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Yo opino Yo opino Vivencias con el Papa Año de la misericordia Carol Obando Directora del Centro internacional de PNL Coaching y Psicología

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El buen ambiente en casa no debe desaparecer, a pesar de la dura prueba que estamos pasando.

para lecturas, para oración, todo lo que nos aproxime a profundizar en el ser y a incrementar nuestra fe nos ayudará a sentir mayor tranquilidad y a crecer como seres humanos.

Ejercicio: practique ejercicio tres veces por semana durante 30 minutos cada día, esto le ayudara a tener mejor salud física y mental.

Tenga en cuenta que los espacios en familia son muy importantes, después de todo en este momento tenemos el regalo del tiempo y podemos aprovecharlo para acercarnos a los demás. Así como es importante darse un tiempo para estar a solas y conectarse consigo mismo, también es importante que tengan momentos en familia.

La ventaja de los juegos de mesa Durante el juego se desarrollan muchas cosas, entre ellas; la diversión, y la tolerancia a la frustración característica muy importante sobre todo en los más pequeños ya que esto ayuda a que sepan afrontar el hecho de perder y lo vean como una oportunidad de aprendizaje. De ahí que si los adultos juegan con los niños deben mostrar una buena actitud cuando pierden y deben mencionar

Sin duda alguna el COVID-19 ha traído cambios repentinos en la vida de todas las personas. La cuarentena como medida de prevención de contagio es la mejor contingencia, sin embargo, el confinamiento y el cambio de rutina puede traer consigo estrés. A continuación, enumero una lista de acciones que sin duda alguna le harán más llevadero este momento. Tener rutinas diarias • Higiene diaria: levantarse y organizarse, esto ayuda a que su mente se prepare para un día con más energía • Horario laboral: tener horarios de trabajo programar un tiempo para darle campo a las otras acciones. • Horarios de ocio: es importante que se activen momentos de desconexión tales como una siesta, juegos de mesa etc.

Horarios de conexión espiritual: darse tiempo La familia es el núcleo donde al amor no termina

en voz alta que el proceso lo disfrutaron y que ya saben que técnicas usar en el próximo juego.

El baúl de las expresiones

Todos los integrantes de la familia van a tomar una caja, puede ser una de zapatos o lo que consideren mejor. Cada persona va a poner un detalle en la caja como un color, pintura, calcomanía, etc.

Comparta en familia y deje de lado su celular Una vez la caja esta lista la pondrán en un lugar visible para todos. Al lado de la caja pondrán hojas de papel pequeñas y pluma. Durante el día identificaran una emoción esta puede ser positiva o no. Por ejemplo; me sentí feliz cuando me contaste un chiste en el desayuno, me sentí triste cuando estuviste mucho tiempo en el celular y no escuchaste lo que te decía. Terminando la frase pone su nombre y a quien va dirigido.

Tenga en cuenta que al escribir debe iniciar con la emoción personal, esto evita que la persona se sienta atacada. El ejercicio se hará de lunes a viernes y el domingo todos se reunirán, pondrán el baúl de las expresiones en la mitad y abran y cada persona saca un papel y lo lee. Las personas que estén incluidas en la nota escuchan y ofrecen disculpas o agradecen no se trata de discutir solo escuchar y agradecer o disculpar. Al final se dan un abrazo entre todos y continúan con la actividad la siguiente semana.

Este ejercicio se puede hacer dos semanas seguidas cada dos meses, luego ya será un hábito expresar las emociones y la comunicación fluirá de forma óptima.

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La familia López Cabrera es ejemplo de trabajo duro, amor al prójimo y mucha fe.

¿Se puede ayudar al prójimo en este tiempo donde somos asolados por una pandemia? La respuesta que dan Wilson López y su esposa Adela Cabrera es sí. Ellos junto con su hijo Josué, ante la emergencia sanitaria buscaron la forma de colaborar de alguna manera con los más necesitados Y aquí les contamos cuál fue su desinteresada iniciativa.

Es necesario conocer que Wilson López ha dedicado más de 40 años a la fotografía, lo que lo llevó a convertirse en un referente de la fotografía publicitaria en Guayaquil y el Ecuador. Su especialidad es la producción y toma de fotos de alimentos y bebidas. Esta es una especialidad que requiere mucho detalle y dedicación para conseguir la perfección y que los alimentos que vemos fotografiados nos incentiven al consumo. Su inicio en la fotografía fue como fotógrafo en prestigiosas agencisas de publicidad (Norlop Thompson y McCan Ericson) y luego como independiente. Wilson creó un espacio en el cual se pudo desarrollar él y su familia dentro del negocio de la fotografía comercial.

Al iniciarse la cua - rentena el trabajo g r a n a

de Wilson se vio disminuido y había tiempo para otras cosas, entre esas la insistencia de los famosos retos en las redes. Unos amigos lo impulsaron a realizar un reto y cuenta que cuando se desató la locura por conseguir mascarillas, salió a buscar para su familia y no encontró por ningún lado. “Pensé entonces si para mí era difícil conseguir, qué pasaría con personas que no tienen ni recursos ni facilidades para obtenerlas y protegerse”, cuenta López. Una iniciativa llena de amor al prójimo

Wilson después de lo vivido y pensado, decidió comprar telas para hacer mascarillas, con la ayuda de su esposa Adela Cabrera de López, que sabe coser y tiene máquinas que usa para producción en el estudio fotográfico de él.

El fotógrafo comenta que con las justas alcanzó a comprar los materiales, porque enseguida decretaron la cuarentena y todos los almacenes cerraron. Ya en casa con todos los materiales él y su esposa empezaron a fabricar las mascarillas, las cuales luego de fabricadas Wilson junto con su hijo Josué, recorrieron la ciudad en busca de personas de escasos recursos económicos para entregar las mascarillas, personas que estaban en alto riesgo de contagiarse con Covid-19 (coronavirus).

Lo indicado fue el inicio, porque si bien el tuvo la posibilidad de comprar las telas, pensó que mucha gente no tendría esa facilidad y sus capacidades recursivas lo llevaron a crear mascarillas y pasamontañas a partir de prendas de ropa usada. ¡Ahora te toca a ti!

Sus amigos estaban fascinados con el reto creado y lo empezaron a llamar para proveerle de los implementos, para que el siga elaborando las mascarillas y es en este momento donde el decide pasar el reto a sus amigos.

Wilson, expresa que al principio no había pensado grabar su iniciativa, pero después pensó que era bueno realizar estos tutoriales y compartirlos con sus amigos y seguidores de redes sociales, para motivarlos a ayudar a personas necesitadas y en condición de abandono.

Muchos ante los problemas se quedan sentados o se hacen a un lado, pero Wilson López y su familia han mostrado que, aunque estemos en emergencia sanitaria causada por el Covid-19, ser solidarios pese a todo es posible.

“Fui a repartir con mi hijo y decidimos grabar con el celular y lanzarlo como un reto, porque están de moda y qué mejor reto que ayudar al prójimo, por eso le pusimos el título: ¡AHORA TE TOCA A TI!”, finaliza Wilson López, fotógrafo profesional.

No hay excusa para no ayudar al prójimo

Proceso de elaboración de las mascarillas

Orientación María del Carmen Rodrigo H. Sicóloga clínica

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Quedarnos en casa nos puede ayudar grandemente a nosotros y también a nuestras familias.

Acá en este espacio voy a ofrecer algunos consejos para ir revisándonos, ir mirando qué camino tomamos y cómo podemos ir adaptándonos a la situación, probando una forma u otra de afrontar las crisis. Identificar amorosamente

Es decir, sin criticarme, ¿cuál es mi tendencia? ¿Me he quedado paralizado (a), estoy haciendo camino, estoy sin ánimo? Este ejercicio es de todos los días y a veces de varias veces al día, expande la consciencia de nosotros y nos conecta con el momento, disminuye la sensación de incertidumbre. • Si mi respuesta es me quedé paralizad@, entonces la emoción probablemente es miedo. ¿Qué me dice este miedo, me pone frente a qué temor? El poder ir explorando mis pensamientos, me ayudará a darles formas y cauce. • Si mi respuesta es estoy sin ánimo, no quiero hacer nada o no logro concentrarme, entonces po

Contrario a lo que podríamos creer, frente a las crisis siempre tenemos opciones, dejarnos arrastrar por ellas, darles la cara y salir airosos, paralizarnos, ir por un camino y retroceder, escoger ir por otro, todos son válidos, ninguno de estos afrontamientos está bien o mal, son “solo” eso, formas de afrontar, es importante tener claro que son formas y que son válidas, lo que puede lastimarnos es quedarnos en una sola forma de afrontar las situaciones, el truco es ir practicando una y otra.

Quedarte en casa no debe ser negativo

El ideal es conversar esto que siento y pienso con alguien que me respete y me escuche, en muchos casos no se trata de cambiar el pensamiento, sino de dejarlo fluir, el miedo a la muerte es un miedo estructural del ser humano, por eso en este momento está exacerbada esta emoción.

dría ser tristeza. ¿Qué me dice esta pena, me pone frente a qué posible pérdida? • Si mi respuesta es no sé qué siento, son muchas cosas, solo siento como ahogo, como que no puedo parar de pensar, entonces, tal vez, es angustia. La angustia es la mente en el futuro y puede llegar a convertirse en un malestar físico de tanto pensar en mañana y en cómo será.

También puede haber una reacción súper positiva como si no pasara nada, acompañada de una sensación de desconexión, eso suele ser negación. Vale entonces permitirse revisar la situación en la que estamos y dejarse estar triste. Acéptate y no critiques lo que sientes

Aceptarnos

Muy bien, llegamos a saber qué sentimos y a escuchar nuestros pensamientos, ahora viene la segunda parte:

Aceptarnos, no criticar lo que sentimos, las emociones son eso, emociones, que siempre traen un aprendizaje, por ejemplo, tengo miedo de contraer Covid-19 y morir.

El aprendizaje es tan sencillo como complicado, hay que reflexionar sobre la vida que llevo y mi propia muerte e ir aterrizando en qué nivel de satisfacción de vida y de riesgo de muerte estoy y cómo puedo mejorarlo.

En este momento la tristeza, el miedo y la angustia son las emociones cotidianas, sentirlas es normal, dejemos que fluyan, piensen en estas emociones como una visita no deseada, pero que tenemos que recibir, las dejamos pasar las atendemos un momento de “la mejor manera posible” y luego decimos que tenemos algo que hacer, aunque sea mentira, así la visita se cansa o se va, así mismo son estas emociones y éste es el paso tres:

Buscar alguna actividad aquí y ahora, esto no quiere decir que tendremos ganas de hacer la actividad o que será fácil, es solo movernos a hacer algo distinto que nos desconecte de la emoción luego de que hemos receptado su mensaje. Así podemos leer, pintar, coser, cocinar, hablar con otra persona, esto es como cuando queremos que la visita incomoda se vaya…

Es importante saber que mientras hacemos la actividad escogida, la emoción podría regresar, entonces, ahí empieza el ejercicio de nuevo. Recuerden que la práctica hace al maestro, cuando todo pase van a tener muchos momentos de reflexión que podrán seguir revisando, seguramente cada uno le va a ayudar a crecer.