Mariana es una simpática joven, hija de la princesa draconita Nidia y su padre es Adón, el rey de los bárbaros. Esa inusual mezcla cultural, la enriquecen de una comprensión y admiración por ambas idiosincrasias; tan disonantes entre ellas. Mariana se convierte en una pieza clave, durante la conquista del planeta Neo-Draconia. En los antiguos textos acadios hay referencias que la identifican como una mártir.
La narrativa de esta obra es bastante interesante, ya que se relatan los orígenes del oscuro personaje “Shadow”, mismo que atribuló a Joseph en varios capítulos del libro I. El despiadado Shadow, no siempre fue un villano, su vida tomó un giro radical, cuando su amada Mariana es esclavizada por la Orden.