Media luna

Andrea Luna, actriz de cine, teatro y televisión nacional nos comenta en exclusiva datos curiosos, experiencias y expectativas sobre el filme «Atrapado en mi Mente»; un thriller psicológico potente que llega a las salas de cine desde este 20 de julio.

Un abanico de posibilidades y una historia para contar. «Atrapado en mi Mente» es el próximo filme nacional que busca generar conciencia desde su perfil ficticio, disruptivo y oscuro. Bajo la dirección de Richard Santaría, esta película es considerada su ópera prima y busca dejar más que una grata impresión luego de su increíble paso por el Insólito Festival de Cine de Terror y Fantasía que se realizó aquí en Perú.

Dentro de una constelación de estrellas en constante ascenso, nos encontramos con Andrea, una actriz que brilla de manera particular como la luna por la noche. Apasionada, versátil y carismática son algunas de las habilidades que forman parte del repertorio que muestra en pantalla grande o en la tarima. «Hemos puesto todo el corazón y las ganas en esta película no solo para contar una historia, sino para tocar situaciones reales», relata.

Entrando de lleno y de manera curtida al largometraje, existen varias aristas que se buscan manipular con la finalidad de recrear un mensaje certero y meticuloso. «Recurrimos a extensos temas de actualidad como el acoso virtual, la violencia contra la mujer, la soledad, el miedo y la oscuridad interior. Consumo material audiovisual donde se tocan estos temas y he aprendido a ir por la vida con mucho cuidado», agrega.

Dentro de la simbología, la media luna refleja amor, trabajo, maternidad y naturaleza. Sin embargo, no todo es color de rosa, ya que la otra mitad de la luna se encuentra lastimada con una problemática que busca repuntar «Atrapado en mi Mente». «Actualmente, ni las niñas se salvan. Desde muy pequeñas se encuentran propensas a este tipo de acosos o situaciones incómodas provocadas por personas psicópatas en las redes sociales».

Andrea comparte protagónico con Sebastián Stimman, actor nacional que viene bregando un camino de éxito. Ambos se encargan de llevar sobre sus espaldas la responsabilidad de toda la película durante su duración, detalle que nos sorprendió en gran manera y que quedó demostrado en los spots brindados. «Sebas y yo somos los únicos actores dentro de la película. Ha sido un gran reto para nosotros, pero con él tengo un feeling muy grande, es como mi hermano y eso nos ayudó bastante», indica.

Andrea Luna interpreta a Verónica, una popular influencer que se verá atrapada en una pesadilla que la pondrá al límite. «Verónica es una chica perseverante que busca terminar su carrera universitaria y, a la par, hacer crecer su comunidad en redes. No suele ser desconfiada, por el contrario, es muy amable con todos. Aunque mantiene ciertos cuidados, es por aquí donde entrará el personaje de Sebastián a generar muchos cambios», añade. Amenazada y acosada. Dentro de un estado de alteración, presa del miedo y la angustia, una incertidumbre la pondrá en alerta y al borde de una ruptura psicológica.

«Esperamos con muchas ansias el estreno y que este les guste a las personas; no obstante, también buscamos que el filme llegue a plataformas donde pueda ser visualizado en otros países». Para Andrea aún se vienen más proyectos: obras teatrales, cortometrajes y largometrajes. Esta situación la mantiene expectante y feliz porque desarrolla lo que le gusta y lo que viene pensando desde muy pequeña.

Sin embargo, la primera pieza de esta aventura es «Atrapado en mi Mente», ya que nos encontramos a nada de su estreno pactado para este 20 de julio. «Invito a todos a comprar sus entradas y ser parte de esta película que llegará a sus corazones. Lo hemos hecho con mucho amor», concluye.

Desde esta trinchera, apostamos por el cine nacional y sus visiones innovadoras que no solo buscan ejercer una historia más, sino también un llamado de conciencia y reflexión. «Atrapado en mi Mente» induce en problemáticas totalmente reales que deben ser erradicadas. Empecemos a ver la luna completa, y no seamos parte de esa mitad esquiva y mezquina con la sociedad. Aplaudo y auguro muchos éxitos. //