No puedes escribir una historia de amor L. Oliver Miranda Charles
2016. NO PUEDES ESCRIBIR UNA HISTORIA DE AMOR, de L. Oliver Miranda Charles Mail: oliver.m.charles@gmail.com Facebook / Oliver Miranda Charles Imágenes y portada: “Nuri R. Melgarejo (Mrs. Miau)” Diseño editorial: sikore@gmail.com Todos los derechos conforme a la ley. Impreso y hecho en México.
Prólogo: SOLO EXPULSANDO DEMONIOS Mauricio Ocampo Campos
Andate con cuidado cuando expulses tus demonios, no vayas a desechar lo mejor de ti. Nietzsche
I En penumbra se escucha un blues añejo, las mujeres resbalan de los dedos de la mano izquierda y caen como gotas de sangre a una copa de vino tinto. Su garganta se quema en la soledad del conjunto de letras que bailan del lápiz de un poeta que pretende ser un ser en sí, porque para sí ya es. Algunas putas se acercan, pero él solo piensa en ella o ¿ellas? A estas alturas es lo mismo, tod@s son poesía: el silencio, el pasado, las cenizas, las letras en el lodo… porque los mejores versos salen de la nada. II En este 2do trabajo Oliver se viste de melancolía, su dolor pasado se sintetiza en la armonía y contundencia de sus letras, los paisajes son propios de esta sociedad líquida, de la distopía que el amor negado genera, visiones apocalípticas de un corazón roto. Existe en sus 6
letras una contradicción: por un lado, emana melancolía terrenal, por el otro, la maravilla de las nebulosas generan la posibilidad de seguir sintiendo, es decir, nace un grito de esperanza, aunque aparentemente las niega, son un recurso estético que dan vida a su creación. En sus letras nos comparte sus demonios, su ello, platica con su alter ego y exorciza el pasado presentando al lector su esencia sombría, su visión de la cotidianidad nocturna, aunque con ello corra la suerte de desechar lo mejor de él (poeta). Si bien los textos que de amor y desamor se han escrito son muchos, en este trabajo Oliver les imprime la frescura de un poeta de nueva generación que en estilo libre deja fluir su ser; en ocasiones juega con la forma visual del poema, otras más experimenta con la rítmica o la estructura del texto. Este nuevo trabajo es más maduro, más conciso, con más fuerza que su HOMBRE DE PAPEL, podemos afirmar que es la continuación lógica evolutiva de un poeta que promete aún más. I.I La pantalla de bulbos se pringa con ese punto blanco que se dilata y contrae como lo hiciera el universo, el blues da paso al silencio ¡alguien sufrió un atentado! Su espalda sangra licor en el asfalto, un perro se acerca y lo patea, le lame el rostro para ver si responde; está enfermo, sólo poesía sale de su boca. ¿De quién es el dolor? ¿de dónde salió este antropófago de las letras? ¿Por qué ante esta imagen la luna se reía lejana? o ¿se veía lejana? Alguien pide a gritos ser salvado pero… no hay nadie que pueda salvarnos. NO PUEDES ESCRIBIR UNA HISTORIA DE AMOR afirma el poeta, aunque bajo sombras escribe en voz del amor desde la razón de la sinrazón. 7
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“Hang me, oh hang me, I’ll be dead and gone. I wouldn’t mind the hanging It’s just the laying in the grave so long Poor boy, I’ve been all around this world So put the rope around my neck, hang me up so high. Put the rope around my neck, they hanged me up so high. The last words I heard them say it won’t be long now before you die”. OSCAR ISAAC. Hang Me, Oh! Hang me (Inside Llewyn Davis) “Too late, my time has come. Sends shivers down my spine, body’s aching all the time. Goodbye everybody - I’ve got to go gotta leave you all behind and face the truth. Mama, ooo - (anyway the wind blows) I don’t want to die. I sometimes wish I’d never been born at all”. QUEEN. Bohemian Rhapsody
“Hay un pájaro azul en mi corazón, que quiere salir. Pero soy demasiado listo, sólo le dejo salir a veces por la noche cuando todo el mundo duerme. Le digo ya sé que estás ahí, no te pongas triste. Luego lo vuelvo a meter, y él canta un poquito ahí dentro, no le he dejado morir del todo y dormimos juntos”. CHARLES BUKOWSKI. Blue Bird.
A Nancy por ser luz en los días nublados. A Alejandro, Alfonso, Mauricio y Ángel por sus letras y compañía. A los amores perdidos y los (pocos) amigos que van quedando en el camino. A mis lectores, por creer en lo que hacemos. A Bryan doquiera que estés. A mis 5 lunas.
EL DÍA MENOS PENSADO “Te vas a morir, si vuelves a ser poema, que atrape un poco de verdad...” SIDDHARTHA. El Poema y La Caja.
las letras regresaran, como antes en que nada importaba, en el que las manecillas del reloj cantaban unísonas y el tiempo parecía cosa de niños. En una puesta de sol que nos entibié la piel, en una palabra que pueda salvarnos: de viejas cicatrices, de amores vencidos, de dolencias y mi voz que tanto calla resonara por doquier, entre callejones y andenes en donde uno aprende a (sobre)vivir. El día menos pensado todo regresara a la calma y entonces con pluma en mano escribiré, de nuevas heridas, de reencuentros, de nosotros, y seguramente todo habrá terminado.
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DESHORAS “Estábamos en el lugar incorrecto en el momento equivocado.” EDUARDO DE GORTARI. Save.
Algo de mí pensó en escribir sobre los buenos tiempos. (Se hace tarde.) Recordar implica beber: 1, 2, 3 tragos a tu salud. (Escucharé una de nuestras canciones y todo se arruinará.) Detesto ponerme fatídico cada que el final acecha, pues ya no querré despedirme y todo será como antes: promesas, palabras v a c í a s. Se hace tarde, debo marcharme. 14
PLENILUNIO “Blame it on the black star,
blame it on the falling sky, blame it on the satellite, that beams me home”. RADIOHEAD. Blackstar.
I Al otro lado de la ciudad, mi amor espera, como cada noche cuenta los minutos. Alza la vista buscando una señal, algo que repare su cordura en cada esquina, a cada paso, en un resquicio de luz. (Una sonrisa iluminaba su rostro.) II Ahí lo comprendí jamás fue amor, fue una de sus tantas caras. Después de todo la luna es una estrella más.
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SER EN LA SOMBRA (A Max Rojas)
“Déjenme madrugar mi propia madrugada, ¡y basta! Después quiero morirme.” MAX ROJAS. Canciones para esperar la muerte.
Algo se está viniendo abajo, es tu sombra que ahora se desvanece la que busca su otra mitad, en cualquier sitio: en la lejanía del olvido, en las esferas de los cuerpos, en el traje funeral vuelto ceniza, en la lluvia venida de muy lejos, por donde cada noche pernoctas. A cada paso vas tirando jirones, recuerdos de mujer trozando tus labios en la espera del último tranvía, preguntándote hasta cuando es que terminara (el poema), ¿o quién acabara con quien…? De día o de noche, tu voz seguirá palpitando, tus letras jamás se irán hasta el último de tus aullidos.
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ME PREOCUPA EL TELEVISOR distorsionadas últimamente. Jaime Sabines.
Entrada la noche las paredes comienzan a hablarme, pequeñas voces se cuelan debajo de mi almohada. El televisor parece mirarme proyecta un reflejo; en él, mi rostro parece ser el de otro: héroe de película, vendedor de autos, caricatura japonesa. . . . cambio de canal astronauta, cantante de rock, actor porno. ... CAMBIO 37 canales por sistema de pago, ¿y esto es todo lo que hay? Cada facción descompone mi triste silueta, apago la tele y me preguntó: (¿Quién chingados es ese cabrón detrás de la pantalla?)
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ATENTADO “Pero la ciudad urde tapices, es hábil y tiene siglos de hacerlo, y borda en ellos puras escenas escabrosas.” ALEJANDRO AURA. Condición de la Ciudad.
I Una bala acaricia mi espalda, gritos despavoridos lamentan el infortunio. (Un inocente se desploma.) II Charcos de sangre brotan por doquier: un cuerpo herido, una cita inconclusa, sueños perdidos, gente pidiendo auxilio. (Todo se desvanece.) III Cuestión de puntería, ley del más fuerte. Calles entintadas quedan impunes. (La historia de siempre.)
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RUNAWAY “Eso es lo que se aprende de un viejo perro tirado
y que no va a [ levantarse jamás: “ SUSANA IGLESIAS. Un Hombre No Patea Perros Heridos.
Somos como perros callejeros siempre [ tristeando, con los ojos nublados y el sollozo ahogado al andar. Hambrientos, esperando las migajas que arroja la gente. (Somos perros de la calle, sin rumbo ni dueño.) Solos, como venimos al mundo con las tripas vacías y el ladrido R A B I O S O
con el que cada noche ahuyentamos la soledad.
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LA POESÍA SALE DE MI BOCA de mis puños, de cada poro resuelto de mi piel. MARIO SANTIAGO PAPASQUIARO.
I ¿a dónde va la poesía cuando uno ya no puede escribir? / ¿en qué lugar se esconde? / ¿en qué momento abandona? / cada madrugada pienso en ello & la nostalgia me carcome, es un dolor que punza bajo la yema de los dedos / 1 ansia amordazada en el costado izquierdo / 1 alarido / 1 estruendo de silencios / de voces muertas que a gritos piden [una nueva canción: 1 POEMA. He intentado encontrarle / salgo a las calles / busco entre objetos & personas / ((alguien que me recuerde su rostro)). II ¿a dónde va la poesía cuando 1 se cree feliz? & la tinta deja de ser sangre & el dolor ya no es dolor, & las letras comienzan apagarse. ¿a dónde va la poesía cuando uno ya no puede escribir…?
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LOS MEJORES VERSOS SUCEDEN EN MEDIO DE LA NADA “En cualquier momento acontece 1 poema.” MARIO SANTIAGO PAPASQUIARO.
I a mitad de la calle, sin un quinto en el bolsillo, sin un lugar a donde ir. Ya no hay lugar en esta ciudad en donde guarecer las tristezas, en donde huir del tráfico y la multitud, de un mundo que se cae a pedazos. (Regresar a casa no es una opción.) II Los mejores versos suceden al anochecer cuando la mayoría de las personas duermen y el silencio es una melodía jodidamente hermosa y la luna es más brillante y las estrellas son alcanzables.
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III Los mejores versos suceden a cada instante, es cuestión de mirar con detenimiento, sucede: cada que 2 personas se besan y el amor pareciera real, sucede: cada que un niño ríe y nos recuerda que crecer no es olvidar, no es ser un traje articulado, un número. Sucede cada que escribo, cada que mis dolencias vomitan 1 línea, y puedo crear 1 escena, 1 personaje, 1 emoción, 1 POEMA. Los mejores versos suceden en medio de la nada, a cada instante.
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ESTOY ENFERMO “No es lo mismo ver morir, que cuando a uno le toca”. ALFONSO LIRIKOWSKY. La Muerte.
¿de qué o de quién? No tengo ni puta idea, todo sucede al amanecer cuando mis ojos y mi cuerpo no responden: -se hace tarde, ¿tarde para hacer qué?, ¿para llegar a donde? (y levantarse es un suplicio). Estoy enfermo de mirarme al espejo y verme exhausto. Cada día el sujeto al otro lado es menos parecido a mí: y su mueca parece triste, y sus ojos carecen de brillo. (En su silencio puedo ver como a diario muere.) Me sigue a todas partes, algo en él ya no es igual: jamás seremos el mismo.
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SEMILUNA “Siguiendo la luna no llegaré lejos, tan lejos como se pueda llegar, las cosas que dije no tienen sentido, no puedo detenerme, ponerme a pensar”. LOS FABULOSOS CADILLACS. Siguiendo a la Luna.
De a poco la luna se veía lejana, el destello que alguna vez alumbro mi oscuro comenzó por a p a g a r s e. Tantas caras ocultas que ya ni ella logra encontrarse y uno a la deriva mirando al cielo, suplicando por este amor.
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NOCTURNO “Hey, Mr. Tambourine Man play a song for me, I’m not sleepy and there is no place I’m going to”. BOB DYLAN. Mr. Tambourine Man.
La noche arropa la amargura de mi olvido y cálida abre sus piernas, sus labios dulces cantan una melodía que arrulla mi corazón manso que pernocta al compás del último trago.
NO HAY NADIE QUE PUEDA SALVARTE / (NOS) “Todavía quedaba vida, había una máquina de escribir y papel, y ojos para verlos, e ideas para mantenernos vivos.” JOHN FANTE. Sueños de Bunker Hill.
I No existe persona en este mundo capaz de salvar(nos), es inevitable: algún día habremos de c a e r. II Algunos se rompen los huesos, otros jamás despiertan, algunos lloran y lamentan el vuelo. Hay otros que solemos reír, limpiamos la sangre en cada poro del cuerpo,
resarcimos el corazón.
Seguimos aferrados a un sueño, solemos mentirnos. (Disfrazamos la verdad en cada herida.) 26
III No hay nadie que pueda salvar(te), la vida nos regala 1 oportunidad en que uno descubre que no existe lugar a donde correr, que no existe tregua. Habría que aprovechar la última bala, precisar el tiro, apuntar a la sien. IV No hay nadie que pueda salvar(nos): eres tú y la hoja en blanco, eres tú desangrándote, eres tú arrojándote al p r e c i p i c i o, eres tu gritando: nadie puede salvar(nos). 27
¿A DÓNDE VAMOS…? “Si vas a intentarlo, ve hasta el final. De otra forma ni siquiera comiences.” CHARLES BUKOWSKI. Lanzar los Dados.
De tantos caminos uno ya no sabe para donde ir la cosa resulta seria cuando uno voltea & las opciones son pocas: derecha, izquierda, norte, sur, ¿qué importa? el resultado es el mismo: los zapatos se desgastan, los pies se cansan, el cuerpo ya no es el mismo: a cada paso un sueño termina a cada paso la esperanza muere, (se viste de sombra y nombra cada descalabro). Definitivamente ya no hay lugar para donde ir el cuerpo ya no es el mismo, las ganas tampoco y esta muerte que a diario nos seduce mejor habría que gritar, ir tirando recuerdos, mirar la última puesta de sol y esperar y esperar y esperar. 28
Epílogo: EL ACRÓBATA EN LA CUERDA FLOJA Y SU CAMINO HACIA EL OTRO LADO Desde que el poeta Jaime Reyes insistió en colgarse desde la rama más alta de esta gloria, muchos escritores buscaron la locura de caminar por un andamio en el cual pensaban sostenerse, pero su indeciso arrebato amanso las llagas y solo quedo una estampa llena de cicatrices y dolores. Oliver Miranda es uno de esos poetas que observan y navegan sobre un barco sin navío, e igual que Jaime Reyes también pensó en colgarse, sin embargo, Oliver aprendió a hablar con el dolor, se lanzó al vacío y aprendió a cortar cada segundo al tiempo. A diferencia de Hombre de Papel, Oliver se muestra con un lenguaje maduro, posee mayores y mejores recursos y tiene poemas más recios ya que ha sabido darle el tiempo preciso de cada palabra y darle su lugar. El poeta Roberto Juarroz nos dice: “No escribo, para llenar mis insomnios, envejecer con menos prisa o satisfacer a mi mujer, mi madre o mis amigos. (…)Yo escribo simplemente porque amo la vida”. Así Oliver es como empezó a labrar poco a poco su camino, quitando las piedras que le estorbaban, sin ego, sin determinaciones de querer avanzar por hacerlo.
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Ahora sabe que El Día Menos Pensado uno puede volver a tomar la pluma y papel y comienza en el mejor de los casos a salir Poesía de su Boca, de esta forma Oliver no solo ha entendido su oficio de poeta, también ha comprendido que: hay que ir tirando recuerdos, mirar la última puesta de sol y esperar y esperar y esperar. También en esa misma búsqueda de identidad, ha dejado la figura del Antihéroe y ha ido construyendo una voz propia, ejemplo de ello es el poema dedicado a Max Rojas: Ser en la Sombra donde Oliver nos dice: “Algo se está viniendo abajo, es tu sombra que ahora se desvanece la que busca su otra mitad”, es así como Oliver se ha desempolvado y con mayor visión ha podido no solo retar al lector diciéndole que No Puedes Escribir Una Historia De Amor, retándolo a que lo descubra en cada página, en cada verso , como alguna vez lo dijo García Márquez , vivir , para contarla. Ángel Díaz
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Anexo: ENTRE LO COTIDIANO Y LO SALVAJE ¿A dónde va la poesía cuando uno ya no puede escribir?, ¿qué sucede en el instante en que tu yo cotidiano te hace chocar contra la pared?, la vida es un constante ciclo, una vuelta infinita de constantes ires y venires que visten un elegante traje de desgracia. Este fenómeno que envuelve a más de uno (y ataña a todos), es el causal y origen de este poemario, segundo de Oliver Miranda; si bien en su primer poemario Hombre de Papel dilucidamos ese yo consternado por el amor y sus dolencias, en No Puede Escribir Una Historia De Amor se torna a contemplar la lucha eterna entre vida y letra, entre lo cotidiano y lo salvaje de una ciudad acostumbrada a la muerte, al tedio y a la repetitividad sin reparar en todo ello. Entrando en terrenos pedregosos y teniendo a la luna como guía a ningún lugar, Oliver Miranda Charles levanta una lluvia de versos donde nos cita que: Después de todo la luna es una estrella más.
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Oliver nos demuestra su empedernido afán por devorar libros, uno tras otro para impregnarse de las letras que cada uno le deja, acompañado de voces infinitamente extraordinarias como la de Max Rojas o Mario Santiago Papasquiaro. Es esa vicisitud entre el ser o no ser, entre ser en la sombra y dejar que la noche te desate los versos y la inventiva para saber que los mejores versos suceden en medio de la nada, en fin; Oliver Miranda Charles nos viene a ofrecer con No Puedes Escribir Una Historia De Amor, las heridas, los amores vencidos y el destello infinito de la luna, que existe una capacidad innata para producir la opacidad suficiente para desgarrarse a versos. Pase pues, y entíntese en las deshoras que acompañan a este joven poeta que pernocta al compás de un mal incurable. Buen Provecho.
ALEJANDRO VOLTA En algún lugar de la Cd De Los Palacios, 03 de febrero 2016
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Índice 4 Prólogo: SOLO EXPULSANDO DEMONIOS 11 el día menos pensado 12 Deshoras 13 Plenilunio 14 Ser en la sombra 15 Me preocupa el televisor 16 Atentado 17 Runaway 18 La poesía sale de mi boca 19 Los mejores versos suceden en medio de la nada 21 Estoy enfermo 22 Semiluna 23 Nocturno 24 No hay nadie que pueda salvarte / (nos) 26 ¿A dónde vamos…? 28 Epílogo: EL ACRÓBATA EN LA CUERDA FLOJA Y SU CAMINO HACIA EL OTRO LADO 30 Anexo: ENTRE LO COTIDIANO Y LO SALVAJE
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No
puedes escribir una historia de amor, de L. Oliver Miranda Charles se terminรณ de imprimir en junio de 2016. Se imprimieron 300 ejemplares.
L.Oliver Miranda Charles (CDMX, 1990)
Editor, mediador de lectura y escritor. Ha publicado en diversas antologĂas, como EN EL BORDE, Rostros en la Oscuridad, RĂo Arriba (UNAM), entre otras. Hombre de Papel (Rojo Siena Editorial) es su primer libro. Actualmente estudia y trabaja en proyectos de fomento a la lectura.