EL MONO #89 CIENCIA FICCIÓN vol.2 by revistaelmono

#89 ejemplar gratuito mayo 2021

ciencia ficción vol.2

índice

editorial

Música 4. IVÁN FERREIRO

En noviembre de 2012, tras un titubeante primer número, veía la luz la segunda entrega de esta revista. Aquella publicación, prácticamente inencontrable a día de hoy, estaba dedicada a la ciencia ficción y en ella repasábamos nuestros títulos favoritos de Philip K. Dick, hablábamos de la serie Fringe, de Jean Michel Jarre, de inventos que resultaron grandes cagadas (el Betamax, el Laserdisc, el paracaídas chaqueta, el Segway o la Cherry Coke) y, sin venir muy a cuento con el tema del mes, entrevistábamos a Guadalupe Plata, a Vakumm y la sección de Naburrismos estaba dedicada a ese archiconocido evento etílico que es La Carpa. Ese segundo número incluía también “Gorilas en la nieve” aquella sección tan molona dedicada a la montaña que ojalá algún día recuperemos. Aunque la revista estaba igual de mal maquetada que su predecesora y todavía no contábamos con las ilustres aportaciones de El Lamonatorio, Discalculia, Concha Tisfaier, Ilune o Ale, toda la tontuna y esencia monil que nos han convertido en lectura preferida de los de retretes de Iruñerria ya estaban ahí.

Recomendaciones 6. CINE BAJERIL 8. LIBROS Y CÓMICS Entrevistas 10. A. RODRÍGUEZ 12. OSKAR ALEGRIA 14. BLANCA ORIA Colaboradores 16. KIMU GROW SHOP 18. CERVEBEL 20. AIZKORA TATTOO Mandanga sideral 24. NABURRISMOS 26. CONCHA TISFAIER 28. ANA HACE... 30. DISCALCULIA 32. EL LAMONATORIO 33. HORÓSCOPO 34. PASATIEMPOS 38. BIGOTE Y PERILLA 39. CONCIERTOS

Iba a soltar el topicazo de que el que una publicación así de idiota siga viva -y en papel- es el claro ejemplo de que la realidad supera a la ficción pero, en verdad, no es para tanto. Y no lo digo porque esto no tenga mérito, sino porque en estos nueve años han pasado un montón de cosas a las que también podría aplicárseles la manida frase de “la realidad supera a la ficción”: Trump en la Casa Blanca, el auge de Vox, que Ozzy siga vivo, la distopía pandémica en la que vivimos, el terraplanismo, tomar el sol con el culo, los enemas de café, la Ley Mordaza, la reunión de Marta y Marilia… No es la realidad la que supera a nada, la realidad es la que es y punto. Es la ciencia ficción (ficción científica, en realidad) la que se queda muchas veces corta. Somos nosotros los que miramos embobados las estrellas y, con nuestros cerebros infradesarrollados, imaginamos historias de naves y alienígenas mientras todo a nuestro alrededor parece escrito por un mal guionista. Todo esto me hace pensar en una entrevista que le hicieron en 1988 a Isaac Asimov en la que hablaba de que en el futuro estaríamos conectados a través de ordenadores, que esto supondría un gran avance, que nos facilitaría la vida y mejoraría el mundo. En ese vídeo, Asimov utilizaba palabras como aprendizaje, oportunidades, educación o pedagogía. Lo que no imaginó el (parece que no tan) visionario patilludo escritor de ciencia ficción es que básicamente internet se utiliza para hacerse pajas, insultar a los demás, comprar mierdas que no necesitamos y salir en vídeos haciendo el ridículo o poniéndonos caritas de animales.

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issuu.com/revistaelmono Publicidad: Alberto 651 404 635 Contacto: revistaelmono@gmail.com Portada: JJ Chas DL NA 1989-2012

“La ciencia ficción no es sólo un género literario, es algo más: un estado de conciencia.” (René Rebetez)

EL MONO NO SE RESPONSABILIZA DE LAS OPINIONES VERTIDAS POR SUS COLABORADORES.

Iván Ferreiro

Aprovechando que ha agotado entradas en Tudela y que que el próximo 17 de junio pasará por Baluarte dentro de la gira “Cuentos y canciones”, tuvimos una entretenida charla con Iván Ferreiro que se nos fue hacia derroteros inexplorados. Hola Iván. ¿Qué tal estás? ¿Cómo estás viviendo este año tan raro? Pues bien, parece que llevamos ya muchísimo. Pero bien, en casa, tranquilo. Cuando esto empezó ya había terminado la gira y no tenía nada que hacer, estaba como de vacaciones, pero luego cuando llegó el invierno me agobié un poco más. Básicamente me he dedicado a las plantas, a los pimientos, a los tomates y esas cosas, y a escribir y grabar. Aunque esta primavera me quedé un poco colgado y no planté lo suficiente. (risas) Dentro de poco vienes por aquí con la gira “Cuentos y canciones”. ¿Cómo estás planteando estos conciertos? Pues mira, teníamos dos ideas. Cuando estás en festivales o de gira sueles tocar un repertorio y hay parte de los discos que se queda olvidada. Teníamos ganas de hacer un concierto de “estar sentados” y retomar canciones antiguas que no tocamos tanto. También estaba la idea de qué pasaría si vamos contando una historia con fotografías y vídeo. Así decidimos contar, no toda la historia, pero sí mi historia desde que estoy en solitario. Hemos ido buscando momentos y hemos hecho una especie de show donde nos reímos mucho de nosotros y donde desmitificamos muchas cosas y hablamos de todas las personas que nos acompañan. En estas

condiciones nos dimos cuenta de toda la gente a la que echamos de menos, y es una mierda. Últimamente en la televisión se ha hablado mucho de la escena indie de los noventa. ¿Cómo lo recuerdas? Creo que nunca te sentiste dentro de aquello. Siempre hay una idealización de las escenas, ya sea de esta o de otra. En mi caso, yo estaba en un grupo, en Vigo, que estábamos en tierra de nadie, no éramos un grupo indie ni éramos un grupo comercial, nadie sabía muy bien lo que éramos. Yo lo viví bastante solito. Piratas estuvimos muy solos, hicimos nuestro bolos, nuestras cosas, pero nunca sentimos que estuviéramos dentro de una escena. Creo que a medida que recordamos reinventamos la historia. Yo no me enteré del nacimiento del indie, ni lo anticipé. Quiero decir, es que el indie al final son grupos de pop de toda la vida, sólo que los noventa fueron una época muy rara. También tienes que entender que la situación económica y política era muy diferente. Los grupos que venían de los ochenta vivían de los ayuntamientos. Cuando Piratas empezamos, los ayuntamientos ya estaban prácticamente arruinados. La gente no estaba acostumbrada a pagar por conciertos porque en las fiestas los tenían gratis. Somos la primera generación que nos toca hacer que la gente pague entradas. Algo que ahora es normal, en el año 93 no lo era. A nosotros nos toca esa época y, como muchos grupos, aprendimos a buscarnos las castañas. Sabemos que eres muy fan de la ciencia ficción… ¿Qué es lo que más te gusta de este género? Primero era consumidor de ciencia ficción en cine o en series hasta que hace unos años empecé a leer a los clásicos: Asimov, Bradbury, Dick, que era de

5 - IVÁN FERREIRO - 5 mis favoritos… Después empecé a descubrir nuevos autores, a veces es difícil encontrar la literatura adecuada para seguir leyendo. De vez en cuando encontraba algún libro que me gustaba mucho pero luego he ido descubriendo que dentro de la ciencia ficción hay todo tipo de géneros. La verdad que leo casi todo lo que me cae en las manos. Un autor que me voló la cabeza es China Miéville, cuando leí La ciudad embajada, para mí era un ciencia ficción nueva, mezclada con fantasía y, la verdad, con ese punto adulto y oscuro empecé a descubrir un nuevo nicho de autores. Ahora mismo recomendaría a las mujeres que escriben ciencia ficción, están a un nivel fantástico. Recomendaría Justicia auxiliar, de Ann Leckie, o a N. K. Jemisin, que ganó dos Premios Hugo seguidos. Creo que a nivel de literatura la ciencia ficción es inacabable y espero que en algún momento el cine esté a la altura. Pasa muchas veces que nos ponen películas del espacio que en el fondo sólo son películas de terror. Estoy deseando que salga la serie Fundación y Dune de Villeneuve. Me pongo nervioso con estas cosas. (risas) Farenheit 451, Solaris… varias canciones tuyas tienen referencias a la ciencia ficción… Creo que definiría mi música como ciencia ficción surrealista. (risas) Mi vida es bastante surrealista y la ciencia ficción me ayuda. Lo cierto es que sólo leo este tipo de libros. Me ha inspirado muchísimo, porque tiene mucha poesía y mucho conflicto. Por ejemplo, la serie Leftovers para mí es un referente. Lo mismo diría de Twin Peaks, que igual es un género un poco distinto. Creo que esas historias que parecen tan alejadas de nosotros mismos a veces se juntan con la vida diaria. A veces aprendo más sobre mí leyendo sobre situaciones imposibles que cuando me leo un ensayo de un gran escritor sobre el matrimonio. (risas) Yo necesito que me vuelen la cabeza, ya sea viendo una peli, leyendo, o escuchando una canción. Que haya ideas. Creo que mi música está impregnada de todo eso.

Nos va a quedar una entrevista súper literaria ¿No? Es que hablar de música es un coñazo. (risas) Bueno, bueno, algo tendremos que hablar. ¿Qué próximos planes tienes? La verdad es que esta gira está yendo muy bien y aún tenemos más de 20 conciertos este verano. Dentro de una semana viene Suso Saiz a trabajar conmigo, y vamos a preparar cosas para el disco nuevo. Me queman ya las canciones en casa. Grabar y girar, me gusta hacer las dos cosas a la vez. ¿Sueles ir mucho a conciertos? Con la pandemia he ido a poquitos, he visto a Love of lesbian, a León Benavente… cosas que han pasado por aquí. De normal cuando estoy de gira suelo estar hasta las narices. Ahora no tanto pero antes, cuando empecé la gira de Casa, los fines de semana que no tocaba me iba a conciertos con mis hijos. Me gusta ir a conciertos, me gusta bastante aunque depende de las épocas. Si quieres añadir algo… Volviendo a la ciencia fición… (risas) Para mí tiene una cosa muy guay. Cuando llevo una semana de conciertos, antes de volver a la música necesito “lavar mi cabeza” y eso me lo permite al ciencia ficción. Si llevo todo el fin de semana emocionándome con los conciertos, a flor de piel, acabo en una especie de carcasa. Necesito algo que me lleve a otro lugar. Antes hablábamos de la ciencia ficción como género pero también la uso como método de escape para poder volver a lo mío. Cuando llega el domingo necesito algo que me lleve a otro lugar, no una película o un libro cualquiera. Para mí ese es el valor que tiene, te hace una ducha mental. Me gusta ser espectador durante un rato, que me guíen, que me engañen. https://www.baluarte.com/

Starship Troopers FICHA TÉCNICA: Título original: Starship Troopers (1997, USA) Director: Paul Verhoeven Intérpretes: Casper Van Dien, Denise Richards, Dina Meyek Duración: 129 minutos En un futuro no muy lejano una raza humana militarizada lucha contra unos bichos gigantes alienígenas. En El Mono somos muy fans de las películas de ciencia ficción y acción de los 80 y 90, ya sean obras maestras, truñitos de gran presupuesto o de serie B. Starship Troopers es una de nuestras favoritas de este género. La película, basada en una novela de Robert A. Heinlein, es una burla irónica, mordaz y descarada del fascismo y de los sistemas totalitarios. En ella se muestra como a partir de una amenaza (en este caso los bichos) se aprovecha para instalar un sistema autoritario a nivel global, donde la vida humana no vale nada y lo único que importa es servir a tu nación. Todo se conjuga para ofrecer una cinta más estética y superficial que cruda y profunda, pero con efecto contundente, acompañada de una banda sonora que te hace soñar más allá de los límites de la pantalla.

de la cinta reside en los actores, que carecen de la suficiente chispa y garra. En esta película Verhoeven (director también de Robocop, Showgirls y Desafío Total) está pasadísimo de vueltas y nos ofrece una experiencia alucinante, tan rigurosamente unidimensional y despojada de cualquier pretensión de inteligencia, que es difícil no sentirse asombrado, incluso hipnotizado, por lo que hay en la pantalla.

La película en ningún momento se toma en serio a sí misma y muchas de las escenas cutres o estúpidas están hechas a propósito. Lo peor

Por último, queremos destacar sus magníficos efectos especiales, merecedores de la nominación al Oscar en 1997.

- CINE BAJERIL - 7 THE MAN FROM EARTH (Richard Schenkman, 2007) Un día, un hombre se despide de sus amigos y les revela un secreto increíble: que es un ser prehistórico que lleva vivo 14.000 años. Una película muy interesante que consigue mantener la atención del espectador usando únicamente el poder de la palabra. A su favor hay que decir que, a parte de su originalidad y del mérito de hacer “ciencia ficción verbal”, consigue suscitar la reflexión en numerosas ocasiones y presentar un intercambio de palabra inteligente y vivaz que mantiene el ritmo de la película. DUNE (David Lynch, 1984) Por orden imperial, la familia Atreides debe hacerse cargo de la explotación del desértico planeta Arrakis, único sitio del Universo donde se encuentra la codiciada especia (o droga) melange. Adaptación del libro homónimo escrito por Frank Herbert y considerado uno de los súper clásicos de la ciencia ficción, Dune es una especie de Juego de Tronos en el espacio. El libro es una maravilla y, por desgracia, la película no lo es tanto. Lo bueno: la dirección artística (magistral e imperecedera), la música de Toto y Brian Eno, la fotografía deslumbrante de Freddy Francis (sobre todo en la versión restaurada) y unos actores de renombre incuestionable. Lo malo: el montaje. Si no te has leído el libro, tienes muchas posibilidades de perderte en la trama.

THE END OF EVANGELION (Hideaki Anno y Kazuya Tsurumaki, 1997) Película que da final a la aclamada serie anime del mismo nombre. Evangelion es una serie de 26 capítulos a la que, debido a su complejidad y simbolismo, se le considera uno de los mayores ejemplos del realismo épico. La serie fue muy bien acogida por crítica y público, pero su ambiguo final despertó las quejas de muchos aficionados, consiguiendo que se realizara esta película en un intento de dar un poco más de luz a la historia. Resaltar su animación impecable, sobre todo a partir de la segunda mitad, con dibujos e imágenes muy sugerentes, con una enorme carga simbólica, para narrar la etapa crucial del film. Además, la música elegida siempre da en la tecla adecuada. EL HOYO (Galder Gaztelu Urrutia, 2019) El hoyo es una cárcel en la que el número de plantas no parece tener fin, la comida es enviada desde los pisos superiores a los inferiores, gastándose por el camino y terminando por no quedar nada cuando ya se empieza a llegar a las plantas más bajas. Esta película fue un éxito de Netflix y demostró que las nuevas generaciones del cine estatal vienen fuertes y dispuestas a romper. El argumento, a priori, parece sencillo, pero cuando la peli llega a su fin te vienen millones de preguntas a la mente, miles de cosas que analizar o debatir y su mensaje deja gran calado en tu interior.

- LIBROS Y CÓMICS -

SENTIENT - Jeff Lemire y Gabriel Walta Panini - 168 páginas Con guión de Lemire (premio Eisner y uno de los escritores americanos más reputados del momento) y dibujo de Walta (También premio Eisner por La Visión), Sentient nos cuenta la historia de una nave espacial que transporta familias de refugiados a una de las colonias que la Tierra ha creado en otro planeta. En medio del viaje ocurre algo inesperado que no desvelaremos y Valarie, la inteligencia artificial de la nave, tendrá que asumir el control de la situación. Como buena historia, el escenario futurístico no es la base del relato, sino un vehículo para reflexionar de manera profunda sobre diferentes temas. RECUERDOS DEL IMPERIO DEL ÁTOMO - T. Smolderen y A. Clérisse ECC - 144 páginas Paul, un escritorzuelo, lleva toda la vida en contacto mental con un héroe del futuro, en el que nadie cree. Convertido en un personaje famoso gracias a un artículo de su psiquiatra, acabará participando en un terrible complot para dominar el mundo. Psicoanálisis, el origen del estilo “atomium”, proyecciones astrales, ciudades futuristas, un cameo de Franquín, escritores de ciencia ficción como diseñadores del futuro, esbirros saludando como en un cómic de Moebius... Una historia apasionante ambientada en los años cincuenta, escrita con el talento habitual de Smolderen y dibujada por Clérisse como si perteneciera a aquella época. SUPERNOVAS. UNA HISTORIA FEMINISTA DE LA CIENCIA FICCIÓN AUDIOVISUAL - Elisa McCausland y Diego Salgado Errata Naturae - 450 páginas Otro punto de vista desde el que mirar a creaciones y creadoras de cine, televisión, videojuegos y cómics de ciencia ficción. Si por algo se caracteriza el género es por su potencial para revolucionar los paradigmas establecidos. El análisis de Elisa y Diego es riguroso, cercano, alimentará vuestro frikismo y alargará las sobremesas aunque solo os dejen juntaros a las cuatro personas que aún os aguantáis analizando cada gazapo como si fuerais clones de Félix Linares. CIUDAD NÓMADA, REBAÑO MISERIA - Pablo Loperena Insólita Editorial - 368 páginas En esta novela, premiada con el prestigioso Premio Alberto Magno, el escritor pamplonés Pablo Loperena nos muestra un mundo donde la naturaleza ha sido domesticada en beneficio de los habitantes de grandes ciudades-cosechadora que se desplazan constantemente siguiendo los ciclos impuestos por los cultivos. El rebaño miseria acompaña a estas ciudades y sobrevive nutriéndose de sus desechos. Esta es la historia de Salvaje, una joven paria que busca venganza a toda costa.

- FERIA DEL LIBRO - 9

I Feria del libro de Navarra I. Nafarroako liburu azoka Con el apoyo del Gobierno de Navarra / Nafarroako Gobernua y organizada por la Asociación de Librerías de Navarra/Nafarroako Liburu Saltzaileen Elkartea, entre el viernes 28 de mayo y el domingo 6 de junio tendrá lugar en la Plaza del Castillo una feria con variedad de perfiles, capaz de abarcar el amplio espectro del público navarro y satisfacer los gustos de los distintos géneros y edades. Participarán 16 librerías. Atendiendo a esta premisa se ha organizado un programa plural que da cabida a las presentaciones de editoriales navarras, ofrece un espacio para los seguidores de la novela negra (en colaboración con el festival Pamplona Negra) y también se centra en el amplio panorama nacional. La programación incluye presentaciones y firmas que van de autores ya consagrados, como el ilustrador y Premio Nacional de cómic Javier Olivares (Las Meninas, La Cólera), a nuevas y jóvenes voces prometedoras como Elisa Victoria (Voz de vieja), charlas sobre ciencia ficción, sobre la crítica literaria en la actualidad o sobre el panorama del libro en euskera. También, con el fin de fomentar la lectura, se organizarán por las mañanas actividades como cuentacuentos o talleres infantiles. Destacar, también, que durante la feria se entregará el Premio de la Librerías de Navarra y habrá una mesa redonda con los premiados. Este acto, que cada año va ganando adeptos, merece ser destacado dentro de las actividades culturales que se celebran en Navarra. Los premiados son: -Libro en castellano: Basilisco de Jon Bilbao. -Libro en euskera: Baginen, de Cira Crespo y Elena Ciordia. -Libro ilustrado: Paisajes perdidos de la tierra, de Aina Bestard. VIERNES 28 DE MAYO -18:00 Presentación de poesía navarra con Irati Iturritza, Sebastián Taberna y Rocío Wittib. SÁBADO 29 DE MAYO -Por la mañana: Mesa redonda con Loureiro, Elia Barceló y Paz Velasco. Modera Susana Rodríguez, actividad en colaboración con Pamplona Negra. -17:00: Elisa Victoria presenta El evangelio. -19:00: Sánchez-Ostiz presenta sus 3 últimos libros.

LUNES 31 DE MAYO -19:00 Visionarios: autores navarros en la ciencia ficción y la fantasía. Mesa redonda con Regina Salcedo, Laura Pérez Larraya, Pablo Loperena y Alberto Rodríguez Andrés. Modera José Luis del Río, editor de Apache Libros. MARTES 1 DE JUNIO -19:00 Mesa redonda sobre el libro en euskera con Ángel Erro (traductor), Lander Majuelo (editor) e Irati Goikoetxea (escritora). MIÉRCOLES 2 DE JUNIO -19:00 Javier Olivares presenta Walburg & Beach, con Javier Pérez de Zabalza (director del Salón del Cómic de Navarra). JUEVES 3 DE JUNIO 19:00 Mesa redonda sobre la nueva crítica literaria con Juan Marqués (Las librerías recomiendan, Cegal), Katixa Castellanos (deborahlibros.com) y Andrea Izquierdo (booktouber). VIERNES 4 DE JUNIO -12:00 Acto de entrega del Premio de las Librerías de Navarra. -19:00 Mesa redonda con los premiados. SÁBADO 5 DE JUNIO -19:00 Sergio del Molino presenta Contra la España Vacía. DOMINGO 6 DE JUNIO -18:00 Teresa Valero presenta Contrapaso. www.facebook.com/Libreriasdenavarra

10 10 ¿Con cuál de los personajes que has creado para la novela te sientes más identificado? Todos tienen algo con lo que me pueda identificar pero seguramente sean el Diablo y Bernardo con quienes más tengo en común.

alberto rodríguez andrés Nuestro director y uno de nuestros redactores más veteranos acaba de publicar Cielos clausurados, su primera novela y, como no podía ser de otra manera, le hemos entrevistado. En esta historia, ganadora del Premio UPC 2020 y publicada por APACHE LIBROS, las llaves del Cielo se han extraviado y Dios ha quedado atrapado dentro. Como consecuencia, cuando alguien fallece en la Tierra no termina de hacerlo. La situación es tan desesperada que sólo la Muerte -encarnada en un profesor de yoga- y el Diablo -un vendedor de artículos promocionales- pueden ponerle arreglo. Aunque antes deberán resolver sus diferencias, a la carrera, de camino al Horloĝo, un mecanismo místico oculto en los reactores de la central de Chernóbil. Esta tragicomedia de ciencia ficción con tintes pre-apocalípticos cuenta también las tribulaciones de Merche y Bernardo, dos cincuentones para quienes la muerte quizás no sea tan mala opción. ¿Cómo es eso de que te entrevisten en la misma revista en la que trabajas? Casi siempre soy yo el que hace las preguntas, así que es una paranoia bien gorda. Me siento observado, desnudo, inseguro. No sé bien qué contestar. Cuenta la leyenda que dos de cada tres grupos de música entrevistados en la revista se separan menos de dos meses después. ¿Temes por tu carrera literaria? Llamar carrera literaria a esto es una exageración. ¿El título tiene que ver con el Estado de Alarma? No lo había pensado, igual hay algo de eso y no me he dado cuenta. El título lo decidí cinco minutos antes de mandarlo a la convocatoria del Premio UPC y al poco me arrepentí. Me parece un poco pedante pero como en esta historia es todo medio de coña le estoy cogiendo cariño. Soy muy malo para los títulos. Mientras escribía la historia cambié el título como seis o siete veces.

¿Quién fue tu inspiración para el personaje de Merche? En principio era un personaje lleno de clichés, muy plano, muy como de peli mala de sábado por la tarde en Antena3, así que hablé con Esther, mi pareja, y ella me dio muchas claves y consejos para que fuera más realista y creíble. Nos inspiramos en las compañeras de trabajo que tenía ella en aquella época. Merche es mi personaje preferido, todos hemos conocido a alguna señora como ella. Vaya lujo de portada, ¿no? No sé si volveré a sacar otro libro alguna vez, así que este tenía que tener una buena portada. Llamé a Miguel Ángel Martín (Brian the brain, Rubber Flesh, Subterfuge Records…), a quien ya conocía del Salón del Cómic de Navarra. Sin que le dijera nada concreto, acabó haciendo más o menos lo que yo tenía en la cabeza, es un crack. Estoy encantado, creo que ese estilo suyo tan sicotrónico encaja muy bien con lo que luego se cuenta dentro. El libro se cierra con un epílogo de Patxi Irurzun… Cuando acabé la historia Patxi fue la primera persona a quien se la pasé. Nos conocemos desde hace años, sigo muy de cerca su trabajo y si había alguien capaz de orientarme era él. Creo que el epílogo capta muy bien lo que es el libro y cómo soy yo. Ahora que eres un escritor laureado, ¿existe la posibilidad de que te fichen como columnista para algún dominical, chapes el chiringuito y los redactores de El Mono nos vayamos a la calle? Las ofertas económicas que me han hecho hasta la fecha no pueden igualar el orgullo y satisfacción que siento al trabajar con un equipo tan estupendo como este. Podéis estar tranquilos y tranquilas. Para una versión en audiolibro de Cielos Clausurados, ¿quién te gustaría que prestase su voz? Habrá audiolibro, sí, pero aún es muy difícil saber cuándo saldrá. Molaría que lo leyeran Chiquito de la Calzada o el Pozí pero ya murieron, así que elegiría al doblador que pone voz a Frasier y al Actor secundario Bob, me flipa su voz. En la biografía del libro haces referencia a Kurt Vonnegut. ¿Por qué crees que es tan bueno?

- CIELOS CLAUSURADOS - 11 Decir que lo adoro es decir poco. Todo lo que hizo Vonnegut tiene un poso de humanidad que me emociona mucho. A parte de eso, tenía unas ideas muy locas y una manera de plasmarlas pasándose por el forro las convenciones de la escritura que me parece muy original. Está continuamente haciéndose spoilers a sí mismo, destripa las tramas sin piedad y consigue que mantengas el interés sin recurrir a recursos típicos. Te gusta la ciencia ficción pero no especialmente la que acontece en naves espaciales y galaxias lejanas. ¿Por qué? Hay un montón de historias en naves y galaxias lejanas que me encantan, como Alien, Sentient, Solaris, El juego de Ender… sólo que creo que se ha abusado de este tipo de ambientaciones en detrimento de las historias que tienen lugar en ellas. Es una cosa de continente y contenido. Lo mío es más la ciencia ficción de andar por casa, de no perderse mucho en detalles tecnológicos. El Mono se acerca a su número 100, ¿qué le depara el futuro?

Igual al decirlo lo gafo, pero si llegamos al número 100 estaría muy bien montar una exposición con todas las revistas, bocetos de Bigote y Perilla, portadas, carteles, materiales inéditos, etc. Y organizar una buena fiesta, claro. ¿Vas a hacer alguna presentación? Sí, el jueves 13 de mayo a las 19:00 en el Nuevo Casino en la Plaza del Castillo, vendrá José Luis del Río, editor de Apache Libros. El lunes 31 de mayo estaré también en una mesa redonda sobre fantasía y ciencia ficción en la Feria del Libro, con Regina Salcedo, Pablo Loperena y Laura Pérez Larraya. Espero ir también en verano a algún evento en Asturias y Madrid pero todavía no es seguro. ¿Estás trabajando en otro libro? Tengo empezada otra novela pero voy muy despacio, igual para mediados o finales de 2022 la termino. También tengo por ahí un relato de hace tiempo que quiero reescribir entero porque no funcionaba bien. Entre trabajar en la revista y el salón del cómic, las clases de euskera y tocar el bajo en Juárez me cuesta mucho sacar tiempo para escribir.

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oskar alegria

ecozine2021

Este año ECOZINE (del 24 al 27 de mayo en Golem Baiona) mira a la aventura y al edificio humano. Desde sus raíces, sus cimientos vivos en los orígenes, la familia, la infancia y en los recuerdos (Titixe y Zumiriki), pasando por los sueños, los conflictos y los valles que cruzamos y habitamos (Urpean lurra), hasta la complejidad y el precio de nuestro tiempo (The Price of progress). Una ventana de cine a la que trepar y asomarnos, una ventana por la que escapar para construir, para recordar, para sentir, para encontrarnos. Cine que piensa e impulsa. Aprovechamos para hablar con OSKAR ALEGRIA, uno de los invitados de esta edición. Te entrevistamos en febrero de 2016 cuando aún estabas en la dirección del festival Punto de Vista. Además de Zumikiri, de la que luego hablaremos más a fondo, ¿qué has hecho en todo este tiempo? No me he aburrido, la verdad. Siempre que salgo de un trabajo intenso, como fue el caso del festival tiendo a irme al “otro lado”, en el sentido menos intenso o más libre de esa expresión. Emak Bakia nace tras un trabajo duro en la televisión vasca. Zumiriki vino tras Punto de Vista. Quizás ahora sea la hora de entrar en otra intensidad para dejarla por un nuevo proyecto libre. En Zumikiri vuelves al lugar junto al río en el que jugabas de pequeño. ¿Cómo surgió esta idea? De un sueño. Lo digo pero es cierto. Esta película la tenía soñada de hace tiempo. ¿Cómo volver a esos árboles de la infancia que han quedado sumergidos por un pantano? ¿Se puede viajar dos veces al mismo recuerdo? Aquellos eran los árboles del Zumiriki, nuestro mejor patio de juegos, pero ahora están en medio del pantano. En los sueños todo es posible y en el cine te diría que casi también. ¿Qué recuerdas de la presentación en la Mostra de Venecia?

Recuerdo a mi padre a mi lado, a la izquierda... ahora que lo pienso, yo estuve sentado a la derecha del padre, como dicen que toca a los bienaventurados... nunca lo había pensado, pero eso fue quizás el mayor de los premios. Yo no vi la película, vi a mi padre temblar de emoción en la butaca ante el paisaje donde desde pequeño vio crecer su vida. Aquel es su paraíso. Él no había visto la película, esperé hasta Venecia para darle la sorpresa y volvió de allí veinte años más joven. ¿Cambiarías algo de esta película? No. Ya hice mucho cambio hasta llegar a la versión definitiva y está cerrada con la sensación de ser clavada al sueño que tuve. En el montaje poco podía alterar ya que la experiencia en el bosque fue la que marcó todo: cuatro meses encerrado en una cabaña de madera en esa orilla secreta, en primavera y verano, regresé con 10 kilos menos en el cuerpo y unas barbas hasta el pecho. Una vez que salí de allí, en invierno, ya no podía refilmar nada. Lo que fue, fue. ¿A parte de la proyección vas a participar en algún encuentro o charla este ECOZINE? Así es. ECOZINE es una oportunidad magnífica para volver a presentar la película en Pamplona, ya que con la pandemia llegamos justos y desde entonces el film ha salido a cuentagotas y mucho menos yo con él. Volver a estar a pie de pantalla y encontrarse con el público es ahora más vital que antes. ¿Conoces alguna de las películas con las que compartirás cartel en esta edición? ¿Qué destacarías? Quiero ver la de Maddi Barber, que se me ha escapado en varios lugares. Me gusta mucho la

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primera que hizo de un lugar con similitudes, la bella zona de Itoiz que quedó también sepultada por el agua por las mismas razones de la construcción de una presa. No he podido ver la segunda que hace en ese mismo espacio que para ella es muy emocional, ya que nació allí. Se llama Urpean Lurra y ya me la he apuntado en la agenda, el jueves 27 de mayo. Hay una Navarra sumergida por allí que nos une. Durante el confinamiento vimos a la naturaleza y a los animales recuperando el espacio que le habíamos quitado... ¿Qué pensabas durante esos meses? Tengo cuatro urracas que visitan mi balcón y anidan en un par de pinos cercanos, un cernícalo que he descubierto que vive en una azotea vecina, dos autillos que nunca habían visitado el barrio llegan ahora fieles el día de la República, el otro día en el bosque estuve cinco minutos delante de un zorro, cara a cara. No sé si todo es por el confinamiento o agravado por la misma experiencia en Zumiriki. Desde entonces noto que camino por el bosque de otra manera. Precisamente después del confinamiento mucha gente ha mostrado una fuerte necesidad de conexión con la naturaleza... Así es y bienvenida sea. Ojalá haya venido para quedarse. Para descubrir los tesoros que tenemos a mano, en nuestro perímetro y que se contagie la pena que merece que sigan siendo tesoros. En Zumiriki se ve. A 30 kilómetros de la ciudad hay un mapa todavía en blanco.

¿Cómo crees que nos influye el hacernos adultos en nuestra relación con el entorno? Hay un punto en la ecología que no se menciona demasiado y que creo que es importante y es la necesidad de mantener los paisajes como memoria. Se habla mucho y creo que a veces en exclusividad de la diversidad y riqueza para los términos de la naturaleza, pero la memoria o la ecomemoria es algo que debería también mantenernos firmes a un suelo y ser respetada en su dibujo. Ahí estamos nosotros y no somos sino eso, paisaje. ¿Qué próximos proyectos tienes en mente? De momento, encargos. Cosas de otros. Pero no me quejo. Estoy enredado con un libro y un film escénico en los que hay tanta libertad que a veces dudo de que la palabra encargo los defina bien. Serán para terminar este año, luego, quizás venga lo que mencionábamos, un proyecto libre y ya personal. Si es una película será tan lenta como las anteriores, en el sentido de su realización, siete años he tardado entre una y otra y eso me da que ha sido muy positivo, conviene no correr. Para acabar, recomiéndanos un libro. Prefiero recomendar un verso. Muchas veces en Zumiriki lo pensaba, ¿por qué existe esa manía de decir qué tres libros te llevarías a una isla desierta? ¿Por qué tres y no setenta? Si el naufragio va para largo, mejor armar una pequeña biblioteca. Sea como sea, en una isla del recuerdo, hecha de árboles sumergidos, aguas mudas y aire de la infancia, con llevarse un único verso es suficiente. Por ejemplo el de Rilke que a mi me acompañó: “De todo lo que habita a nuestro lado, siempre quedará el viento entre los árboles”. www.festivalecozine.es www.educacionambientalpamplona.es

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artista en el exilio

Aprovechamos que este mes finaliza la muestra que recupera la figura de GERARDO LIZARRAGA para hablar con su comisaria, BLANCA ORIA. Recordad que tenéis hasta el día 23 para pasar por el MUSEO DE NAVARRA. ¿Cómo supiste de Gerardo Lizarraga? Lo primero que supe es que era un pintor que había nacido a principios del siglo XX en Pamplona, que se había casado con la artista Remedios Varo (sobre la que sí que hay mucha información) y que era casi un completo desconocido. Todo el trabajo en torno a su persona y su obra lo hicimos pensando en un documental que, después de varios años, se estrenó en 2018. Cuando se estrenó en Pamplona, desde el Instituto de la Memoria de Navarra mostraron su interés y nos plantearon la posibilidad de hacer una publicación y de montar una exposición. Tenía facetas muy distintas... Fue un artista polifacético, muy imaginativo, que disfrutó de los buenos tiempos creativos que le llevaron de Madrid a París y luego a Barcelona en los años 20 y a principios de los 30. Durante la guerra civil se aproximó al mundo del cine y llegó a crear una productora. En 1939 huyó de Barcelona y cruzó la frontera francesa donde fue encerrado en los campos de concentración de Argelès sur Mer, primero, y de Adge y Clermont Ferrand, después. En 1942, tras más de dos años de encierro pudo conseguir un pasaje para exiliarse en México. La exposición recoge algunos de sus trabajos como ilustrador, realizados en Barcelona a principios de los años 30, también paisajes y retratos realizados en distintos momentos de su vida así como bocetos para murales. Pero el núcleo de la muestra son los casi ochenta dibujos que realizó en los campos de concentración franceses. La mayoría de ellos no se habían expuesto hasta ahora. ¿Cómo fue el proceso de recuperación de obras? Ha sido un proceso muy largo con muchos focos de búsqueda. Algunos siguen abiertos porque continúan apareciendo informaciones, materiales, datos... Para ello se ha echado mano de archivos en filmotecas, en fondos de la memoria y naturalmente en los materiales y los recuerdos

conservados por su propia familia. Sus hijos, Amaya (que lamentablemente falleció el año pasado) y Xabier, han sido dos piezas fundamentales en todo el trabajo de búsqueda, porque nos han ido poniendo sobre muchas pistas. Luego está el propio Lizarraga que dejó escritos algunos textos con su propio curriculum o con datos sobre su paso por los campos de concentración y que incluso guardó cartas que nos han proporcionado mucha información. Además a lo largo de su vida fue dejando huella en otras personas. Hablábamos de que seguro haya muchos otros artistas que también han permanecido o permanecen olvidados... En los campos de concentración que se montaron en Francia tras la guerra civil española estuvieron encerradas más de medio millón de personas. Entre ellas había cientos de artistas, escritores, cineastas... Pese a todo hay muchos libros escritos por gente que estuvo encerrada en los campos, cuadros pintados por artistas en los campos o posteriormente inspirándose en aquellos momentos... En Argelès sur Mer llegaron a crearse los barracones de la cultura donde la gente podía leer, aprender francés, alfabetizarse, pintar, hacer esculturas, fotografía... ¿Y qué nos puedes contar de Estrellado, el documental que has dirigido? Nos llevó muchos años de trabajo, se estrenó en 2018 en Zinebi, el festival de cine de Bilbao, y posteriormente se ha podido ver en varios festivales nacionales y también en México y en Uruguay. Durante la exposición se han programado varios pases. Se trata de un viaje por buena parte del siglo XX tomando como referencia a los artistas y creadores y dejándonos llevar por la figura de Lizarraga. El tema es que en ese viaje ha aparecido un creador infatigable que, además, había conservado parte de su obra y de su historia, lo que nos ha permitido recomponer los elementos y descubrirlo. Cualquier cosa que quieras añadir... Cuando se empezó a montar en el Museo de Navarra la fotografía en la que aparece Lizarraga en el campo de Argelès en 1939 y se utilizó una grúa, porque tiene casi cinco metros de altura, pensé en lo que estaría pensando él cuando posó para esa imagen y en lo que pensaría si la viera ahora abriendo su exposición. Las dos cosas son dos imposibles, pero el contraste me parece muy inspirador.

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LA MARIHUANA EN LA CIENCIA FICCIÓN Aunque en los números #31, #42 y #62 ya repasamos la presencia de esta planta en el cine, la música, la literatura más generalista y el cómic, aprovechamos este especial para ahondar en la parte más expansiva de la ficción científica.

La superación de las premisas de las edades de oro y plata, es, en gran parte, consecuencia de la aparición y desarrollo de la contracultura. La pérdida de inocencia de la ciencia ficción es paralela a los cambios sociales de aquella época. El hecho de que siempre haya sido considerada literatura de segunda fila, hace a este género especialmente permeable a otros movimientos y propuestas (fanzines, música rock, vanguardias artísticas, psicodelia, movimientos antibelicistas, antirracistas, pro legalización, etc.), dando lugar a obras originales, críticas, coloristas, ambiguas, caóticas y, en muchos casos, un tanto pesimistas. ACAPULCO GOLD Dentro de la agitación contracultural tuvo especial importancia la Acapulco Gold, una variedad de Cannabis sativa muy popular en los Estados Unidos

Acapulco Gold

LA NUEVA OLA Los años transcurridos entre 1965 y 1972 son el período de mayor experimentación literaria de la historia del género. En Reino Unido se puede asociar con la llegada de Michael Moorcock a la dirección de la revista New Worlds. Moorcock, entonces un joven de 24 años, dio espacio a las nuevas técnicas de los textos de William Burroughs y J.G. Ballard. Los temas empezaron a distanciarse de los tan manidos robots e imperios galácticos de las edades de oro (1938-1950) y plata (1951-1964) de la ciencia ficción, centrándose en asuntos hasta entonces inexplorados: la consciencia, los mundos interiores, la relativización de los valores morales, la crítica a la tecnología, el ecologismo, etc. En Estados Unidos los ecos de los cambios experimentados en el panorama británico tuvieron su reflejo en autores como Samuel Ray Delany, Judith Merril, Fritz Leiber, Roger Zelazny, Philip K. Dick, Ursula K. LeGuin, Philip José Farmer o Kurt Vonnegut.

durante la década de 1960. Esta variedad, de origen mexicano y color entre amarillo y amarronado, era muy conocida por su potencia psicoactiva y agradable sabor. Su color distintivo fue el resultado de la forma en que las plantas eran envejecidas y secadas por el viento del océano Pacífico. La Acapulco Gold fue apodada connoisseur pot (marihuana para expertos), y era «codiciada por los fumadores estadounidenses, considerada de mejor calidad que la hierba que crece en California o Texas». Tal era su fama que pasó a ser parte de la cultura popular, siendo mencionada en canciones, libros o películas. Por ejemplo, en la novela de David Gerrold When HARLIE Was One (ganadora de un premio Nébula 1972), los cigarrillos Acapulco Gold se describen como una de las principales marcas del mercado. L. Ron Hubbard (escritor y creador de la Cienciología) también la incluyó en varias de sus novelas de ciencia ficción. Sin embargo, la cepa recibió su mayor tributo en la novela Incordie a Jack Barron (1969) de Norman Spinrad, que describía una América futurista donde el uso de marihuana no solo era legal sino común, tanto en altos funcionarios como en celebridades importantes, y donde la marca líder era, por supuesto, Acapulco Golds. UNAS RECOMENDACIONES La mano izquierda de la oscuridad (Ursula K. LeGuin, 1969) Trata sobre un embajador humano de la liga planetaria del Ecumen, Gently Ai, que realiza una misión diplomática en el helado planeta Guden. La particularidad de ese mundo es que sus habitantes son

- KIMU GROW SHOP - 17 la mayor parte del tiempo hermafroditas neutros pero cuando entran en estro o kémmer adquieren sexo masculino o femenino y pueden comportarse como hombres o mujeres. El protagonista traba amistad con Estraven, y juntos viajan por el planeta viviendo diferentes aventuras y afrontando peligros, incluyendo complots políticos. Cuando Estraven entra en kémmer y se convierte en hembra, la situación toma un giro inesperado. La sexualidad guedeniana y la extrañeza con que contemplan la humana que les parece algo perverso por la permanente disponibilidad para el coito, permite a la autora lanzar una mirada sumamente perspicaz sobre el sexo y el género. Y sobre la amistad y el amor. Tiempo desarticulado (Philip K. Dick, 1959) Ragle Gumm, un haragán sin oficio ni beneficio, participa cada día en el concurso del periódico local “¿Dónde estará mañana el hombrecito verde?“. Siempre gana, aunque ni él mismo sabe por qué. Durante una cena con los vecinos la cómoda y anestésica existencia de Ragle se empieza a tambalear ante la idea de entrar al baño y que el interruptor de la luz no esté donde siempre ha estado. Estamos ante una de las novelas más ágiles y fáciles de leer del prolífico genio loco de la ciencia ficción. Al igual que en Ubik y otras novelas de Dick, la paranoia y las dudas sobre qué es la realidad lo impregnan todo. La única pega que se nos ocurre es que se hace demasiado corta. Invernáculo (Brian Aldiss, 1962) La obra cumbre de Aldiss es en muchos sentidos una elegía monumental a la naturaleza y una crítica a los intentos del hombre para imponerse y elevarse sobre ella. El argumento trata las tribulaciones de varios grupos de humanos en un mundo miles de

años en el futuro. Nuestra raza ha pasado a ser una especie menor en los nichos ecológicos, y lejos de dominar el planeta, sobrevive con dificultad en base a una alta natalidad y a una rápida emancipación de sus niños, que se independizan al convertirse en adolescentes. La raza ha reducido su tamaño a la mitad, coloreando su piel con un tono verde, a fin de camuflarse. El Sol se ha convertido en una supernova, y el cambio en la radiación de nuestra estrella ha posibilitado un clima ecuatorial, con gran humedad. La Luna ha continuado su acercamiento a la Tierra, estando próxima a su colisión. El resultado de estos cambios es una evolución de las plantas, que han pasado a desplazarse, cazar como depredadores, y desarrollar toda una serie de estrategias destinadas a proporcionarse nutrientes. De ese modo encontramos vegetales que vuelan y atacan desde el cielo. El programa final (Michael Moorcock, 1968) Jerry Cornelius es un joven de pelo largo, drogadicto y de sexualidad no definida. Se dice que ha sido jesuita y ha escrito un libro titulado En busca del tiempo a través de la decadencia de Occidente. Es una especie de agente secreto psicodélico, le entusiasman los coches veloces, los barcos potentes y la música de The Who, The Moody Blues y The Animals. Figura quimérica de aparente amoralidad, Cornelius es un héroe mítico acorde con su época que, a su vez es, otra de las muchas encarnaciones del Campeón Eterno, un arquetipo encargado de mantener el equilibrio entre la Ley y el Caos en el Multiverso de Moorcock.

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- ROCK & BEER -

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La recomendación que este mes nos trae ERIK COENE de CERVEBEL llega a conectar hasta con la mismísima realeza española... Si el mes anterior hablábamos de la cerveza de fermentación espontánea, esta vez toca la cerveza de alta fermentación. Esta es la que fermenta a temperatura ambiente, entre 18 y 22ºC, y que se empezó a elaborar a partir de la Edad Media, cuando la corte de Carlomagno ya contaba con sus propios cerveceros. El procedimiento, en realidad, es muy parecido al que estamos aplicando con la masa madre al hacer pan. Así reutilizaban la levadura durante varias fermentaciones hasta que perdía su fuerza y había que volver a cosechar con el procedimiento de la fermentación espontánea. Una de las cervezas más famosas de fermentación alta y del estilo “ale roja flamenca” es la Duchesse de Bourgogne: cerveza oscura que, una vez terminada su fermentación principal, va madurando durante 3 años en gigantes barricas de roble llamadas foeders. Durante esta fermentación la bacteria láctea poco a poco va “avinagrando” la cerveza, consiguiendo una de las cervezas más sorprendentes del panorama cervecero mundial. La mujer que aparece en la etiqueta es María de Borgoña, la última duquesa de Borgoña que reinaba en Flandes, casada con el emperador Maximiliano de Austria y madre de Felipe, que se casó con Juana la Loca. Por lo tanto, María de Borgoña era abuela de Carlos I de España y V de Alemania. Murió a los 25 años al caerse de su caballo y precisamente a caballo aparece en esta estatua de Brujas. Para acompañar a esta cerveza he elegido a Sandy Denny, la reina de la música folk rock de los 70. Sandy Denny fue también cantante del conocido

grupo Fairport Convention. La voz de Sandy Denny es puro oro y “Like an Old Fashioned Waltz” es uno de mis discos favoritos. Como curiosidad, Sandy Denny también murió joven, a los 31 al caerse por una escalera. Otra famosa canción del folk rock que también maridaría con este estilo de cerveza sería “All around my hat” de Steeleye Span, banda británica, también con mujer al frente, la cantante Maddy Prior. Nos leemos el mes que viene con más recomendaciones cervezo-musicales. ¡Salud! https://www.facebook.com/Cervebel erikcoene@cervebel.es

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A izk or a

TATTOO Los días 4 y 5 de junio, MIKEL EDORTA, responsable de AIZKORA TATTOO, el estudio de tatuajes de Navarrería, celebrará un evento de flash day con precios y diseños especiales.

¿Cuántos años llevas tatuando? ¿Qué te llevó a dedicarte a esto? Este año cumplo 10 años como tatuador, proceso que empezó un poco de rebote. Empecé a consumir tattoo con 15 años, era un mundo que siempre me había atraído. Estando en la Escuela de Arte (hice escultura y empecé grabado) tuve mucho contacto con Miriam Carroza, quien que me tatuaba en Tai. En un momento dado, a través de Miriam, salió mi nombre para ser aprendiz y empecé entonces mi formación como tatuador. Recuerdo estos inicios con cariño: dibujar mucho y aprender del trabajo de los demás. ¿Cómo fue tu primer tatuaje? El recuerdo de este primer tattoo es bastante estresante: tatué a mi aita y yo estaba muy nervioso. Quería que me saliera bien pero era imposible, porque los primeros tattoos nunca salen bien: no entiendes bien qué está pasando ni qué estás haciendo. Le hice una rosa con una calavera y al final no quedó mal. Con los años, los colores del tattoo ahí siguen y se ven sólidos. ¿Algún motivo que se haya repetido mucho en este tiempo? Rosas, calaveras, dagas, serpientes, felinos, caras de chicas… las piezas icónicas del tatuaje clásico, que es el que he trabajado este tiempo. El lenguaje del tattoo es perfecto para estas imágenes y por eso son los motivos más potentes que se pueden tatuar. Se ha hecho a lo largo de la historia del tatuaje y yo he seguido esta tradición. ¿Qué estás preparando para celebrar esta fecha señalada?

Para mí esta fecha es muy importante porque cumplo 10 años tatuando y, además, coincide con mi 30 cumpleaños, así que quiero compartirlo con todas las personas que me han acompañado este tiempo. Para el evento, el 4 y 5 de junio vamos a preparar dos días de lo que llamamos “flash day”, aunque en este caso estará condicionado por el coronavirus y las medidas sanitarias que debemos tomar. Funcionará así: la semana anterior al evento colgaremos en el escaparate del estudio los diseños de tatuaje listos para ser tatuados, que estarán además a precios especiales. Quienes se acerquen, podrán elegir el diseño que les guste y reservar cita para tatuarse durante el evento del fin de semana. También vamos a presentar un nuevo merchandising de la tienda durante el evento.

- AIZKORA TATTOO - 21 Por un lado, mi trabajo sigue vinculado a Aizkora y al tatuaje clásico. Además, voy a seguir con el proyecto en el que estoy colaborando con mi abuela. En este proyecto, estoy traduciendo los dibujos de Josefina al lenguaje del tattoo y tatuándoselos a personas que se interesan por ellos. Ya he hecho unos 20 tatuajes siguiendo este proyecto, y se está haciendo más grande: me ha escrito mucha gente para participar y personas de todo el mundo con interés en el proyecto. Me gustaría además recopilar toda la información sobre Josefina, reunir sus dibujos y sus poemas en un libro, y contar su historia. Este proyecto con mi abuela es muy enriquecedor para mí, me ha dado un empujón importante ver la libertad que ella tiene para dibujar, frente a las reglas rígidas del tatuaje clásico. Ella no sigue normas. Entender esto me ha abierto una puerta a una nueva dimensión: ahora puedo hacer cosas que no había hecho nunca, como experimentar con colores, trasladándolo además al resto de mis tatuajes en el estilo clásico. ¿Qué banda sonora pondrías a estos 10 años? A pesar de sentirme a veces cansado tras 10 años tatuando, mi propio estudio y la espalda un poco más rota, me pongo muchas veces Highway Star de Deep Purple al final del día. Me ha acompañado a lo largo de este tiempo y me da fuerza.

¿Cómo ves el pequeño comercio? No puedo quejarme: la respuesta a Aizkora ha sido más que positiva, desde clientes que se han tatuado conmigo esta década hasta caras nuevas que descubren mi trabajo y se interesan por él. Me he sentido además muy bien acogido en el barrio de Navarrería, que tiene su propia vidilla. Por otro lado, me entristece que muchos pequeños comercios están desapareciendo. Da miedo ver cómo la parte vieja lleva años vendiéndose a las grandes cadenas y que el comercio llevado por personas de a pie, que cuida a sus clientes y a sus trabajadores, desaparece, con todo lo que ello conlleva. Aparte de la celebración, ¿tienes otros proyectos?

¿Dónde te ves dentro de 10 años? Viviendo una vida más sencilla, con menos ruido. Respecto al tattoo, actualmente llevo 10 años como tatuador “a pie de calle”, pero en 10 años más no me veo así. Para entonces, espero que Aizkora haya tomado vida propia, poder seguir vinculado al estudio pero desde mis proyectos más personales. ¿A quién te gustaría dar las gracias? A mi familia por apoyarme desde el principio, a mis amigos y a mis clientes, que se han interesado por mi trabajo han confiando en mí durante diez años. Y, finalmente, a Elvis Presley. Algo más que añadir… Gora Aizkora! http://aizkoratattoo.com/

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- EUSKARABIDEA -

Regálales el euskera y llegarán muy alto. Euskararekin, gora eta gora beti! El Instituto Navarro del Euskera - Euskarabidea ha organizado una campaña de motivación hacia el euskera que, con el lema “Regálales el euskera y llegarán muy alto / Euskararekin, gora eta gora beti!”, quiere transmitir a las familias el valor positivo del aprendizaje y el uso del euskera. La campaña se inscribe en el Plan Estratégico del Euskera, uno de cuyos ejes está vinculado a los y las nuevas hablantes que se incorporan a través de la enseñanza del euskera y en euskera en el sistema educativo, desde las escuelas infantiles a la enseñanza universitaria. El objetivo general de la campaña es reflejar el euskera como un valor positivo e integrador y un recurso valioso que las familias pueden ofrecer a sus hijos e hijas. En palabras de la consejera, “el euskera es un valor de presente y futuro, abierto al mundo, y que aporta valor y riqueza a nuestros hijos e hijas. Una lengua de presente y de futuro. Uno/a de cada cuatro jóvenes menores de 30 años son euskaldunes, según la encuesta del NASTAT. Un 30% de las madres y padres eligen para la educación de sus hijos e hijas de 3 años, el modelo D, el que garantiza la inmersión en el idioma, y un 20%, el modelo A. Además, tal y como señala el estudio de Eusko Ikaskuntza sobre convivencia, las personas jóvenes ven cada vez más el euskera como un valor positivo”. TRES SEMINARIOS ONLINE La campaña incorpora una serie de webinarios, que ya comenzaron el pasado mes de noviembre con las jornadas “Eskola, bihurtu aukera / era.eus, tu compañera”, organizadas en colaboración con las entidades locales, para las familias de niños y niñas

escolarizados en euskera y aquellas que en su escolarización tienen contacto curricular con esta lengua. El éxito de estas conferencias ha hecho que, de nuevo, se haya programado un segundo ciclo con el fin de sensibilizar sobre el valor de conocer y utilizar el euskera dentro de una comunidad como Navarra. La campaña va dirigida especialmente a padres y madres de niños y niñas menores de 3 años, con el fin de promocionar el euskera como un elemento valioso para la educación de sus hijos e hijas, e informarles sobre las opciones presentes en el sistema educativo de Navarra con respecto a este idioma. Las tres sesiones, han sido dirigidas por personas expertas en el ámbito de la educación, se han retrasmitiendo en directo (vía internet) y en ellas las familias podían plantear sus preguntas. www.euskarabidea.es

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Cuando, en 1998, las monjas teresianas cerraron su sede de la calle Mayor, los estudiantes de bachillerato fueron trasladados al colegio de Ermitagaña. Para acogerlos, el centro emprendió una ampliación de sus instalaciones añadiendo una nueva planta. Durante el año que duraron las obras, mi curso fue reubicado en la biblioteca del edificio, acondicionada como aula. El lugar estaba increíblemente surtido. Entre otras joyas, había una enciclopedia con decenas de volúmenes en la que (quiero creer que sigue allí) si buscas la palabra “mosca” encontrarás (lo siento, éramos así de memos) un ejemplar escachado. Algo parecido en la entrada dedicada al vocablo “polvorón”. A lo que iba: aquella enciclopedia era tan, tan antigua que su definición de “avión” era “Población francesa”. Cuesta creerlo, pero hubo un tiempo en que el cielo era un espacio libre de chemtrails.

los vuelos de Chiki

Otro centro educativo navarro, en otro momento histórico: Nuestra Señora del Buen Consejo de Lecároz fue fundado en 1888 por la orden de los capuchinos, que se encargó de su gestión hasta el curso 1989/90. En él estudiaron y vivieron (funcionaba como internado) multitud de vascos insignes, y su Asociación de Antiguos Alumnos celebraba encuentros anuales, concedía premios y editó una revista trimestral, Lecaroz, cuyo primer número vio la luz en septiembre de 1923. En las 80 páginas con que contaba cada entrega se podían encontrar contenidos de lo más diverso: las calificaciones obtenidas por el alumnado, poesía en castellano y euskera, lecciones técnicas sobre telefonía, artículos sobre pugilismo o el valor pedagógico de la alegría… El primer número incluyó también un curioso relato de ciencia-ficción, posiblemente el primero escrito en nuestra comunidad. Firmado por el sacerdote Rodrigo Echenique Migueltorena, más conocido como el Padre Calasanz de Urdax*, Los vuelos de Chiki es un relato de anticipación ambientado en el 2499, cuando, según el autor, Pamplona suma 200.000 habitantes (teniendo en cuenta que en enero

de 2021 andábamos por las 208.537 personas empadronadas, no queda claro si el tío subestimó nuestra libido o si contemplaba la posibilidad de que un extraño virus diezmase en algún momento a la población). La historia arranca con el inicio escolar, cuando un tal Padre Emilio, profesor de geografía, recibe a los nuevos estudiantes del liceo baztanés en la flamante aeronave que da nombre al relato. Si el siglo XIX vivió una absoluta revolución con la invención del ferrocarril (imaginen qué alivio, montar en el Plazaola y en poco más de tres horas poder orinar en La Concha) el siguiente sería el de la conquista de las alturas. Ya fuera en precipitada carrera espacial o piso a piso, como en mi colegio. El éter representaba la nueva frontera, y, a medida que inventó maneras de volar, el ser humano adquirió perspectivas hasta entonces inconcebibles. La aeronáutica revolucionó el catastro y las catástrofes (concluida en 1919, tras cuarentaiún años de edificación, la fortaleza militar de San Cristóbal quedó inmediatamente desfasada por estar expuesta a los aparatos enemigos). Pero a comienzos de siglo, los gernikarras todavía vivían tan pichis. Aún habían de pasar unos cuantos años para que Mola o Sanjurjo acabasen como la enciclopédica mosca, y más aún para que en las Bardenas lloviesen Phantoms yankis. El sueño de la aeronáutica todavía se presentaba halagüeño, y el autor del cuento fantaseaba con un prodigio supersónico con capacidad para 30 pasajeros, “dos pasillos, despensa y comedor”, lo que permite al docente protagonista impartir sus lecciones de manera práctica. A bordo de este naburro anacronópete, sus pupilos sobrevuelan la península aprendiendo topografía en excursiones didácticas que recuerdan a Euskadi a vista de pájaro, aquel programa de la ETB grabado desde helicóptero que tanto ayudaba a echar la pela resacosa con sus reposiciones dominicales. Pues ellos mejor. Y además les sobra tiempo para bañarse en el Tajo, merendar magras con tomate en la cima del Mulhacén y hasta matar unos cóndores en los Andes. La trama discurre sin más turbulencias que las del propio aeroplano. El profesor-aviador tan sólo debe hacer frente a un dilema: Las excursiones más lejanas le obligarían a pernoctar con sus alumnos

25 - NABURRISMOS - 25 fuera del centro, algo que está terminantemente prohibido. Si rompiera su voto, insinúa, su enseñanza podría quedar desacreditada (exceso de celo, diría yo, cuando lo de tener aventuras con los discípulos es algo que se remonta a los tiempos socráticos y a día de hoy sigue estando la mar de vigente. Pregunten, pregunten en la UNAV). Sin embargo, todo se resuelve por sí solo, cuando “llaman por radioteléfono” del Vaticano para decir que se le ha concedido una bula pontificia. Por tratarse de él, están dispuestos a hacer la vista gorda. No he explicado, claro, que en el siglo XXV del relato el empleo del avión como herramienta didáctica no es algo generalizado, sino un privilegio exclusivo del Padre Emilio. Según cuenta el narrador, empeñado en demostrarnos las ventajas y lujos de la educación privada, al protagonista le cedieron el aparato unos admiradores, responsables del “servicio aéreo Lisboa-Pekin”. Porque el personaje tiene fans. A mansalva. La inclusión del artefacto volador hace que Los vuelos de Chiki deba categorizarse como ciencia ficción, y lo chachi de todo el asunto que le podamos añadir el apellido de utópica, pero la sensación cuando se lee es la de estar ante una proyección, la fantasía de un docente que sublimó con bastante guasa sus preocupaciones gremiales dedicando párrafos y párrafos a loar las virtudes de su ficcionado colega: “el P. Emilio se emociona. Sus lecciones son escuchadas en el cielo y en la tierra”, “Interminables aplausos tributados a su excelso profesor”… Es posible que tanto halago sea exagerado, pero también es indudable que las clases con don Emilio se pasan volando. El reconocimiento definitivo llega cuando un congreso celebrado en Buenos Aires decide la adopción global sus revolucionarios métodos (¿sería muy facilón hablar aquí de “clases piloto”?). En una reforma educativa que ríete de la LOGSE, la LOMLOE, o el Modelo D, el presupuesto de educación se dispara, las aeronaves se estandarizan (Greta Thunberg se revuelve en su tumba) y los libros de Bachillerato quedan inmediatamente obsoletos. El cuento concluye con la inesperada evocación de un bibliocausto (¿a que ahora ya no os parece tan mal que en mi clase ensuciásemos un par de libros, eh?): la literatura generada por la Humanidad se amontona en el Desierto

Líbico, en “tres inconmensurables montañas ante las cuales Cheops, Chefrén y Micerino parecen unas raquíticas pirámides sietemesinas” a las que pegan fuego. Y ya puestos, llevados por su entusiasmo incendiario, añaden a las piras todas las revistas pornográficas del mundo. La apoteosis es brutal: “la noche desaparece del Desierto de Libia por dos meses consecutivos, y la temperatura se eleva en todo el hemisferio tantos grados, que ahuyenta el invierno y aun la primavera”. La peña emigra a las playas y las muchachas aprovechan el calor para acortar sus faldas. Juro que esto tal cual. *Tras aceptar el hábito, los frailes capuchinos asumían un alias que les identificaba por su lugar de procedencia. Calasanz de Urdax (1883-1953) desempeñó durante años el cargo de Prefecto de estudios, ejerció como profesor de múltiples asignaturas y dedicó tres décadas a la prestigiosa biblioteca del centro, que llegó a alcanzar los 30.000 volúmenes. Calasanz fue célebre por el afecto que profesaba por los libros. Detalle, este último, que adoptará un sentido u otro dependiendo de si estáis entre quienes leen las notas de página cuando se topan con su respectivo asterisco o al concluir el artículo.

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- CONCHA TISFAIER -

Concha Tisfaier

CIENCIA FICCIÓN

El otro día vi “Alien, el octavo pasajero”. Nunca la había visto entera. Es una película que me producía sueño. “Blade Runner” tiene el mismo efecto. Es porque son oscuras. Pueden producir somnolencia. Y además son películas de resaca. Porque te alejan de la realidad y te ayudan a olvidar que al día siguiente es lunes y ni una pandemia puede destruir esta sociedad capitalista que te obliga a producir para volver a casa a ver pelis de catástrofes distópicas. La ciencia ficción va de hacerte pensar sobre lo que podría ocurrir o podría haber ocurrido, pero en realidad lo que hace es plasmar nuestros deseos más profundos. Yo con la teniente Ripley me sentí muy identificada. De hecho, vi “Alien” porque mi amiga Noe se pegó años diciéndome que le recordaba a ella. Y luego ya resulta que en la nave hay un gato. Y ya, así de básico es mi deseo más profundo, poder decir “¿Ves cómo tenía razón?” mientras acaricio a mi gato. Y por eso “Alien, el octavo pasajero” me gustó más allá de la parafernalia de la criatura goteando lubricante. “Blade Runner” también conecta con un intenso anhelo: que me hagan preguntas. Siempre me he creído super-especial, mega-inteligente y extraordinaria pero voy de humilde y me ruborizo mucho cuando toca, así que no puedo demostrar mis dotes en el día a día. Por eso me encanta que me hagan test, me entrevisten y aplaudan mis respuestas convirtiéndolas en tweets o en stories. Y “Blade Runner” es eso, test y preguntas, gente que se cree más lista que otra cuestionando su

propia inteligencia. Un poco como “El silencio de los corderos” pero con rascacielos y neones. Otra película, una de las primeras de ciencia ficción que se hicieron, escrita por una nazi y su marido, que tiene una estética flipante, que mete rollos de sectas y así, pero que también me duerme es “Metropolis”. Tres años llevo viéndola. A trocitos. Un buen remedio contra el insomnio. Oscura también. Aunque creo que es porque está en blanco y negro. Me acabo perdiendo porque además hay que leer las conversaciones, que no vienen los diálogos en el sonido. Y claro, a la primera cabezada, vuelta a empezar. Pero sé perfectamente a qué íntima ambición da salida: ser María robótica y María humana, destructora y salvadora, diosa metálica y dulce pringada. Serlo todo y provocar el caos y la redención. Dominaría el mundo, lo rescataría de sí mismo. ¿Sabéis con cuál no me duermo nunca y también es oscura y nocturna? “E.T.” Ese bichejo me tiene siempre en vilo esperando la escena del armario, la escena del dedo, la escena de la sábana... ¿En qué momento tengo que acabar hablando siempre de términos sexuales?

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- DISCALCULIA -

DISCALCULIA por HELEN ÁGREDA WILES

El mes pasado dragones y este mes ciencia ficción. O intento caerle un poco mejor al ente decididor de tópicos mensuales, ese que, por lo que sea, quiere joderme la vida, o ya me veo para junio el especial Carlos Sobera. La ciencia ficción no es para mí. La ciencia ficción es más fría que un pezón de sirena. Es para personas más inteligentes que yo. Para esas que no miran cada mañana de soslayo a sus ordenadores, móviles y ruters, y les ruegan que le dejen tranquila un puto día. Aquellas que no tiraron la toalla con el excel hace quince años. Vale, veinte. Aquellas a cuya casa-maqueta de tecnología de tercero de la ESO sí se le encendían las putas bombillas.

expectativas y en vez de coches voladores tenemos botellas de agua que te dicen cuándo tienes que beber, y que beber cuando quieres beber es algo que en principio sabe hacer hasta un bebé con el cordón umbilical todavía colgando? También.

Que no es para mí la ciencia ficción. A las personas como yo nos gustan las cosas orgánicas, con hojas, con pelo o plumas, con legañas, calenticas... Cómo vamos a cogerle el gusto a la ciencia ficción, si la ciencia ficción es todo chapa, engranajes y cosas hidráulicas y biónicas, más frío todo que un abrazo de madrastra. Qué va. La ciencia ficción me recuerda al corsé que llevé de cría; aquel que privó a mi cuerpo de toda libertad y me impidió movimientos tan naturales como correr o manipular los cables de las bombillas de la puta maqueta de tecnología.

Que no, que no es para mí la ciencia ficción ni las pelis futuristas. Y casi mejor, porque las dos que más recuerdo son de Scarlett Johansson y me gustó la que no tenía que gustarme y viceversa. Her no me gustó y Lucy sí. Si a alguien le pasó lo mismo puede darme un abrazo que compense todo el desprecio que recibí por hablar del tema con naturalidad, que fue mucho. O dinero, mejor que me dé dinero, que lo necesito más. Porque si la ciencia ficción es fría, no te digo nada Hacienda. O el SEPE. El SEPE es más frío que vigilar obras en Burgos, y aunque en principio no debería tener demasiado que ver con la ciencia ficción, resulta que conozco a alguien que quiso visitar una de sus oficinas hace bien poco y cuenta que la encontró con la verja bajada, y toda su plantilla dentro, provista de pertrechos suficientes como para defenderse de un apocalipsis zombie y víveres para alimentarse tres años.

Los avances tecnológicos fueron muy deseados en su momento y a la gente le dio por escribir y hacer pelis sobre lo que se imaginaban que sería esto ahora. ¿Que se pasaron quizá en sus

Que no es para mí. Ni la ciencia ficción, ni el SEPE, ni los diez días seguidos de lluvia que nos vienen ahora. Ni Carlos Sobera. Sobre todo Carlos Sobera.

Sé que os gustaría creer que los pitonisos pueden adivinar el futuro, porque así os podrían chivar el número ganador de la Lotería de Navidad y podríais mandar a freír espárragos a vuestro jefe el dictador. Es una pena pero los pitonisos son unos estafadores, igual que la gente que vende sus productos o consultas a doblón diciendo que pueden curar lo incurable. Más allá del rollo este de los adivinos del tres al cuarto, es cierto que algunas personas, ya sea porque han leído mucho o porque tienen una imaginación bestial, han sido capaces de adelantar o predecir acontecimientos relacionados con el desarrollo tecnológico que ríete tú de Rappel y Esperanza Gracia. Julio Verne —no sé por qué nos empeñamos en llamarle Julio en vez de Jules cuando es gabacho, pero bueno— fue uno de esos tipos con una intuición especial. En su novela “20.000 leguas de viaje submarino”, publicada en 1870, Verne ya describía el submarino eléctrico Nautilus, pero el primer submarino de este tipo fue construido por el teniente de navío de la Armada Española Isaac Peral casi 20 años después, en 1888. Julio Verne tenía una cultura científica alucinante y estaba al tanto de los últimos avances tecnológicos, así que el submarino no fue la única innovación o hito que imaginó. También anticipó la fotografía submarina, Internet, el primer paseo del ser humano por la Luna, las expediciones polares… Incluso el reloj de pulsera.

En 2012 la gente lloró, gritó y se desmayó de la emoción cuando el holograma del difunto 2Pac apareció en Coachella junto a Dr. Dre y Snoop Dogg. Aunque el primer holograma se creó en 1962 todavía no hemos podido enviar mensajes a través de ellos, como aquella llamada de socorro que envió Leia a Obi-Wan Kenobi en Star Wars a través de R2D2. Estamos tecnológicamente cerca de lograrlo, eso sí. A lo mejor conseguimos pronto enviar un holograma picante a nuestra pareja, si la COVID-19 o un patinete eléctrico no nos manda a la tumba antes. Muchos son los autores y autoras que han inspirado a las mentes más inquietas de la ciencia: Isaac Asimov y la robótica, Mary Shelley y la biónica, Ray Bradbury y la conquista de Marte, Arthur C. Clarke y la inteligencia artificial… Ahora queda por ver si las obras actuales de ficción científica aciertan con sus predicciones. ¿No os fliparía ver una roca negra ovalada gigante sobre la Rotxa y entrar en ella para hablar en heptápodo con los extraterrestres y que os muestren vuestro futuro? Ojalá Ted Chiang no se equivoque con esto.

eljardindemendel.wordpress.com

Pero Verne no ha sido ni mucho menos el único visionario. La ciencia ficción —que como bien dijo el otro día el jefe de todo esto debería llamarse “ficción científica”; si el término lo hubiera traducido en su día la de Discalculia otro gallo cantaría— siempre ha sido una gran fuente de inspiración para la ciencia, del mismo modo que este género ha bebido del saber científico para fascinarnos con sus historias. El físico Leo Szilard, que trabajó en el Proyecto Manhattan, acreditó al gran H. G. Wells por la idea de la reacción nuclear en cadena que dio lugar a la bomba atómica. En el episodio piloto de Star Trek, emitido en 1966, aparecía un comunicador

muy parecido al primer teléfono móvil, pero Motorola no sacó al mercado el DynaTAC 8000x hasta 1984.

33 - HORÓSCOPO - 33 ARIES Tras resultar herido de gravedad durante una mani, despiertas en una herriko. Allí te recuperas y terminas pasándote a ese otro lado como Borrokop. TAURO Cabinas teleportadoras para moverte entre comunidades, fabulosa idea. Evita, eso sí, la contaminación genético molecular al volver de la calle Laurel. Podrías retornar hibridado con un riojano. GÉMINIS Comienzas a soñar con Marte. Una mujer muy bella aparece en el sueño y, bueno, una puta liada. Desconfía del taxista con la mano tróspida. CÁNCER Tu viaje a 1884 para matar a Klara Hitler trae alguna que otra consecuencia. Como la bandera nazi (y no me refiero a la ikurriña) multicolor que ondea en el ayuntamiento. Hubiese sido interesante acabar también con la madre de Röhm.

LEO Algo haces para ser escogido entre el grupo de humanos abandonados a su suerte en un planeta selvático habitado por letales cazadores alienígenas.

de la especie, en la que estarías incluida. Que acabes dando a luz al hijo de un bonobo confirma tu verdadera naturaleza.

VIRGO Una nueva vida te espera en las colonias de Lezkairu. Podrás volver a empezar en una tierra dorada llena de oportunidades y aventuras. Más en forma, más feliz, más productivo. Un cerdo. En una jaula. Con antibióticos.

SAGITARIO No te preocupes por el foral loco y céntrate en recolectar melange sin atraer a los gusanos. El Mesías viene.

LIBRA Ingresas en el psiquiátrico por esas visiones tuyas de una NeoPamplona arrasada. Allí conoces a un paciente obsesionado con el número 12 de El Mono, que se ve que le falta o no sé qué grupo terrorista. ESCORPIO Tras el asesinato de tu familia pierdes la cordura, regresas a la Policía Foral y recorres Las Bardenas en un Passat tuneado buscando venganza. OFIUCO Infertilidad humana global. Lástima que no llegara antes de que nacieras. Bien por la extinción definitiva

CAPRICORNIO Bowie cae de nuevo a la Tierra separando a los rectos de los inicuos. «¿Qué es esta abyección?», exclama al descubrir tus discos de IZAL. Perece, así pues. ACUARIO Acércate a la ventana y mira hacia la calle. ¿Te parece poca ciencia ficción? PISCIS Mi queridísimo Piscis. La esperanza es lo último que se pierde. Aunque, en realidad, lo último que se pierde es la salud. Como eso es algo que has perdido hace tiempo y ahora (no) vives en un nicho, ¿de qué preocuparse?

34 34 SUDOKUS entrena tus neuronas

36 36 SOPALETRAS encuentra 12 series de ciencia ficción

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Bigote y PERILLA

-CONCIERTOS- 39 MAYO Carlos Sadness

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