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pablo polledri

Como la próxima edición de ECOZINE acogerá, entre otras muchas, la proyección de Loop (Ganador del Goya a Mejor Cortometraje de Animación en 2023), aprovechamos para contactar con el argentino PABLO POLLEDRI, su director.

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¿Cuando comenzaste con Loop imaginabas que podría llegar a ganar un Goya?

La verdad es que cuando comencé, sólo estaba concentrado en tratar de realizar el corto de la mejor manera que me era posible. Una vez acabado tuvo su recorrido por festivales y, cuando estaba terminando este recorrido, llegó la nominación a los Goya. Fue mi primera vez en la ceremonia y la he disfrutado mucho. Estaba con algunos compañeros que hicimos Loop y justo ese mismo día era la primera vez que nos veíamos en persona, compartir el momento ya era una alegría. Fue una muy linda experiencia y una noche que seguramente no olvidaremos.

Y no sólo el Goya, este es el cortometraje español que más premios ha ganado en los últimos años. Parece que vais a tener que montar estanterías extra para todos los galardones... (risas) Es increíble el recorrido y una alegría la aceptación que tuvo. Loop ha conectado con diversos públicos y jurados. Recibió más de 120 premios, estuvo presente en más de 40 países y fue seleccionado en más de 270 festivales, estoy muy agradecido por eso.

Desde el propio título, el bucle tiene una gran importancia en este corto. Nos has demostrado que tiene un gran poder metafórico también. La idea fue creciendo muy de a poco. Tenía ganas de utilizar el recurso de los bucles (que en animación generalmente se utilizan como algo secundario para optimizar la producción), como un elemento principal. Por su propia naturaleza me gustaba utilizarlo para representar metafóricamente las rutinas y la automatización. Luego ese concepto fue creciendo hasta que terminó evolucionando en una sociedad que funciona toda bajo este sistema de repetición.

El uso de este recurso junto al cuestionamiento de las libertades y la aceptación del sistema son los elementos principales que terminaron dando forma al guión. Jugando con el significado de bucle en el campo de la animación y marcando un paralelismo con las tareas rutinarias en la sociedad, se conformó este universo donde lo bueno y lo malo conviven en este sin fin. Esta reiteración acentúa la idea del deber de la acción. Ese deber del cual no se permite salir, que perpetúa un estilo de vida que alimenta la inercia de sus virtudes y defectos donde no está contemplado romper el paradigma. Este cortometraje busca preguntarse acerca de los roles que ocupamos en la sociedad, la rutina de nuestras vidas, lo que se espera de nosotros, hasta dónde podemos elegir cómo vivir, pero, sobre todo, examinar un sistema que aparenta funcionar de manera natural, siempre y cuando no sea cuestionado. Se interroga acerca de la supuesta idea de la libre elección. ¿Qué sucede cuando una persona, como parte de un engranaje de un sistema decide modificar su rol, quebrar un mecanismo y actuar persiguiendo el libre albedrío?

La música en Loop tiene un lugar muy importante... Sí, es fundamental. El corto es un musical donde se marca el ritmo a través de los sonidos y la música de principio a fin y siempre al mismo tempo. La música se reitera también como los loops, como parte de ese mecanismo. Este concepto de utilizar la música y los sonidos al unísono va a dirigir todas las acciones, va a reforzar la idea de repetición, de alienación, mecanizando el movimiento de los personajes, diluyendo la humanidad de los mismos y atrapándolos en un ritmo obligado. La banda musical convive con los sonidos diegéticos como una sola pieza. La idea de que los personajes acompañen ese mismo tempo refuerza el concepto del deber ser, de una sociedad que debe seguir con lo establecido de igual forma para todos. Esto es trascendental porque la idea se plasma a través de personajes que terminan haciendo movimientos mecanizados, produciendo sonidos que van a ser parte de la música y donde esta también va a condicionar sus movimientos, por ende, sus libertades.

Nos ha gustado mucho la estética elegida, la paleta de colores, el trazo del dibujo... ¿Hay algún cómic o artista que te haya servido de inspiración o referencia para Loop?

¡Muchas gracias! Estoy convencido que todo influye, pero no tengo presente una referencia directa. Lo que sí recuerdo es que para las cabezas me basé de algún modo en el cubismo. Luego opté por una paleta acotada de rojos y negros. Me gustaba usar un color en la gama de los rojos porque lo asociamos al semáforo, al freno, y conceptualmente funcionaba para una sociedad que no avanza. El negro para todos los personajes intenta reforzar la idea de una sociedad monótona y rutinaria, que funciona como una maquinaria donde todos son engranajes de ese sistema más allá del rol que ocupen.

Algo que queda muy claro en el corto es cómo todo se interrelaciona, el poder, los medios de producción, los medios de comunicación, las propias ciudades... así hasta llegar a las personas individuales. ¿Qué es lo que más te preocupa del momento actual en el que vivimos?

Por supuesto que hay muchas cosas, pero asociándolo a la idea del cortometraje creo que seguir por inercia y sin cuestionamientos un sistema que se estableció en un contexto diferente, que da alertas incesantes en distintos aspectos. Sus constantes divisiones, la intolerancia y sobre todo la falta de empatía.

¿Qué ha sido lo más complicado en este proyecto? Realizar un corto de animación como Loop significó mucho trabajo. Hacer animación es, en general, bastante laborioso y con procesos largos. Por un lado, generar el guion, el diseño de personajes y el animatic fue una tarea que la fui construyendo a lo largo de los años. Una vez que decidí sacarlo a la luz comenzó el proceso de producción que llevó un poco más de dos años. Todo esto siempre trabajándolo en mi tiempo libre. A diferencia de mis trabajos anteriores, que los había realizado encargándome integralmente de todos los procesos, esta vez pude contar con un equipo. Iván Miñambres se ocupó de la producción. Por mi lado trabajé en la dirección, la animación, la dirección de arte, el montaje y la postproducción. La animación la trabajé junto a Arkaitz del Río y M. Carmen Cambrills. La animación es 2d digital, con algunos elementos y algún fondo que hice en 3d porque facilitaba los movimientos que requerían las escenas. Los fondos los realizó Leire Acha, la banda sonora Joseba Beristain, la mezcla de sonido la hizo Rafa del Campo. Todo el proceso lo hicimos a distancia y gran parte del corto lo trabajamos durante la pandemia, lo que significó un desafío adicional sumado a la diferencia horaria, ya que vivo en Argentina. La constancia en el tiempo creo que es lo que termina sacando adelante un proyecto.

¿Tienes algún nuevo proyecto entre manos del que nos puedas contar algo?

Tengo varios guiones en proceso. Son proyectos muy diferentes entre sí, con distintas duraciones, complejidades y formatos. Pero, mientras veo si encuentro la forma de producirlos, seguramente haga alguna animación de un minuto o poco más para entrar en calor.

El festival de cine y medioambiente, cumple seis años en Pamplona. Seis años donde hemos acercado diferentes historias y lugares del mundo a la gran pantalla. Relatos que a veces nos emocionan y otras veces nos erizan la piel, pero todas ellas nos inspiran a recorrer nuevos caminos en esta realidad cambiante.

Esta edición arranca el lunes 17, con la producción española Ganado o desierto, la cual nos hablará del ganado como oportunidad para hacer frente al cambio climático. Le acompañará Loop, el cortometraje ganador en la sección de animación de estos Goya 2023.

El martes 18, tras el corto Feeling the apocalypse, le seguirá Pisar suavemente na terra, un documental brasileño sobre la sabiduría y las amenazas que sufren los pueblos indígenas en la Amazonía. La producción española Sew to say será el largo del miércoles 19, donde se realiza un repaso de la protesta feminista de los años 80 a través de la historia de vida de Thalia. Le antecederá el corto The invention of less. Nom de´une plante dará comienzo a la última sesión del jueves 20, que terminará con el largo La part du rêve, una historia de arraigo y de deseo de vivir como uno piensa.

Las sesiones serán a las 19:30 en Golem Baiona con entrada libre. Contarán con personas invitadas y con posterior debate dinamizado por el Equipo de Educación Ambiental del Ayuntamiento de Pamplona.

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