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#12 AGOSTO2014 revistapecado.com pecadostaff@gmail.com PECADORES Liliana Contrera Shavi Alli Ed Albesi Leandro Parra FOTO DE TAPA Cristian Giorgis ILUSTRACIONES DE TÍTULOS Florencia Merlo // florenciamerlo.com.ar CORRECIÓN EDITORIAL Paúl Arte COLABORAN EN ESTE NÚMERO Alejandro Prieto // Colectivo Crónicas Visuales // Lucrecia Venialgo // Marcelo Agudo Inostroza // Bruno Morais // INTERVENCIÓN CONTRATAPA Ignacio Wright SEGUINOS EN: RevistaPecado @revistapecado @revistapecado RevistaPecado PRODUCTO ARGENTINO ©2014 PECADO. Todos los derechos reservados. PECADO no se responsabiliza por los comentarios y trabajos fotográficos subidos en esta publicación, siendo los únicos responsables los autores de los mismos, que expresaron tener derechos sobre el material enviado siendo los autores originales. Se prohibe la reproducción total o parcial del material publicado en esta revista o en la web www.revistapecado.com. Sin perjuicio de ello PECADO en general autoriza reporducciones de los contenidos que le pertenecen pero deberá contar con la previa autorización de Revista Pecado por escrito, para lo cual rogamos solicitar esta autorización a pecadostaff@gmail.com.
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EDITORIAL
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HAPPYLAND Trabajo fotográfico de John Sevigny
GAJES DEL OFICIO
Pequeñas historias de alrededor de lo que hacemos cuando hacemos fotografías. Ya sea en la calle o en el laboratorio, trabajando o simplemente fotografiando porque sí. por ALEJANDRO PRIETO
CULTIVOS EN EL ESPACIO Trabajo fotográfico de Martina Mordau
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COLONIA COROYA Trabajo fotográfico de Cristian Giorgis
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Un colectivo fotográfico se presenta en sociedad, contándonos quiénes son y qué hacen. por COLECTIVO CRÓNICAS VISUALES
PAR MIL
Elegimos una foto de otro autor y contamos qué es lo que nos conmueve de ella, por qué la elegimos de entre otras. por BRUNO MORAIS, LUCRECIA VENIALGO y MARCELO AGUDO INOSTROZA
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Es un pecado no...
Te la dejamos picando
RECOMENDACIONES
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JOHN SEVIGNY FOTÓGRAFO EXTRANJERO
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John Sevigny nació en Miami, EEUU. Estudió Periodismo Investigativo en su país y se ha dedicado a la fotografía y a la docencia fotográfica & artística. Ha participado en más de 30 exposiciones colectivas, impartido talleres y conferencias en escuelas y centros de fotografía, además de publicar artículos de crítica de arte y proyectos fotográficos en reconocidas revistas. 19
GAJES DEL OFICIO por ALEJANDRO PRIETO 路 Fot贸grafo 路
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“¿nos saca una foto?...de carita, de carita”, era el pedido de aquellas chicas que juntas querían quedar retratadas ante la presencia del fotógrafo de bodas, lo que ellas pedían era que sus rostros
que un poro de la cara se vea cual volcán en erupción. El fotografiado conoce esta realidad porque hoy esta capacidad de crear imágenes casi sobre-reales no es solo del fotógrafo profesional y su
sensores poderosos, ópticas maravillosas, monitores HD hicieron que un poro de la cara se vea cual volcán en erupción, el fotografiado conoce esta realidad rostros ocuparan una gran porción del encuadre, no había miedos a las arrugas ni a las ojeras, eran tiempos en que lo analógico se apiadaba de los rostros. Pero luego llego el digital y esa carrera loca e imparable en la búsqueda de la definición, sensores poderosos, ópticas maravillosas, monitores HD hicieron
equipamiento, también ellos con sus pequeñas compactas logran imágenes con alta definición y saben que si no hay Photoshop de por medio no podrán “salvarse”. ghhhhjhjh hjgjjjg Hoy el pedido es el mismo pero con una leve corrección del plano: ¿nos saca una foto?...de lejos eh!! 21
MARTINA MORDAU FOTÓGRAFA EMERGENTE
Nacida en la ciudad de Trenque Lauquen, pcia. de Buenos Aires en 1983. Ha cursado la Licenciatura en Ciencias de la Comunicación, realizando seguidamente diversos estudios en el campo de las artes audiovisuales y fotografía. Ha participado de varias muestras individuales y colectivas, y del libro de autorretratos Yo Soy. Ha trabajado en el pasado como fotógrafa para las revistas Tercer Sector y Materiales, y en la actualidad para Indeleble. 22
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EN BONDI Colectivo fotográfico CRÓNICAS VISUALES
Somos fotógrafos y diseñadores, nuestra escuela fueron los medios alternativos de comunicación, en
especial los colectivos de fotógrafxs. Formamos parte de estos porque creemos en la independencia y la libertad de decir lo que pensamos. Nos fuimos formando al ritmo de luchas políticas de Argentina, siendo parte de estas, fotografiándolas.
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Con los años sentimos cada vez más la necesidad de generar un nuevo espacio en donde lxs fotógrafxs pudiésemos mostrar nuestros trabajos en formato de libro impreso. Con este espíritu nace Crónicas Visuales. Editorial Fotográfica Cooperativa: asumiendo el desafío de promover la fotografía documental, y porque nos parece importante no estar detrás de la agenda mediática y generar nuestra propia actualidad, nuevas historias que nos inviten a reflexionar sobre el complejo mundo que habitamos. Crónicas Visuales es una herramienta para sortear las dificultades económicas y dar lugar a nuevos autores.
Así fue que en diciembre de 2013 publicamos nuestro primer libro: La Gran Casa. Fotografías del Centro de Integración Monteagudo, del fotógrafo Walter Sangroni. Este año llevamos adelante el Concurso Fotográfico Crónicas Visuales, por el cual hemos recibido 98 trabajos, de los cuales 7 conformarán nuestro segundo libro a publicarse en noviembre de 2014. Somos nosotros. Somos Crónicas Visuales escritas con luces y sombras para construir nuevas realidades. Esas que soñamos por ser delirantes, por creer que todas las ideas colectivas merecen ser concretadas.
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CRISTIAN GIORGIS FOTÓGRAFO NACIONAL
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Cristian Giorgis nacido y residente en la ciudad de Jesús María, pcia. de Córdoba, se ha formado como fotógrafo, actor e iluminador teatral en la ciudad de Córdoba. Se ha dedicado a la fotografía editorial, de eventos y espectáculos. Ha expuesto su obra en varias muestras nacionales, además de Portugal y España. 51
PAR MIL por BRUNO MORAIS
¿Por qué Paulina Scheitlin? Es un pecado elegir solamente una foto, pero ya que esa es la propuesta, la que más me conmovió, es una fotografía de Paulina Scheitlin, en el #5, página 13. Me tocó por la luz, el frío, la belleza de lo ordinario y banal. La habilidad de la fotógrafa para darnos a conocer lo que parece insignificante y que a menudo no vemos por nuestros ojos cansados. En esta imagen, que es tan particular como universal, me veo como tantos centros comerciales, de tantas ciudades, como mi imaginación me lo permite.
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PAR MIL por LUCRECIA VENIALGO
¿Por qué Silvio Moricone? Quizás simplemente porque me emociona... Desde una belleza envolvente, esta imagen me transmite esencia de vida. El transcurrir del tiempo en el río, el transitar del ser en las manos, lo efímero y cíclico de nuestra existencia en la luz. Las experiencias que nos afectan y se escurren en las gotas, sumergirnos en lo que nos rodea, ser parte de ello. Diferenciarnos. Contrastar en el reflejo. Tomar y transformar.
Andar siendo puntos suspensivos mientras nos toque jugar.
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PAR MIL por MARCELO AGUDO INOSTROZA
¿Por qué Guillermo Giansanti? En ciertas ocasiones, tengo la necesidad de quedarme a oscuras. Sin dejar que el más leve rastro de luz pueda delatar alguna forma o color, dejo que la oscuridad se apropie de mi habitación, me recuesto en el piso y pongo una mano en mi pecho, para dedicarme solo a mis latidos. Intento vaciar mi mente de pensamientos, pero es inútil, mi cabeza se llena de imágenes. Quizás, porque toman mayor presencia los aromas y los sonidos, no puedo evitar que esa vorágine visual fluya. Puedo verme de nuevo tirando piedritas al río, perdiendo a las figuritas en los recreos, renaciendo con mi primer beso o sosteniendo por primera vez a mi hijo. Así, sin más rumbo que dejarme llevar por las imágenes, me quedo flotando apaciblemente sobre un océano que no tiene orillas. De entre mis recuerdos, surge una foto de Guillermo Giansanti, en la cual, un ciego está parado frente al mar. Escuchando las olas, percibiendo la sal en la brisa, desci-
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frando a través de pequeños indicios cómo es la inmensidad. De pronto, siento que hay un vínculo con aquella imagen, un puente en el aire. Aquella persona, inmóvil en la playa, estaba esperándome. Veo su rostro y me siento parte de sus pensamientos, me he convertido en un sonido, en un perfume, en una sensación entre sus dedos, en una semilla que se hunde para nacer en la oscuridad. Intento imaginar cómo es el mundo para alguien que nunca ha visto un color, cómo es navegar en el cielo sin haber visto nunca una nube, cómo es el amanecer para aquél que nunca ha visto la luz. Me levanto y voy hasta la ventana, repitiendo lo que le dijo el zorro a El Principito “Lo esencial es invisible a los ojos”. Corro las cortinas y contemplo nuevamente los edificios, esas estalagmitas del hacinamiento que propagan la indiferencia. Sin pensarlo, salgo a la calle con la vista vendada, caminando a tientas, con el anhelo de hacer contacto con otro que desee abrir los ojos.
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CADO E P N U ES NO VER
CADO E P N U ES CAR S U B O N
Peter Joel Witkin
Sanna Dullaway
P. J. W
FOTOGRAFÍAS MÍTICAS COLOREADAS
La anécdota, repetida incluso por él mismo, cuenta de la cabeza de una niña rodando hasta sus pies a temprana edad, como hecho germinal y disparador de sus pesadillas infernales.
Una gran cantidad de fotografías que muestran importantes momentos de nuestra historia han llegado a nosotros en blanco y negro. Imágenes como el beso de una pareja en Times Square tras el final de la II Guerra Mundial o los retratos más conocidos de personajes como el Che Guevara o Ana Frank no nos dan ninguna información sobre el color de los paisajes o el tono de los ojos de los retratados.
Un estudio que se convierte en laboratorio de un alquimista, o en refugio de un nigromante, plasmando con preciosismo técnico íncubos y súcubos, organismos escultóricos hibridizados entre vida y muerte. Pecado es olvidarse de revisitar la obra de Peter Joel Witkin.
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La artista sueca Sanna Dullaway se preguntó cómo serían algunas de las imágenes más míticas de nuestra historia si hubiesen sido tomadas en color. Pongan su nombre en -Google Imagenes- y naveguen por un rato por esta fantasia de color.
Pero si todo escritor que no domine el lenguaje, que se deje “atrapar” por las normas y los prejuicios de determinado grupo social de escasa tolerancia y la visión de determinado modelo literario, nunca será un escritor de primer orden porque nunca será capaz de ver claramente por sí mimo.
- PARA SER NOVELISTA John Gardner
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