¡Qué hermoso es estar aquí!
Hoy vemos a Cristo victorioso en la narración de la Transfiguración, recibiendo de lleno la aprobación del Padre que le llama su Hijo amado y predilecto.
El resultado es que los discípulos asombrados, y no del todo conscientes de la profundidad de la escena, sienten, por encima de todo, una sensación de absoluta felicidad que resumen en su estupenda frase: ¡Qué hermoso es estar aquí!
Una misión primaria del cris�ano sería que despertáramos en los demás el sen�miento de que se está bien junto a nosotros. Para eso no tenemos más que un camino: ser –como Cristo– hijos de Dios, hijos amados y predilectos. Pero estos �tulos solo se ganan si somos capaces de hacer lo que Él hizo.
Por eso no es extraño que cuando cerca de nosotros pasa algún hombre que se parece a Jesús sintamos que algo raro flota en el ambiente y que una sensación de paz y bienestar nos invade, sintamos que es posible la risa y la esperanza que es posible ser feliz y exclamar –en este mundo nuestro tan dolorido–: ¡Qué bien se está aquí! Pero, naturalmente, esa bondad y esa felicidad apenas �enen que ver con lo que los
hombres solemos entender por tales realidades que, normalmente, están llenas de cosas y no de personas.
Los cris�anos no hemos subido con Cristo al Monte. No nos hemos sentado serena y tranquilamente junto a Él para contemplarlo en el esplendor de su transfiguración y no hemos captado el secreto de su brillo y de su blancura. Y no lo hemos captado a pesar de que en el Evangelio está clarísimo: el brillo, la blancura y la transfiguración, no son sino el resultado de ser hijo de Dios. Es evidente que los cris�anos –en gran número– no nos hemos transfigurado. Por eso, los que viven cerca de nosotros, los que comparten con nosotros el quehacer diario, no sienten habitualmente que a nuestro lado la vida es más bella, más honda, que a pesar de todo cuanto ocurra a nuestro alrededor, el cris�anismo lleva en sí un germen de felicidad contagiosa –cuando el cris�anismo se vive de verdad–que hace exclamar a los demás: ¡Qué bien se está con Fulano...! El mejor obsequio que podríamos hacer a nuestro mundo es devolverle la sensación de bienestar que experimentaron cerca de Cristo transfigurado, Pedro, San�ago y Juan.
ORACIÓN COLECTA
Señor Dios, que nos mandaste escuchar a tu Hijo muy amado, dígnate alimentarnos íntimamente con tu palabra, para que, ya purificada nuestra mirada interior, nos alegremos en la contemplación de tu gloria. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos.
1Lectura del libro del Génesis 12, 1-4a
En aquellos días, dijo el Señor a Abram: "Deja tu país, a tu parentela y la casa de tu padre, para ir a la �erra que yo te mostraré. Haré nacer de � un gran pueblo y te bendeciré. Engrandeceré tu nombre y tú mismo serás una bendición. Bendeciré a los que te bendigan, maldeciré a los que te maldigan. En � serán bendecidos todos los pueblos de la �erra". Abram par�ó, como se lo había ordenado el Señor. Palabra de Dios.
SALMO RESPONSORIAL del salmo 32, 4-5.18-19.20 y 22
R. Señor, ten misericordia de nosotros.
Sincera es la palabra del Señor y todas sus acciones son leales. El ama la justicia y el derecho, la tierra llena está de sus bondades.
R. Señor, ten misericordia de nosotros.
Cuida el Señor de aquellos que lo temen y en su bondad confían; los salva de la muerte y en épocas de hambre les da vida.
R. Señor, ten misericordia de nosotros.
En el Señor está nuestra esperanza, pues él es nuestra ayuda y nuestro amparo. Muéstrate bondadoso con nosotros, puesto que en ti, Señor, hemos confiado.
R. Señor, ten misericordia de nosotros.
2Lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a Timoteo 1, 8b-10 Querido hermano: Comparte conmigo los sufrimientos por la predicación del Evangelio, sostenido por la fuerza de Dios. Pues Dios es quien nos ha salvado y nos ha llamado a que le consagremos nuestra vida, no porque lo merecieran nuestras buenas obras, sino porque así lo dispuso él gratuitamente. Este don, que Dios ya nos ha concedido por medio de Cristo Jesús desde toda la eternidad, ahora se ha manifestado con la venida del mismo Cristo Jesús, nuestro salvador, que destruyó la muerte y ha hecho brillar la luz de la vida y de la inmortalidad, por medio del Evangelio. Palabra de Dios.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO
Cfr. Mc 9, 7
R. Aleluya, aleluya.
En el esplendor de la nube se oyó la voz del Padre, que decía: "Este es mi Hijo amado: escúchenlo". R. Aleluya.
EVANGELIO
Lectura del santo Evangelio según san Mateo 17, 1-9
En aquel �empo, Jesús tomó consigo a Pedro, a San�ago y a Juan, el hermano de éste, y los hizo subir a solas con él a un monte elevado. Ahí se transfiguró en su presencia: su rostro se puso resplandeciente como el sol y sus ves�duras se volvieron blancas como la nieve. De pronto aparecieron ante ellos Moisés y Elías, conversando con Jesús.
Entonces Pedro le dijo a Jesús: "Señor, ¡qué bueno sería quedarnos aquí! Si quieres, haremos aquí tres chozas, una para �, otra para Moisés y otra para Elías". Cuando aún estaba hablando, una nube luminosa los cubrió y de ella salió una voz que decía: "Este es mi Hijo muy amado, en quien tengo puestas mis complacencias; escúchenlo". Al oír esto, los discípulos cayeron rostro en �erra, llenos de un gran temor. Jesús se acercó a ellos, los tocó y les dijo: "Levántense y no teman". Alzando entonces los ojos, ya no vieron a nadie más que a Jesús.
Mientras bajaban del monte, Jesús les ordenó: "No le cuenten a nadie lo que han visto, hasta que el Hijo del hombre haya resucitado de entre los muertos". Palabra del Señor.
ORACIÓN DESPUÉS DE LA COMUNIÓN
Al recibir, Señor, este glorioso sacramento, queremos darte gracias de todo corazón porque así nos permites, desde este mundo, par�cipar ya de los bienes del cielo. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Las esculturas griegas
Las esculturas griegas, del periodo clásico, son muy bellas, armónicas y expresivas alcanzando casi la perfección. No obstante, esa belleza �sica es superada por la belleza espiritual. El sacrificio que se hace por amor a alguien es un acto bello. Y si ese sacrificio es el mayor que se pudiera hacer, movido también por el máximo amor que se pudiera tener, resultaría un acto máximamente bello.
Pues bien, ese acto ya se hizo: Jesús sufrió el máximo sacrificio posible, movido, a su vez, por el amor más grande que se pueda tener, el amor de Dios. Por ello, en la Liturgia, y en especial en la Eucaris�a, nos encontramos con la máxima belleza que pudiera exis�r, en el sacrificio de Cristo.
También en los otros seis sacramentos, que se celebran litúrgicamente, está presente ese sacrificio, pues son posibles gracias a que Jesús nos ganó la gracia con su Pasión y Muerte. Pensemos si podríamos asis�r a las ceremonias litúrgicas con una mayor conciencia de ese Sacrificio.
¿Cuánto tiempo se necesita para formar a un sacerdote?
Ésta es una pregunta con la que frecuentemente nos encontramos los sacerdotes y los seminaristas. Sin duda alguna, es intrigante saber cuánto �empo se requiere para la preparación de un ministro consagrado, que siempre debe permanecer en relación con Dios y con sus hermanos, sin descuidar las ac�vidades que competen a su trabajo pastoral.
Pues bien, lo primero que debemos decir es que el trabajo forma�vo nunca acaba, sino que se prolonga durante toda la vida, pues no debemos olvidar que el Sacerdocio es una vocación par�cular que funge como medio para alcanzar la san�dad, la plena unión con Dios en el amor.
Así que, antes de aspirar al Sacerdocio, cualquier seminarista debería aspirar a la san�dad. Por eso, la primera parte de la formación, llamada «inicial», busca introducir, desarrollar y acompañar al seminarista en un proceso de discernimiento vocacional, a fin de descubrir en la in�midad de su oración, conciencia y corazón, la voz del Señor que lo ama y que �ene preparado un camino para él.
Este primer momento varía dependiendo de la
etapa a la cual el aspirante ingrese al Seminario, pero –regularmente- abarca un período de, al menos, once años: un año de Nivelación, un año en el Curso Introductorio de Tapalpa, tres años en la facultad de Filoso�a, cuatro en la facultad de Teología y dos años de Servicio Pastoral.
Posteriormente, tras la ordenación sacerdotal, viene la formación «permanente», que consiste en el estudio con�nuo de las realidades del mundo, a par�r de las cuales debe par�r la acción pastoral. Además, es necesario que, al menos una vez al año, el Sacerdote viva un período de ejercicios espirituales que lo renueven, lo confronten con el Evangelio y le ayuden a fortalecerse en su caminar cris�ano, a fin de no perder de vista el sen�do de su ministerio. Esto, desde luego, acompañará al sacerdote hasta el final de su vida terrenal, porque es un medio para que Cristo lo san�fique. Entonces, ¿cuánto �empo se necesita para formar a un sacerdote? ¡Toda una vida!
(Seminarista Alexis Giovanni. 3° de Filosofía)
Tengo un problema, ¿qué voy a hacer?
¿Me eligieron para ser padrino y no he hecho las pláticas?
Alégrate… la Congregación Mariana y el Santuario del Señor de San José de Gracia tiene una respuesta para ti.
En el marco de la Gran Misión de la Misericordia que impulsamos en nuestra diócesis de Guadalajara, y en las difíciles circunstancias de la pandemia que estamos viviendo, abrimos una puerta más para ti. De preferencia te invitamos a que te acerques a tu comunidad para que recibas tus pláticas de preparación como papá o padrino de algún Sacramento. Si no puedes acudir a tu comunidad, la Congregación Mariana te ofrece las catequesis (pláticas) de preparación todos los días del año.
Pláticas presacramentales: Bautismo, Confirmación, Matrimonios, 1era. Comunión, XV años. Entre semana o fin de semana: previa cita. Tels. 33 12 18 91 98 / 33 36 14 27 46 Santuario Señor San José de Gracia, Alcalde #294, Col. Centro, Guadalajara, Jal. ¡La Línea 3 del Tren Ligero llega hasta aquí!
Director Responsable: Pbro. Enrique González• Redacción: Pbro. Alberto Ávila / Pbro. Juan Javier Padilla Administración: Pbro. Enrique González • Alcalde 294, Guad., Jal. Tel. 3343875300 – 3325385480 • Consulta la Hoja Parroquial: www.arquidiocesisgdl.org.mx/publicaciones/hojaparroquial Diseño e Impresión: Centro Católico de Comunicaciones. Tels. 3002-6470 • 3002-6471 Los anuncios que se muestran en La Hojita Parroquial son responsabilidad, única y exclusi-
Bole�n semanal de la Arquidiócesis de Guadalajara, A.R. Tiraje de 200,000. $50.00 ciento