4 minute read

LIDERAZGO

Next Article
BIENESTAR

BIENESTAR

SUSTENTABILIDAD, FÚTBOL Y EMOCIONES

MIX DE ÉXITO EN PROYECTOS EMPRESARIALES

Advertisement

La sostenibilidad emocional es un concepto novedoso, disruptivo, que puede ser impulsor de cambios internos en las compañías para mejorar los indicadores de rentabilidad.

POR KATHERINE LOAIZA

Desde hace años se habla de la importancia de la sostenibilidad corporativa como un conjunto de acciones de una compañía que tienen un impacto en la comunidad. Anteriormente se realizaban actividades en favor de las personas que vivían alrededor del área de incidencia de la actividad económica de la empresa tales como donaciones, entrega de escenarios deportivos, dotación de computadores, una escuela, o capacitaciones sobre diferentes temas. Sin embargo, la sostenibilidad corporativa va más allá de las jornadas propias de una responsabilidad social empresarial, RSE.

La sostenibilidad es un tema que está vigente más que nunca, en medio de la necesidad que tenemos los seres humanos de emprender acciones concretas para garantizar nuestra supervivencia. Recordemos que, desde hace años, las Naciones Unidas establecieron los objetivos de desarrollo sostenible por los cuales se rigen los países, incluido Colombia, para lograr una sociedad más igualitaria, justa y equitativa. Son 17 objetivos que también persiguen las empresas, para dejar atrás los viejos propósitos corporativos de lograr la rentabilidad a toda costa.

Precisamente, desde hace años se habla de las mejoras en la rentabilidad de las empresas que implementan progresos en la sostenibilidad. Las compañías que hacen esa transformación desde el interior y hacia el exterior de sus grupos de interés incluso logran pertenecer a índices importantes en el mercado accionario como el Dow Jones Sustainability Index, una especie de brújula inversionista que le indica a los accionistas internacionales qué empresas son las más sostenibles. Los inversores con conciencia sostenible miran primero esas compañías para comprar sus acciones y esperar un retorno en el corto o largo plazo.

También hay estudios donde se concluye que las empresas que invierten en sostenibilidad son más rentables en el largo plazo. De acuerdo con una investigación realizada por Deusto Business School, acerca del impacto de la responsabilidad medioambiental de las empresas en sus resultados financieros, aquellas que invierten más en tecnologías verdes de la información mejoran sus resultados y su valor en Bolsa en el largo plazo.

Según el documento que analizó a 100 empresas alemanas y sus resultados financieros entre 2006 y 2017, las que implantan tecnologías verdes de la información registran peores resultados financieros y menor valor en Bolsa en el año que las incorporan, pero esas mismas empresas mejoran sus resultados de rentabilidad y valor en Bolsa en los años siguientes.

Lo mismo ha pasado con las organizaciones que en sus políticas de equidad de género, reúnen mayor número de mujeres en sus perfiles corporativos más altos. La rentabilidad aumenta en aquellas que suman mujeres a sus juntas directivas, más que las compañías en las que los hombres dominan en la toma de decisiones empresariales.

Bienvenidos a la era de las emociones

El manejo de las emociones en el ser humano es un tema poco analizado por parte de los directores de recursos humanos en las organizaciones, más preocupados por conocer el clima laboral de sus colaboradores que por desarrollar programas para trabajar en ellos el manejo de las emociones.

La buena noticia es que estamos en la era de las emociones y, por primera vez, en Colombia se realizó un evento para medir con estudios y con indicadores cómo nos sentimos como seres humanos. Con el apoyo de psicólogos voluntarios hemos creado una plataforma que nos ayuda a medir emociones, el lanzamiento se realizó en el marco de Mola Week, que tuvo lugar el pasado 28 de noviembre en Villa de Leyva y Ventaquemada.

La depresión, la ansiedad, la tristeza, cualquier trastorno que afecta nuestra mente puede tener impacto en lo que nos rodea y, por supuesto, también se refleja en el resultado de los equipos de trabajo y en los estados financieros de las empresas.

Un ejemplo de emociones: el fútbol

¿Cómo se traslada ese panorama a un equipo de fútbol? Por ejemplo, si existe en un seleccionado de fútbol un jugador que llega a entrenar triste, deprimido, preocupado porque en su casa no tiene una buena relación de pareja, seguramente estará bajo de ánimo y no demostrará entrega y buen juego.

Un director técnico que analiza el estado anímico de sus jugadores tomará cartas en el asunto y lo remitirá a buscar ayuda profesional con el psicólogo del equipo. Si se logra dar con la dificultad o el conflicto que afecta al futbolista y se soluciona, habrá un cambio en el rendimiento de ese deportista y veremos a un jugador mucho más entregado en el campo, rendidor, y podría ser una ficha clave para el club en un momento decisivo.

Ocurre lo mismo con los empleados y con los jefes de unidades de trabajo. Cuando una persona llega a la oficina con alguna preocupación encima no rinde lo mismo y es probable que el resultado esperado no se vea reflejado en el máximo esfuerzo que puede dar para alcanzar un mejor desempeño laboral. Si un director aborda a ese empleado, lo comprende, le da apoyo o incluso le brinda la posibilidad de que encuentre una persona idónea con quién pueda hablar de sus emociones, a lo mejor eso mejora los demás indicadores de la empresa. Este es un claro motivo por el cual debemos hablar de la sostenibilidad emocional.

Estamos construyendo el nuevo Happiness Key Indicator, que hace parte del programa Feelenials, y permite la medición real de las emociones de las personas. Con él pretendemos crear conciencia sobre la importancia que tiene hablar y manejar agendas enfocadas en mejorar las emociones de las personas para alcanzar mejores resultados en las empresas. #KatheDice

Katherine Loaiza, empresaria.

This article is from: