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Título
Una historia oral de lucha y resistencia
Diego Rabasa entrevista a John Gibler
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A seis años de la desaparición de los estudiantes de la normal de Ayotzinapa, el libro Una historia oral de la infamia de John Gibler permanece como uno de los documentos más reveladores de lo que realmente aconteció durante aquella negra jornada. En esta entrevista Gibler nos adelanta algunos aspectos de la segunda edición de este libro capital (de próxima aparición) y nos recuerda que la lucha incansable de los familiares de los estudiantes es también la de todas aquellas personas que se niegan a vivir bajo el yugo del oprobio y el terror.
En el prólogo de Una historia oral de la infamia explicas los motivos que te orillaron a reconstruir lo acontecido en la noche y madrugada del 26 y 27 de septiembre de 2014 a partir de puros testimonios. Cuatro años después participaste en un documental dirigido por el artista chino Ai Weiwei sobre el mismo tema y ampliaste los testimonios recabados con nuevas entrevistas a familiares y compañeros de los chicos desaparecidos. ¿Qué nos puedes decir sobre las distintas experiencias que viviste en la primera y la segunda inmersión?
Las experiencias fueron muy distintas. En los primeros días de octubre de 2014, no sabía lo que había ocurrido en las calles de Iguala esa noche. No había visto en la prensa una reconstrucción de los hechos, ni una entrevista detallada con un sobreviviente narrando los hechos. Realizaba mis entrevistas con los sobrevivientes sólo con una libreta y una pequeña grabadora de audio. Mi enfoque fue escucharlos para poder realizar una reconstrucción de los hechos que nos ayudara a entender qué había pasado durante los ataques y qué podría haber pasado con los estudiantes desaparecidos.
Cuatro años después, para la película Vivos, trabajé como parte de un equipo de investigación con Daniela Rea y Paula Mónaco, y con un equipo de filmación que variaba entre cinco y ocho personas en cada rodaje. Nuestro enfoque fue, sobre todo, escuchar a las familias de los cuarenta y tres estudiantes desaparecidos y realizar, tal vez, una especie de reconstrucción del vacío: un retrato del horror de la desaparición forzada y de la lucha de las familias por encontrar a sus hijos y encontrar la verdad sobre lo que pasó.
Durante ambas experiencias, sin embargo, sentí que estaba escuchando algo emitido desde un dolor inconmensurable, infinito; sentí que al escuchar ese dolor y analizar los hechos que las personas me contaban, me estaba asomando a una maquinaria de horror devastadora, escalofriante.
Y sentí y siento tantísimo respeto y cariño por las personas que compartían sus palabras, sus memorias, sus ideas, y su dolor conmigo y con quienes lean el libro.
A pesar de que la funesta fabricación de la «verdad histórica» enarbolada por Murillo Karam y la administración de Peña Nieto ha sido totalmente desmentida, sigue existiendo mucho camino por recorrer para poder conocer tanto lo que sucedió en aquellas horas como quiénes fueron los responsables. ¿Cuáles dirías que a la fecha permanecen como las omisiones más flagrantes en la investigación oficial?
Una disculpa de antemano, pero siempre repito algo que me parece fundamental: «la investigación» oficial nunca fue una investigación, sino un operativo jurídico-administrativo para desaparecer a los cuarenta y tres estudiantes. El objetivo de ese operativo era desaparecer la verdad y así seguir desapareciendo a los estudiantes. En la realización de ese operativo torturaron a la mayoría de los detenidos —tanto los involucrados con los ataques contra los estudiantes como los que no tuvieron nada que ver—, obligándolos a repetir una narrativa inventada. También torturaron a las familias de los cuarenta y tres, obligándolas a imaginar esa asquerosa y cruel narrativa inventada. Más que de omisiones —no investigar el papel del ejército y de la Policía Federal, por ejemplo— se trata de hechos concretos que en sí constituyen la desaparición forzada: inventar un escenario de crimen falso, el basurero de Cocula, y una narrativa falsa: la policía «entregó» a los estudiantes al «narco», cuando lo que los hechos ocurridos esa noche revelan, una vez más, es la manera en que el Estado y el narco se han fusionado.
La desaparición forzada de los estudiantes de la escuela normal Isidro Burgos se inscribe dentro de un linaje criminal de actos de represión, tortura, asesinato y desaparición por parte del Estado mexicano en contra de lo que consideran «focos subversivos», a la vez que forma parte de un proceso gradual de desmantelamiento de estos recintos de enseñanza que para muchísimos jóvenes en este país representan la única opción de desarrollo. Parte esencial de esta estrategia tiene que ver con la criminalización de los estudiantes. ¿Qué nos puedes decir sobre el papel de los medios masivos en esto?
«Panic», Ivan Trueta (Ig: @itrueta), grafito sobre madera recortada, 2011.
en México desde que Calderón declarara la «guerra contra el narcotrásiste en términos generales esta idea y cuál fue la línea de pensamiento
combate? ¿Por qué todo tipo de negocio ilegal vinculado con la violencia crece cuando el gobierno alimenta su «guerra»? No le encuentro sentido a la respuesta del gobierno: cuando encarcelamos o matamos a un líder, sus subordinados se pelean entre ellos. Esa respuesta podría explicar ciertas dinámicas de violencia, pero, para mí, no explica el constante Las drogas ilegales son un crecimiento de todos los mercados ilícitos: drogas, secuestros, robos, extorsiones, traEn muchos casos los llamados medios masivos hacen el trabajo de comunimercado. La guerra contra las drogas es también un ta, etcétera. Entonces, pensé: si el combate no es en contra del mercado, sino parte del mismo, cación del Estado: preparan el terreno mercado. Los dos mercados eso explicaría el crecimiento: cada vez que de la represión con notas difamatorias, mienten, publican boletines como si se han fusionado: uno deel Estado aumenta su combate, crecen los mercados que dice combatir. Las drogas fueran trabajos periodísticos propios, pende del otro y viceversa. ilegales son un mercado. La guerra contra conducen «entrevistas» con funciona- las drogas es también un mercado. Los dos rios dejándolos dar todo tipo de información falsa sin cuestio- mercados se han fusionado: uno depende del otro y viceversa. narlos, publican rumores de «fuentes oficiales» como si fueran La guerra contra las drogas asegura el constante crecimiento investigaciones propias, publican información de expedientes del mercado de las drogas. Y como parte de ese mercado es filtradas como si fueran verdades ya confirmadas. Hacen el una constante producción de arrestos y asesinatos. La imputrabajo del Estado. A veces con plena consciencia de ser cha- nidad y el terror se han establecido como elementos esenciayoteros. Y a veces creyendo que están haciendo periodismo les de los dos mercados y han permitido que ese constante con las «exclusivas» que les da el Estado. crecimiento económico se expanda en tantos, si no es que en La desaparición de los estudiantes también forma parte de otro fenó- El terror se ha vuelto una parte esencial de los dos mercameno espeluznante: la desaparición de decenas de miles de personas dos: el de las drogas y el de la supuesta guerra en su contra. fico». Sin embargo, en el ensayo que acompaña esta nueva edición del Otro de los aspectos que evidencia tu libro es la manera en que la neglilibro apuntas que el terror pareciera ser, más que una consecuencia de gencia estatal forma parte de un mecanismo bien aceitado que impide de dicha estrategia, una especie de materia prima necesaria para la explo- manera sistemática el acceso a la verdad, más que el reflejo de un aparatación del territorio y el comercio tanto legal como ilegal. ¿En qué con- to incompetente o torpe. ¿Podrías compartirnos un ejemplo de esto? casi todos, los sectores de la sociedad, y de la vida. que te acompañó para llegar a este postulado tan espeluznante? Hace años intenté explicar a un reportero de Nueva York por qué tantas diligencias básicas en la investigación del asesinato Mi reflexión es un esfuerzo por abordar estas preguntas: ¿por de Brad Will en Oaxaca estaban tan mal hechas. La aparente qué el negocio de las drogas ilegales crece cuando el Estado lo incompetencia oficial dejaba en duda datos básicos, y claves,
como el calibre de las balas extraídas del cuerpo de Brad, si su ropa mostraba señas de quemadura de un disparo a corta distancia o no, si ya había recibido los dos disparos antes de ser subido a un coche para llevarlo al hospital o no. Intentando explicar eso al reportero, saqué de la manga de mi propia Creo que esas movilizaciones también tuvieron un fuerte desesperación esta expresión: es una incompetencia exquisi- impacto en toda una generación de jóvenes que tomaron las ta. Es decir, parte de la producción de la impunidad es hacer calles por primera vez con ellas. Lo que la masacre de Tlatelolimposible (o simplemente mucho más difícil) la investigación co en 1968 fue para una generación, el levantamiento del ezln de verdad. Con una combinación de tácticas —las mentiras en 1994 fue para otra, la masiva campaña de brutalidad y toroficiales, la tortura para producir mentiras testimoniales, la tura sexual en Atenco y el levantamiento del appo en Oaxaca destrucción de evidencias físicas, la siembra de evidencias en 2006 fue para otra, la desaparición forzada de los cuarenta falsas, la no investigación de pistas cla- y tres estudiantes de Ayotzinapa, el asesives, las filtraciones falsas a la prensa que generan una serie de rumores— el Estado intenta destruir la posibilidad de Concibo la crisis en términos de vida y muerte, de nato de las seis personas esa noche y todo el horror que esa noche revelaba, fue para otra. Una generación aprendió que el Estarealizar una investigación de verdad. Si una de esas cosas se encontrara dentro de un expediente se podría hablar, tal despojo y destrucción y de resistencia y supervivencia. do mata y desaparece mientras los pueblos se organizan durante ese otoño de 2014. vez, de incompetencia o de negligencia. Concibo la crisis mundial La perseverancia y determinación de los padres Pero cuando un expediente consiste en un conjunto de todas esas atrocidades como la amenaza de desy las madres de los chicos ha sido una lección de dignidad y humanidad durante estos años lúgucontra la verdad, estamos hablando en- truir hasta la capacidad de bres y de terror. En este sentido, ¿cuál piensas que tonces de un mecanismo de impunidad, como dices, bien aceitado. sostener la vida humana debería de ser el compromiso y la actitud de la opinión pública y en general de la sociedad civil en este planeta tierra. en México en relación con la gravísima crisis de Además de la criminalización que se ha hecho Derechos Humanos que hay en México? de los estudiantes, uno de los clamores que más han reiterado los diantiles o masacres de poblaciones civiles son trágicamente cotidianas trabajos periodísticos, todo el trabajo que han realizado organizaciones como el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes, el Equipo Argentino de Antropología Forense, y Arquitectura Forense han sido posibles gracias a las luchas de las familias y las movilizaciones que las han acompañado. padres y las madres de los chicos es que el único «crimen» que ellos y Opino que la crisis es gravísima, es de todo y es mundial. No sus hijos cometieron es ser pobres. Desde tu punto de vista, ¿cuál es la concibo la crisis en términos de derechos humanos, porque no correlación que existe entre violencia y desigualdad, entre el concepto veo la institución capaz de asegurar tales derechos. Concibo la de «subdesarrollo» y la discriminación en este país? crisis en términos de vida y muerte, de despojo y destrucción y de resistencia y supervivencia. Concibo la crisis mundial En muy pocas palabras: lo que se llama desigualdad es una como la amenaza de destruir hasta la capacidad de sostener forma de violencia brutal y devastadora: crear la pobreza de la vida humana en este planeta tierra. muchos para generar la riqueza de pocos. Y llamar a un pueblo El capitalismo vive de producir tipos como Carlos Slim y subdesarrollado es en sí un acto discriminatorio, arrogante y Jeff Bezos y los millones de desamparados dependientes de violento, que es un primer paso en el camino hacia el despojo y/o adictos a los «servicios» que ellos administran. Y vive de y las muchas formas de colonialismo. crear y sostener mercados de terror, desde la industria transaEn el ensayo que acompaña la nueva edición de Una historia oral y las drogas de nuestros tiempos. Para seguirlo produciendo, de la infamia, reflexionas sobre el hecho de que los asesinatos y las tiene que seguir invadiendo, despojando, cortando, quemandesapariciones de los estudiantes de la normal sacudieron la conciencia do, minando, excavando, transportando, encarcelando, somede buena parte del país a pesar de que las noticias sobre matanzas estu- tiendo y matando. en México. A seis años de aquella noche atroz, ¿cuál piensas que es el Una historia oral de la infamia efecto que tuvieron las protestas sociales encabezadas por los padres? Los ataques contra los Creo que el principal efecto de las protestas sociales encabezadas por las familias de los cuarenta y tres estudiantes normalistas de Ayotzinapa John Gibler desaparecidos ha sido combatir y derrocar el operativo adSexto Piso Realidades ministrativo oficial del Estado de desaparecerlos. Todos los 2020 • 272 páginas tlántica de la esclavitud hasta las guerras contra el terrorismo