THE CURE DANZA, PERO SIN LOBOS Robert Smith y los suyos siemprese caracterizaron por la sorpresa perpetua. Confirmando una de sus cualidades más sobresalientes, su proyecto de 1990 fue “Mixed UP” un álbum doble con re-mezcladas y re-construcciones de algunos de sus más grandes éxitos. ¿Ganas de conquistar al público del house? ¿Intención de descolocar a sus acérrimos fans? Sólo Robert Smith tiene respuestas para semejantes interrogaciones. Cuando el Acid-House llegó a Inglaterra para quedarse en 1988, los Cure estaban violentamente en offside. Sobrevivientes del post-punk, pasaban a ser meros jubilados gracias a la nueva corriente de la moda que impulsaba el baile dictatorial de las máquinas. The Cure había significado todo para una generación atormentada: la del dark-rock que había hallado refugio y consuelo en LPs como “Faith” o “Pornography”. Sin embargo se las habían arreglado como para pasar a otra face sin perder credibilidad: Robert Smith siempre tuvo algo de payaso y temas como “Let's go to bed”, “Close to me” o “Hot hot hot”, eran temas psicóticos para bailar. ¿Cuál sería la respuesta de The Cure ante el aluvión house? Un disco cerrado y magnífico como “Desintegration” que, se suponía, espantaría a los que se acercaron al grupo por una cuestión de modas. Error: “Love song” llegó al número 2 del Top -Forty americano y el LP vendió por toneladas. ¿Y cómo funciona “Mixed Up” en este esquema? Como un disco bailable hecho por DJ (disc-Jockeys) de probada reputación que amputaron, mutaron, extendieron clásicos de The Cure como “A forest” o “In between days”. Además el doble contiene las versiones maxis de los temas de “Kiss me, kiss me, kiss me”. Veamos que opina Robert Smith del baile. “Bueno, solía ir a las discotecas con Severin, bajista de los Banshees, en la época en que hicimos The Glove (experimento con fachada de grupo). Pero no bailábamos. Era más tomar drogas y tratar de meternos en el baño, lo que habitualmente nos demandaba dos horas. Ese sería “el baile”. Siempre caminaba por la pista de baile y era empujado por la gente. Pero jamás fui capaz de bailar... realmente no puedo coordinarme. Durante años, Mary (esposa de Robert) ha tratado de enseñarme la más básica coordinación entre brazo y pierna y no he podido hacerlo. Todo va bien durante dos o tres pasos y después algo hace click en mi cabeza, y la cosa se pone horriblemente mal.” ¿No hay un elemento perverso en sacar un disco con mixes bailables? “No realmente, porque un montón de estas versiones salieron anteriormente. La razón por la que lo hicimos fue muy simple. Había gente que quería tener esas versiones de doce pulgadas y estaban pagando muchísimo dinero por ellas, algo completamente estúpido. Cuando comenzamos a juntar el material y a escuchar esas versiones maxis, nos pareció espantoso. Eran terribles, particularmente comparadas con mezclas más recientes. Nos parecía sin sentido el editar la cosa tal cual estaba, como si fuese un archivo, y yo creí que debíamos usar la oportunidad para hacer algo que nadie había hecho antes. La compañía discográfica no estuvo al tanto de la cosa hasta que se completó.” ¿Fue difícil entregar el control completo de tus canciones a otra persona, en este caso un discjockey? “Sí, lo fue. Pensé que si yo me involucraba en esto, iba a comenzar a reducir todo. Quería gente que mezclara los temas como si fuesen de cualquier otro. Al principio, cuando los cassettes comenzaron a llegar, me pareció muy extraño y pensé ¿qué demonios estamos haciendo?. Pero cuando escuché “In between days” pensé que era brillante: exactamente lo que nunca haríamos en The Cure. “Si este hubiese sido nuestro primer disco, jamás lo hubiese editado. Igual creo que nos podemos salir con la nuestra, con respecto a este disco. De todas las críticas que se nos hacen, la de subirnos al vagón de la moda es la menos válida de todas. Particularmente no me
preocupo si quedamos atrás de este vagón: siempre habrá otro bajo las ruedas del cual arrojarnos”. ¿No creés que el típico fan de The Cure va a escadalizarse ya que los consideraban separados del movimiento dance? “Realmente no creo que esto sea tan importante ya que ésta es la primera y única vez que lo haremos. El próximo disco que hagamos, probablemente esté en el polo opuesto del baile. Desafortunadamente ése es el modo en que hacemos las cosas. Pero es realmente bueno rehacer un tema como “The Walk”, y tocarlo como si hubiera nacido el mes pasado. La gente se la pasa tratando de hacerme sentir como avergonzado de estos mixes, pero no caigo en ésa. Mucho de la onda que está pegando en este momento me gusta, la onda bailable. “Realmente me gustó mucho Donna Summer cuando tocaba en The Glove con Severin, solíamos escuchar “Bad girls”. La gente decía que era algo kitsch pero a mí me gustaba genuinamente. Era bueno para irse a dormir. Y realmente me gusta mucho de lo que se escucha ahora. El fuerte de The Cure a través de los años ha sido explorar la introspección, el aislamiento, la tristeza y la falta de fe, pero en las últimas épocas la música del grupo fue como suerte de celebración. Oh, sí, pero una respuesta hábil a esto (y también verdadera) es que no hay cosa más alienante que el baile. Puede ser realmente comunicativo... Pero creo que hay un elemento de introspección en lo mejor de la música bailable del momento, que normalmente no está. No creo que los dos elementos sean excluyentes, danza e introspección. Cuando realmente me enojo, bailo. Es el único momento en que bailo en casa, porque es una liberación física.” ¿Qué es lo que te ha impresionado de las nueve bandas que salieron en Inglaterra durante los últimos años, como Stone Roses, Happy Mondays, The Charlatans o The Beloved? “Escuché el simple de los Happy Mondays (“Kinky Afro”) la otra semana y realmente me gustó, a pesar de mí mismo pero... no me gusta su corte de pelo. La relación entre los grupos y yo es cuánto yo quisiera estar en esa banda, y hay muy pocos grupos en los que realmente quisiera estar. Para ser honesto, no estoy muy conmovido por la mayoría de ellos. “Los Stone Roses; puedo ver por qué a la gente les gusta, pero no me gustaría estar en el grupo; ¡Porque tendría que ser el cantante! (risas).” ¿Creés que The Cure pertenece a una generación diferente? “Bueno, en un sentido estoy forzado a aceptarlo porque hay toda una prensa que me lo indica, pero cuando tocamos la gente que viene a vernos es más joven de lo que yo era cuando comenzamos The Cure. Pero eso no es excluyente. No me siento enfrentado a Stone Roses. Siento que lo que hacemos es tan joven como lo que hacen ellos. Pero no me siento compitiendo. Me gusta Neil Young y no tengo su edad.” “La gente que viene a vernos o compra nuestros discos gusta de un montón de cosas. No existe el fan arquetípico de The Cure. Atraemos a toda clase de personas raras y maravillosas.” De acuerdo CON LA LEYENDA, CUANDO hiciste “Pornography” estabas muy mal, física y mentalmente... “No estaba tan mal, pero la gente cree que sí, de manera que debo haberlo estado. No es algo que recuerde muy bien, pero tuve un buen momento en un sentido perverso. Simplemente odié todo lo que me rodeaba durante un año, lo que es algo muy saludable porque te da, más tarde, una perspectiva en la vida. Realmente no fue muy divertido. Por eso el grupo se separó, porque alcancé un punto que no toleraba a nadie alrededor mío. “Pero no lo hice a propósito. Bueno, tal vez sí. Siendo honesto, cuando cosas como ésas suceden es
porque lo estás haciendo, parcialmente, a propósito. Sólo quería saber cómo se siente el hecho de alcanzar una declinación física y mental, de manera crónica y obsesiva. Me alegro que me haya sucedido cuando era lo suficientemente joven como para recuperarme, físicamente sobre todo. Ahora no podría. Es trágico vivir permanentemente es ese estado, porque la gente que lo hace termina rodeada por personas que alimentan constantemente la noción de que uno está viviendo al límite. Y ésa es la gente más conservadora: los desganados, los que son gobernados por el alcohol y las drogas. Nosotros somos propensos al desmadre todavía, pero creo que es una fase que hemos atravesado.” “Desintegración” tuvo algo de todo eso. La teoría es que ahora sos más maduro como para enfrentarte a esos sentimientos sin involucrarte demasiado... “Eso no es realmente verdad. 'Desintegración' fue mi cumpleaños número 30, mientras 'Pornography' fue el 21. Cumplir 30 fue grosso para mí. La noche en que los cumplí fue cuando escribí 'Desintegración' y fue una noche que hubiera estado orgulloso de experimentar cuando tenía 21. Estoy seguro que menos gente de lo que se cree, lleva una vida normal. Mucha gente hace cosas que no se espera de ellos y, a veces, yo también. Sólo que no en público. Ya no vomito más en los clubes. “Pero 'Desintegración' es más fuerte que lo anterior, la gente que me rodeaba creía que yo estaba muy contento con lo que pasaba. Y yo les mostré que no... En mucho de lo que hacés hay una negación a ver la luz al final del túnel... “¿Qué luz al final del túnel?” Está bien. Hay un nivel de insatisfacción, una tendencia a la angustía, que puede verse cómo un rechazo al crecimiento... “La insatisfacción está siempre ahí. Nunca me encontreé a alguien que realmente se sienta satisfecho. La creencia que cuando crecés te sentís mejor, es una mentira. Sos más viejo y te sentís peor.” Jim Kerr de Simple Minds, dijo sobre vos que “el tiempo cambia. Robert tiene 30 y todavía está escribiendo canciones sobre arañas que lo comen.” “Sí, pero ése es un lado de The Cure que los otros grupos, que se han dedicado a agitar “banderas”, envidian. No pueden hacer cosas tontas. Quiero decir que, sí, es tonto, pero si sueño con arañas que me devoran no me despierto y digo: 'Oh, tendría que tener sueños más adultos. Debería soñar que soy Jim Kerr' (risas). “Pero cantar sobre arañas y todas esas porquerías sobre las que a veces canto, es lo que hace que sea más divertido estar en The Cure que en Simple Minds o en U2. Estoy en un grupo pop, y todavía quiero estarlo. No quiero ser Sting, Bono o Jim Kerr. Es muy loable su actitud, pero si yo me metiera en cruzadas 'a favor de algo, no podría salir de compras porque la gente se cagaría de risa. No me creerían. Te mudaste de Londres a Sussex ¿ Por qué ? “Estaba por matar a mis vecinos. Vivimos en tres lugares distintos y en cada uno de ellos estaban demasiado cerca. En Sussex podés tener una casa y un jardín por la misma cantidad de dinero, y ser aburrido y muy normal. La mudanza me salvó de ir a la cárcel. Odiaba el sonido de personas caminando sobre mi cabeza. Lo único que me salvó fue tener de vecino a John Fashanu que era más psicótico que yo.” En cualquier momento hablaremos sobre vos como propietario de una tienda de antigüedades de Sussex. “No me gustan las antigüedades. Me veo más vendiendo peines para la playa. Pero probablemente, cuando pase el tiempo, terminaré como uno de los tantos dementes del pub local.” Trad y Adaptación: Sergio Marchi