Cheo García

Page 1

8

Parte de Música Nº 327 • Domingo 30 de abril de 2017

Suplemento dominical del

Swing Latino

Cheo García:

la vigencia de un guarachero El rumbero “ícono” de la Billos Caracas Boy’s arribaría este 1° de mayo a los 91 años de edad T/ Ángel Méndez F/ Archivo CO

C

heo era asiduo a la tribuna “B” del Hipódromo La Rinconada y siempre se colocaba cerca del paddock descubierto. Ese lugar donde los aficionados a las carreras de caballos intentan comunicarse con el jinete o con el entrenador para asegurarse el “triunfo” de una apuesta. Generalmente una señal, un saludo acordado o “algo” confirma la posibilidad de un primer lugar… ¡Hola Cheo! ¿Cómo estáis vos?... Por ese entonces eran muchos los jinetes zulianos que “corrían” en Caracas y Cheo era un tipo popular. Tan simple como que ocupaba el primer lugar en la estadística de guaracheros de América Latina. Con él se podía jugar a ganador. Yo le saludaba sin conocerlo. A fin de cuentas, mis primeros amores fueron arrullados por su rumbón. José Rafael García Añez, con ese nombre bautizaron a quien nació un 1° de mayo de 1926 en Maracaibo, estado Zulia, y quien se inmortalizaría con el nombre artístico de “Cheo García”. En el Zulia el que no toca tambora por lo menos silba. Es un estado donde se le rinde tributo a La Chinita y a la gaita. Cheo fue eterno devoto de la Virgen zuliana, pero su herencia de rumbero pudo más que el tambor zuliano. Lo suyo era la guaracha y de vez en cuando un bolerito. Relatan sus biógrafos que inició sus estudios musicales a los nueve años de edad y al año siguiente ya era la primera voz de la compañía Estampas Líricas en Miniatura, agrupación con la que viaja a Bogotá haciendo un repertorio de tenor lírico ligero. Adolescente, Cheo desarrolla su potencial como futuro guarachero en diversas agrupaciones del estado y tuvo la oportunidad de ser el vocalista principal de Enrique Manzanos y Garrido y sus Estrellas. Conquistado el occidente, en 1953 Cheo García se traslada a Caracas y audiciona con el maestro Chucho Sanoja, quien le contrata para la orquesta de la Radio Difusora Venezuela, y trabajó allí por espacio de dos años. Luego de un breve retorno a su ciudad natal, Cheo García regresa a la ca-

tiempos en Venezuela, emulando la de Rafa Galindo y Víctor Pérez. Cheo era un rumbero nato, sabía desplazarse en ese género cubano y se tuteaba con el porro colombiano. Fueron ellos los que le dieron la bienvenida a los famosos Mosaicos de Billo y fue Cheo la piedra angular, porque al irse Pirela de la orquesta, la combinación guaracha-bolero funcionó a la perfección con José Luis Rodríguez, Memo Morales y nuestro hermano Ely Méndez. García se mantuvo al lado de Billo Frómeta durante 21 años, en definitiva, la etapa más fructífera de la Billo’s Caracas Boys, comercialmente hablando, popularizando temas como “La vaca vieja”, “Toy contento”, “La flor del trabajo”, “La negra Leonor”, “El caballo alazán”, “Pa’ Maracaibo me voy”, “No hay quien le gane (al Magallanes)”, “Santa Marta, Barranquilla y Cartagena”, “Los cadetes”, “Canto a Caracas”, “Ariel”, “El profesor Rui Rua”, “El brujo”, “Si yo tuviera una novia”, “Macondo” entre muchos. Con la Billo’s, García mostró su talento en países como Colombia, Costa Rica, España y EEUU. Se ha dicho que el maestro Billo fue el auténtico cronista de la Ciudad de los Techos Rojos, pero se debe agregar que Cheo García, de alguna manera, fue la “voz oficial” de esas crónicas.

EL ADIOS

pital en 1956 y trabaja con los afamados músicos Juanito Arteta, conocido como “La Trompeta de Oro de América”, y Pablo Armitano, hasta que finalmente se incorpora a Los Peniques de Jorge Beltrán, orquesta base del prestigioso programa de Radio Caracas Televisión El Show de Víctor Saume.

¡A GOZAR CON BILLO! Llega la década del 60. Una época histórica en nuestro país. El inicio de la democracia. Hay movimiento en todas las estructuras institucionales. Venezuela comienza a amoldarse en un sistema político de libertades. El año de 1960 es crucial en la carrera de Cheo García. La Asociación Musical depuso el veto que le mantenía a Billo Fróme-

ta y también él estaba reestructurando la orquesta y contrata a Cheo García para que fuese su guarachero estelar, mientras que los boleros correrían por cuenta de Felipe Pirela, formándose así la dupla más exitosa de los últimos

Cheo García abandona la orquesta Billo’s y Renato Capriles, sin pensarlo dos veces, se lo lleva como cantante estelar de Los Melódicos, con la que se establece por casi dos años (1981-1982), pasando después a La Tremenda (1983), de la misma organización; hasta que decide fundar con Memo Morales La Gran Orquesta de Cheo y Memo, un sueño compartido que duró poco tiempo. Con unos años encima y ya aquejado de una oculta infección pulmonar, Cheo García continuó presentándose en locales nocturnos caraqueños y eventualmente con la orquesta de Charlie Frómeta. En noviembre de 1994 García actúa con Frómeta en un club de Paracotos y ese día mostró quebrantos de salud, tuvo una asfixia y se desmayó, falleció el martes 20 de diciembre de 1994, en su residencia en San Antonio de los Altos, estado Miranda. Ese día se nos fue el eterno guarachero de la Billo’s Caracas Boy’s Caracas


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.