menos privilegiados de la sociedad. Oremos. 3. Por todos nuestros hermanos que sufren, para que experimenten la misericordia divina y la compasión de sus hermanos. Oremos. 4. Por cada uno de nosotros para que seamos testigos del amor de Dios, manifestado en la Resurrección y en la misericordia de Jesús. Oremos. (Intenciones de la comunidad). Presidente: Dios de eterna misericordia, concédenos en abundancia los dones de tu generosidad. Por J.N.S.
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ORACIÓN SOBRE LAS OFRENDAS
Recibe, Señor, las ofrendas que tu pueblo (y los recién bautizados) te presentamos, para que alcancemos la eterna bienaventuranza por la confesión de tu nombre y por la nueva vida en el Bautismo. Por Jesucristo, nuestro Señor.
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Liturgia de la semana del 16 al 21 de abril. Segunda Semana del TP. Lunes 16 Hch 4, 23-31 /Sal 2,1-3.4-6.7.8-9/Jn 3, 1-8 Martes 17 Hch 4, 3237 /Sal 93(92)/Jn 3, 7b-15 Miércoles 18 Hch 5, 1726/Sal34(33) /Jn 3, 16-21 Jueves 19 Hch 5, 2733/Sal 34(33)/ Jn 3, 31-36 Viernes 20 Hch 5, 34-42 / Sal 27( 26)/Jn 6, 1-15 Sábado 21 Hch 6, 1-7 /Sal 33( 32)/Jn 6, 16-21
D OMINICAL ABRIL15 DE 2012 AÑO 16 No.809 Somos Iglesia Católica SEGUNDO DOMINGO DE PASCUA O DE LA DIVINA MISERICORDIA - CICLO B
Dios todopoderoso, concédenos que la gracia recibida en este sacramento pascual permanezca siempre en nuestra vida. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Es así como en el sitio donde nos corresponde vivir, trabajar o estudiar, estamos llamados a anunciar el Evangelio de Jesús, con el respeto que implica hablar de Él a personas que aún no lo conocen, a quienes están alejadas de Él por un mal testimonio cristiano, o simplemente porque no hay quien les calme la “sed de Dios.” De esta manera somos discípulos y misioneros, también con el testimonio consecuente.
Canto de Comunión. Ante tu presencia. (Hablado): Señor me tienes ante tu presencia. Con manos vacías delante de Ti, no tengo nada más que darte Señor, solamente mi corazón, solamente una sencilla oración. Me presento delante de Ti, con todo lo que soy. 1. Señor me tienes ante tu presencia, con dulce voz a Ti yo clamaré, escucha buen Señor mi oración, que te ofrezco. 2. En Ti me gozaré Señor Jesús, y a Ti mi vida entera rendiré. Tu gloria y tu poder me alegrarán, para siempre. Coro: Oh Señor Jesús, úngeme, y hazme dócil como Tú quieras. Tómame y dame fuerzas para seguir Tu camino (bis). Oh Señor Jesús, unge mi vida hazme dócil a tu voz, como Tú quieras Señor. Toma mi vida, toma mi ser, y guíame por tu camino, por tus sendas de verdad. Señor me tienes ante tu presencia.
MENSAJERÍA ESPECIALIZADA Y CARGA Bogotá: (1) 565 7070 - Cali: (2) 4101379
Arquidiócesis de Cali
Vicaría para la Evangelización
Publicación Pastoral de la Arquidiócesis de Cali. Textos Bíblicos tomados del Leccionario / Dominical del Episcopado Colombiano Editor: Centro Pastoral de Catequesis Teléfono: 667 3906 E-mail: catequesiscali@gmail.com Logística: Relitex Asesores en Comunicaciones, Calle 28 Nte. No. 4N - 88 Teléfono: 667 0936 - 315 584 5834 E-mail: relitex3@yahoo.com
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
RENOVEMOS NUESTRA FE Tiempo de “nueva evangelización” Primer capítulo Seguimos nuestra reflexión en torno al documento de la nueva evangelización para la transmisión de la fe cristiana: “La imagen del “patio de los gentiles”se nos ofrece como un ulterior elemento en la reflexión sobre la nueva evangelización, que pone de manifiesto la audacia de los cristianos de no renunciar jamás a buscar positivamente todos los caminos para delinear formas de diálogo que correspondan a las esperanzas más profundas y a la sed de Dios de los hombres.” “Tal audacia permite colocar dentro de este contexto la pregunta sobre Dios, compartiendo la propia experiencia en la búsqueda y comunicando como un don el encuentro con el Evangelio de Jesucristo”. El apóstol Pablo, se dirige a los gentiles para hablarles del “Dios desconocido”, cada oportunidad era bien aprovechada por él, para hablar a tiempo y a destiempo de la Buena Nueva, anunciada por Jesucristo.
Semanario Litúrgico
LA MISERICORDIA DE DIOS
D
esde el año 2000 se da a este domingo el nombre de Divina Misericordia (por influencia de la santa polaca Faustina Kowalska, que propagó esta devoción). Pero la clave está en que seguimos Celebrando la Pascua del Señor, y especialmente la celebramos El Domingo (Dies Domini). Dice el Papa Benedicto XVI en su segundo tomo sobre Jesús: “Para mí, la celebración del Día del Señor, que distingue a la comunidad cristiana desde el principio, es una de las pruebas más fuertes de que ha sucedido una cosa extraordinaria en ese día: el descubrimiento del sepulcro vacío y el encuentro con el Señor Resucitado”. En el Evangelio de hoy, el Resucitado repite un saludo: Paz a ustedes. Cristo ha vencido el mal y la muerte, el odio y todo egoísmo; por eso puede traernos la reconciliación y la paz. Y después del saludo una tarea para todos: “Como el Padre me envió, yo les envío a ustedes”. La resurrección de Jesús no es un hecho individua, que sólo tiene que ver con él, no, esa resurrección nos toca a todos. Y encima algo gordo: Reciban el Espíritu Santo, el gran regalo del Resucitado, la fuerza de la Iglesia, el protagonista de la comunidad creyente. Para el Evangelio de Juan el don del Espíritu Santo sucede el mismo día de Pascua, y no a los cincuenta días, como en el relato de Lucas. Finalmente Tomás, el incrédulo, nos adelanta una confesión de fe. Señor mío y Dios mío. Esa expresión quedó grabada en muchas personas
que todavía hoy, 2012, la pronuncian en el momento de la elevación. Símbolos: Un letrero grande: “Mi paz les dejo”.(Pbro. Germán Martínez R.) Canto de Entrada. 1. Caridad y comprensión, Aleluya, y verdad en el amor, Aleluya. 2. Entusiasmo en la acción, Aleluya, alegría en la unión, aleluya. 3. Allá, queremos llegar, Aleluya, para más y más amar, Aleluya. 4. Nuestra entrega debe ser, Aleluya, un canto de corazón, Aleluya. 5. En la entrega debe haber, Aleluya, alegría, gozo y paz, Aleluya. 6. Generosa juventud, Aleluya, que camina hacia la luz, Aleluya.
Celebremos La Eucarístia II DOMINGO DE PASCUA O DE LA DIVINA MISERICORDIA
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AMBIENTACIÓN DE ENTRADA
Comentador: Nuestro encuentro con Cristo Resucitado se convierte en la mejor motivación para celebrar como una sola familia esta Eucaristía. Llenémonos de la misericordia de Dios en este segundo domingo de Pascua y contagiemos de este gozo a quienes están sumidos en la desesperanza y en el dolor. Participemos con fe.
Acto Penitencial: Celebrante: Tú que eres el Primogénito de entre los muertos: Señor ten piedad. Celebrante: Tú que eres el vencedor del pecado y de la muerte: Cristo ten piedad. Celebrante: Tú que eres la resurrección y la vida: Señor ten piedad. GLORIA: Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a los hombres que ama el Señor. Por tu inmensa gloria te alabamos, te bendecimos, te adoramos, te glorificamos, te damos gracias, Señor Dios, Rey celestial, Dios Padre todopoderoso. Señor, Hijo único, Jesucristo. Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre; tú que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros. Tú que quitas el pecado del mundo, atiende nuestra súplica. Tú que estás sentado a la derecha del Padre, ten piedad de nosotros; porque sólo tú eres Santo, sólo tú Señor, sólo tú Altísimo, Jesucristo, con el Espíritu Santo en la gloria de Dios Padre.
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ORACIÓN COLECTA
Dios de eterna misericordia, que reanimas la fe de tu pueblo santo con la celebración de las fiestas pascuales: aumenta en nosotros los dones de tu gracia, para que todos comprendamos mejor el sentido del Bautismo que nos ha purificado, del Espíritu que nos ha reengendrado y de la Sangre que nos ha redimido. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
LITURGIA DE LA PALABRA Comentador: En este segundo Domingo de pascua la liturgia de la Palabra nos invita a la práctica del amor mutuo y de la compasión. Nos urge a reconocer la Misericordia Divina de Jesús con fe plena, sin dar espacio a la duda. Escuchemos y reflexionemos en este mensaje que el Señor nos trae para vivir cada día más unidos.
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LECTURA DE LOS HECHOS DE LOS APÓSTOLES
Toda la multitud de los creyentes tenía un solo corazón y una sola alma; y nadie consideraba como propio lo que poseía, sino que todo lo tenían en común. Con gran fuerza los apóstoles daban testimonio de la resurrección del Señor Jesús, y todos gozaban de la aceptación general. No había nadie que pasara necesidad entre ellos. Los que tenían tierras o casas las vendían, y el precio de lo que vendían lo ponían a disposición de los apóstoles, y se repartía según las necesidades de cada uno. (4,32-35) Lector: Palabra de Dios Asamblea: Te alabamos Señor
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SALMO RESPONSORIAL
Lector: Demos gracias al Señor porque es bueno, porque es eterna su misericordia. Salmo: 118(117) — Diga la casa de Israel: eterna es su misericordia. Diga la casa de Aarón: eterna es su misericordia. Digan los fieles del Señor: eterna es su misericordia. — La diestra del Señor es poderosa, la diestra del Señor es excelsa. No he de morir viviré para contar las hazañas del Señor. Me castigó, me castigó el Señor, pero no me entregó a la muerte. —La piedra que desecharon los arquitectos es ahora la piedra angular. Es el Señor quien lo ha hecho, ha sido un milagro patente. Este es el día en que actuó el Señor: sea nuestra alegría y nuestro gozo.
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LECTURA DE LA PRIMERA CARTA DEL APÓSTOL SAN JUAN
Queridos míos: Todo el que cree que Jesús es el Mesías, ha nacido de Dios, y todo el que ama a un padre, ama también a los hijos. Sabemos que amamos a los hijos de Dios cuando amamos a Dios y cumplimos sus mandamientos. El amor de Dios consiste en guardar sus mandamientos, y sus mandamientos no son una carga pesada. Todo el que ha nacido de Dios vence al mundo. Lo que nos ha dado la victoria sobre el mundo es nuestra fe. Al mundo no lo vence sino el que cree que Jesús es el Hijo de Dios. La venida de Jesucristo quedó señalada con agua y con sangre; no solo con el agua, sino con el agua y con la sangre. Y el Espíritu es quien da testimonio de ello, porque el Espíritu es la verdad. (5,1-6). Lector: Palabra de Dios Asamblea: Te alabamos Señor
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ANTES DEL EVANGELIO
Todos: Aleluya, Aleluya. Lector: El Señor dijo: “Crees, Tomás, porque me pudiste ver. ¡Dichosos los que creen sin haber visto!”
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LECTURA DEL SANTO EVANGELIO SEGÚN SAN JUAN
El día de la resurrección, primer día de la semana, por la tarde, estaban en casa los discípulos con las puertas trancadas por miedo a los judíos, cuando se presentó Jesús, se colocó en medio de ellos y les dijo: “¡Les traigo la paz!” Dicho esto, les mostró las manos y el costado. Los discípulos se alegraron de ver al Señor. Jesús repitió: “¡Les traigo la paz! Así como el Padre me envió, los envío yo a ustedes.” En seguida sopló sobre ellos y les dijo: “Reciban el Espíritu Santo. A quienes les perdonen los pecados, les quedan perdonados, y a quienes se los retengan, les quedan retenidos.” Pero Tomás, uno de los Doce, llamado el Gemelo, no estaba con ellos cuando vino Jesús. Los otros discípulos le dijeron: “¡Hemos visto al Señor!” Pero él contestó: “Mientras no le vea en las manos la marca de los clavos, mientras no meta el
dedo en el lugar de los clavos y la mano en su costado, no creeré.” Ocho días después, estaban de nuevo los discípulos de Jesús dentro de la casa, y Tomás estaba con ellos. Aunque las puertas estaban trancadas, se presentó Jesús, se colocó en medio de ellos y dijo: “¡Les traigo la paz!” En seguida dijo a Tomás: “Trae tu dedo: mira mis manos. Trae tu mano y métela en mi costado. Deja de ser incrédulo y hazte creyente.” Tomás respondió: “¡Señor mío y Dios mío!”Jesús le dijo: “Crees porque me pudiste ver. ¡Dichosos los que creen sin haber visto!” En muchos otros hechos, que no están consignados en este libro, se reveló Jesús a sus discípulos. Estos han quedado consignados para que crean que Jesús es el Mesías, el Hijo de Dios, y para que creyendo tengan vida en su nombre.(20,19-31) Celebrante: Palabra del Señor. Asamblea: Gloria a ti, Señor Jesús. Credo de los Apóstoles: Creo en Dios, Padre todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra. Creo en Jesucristo, su único Hijo, nuestro Señor, que fue concebido por obra y gracia del Espíritu Santo, nació de santa María Virgen, padeció bajo el poder de Poncio Pilato, fue crucificado, muerto y sepultado, descendió a los infiernos, al tercer día resucitó de entre los muertos, subió a los cielos y está sentado a la derecha de Dios, Padre todopoderoso. Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y muertos. Creo en el Espíritu Santo, la santa Iglesia Católica, la comunión de los santos, el perdón de los pecados, la resurrección de la carne y la vida eterna.
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ORACIÓN DE LOS FIELES
Presidente: Hermanos, Jesús Resucitado nos alegra con su presencia y su misericordia divina. Con fe oremos a Dios, diciendo: Todos: Padre de Misericordia, escúchanos. 1. Por la Iglesia, para que demuestre que existe un solo corazón y una sola alma por la vivencia de una caridad sincera entre todos sus miembros. Oremos. 2. Por la solidaridad entre los países con mayores recursos económicos para que favorezcan a los