecho, periódicamente podremos ponerlo al servicio de quienes bregan en la Industria de la Construcción, procurando nutrir su conocimiento en temas legales que son vitales para un mejor desempeño de su labor, y así Derecho y Construcción entre otros, integrarán un binomio, que al compartir información y conocimiento, forjará profesionales en la Industria de la Construcción, más informados y preparados que podrán proponer un modelo de desarrollo social sostenible, como nuestro país lo merece y necesita.
