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Aprender de los fracasos siempre es
Aprender de los fracasos siempre es un éxito
LA PALABRA FRACASO HA PERDIDO SU TINTE PEYORATIVO. CADA VEZ ESTÁ MÁS ACEPTADA COMO PARTE INTEGRANTE DEL ÉXITO.
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POR Estrella Flores-Carretero La ciencia se ha forjado sobre el principio de ensayo y error: cuantos más fallos se cosechan, más cerca se está de lograr el acierto. ¿Por qué no aplicar lo mismo al mundo empresarial? Thomas Alva Edison no solo fue un gran científico, sino también un exitoso empresario que registró más de 1.000 patentes a lo largo de su vida. Muchos de sus inventos solo alcanzaron la gloria después de un largo camino de desastres. Antes de que su bombilla iluminara a la humanidad, el historial de decepciones era tal que la prensa de la época se reía del asunto. Cuando le preguntaron por ello, el genio respondió: “No he fracasado. He encontrado 10.000 soluciones que no funcionan”. Del mismo modo, la historia está llena de personas exitosas a las que echaron del colegio cuando eran niños, que perdieron estrepitosamente en todos los concursos a los que se presentaron, que sufrieron el rechazo a sus obras o sus ideas en multitud de ocasiones… Sin embargo, no se rindieron. El fracaso en la empresa es, en mi opinión, un requisito para el éxito, siempre y cuando se sepa gestionar de la manera adecuada. Para ello, es imprescindible fomentar una política corporativa donde perder coexista con ganar.
NO APRENDER DEL FRACASO SÍ ES FRACASAR.
¿Cómo capitalizar de los errores?
Admitir el fracaso propio. Hay que asumir los errores, jamás encubrirlos ni derivar la responsabilidad hacia otros. No obstante, también hay que compartirlos, porque eso genera empatía, les dice a los demás que también ellos pueden fracasar y muestra que todos podemos ser resilientes y salir a flote tras el naufragio. No solo eso, hablar abiertamente de un fallo propio puede llevar a otros a dar con la solución que no hemos encontrado.
Mostrar tolerancia al fracaso de
los demás. Esto pone de manifiesto que lideramos un equipo sin miedo al fracaso, dispuesto a asumir riesgos de forma inteligente. Solo así se abre la puerta a la innovación, porque las personas se sienten libres para experimentar nuevas soluciones.
Frenar la competitividad entre
los miembros del equipo. En una corporación todos deben ser próximos e iguales, sin asomo de competitividad entre sus componentes, sino solo hacia el mercado exterior. De esta manera se impulsa también la creatividad, el orgullo de pertenencia, el bienestar y, por tanto, la productividad. Cuidar las emociones. A nadie le gusta fracasar. Supone una pérdida de autoestima importante, pero cuando uno ha aprendido a gestionar sus emociones sabe que el fracaso le brinda una sabiduría que no puede obtener de otro modo, que le ayuda a mostrar su capacidad de resistencia, que le da la oportunidad de fortalecerse, que despierta su motivación. Analizar el fracaso. Para aprovechar las ventajas que nos proporciona el fracaso, hay que analizarlo: saber si se ha debido a un descuido, a una falta de planificación, a deficiencias de colaboración… Lo mismo con el éxito: diseccionar sus causas nos permite aprender.
FUENTE: INSTITUTO EUROPEO DE INTELIGENCIAS EFICIENTES (IEIE).
EL MAGISTERIO DE LARRY KING
A Larry lo entrevisté disgustaba abusar de los gaddos veces. Una, en EL MAGISTERIO gets y la tecnología porque en el show de CNN en LEGADO POR LARRY su opinión estaban desvaneEspañol, y otra en su KING NO PUEDE ciendo la conversación cara residencia de Bever- RESUMIRSE EN UNAS a cara. Hoy, recuerdo su claly Hills (California), POCAS LÍNEAS. SU ra aversión por los mensajes para mi primer li- PARTIDA A LOS 87 de texto: "No me gustan. Yo bro, El poder de es- AÑOS, VÍCTIMA DEL hablo y escucho, pero no me cuchar. Hablar con COVID-19, HA DEJADO gustan los SMS". Entonces me el maestro de las en- HUÉRFANOS A TODOS vienen a la memoria los nitrevistas fue un sue- LOS QUE ADMIRAMOS ños, a los que permitimos coño largamente espe- SU OBRA. nectarse a juegos de internet rado. Recuerdo que durante interminables horas me recibió con la del día, mientras se pierden amabilidad propia de un gigan- buena parte del mundo real. te. "Usted ha sido una inspira- "Esa es la parte triste de todo esto", me decía ción para mí", le dije al presen- sobre abusar del desarrollo tecnológico. "Ahora tarme en su casa. Él contestó: hay mucha información a través de las máqui"¡Oh, feliz de serlo, gracias!". nas. Los niños son muy rápidos con las máquinas, En tiempos tan egocéntricos, La- pero todas esas cosas son impersonales. Hay falta rry siempre iba a contracorrien- de escucha, de contacto". te: "Mi opinión no es importante Como entrevistador y ser humano, solo tengo bueen absoluto. Las opiniones que nos recuerdos de Larry King. Su entrevista más cuentan son las del invitado. sorprendente, según Tenemos que amar lo que hace- me confesó, fue con mos, ser curiosos, cada día hay Nelson Mandela, porque aprender más", me dijo. que el líder sudafricano Su modelo era muy simple: le enseñó "el amor so"Nunca aprendí nada cuando bre el odio". Ahora que estaba hablando". Aquella fra- ambos han trascendido se me iluminó, porque resumía a otro plano, allí donde todo lo que debemos aprender estén (en el cielo para los comunicadores con voca- los religiosos y en la ción de servicio. memoria del universo, Fue un gran defensor de la cu- para el resto), segurariosidad, de que los niños pre- mente ríen y conversan guntaran directamente sus muy entretenidamendudas a los protagonistas. Le te. Para la eternidad.