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21 de junio DÍA INTERNACIONAL DEL YOGA
YOGA: FUENTE DE BIENESTAR El Día Internacional del Yoga llega a su séptima edición en un momento en que la pandemia de COVID-19 continúa alterando las vidas de las personas en todo el mundo.
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Más allá de su impacto inmediato en la salud física, la pandemia de COVID-19 también ha exacerbado el sufrimiento psicológico y los problemas de salud mental, incluida la depresión y la ansiedad, ya que las restricciones continúan en diversas formas en muchos países. Esto ha puesto de relieve la urgente necesidad de abordar la dimensión de salud mental de la pandemia, además de los aspectos de salud física.
El mensaje del yoga para promover el bienestar físico y mental de la humanidad nunca ha sido más relevante. Durante la pandemia se ha observado una tendencia creciente de personas de todo el mundo que adoptan esta práctica para mantenerse saludables y rejuvenecidos y para luchar contra el aislamiento social y la depresión. El yoga también está desempeñando un papel importante en la atención psicosocial y la rehabilitación de los pacientes con COVID-19 en cuarentena y aislamiento. Son particularmente útiles para aliviar sus miedos y ansiedad.
Reconociendo este importante papel del Yoga, la conmemoración de este año se titula: “Yoga para el bienestar”, aludiendo a la práctica del yoga como disciplina que promueve la salud integral de cada individuo. Fuente: UN.ORG (United Nations)
¿Qué es el Yoga? Es una ciencia, un arte y una filosofía de vida que posee un conjunto de técnicas psico-físicoespirituales que tienen como finalidad:
1) La integración de los tres aspectos existenciales del ser humano (cuerpo, mente y espíritu). 2) La integración del individuo con su entorno social y ecológico. 3) La integración del individuo con su propia concepción del Universo.
EL YOGA INTEGRAL EN LA VIDA COTIDIANA Llamamos vida cotidiana al conjunto de todas las actividades que realizamos habitualmente en nuestra jornada diaria. Yoga Integral es llevar a la práctica diferentes métodos de Yoga de manera ordenada y coherente. Normalmente, una persona que desea iniciarse en la práctica del Yoga acude a un Instructor o Profesor y comienza a tomar clases prácticas ya sea en un Centro de Yoga, en un club, gimnasio, etc. Luego de practicar durante un lapso determinado de tiempo (el mismo varía según la persona), comienza a sentir algunos de los efectos de esta práctica: su cuerpo más relajado, con menos contracturas, su mente más calma, su nivel de estrés va disminuyendo.
A medida que va avanzando en su práctica, más efectos se van sumando: puede dormir mejor en la noche, rinde mejor durante sus actividades cotidianas, se concentra mejor en sus actividades intelectuales, se siente más animado, se relaciona mejor con las demás personas, va descubriendo una razón para vivir, va aprendiendo a darle otro sentido a su vida y hay un cambio de actitud de vida. Pero todavía no se da cuenta de cómo integrar esa práctica a su vida cotidiana. De cómo ir llevando a la vida diaria las técnicas que de a poco va aprendiendo en su sesión de Yoga. De eso se trata esta nota, iremos viendo algunas de las instancias más comunes de nuestra vida cotidiana y cómo aplicar el Yoga en ellas. Para ello dividiremos la jornada en tres bloques: comienzo, desarrollo y final.
