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¿Qué pasa con la libertad religiosa en el reino unido?

En junio del 2024, la Asociación Evangelística Billy Graham por fin pudo celebrar distintos eventos de evangelismo en distintas partes del Reino Unido que tenía programados desde hace algunos años. ¿La razón del hasta ahora? Los estrados judiciales le dieron la razón a la organización cristiana frente a los argumentos que los distintos opositores habían presentado ante las cortes y que hicieron cancelar los eventos en el país. Este no ha sido el único caso de la violación de la libertad religiosa y de censura contra el público cristiano.

“En 2020, Franklin Graham originalmente tenía previsto predicar en ocho ciudades de todo el Reino Unido, pero siete de los eventos fueron cancelados cuando la gira enfrentó oposición. La Asociación Evangelística Billy Graham (BGEA) presentó recursos legales contra esas cancelaciones por discriminación religiosa, con el objetivo de preservar la oportunidad de que todos los cristianos prediquen el Evangelio en público. Ahora, varios años después, todas las disputas legales se han resuelto

favorablemente”, informó la BGEA.

En junio del 2023, el predicador norteamericano Ryan Schiavo fue detenido y tanto su Biblia como el micrófono y altavoz le fueron decomisados por estar predicando en un desfile del colectivo LBGTIQ en Canterbury, Inglaterra.

En 2022, Angus Cameron, en ese momento pastor de la Iglesia Bautista de Cumnock, estaba predicando en Buchanan Street, en el centro de Glasgow, cuando lo acusaron de utilizar un "lenguaje homófobo" y, posteriormente, lo esposaron, lo registraron públicamente y lo dejaron en un furgón policial durante más de una hora, a pesar de que los transeúntes comprobaron que no había sido ofensivo ni agresivo. En enero del 2024, Cameron recibió £5.500 en daños y perjuicios, más £9.400 en costos legales, a modo de compensación de la Policía de Escocia.

Otro de los casos más sonados en el Reino Unido fue el despido de Kenneth Fergusson; la empresa Robertson Trust lo echó de su trabajo porque sus creencias cristianas personales sobre el matrimonio no estaban en línea con las políticas de la empresa. El empleado inició una acción judicial que le dio la razón al considerar que fue discriminado por sus creencias y despedido injustamente.

Los casos abundan y desde hace varios años, lo que lleva a preguntarse ¿Qué hay contra los cristianos y sus creencias en el Reino Unido?

El reto de cumplir con la ley a favor de la libertad religiosa

En ausencia de una constitución escrita, la ley establece que la Iglesia de Inglaterra es la iglesia estatal de Inglaterra y que la Iglesia de Escocia es la iglesia nacional de Escocia. La ley prohíbe la “incitación al odio religioso”, así como la discriminación por motivos de religión o creencias. La ley exige que los niños, entre tres y diecisiete años, reciban educación religiosa y culto en las escuelas estatales, aunque existen disposiciones que permiten la exclusión voluntaria.

En este sentido, La Ley de Derechos Humanos de 1998 establece que “toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento, de conciencia y de religión; este derecho incluye la libertad de cambiar de religión o de creencia, así como la libertad de manifestar su religión o su creencia, individual y colectivamente, tanto en público como en privado, mediante el culto, la enseñanza, la práctica y la observancia”. La Ley de Derechos Humanos reafirma el Convenio Europeo de Derechos Humanos, que establece la libertad de pensamiento, de conciencia y de religión, sujeta a ciertas restricciones que son “conformes a la ley” y “necesarias en una sociedad democrática”.

En Inglaterra y Gales, la ley prohíbe el discurso de odio por motivos religiosos y cualquier acto destinado a incitar al odio religioso mediante el uso de palabras o la publicación o distribución de material escrito. La ley define el odio religioso como el odio a un grupo debido a sus creencias religiosas o la falta de ellas. La policía es responsable de investigar los delitos penales y de reunir pruebas; el Servicio de Fiscalía de la Corona, que es un organismo independiente y el principal servicio de procesamiento público de Inglaterra y Gales, es responsable de decidir si un sospechoso debe ser acusado de un delito penal.

El Reino Unido es una de las naciones que más promulga la libertad religiosa pero en los últimos años, y los casos dan la razón, han aumentado los ataques, capturas y censura a predicadores, pastores, eventos cristianos y diversos negocios que promueven los valores cristianos. En algunos de estos casos de violación a la libertad religiosa, los agentes del estado (Policía y otros) son los principales perpetradores de este derecho cuando el gobierno tiene un “compromiso por defender la religión y creencias”.

Sin embargo, las acusaciones contra los líderes religiosos y la censura contra las iglesias y organizaciones cristianas van desde “lenguaje homófobo”, “violación de las leyes sobre discriminación política y orientación sexual”, censura en publicidad y otros anuncios por ser de grupos religiosos a pesar de estar prohibido por ley, entre otros. Es así como en la actualidad, existen diversas organizaciones cristianas dedicadas desde hace varios años a la defensa de las iglesias, creyentes y organizaciones religiosas en el Reino Unido, como lo son The Christian Institute, Christian Concern, Christian Legal Society, Lawyers Christian Fellowship, entre otros.

La situación actual de la libertad religiosa ha llegado a tal punto, que la BGEA anunció la creación del Fondo de Defensa Billy Graham, que será alimentado en primera instancia por los 650.000 dólares de compensación obtenidos de todos sus casos legales en el Reino Unido, incluido uno que impugnaba la eliminación ilegal de sus anuncios en autobuses para un evento evangelístico anterior en 2018.

“Vamos a utilizar estos fondos que surgieron de esta batalla contra la cultura de la cancelación para ayudar a otros cristianos que pueden verse amenazados a silenciar su voz. Esta es una victoria, no solo para nosotros, sino para todos los cristianos e iglesias de todo el Reino Unido”, anunció la Graham desde Glasgow, Escocia.

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