Así se lo montan

Angel: espacio reducido y producción generosa

Las kush, bravas y duras hijas deAfganistán.

Angel vive en un pequeño piso de una ciudad industrial, no tiene mucho espacio para su cultivo, pero el y su mujer consumen una buena cantidad de marihuana, de forma que se las ha tenido que apañar para conseguir buenas producciones en un espacio exiguo. Este reportaje esta centrado en los meses que Ángel germinó un paquete de Master Kush de High Quality Seeds al objeto de seleccionar una madre, así como la comparativa posterior que realizó de esta genética con la Hindu Kush original, comercializada por Sensi Seeds.

Monseñor José María.

Empezó con un armario de madera que había hecho el mismo, pronto se le quedo pequeño, por lo que, junto a un amigo escayolista, construyó una estructura a medida para aprovechar un espacio libre en una habitación. Empleo bloques de yeso, sobre este material Ángel detalla : “es muy fácil hacer tabiques y separaciones con estos bloques, conseguí una construcción sólida y que mantiene muy bien el microclima, no se producen cambios estaciónales bruscos, como observo que ocurre en la casa de un amigo que tiene un armario de plástico”. Dividió el espacio en dos partes con una tarima de madera y puso una puerta en cada celda. En la parte inferior tiene el crecimiento, iluminado con fluorescentes, en la parte superior está la zona de floración.

Sala de floración.

Para un espacio de 2 metros cuadrados y 1,80 de alto tiene dos focos de 400 watios, al objeto de conseguir la máxima producción. Dado que el lugar es reducido, necesita un buen sistema de ventilación para que las luminarias no provoquen un descenso de la humedad y una subida de la temperatura. Combina una Son T Pia y una Son T Agro. Probó a trabajar con una lámpara de 600 w y una de 400 w, lo que llevó el armario y las plantas al limite, se disparaba la temperatura y aumentaban las posibilidades de imprevistos, así que quito el foco de 600 w y adoptó la configuración actual.

Un extractor tubular de 700 litros hora , colocado en el techo, saca el aire, está conectado a un climatizador que lo regula en función de las condiciones ambientales. En la parte inferior un impulsor mete aire desde el lado

opuesto al extractor, el ventilador oscilante impide que se formen bolsas de aire sin renovar, ambos están programados con un temporizador que los activa diez minutos cada hora en condiciones normales, si sube la temperatura o hay mucha humedad introduce modificaciones en este ciclo. Lo más habitual es que la temperatura oscile en torno a los 27º. En el mes de agosto apaga una lámpara para que el calor no se dispare dentro del armario. Dentro de esta sala de floración caben 30 macetas cuadradas de cinco litros. Agrupa en bandejas los contenedores, lo que facilita moverlos para el riego o la inspección.

Selección de la Master Kush.

En un caja de plástico con toallitas de papel humedecidas germinó las Master Kush, cuando asomaron la radícula las pasó a pequeñas macetas con sustrato y las colocó bajo los fluorescentes en la zona de crecimiento.

Tuvo un éxito del 100% en la germinación. Entre las plantas que identificó como hembras seleccionó las tres con mejor apariencia y las llevó a floración. Antes hizo un esqueje de cada una que conservó con su correspondiente etiquetado, de esta forma cuando cosechó y decidió cual es la planta que más le interesaba, conservaba una replica de la que partir para hacer una madre.

Fertilización.

Tanto en la cosecha desde semilla para la selección de la madre, como en la posterior comparativa, realizada con esquejes, se empleo tierra de BioBizz y fertilizantes de BioGreen.

Antes de poner las plantas a florecer hizo el último transplante, a macetas de 5 litros. Usa el sustrato completo All Mix de Biobizz, considera que es una mezcla de calidad, con buen drenaje y un aporte equilibrado de nutrientes. En cada maceta añadió unas cucharadas de harina de neem como preventivo y unas cucharadas de GuanoKalong en polvo. GuanoKalong es un estiércol de murciélago muy apropiado para la floración, enriquecido con un poco de

estiércol de aves marinas para aumentar su contenido en nitrógeno. Al mezclar el guano en polvo con el sustrato consigue que esté disponible a partir de la mitad de la floración, justo cuando las plantas lo necesitan. “El guano se disuelve poco a poco, por ello lo mejor es añadirlo al principio de la floración para que tenga tiempo de hacer efecto y eliminarse del sustrato” explica Ángel. Le gusta favorecer ciclos de seco / húmedo dentro del cultivo, a base de dar un riego en profundidad y esperar dos o tres días antes de volver a regar.

Los abonos BioGreen son fertilizantes biominerales de última generación, fabricados en Holanda. La base de la dieta son Bio 1 (crecimiento) y Bio 2 (floración), proporcionan a la planta las cantidades de nitrógeno, fósforo, potasio y microelementos que necesita para un correcto desarrollo. Se complementan con los estimuladores X Rooting y X Bloom, para acelerar y promover el desarrollo de raíces y flores, aportan aminoácidos y vitaminas. El PK 13-14 Te se utiliza para proporcionar un extra de fósforo y potasio en la quinta y sexta semana de floración, cuando las necesidades son más altas. Esta formula tiene también microelementos que favorecen la absorción del fósforo y el potasio. La mayor novedad que aporta la gama de fertilizantes BioGreen es el Calgel, Este compuesto aporta a la planta hidrógeno y calcio para fortalecer las paredes de las células, lo que repercute en plantas sanas, grandes, fuertes y con resistencia a hongos y enfermedades. Se utiliza durante todo el ciclo.

Empieza con 1ml/l Bio 1 y 0,25 ml/l de X Rooting la primera semana de crecimiento, lo sustituye por 0,8 ml/l Bio 1, 0,25 ml/l de Calgel y 0,35 ml/l de X Rooting a partir de la segunda semana de crecimiento. En la tercera semana de floración aumenta a 1,5 ml/l de Bio 1, empieza a añadir 0,7 ml/l de X Bloom que mantendrá durante toda la floración y sigue con 0,25 ml/l de Calgel. En la cuarta semana cambia el Bio 1 por 1,5 ml/l de Bio 2 y sube a 0,3 ml/l de Calgel. En la quinta semana de floración mantiene este abonado con un aporte extra de PK 1-14 Te a razón de 0,5 ml/l, que aumentará hasta 1 ml/l en la siguiente semana. A partir de la séptima semana de floración la cantidad de abono queda establecida en 2 ml/l de Bio 2, 0,4 ml/l de Calgel y 0,7 ml/l de X Bloom. La última semana de floración las riega solo con agua para facilitar el lavado de sales.

“La mayor ventaja de estos abonos la veo en que estabilizan muy bien el Ph, tengo un agua bastante alcalina y queda casi perfecto, cuando usas el PK 13 – 14 tienes que bajar el Ph un poco, pero casi nada. Por otra parte da una buena producción, sin provocar alteraciones en el sabor, ni dejar regustos químicos en el paladar, lo que es de agradecer. Otra característica es que a pesar de ser un abono concentrado se diluye muy bien” Resume Ángel sobre la gama de abonos BioGreen. \

“Agrupa en bandejas los contenedores, lo que facilita moverlos para el riego o la inspección”

Esquejes de Hindu Kush y Master Kush recien pasados al cuarto de floración.

Pronto empezaron a formar los racimos florales.

Dos luminarias de 400 watios iluminaban la sala de floración.

Vista del armario desde su puerta delantera.

En el centro de la foto una Hindu Kush, rodeada de Master Kush.

Plagas

La última vez que tuvo plagas fue un ataque combinado de araña roja y trip que le provocó bastante problemas. No quería deshacerse de la genética, así que detuvo la floración y estuve un mes dando un tratamiento de piretrinas a las plantas que le interesaba salvar, luego hizo una poda severa y corto esquejes del tejido nuevo para hacer nuevas madres; desde aquel momento erradicó las plagas. Como preventivo pone harina de neem en el sustrato y da pulverizaciones con Buzz Off al principio del crecimiento.

Hindu Kush vs Master Kush.

Para compararla con su progenitora, Ángel cultivó la primera hornada de esquejes de Master Kush, junto a esquejes de Hindu Kush, obtenidos de una madre seleccionada a partir de la genética ofrecida por Sensi Seeds

La Hindu Kush llego a Holanda desde Estados Unidos, donde había sido criada a partir de las indicas puras que crecen en la cordillera del Hindu Kush, situada en Afganistán. A mediados de los años 70, cuando las genéticas de Afganistán y Pakistán aparecen en los Estados Unidos, la mayoría de las genéticas que se cultivaban allí eran de ascendencia sativa: colombianas, mexicanas y tailandesas. Sacred Seeds pone a las venta en 1980 la la Afghani #1 y la Hindu Kush, lo cual supone una revolución en el cultivo casero marihuana, ya que permitían crear híbridos con de madurez tempana, talla manejable, resistencia al frío y buenas producciones, características que popularizan la cannabicultura en zonas donde antes no era posible. Ejemplo de estos cruces californianos de sativas con afganas son clásicos como la Skunk #1 o la Northern Lights. Presenta tallos sólidos, poca ramificación secundaria y hojas grandes muy abundantes, lo que complica la manicura, aunque están cubiertas de pegajosa resina, por lo que también se pueden reciclar al elaborar hachís. Madura con rapidez y a buen ritmo. Es una variedad fuerte y resistente a plagas.

Cuando los californianos crearon la Afghani #1 y la Hindu Kush, con las genéticas llegadas de las montañas afganas, partieron de un trabajo de muchos años de selección masal realizado por los granjeros locales. Debido a esto la Hindu Kush es una variedad homogénea , produce semillas regulares, duras, de buen tamaño y de excelente calidad. Al ser una variedad muy estabilizada es ideal para su uso en la crianza casera, por ejemplo da muy buen resultado al cruzarse con sativas puras o híbridos de predominancia sativa.

La Hindu Kush Produce mucho olor, acre y característico, sabor intenso, el efecto es físico y sedante. Al quemar forma un humo denso que colma y satisface, pero puede hacer toser a los usuarios poco experimentados. Sus glándulas de resina son gruesas y numerosas, lo que la hace muy apropiada para la elaboración de hachís, finalidad con la que la cultivaban los granjeros afganos. Tiende a formar un gran cogollo central denso, y muy resinado, con poca ramificación secundaria. Esto hace la planta ideal para el cultivo de interior en métodos tipo SOG, donde lo que prima es meter todos los esquejes posibles, para conseguir el máximo número de colas bajo el foco. La Master Kush es un cruce clásico, la genética predominante en el cocktail es Hindu Kush, aunque tiene un chorrito de Skunk #1. A su vez la Skunk #1 es uno de los cruces creados a finales de los 70 en California, con sativas puras y genética afgana. Por ello la Master Kush produce plantas con toques sativo, que les hace estirarse más que la Hindu Kush, también al formar los racimos florales mostraron una ligera ascendencia sativa con cogollos grandes, pero que no llegan a compactarse como en una índica pura. Es una planta de olor dulce y fácil de fumar, no agrede a los pulmones, ni al paladar. Efecto físico, de índica, pero con la vertiente skunk que lo modera y evita el “apalanque”. Tiene una buena relación entre hojas y racimos

¿Sabes ya cuáles son las lámparas más adecuadas para el cultivo de variedades Haze? Las mejores son las de 400 vatios. Las lámparas de 600 y/o de 1000 vatios son demasiado fuertes para estas especies de larga (y por lo tanto lenta) floración.

Cogollo de Hindu Kush.

Cogollo de Master Kush.

florales, lo que la hace fácil de manicurar, aunque las hojitas sobrantes no están tan cubiertas de resina como las de la Hindu Kush, por lo que rentan menos al usarlas para hacer hachís.

Al cultivar juntas Hindu Kush y Master Kush se pueden apreciar los efectos de la influencia skunk en la predominancia índica de la Master Kush, le aporta menor densidad de cogollos, mayor porte y distancia internodal, un efecto equilibrado y un sabor más suave, con ligeros toques citricos. La Hindu Kush tiene un porte más pequeño y compacto, con un cogollo central denso, sus hojas son abundantes, anchas, resinadas y de un verde oscuro, mientras que las de la Master Kush, aunque mantienen el patrón índico, tiene menos follaje, sus hojas son mas alargadas y de un color menos intenso. Respecto a la alimentación la Hindu Kush es una planta frugal, no necesita mucho sustrato, ni demasiados riegos o fertilización, la Master Kush demanda más agua y nutrientes, por ello llegó al final del cultivo con ligeras carencias.

En definitiva, ambas son variedades baratas, con una buena relación calidad/ precio. Mientras que la Hindu Kush se recomienda para los que busquen los caracteres clásicos de la índica pura, la Master Kush es un híbrido para los que deseen una indica más fácil de fumar y efectos llevaderos.