Hoja parroquial Arquidiócesis de Guadalajara, A.R.
N.º 45 • XXXI Domingo Ordinario, Ciclo B • 4 de Noviembre de 2012
Fundada el 4 de junio de 1930. Registro postal: IM14-0019, impresos depositados por sus editores o agentes. INDA-04-2007-103013575500-106
¡Un amor con muchos "apellidos"!
L
a vida es difícil de sacar adelante: a veces nos enredamos y la hacemos más problemática. Es necesario consultar al que hizo todas las leyes, para saber por dónde empezar. La gente, en cada etapa de la historia, siente que va a inventar el universo y tarda en preguntar lo importante para poder vivir. La gente siempre se confunde en lo esencial para vivir, o se pierde preguntándole a todo el mundo para quedar bien. Ignoramos, de palmo a palmo, al que sabe de amor porque sencillamente Él es la fuente y constructor del universo. ¿Cuál es el fundamento para vivir en plenitud? ¡“Amar a Dios y al prójimo con todo vale más que todos los holocaustos”! No hay que perder el rumbo en vueltas y revueltas; la vida de cada ser humano es más sencilla de lo que imaginamos y basta con poco, pero bien apuntado, para ser felices. Así empieza la oración más preferida, de siglos, por la verdadera piedad y relación –religión– con el que nos ama: “Escucha... lo amarás con todo el corazón...”. Es Cristo quien aclara los mandamientos antiguos a la pregunta de los fariseos. Nos habla de un amor completo
Dios y aprender a amarlo, y, de la misma, forma amar a cada prójimo.
Para no estar lejos del Reino
y total para Dios y para los demás, por eso le pone tantos “apellidos”.
“Escucha, Israel: Amarás al Señor con todo tu corazón”
El pueblo de Dios apenas aprendía a caminar entre los riesgos de los enemigos y los riesgos de sus propios demonios y tentaciones. El desierto fue su escuela de aprendizaje, y a esa soledad volvía para encontrar a Dios cada vez que se sentía extraviado. Pero pronto aprendió a salir adelante. Esta expresión del libro del Deuteronomio marcó, como su hoja de ruta, la expresión más genuina de su obediencia para seguir al Señor, su Dios. Escuchar en el corazón a
Nuestra experiencia de la vida nos lleva a probar demasiados sufrimientos, y tarde que temprano nos vamos a dar cuenta de que la razón fundamental de ellos está en no querer escuchar a Dios, no aprender a amar, con toda el alma, al Señor de la historia y a cada ser humano cercano o lejano. Tendremos que aprender a escuchar la Palabra de Dios que nos habla al corazón, y asimilar la experiencia de nuestros sufrimientos cuando estamos lejos de Él. Hoy, a nuestro alrededor, descubrimos demasiados motivos de temor, sufrimiento y dolor; pero pocas veces nos atrevemos a cuestionar la razón de nuestra pérdida de paz y ausencia de felicidad. Nuestra tarea de cristianos es mantener viva la adhesión a ese único y verdadero Dios a quien no le interesa otra cosa que el amor y adhesión a Él; permanecer en el amor mutuo y fraterno. Jesús habla del amor a Dios sólo a través de la única puerta de acceso: el prójimo. 1
ANTÍFONA DE ENTRADA Sal 37, 22-23
Señor, no me abandones, no te me alejes, Dios mío. Ven de prisa a socorrerme, Señor, mi salvador.
SALMO RESPONSORIAL
Salmo 17, 2-3a. 3bc-4. 47 y 51ab R. Yo te amo, Señor, Tú eres mi fuerza.
Yo te amo, Señor, Tú eres mi fuerza, el Dios que me protege y me libera. R. Yo te amo, Señor, Tú eres mi fuerza.
Tú eres mi refugio, mi salvación, mi escudo, mi castillo. Cuando invoqué al Señor de mi esperanza, al punto me libró de mi enemigo. R. Yo te amo, Señor, Tú eres mi fuerza.
Bendito seas, Señor, que me proteges; que Tú, mi salvador, seas bendecido. Tú concediste al rey grandes victorias y mostraste tu amor a tu elegido. R. Yo te amo, Señor, Tú eres mi fuerza.
ACLAMACIÓN ANTES DEL EVANGELIO Jn 14, 23
R. Aleluya, aleluya. El que me ama cumplirá mi palabra y mi Padre lo amará y haremos en él nuestra morada –dice el Señor–. R. Aleluya, aleluya.
ANTÍFONA DE LA COMUNIÓN Jn 6, 58
En la misma forma en que yo vivo por el Padre, que me ha enviado y que es la vida, el que me come, vivirá por mí –dice el Señor–. 2
Lectura del libro del Deuteronomio 6, 2-6
En aquellos días, habló Moisés al pueblo y le dijo: “Teme al Señor, tu Dios, y guarda todos sus preceptos y mandatos que yo te transmito hoy, a ti, a tus hijos y a los hijos de tus hijos. Cúmplelos siempre y así prolongarás tu vida. Escucha, pues, Israel: guárdalos y ponlos en práctica, para que seas feliz y te multipliques. Así serás feliz, como ha dicho el Señor, el Dios de tus padres, y te multiplicarás en una tierra que mana leche y miel. Escucha, Israel: El Señor, nuestro Dios, es el único Señor; amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con todas tus fuerzas. Graba en tu corazón los mandamientos que hoy te he transmitido”. Palabra de Dios.
Lectura de la carta a los hebreos 7, 23-28
Hermanos: Durante la antigua alianza hubo muchos sacerdotes, porque la muerte les impedía permanecer en su oficio. En cambio, Jesús tiene un sacerdocio eterno, porque Él permanece para siempre. De ahí que sea capaz de salvar, para siempre, a los que por su medio se acercan a Dios, ya que vive eternamente para interceder por nosotros. Ciertamente que un sumo sacerdote como éste era el que nos convenía: santo, inocente, inmaculado, separado de los pecadores y elevado por encima de los Cielos; que no necesita, como los demás sacerdotes, ofrecer diariamente víctimas, primero por sus pecados y después por los del pueblo, porque esto lo hizo de una vez para siempre, ofreciéndose a sí mismo. Porque los sacerdotes constituidos por la ley eran hombres llenos de fragilidades; pero el sacerdote constituido por las palabras del juramento posterior a la ley, es el Hijo eternamente perfecto. Palabra de Dios.
EVANGELIO Lectura del santo Evangelio según san Marcos 12, 28-34
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n aquel tiempo, uno de los escribas se acercó a Jesús y le preguntó: “¿Cuál es el primero de todos los mandamientos?”. Jesús le respondió: “El primero es: Escucha, Israel: El Señor, nuestro Dios, es el único Señor; amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas. El segundo es éste: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. No hay ningún mandamiento mayor que éstos”. El escriba replicó: “Muy bien, Maestro. Tienes razón cuando dices que el Señor es único y que no hay otro fuera de Él, y que amarlo con todo el corazón, con toda el alma, con todas las fuerzas, y amar al prójimo como a uno mismo, vale más que todos los holocaustos y sacrificios”. Jesús, viendo que había hablado muy sensatamente, le dijo: “No estás lejos del Reino de Dios”. Y ya nadie se atrevió a hacerle más preguntas. Palabra del Señor.
En este Año de la Fe, aprendamos de memoria el Credo y recitémoslo como oración todos los días
Credo
Creo en un solo Dios, Padre todopoderoso, Creador del Cielo y de la tierra, de todo lo visible y lo invisible. Creo en un solo Señor Jesucristo, Hijo único de Dios, nacido del Padre antes de todos los siglos: Dios de Dios, Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la misma naturaleza del Padre, por Quien todo fue hecho; que por nosotros, los hombres, y por nuestra salvación, bajó del Cielo, y por obra del Espíritu Santo se encarnó de María, la Virgen, y se hizo hombre; y por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado, y resucitó al tercer día, según las Escrituras; y subió al Cielo, y está sentado a la derecha del Padre; y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su Reino no tendrá fin. Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo; que con el Padre y el Hijo recibe una misma adoración y gloria, y que habló por los profetas. Creo en la Iglesia, que es una, santa, católica y apostólica. Confieso que hay un solo Bautismo para el perdón de los pecados. Espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro. Amén.
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Gloria a Dios en el Cielo, y en la Tierra paz a los hombres que ama el Señor. Por tu inmensa gloria te alabamos, te bendecimos, te adoramos, te glorificamos; te damos gracias, Señor Dios, Rey celestial,
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Los 46 Rosarios a la Virgen de Guadalupe: del 28 de Octubre al 12 de Diciembre
l 28 de octubre inició la práctica piadosa del rezo de los 46 Rosarios en honor a la Santísima Virgen de Guadalupe, y concluirá el 12 de diciembre. El origen de esta devoción es antiguo, data del siglo XIX, y en sus inicios se comenzaba con una verbena en el Jardín del Santuario de la Basílica de Guadalupe. ¿Por qué 46 Rosarios? Es un número simbólico que representa el número de estrellas impresas en el manto de la imagen de Guadalupe; la devoción se conserva hasta el día de hoy. Como todo encuentro de fe, es una práctica agradable a Dios, y por su medio consta que se han alcanzado muchos favores. Esta tradición enlaza el mes de octubre, dedicado al santo Rosario, con la fiesta de Santa María de Guadalupe, el 12 de diciembre, sumando cuarenta y seis Rosarios en 46 días.
Juan Pablo II), relacionados con Santa María, intercalando en cada misterio un Padre Nuestro y diez Aves Marías. El Rosario Guadalupano, además de cultivar, orientar y alimentar nuestra fe en Cristo, nos ayuda a profundizar la trascendencia del hecho guadalupano, y nos permite sentir la presencia amorosa de Nuestra Madre para su pueblo mexicano. “El Rosario nos transporta místicamente junto a María, dedicada a seguir el crecimiento humano de Cristo en la casa de Nazaret. Eso le permite educarnos y modelarnos con la misma diligencia, ‘hasta que Cristo sea formado plenamente en nosotros’ (Gál 4, 19)” (El Rosario de la Virgen María, Núm. 15).
El Rosario Es la devoción mariana que ha gozado de más preferencias en la piedad popular y ha sido más recomendada por la Iglesia. Consiste en meditar veinte episodios o misterios de la Vida, Pasión y Muerte de Cristo (incluyendo los Misterios Luminosos sugeridos por el Papa
Dios Padre todopoderoso. Señor Hijo único, Jesucristo, Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre. Tú que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros; Tú que quitas el pecado del mundo, atiende nuestra súplica;
Tú que estás sentado a la derecha del Padre, ten piedad de nosotros, porque sólo Tú eres santo, sólo Tú, Señor, sólo Tú, Altísimo Jesucristo, con el Espíritu Santo, en la gloria de Dios Padre. Amén. 3
El Año de la Fe:
Oportunidad para crecer en la Fe
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l Año de la Fe ya comenzó; ahora falta que lo iniciemos en nuestra vida. La invitación la hemos recibido. En el documento Puerta de la Fe (PF), el Papa dice que este Año de la Fe tenemos la oportunidad para:
Confesar la fe (PF 9). Celebrarla en la liturgia (PF 9). Testimoniarla en la vida (PF 9) particularmente con el testimonio de la caridad (PF 14). • Redescubrir los contenidos de la fe profesada, celebrada, vivida y rezada en relación con el acto con el que decidimos entregarnos totalmente y con plena libertad a Dios, pues, “en efecto, existe una unidad profunda entre el acto con el que se cree y los contenidos a los que prestamos nuestro asentimiento” (PF 10). En concreto, estudiar el Catecismo: “el Año de la Fe deberá expresar un compromiso unánime para redescubrir y estudiar los contenidos fundamentales de la fe, sintetizados sistemática y orgánicamente en el Catecismo de la Iglesia Católica” (PF 11). • • •
JUBILEO CIRCULAR 5, 6 y 7: Lunes, Martes y Miércoles San José Obrero, Talpita San Antonio María Claret El Divino Rostro San Felipe de Jesús Jesucristo Rey de Reyes Belenes Ntra. Sra. del Rosario de Talpa, Arenal El Saucillo Ntra. Sra. de Guadalupe, Ermita la Barranca 8, 9 y 10: Jueves, Viernes y Sábado Santuario de los Santos Mártires Mexicanos Ntra. Sra. del Refugio, Lomas de Zapopan Santa Rita de Casia San Juan de Capistrano Santiago Apóstol, Arcos de Guadalupe San Miguel Arcángel, Cocula
Otras invitaciones que hace el Papa, son: Fijar la mirada en Jesucristo (PF 13). Buscar siempre la fe (“para que no nos volvamos perezosos en la fe”) (PF 15). • Aquilatarla en el sufrimiento y en las penas y alegrías de la vida (PF 15). • “La fe sólo crece y se fortalece creyendo; no hay otra posibilidad para poseer la certeza sobre la propia vida que abandonarse en un in crescendo continuo, en las manos de un amor que se experimenta siempre como más grande porque tiene su origen en Dios” (PF 7). Sin duda, el seno de la familia constituye un excelente ámbito para hacerlo una realidad. • •
Boletín semanal de la Arquidiócesis de Guadalajara, A.R. Tiraje de 200,000 a 300,000. $40.00 ciento Director Responsable: Pbro. Adalberto González González Redacción: Pbro. Alberto Ávila, Pbro. Juan Javier Padilla Liceo 17, Guadalajara, Jal. Tel.: 3942-4305 Administración: Pbro. Rubén Darío Rivera • Alcalde 294, Guadalajara, Jal. Tel.: 3614-2746
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