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«Hagan todo lo que Él les diga» (Jn 2, 5) Comunidades generadoras de vida en el corazón de la contemporaneidad
Confiando en la providencia de Dios y, con todas las precauciones indicadas por el protocolo de bioseguridad de la pandemia covid-19, después de un año de espera, las Hijas de María Auxiliadora fueron convocadas al Capítulo General XXIV.
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Oficialmente, éste, fue inaugurado el 17 de septiembre y culminó este 24 de octubre. En él han participado 170 FMA de los cinco continentes y de 97 países. De Bolivia participamos sor Lucila Guerra, Inspectora y mi persona, sor Arminda Suárez.
El Capítulo es un momento fuerte de evaluación, estudio, reflexión y planificación de la misión de las FMA, buscando de ser cada vez más, presencia carismática eficaz en la Iglesia y en el mundo. Así lo expresa Madre Ivonne en la apertura de este importante evento:
“La celebración del Capítulo es una de las experiencias más fuertes y comprometedoras del Instituto: es una experiencia de presencia especial del Señor que nos convoca, nos habla, nos sorprende, nos renueva. Es una efusión especial del Espíritu Santo sobre el Instituto y que tiene sus repercusiones en la Iglesia, la Familia Salesiana, las Comunidades educativas, en todas las personas que nos han sido confiadas en la misión, especialmente en el mundo juvenil.”
El tema que ha ocupado a las participantes en intensas reflexiones ha sido inspirado en el texto evangélico de las Bodas de Caná y los desafíos del tiempo que nos toca vivir: “Hagan lo que él les
diga” y (Jn. 2,5). Comunidades generadoras de vida en el corazón de la contemporaneidad.
El mismo interpela a las FMA y a cada miembro de las comunidades educativas. El llamado a testimoniar el gozo de saberse amados y llamados por Dios; hacer vida el estilo sinodal de la iglesia, en cada comunidad y familia; el amor y la audacia para salir hacia los más pobres y anunciarles la Buena noticia de Jesús, son retos emanados de este encuentro.
La presencia premurosa, preventiva y amigable de María en las Bodas de Caná, inspira la vocación y misión de cada FMA, buscando ser como Ella, signo de maternidad y femineidad, presencia viva en todas las situaciones, especialmente las más difíciles.
En esta ocasión, también, a tiempo de agradecer a Madre Yvonne Rengoat por su animación durante estos 13 años de servicio, fueron elegidas las nuevas autoridades religiosas del Instituto. Es así que sor Chiara Cazzuola de nacionalidad Italiana fue elegida como Madre General; sor María del Rosario García Ribas, española, vicaria general. Como consejera para la formación sor Nilza Fátima De Moraes, Brasil; consejera de pastoral juvenil sor Runita Borja; de comunicación sor Maria Ausilia De Siena, italiana; de la Familia Salesiana sor Lesly Sandigo, Nicaragua; misiones, sor Ruth del Pilar Mora, colombiana y sor Edna Bolaños, salvadoreña, como Consejera para la Administración.
El consejo general queda completo con las siete visitadoras elegidas: sor Phyllis Neves de EE.UU, sor Lidia Strzelczyk de Polonia, sor Celine Jacob del India, sor Paola Battagliola de Italia, sor María Assunta Sumiko Inoue de Japón y sor Chantal Mukase Ruzagiriza de África y sor Marta Liliana Riccioli de Argentina.
Aunque por cuestiones de la pandemia se permaneció siempre en casa, el tiempo fue organizado de tal manera que permitió una convivencia sencilla y fraterna entre las participantes, momentos fuertes de oración y discernimiento, de fiesta y distensión, de trabajo en las comisiones de estudio y en asamblea.
A partir de ahora todas las inspectorías FMA y en Bolivia y en el mundo y sus comunidades educativas tienen la tarea de profundizar y hacer vida las opciones de este Capítulo.
Agradecemos a Dios y a nuestras hermanas por permitirnos hacer esta experiencia de Instituto tan profunda e interpelante.
sor arMinda suarez, FMa MieMBro deL XXiv caPítuLo generaL
